descargar libro

Anuncio
EFECTO DEL USO DE ACEITES MINERALES DE VERANO SOBRE LA FAUNA DE
ARTRÓPODOS DE MANZANOS (Malus domestica Bork.) Y SUS IMPLICANCIAS
AGRONÓMICAS SOBRE EL CULTIVO, LA MADUREZ Y CONSERVACIÓN DE LOS
FRUTOS
FERNÁNDEZ, D.E1.; CALVO, G.1; CICHÓN, L.1; GARRIDO, S.1
RESUMEN
El uso de aceites minerales de verano para el control de plagas en frutales de pepita se
encuentra poco difundido por algunos problemas de fitotoxicidad ocurridos en el pasado. En la
actualidad, aceites de mejor calidad permiten su incorporación en los programas de control de
plagas, en reemplazo de materiales de mayor toxicidad. Durante tres años se evaluó el efecto
de los aceites sobre diferentes plagas de manzanos, su incidencia sobre la maduración y
conservación de los frutos y la productividad de los árboles frutales. Los ensayos se condujeron
tanto en laboratorio como a campo. En los últimos, se compararon tratamientos con tres y seis
aplicaciones por temporada. Como resultado de este trabajo se observó que los aceites de
®
®
verano YPF-Curafrutal y ELF son seguros para su uso a campo durante el período estival en
manzanos, no observándose, aún luego de seis aplicaciones, problemas de fitotoxicidad.
Además, se comprobó su efectividad como depresor de las poblaciones de ácaros fitófagos y
Edwarsiana crataegi (Homoptera:Cicadellidae), plagas que comprometen la sanidad de los
montes frutales de manzanos de la región y para las que existe una gran limitación de
herramientas para su control. Por otra parte, las aplicaciones reiteradas de aceites minerales
de verano durante tres años consecutivos, no afectaron la productividad de los
1. INTA EEA Alto Valle. Ruta Nac. 22, Km. 1190. General Roca (RN).
dfernandez@correo.inta.gov.ar
árboles frutales, ni tampoco provocaron cambios importantes en los parámetros de madurez y
conservación de la fruta tratada, mientras que se observa, una disminución de la escaldadura
superficial y un aumento en el porcentaje de frutos de calibres mayores.
Palabras clave: Aceites minerales, fitotoxicidad, manzanas, plagas, postcosecha.
SUMMARY
EFFECT OF SUMMER MINERAL OIL ON APPLE (Malus domestica Bork.) ARTHROPOD
FAUNA AND ITS AGRONOMIC IMPLICANCES TO THE CROP, FRUIT RIPENING AND
STORAGE
Summer oil use in order to control pests in pome fruit orchards is not yet extensible accepted
due to the risk of phytotoxicity that this kind of material presented in the past. New and better
quality oils are now available to be included in pest management programs to replace broad
spectrum insecticides. Summer oil effect on apple pests in the lab and in the field, and on tree
bearing, ripening and postharvest storage, was tested over a three year period. Field tests
compared programs with three and six oil sprays per season. As a result of the tests we found
that the oils YPF-Curafrutal® and ELF® were very safe to be used during the summer season on
apples, presenting, even after six applications, no risk of phytotoxicity. Moreover, oil
effectiveness on phytophagous mites and Edwarsiana crataegi (Homóptera:Cicadellidae) was
found to be acceptable for both pests, considering the very few materials available to control
them. On the other hand, oil application over a three year period did not affect tree productivity,
ripening and storage quality of the fruit. A reduction of fruit scald and a greater percentage of
fruits with bigger size were observed with oil applications.
Key words: mineral oils, phytotoxicity, apples, pest, postharvest.
INTRODUCCIÓN
El uso de aceites minerales para el control de plagas del manzano tiene más de 100
años de historia (Willett y Westigard, 1996). Sin embargo, su aplicación durante el período
estival en frutales de hoja caduca, no ha sido ampliamente adoptada por el riesgo de
fitotoxicidad. Esta limitación restringió el uso de éstos materiales solamente al período de “prefloración” y como coadyuvante en combinación con otros plaguicidas para el control de algunas
plagas secundarias.
Problemas con el registro de numerosos agroquímicos, sumado al aumento de
desarrollo de resistencia a plaguicidas y un marcado incentivo hacia una producción
sustentable de frutas, ha renovado el interés en el uso de aceites minerales durante el período
estival, especialmente en producciones del tipo “diferenciada”. Los nuevos aceites
desarrollados a partir de los trabajos de Chapman, Lienk, Avens y White (1962) permiten hoy
su uso con bajo riesgo de fitotoxicidad y mayor espectro de acción sobre las plagas.
