Medicina Aeroespacial y Ambiental Editorial Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 Symposium M. MARTINEZ RUIZ • Mallorca, Iberoamérica y el 2000 265 • Symposium Nacional de Medicina Aeroespacial. resúmenes de ponencias y comunicaciones libres 285 Originales M. P. VALLEJO DESVIAT, J. A. LÓPEZ LÓPEZ, F. RIOS TEJADA, R. JIMENEZ GARCIA, I. SIERRA, L. GARCÍA MORA, J. L. GARCÍA ALCÓN • Estudio etiopatogénico de la lumbalgia de los pilotos de helicóptero 267 • Aplicación del test de Luscher en tripulantes de cabina de pasajeros, estudio previo 276 294 • La oxigenación hiperbárica. Recuerdo de Boerema 297 Legislación J. A. CARBALLO HERENCIA 279 A. GOITIA GOROSTIZA, A. V. ESTELLÉS SARRIO, J. AGUIRRE IBAÑEZ, Mª DEL M. DEL PRADO JARANILLA, O. ALONSO RODRIGUEZ, A. LARREA REDIN 281 Boletín de la Asociación Iberoamericana de Medicina Aeroespacial en páginas centrales • La visión binocular en el ámbito de los requisitos aeronáuticos (JAR-FCL) J. L. RODRIGUEZ VILLA J. L. RODRIGUEZ VILLA • Fallo en la presurización del vuelo 631 J. L. RODRIGUEZ VILLA Humanidades Comunicaciones • Desorientación espacial en un piloto de combate español Formación continuada • Proyecto de Orden del Ministerio de Fomento sobre requisitos para la acreditación de Centros Médicos Aeronáuticos y autorización de Médicos Examinadores Aéreos 298 Noticias 303 Normas de colaboración 306 Bibliografía comentada 308 Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 Editorial Med. Aeroesp. Ambient. 1999; 6: 265 Mallorca, Iberoamérica y el 2000 E l Symposium Nacional de Medicina Aeroespacial, celebrado en Palma de Mallorca los días 5 y 6 de noviembre de 1.999, ha marcado un hito en el desarrollo de la Medicina Aeroespacial en España. La magnífica organización y la responsabilidad profesional de los organizadores, junto a la categoría científica de los ponentes y ponencias, han sido los principales motores que han hecho despegar con tan sobresaliente éxito a este Symposium, primero que se celebra como tal desde hace años, bajo los auspicios de la Sociedad Española de Medicina Aeroespacial (SEMA), con la colaboración muy especial de Aeropuertos Nacionales y Navegación Aérea (Aena). En efecto, en años recientes únicamente se venían celebrando “cursos de refresco”, por imperativo legal, para cumplir los requisitos de acreditación exigibles a los médicos examinadores aéreos, con arreglo a la normativa de la Dirección General de Aviación Civil. El Symposium de Palma merece una serie de reflexiones. La primera es que la Medicina Aeroespacial española está viva... e inquieta. Y eso es enormemente positivo y esperanzador. La segunda es que debemos aunar esfuerzos, todos, para que no existan fisuras en una Sociedad tan minoritaria. No deben prevalecer intereses partidistas, ni viejos fantasmas o rencores. Decía Ortega que el resentimiento y el plebeyismo son características de una democracia mal entendida, de una democracia morbosa. Lo único importante, por encima de intereses personales, es el bien general de la Sociedad, un proyecto maravilloso que inicia su andadura en el 2.000 con más ilusión que nunca, con la vista puesta en el 2.003, año en que Madrid será la sede del Congreso Internacional de Medicina Aeroespacial. Este número hace historia. En realidad, para los que dedicamos parte de nuestra actividad profesio- nal a la edición de revistas científicas, sabemos que cada número hace un poco de historia. Pero este número sin duda es especial, único y universal. Es la primera vez que Medicina Aeroespacial y Ambiental incluye entre sus páginas el Boletín de la Asociación Iberoamericana de la Medicina Aeroespacial (AIMA). Han sido muchos meses de intercambio de opiniones y de negociación, que ahora han dado su fruto. Es