2013 Cátedra Nutrición y Deporte- Licenciatura en Nutrición Universidad de Buenos Aires Coordinación Actividades Deportivas Universitarias Universidad de Buenos Aires Descripción de parámetros alimentarios de futbolistas universitarios del seleccionado de la Universidad de Buenos Aires Feeding parameters description of the selected college football players at the University of Buenos Aires. Onzari. M. Lic. en nutrición. Docente de la Cátedra Nutrición y Deporte- Licenciatura en Nutrición- UBA. Vallejos 2687 (1419) 5411-45742118. monzari@arnet.com.ar 1 INDICE Página I. Introducción 3 II. Desarrollo 10 1. Metodología 10 2. Resultados 12 III. Discusión 14 IV. Conclusión 14 V. Resumen 15 VI. Bibliografía 16 2 Descripción de parámetros alimentarios de jugadores de futbol del seleccionado de la Universidad de Buenos Aires I. INTRODUCCIÓN El fútbol es el deporte grupal más popular del mundo. Un equipo está formado por 11 jugadores entre los cuales hay; un arquero, defensores, mediocampistas y delanteros. La distribución de cada uno de ellos estará supeditada a la táctica a emplear. El partido tiene una duración de 2 tiempos de 45 minutos, con un entretiempo de 15 minutos. En ciertas ocasiones se juegan 30 minutos más de tiempo suplementario. 1 Cada jugador, debe procurar la ventaja necesaria para que su equipo gane. Son muchas las variables que se deben optimizar para lograr un buen resultado, la alimentación adecuada es una de ellas y ofrece muchos beneficios:1 • optimiza los entrenamientos • mejora la recuperación entre y durante las sesiones de entrenamiento y competencias • ayuda a obtener y mantener una composición corporal adecuada • reduce el riesgo de lesiones y enfermedades • brinda confianza en la preparación • permite disfrutar de la comida y de las comidas sociales A pesar de estas ventajas, muchos jugadores no cumplen sus objetivos nutricionales. Los motivos pueden ser: 1 • escaso conocimiento de los alimentos y bebidas adecuadas • elecciones inadecuadas al hacer compras • conocimiento escaso o desactualizado del rol de la alimentación sobre la salud y el rendimiento deportivo • recursos económicos escasos • estilo de vida muy ocupado, que limita el tiempo para consumir los alimentos adecuados • falta de disponibilidad de opciones de alimentos y bebidas adecuadas en los lugares que frecuenta (club, trabajo, universidad, etc.) • viajes reiterados • uso indiscriminado de suplementos y/o alimentos deportivos No tiene sentido entrenar duramente si no se acompaña con una correcta selección de alimentos y bebidas, y con el consumo de ellos en el momento adecuado. Demandas energéticas 1 Los jugadores de fútbol de primera, pueden participar en uno o más partidos a la semana durante gran parte del año y entrenar la mayoría de los días de la semana, a 3 veces dos veces al día. La exigencia puede ser menor en deportistas de otro nivel deportivo. Las demandas de energía se deben cubrir para mantener la capacidad de rendimiento y prevenir el desarrollo de la fatiga excesiva. Los Hidratos de Carbono (HC) se almacenan en los músculos y en el hígado en forma de glucógeno. Esta es la forma más eficiente de almacenar combustible para la producción de energía. La fatiga hacia el final de un juego, puede estar relacionada con el agotamiento de glucógeno en las fibras musculares. Si el deportista tiene reservas bajas de HC, la capacidad de correr se reduce y la habilidad también puede verse afectada. 