Los aceites minerales actúan principalmente por contacto, ejerciendo su acción
plaguicida por sofocación (Smith y Pearce, 1948). Además de esta acción mecánica, existen
evidencias de un efecto de repelencia sobre numerosos insectos (Zwick y Westigard, 1978;
Beers, Brunner, Willet y Warner 1993; Fernández, Beers, Brunner, Doerr y Dunley, 2001;
2005a). De muy baja toxicidad para el medio ambiente, seres humanos y otros organismos de
sangre caliente, los aceites minerales son considerados no tóxicos para abejas y otros
organismos benéficos y en la mayoría de los países están exentos de una tolerancia de
residuos en frutos. Diversos trabajos de investigación en otras regiones del mundo han
demostrado la eficacia de los aceites minerales en el control de un gran número de plagas sin
embargo, no existen antecedentes suficientes sobre los efectos a largo plazo sobre las plagas,
la calidad de conservación de los frutos tratados o la fisiología del árbol frutal.
En el alto valle de Río Negro y Neuquén su uso también se encuentra poco difundido
como práctica de control de insectos. La poca información disponible sobre los efectos a largo
plazo, sumado a una escasez de materiales seguros y confiables y la ocurrencia en el pasado
de algunos problemas de fitotoxicidad, han frenado la apropiación por parte del productor
frutícola de este tipo de tecnología. El incremento en los últimos años del uso de la técnica de
la confusión sexual para el control de lepidópteros plaga, en la región del Alto Valle (Cichón y
Fernández, 2000), ha permitido la implementación de tácticas alternativas de manejo de
insectos (insecticidas reguladores de crecimiento, virus de la granulosis, insecticidas botánicos,
entre otros). Los aceites minerales, por su bajo impacto ambiental, podrían incorporarse sin
inconvenientes a este nuevo esquema de producción. Este hecho permitiría reducir el uso de
agroquímicos de síntesis, propiciando el desarrollo de un sistema de producción más
sustentable.
Objetivo
Evaluar la eficacia del uso de aceites minerales de verano en el control de diferentes
artrópodos plaga del manzano y sus efectos secundarios sobre la fauna benéfica, determinar
posibles efectos fitotóxicos y consecuencias adversas sobre la calidad, madurez y
conservación de los frutos luego de la cosecha.
MATERIALES Y MÉTODOS
Materiales utilizados: en todos los ensayos tanto de campo como de laboratorio se utilizó el
aceite mineral de uso estival “Aceite Curafrutal YPF®” (YPF-Repsol S.A.) con las siguientes
características: viscosidad a 40ºC: 8-12 cSt (ASTM D-445); punto de escurrimiento máximo: 15ºC (ASTM D-97); punto de inflamación mínimo: 160ºC (ASTM D-92); características de la
emulsión: cumple IRAM 12130; residuo no sulfonable mínimo: 92% (ASTM D-483); residuo no
sulfonable típico: 95%; emulsionabilidad: 70-80 minutos (M.I. 58, al 5% V-Agua CIPAC "D");
rango de destilación a 10 mm Hg: 55°C; moléculas parafínicas: 80-85% y densidad a 15°C:
0,8515 gr.ml-1 (ASTM D-4052) y el aceite mineral ELF® Sunspray (Sunoco Inc.) con las
siguientes características: viscosidad a 40°C: 11.6 cSt (a 37,8°C 68 SSU); punto de
escurrimiento: -25°C (aprox.); punto de inflamación mínimo: 172°C; características de la
emulsión: rotura rápida; residuo no sulfonable mínimo: 92%; residuo no sulfonable típico: 96 %;
rango de destilación: 44°C; moléculas parafínicas: 95% (aprox.); densidad a 15ºC: 0,8655 gr.ml1
(datos proporcionados por los fabricantes).
A) Ensayos de laboratorio:
A.1. Ensayo de eficacia: se recolectaron a campo hojas de manzano cv. Red Delicious
provenientes de frutales ubicados en la localidad de Allen, Río Negro, con adultos de arañuela
roja europea (Panonychus ulmi Koch), que no habían recibido ninguna aplicación de acaricidas.
Las hojas fueron trasladadas al laboratorio en bolsas de papel y puestas a temperatura
ambiente. Por otra parte, se prepararon camas de algodón según la metodología IRAC (1995)
en las que se acondicionaron hojas de manzano cv. Red Delicious sin ácaros, provenientes de
un monte frutal del INTA Alto Valle, que no habían recibido en esa temporada aplicaciones de
agroquímicos. Se transfirieron desde las hojas con ácaros diez adultos o diez ninfas, según el
ensayo, a las hojas de las camas de algodón. Para cada tratamiento se realizaron cinco
repeticiones con sus correspondientes testigos. En otro grupo de camas de algodón se
colocaron hembras adultas de P. ulmi, siguiendo la misma metodología, para obtener huevos
para el ensayo con este estado de desarrollo. Todos los individuos fueron transferidos a las
camas de algodón mediante un pincel de pelo de marta (Nº002). Los productos aplicados
fueron: aceite YPF-Curafrutal® (YPF-C); aceite ELF® Sunoco (ELF). Todos los tratamientos se
aplicaron mediante torre de Potter (Burkard Scientific, UK), utilizando un volumen de solución
(aceite + agua) de tres mililitros. Las soluciones de aceite fueron preparadas al 1% vol:vol y
mantenidas en suspensión con un mezclador magnético. Los testigos recibieron el mismo
volumen de agua desmineralizada.
