ZENOBIA VUELVE «EN PRIMERA PERSONA» A MOGUER EN EL 60 ANIVERSARIO DE SU MUERTE By ayuntamiento moguer Tue Jan 19 17:33:12 CET 2016 La consejera de Cultura Rosa Aguilar y el alcalde de Moguer Gustavo Cuéllar, han inaugurado esta mañana en el hall del Felipe Godínez, una exposición de homenaje a Zenobia Camprubí que promueve el Centro de Estudios Andaluces y que nos acerca a la figura de la esposa del Nobel a través de más de 200 piezas. Con la colaboración de la Fundación Zenobia-Juan Ramón Jiménez la muestra, que lleva por título «Zenobia Camprubí en primera persona», ha sido coordinada por la prestigiosa investigadora Emilia Cortés, quien recibiera precisamente el último Perejil de Plata de la entidad juanramoniana por su destacado trabajo en favor de la obra de Juan Ramón y de su esposa. A través de más de 200 piezas entre documentos, objetos personales, fotografías y publicaciones procedentes de diversas fuentes como el archivo familiar Zenobia-Juan Ramón Jiménez, la Fundación Zenobia-Juan Ramón, el Archivo Histórico Nacional o el Centro de Documentación María Zambrano, el público moguereño tiene la oportunidad de descubrir la plenitud de la figura de Zenobia Camprubí Aymar, sin duda una de las mujeres más preparadas, solidarias, reivindicativas y valientes de su tiempo. El alcalde de Moguer y presidente de la Fundación del Nobel, Gustavo Cuéllar, la vicepresidenta de la Diputación, María Eugenia Limón, la directora del Centro de Estudios Andaluces, Mercedes de Pablos, la representante de la familia de Juan Ramón, Carmen Hernández-Pinzón, y la consejera de Cultura Rosa Aguilar, que cerró las intervenciones de apertura, coincidieron en destacar la extraordinaria valía de una mujer adelantada a su tiempo, cuya figura sigue siendo ejemplo de responsabilidad, generosidad y entrega, así como de lucha por la conquista de la plena igualdad de géneros. La exposición inaugurada esta mañana ha podido admirarse en el Museo de la Autonomía de Andalucía hasta el pasado 8 de enero, y llega ahora a Moguer en el año en el que se cumple el 60 aniversario de la muerte de la que fuera complemento indispensable e inspiración permanente para Andaluz Universal. Para su presentación en la ciudad del Nobel, se han incorporado a los materiales originales varios elementos que dan cuenta de la relación entre Zenobia y Moguer, lugar que visitó en varias ocasiones a lo largo de su vida según se refleja en sus escritos y en fotografías familiares. El 27 de junio de 1916 Zenobia escribía a su madre desde Moguer: "Ayer por la tarde estuvimos todos en el convento de Santa Clara a admirar todas las riquezas que vimos hace siete años… Juan Ramón ha convencido a la madre superiora que haga pagar una peseta de entrada a todo el que quiera ver el vestuario para que con el dinero se haga una vitrina en que colocarlo todo […]". De esta carta se deduce que Zenobia ya había estado en Moguer, donde llegó por primera vez en 1909, tras su regreso a España después de su primera etapa norteamericana. Ahora volvía acompañada por el poeta, recién llegado el matrimonio de Nueva York. De sus recuerdos, escribe, entre otros, sobre la finca de Fuentepiña, un lugar muy querido por los moguereños: "Es una casa blanca preciosa, con grandes arcos y rodeada de jazmines. Tiene un naranjal precioso, dos pinares lindos y mucha viña. La vista de Moguer, desde la parte de atrás de la casa, es de las vistas más bonitas de Andalucía". LA FIGURA DE ZENOBIA Traductora, escritora, editora, maestra, reportera, Zenobia Camprubí Aymar (Malgrat del Mar, Barcelona, 1887 San Juan, Puerto Rico, 1956) fue una mujer polifacética y vitalista. Viajera incansable, dominaba varias lenguas (español, inglés y francés) y tenía una amplia formación en literatura, historia y música. Independiente y emprendedora, Zenobia fue precursora de los negocios de exportación de artesanía popular y