INTRODUCCIÓN El intercambio de sustancias nutritivas entre la placenta y el feto se realiza a través de un órgano de forma tubular llamado Cordón Umbilical. Éste va desde el ombligo del feto hasta la placenta de la madre realizando el intercambio sanguíneo entre ambos. El intercambio sanguíneo proporciona al feto todas las sustancias nutritivas, el oxígeno necesario para su respiración y también expulsa sus desechos a través de la sangre. Así pues el feto también recibe todas aquellas sustancias tóxicas que estén presentes en la sangre materna como alcohol etílico, nicotina… etc. ALCOHOL El consumo de etanol durante el embarazo puede ocasionar un cuadro de problemas físicos, evolutivos y funcionales conocido como síndrome de alcoholismo fetal (SAF) en el bebé. Este síndrome se caracteriza por bajo peso al nacer, menor perímetro craneal, retraso del crecimiento, retraso del desarrollo, disfunción orgánica, anomalías faciales, incluyendo ojos de tamaño inferior al normal, mejillas aplanadas y surco nasolabial poco desarrollado, epilepsia, problemas de coordinación y de motricidad fina, escasas habilidades sociales, incluyendo dificultad para establecer y mantener vínculos de amistad y para relacionarse en grupo, falta de imaginación o curiosidad, dificultades de aprendizaje, incluyendo poca memoria, incapacidad para entender conceptos como el tiempo y el dinero, deficiente comprensión lingüística y escasa capacidad de resolución de problemas, problemas de comportamiento, como hiperactividad, incapacidad para concentrarse, retraimiento social, testarudez, impulsividad y ansiedad. Además de malformaciones congénitas entre las que destacan, las que afectan a comunicaciones intracardíacas y genitourinarias, atrofia óptica, ambliopía u ojo vago, el nistagmus (movimiento involuntario de los ojos), defectos de refracción o desarrollo inadecuado de las trompas de Eustaquio. El alcohol etílico también puede ocasionar nacimientos con efectos del alcoholismo fetal (EAF). Los niños con EAF presentan los mismos síntomas, pero en menor grado y tienen menos probabilidades de presentar deficiencia mental. El alcohol, aunque es tóxico durante todo el embarazo, es especialmente peligroso durante el primer trimestre, coincidiendo con la fase embrionaria donde ejerce, según las hipótesis, un desequilibrio en la síntesis de prostanoides vasoactivos, provocando una vasoconstricción que desencadenaría una isquemia e hipoxia en los tejidos fetales con alta tasa de desarrollo. -1- TABACO Hace ya bastantes décadas que se conoce que el consumo de tabaco durante el periodo de gestación supone en la mujer una mayor probabilidad de aparición de abortos espontáneos y un incremento de la mortalidad perinatal también llamada “muerte súbita del lactante”, así mismo se ha constatado una menor ganancia de peso de la esperada en el recién nacido, es decir, que los hijos de madres fumadoras pesan menos al nacer que los de las no fumadoras. Además de un mayor número de complicaciones durante el embarazo y el parto. El paso de productos derivados del tabaco de la sangre materna a la fetal y el efecto directo del tabaco sobre la placenta se puede considerar como formas especiales de tabaquismo pasivo que provoca en el feto las secuelas antes nombradas así como un hipodesarrollo, deterioro de la función respiratoria que persistirá durante toda su vida, propensión a padecer asma. Este efecto, aunque mucho menor, se observa en las gestantes no fumadoras, expuestas pasivamente al humo del tabaco en el ambiente doméstico. También se ha observado que un consumo muy elevado de tabaco durante el embarazo aumenta el riesgo de que el hijo expuesto desarrolle diabetes tipo II. En España el problema es serio, pues casi la tercera parte de las mujeres fuman durante su embarazo. Así mismo se recomienda a las no fumadoras que no se expongan pasivamente al humo. COCAÍNA El consumo de cocaína durante el embarazo puede afectar a una mujer embarazada y al feto de muchas maneras. Durante los primeros meses, puede aumentar el riesgo de aborto espontáneo. Si se utiliza la droga más adelante