Una vez finalizadas las aplicaciones, las camas de algodón fueron colocadas en
®
armario de cría marca Rumed (D3000, Hannover–GR) con fotoperíodo de 8:16 y temperatura
de 22ºC ±1ºC. Los adultos y ninfas de P. ulmi fueron evaluados luego de 24, 48 y 72 horas del
tratamiento, registrando el número de ácaros muertos y vivos. Se consideró muertos a aquellos
individuos que al ser estimulados con un pincel no podían recorrer el largo de su cuerpo. En el
ensayo de adultos se evaluó, además, el número de huevos puestos durante el período de
observación. En el ensayo de aplicación de aceites sobre huevos de P. ulmi, se evaluó el
promedio de ninfas eclosionadas a los 5 y 10 días posteriores a la aplicación.
A.2. Ensayo de persistencia: se colectaron hojas de manzano cv. Red Delicious de la EEA Alto
Valle del INTA. Las hojas provenían de los tratamientos descriptos en la Tabla 1. Las hojas
fueron tomadas luego de la aplicación de los tratamientos. Se colectaron 10 hojas al azar, las
que fueron trasladadas al laboratorio en bolsas de papel. Se seleccionaron 5 hojas de cada
tratamiento (Tabla 2) y se colocaron en camas de algodón (IRAC, 1995). Sobre cada hoja se
colocaron 10 hembras adultas de P. ulmi que habían sido colectadas en un monte frutal sin
aplicaciones de acaricidas situado en la localidad de Allen. Se evaluó la cantidad de huevos
depositados por las hembras sobre residuos de aceites recién aplicados (día 0) y a los dos y
cinco días luego de la aplicación. Las características y dosis de aplicación se detallan en el
punto “B”.
B) Ensayo de campo:
Este ensayo se realizó en un monte frutal de manzanos cv. Red Delicious de 20 años,
plantado a 4 m x 4 m de la EEA Alto Valle del INTA, situada en Cmte. Guerrico, Río Negro. El
sistema de conducción es en espaldera con una altura de aproximadamente 4 a 4.5 m. En las
últimas cinco temporadas fue tratado con los insecticidas aceptados en los programas de
producción integrada (PFI, PAI-Inspectorate, 2005). El monte frutal fue dividido en 16 parcelas
de 30 plantas cada una, con una fila central de donde se tomaron todas las muestras y dos filas
laterales de bordura. Cada tratamiento fue asignado al azar a cuatro parcelas (repeticiones).
Los tratamientos aplicados fueron: 1-Testigo (sin aceite) recibió las aplicaciones autorizadas
por el programa PFI; 2-YPF-C (3) que recibió, además de las aplicaciones de PFI, tres
aplicaciones del aceite de verano; 3-YPF-C (6) que recibió las aplicaciones PFI y seis
aplicaciones de aceite de verano YPF-C; 4-ELF (6) que recibió seis aplicaciones de aceite ELF
mas las aplicaciones del programa PFI (Tabla 1). La primera serie de tres aplicaciones de
aceite se realizó a partir de mediados de Octubre con intervalos de 15 días y la segunda serie
comenzó a partir de mediados de Diciembre, con la misma frecuencia. La dosis de aceite
utilizadas en todos los tratamientos fue del 1% vol:vol. Todas las aplicaciones se realizaron a
primera hora de la mañana (07 a 09 hs) con una pulverizadora Pazima® modelo MP11 de 2.000
litros y un tractor Same® 250. El equipo pulverizador fue calibrado siguiendo la metodología del
TRV (Magdalena, Cichón, Fernández, Di Princio 1996) para erogar 2.800 litros por hectárea,
trabajando a una presión de 300 PSI.
B. 1. Eficacia de los aceites sobre arañuelas fitófagas: cada temporada desde Octubre hasta la
fecha de autorización de cosecha del la cv. Red Delicious se tomaron, quincenalmente,
muestras de hojas de cada tratamiento para evaluar la evolución de las arañuelas fitófagas (P.
ulmi, Tetranychus urticae y Bryobia rubrioculus) y predadores (Neoseiulus californicus y
Zetzelia mali). En cada fecha se tomaron 25 hojas al azar por repetición (100 hojas.trat.-1). Las
hojas se colocaron en recipientes plásticos y fueron llevadas a laboratorio para determinar la
cantidad de ácaros fitófagos y predadores según la metodología propuesta por Boller (1984).