2 Los niveles de Ácidos Grasos Libres (AGL) en sangre, aumentan progresivamente durante un partido y compensan parcialmente la disminución progresiva del glucógeno muscular, pero esta fuente de energía es menos eficiente. Las exigencias físicas varían entre los jugadores durante un partido y en gran medida está relacionada con la condición física y el rol táctico que tiene cada deportista en el equipo. En la pretemporada, la carga de entrenamiento es muy alta y es el momento en que los jugadores se esfuerzan por alcanzar la plena condición física para la temporada, aunque en ella también se pueden jugar torneos amistosos. La demanda de energía en una sesión de entrenamiento puede exceder las de un partido. En las sesiones en que se hace hincapié en la recuperación y la regeneración o en la habilidad, el gasto energético es mucho menor. Las pretemporadas deberían tener una extensión de 6-8 semanas para poder lograr suficiente adaptación, aunque debido al calendario de competencias de cada país habitualmente duran menos tiempo. Suelen entrenar en doble y triple turno, incrementando el gasto energético en 1000 a 1500 kcal por encima del habitual. Los jugadores suelen no cubrir sus demandas energéticas y debido a esto, en la pretemporada pueden perder alrededor de 1 a 2 kg de peso. Esta pérdida puede favorecer a los futbolistas que han aumentado de peso en el período de descanso, pero perjudicar a los que deben incrementar la masa muscular. Las reservas de energía poseen funciones importantes relacionadas con el ejercicio y el rendimiento, ya que contribuyen al: • El tamaño y composición corporal (por ejemplo, el tejido adiposo y la masa muscular) • La función (por ejemplo, el aumento de la masa muscular) • Combustible para el movimiento (por ejemplo, los hidratos de carbono) La energía necesaria para los entrenamientos y los partidos debe ser sumada a la energía necesaria para las actividades diarias normales. La distancia total que corre un jugador durante un partido depende de muchos factores, incluyendo; el nivel de la competencia, la posición del jugador, el estilo de juego y la condición física de la persona. A nivel elite, los jugadores masculinos suelen correr unos 10-13 km. Las exigencias físicas están aumentadas por el hecho de que 4 más de 600 m son recorridos por sprints y unos 2,4 kilómetros se corren a alta intensidad. 1 Durante el partido, la frecuencia cardíaca es aproximadamente el 85% de la frecuencia cardiaca máxima y la demanda de oxígeno es cercana al 70% del consumo máximo de oxígeno (VO 2 máx.). Estos valores sugieren que el costo de la energía total de un partido, para un jugador que pese alrededor de 75 kg., sería alrededor de 1800 kcal. Para los jugadores en los niveles inferiores de competición es menor, porque el VO2max también es menor, por ende la energía total gastada será menor. Son muchas las variables que se deben analizar en el momento de determinar la cantidad de energía a asignar en un plan de alimentación, además de las propias del deporte. Las variables individuales tienen gran impacto sobre el valor calórico total, por ejemplo; los jugadores más pesados necesitan durante una carrera de determinada distancia más energía que los más livianos. Alimentación del futbolista Las recomendaciones nutricionales para los deportes de equipo, difieren considerablemente de los deportes donde los movimientos son mas ciclicos (ej. ciclismo, nadar). Además, estas recomendaciones no deberían generalizarse para todo el plantel, porque las necesidades de los arqueros son diferentes a las de los demás jugadores, ya que gastan sólo un 28% de la energía comparado con el gasto energético de un mediocampista. 3 La ingesta calórica de los jugadores de fútbol suelen ser subóptimas y con predominio de alimentos grasos. 4 En un estudio, se determinó el gasto energético diario de jugadores profesionales durante la temporada competitiva. Se utilizó el método de agua doblemente marcada para calcular el gasto energético y un registro alimentario de 7 días para estimar la ingesta energética. El promedio del gasto energético y de la ingesta fue 3535+/-408 kcal/d y 3113+/-581 Kcal/día respectivamente. El nivel de actividad física fue de 2.11+/-0.30. 