entonces a quien puedo odiar? - Guidelines International Ministries

November 19
ENTONCES A QUIEN PUEDO ODIAR?
WHOM THEN CAN I HATE?
El rey de Israel respondió a Josafat: Aún hay aquí un hombre por el cual podemos
preguntar a Jehová; mas yo le aborrezco, porque nunca me profetiza cosa buena,
sino siempre mal. 2 Crónicas 18:7
El Dr. Sala escribe, “Hace algunos meses, me encontraba en un avión que partía de
un país soviético. Cruzando el pasillo, había una madre con un pequeño niño de
aproximadamente cuatro años.
Cuando el avión aterrizó y los pasajeros se encontraban esperando que el
equipaje, el pequeño niño se soltó de la mano de su madre y vino corriendo a abrazar
mi pierna. La madre por supuesto, corrió atrás del pequeño agarrándolo por el brazo
al tiempo que le decía, “Esto es América. No puedes confiar en las personas en este
país.”
Sí, entiendo que vivimos en un mundo donde no se puede confiar en los
extranjeros; sin embargo, me sorprende lo rápido que contagiamos a nuestros hijos
con nuestros prejuicios, aversiones y hasta con nuestros odios.
Quién le enseña a un niño a odiar? No lo hace Dios. Jesús, rompiendo con la
sabiduría convencional, cultura y siglos de practica dijo, “Pero a vosotros los que oís,
os digo: Amad a vuestros enemigos, haced bien a los que os aborrecen.” (Lucas 6:27)
Francamente, el legado del odio que es pasado de generación en generación es difícil
de romper, pero no imposible, lo podemos hacer una generación a la vez, un niño a la
vez.
Si usted es padre, pregúntese a sí mismo, “A quién y a qué odio? Y por qué
tengo estos sentimientos? Un importante asunto en el que debe pensar si usted es
una madre o padre Cristiano es: Qué es lo que odia Dios? Y, están mis gustos o
disgustos en concordancia con lo que Dios siente.
Dios odia el pecado pero ama al pecador. Nuestra falla es que frecuentemente
odiamos al pecador y secretamente guardamos este pecado, que para Dios es
repugnante e incorrecto.
Una vez que ha inventariado sus propias debilidades, pregúntese, “He
enseñado a odiar a mis hijos?”
Que Dios nos perdone a todos por nuestros prejuicios que son alimentados por
nuestra naturaleza pecaminosa y que avivan el fuego del odio de generación en
generación.”
Basado en: Salmos 45.
The preceding material was written and produced by Dr. Harold J. Sala. All rights reserved. Reproduction for sale or
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