B. 2. Evaluación de la efectividad sobre chicharrita amarilla: cada temporada se tomaron,
quincenalmente, muestras de hojas de cada tratamiento para observar la evolución de la
chicharrita amarilla (Edwardsiana crataegui). En cada fecha se tomaron 10 hojas al azar por
planta y por repetición, de cinco plantas (200 hojas.trat.-1). Se observó in situ el envés de las
hojas y se contaron las ninfas de chicharrita presentes en las mismas.
B. 3. Evaluación del daño por carpocapsa al momento de cosecha: la población de carpocapsa
(Cydia pomonella) fue monitoreada mediante el uso de una trampa delta (Trécé Inc., SalinasCA), cebada con una cápsula con 1 mg de codlemone. Las capturas en la trampa se
registraron semanalmente. Al momento de la cosecha, se colectaron al azar, 600 frutos por
tratamiento, (150 frutos/repetición), los que fueron clasificados en dañados o sanos según se
constatara o no, el ataque de la plaga.
B. 4. Evaluación de fitotoxicidad en hojas y frutos: conjuntamente con los muestreos de ácaros,
de chicharritas y de daños de carpocapsa al momento de cosecha, se realizaron en las mismas
hojas y frutos, observaciones para determinar posibles efectos de fitotoxicidad de los aceites.
Se observaron 25 hojas al azar por repetición (100 hojas.trat.-1) en cada fecha de muestreo de
ácaros (B1), 10 hojas al azar por planta y por repetición, de cinco plantas (200 hojas.trat.-1) en
-1
cada muestra de chicharrita amarilla (B2) y 150 frutos por repetición (600 frutos.trat. ) en
cosecha (B3). Tanto las hojas como los frutos fueron observados minuciosamente y
comparados con el tratamiento testigo, con el fin de detectar manchas producidas por las
aplicaciones de aceite.
B. 5. Evaluación de producción: al momento de la cosecha en la temporada 2004/05 (tercer
año del proyecto) se colectaron todos los frutos de una planta por repetición, los cuales fueron
clasificados de acuerdo a su tamaño y peso. Se seleccionaron plantas representativas del
tratamiento y del sector medio del mismo.
C) Ensayo de postcosecha:
Se utilizaron manzanas provenientes del monte frutal donde se realizaron las aplicaciones
de aceite y de los mismos tratamientos mencionados anteriormente (Punto B). Se cosecharon 80
frutos al azar por repetición (320 frutos por tratamiento) en el momento de autorización de
cosecha. Se tomaron frutos de las cuatro plantas centrales de cada repetición. La mitad de la
fruta de cada repetición (40 frutos) se utilizó para la determinación de la madurez en el
momento de la cosecha y el resto de los frutos se destinó a la conservación en frío
convencional. Las determinaciones de madurez en cosecha y después de la conservación en frío,
se realizaron luego de 1 y 7 días de vida en estante, tiempo durante el cual la fruta permaneció
a una temperatura de 20ºC. En cada muestra se determinó la firmeza de la pulpa (kg.(cm2)-1),
el índice refractométrico o contenido de sólidos solubles (porcentaje de materia seca), la acidez
titulable (gr.l-1 de ácido málico), degradación de almidón (%) y color de cobertura (%). Además,
se determinó la cantidad de fruta afectada por decaimiento interno, senescencia,
podredumbres y otras fisiopatías. La fruta destinada a la conservación se embaló en cajas de
cartón con dos bandejas y se conservó en frío convencional a 0ºC en las cámaras del INTA Alto
Valle por un período de cuatro meses en la temporada 2002/2003 y de tres meses durante las
temporadas 2003/2004 y 2004/2005.
Análisis de datos.
En los ensayos de laboratorio la efectividad de los aceites se calculó mediante la fórmula de
Abbott (1925). El cálculo de los índices “insecto día” y “ácaro día” se realizó siguiendo la
metodología de Ruppel (1983). Para el análisis de la distribución de los tamaños según los
diversos tratamientos se presenta el resultado de la prueba Chi Cuadrado. La variable peso
neto se analizó con un ANOVA a una vía de clasificación.
Los parámetros de madurez, el porcentaje de cobertura con color, y el peso neto se analizaron
mediante el análisis de varianza de un diseño completamente aleatorizado, utilizando el
procedimento GLM del programa Statistical Analysis System (SAS, 1997). Se verificó el
cumplimiento de los supuestos del ANOVA utilizando el procedimiento Univariate y el test de
Levene y cuando fue necesario, se realizó una transformación de los datos aplicando arcoseno.
La incidencia de escaldadura superficial se analizó mediante la prueba Chi Cuadrado.