5 Más allá de estas pequeñas diferencias de balance calórico que parecen ser poco significativas, los futbolistas consumen en general una baja proporción de alimentos fuente de HC. Su alimentación, además de ser insuficiente, es disbalanceada, con un gran énfasis en comidas grasas. 6- 7 Los deportistas necesitan y deben recibir pautas claras sobre los beneficios que produce sobre su rendimiento el aumento de la ingesta de alimentos con predominio de HC y bajos en grasa. Recomendación de nutrientes La indicación de HC no debe realizarse como un porcentual del total de energía, porque puede ser engañoso particularmente cuando la ingesta de energía es muy alta o muy baja. La forma adecuada de cubrir las necesidades de HC es contemplar la masa corporal (kg) del jugador y la carga de su programa de entrenamiento. Las 5 necesidades son específicas de cada individuo, y deben ser ajustadas teniendo en cuenta las necesidades de energía y el objetivo específico del entrenamiento. Es importante tener retroalimentación de los resultados en los entrenamientos y los partidos para evaluar si existe suficiente disponibilidad de combustible. Las metas para la ingesta de hidratos de carbono son: • Entrenamientos de duración e intensidad moderada: 5-7 g HC/ kg de peso corporal/día • Entrenamientos de duración e intensidad alta (Ej. pre temporada) o previo a un partido: 7-10 g HC/ kg de peso corporal/día Las recomendaciones de HC de 7-10 g/kg/d para los jugadores sometidos a un duro entrenamiento o para los partidos son casi imposibles de implementar, por varios motivos, pero principalmente porque suelen manifestar sentirse muy pesados al consumir esas cantidades. 8 Cuando el período para la recuperación entre sesiones de entrenamiento es inferior o cercano a 8 horas (como en la pretemporada para los jugadores de élite), la ingesta de HC, en forma de sólidos o líquidos, debe comenzar después de la primera sesión, tan pronto como sea posible para maximizar el tiempo de recuperación efectiva. Puede favorecer el cumplimiento de esta recomendación el consumo frecuente de snacks con HC (Ej. frutas, cereales, jugos). Durante los períodos de recuperación más largos entre sesiones (24 horas), el patrón y el horario de las comidas ricas en HC y colaciones no parecen ser críticos, y se pueden organizar de acuerdo a lo que es práctico y cómodo para cada jugador. No hay diferencia en la síntesis de glucógeno cuando el HC se consume en forma líquida o como alimentos sólidos. No existe suficiente bibliografía que evalué la relación entre la edad de los deportistas y el consumo de hidratos de carbono en la comida pre entrenamiento, se presume que a mayor edad y experiencia en el deporte la cantidad debería ser mayor. La inclusión de HC en las bebidas consumidas durante las interrupciones en el juego, en el entretiempo y después del partido, probablemente mejoren el rendimiento y faciliten la recuperación del glucógeno. 9 Durante el partido, el aporte de HC evita que la glucemia baje a valores que puedan alterar el pensamiento táctico y la cooperación entre los jugadores. Las proteínas desempeñan un papel clave en las adaptaciones al entrenamiento, formando nuevos tejidos o reparando los viejos o dañados, formando hormonas y enzimas que regulan el metabolismo. La proteína también proporciona una pequeña fuente de energía durante el ejercicio muscular. Cuando las reservas de HC son bajas y el deportista no los consume de manera exógena, esta proporción puede incrementar significativamente. Las necesidades de proteína de los deportistas tiene un rango de 1.2 a 1.6 g/ kg de peso corporal/día. Esto es 50 a 100% más que la ingesta recomendada para una persona sedentaria. Las pruebas que justifiquen este aumento de las necesidades de 6 proteínas, no son claras. Parte de la confusión se debe a la falta de unificación en las técnicas científicas utilizadas para medir las necesidades de proteínas. 