en el embarazo, puede provocar el parto en forma prematura. También puede causar la muerte del bebé antes de nacer, o que sufra un accidente cerebrovascular que puede conducir a daños cerebrales irreversibles. Los niños tienden a nacer con un menor peso y el perímetro cefálico es desproporcionadamente menor, además de alteraciones cardiorrespiratorias, especialmente, fases anormales de apnea. Debido a las lesiones cerebrales isquémicas, los niños pueden padecer hiperexcitabilidad, crezcan con trastornos de la personalidad y de la organización de la respuesta a estímulos ambientales y retraso en el desarrollo cognitivo, en la adquisición y desarrollo del lenguaje y en la memoria visuo-espacial ya en la edad escolar. En la edad adulta tienen una mayor propensión a padecer trastornos neuropsiquiátricos como Parkinson, depresión, esquizofrenia… Un feto expuesto a la cocaína también puede sufrir los mismos efectos que se han descrito en los consumidores activos. -2- Cabe destacar que la cocaína además de por vía placentaria, también afecta en la lactancia, pues pasa a la leche materna, aunque sus efectos sobre el lactante no se conocen. Las malformaciones congénitas son más frecuentes en hijos de varones que habían consumido cocaína en horas previas a la fecundación, y se vio que la cocaína tiene alta afinidad con la membrana de los espermatozoides. ANFETAMINAS Y DROGAS DE DISEÑO Como en el caso de la cocaína, es difícil deslindar el efecto directamente achacable a estas sustancias sobre el curso del embarazo y el parto y las repercusiones sobre el feto debido al abuso de otras sustancias y a las condiciones de vida. Sin embargo, parece que hay una repercusión negativa sobre el crecimiento fetal y un incremento de las malformaciones cardíacas y del paladar hendido. Muchas mujeres que abusan de las metanfetaminas también consumen otras drogas como el alcohol o los cigarrillos. El riesgo de tener un bebé con problemas es muy alto cuando se usan las metanfetaminas con otras drogas, cigarrillos o el alcohol. Estas drogas por sí solas también pueden causar abortos espontáneos, nacimientos prematuros y algunas veces problemas de aprendizaje. De cualquier modo, el uso de más de una droga "recreativa" parece aumentar el riesgo de malformaciones congénitas. Al no tener una idea precisa de los efectos de estas drogas sobre el feto, lo mejor es considerarlas un riesgo innecesario y evitar consumirlas. Los datos sobre drogas de diseño, y, especialmente, el éxtasis, son escasos, pero apuntan hacia un mayor riesgo de malformaciones congénitas en niños nacidos de gestantes que ingirieron MDMA durante el embarazo. Las anfetaminas pueden producir fisura de paladar y retardo en el crecimiento intrauterino. El uso ilegal de dextroanfetamina y metanfetamina no deberá usarse durante el embarazo. Esto causa el aborto espontáneo, nacimientos prematuros y problemas durante el periodo neonatal, incluyendo nerviosismo y problemas para dormir y comer. Los bebés también pueden mostrar más señales anormales neurológicas como temblores y demasiado o muy poco tono muscular; estos síntomas pueden durar varios meses. Si una mujer usa metanfetaminas en la última parte de su embarazo, los bebés pueden tener síntomas de retracción después del nacimiento. Algunos de los síntomas son: -problemas para comer -dificultad para dormir o dormir demasiado -ser un bebé hipotónico o muy tenso y sufrir de nerviosismo. -3- Los síntomas de retraimiento generalmente desaparecen en pocas semanas, pero podrá ser necesario que el bebé ingrese en la unidad de cuidados especiales para recién nacidos y permanezca allí durante un tiempo. Algunos bebés sufren de problemas neurológicos como temblores y demasiado o muy poco tono muscular durante varios meses. En algunos casos, estos síntomas desaparecen por sí solos, pero estos bebés deberán participar en los programas escolares como estimulación infantil o terapia física. Durante la lactancia, la dextroanfetamina y la metanfetamina sí pasan a la leche materna y se encuentran en el organismo y en la orina del bebé. No sabemos si esto le