RESULTADOS
A) Ensayos de laboratorio
A.1. Ensayo de eficacia: Todos los tratamientos de aceite (YPF-C y ELF) se diferenciaron
estadísticamente del testigo a partir de las 24 horas de aplicados. A las 72 horas los aceites
presentaron valores de eficacia sobre adultos de P. ulmi superiores al 80% (calculado según
Abbott, 1925). En el testigo la mortandad fue inferior al 30% (Tabla 2). Las hembras
remanentes (vivas) en el testigo pusieron un promedio de 68 huevos cada una, mientras que
en los tratamientos con aceite el promedio fue inferior a 15 huevos por hembra viva (Tabla 2).
La eficacia de los aceites evaluados sobre ninfas de arañuela roja europea luego de 72
horas de realizada la aplicación, estuvo por encima del 70%. El testigo presentó una mortandad
de ninfas menor al 25%. Todos los tratamientos de aceite se diferenciaron estadísticamente del
testigo (Tabla 3).
En el ensayo de aplicación de aceites sobre huevos de P. ulmi, luego de 10 días el
testigo presentó un valor promedio de ninfas eclosionadas de 54,6. Los tratamientos con aceite
alcanzaron valores promedio inferiores a 20 ninfas eclosionadas y se diferenciaron
estadísticamente del testigo (Tabla 4).
A. 2. Ensayo de persistencia: la efectividad del aceite ELF aplicado a campo, como repelente
de la oviposición de hembras adultas, en el muestreo inicial (día 0) fue mayor al 80%, no
diferenciándose estadísticamente del aceite YPF-C. Todos los tratamientos se diferenciaron del
testigo. La efectividad dos días después de la aplicación se reduce notablemente en todos los
tratamientos, aproximándose al 60% en el aceite ELF y a menos de 20% en el aceite YPF-C. A
los cinco días de la aplicación, todos los tratamientos se igualaron con el testigo (Tabla 5).
B) Ensayo de campo
B. 1. Eficacia de los aceites sobre arañuelas fitófagas: se registraron valores muy bajos de
arañuelas fitófagas en todos los tratamientos en la temporada 2002/03. En la temporada
2003/04 se observó un marcado incremento del número de ácaros fitófagos en el testigo, que
se diferenció estadísticamente del resto de los tratamientos. Esta diferencia con el testigo fue
menor cuando se realizaron solamente tres aplicaciones de aceite. Esta misma tendencia se
registró en la temporada 2004/05, con una mayor presencia de ácaros en el testigo (Fig. 1).
Todos los tratamientos de aceite fueron muy efectivos al mantener bajas las poblaciones de
ácaros durante las tres temporadas, especialmente los que recibieron seis aplicaciones. Esta
tendencia se puede corroborar al calcular el índice de “acaro-día” acumulado para las tres
temporadas, diferenciándose el testigo de YPF-C (3) y estos dos tratamientos a su vez de YPFC (6) y ELF (6) (P>f=0,0001) (Fig. 3). En cuanto a los ácaros predadores, éstos normalmente
aumentaron en el tratamiento testigo hacia mediados de enero. En los tratamientos con aceites,
la presencia de ácaros predadores fue menor, coincidiendo con la menor presencia de
arañuelas fitófagas (Fig. 2).
B. 2. Evaluación de la efectividad sobre chicharrita amarilla: Todos los tratamientos se
diferenciaron estadísticamente del testigo en la temporada 2002/03 a partir de Enero. Hacia
fines de Enero, se produce una separación además entre los tratamientos con tres aplicaciones
de aceite y los tratamientos con seis aplicaciones. En el resto de las temporadas las
poblaciones fueron muy bajas (datos no presentados). Al calcular el índice de “insecto-día”
acumulado para las tres temporadas de evaluaciones, se observan diferencias estadísticas
entre los tratamientos de aceite y el testigo (P>f=0,0001) (Fig. 4).
B. 3. Evaluación del daño por carpocapsa al momento de cosecha: en el momento de cosecha
los daños de carpocapsa se incrementaron considerablemente en algunos tratamientos,
aunque sin guardar relación con el número de aplicaciones de aceite realizadas. El daño
promedio del monte frutal partió de 1,01% de fruta afectada, valor levemente superior al umbral
de daño económico aceptado del 1% y llegó al final del ensayo a 9,25% (Tabla 6).
B. 4. Evaluación de fitotoxicidad en hojas y frutos: no se observaron signos de fitotoxicidad
durante la temporada ni al momento de cosecha en ninguno de los tratamientos.
B. 5. Evaluación de producción: no se encontraron diferencias significativas en el peso neto de
la fruta cosechada por planta entre los distintos tratamientos (P>f=0,6461). El peso neto
promedio por planta estuvo entre 64 y 72 kg, presentando el testigo la mayor variabilidad
dentro del tratamiento (Fig. 5).
Las proporciones de los distintos tamaños de frutos cosechados, resultaron altamente
significativas al comparar los diferentes tratamientos (P>ChiSq=0,0001). Se puede observar
que desde el tamaño de frutos menor a 65 mm hasta el tamaño 70-75 mm (frutos chicos), hubo
una mayor proporción de frutos del tratamiento testigo, mientras que en los tamaños mayores a
80 mm, fue mayor el porcentaje de frutos pertenecientes a los tratamientos de aceites (Fig. 6).