emocionante ver que, unidos por un mismo idioma, países hispanoamericanos y España comparten por fin una misma revista para el desarrollo de la Medicina Aeroespacial y Ambiental, que alcanza así el rango de “internacional”. Saludos, compañeros de Hispanoamérica. Esperamos que nuestra inmensa alegría sea compartida por vosotros y que pronto estas páginas las hagáis vuestras. Y el 2.000. Vuelvo a recordar aquella primera reunión celebrada el 1 de julio de 1.992, en los locales de un laboratorio farmacéutico (el entonces SKF) en Madrid, en la que un grupo de profesionales nos planteábamos el incierto proyecto de editar una revista sobre Medicina Aeroespacial y Ambiental. Con más ilusión que medios, fuimos progresando en esta idea con la esperanza de revitalizar así a la SEMA. Partíamos de un hecho que todavía perdura y debe perdurar: una sociedad científica sin medio de difusión, sin su revista, está condenada a su desaparición. En mayo de 1.994 aparecía el primer número de Medicina Aeroespacial y Ambiental. Han sido seis años de aventura e incertidumbre para la obtención de recursos económicos que sufragaran el coste de la edición, de una dedicación enorme de un reducido, pero productivo y ejemplar, número de profesionales. Mi agradecimiento a todos ellos. Mi agradecimiento a los laboratorios farmacéuticos y empresas públicas y privadas que han hecho posible Medicina Aeroespacial y Ambiental. Mi agradecimiento a vosotros, lectores, por vuestro apoyo y participación. En mayo del 2.000 iniciaremos el volumen tercero. Feliz año 00. Nota de la Redacción: La opinión expresada en la Editorial puede no ser compartida por todos los componentes del Comité de Redacción Dr. Mario Martínez Ruiz Director 265 Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 DIRECTOR: Dr. Mario Martínez Ruiz. Servicio de Medicina Interna. Hospital del Aire. Madrid. COMITE DE REDACCION: Dr. Juan A. Bartolomé. Agencia Española de Cooperación Internacional. Madrid. Dr. José Lareo Cortizo. Academia Internacional de Medicina Aeronáutica y Espacial. Madrid. Dr. José Mª Pérez Sastre. Servicios Médicos de IBERIA LAE. Madrid. Dr. Alfredo Rosado Bartolomé. SEMA Madrid. Dr. Francisco Rios Tejada. CIMA. Madrid. Dr. Carlos Velasco Díaz. CIMA. Madrid. Prof. José L. Zamorano. Facultad de Medicina. UCM. Madrid. CONSEJO ASESOR: Dr. Antonio Accensi Ardit. Industrialización de Tecnologías. Dep. de Ingeniería de Sistemas, European Space Agency (ESA). Dr. Enrique Alday Figueroa. Neumología ambiental. Ins.Nac.Seg.Hig.Trabajo. Madrid. Dr. E. Alnaes. Presidente del AMP-AGARD. París. D. Miguel Alvarez Cobelas. Subdirector del Centro de Ciencias Medioambientales. CSIC. Madrid. Dr. Luis Amezcua. Academia Internacional de Medicina Aeronáutica y Espacial. México DF. Dr. Melchor Antuñano. Jefe División Educación Aeromédica FAA. Oklahoma. USA. D. Francisco Asensio. Ingeniería ambiental. Dir. Gral. Indust. Santiago de Compostela. Dra. Gloria Balfagón. Facultad de Medicina. UAM. Madrid Dr. Rafael Battestini Pons. Instituto de Estudios de Medicina de Montaña. Barcelona. Dr. Gerardo Canaveris. Academia Internacional de Medicina Aeronáutica y Espacial. Soc. Argentina de Medicina Aeroespacial. Buenos Aires. Argentina. Dr. David Cardús. Department of Physical Medicine and Rehabilitation. Baylor College of Medicine Houston. Texas (EE.UU.) Dr. Jordi Desola Alá. CRIS. Barcelona. D. Ramón Domínguez-Mompell. Jefe Servicios Médicos Iberia. LAE. Prof. Juan Estada. Facultad de Medicina. UAM. Madrid. Sr. Pedro Duque Duque, Astronauta, ESA. Dr. Julio Ferrero Arias. Revista Medicina Militar. Madrid. D. José María Figueras. Ingeniería ambiental. Consejo Segur. Nuclear. Madrid. Dr. Silvio Finkelstein. Ex-Jefe Sección de Medicina Aeronáutica