MAYOR FIABILIDAD Es el método más avanzado de intolerancia alimentaria a nivel mundial. El número de alimentos ensayados se ha incrementado de 100 a más de 200. Las determinaciones se realizan por duplicado. Con los datos del análisis su médico le aconsejará el procedimiento más adecuado. SOLICITE INFORMACIÓN: 902 400 442 atencion.cliente@labco.eu www.labco.es LabcoDiag @LABCO_es +LabcoEs TEST DE INTOLERANCIA ALIMENTARIA a más de 200 alimentos TEST DE INTOLERANCIA ALIMENTARIA La intolerancia o hipersensibilidad alimentaria se debe a la formación de anticuerpos frente a proteínas de determinados alimentos, pero no del tipo IgE (que desencadenaría un proceso alérgico), sino del tipo IgG. En consecuencia, se trata de una reacción inmune retardada. A través de este proceso inmunológico, y en personas con factores de predisposición (estado de salud del tracto gastrointestinal y del sistema inmune, etc.), determinados alimentos pueden desencadenar manifestaciones clínicas insidiosas y difíciles de relacionar con los alimentos, precisamente por ser patologías moderadas y crónicas. En estas personas, la eliminación de la dieta de aquellos alimentos con hipersensibilidad (niveles de IgG elevados) proporciona una notable mejoría en un alto porcentaje de pacientes (aproximadamente el 75%). Las condiciones clínicas que más frecuentemente se han relacionado con intolerancia alimentaria son: Trastornos gastrointestinales Dolores abdominales, estreñimiento, diarrea, hinchazón abdominal, síndrome del colon irritable, etc. Es la patología que más induce a pensar en una intolerancia alimentaria. Procesos dermatológicos Acné, eczema, psoriasis, sarpullidos, urticaria, picor. Molestias neurológicas Dolor de cabeza, migraña, mareo, vértigo. Problemas respiratorios Tos, bronquitis, asma, rinitis, dificultad respiratoria. Con una sencilla extracción de sangre podrá conocer qué alimentos pueden ser potencialmente perjudiciales para su salud. Alteraciones psicológicas Ansiedad, letargia, depresión, fatiga, hiperactividad (principalmente en niños). Trastornos músculo-esqueléticos Dolor, rigidez, artritis, fibromialgia. Otros Retención de líquidos y obesidad, etc. Así pues, el test de intolerancia alimentaria A200 es una opción importante a tener en cuenta en aquellas personas con cualquiera de las manifestaciones clínicas anteriores, sin diagnóstico etiológico y/o sin mejoría con los tratamientos médicos habituales.