C) Ensayo de Postcosecha
La aplicación de aceites minerales de verano no afectó de manera significativa la
madurez de la fruta en el momento de la cosecha, ni su evolución durante la vida en estante.
No se encontraron diferencias significativas entre los testigos y los tratamientos con aceite
YPF-C como con aceite ELF. Los valores de firmeza, de acidez titulable y de sólidos solubles
en el momento de la cosecha fueron similares. A su vez no se observaron diferencias en el
porcentaje de degradación de almidón (Tabla 7), que es el mejor indicador de la madurez al
momento de la cosecha en manzanas (Lau, 1985; Priest y Lougheed, 1988).
En general, tampoco se observó un efecto significativo de los aceites en la madurez de
la fruta luego de la conservación y durante su posterior vida en estante (datos no presentados).
Los frutos de todos los tratamientos perdieron firmeza durante los 3-4 meses de conservación,
con respecto a la firmeza que tenían en cosecha y a su vez, perdieron firmeza durante los siete
días de vida en estante a 20ºC, no registrándose diferencias entre los tratamientos.
En la figura 7 se observa que la aplicación de aceites no afectó la coloración de los
frutos. A pesar de que en algunos casos la fruta tratada con aceites tuvo un porcentaje de
cobertura de color rojo algo superior. Estas diferencias no resultaron estadísticamente
significativas (2002/2003: P>f=0,4503; 2003/2004: P>f=0,2306; 2004/2005: P>f=0,2058). La
misma tendencia pudo comprobarse cuando se analizó la coloración luego de la conservación
ya que esta fue similar en todos los tratamientos (datos no presentados).
Los frutos de todos los tratamientos se vieron afectados por escaldadura superficial,
luego de 3-4meses de conservación y siete días a 20ºC. En la temporada 2002/2003 la
incidencia fue menor a las otras y no se observaron diferencias entre tratamientos
(Pr>ChiSq=0,0710) (Fig. 8). En la temporada 2003/2004 el testigo fue el más afectado (52%) y
no se diferenció significativamente de la fruta tratada con aceites YPF-C (3), a pesar de que el
porcentaje en este tratamiento fue menor (36%). Sin embargo, cuando se realizaron seis
aplicaciones de aceites, el porcentaje de escaldadura fue significativamente inferior al del
testigo (P>ChiSq=0,0001), igual que en la temporada 2004/2005 (P>ChiSq=0,0001) (Fig. 8).
En la temporada 2003/2004 se observó un 2,5 % de frutos con síntomas de
senescencia en el tratamiento con aceites, tanto con tres como con seis aplicaciones. En el
testigo y el aceite ELF no se observaron frutos con síntomas de senescencia. Esto coincide con
lo observado la temporada 2002/2003, donde los síntomas de senescencia (<2%) se
manifestaron en la fruta tratada con aceite de verano YPF-C (3) e YPF (6) (datos no
presentados).
DISCUSIÓN
Los ensayos realizados en el laboratorio con los aceites minerales YPF-C y ELF,
indican una efectividad media a alta sobre los distintos estadios de arañuela roja europea. La
acción de los aceites sobre ninfas y adultos, con leves variaciones, se presenta como muy
efectiva para mantener las poblaciones de ácaros fitófagos por debajo de los umbrales de daño
económico aceptados en manzanos. El control tanto directo sobre los huevos, como así
también la reducción en la oviposición sobre substratos con aceite (posible repelencia)
proporciona un efecto de control adicional.
En las aplicaciones de campo es posible observar la reducción de las poblaciones de
ácaros generada por el uso reiterado de los aceites sobre grandes superficies. En este caso, el
testigo ocupa menos del 20% del total de la parcela y no fue suficiente para producir un foco de
dispersión de la plaga en el monte frutal. Al mismo tiempo, la presencia de ácaros predadores,
al utilizarse materiales selectivos para el control de otras plagas, actúan como controladores
biológicos efectivos de los ácaros fitófagos. Si bien en los tratamientos de aceites la presencia
de predadores fue menor, este hecho puede estar relacionado con una menor presencia de
presas (Fernández et al., 2005a).
Otro resultado importante corroborado en este ensayo es el control de las poblaciones
de chicharrita amarilla. Los momentos en que se realizaron las aplicaciones estarían indicando
un efecto de repelencia sobre los adultos en el período en que se producen las oviposiciones
de esta plaga (Fernández et al., 2001, 2005a). No obstante, no se debe descartar un efecto de
control sobre las ninfas recién emergidas. Al considerar el control de esta plaga, se puede
observar claramente el efecto de tres aplicaciones de aceites versus seis, presentado estos
últimos tratamientos los mejores resultados.