10 La mayoría de los futbolistas y de la población en general, comen lo suficiente para satisfacer sus necesidades de proteínas. Por lo tanto, la mayoría de los jugadores no debe ser alentados al aumento de la ingesta de alimentos ricos en proteínas. Con respecto a las recomendaciones de vitaminas y minerales, la mayoría de los futbolistas son capaces de satisfacer las necesidades con el consumo de alimentos, pero a pesar de esto mucho de ellos no las cubren. Las personas en riesgo de ingestas subóptimas de estos micronutrientes son: 11 • jugadores que limitan su ingesta de energía, especialmente durante largos períodos de tiempo, para alcanzar las metas de pérdida de peso • jugadores cuyas dietas carecen de variedad y cubren sus necesidades energéticas con alimentos pobres en densidad de nutrientes La hidratación es otro factor que puede afectar potencialmente la capacidad de juego del futbolista. Una pérdida de líquido del 2% de peso corporal provoca un gran impacto negativo sobre el rendimiento. En un partido, un día de calor, las pérdidas por sudoración pueden llegar a 3 litros. Las necesidades de líquido de los jugadores son diferentes y las estrategas de hidratación sugeridas deben ser individualizadas. 12 Los jugadores durante el entrenamiento y los partidos deben prevenir la deshidratación tomando agua o una bebida deportiva. Las oportunidades para beber durante un partido incluyen el calentamiento y en el entretiempo. Durante el entrenamiento, el entrenador o el técnico deben organizar descansos para beber según, la duración, intensidad de la sesión y las condiciones climáticas. El entrenamiento es un momento adecuado para evaluar las tasas de sudoración y las necesidades de líquido con el objetivo de ajustar las estrategias de hidratación. Los controles de peso pre y post-entrenamiento sirven para determinar la tasa de pérdida de líquidos de cada jugador y concientizarlos para que beban la cantidad adecuada. 13 La recuperación post ejercicio es parte de la preparación para la siguiente sesión de entrenamiento. Tanto el agua como el sodio perdido en el sudor deben ser reemplazados. La sugerencia es beber aproximadamente 1.2 a 1.5 litros de líquido por cada kilo de peso perdido por el sudor. 14 Existe gran variabilidad en la pérdida de sodio a través del sudor, con un rango de 1 a 10 g por partido. 15 Una forma práctica de identificar quiénes pierden mucho sodio durante un entrenamiento es con el uso de indumentaria negra, ya que el sodio se evidenciará en manchas blancas sobre la tela. Estos “perdedores de sodio” sufren calambres musculares con frecuencia y se les recomienda incrementar el consumo de sal, antes, durante y después del partido. 16 El resultado de un partido suele definirse en los últimos minutos, la ingesta adecuada de líquido y energía durante el entretiempo mejora el rendimiento en la 7 segunda parte del partido, y también puede mantener y/o mejorar la habilidad de los jugadores. El uso de las bebidas deportivas comerciales con un contenido de HC de aproximadamente 4-8% (4-8 g HC/100 ml), permite cubrir las necesidades de HC y de agua durante los entrenamientos y las competencias. La ingesta de ~ 20-60 g de HC por hora, se asocia con beneficios sobre el rendimiento deportivo. 17 Todas las estrategias alimentarias con los jugadores, se deberían implementar durante los entrenamientos para que luego sean exitosas en la competencia. El objetivo principal de esta investigación fue describir los parámetros alimentarios de jugadores de futbol del seleccionado de la UBA. Como objetivos secundarios se propuso: • Estimar la ingesta diaria de energía y macronutrientes. • Determinar el porcentaje de adecuación de la ingesta calórica, hidratos de carbono y proteínas • Describir el perfil alimentario de la comida previa al entrenamiento y dela hidratación. • Determinar si existe correlación entre las horas entrenadas y el: 1. porcentaje de adecuación de la ingesta calórica. 