OACI. Montreal. Canadá. Prof. J.R. Gallé-Tessoneau. Revue de Mèdecine Aeronautique et Spatiale. Francia. Dr. José Luis García Alcón. Director CIMA. Madrid. Dr. José B. del Valle Garrido. Comisión Nacional Medicina Especial. Dr. Juan José González Iturri. FEMEDE. Pamplona. Prof. Angel González Sistal. Dpto Fisiología. Fac. Medicina. Barcelona. Dr. G. Richard Holt. Editor de Aviation, Space & Environmental Medicine. USA. Dr. Terence J. Lyons. Comander Amstrong Laboratory. Brooks AFB San Antonio. Texas. Dr. José L. López Villa. SEMA. Madrid. Dr. Mariano Malillos Pérez. Fundación Mapfre Medicina. Madrid. Dr. Antonio Méndez. Director Hospital del Aire. Madrid. Prof. Francisco Mora Teruel. SECF. Madrid. D. Mariano Muñiz Daza. Centro de Ciencias Medioambientales, CSIC, Madrid. Dr. Vicente Navarro Ruiz. Cardiología. Aeroevacuaciones. MINISDEF. Dr. Pedro Ortiz García. Servicios Médicos. IBERIA LAE. Madrid. Dr. Fernando Pérez Torralba. Dpto. Salud Laboral. AENA. Madrid. D. Jorge A. Prelooker. Buenos Aires. Argentina. Dr. Juan Carlos Salinas Sánchez. IBERIA LAE. Madrid. Prof. José A.Sobrino Montalbán. Facultad de Medicina.UCM. Madrid. Dr. José A. Villegas. CAR Infanta Cristina. Murcia. Dr. José Viqueira Camaño. Medicina Subacuática. CBA. Cartagena. Presidente de la Sociedad Americana de Medicina Subacuática. Presidente de la Asoc. Iberoamericana de Medicina de Aviación y del Espacio. Argentina. Presidente de la Sociedad Argentina de Medicina Aeronáutica. Presidente de la Sociedad Brasileña de Medicina Aeronáutica. Presidente de la Sociedad Chilena de Medicina Aeronáutica. Presidente de la Sociedad Ecuatoriana de Medicina Aeronáutica. Presidente de la Sociedad Mexicana de Medicina Aeronáutica. Presidente de la Sociedad Panameña de Medicina Aeronáutica. Presidente de la Sociedad Portuguesa de Medicina Aeronáutica. Presidente de la Sociedad Venezolana de Medicina Aeronáutica. D. Francisco Eytor Coira. Director de Revista de Aeronáutica y Astronáutica. Madrid. Dr. José María Parés. Director de Avion Revue. Madrid. EQUIPO EDITOR: Juan Rodríguez Medina Alfredo Gutiérrez Depósito Legal: M - 37334 - 94 ISSN: 1134-9913 Medicina Aeroespacial y Ambiental PAGINAS: 50 PERIODICIDAD: SEMESTRAL TIRADA INICIAL: 3000 números. CARACTERISTICAS TECNICAS: Blanco y Negro, papel 80 grs. PVP (IVA incl.): tarifa normal: 2.500 Pta año de suscripción (2 números); tarifa miembros SEMA: suscripción gratuita. PROYECCION: NACIONAL E INTERNACIONAL. CAMPOS: MEDICINA AERONAUTICA, MEDICINA ESPACIAL, MEDICINA MARITIMA, MEDICINA SUBACUATICA, MEDICINA AMBIENTAL, MEDICINA AEROPORTUARIA Y DISCIPLINAS RELACIONADAS: FISIOLOGIA AEROESPACIAL, MEDICINA DEL TRABAJO, SALUD Y SEGURIDAD EN EL TRABAJO, ERGONOMIA, MEDICINA DEPORTIVA, MEDICINA HIPERBARICA, BIOLOGIA AMBIENTAL Y PSICOSOCIOLOGIA, FARMACOLOGIA, CRONOBIOLOGIA, BIOINGENIERIA Y ENFERMERIA AEROESPACIAL. SECCIONES: EDITORIAL, ORIGINALES, COMUNICACIONES, REVISIONES, HUMANIDADES, FORMACION CONTINUADA, CORRESPONDENCIA, NOTICIAS, BIBLIOGRAFIA COMENTADA Y NORMAS DE COLABORACION. 266 Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 Originales Med. Aeroesp. Ambient. 1999; 6: 267-275 Estudio etiopatogénico de la lumbalgia de los pilotos de helicóptero Low back pain in helicopter pilots Mª PILAR VALLEJO DESVIAT* JOSÉ ANTONIO LOPEZ LOPEZ* FRANCISCO RIOS TEJADA* RODRIGO JIMÉNEZ GARCIA** INMACULADA SIERRA** LUIS GARCIA MORA*** JOSÉ LUIS GARCIA ALCON* * C.I.M.A., ** Hospital del Aire, *** Base Aérea de Getafe RESUMEN ABSTRACT INTRODUCCIÓN. La lumbalgia es un problema muy importante en los pilotos de helicóptero. El principal factor etiológico es la mala postura que el piloto mantiene durante el vuelo. El asiento y la configuración de los mandos de la mayoría de los helicópteros, le obligan a mantener una postura asimétrica durante largos periodos de tiempo. En este trabajo se ha estudiado, con un método objetivo, la asimetría de esta postura. MATERIAL Y MÉTODO. Se comparó la actividad muscular lumbar, derecha e izquierda, de 35 pilotos durante un vuelo real, utilizando un electromiógrafo de superficie. RESULTADOS. 