Las aplicaciones de aceites para el control de carpocapsa no produjeron resultados
relevantes y consistentes que indiquen un efecto depresivo sobre el daño final a cosecha.
Probablemente estos resultados estén relacionados con los momentos de aplicación,
coincidiendo mayormente con los resultados de Fernández et al. (2005a, b).
La productividad de los árboles frutales no resultó afectada por las aplicaciones de
aceites en cuanto al peso total cosechado, aunque esto se debió, probablemente, en gran
medida a la elevada variabilidad encontrada en el testigo. El tamaño de los frutos presentó un
marcado incremento hacia los calibres mayores en los tratamientos con seis aplicaciones de
aceite, lo cual se destaca como un efecto beneficioso. Este resultado seguramente está
relacionado con la menor presencia de plagas que afectan las hojas y especialmente la
capacidad fotosintética de éstas (Beers et al., 1995; Welter, Marini y Pfeiffer, 1996) en los
tratamientos mencionados.
Los aceites no modificaron la madurez en el momento de la cosecha, ni la evolución
durante la vida en estante de los frutos. Esto es muy importante ya que la calidad de consumo
y la aceptación por parte de los consumidores está determinada mayormente por la textura,
azúcares y acidez de las manzanas (Harker, Gunson y Jaeger, 2002). Las aplicaciones de
aceites no afectaron la coloración de los frutos. En el cv Red Delicious, así como en todas los
cultivares rojos se necesita una buena cobertura de color rojo para que los frutos puedan
comercializarse (McGalson, 1985). Por ello es de vital importancia que la aplicación de
cualquier producto en precosecha no afecte la madurez o la coloración de los frutos.
Cuando se realizaron seis aplicaciones de aceite se observó una reducción en la
incidencia de escaldadura superficial. Los datos obtenidos demuestran que cuando la
incidencia de escaldadura es elevada, se obtiene una disminución de la fisiopatía que
posiblemente esté relacionada en forma proporcional con la cantidad de aplicaciones (tres vs.
seis) o el momento en que se realizan las mismas (inicio de temporada vs. fin de temporada).
El control de escaldadura por medio de aceites ha sido mencionado anteriormente. Los
aceites usados como antioxidantes dieron buenos resultados en las variedades Fuji y Mutsu
(Kang y Lee, 1987). Recientemente se han probado diversos tipos de aceites vegetales en
manzanas Granny Smith. Estos tratamientos reducen el escaldado relacionándose su acción
mas con un efecto físico, que con la estructura química del aceite (Scout, Yuen y Kim, 1995).
De todas maneras, se debe tener en cuenta que, a pesar de que en este ensayo hubo una
reducción de la incidencia de escaldadura debido a la aplicación de aceites, los resultados
indican que estos no podrían usarse como única forma de control, sino que deberían aplicarse
como una práctica complementaria de otros métodos, para poder alcanzar una eficacia
comercialmente aceptable.
CONCLUSIONES
Los aceites minerales de verano se presentan como muy seguros para su uso a campo
durante el período estival, no observándose en ningún caso (luego de tres o seis aplicaciones)
problemas de fitotoxicidad tanto en frutos como en hojas. Por otra parte se observa un
promisorio efecto depresivo de las poblaciones de arañuelas fitófagas y chicharrita amarilla,
dos plagas que comprometen la sanidad de los montes frutales de manzanos de la región y
para las cuales existe una gran limitación en cuanto a las herramientas disponibles para su
control.
En general no se afectó de manera consistente la maduración y la calidad de
manzanas tratadas con los aceites. Las aplicaciones de aceites de verano no modificaron la
madurez de las manzanas Red Delicious en el momento de cosecha, ni luego de 3-4 meses de
conservación, así como tampoco se vio afectada la coloración de la fruta, ni la incidencia de
bitter pit. Sin embargo, cuando se realizaron seis aplicaciones de aceites, se redujo la
incidencia de escaldadura superficial, lo cual es muy promisorio teniendo en cuenta la
importancia de esta fisiopatía.
AGRADECIMIENTOS
A Roberto Gómez, Marcelo Muñoz, Demetrio Ibarra, Sebastián Muñoz, Eduardo Insúa,
Pedro Ottone, Ignacio Villarasa, Juliana Boscchi, Mara Crespi, Marcelo Álvarez y “Piche”
Figueroa por su colaboración con el proyecto y a Alejandro Giayetto por la lectura crítica y
corrección del manuscrito. Este estudio fue financiado por YPF-Repsol S.A. y Proyecto
Nacional del Programa (PAN) Frutales INTA.
BIBLIOGRAFÍA
ABBOTT, W. S. 1925. A method for computing the effectiveness of an insecticide. J. Econ.
Entomol. 18: 265-267.
BENÍTEZ, C.E., G. CALVO. 2002. Fisiopatías y pérdidas de calidad en manzanas y peras.