2. porcentaje de adecuación de la ingesta de HC y proteínas. 3. gramos de HC en la última ingesta pre entrenamiento • Determinar si en los deportistas que comen antes de entrenar, existe correlación de la edad y los gramos de HC en la última ingesta pre entrenamiento. II DESARROLLO 1. Metodología Tipo de diseño Se realizó un estudio descriptivo, transversal, prospectivo. Población de estudio Varones jugadores de futbol de la Universidad de Buenos Aires. Los datos fueron recogidos durante el mes de Abril del 2013. Muestra Criterios de inclusión • Varones que practican futbol de forma competitiva en la primera división, representando a la UBA (entrenamiento mínimo de 2 veces por semana, 90 minutos cada vez, más un partido todos los fines de semana). Criterios de exclusión • Los deportistas que al momento de la recolección de datos ya se encontraban bajo tratamiento nutricional con el objetivo de mejorar su performance deportiva. 8 Se realizó un muestreo no probabilístico por conveniencia. A continuación se describen las variables utilizadas: Edad: se expresó en años cumplidos según lo expresado por el atleta. Ingesta calórica diaria: Por medio de un recordatorio de 4 días se obtuvo una muestra de los alimentos/bebidas ingeridos/as habitualmente. Posteriormente se procedió a realizar un promedio diario de las kcal y de los nutrientes. Para el análisis, se utilizó la tabla de composición química de la Universidad de Luján. 18 Por medio del procedimiento citado anteriormente se obtuvieron las calorías diarias consumidas, siendo el mismo expresado de dos formas: a) Kcal/día b) Kcal/Kg peso actual (PA) /día Ingesta de macronutrientes: para conocer la ingesta de cada macronutrientes (hidratos de carbono, proteínas y lípidos) se procedió de la misma forma que para el consumo calórico diario y se expresó de las siguientes 2 formas: a) Porcentaje de la ingesta calórica diaria lipidos) b) Gramos/Kg PA/día (Hidratos de carbono y proteínas) Adecuación de la ingesta calórica: para poder estimar el gasto energético diario y así poder conocer el porcentaje de adecuación de la ingesta calórica actual, se utilizó el método factorial propuesto por FAO-OMS. Una vez calculado el gasto energético diario se procedió a calcular el porcentaje de adecuación de la ingesta actual con la siguiente fórmula: % de adecuación: ingesta actual x 100 /gasto energético diario Se consideró que la ingesta era “deficiente” cuando aportó menos del 90% del gasto energético diario; “adecuado” cuando brindó entre 90-110% y “excesivo” cuando superó el 110%. Perfil alimentario: se conformó por las siguientes 3 variables: a) Ingesta de hidratos de carbono (HC) pre entrenamiento: se consideró que el consumo fue “ausente” cuando no ingirió alimentos ni bebidas con HC entre 1 a 4 hs previas al entrenamiento; “inadecuado” cuando consumió < de 1g HC/Kg en dicho lapso de tiempo; y “adecuado” cuando la ingesta fue igual o mayor a 1g HC/Kg entre 1 a 4 hs previas al entrenamiento. b) Hidratación adecuada previa al entrenamiento: se considero que el deportista se hidrataba adecuadamente cuando consumía la cantidad recomendada de 5-7 ml/kg PA o más, 4 hs antes del inicio del entrenamiento. Mas 3-5 ml/kg PA dos horas antes, si no hubiera orinado o la orina fue escasa. c) Hidratación adecuada durante los entrenamientos: se considero que el deportista se hidrataba adecuadamente cuando por hora de actividad consumía 500 cc o más de agua. Si bien debido a la alta intensidad de los entrenamientos 9 una bebida de rehidratación sería el tipo de bebida indicada, debido a las limitaciones practicas de esta sugerencia, se considero adecuado para este trabajo el consumo de agua o de bebida de rehidratación. La metodología del