Que reforma el artículo 134 del Código Federal de Procedimientos Penales, a cargo del diputado Jorge Antonio Kahwagi Macari, del Grupo Parlamentario de Nueva Alianza Diputado Jorge Kahwagi Macari, integrante del Grupo Parlamentario de Nueva Alianza a la LXI Legislatura de la Cámara de Diputados del honorable Congreso de la Unión; con fundamento en los artículos 71.II, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y 6.1.I, 77.1 y 78 del Reglamento de la Cámara de Diputados, presento ante esta soberanía iniciativa con proyecto de decreto por el que se reforma el artículo 134 del Código Federal de Procedimientos Penales, al tenor de la siguiente Exposición de Motivos La necesidad de adecuar las leyes conforme se presentan los cambios en las pautas y comportamientos sociales, constituye una característica inherente al desarrollo de las sociedades. Esta acción responde a una situación evidente, las leyes no pueden ser racionalmente aplicadas a la colectividad por ser obsoletas o porque la comunidad se ve necesitada de una ampliación o mejora de dicha norma. El Código Federal de Procedimientos Penales, se creó con la finalidad de establecer las reglas a seguir en un procedimiento de tal naturaleza por los inculpados, defensores, Ministerios Públicos y autoridades ante las cuales se tramita; normatividad que entre otras cosas establece los elementos que debe tomar en cuenta y observar la autoridad que conozca del procedimiento. Entre esas reglas encontramos las que motivan la presente iniciativa y que sirven de fundamento a un Juez de Distrito en Materia Penal para girar orden de aprehensión en contra de una persona por considerar se encuentran acreditados tanto el cuerpo del delito y la probable responsabilidad del inculpado en un delito del orden federal. No se omite mencionar que el marco legal vigente lleva a un uso excesivo de la prisión preventiva –un problema que se ha visto agravado a medida se ha ampliado el catálogo de delitos considerados “graves”. El número de prisioneros mexicanos que no han sido condenados por los delitos que se les imputan se ha duplicado en la última década. La sobrepoblación que presentan las cárceles, rebasan por mucho, la capacidad del Estado. El Informe especial de la comisión nacional de los derechos humanos sobre la situación de los derechos humanos en los centros de reclusión de la República Mexicana, dependientes de gobiernos locales y municipales, disponible en http://www.cndh.org.mx/lacndh/informes/espec/creclus/index.htm (consultado en diciembre del 2005), 2004, parte IV.b.4 y parte V.B., se destaca que el alto número de presuntos responsables que se encuentran en prisión preventiva es uno de los principales factores que contribuye a la sobrepoblación de las prisiones mexicanas. El hecho que México no separe a los prisioneros condenados de quienes aguardan su sentencia sólo agrava el problema. Por otro lado, en la obra El sistema penitenciario mexicano , de Elena Azaola et al, Project on Reforming the Administration of Justice in Mexico [Proyecto para la reforma de la 1 administración de Justicia en México], Centro de Estudios México-Estados Unidos, 2003, p. 6., se establece que la tasa promedio de ocupación de las prisiones mexicanas actualmente asciende al 135 por ciento de su capacidad real. Esa saturación provoca la siguiente problemática, no existe una provisión de servicios básicos dentro de las prisiones, el mantenimiento de la higiene y la seguridad, así como los programas de rehabilitación se encuentran en un estado de profundo deterioro. La corrupción es latente, y la arbitrariedad y abusos son la práctica de cada día dentro de las cárceles. La sobrepoblación lleva a condiciones cada vez peores para las personas que se encuentran detenidas en las prisiones mexicanas, se viven problemas como no recibir comida en buenas condiciones y suficiente, tampoco existe calidad en el agua para beber; La mayoría de los prisioneros dependen de sus familias para acceder a medicamentos, vestimenta, calzado y los recursos básicos necesarios para su higiene (por ejemplo, jabón, papel higiénico y pasta dentífrica El sistema de seguridad pública se encuentra íntimamente vinculado, con otros sistemas como el educativo, el de salud, el de protección civil, el de saneamiento ambiental o el de protección