Ediciones INTA. INTA Alto Valle.
BEERS, E. H., J. F. BRUNNER, M. J. WILLET, AND G. M. WARNER. 1993. Orchard pest
management: A resource book for the Pacific Northwest. Good Fruit Grower. Yakima,
WA. 120 pp.
BEERS, E. H., E. ELSNER, S. DRAKE. 1995. White apple leafhopper (Homoptera:
Cicadellidae) effect on fruit size, quality and return bloom of apple. J. Econ. Entomol.
88: 973-978.
BOLLER E. 1984. Eine einfache Ausschwemm-Methode zur schnellen Erfassung von
Raubmilben, Thrips anderen Kleinarthropoden im Weinbau. Schweiz. Zeitschrift für
Obst- und Weinbau, 120: 16-17.
CHAPMAN, P. J., S. E. LIENK, A. W. AVENS, AND R. W. WHITE. 1962. Selection of a plant
spray oil combining full pesticidal efficiency with minimum plant injury hazards. J. Econ.
Entomol. 55: 737-744.
CICHÓN, L., Y D. FERNANDEZ. 2000. Fruit production and mating disruption of codling moth in
Argentina. XXI International Congress of Entomology. 21 de Agosto de 2000. Foz do
Iguassu, PR, Brasil.
FERNANDEZ, D., E. H. BEERS, J. F. BRUNNER, M. E. DOERR, AND J. E. DUNLEY. 2001.
Effect of mineral oil on white apple leafhopper (Thyplocyba pomaria McAtee)
(Hemiptera: Cicadellidade) oviposition. J. Entom. Sci. 36:237-243.
FERNANDEZ, D., BEERS, J. F. BRUNNER, M. E. DOERR, AND J. E. DUNLEY. 2005a. Effect
of seasonal mineral oil applications on the pest and natural enemy complex of apple
(Malus domestica Borkhausen). J. Econ. Entomol. 98:1630-1640.
FERNANDEZ, D., BEERS, J. F. BRUNNER, M. E. DOERR, AND J. E. DUNLEY. 2005b.
Horticultural mineral oil applications for apple powdery mildew and codling moth, Cydia
pomonella (L.). Crop Protection (aceptado para publicación).
HARKER, R., F. A. GUNSON AND S. R. JAEGER. 2002. The case for fruit quality: an
interpretative review of consumer attitudes, and preferences for apples. Postharvest
Biology and Technology 00(1-15).
INSECTICIDE RESISTANCE ACTION COMITÉ (IRAC). 1995. Methods for monitoring the
efficacy of METI acaricides against Panonychus ulmi K. I. Delhom and J White eds.
Harpenden, Herts. AL5 2JK, UK.
KANG, S. D., S. K. LEE. 1987. Nature and control of apple during cold storage. Journal of the
Korean Society for Horticultural Science, 28(4): 343-351.
LAU, O.L. 1985 Harvest indices for B.C. apples. British Columbia Orchadist:1-20.
MCGLASSON, W. B. 1985. Ethylene and fruit ripening. HortScience. 20:51-54.
MAGDALENA, C., L. CICHÓN, D. FERNANDEZ, A. DI PRINCIO. 1995. TRV – Aplicación de
volúmenes adecuados en cultivos de frutales de pepita. INTA, Centro Regional
Patagonia Norte, E.E. A. Alto Valle, 16 pp.
PRIEST, K.L., E.C. LOUGHEED. 1988. Evaluating maturity of McIntosh and Red Delicious
apples. Ministry of Agriculture and Foog. Ontario. Sheet Order: 88-117.
RUPPEL, R. F. 1983. Cumulative insect-days as an index of crop protection. J. Econ. Entomol.
76: 375-377.
SAS INSTITUTE INC. 1997. SAS/STAT User’s Guide, Versión 6. 4th. ed. Vol. 1 and 2. Cary,
NC.
SCOTT K. J.; C. M. C. YUEN AND G. H. KIM. 1995. Reduction of Superficial Scald of apples
with vegetable oils. Postharvest Biology and Technology, 6:219-223.
SMITH, E., AND G. PEARCE. 1948. The mode of action of petroleum oils as ovicides. J. Econ.
Entomol. 41: 173-180.
WELKER, R. M., R. P. MARINI, D. G. PFEIFFER. 1996. Ultrastructural and surface features of
apple leaves following white apple leafhopper feeding. HortScience 31: 249-251.
WILLET, M., AND P. H. WESTIGARD. 1996. Using horticultural mineral oils to control orchard
pests. Pacific Northwest Extension Publication. [PNW 328]. Oregon State University.
Corvallis, OR. 12 pp.
ZWICK, R., P. WESTIGARD. 1978. Prebloom petroleum oil applications for delaying pear
psylla (Homoptera: Psyllidae) oviposition. Can. Entomol. 110: 225-23.
Descargar