trabajo fue la siguiente; la cátedra de Nutrición y Deporte de la Licenciatura en nutrición de la UBA y el Área de Coordinación de Actividades Deportivas Universitarias UBA trabajan en conjunto para la mejora de la alimentación de los deportistas que concurren al campo de deporte de Ciudad Universitaria. Los alumnos evaluaron a los deportistas y le realizaron el plan de alimentación, bajo la tutoría de los docentes. Para este trabajo se realizó el contacto con el entrenador en el mes de Marzo. Cada alumno realizo una presentación via email, con el deportista que le fue asignado. Previamente tuvieron 4 clases de capacitación. Los alumnos debían solicitarle a su deportista que complete un registro alimentario de 4 días y que lo lleve el día de la evaluación en terreno. En este primer contacto se realizó la anamnesis nutricional y la evaluación antropométrica (a cargo de los docentes). Durante el resto de la cursada los alumnos tuvieron la información teórica y la supervisión práctica, necesaria para el análisis de los datos relevados y para la realización del plan de alimentación. El cierre de la actividad se hizo al finalizar la cursada cuatrimestral. En esa oportunidad los alumnos entregaron el plan de alimentación a cada deportista y una charla grupal que tuvo como objetivo la devolución de lo observado en la evaluación, pautas generales de alimentación saludable y la apertura de un canal de comunicación permanente entre la cátedra y los deportistas. Esta investigación solo documenta los datos que surgieron de la evaluación alimentaria. 2. Resultados La muestra quedó conformada por 28 jugadores de futbol, con una edad promedio de 25.6 años (DS 3.12 años). El peso promedio de los jugadores fue de 77,8 kg (DS 8,5 kg) y la talla de 1.77 m. (DS 0,05 m). El promedio diario de horas entrenadas/partidos fue de 1,26 hs (DS 0,66 hs). El promedio de ingesta calórica diaria (ICD) fue en valor absoluto 2853 Kcal (DS 612 Kcal. Y en valor relativo al peso fue de 37,13 Kcal/kg PA/día (DS 8,9 kcal/kg PA/día). (Tabla N°1) Tabla N°1: Ingesta calórica diaria Promedio DS Percentilo 25 Percentilo 75 Ingesta calórica diaria (n 28) Kcal/día Kcal/Kg PA/día 2853 37,13 612 8,9 30,19 43,58 10 Fuente: Primaria El porcentaje de adecuación de las Kcal. ingeridas con respecto al valor calórico teórico fue del 91,97 % (DS 21,8 % - percentilo 25: 74,0% - percentilo 75: 123,6%). En promedio, los hidratos de carbono fue de 46,79% (DS 7,8%) de la ingesta diaria de energía. El consumo promedio de este macronutriente, expresada en función del peso, fue de 4,3 g/Kg PA/día (DS 1,3 g/Kg PA/día). (Tabla N°2). Tabla N°2: Ingesta diaria de hidratos de carbono Promedio DS Percentilo 25 Percentilo 75 Hidratos de carbono (n: 28) % de la energía diaria g/Kg PA/día 46,79 4,3 7,8 1,3 3,17 5,18 Fuente: Primaria El porcentaje de adecuación de los gramos de hidratos de carbono/kg PA/día, con respecto la necesidad teórica de este nutriente fue del 75,6 % (DS 18,46 % percentilo 25: 58,8% - percentilo 90: 103,6 %). Las proteínas representaron en promedio el 18,9% de la ingesta diaria de energía (DS 4 %). El consumo promedio de este nutriente, expresada en función del peso, fue de 1,66 g/Kg PA/día (DS 0,38 g/Kg PA/día). El porcentaje de adecuación de los gramos de proteínas/Kg PA/día, con respecto a la recomendación teórica fue de 103 % (DS 18,8%). El porcentaje de las grasas con respecto a la ingesta de energía fue de 32,8 % (DS 6,23%). Haciendo referencia al perfil alimentario de la comida pre entrenamiento (CPE), más de la mitad (1,7 de cada 2) de los atletas realizó la CPE. La cantidad promedio de HC entre los deportistas que realizaban la CPE fue de 0,73 g/kg PA. (DS 0,49 g). Solo 7 de los 28 deportistas realizó la CPE de manera adecuada. Solo 8 de los 28 deportistas se hidrataba adecuadamente antes de comenzar los entrenamientos. Si bien