de las instalaciones o servicios estratégicos etc., ya que todos ellos en conjunto tienen el objetivo final de buscar la preservación del orden y la tranquilidad social. La represión penal no es otra cosa que el ejercicio del derecho punitivo como facultad del Estado para castigar a través de la imposición de las penas, sin embargo por su naturaleza y delicadeza se le aplican determinadas reglas específicas que respeten el principio de legalidad previsto en el artículo 14 de nuestra norma suprema. De acuerdo con Antonio Sánchez Galindo, Manual de conocimientos básicos para el personal de centros penitenciarios . México: Comisión Nacional de Derechos Humanos. 1990, p. 33. Apud Bringas, Alejandro H. y Quiñones, Luis F. Roldán. Op. Cit. , p. 26. El penitenciarismo moderno establece que la pena impuesta por un juez o un tribunal no debe ser un castigo, sino un medio para que el delincuente tenga la posibilidad de reestructurar su personalidad dañada o insuficiente para vivir en sociedad, y no sólo no vuelva a causar daño, sino además haga el bien y sea productivo. Debemos deducir que la prisión debe ser entendida como la ultima ratio , como un mal necesario que debe aplicarse a los criminales violentos, a los peligrosos, a los reincidentes y por último a los delincuentes habituales. La prisión preventiva no ha sido un vehículo capaz de garantizar la reincorporación de los detenidos a la sociedad, a la familia, a estar preparados para desempeñar un trabajo honesto cuando recupere su libertad. Es inadmisible seguir permitiendo que la prisión sea, a causa del hacinamiento, del ocio, de la inasistencia, del autogobierno, del desinterés en cuanto a la valoración de su personal, un núcleo de perfeccionamiento del crimen. Porque la experiencia acredita todos los días que todos o los mas que van a prisión vuelven peores y algunos enteramente incorregibles. Porque la percepción es que las cárceles son “las universidades del crimen” o “las escuelas del delito”. 2 El delito se combate con ideas, con decisión y con trabajo cotidiano. Las ideas se hacen fuerza sí tienen viabilidad y oportunidad, las ideas son para imponerse, y sólo se logra eso si llevan contenido. La decisión no es palabra o promesa, es diseño inteligente, implantación cierta y desarrollo oportuno. Consideramos que corresponde al legislador la tarea de enriquecer las leyes, mediante reformas y adiciones para procurar una mayor seguridad jurídica y por lo tanto alcanzar justicia. Seguridad y justicia son conceptos jurídicos que cualquier gobernado debe acceder, los justo es que si alguien comparece de manera voluntaria ante el juez, se le otorgue la oportunidad de ser oído y vencido en juicio, tal y como lo dispone el artículo 14 constitucional. Esta situación, coloca en desventaja y atenta contra las garantías contempladas en el artículo 16 constitucional de las personas que por alguna razón (imputable o no a ellas) no comparecieron a declarar ante la autoridad investigadora previamente a que se ejercitara acción penal en su contra, y no tuvieron la oportunidad de desvirtuar los datos que la autoridad investigadora tuvo por acreditados; o bien en su momento no contaba con las pruebas que desvirtuaran la imputación que obraba en su contra; y en razón de esto se gira orden de aprehensión en su contra. Resulta que esta persona no puede ofrecer las pruebas a la autoridad para que deje sin efectos la orden de aprehensión, sino que tiene que ponerse a su disposición y a veces esto implicando que se le prive de su libertad en lo que la autoridad valora las pruebas. En los casos similares a los que se mencionaron es decir, cuando obre en contra del inculpado una orden de aprehensión, pero este tenga pruebas contundentes de su inocencia, o en su caso sobrevengan causas que desacrediten fehacientemente los datos mediante los cuales se tuvieron por acreditados los elementos del cuerpo del delito o de su probable responsabilidad que en su momento utilizó la autoridad para girar la orden de aprehensión, es que debe proceder dejar sin efectos o cancelar dicha orden de aprehensión; y además cuando dichas pruebas acrediten su inocencia fehacientemente o se concluya que no existen elementos posteriores para girar una nueva orden de aprehensión, se debe sobreseer la causa penal. En junio