causa problemas al bebé; pero la Academia Americana de Pediatría recomienda que no se usen anfetaminas durante la lactancia. CANNABIS El consumo de cannabis durante el embarazo, parece asociarse a una tasa más alta de prematuridad y de inmadurez fetal, o, al menos, de una menor edad gestacional en el momento del parto, así como de complicaciones obstétricas. Estas últimas podrían estar en relación con los efectos directos de un tipo de cannabis sobre el útero, THC, ya que se han identificado receptores específicos para este cannabionoide. Como grupo, las mujeres que consumen cannabis durante el embarazo de manera regular ganan menos peso y tienen un estado nutricional menos adecuado que las que no consumen, si bien es difícil deslindar el efecto de otros hábitos de vida incorrectos y de las consecuencias del consumo simultáneo de alcohol, tabaco y otras sustancias durante el embarazo. El THC atraviesa la placenta en grado variable, por lo que cabe esperar algún efecto directo sobre el desarrollo fetal. Según un estudio, los recién nacidos de mujeres que consumieron cannabis durante el embarazo en las dosis habituales presentan bajo peso al nacer y un incremento de la tasa de prematuridad (1999). Es posible que el efecto quede limitado a las gestantes con consumos regulares y elevados. El consumo materno de cannabis influye negativamente sobre el test de Apgar y en los 2 ó 3 días que siguen al nacimiento es frecuente que presenten hiporreactividad a estímulos, irritabilidad, trastornos del sueño y un ligero retraso en la habilidad y en la memoria verbal a los 4 años de edad. Los niños cuyas madres fumaron cannabis inmediatamente antes del embarazo, o durante éste, tienen un riesgo aumentado de desarrollar leucemias agudas. -4- El THC sí que pasa a la leche materna, pero no se sabe si acarrea consecuencias negativas. El uso de la marihuana puede reducir la fertilidad en los hombres y las mujeres, haciendo más difícil que la concepción ocurra. Después del nacimiento, algunos de los bebés expuestos regularmente a la marihuana durante el embarazo pueden presentar síntomas de abstinencia. Por ejemplo, el llanto excesivo, los temblores y dificultades al dormir. CAFEÍNA Hay estudios que han detectado que el consumo de cafeína se asocia con bajo peso al nacer, no ha sido posible deslindar esta circunstancia de consumo de otras sustancias y de hábitos desfavorables de vida. Tampoco hay evidencia de que el consumo de cafeína durante el embarazo incremente el riesgo de malformaciones congénitas. La seguridad del consumo de cafeína durante el embarazo es controversial. Los estudios sugieren que: El consumo de cantidades pequeñas de cafeína probablemente no afecta su fertilidad y parece ser seguro durante el embarazo. Se puede consumir hasta 12 onzas de café con cafeína por día durante el embarazo. La cantidad de cafeína en una taza de café varía. Depende del tipo de grano que se usa, la porción y cómo el café es preparado. La cafeína también se encuentra en el chocolate, té, cola, algunas bebidas carbonatadas, helados de café y algunos medicamentos sin receta. INHALABLES Con el término de inhalantes, inhalables o solventes, se denomina a una amplia gama de sustancias químicas caracterizadas por ser gases o líquidos volátiles, de alta liposolubilidad, por lo que se disuelven muy bien en la grasa, de tal forma que se absorben rápidamente a través de los pulmones llegando al Sistema Nervioso Central y ocasionando llamativos efectos psicoactivos. Con ciertas variaciones, todos los solventes orgánicos causan anomalías en los fetos. El tolueno es el solvente orgánico utilizado en las pinturas y los pegamentos industriales.La exposición a este durante la gestación produce la llamada embiopatía toluénica o disfunción cerebelosa neonatal caracterizada por: -5- -microcefalia(trastorno neurológico en el cual la circunferencia de la cabeza es más pequeña que el promedio para la edad y el sexo del niño) -micrognatia(mandíbula anormalmente pequeña) -labio leporino (defecto congénito consistente en una hendidura o separación en el labio superior) -retraso