una de las primeras mujeres en España con carnet de conducir. Solidaria y comprometida, se involucró durante toda su vida en numerosas iniciativas culturales y sociales de diversa índole como la protección de la infancia y la conquista por los derechos y las libertades de la mujer. En un acto en la Residencia de Estudiantes de Madrid, Zenobia conoce a Juan Ramón Jiménez, con quien se casaría en Nueva York en marzo de 1916. Afincados ya en Madrid, comienza una etapa muy prolífica para ambos. Las actividades y viajes del matrimonio son variados e intensos, al igual que la producción de obra de Juan Ramón, a quien Zenobia asiste en todo momento en las labores de traducción y edición. Poesía británica y estadounidense de escritores contemporáneos, además de algunos clásicos como Shakespeare y Poe, suman nuevas traducciones, una labor que Zenobia iniciaría en 1915, animada por Juan Ramón, con la traducción de 'The Crescent Moon', 'La Luna nueva', obra del Premio Nobel de Literatura indio Rabindranath Tagore. "[…] Como no me casé hasta los veintisiete años, había tenido tiempo suficiente para averiguar que los frutos de mis veleidades literarias no garantizaban ninguna vocación seria. Al casarme con quien desde los catorce, había encontrado la rica vena de su tesoro individual, me di cuenta de que el verdadero motivo de mi vida había de ser dedicarme a facilitar lo que era ya un hecho y no volví a perder más tiempo en fomentar espejismos". El estallido de la Guerra Civil motiva la salida de la pareja del país. A partir de aquí, comienza un acelerado periplo por diferentes destinos en Norteamérica y Cuba, hasta recalar definitivamente en Puerto Rico. Son años de dolor, de pérdidas familiares, en los que, sin embargo, no cesa la actividad intelectual y de compromiso social de Zenobia. Víctima de un cáncer de útero, experimenta progresivamente un deterioro importante de su estado de salud, lo que no le impide continuar con sus clases en la universidad y otros proyectos como la culminación de la 'Tercera Antolojía Poética' o la propuesta de Juan Ramón para el Premio Nobel, en colaboración con la Universidad de Maryland. Consciente de su final, convoca al sobrino del poeta, a quien da instrucciones para procurarle bienestar físico y mental a Juan Ramón en su ausencia. Zenobia muere finalmente el 28 de octubre de 1956 en San Juan de Puerto Rico, sólo tres días después de la concesión del Nobel de Literatura a Juan Ramón. La trayectoria vital y el legado de Zenobia son un símbolo del esfuerzo titánico de la mujer española para mantener la dignidad personal por medio del trabajo y la autonomía intelectual. Sus escritos (relatos, diarios y epístolas) junto a las fotografías que recoge esta exposición, constituyen un testimonio excepcional de la historia en femenino de la primera mitad del siglo XX. Aguilar y Cuéllar presidieron el acto ( /export/sites/moguer/es/.galleries/fotos-noticias/fotos-web-2015/JUNIO/zenayuntamientoyjunta.jpg) Mucho público en la inauguración ( /export/sites/moguer/es/.galleries/fotos-noticias/fotos-web-2015/JUNIO/zenmuchopublico.jpg) Obsequio a la consejera de Cultura ( /export/sites/moguer/es/.galleries/fotos-noticias/fotos-web-2015/JUNIO/zenobsequio.jpg) Intervención de Carmen Hernández-Pinzón ( /export/sites/moguer/es/.galleries/fotos-noticias/fotos-web-2015/JUNIO/zencarmenpinzon.jpg) Rosa Aguilar destacó la figura de Zenobia ( /export/sites/moguer/es/.galleries/fotos-noticias/fotos-web-2015/JUNIO/zenconsejeraintervencion.jpg) Recorrido por la exposición ( /export/sites/moguer/es/.galleries/fotos-noticias/fotos-web-2015/JUNIO/zengraninteres.jpg) Muchas autoridades acudieron a Moguer ( /export/sites/moguer/es/.galleries/fotos-noticias/fotos-web-2015/JUNIO/zenautoridades.jpg) Gran interés por la muestra ( /export/sites/moguer/es/.galleries/fotos-noticias/fotos-web-2015/JUNIO/zenmaterialy-publico.jpg)