el 67 % de los deportistas refirió tomar agua durante los entrenamientos, la cantidad promedio fue de 426 cc (DS 249,8cc). Teniendo en cuenta el volumen de bebida ingerida y el tipo solo 7 de los 28 lo hacía adecuadamente durante los entrenamientos. El salteo de comidas fue habitual en esta población. Los alimentos de menor frecuencia de consumo son las frutas y verduras, leche y/o yogur. No existió correlación significativa en ninguno de los objetivos planteados. Ni entre las horas entrenadas y el porcentaje de adecuación de la energía consumida diariamente con respecto a la necesidad teórica (Coeficiente de Spearman's: 0.0362 p: 0.8550), tampoco en el porcentaje de adecuación de los gramos de hidratos de carbono consumidos con respecto a la necesidad teórica (Coeficiente de Spearman´s 11 r: -0.0362 - p: 0.8550), ni en el porcentaje de adecuación de los gramos hidratos de carbono consumidos en la comida pre entrenamientos (Coeficiente de Spearman's r: 0.0923 p: 0.6404). Con respecto a la correlación de la edad y los gramos de HC en la comida pre entrenamiento, entre en los deportistas que comen antes de entrenar, si bien no es significativa (Coeficiente de Spearman´s r:0.3848 - p: 0.1272), marca una tendencia que a mayor edad mayor ingesta de HC previo a los entrenamientos. III. DISCUSION Los resultados de los parámetros alimentarios evaluados en esta población son similares a los publicados por la bibliografía científica nacional e internacional. 19 Este grupo de deportistas en particular requiere de mayor asesoramiento nutricional que los guie en las pautas básicas de alimentación saludable y en las especificas relacionada con el deporte. 6-20 IV. CONCLUSIONES En esta población de futbolistas se puede concluir que el porcentaje de adecuación de la energía, proteínas y grasas consumida en relación a la necesidad teórica son adecuados, pero inadecuado con respecto a los hidratos de carbono. La cantidad de deportistas que realizan la última comida pre entrenamiento de manera adecuada fue muy baja, ocurriendo lo mismo con el parámetro de hidratación previo y durante los entrenamientos. Más allá de los parámetros alimentarios específicos de nutrición deportiva, es preocupante que esta población donde la mayoría trabaja, estudia, entrena, no cumpla con las recomendaciones básicas de nutrición saludable, por ejemplo cumplir con las 4 comidas, comer frutas y verduras, tomar lácteos. Intervenciones de Educación Alimentaria Nutricional en la población de deportistas, fundamentalmente en las divisiones inferiores son recomendadas para poder mejorar su perfil alimentario, convirtiéndolos en multiplicadores de conceptos saludables. 12 V. RESUMEN Descripción de parámetros alimentarios de jugadores de futbol del seleccionado de la Universidad de Buenos Aires. Cátedra Nutrición y Deporte - Licenciatura en Nutrición- UBA El fútbol es el deporte grupal más popular del mundo. Son muchas las variables que se deben optimizar para lograr un buen resultado, la alimentación adecuada es una de ellas y ofrece muchos beneficios. A pesar de estas ventajas, muchos jugadores no cumplen sus objetivos nutricionales. El objetivo principal de esta investigación fue describir los parámetros alimentarios de jugadores de futbol del seleccionado de la UBA. Como objetivos secundarios se propuso: • Estimar la ingesta diaria de energía y macronutrientes. • Determinar el porcentaje de adecuación de la ingesta calórica, de hidratos de carbono(HC) y proteínas • Describir el perfil alimentario de la comida pre-entrenamiento (CPE) y de hidratación. El trabajo fue descriptivo, transversal, prospectivo. Para la evaluación de la ingesta se utilizó un registro alimentario de 4 días. Resultados La muestra quedó conformada por 28 jugadores de futbol, con una edad promedio de 25.6 años (DS 3.12 años). Los resultados que surgen del registro alimentario de 4 días son: (Tabla 1) Tabla 1. Ingesta de Kcal y macronutrientes de jugadores de futbol de la selección de futbol de la UBA (n:28) Valor relativo al peso Porcentaje de adecuación al valor teórico de referencia Kcal 37,13 Kcal/kg PA/día (DS 8,9 Kcal/kg PA/día). 