32 sujetos presentaron mayor actividad derecha respecto a la izquierda. La relación entre esta mayor actividad muscular derecha y la duración del vuelo fue estadísticamente significativa. INTRODUCTION. Low back pain is one of the more important problem in helicopter pilots. The main agent causing is the poor posture during the flight. The seat and control configuration in most helicopter, force the pilot to assume an asymmetrical posture for extended periods of time. Goal of this work is to prove objectively, the asymmetrical posture. MATERIAL AND METHOD. We compared the right and left side lumbar muscular activity in 35 helicopter pilots under real flight conditions, using a surface electromyography. RESULTS. 32 subjects presented a larger activity in the right lumbar muscular side than the left one. It was statiscally significant the association among the right muscular activity and the duration of the flight. Palabras Clave:Helicóptero. Lumbalgia. Electomiografía. INTRODUCCIÓN E l dolor de espalda constituye un importante problema sanitario en los países industrializados. El 80% de la población ha sufrido alguna vez un dolor intenso de espalda, siendo más frecuente entre los 20 y los 35 años Correspondencia: Mª Pilar Vallejo Desviat. C.I.M.A..C/ Arturo Soria 82. 28027. Madrid. Teléfono: 91-4084028 Recibido 1-7-99 Key Words: Helicopter. Back pain. Electromiography. . Se trata de un proceso tan frecuente que es el responsable de una de cada tres bajas laborables en nuestro país y ha supuesto, en el año 1994, un saldo por indemnizaciones de más de 10.500 millones de pesetas 2. La gran mayoría de los dolores de espalda están producidos por problemas mecánicos-degenerativos leves, como artrosis y errores posturales, pero también pueden estar causados por enfermedades cardiovasculares y del sistema nervioso, traumatismos, como en el caso de fracturas o esguinces, procesos metabólicos o de descalcificación y otras enfermedades inflamatorias de las articulaciones de la columna. 3 1 267 Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 Los especialistas indican que existen algunos factores La mano derecha maneja el mando cíclico, situado ende riesgo que pueden condicionar la aparición del dolor tre las piernas y la mano izquierda la palanca del colectide espalda, como levantar objetos de más de 12 kilogravo, situada en el lado izquierdo del asiento, con los dos mos, sobre todo si se hace con los brazos y piernas exmandos se controla el rotor principal, el primero es el tendidos, trabajos sedentarios con esfuerzos posturales, responsable de los movimientos de traslación y con el la flexión sostenida de la columna, las vibraciones que segundo se mantiene la altura del helicóptero. Los pies producen los motores, las tensiones psicoafectivas, etc. manejan los pedales que son los que controlan el rotor de El dolor de espalda es una patología muy extendida en cola o rotor anti-par 18. los pilotos de helicóptero. Autores como Aufret y VilleMientras el piloto controla los mandos, el cuerpo fond han determinado que los problemas de espalda son permanecerá en una postura muy poco fisiológica, al dos veces más frecuentes en los helicopteristas que en la manejar el mando cíclico y el colectivo, el tronco debe población general 4. Fitzgerald y col. 5 afirman que es tan flexionarse ligeramente y el hombro derecho se gira hacomún el dolor de espalda entre la mayoría de estos