del desarrollo intelectual y físico -otras malformaciones leves(disminución de la hendidura parpebral, dedos “en espátula “ con uñas hipoplásicas) -Acidosis tubular renal En el caso de abuso de gasolina se ha descrito un síndrome que incluye: -Retraso mental -Hipotonía(disminución del tono muscular) -Grandes pómulos, frente estrecha El abuso del tolueno y algunos hidrocarburos alogenados durante el embarazo incrementa el riesgo de aborto espontáneo y prematuridad. OPIÁCEOS Los opioides son drogas sintéticas con efecto sedante y analgésico como fentanilo, heroína, hidrocodona, metadona, hidromorfona, meperidina y oxicodona. La heroína es de este grupo, la droga con efectos más graves sobre la madre y el feto. La adicción a opiáceos se asocia a un plus de marginidad superior a la de las demás conductas de abuso y, por lo tanto, a una mayor dificultad para poner en contacto a la gestante con los recusos sociales y sanitarios. Por otra parte la vía parenteral sigue siendo ampliamente utilizada para la autoadministración de heroína corriendo el riesgo de contraer VIH(virus que causa el SIDA) y el virus de la hepatitis C.Los niños recién nacidos de madres heroinómanas corren así el riesgo de contraer estas infecciones durante el embarazo o en el parto. Es imprescindible conocer el estado de la gestante respecto de ambos virus para tomar las medidas adecuadas. En el caso del VIH, se recomienda mantener un tratamiento antirretroviral adecuado durante el embarazo, mientras que el riesgo de trasmisión de la hepatitis C se previene administrando al niño, nada más nacer, una vacuna y una gammaglobulina específica contra el virus. El parto por cesárea reduce el riesgo de adquirir ambas infecciones en el momento del parto. El embarazo de una gestante heroinómana es de alto riesgo y puede verse interrumpido por un aborto espontáneo o por un parto pretérmino de un niño más o menos prematuro o con retraso del crecimiento. Además, la muerte fetal intraútero, la abruptio placentae o la preeclampsia(complicación médica del embarazo también llamada toxemia del embarazo o hipertensión inducida embarazo y asociada a elevados niveles de proteínas en la orina) son más frecuentes en estas mujeres. -6- Las mujeres embarazadas que consumen heroína no deben intentar dejar de consumir la droga de forma repentina ya que puede aumentar el riesgo de muerte del bebé por lo que se recomienda un tratamiento de mantenimiento con metadona.Los bebés expuestos a la metadona nacen con mayor peso que los bebés nacidos de mujeres que continúan consumiendo heroína, y además, aunque los primeros también pueden presentar algunos síntomas de dependencia del medicamento, pueden tratarse sin riesgo. Por otra parte, no está demostrado que la reducción de la dosis a 20mg/día inmediatamente antes del parto reduzca la intensidad del síndrome de abstinencia en el recién nacido. FÁRMACOS DURANTE EL EMBARAZO Cuando una mujer está embarazada, siempre debe consultar con su médico antes de tomar cualquier medicamento recetado o de venta sin receta. Los medicamentos afectan al feto de diferentes maneras, dependiendo de la etapa de desarrollo, el tipo y dosis del medicamento administrado, y la tolerancia de la futura madre a la droga. Los fármacos administrados durante la fase de embrión(antes del 20º día tras la concepción)matan al embrión o no lo afectan en absoluto. El período de la organogénesis(entre 3ª y 8ª semana) es el más crítico en cuanto a producción de malformaciones. Y los fármacos administrados tras la organogénesis, aunque es poco probable que produzcan malformaciones, pueden alterar el crecimiento de los órganos fetales normales. Fármacos que no deben tomarse jamás en el embarazo, salvo por indicación médica estricta, bajo riesgo de producir malformaciones graves u otros problemas de crecimiento y desarrollo fetales: -Antineoplásicos(terapia para el cáncer) -Talidomida -Hormonas -Fármacos tiroideos -Anticonvulsionantes -Vacunas con virus vivos -Antidiabéticos orales -Sedantes y analgésicos -Antibióticos Autoras: Paula Trillo, Ana García Herrero, Manuela Collazo -7-