91,97 % (DS 21,8 %). HC 4,3 g/Kg PA/día (DS 1,3 g/Kg PA/día) 75,6 % (DS 18,46 % ) Proteínas 1,66 g/Kg PA/día (DS 0,38 g/Kg PA/día). 103 % (DS 18,8%) El promedio de ingesta calórica diaria (ICD) fue de 2853 Kcal (DS 612 Kcal). El porcentaje aportado por los macronutrientes respecto a la ICD fue: hidratos de carbono 46,79% (DS 7,8%), proteínas 18,9% (DS 4 %) y grasas 32,8 % (DS 6,23%). Haciendo referencia al perfil alimentario de la comida pre entrenamiento (CPE), solo 7 de los 28 deportistas la realizó de manera adecuada. Teniendo en cuenta el volumen de bebida ingerida y el tipo, solo 7 de los 28 lo hacía adecuadamente durante los entrenamientos. Se recomienda brindar Educación Alimentaria Nutricional a los deportistas, fundamentalmente en las divisiones inferiores, para poder mejorar su perfil alimentario, convirtiéndolos en futuros multiplicadores de conceptos saludables. Fútbol- energía- hidratos de carbono-comida pre entrenamiento-hidratación 13 Feeding parameters description of the selected college football players at the University of Buenos Aires. Chair Nutrition and Sports - Nutrition Degree-UBA Football is the most popular team sport in the world. There are many variables that must be optimized to achieve a good result, proper food is one of them and offers many benefits. Despite these advantages, many players do not meet their nutrition goals. The main objective of this research was to describe the feeding parameters of selected football players of the UBA. The secondary objectives that were proposed: Estimate the daily intake of energy and macronutrients. Determine the percentage of caloric intake adequacy and HC. Describe the nutritional profile of the last pre-workout meal (PWM) and hydration The work was descriptive, cross-sectional, prospective study. For intake assessment used a food record of 4 days. Results The sample consisted of 28 football players with an average age of 25.6 years (SD ± 3.12 years). The main results arising from 4-day food record are: (Table 1) Table 1. Kcal and macronutrient intake of the selected college football players at the University of Buenos Aires (n: 28) Value relative to the weight Energy Adequacy ratio reference the theoretical value 91,97 % (DS 21,8 %). 37,13 Kcal/Kg /d (DS 8,9 Kcal/Kg/d). Carbohydrates 4,3 g/Kg/d (DS 1,3 g/Kg/d) 75,6 % (DS 18,46 % ) Proteins 1,66 g/Kg/día (DS 0,38 g/Kg/d). 103 % (DS 18,8%) The average daily calorie intake (DCI) was 2853 Kcal (SD ± 612 kcal). The percentage contributed by each macronutrient regarding the ICD was: carbohydrates 46.79% (SD ± 7.8%), protein 18.9% (SD ± 4%) and fat 32.8% (SD ± 6, 23%). Referring to the nutritional profile of the pre-workout meal, only 7 of the 28 athletes performed adequately FPW. Taking into account the type and volume of beverage ingested, only 7 of the 28 athletes are properly hydrated during training. We recommend Food and Nutrition Education to provide athletes, primarily in the lower divisions, in order to enhance your listing food, making healthy future concepts multipliers. Football - energy - carbohydrates - pre workout meal - hydration 14 VI. BIBLIOGRAFIA 1 FIFA. F- MARC. Nutrition for Football. A practical guide to eating and drinking for health and performance. 2010 2 Manore, M. Meyer, N. Thompson, J. Sport Nutrition for Health and Performance. 2 º Edición. Human Kinetics. 2009 3 FIFA F-MARC. Nutrition for Football. 2005. 4 Ruiz F, Irazusta A, Gil S, Irazusta J, Casis L, Gil J. Nutritional intake in soccer players of different ages. 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