Don Fernando Amengual Del Campo (44 años, casado, 4 hi

ENTREVISTA
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ENTREVISTA
AL ALCALDE
DE SAN BERNARDO
Don Fernando Amengual Del Campo (44 años, casado, 4 hijos) llegó como regidor en 1967 a la Municipalidad de San
Bernardo. En mayo de 1971 fue electo Alcalde de esa Municipalidad y posteriormente ratificado en su cargo por el Gobierno.
P.- ¿Cuál es su posición respecto al lugar que
ocupa actualmente la Municipalidad en la nueva estructura político-administrativa?
R.- Actualmente el Municipio no tiene carácter
electivo, es parte del aparato administrativo del Estado
y, por lo tanto, debe ceñirse a las disposiciones de gobierno, siendo -- al mismo tiempo- un nexo entre el gobierno
y la comunidad.
El Municipio tiene ahora un papel fundamental-
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mente planificador; debe formular planes y programas de
acuerdo a las políticas nacionales y regionales. Debe
compatibilizar los requerimientos del Estado con los requerimientos de la comunidad. Muchas veces las autoridades piensan que el problema A o B es lo primordial, en
circunstancias que una comunidad está viviendo un problema C. ¿Cómo compatibilizar las dos ideas? Pues, ese
es el papel que le corresponde al Municipio: la Municipalidad debe ser el elemento integrador, el gran coordinador de la comunidad.
P.¿Cuáles son las posibilidades reales de un
Municipio en materia de planificación?
R.- En este instante el Municipio chileno vive un
proceso de transición, de readecuación al nuevo sistema
administrativo del país: estamos esperando las instrucciones para reestructurar los Municipios de acuerdo a la
nueva ley. Yo digo siempre que, en este momento tenemos un motor de Mustang, pero contamos con una carrocería del año 30.
En la reestructuración se crea la Oficina de Planificación y Coordinación. Esta Oficina debe organizar un
banco de datos. En general, en las comunas nadie sabe
exactamente qué es lo que tiene, con qué se cuenta ..,
y al no saberlo, no pueden proyectarse planes al futuro.
De momentn no contamos con los datos para juzgar las
soluciones propuestas. Después de conseguir ese banco de
datos podremos analizar todos los problemas y formular
un plan general de desarrollo social, económico y cultural
donde se insertarán los 'diferentes programas y planes de
acción para que toda comunidad los haga suyos y participe en ellos.
P.- ¿Qué canales de expresión tendrá la comunidad? ¿Cómo podrá participar en los planes de desarrollo
que deben beneficiarla?
R.- Su pregunta consta de dos partes: Los canales de expresión de la comunidad, entre otros po'demos
señalar a la Unión Comunal de Juntas de Vecinos; Centros de Madres, Secretarías de la Mujer y de la Juventud:
Centros de Padres y Apoderados, Instituciones de Servicios (Rotarv, Leones, Cruz Roja, Bomberos, Damas de Rojo, Instituciones Mutuales, etc.), Consejo Local de Deportes y Recreación, etc. ; creo que la lista sería larga, Dero lo que interesa es que cualquier organización o institución que exista dentro de la comuna y que sus finalidades estén orientadas al bien común y al servicio de los
demás sean reales canales de expresión y, por lo tanto,
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tienen derecho a participar con el Municipio en el desarrollo integral de su comuna. Deseo agregar dos canales
de expresión vitales que se encuentran en organización
como son la Secretaría de los Gremios y la Secretaría dé
la Cultura. Los sindicatos y gremios son fuerzas poderosas en la ayuda al desarrollo comunal y el aspecto cultural es vital, y creo que una comunidad que no se sustenta
en una base cultural, no tiene derecho a proyectarse hacia el futuro. Ahora bien, ¿cómo pueden estos canales de
expresión participar en los planes de desarrollo? Yo diría,
que fundamentalmente a través del Consejo de Desarrollo Comunal, que es el organismo que viene a reemplazar
a los antiguos regidores y que lo componen representantes
de las Juntas de Vecinos; de los Centros de Madres y organizaciones comunitarias, técnicas y culturales; representantes de las actividades económicas predominantes
en la comuna y por representantes de los jefes municipales y jefes de servicios público.
Este organismo cuenta a su vez con la asesoría
técnica de la Oficina de Planificación y coordinación de
la Municipalidad.
En definitiva lo importante es que cada ser humano comprendo que no es un ser aislado, sino que es sujeto
del desarrollo, para lo cual primero debe cumplir con sus
deberes personales y segundo debe incorporarse a las organizaciones comunitarias de su sector y a las instituciones de servicio de acuerdo a sus personales inquietudes
espirituales.
Sin integración y participación que lleve implícito
un real compromiso, un "darse a los demás", pienso que
cualquier esfuerzo que se haga caerá en el vacío.
P.- Entrando más directamente a nuestro tema:
meses se instaló un taller de práctica de
algunos
hace
alumnos de Trabajo Social en esta Municipalidad, ¿cuáles son sus expectativas respecto al aporte de estos alumnos y cómo concibe el aporte del Trabajador Social?...