pilocia la izquierda, las piernas se mantienen flexionadas y tos que llegan a asumirlo como una carga profesional y además, la necesidad de visibilidad, obligará al piloto a raramente piden consejo médico por que flexione más el tronco hacia este motivo. adelante. Gran parte de los estudios Por lo tanto, mientras el piloto di6,7,8,9,10,11,12 que se han realizado sobre rige el aparato, debe mantener el el dolor de espalda en esta poblatronco ligeramente flexionado y gición, han llegado a la conclusión de rado hacia la izquierda, con lo cual que más del 50% de los pilotos de la espalda no se apoya completahelicóptero e incluso algunos han mente contra el respaldo del asiento afirmado que más del 75% 13,14, pre(figura 1). sentan molestias de espalda, siendo En esta postura, el ángulo que la zona más afectada la región lumforma el tronco con los miembros bar. inferiores es menor de 105 grados. La mayoría de estos datos se han Wisner estableció que para que haya recogido a través de encuestas realiuna buena relajación de los grupos zadas a los pilotos inmediatamente musculares y por lo tanto, una sendespués del vuelo, obteniéndose de sación de bienestar, este ángulo deesta manera una información simbería ser de 135 grados 19. plemente subjetiva del dolor. En uno La posición forzada, mantenida de estos trabajos, realizado en 1990 prolongadamente, no permite la relaen las Fuerzas Aeromóviles del Ejérjación de la musculatura espinal 20, cito de Tierra F.A.M.E.T.), la prosiendo esta situación probablemente porción de pilotos que presentaron Figura 1. Autor: José Antonio López. la que lleve al espasmo y la fatiga dolores relacionados con las activide la musculatura paravertebral. El dades de vuelo del helicóptero fue del 78% y concretaresultado es una rectificación de la lordosis lumbar fisiomente el 60% de éstos, se quejaban de lumbalgia 14. lógica 21. El vuelo en helicóptero presenta unas características Con la pérdida de la curva espinal normal, los cuerpos especiales que puede provocar una serie de manifestaciovertebrales tienden a aproximarse por la cara anterior, nes patológicas que van a incidir, en la mayoría de los provocando un aumento de la presión en la parte anterior casos, en la aparición de molestias en la espalda. Estas se de los discos intervertebrales. El núcleo pulposo se destraducen en la aparición de dolor sordo, pesado, generalplaza hacia la zona posterior del espacio intervertebral, mente localizado en la región lumbar, asociado a cansandonde puede irritar las raíces del nervio con las que entra cio y que puede llegar a ser muy intenso si el sujeto conen contacto. Además, la pérdida de la curva lumbar lleva tinua realizando dicha actividad durante largos periodos a un estiramiento del ligamento espinal longitudinal posde tiempo 6,8,12,13,14,15,16. terior que es muy sensible al dolor. Este mecanismo fiGeneralmente, el dolor de espalda relacionado con el siopatológico es la principal fuente del dolor de espalda vuelo, aparece aproximadamente a los 80 minutos de en pilotos de helicóptero. vuelo y suele ser un dolor autolimitado. El segundo factor implicado en dicha patología son El principal factor etiológico de dichos dolores es la las vibraciones. La vibración consiste en una serie de postura que, durante largo tiempo, el piloto mantiene desplazamientos de una masa en dos direcciones desde mientras está controlando los mandos 6,5,17,18 ya que el su punto de equilibrio. Estos desplazamientos se caracteasiento y la ergonomía de la cabina, en la mayoría de los rizan por su frecuencia, amplitud y velocidad 4. helicópteros, obligan al piloto a que adopte una postura Las frecuencias de las vibraciones desarrolladas habiasimétrica durante el vuelo. tualmente en los helicópteros oscilan entre 2 y 20 Hz 18. 