de 2008, se publicó en el Diario Oficial de la Federación, la reforma judicial penal, por la que se transformaron diversos artículos de nuestra Carta Magna centrando su relevancia en la instrumentación del juicio oral. Así mismo se estableció la justicia alternativa con el ánimo de que las partes en un afán conciliatorio dirimieran sus controversias y con ello desahogar la prisión preventiva, con esa mística se promueve el presente proyecto de ley para que en el caso concreto el indiciado comparezca ante el juzgador de manera voluntaria, en cuyo caso el operador del derecho le otorgue un trato preferencial, y no ordene el arresto, mas al contrario permita al inculpado demostrar su inocencia cuando este cuente con los medios de prueba capaces de generar en el ánimo del juez un criterio de inocencia. Consideramos que de aprobarse la propuesta se lograrían ventajas notables en la forma administrar justicia en México, porque con el esquema actual primero se priva de la libertad luego se juzga y lo que se pretende es que primero se investigue luego se juzgue, es decir si 3 el juez dictara en el auto de plazo constitucional la de formal prisión, solo entonces se ordenaría la privación de la libertad del inculpado. Para no romper con el sistema jurídico actual, se propone que la dispensa del arresto solo operaría en determinados casos, es decir, cuando no se trate de delitos que por su impacto social sean considerados graves, tales como: Que no sean los delitos de delincuencia organizada, homicidio doloso, violación, secuestro, delitos cometidos con medios violentos como armas y explosivos, así como delitos graves que determine la ley en contra de la seguridad de la nación, el libre desarrollo de la personalidad y de la salud, o que esté sujeto a otro proceso. Pero fuera de ese escenario el juez deberá otorgar facilidades para que en el término constitucional, de manera sumarísima el inculpado pueda comprobar su irresponsabilidad penal, en esa hipótesis el juzgador deberá tomar medidas como: Que tenga domicilio fijo, con una antigüedad, cuando menos, de cinco años de residir en él; que ejerza un trabajo lícito; que no tenga antecedentes penales; que exhiba garantía bastante a juicio del juez de que no se sustraerá de la justicia y que no se trate de los delitos antes mencionados. Por las consideraciones expuestas y fundadas, en mi calidad de integrante del Grupo Parlamentario de Nueva Alianza someto a consideración de esta soberanía la siguiente Iniciativa con proyecto de Decreto por el que se reforma el artículo 134 del Código Federal de Procedimientos Penales Artículo Único. Se reforma el artículo 134 del Código Federal de Procedimientos Penales, para quedar como sigue: “Artículo 134. ... ... ... La orden de aprehensión a que se refiere el párrafo anterior quedará sin efectos cuando el inculpado comparezca voluntariamente ante la presencia judicial, y aporte elementos de prueba contundentes que tengan por efecto acreditar su inocencia. En esos casos el juzgador, atendiendo al caso concreto, le dará un trato preferencial, para lo cual prescindirá de la prisión preventiva sólo y exclusivamente durante el plazo a que se refieren el párrafo primero del artículo 19 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y el previsto en el párrafo segundo de la fracción IV del correlativo 161 de este ordenamiento, para lo cual tomará en consideración las circunstancias siguientes; a) Que tenga domicilio fijo, con una antigüedad, cuando menos, de cinco años de residir en él; b) Que ejerza un trabajo lícito; 4 c) Que no tenga antecedentes penales; d) Que exhiba garantía bastante a juicio del juez de que no se sustraerá de la justicia; y e) Que no se trate de los delitos de delincuencia organizada, homicidio doloso, violación, secuestro, delitos cometidos con medios violentos como armas y explosivos, así como delitos graves que determine la ley en contra de la seguridad de la nación, el libre desarrollo de la personalidad y de la salud, o que esté sujeto a otro proceso. ... Artículo Transitorio Único. El presente decreto entrará en vigor al siguiente día de su publicación en el Diario Oficial de la Federación. Dado en la Cámara de Diputados del honorable Congreso de la Unión, el 13 de septiembre de 2011. Diputado Jorge Kahwagi Macari (rúbrica) 5