R.- Antes de responder, quiero agradecer a la
Escuela de Trabajo Social de la Universidad Católica por
el aporte que sus alumnos traen a nuestra Municipalidad
y por el hecho de haber creado este taller, al cual intentaremos darle un carácter permanente: deseamos que esta Municipalidad en sí sea un taller de trabajo para los
alumnos de esa Escuela. Nuestra comuna no cuenta con
facultades universitarias. El taller, por lo mismo, viene a
ser como tener una prolongación de la Universidad en
nuestro territorio; es disponer de un centro cultural. Todas las Municipalidades deberían aprovechar este recurso
humano.
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Ojalá este taller no se transforme en una práctica
rutinaria y sin sentido, que los alumnos cumplen para
abultar su curriculum, sino que siga siendo un aporte positivo y real para la comunidad; que se transforme en un
proceso acumulativo de beneficios mutuos.
Actualmente, los grupos de alumnos trabajan en
los problemas de cooperativismo -especialmente habitocional-, en alcoholismo -que
debemos reconocer es
bastante grave en la comuna- y en mortalidad infantil
-también de índice elevado. Esperamos con la ayuda de
ellos detectar las causas culturales, económicas y sociales que nos permitan enfocar mutuamente soluciones de
fondo.
P.-
¿Y con respecto al rol del Asistente Social?
R.- Pienso que el papel del Asistente Social es
fundamental en nuestros Municipios.
Antiguamente la Asistente Social cumplía en las
Municipalidades el rol de solucionadora de problemas del
personal municipal. Actualmente, sin embargo, ese tipo
de Asistente debería reemplazarse por una profesional que
trabaje con la comunidad entera; que programe, que planifique, que no se vaya por las ramas, sino que se aboque
a problemas esenciales que afectan a todo el grupo humano que integra el Municipio y la comunidad.
Además, debería cumplir con el rol de orientadora
de la comunidad. Es curioso: esperamos las respuestas del
Viking para saber si hay vida en Marte y, mientras tanto,
aquí en la Tierra, en pequeñas comunidades, no podemos
comunicarnos entre nosotros mismos o no tenemos antecedentes para desenvolvernos como seres humanos.
A cada rato vemos que personas modestas deben
perder miserablemente su tiempo deambulando de oficina en oficina, haciendo preguntas, recibiendo respuestas
de mal modo, y todo ello por falta de información. Una
función importante del asistente social y de la comunidad
es entregar información para que la gente sepa qué canales usar para lograr sus objetivos, para conocer cuáles
son sus derechos y cómo exigirlos.
P.- En una pregunto anterior hablamos de los
Centros de Padres. ¿Qué hace esta Municipalidad por los
padres de familia, ya que nadie nace sabiendo cómo ser
padre o madre?
R.- A través del Ministerio de Educación se han
entregado una serie de instrucciones para crear las llamadas Escuelas de Padres en todos los establecimientos
educacionales. Uno de los objetivos es el de abordar conjuntamente los problemas materiales y concretos de las
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escuelas; que estos problemas sean resueltos en base al
compromiso de los padres y apoderados con la escuela, y
más que con la escuela, con sus propios hijos. Por otra
parte, queremos llegar a formar padres realmente comprometidos con la función educadora; padres que integren la educación hogareña con la escolar. Finalmente,
se pretende crear conciencia de una comunidad educativa que propendo al desarrollo integral de esos niños para
que lleguen a ser hombres útiles, hombres integrados a su
comunidad y con clara conciencia de sus deberes o
futuro.
P.- ¿Cree Ud. que en este campo se pueden aprovechar los recursos del trabajador social?
R.- El trabajador social es un profesional capacitado para desempeñarse en cualquier campo dentro de
una comuna y me parece fundamental su acción en el
campo educativo: él puede mover a la gente hacia la integración y participación, por una parte, y estructurar
programas de planificación de los problemas sociales, por
otra.
P.- A través de esta breve entrevista, se ha mostrado Ud. como un optimista del desarrollo. ¿En qué términos podría definir ese optimismo, o bien, sobre qué base
lo sustento?
R.- Yo, principalmente, soy una persona que cree
en el humanismo. Soy cristiano, católico y soy optimista
porque creo en el ser humano, en su capacidad e inteligencia, pienso que el ser humano está dotado de todas
las posibilidades para buscar y encontrar el camino de la
felicidad. La felicidad es un término difícil de precisar;
nadie sabe dónde está. Yo pienso que está en Dios, pues
soy católico, pero es aquí en este mundo donde debo trabajar para lograr esa felicidad posterior. He aprendido
mucho de la gente y siempre digo que no hay nadie tan
pobre que no pueda dar nada. Siempre se puede dar una
palabra, un afecto, un apretón de manos. Eso puede hacerlo tanto el pobre como el rico. He comprobado en mi
vida que el que sufre más es el que siempre da más.
(Entrevista realizada por Wanda Lado)