268 Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 Figura 2. Periodo Basal. Periodo de Vuelo. Estas vibraciones se transmiten al piloto a través de un asiento que no sólo no las amortigua, sino que las amplifica. Las frecuencias peor toleradas por las personas son entre 4 y 8 Hz., desgraciadamente son éstas las frecuencias de la mayoría de las vibraciones que se dan en vuelo 4 . Los efectos fisiopatológicos de las vibraciones consisten en deformaciones y desplazamientos de los tejidos que se someten a las mismas 18. Por otro lado, para disminuir las vibraciones, tienden a apoyar el brazo derecho sobre la pierna derecha, esto les obliga a flexionar aún más la columna. Otros factores etiológicos que se han demostrado que influyen en la aparición de lumbalgia en los helicopteristas son: la presencia de enfermedad subyacente de la columna vertebral (enfermedad congénita o traumatismo); las horas de vuelo totales del piloto en el avión de alas rotatorias; la frecuencia de los vuelos, los síntomas aparecen antes en los pilotos que vuelan más de 4 horas al día o más de 40 horas a la semana 18; la tensión muscular que conlleva el control de los instrumentos, dependiendo del tipo del vuelo 14; el aire frío que podría afectar a la zona lumbar durante las maniobras con la puerta abierta, 11 , la edad, Hoiber y col. 22 encontraron una relación lineal entre el dolor de espalda y la edad, sin olvidar que ésta suele estar íntimamente relacionada con las horas de Figura 3. vuelo y finalmente, hay que tener en cuenta algunas otras variables relacionadas con el estilo de vida (sedentarismo, sobrepeso, etc.) 16. Debido a la importancia de la postura en la etiología de estos dolores, hemos querido demostrar en nuestro estudio, de una manera objetiva, que efectivamente la postura que mantiene el piloto mientras controla los mandos del helicóptero es asimétrica, para ello hemos utilizado un electromiógrafo (EMG) de superficie, ya que la electromiografía puede proporcionar una información muy fiable, directamente relacionada con la actividad muscular local. Para comprobar la asimetría de la postura hemos comparado el trabajo que realiza la musculatura lumbar derecha y la izquierda durante el vuelo. Posteriormente relacionaremos la actividad muscular obtenida con distintas variables, como la duración y el tipo de vuelo, tipo de helicóptero, edad, experiencia y características antropométricas del piloto, para estudiar si éstas influyen en la mala postura. MATERIAL Y MÉTODOS El estudio se ha realizado con 35 pilotos de helicóptero de las Fuerzas Armadas Españolas, destinados o realizando parte de su formación en la Base de Helicópteros de las Fuerzas Aeromóviles del Ejército de Tierra (F.A.M.E.T.) en Colmenar Viejo, Madrid. Todos los sujetos estudiados eran sanos, ya que se consideró como criterio de exclusión aquellos que tras una breve historia clínica se descubrió que tenían alguna patología, traumatismo o enfermedad degenerativa de la columna vertebral. A todos los pilotos incluidos en el estudio se les realizó una encuesta para determinar las siguientes variables: edad, peso, talla, índice de masa corporal, actividad física, horas de vuelo en el helicóptero en el que se realizó la prueba y horas de vuelo totales. La actividad física se recogió como variable dicotómica siendo las opciones: no practica ningún deporte o practica ejercicio al menos una vez a la semana. Los vuelos se realizaron en dos tipos de helicópteros (el RH-12 y el HU-10) y en el simulador de vuelo instrumental Frasca modelo 300H. El HR-12 ó Kyowa, es un helicóptero estadounidense de 1.360 kilogramos, con una capacidad de transporte de dos pilotos y tres pasajeros, velocidad de crucero de 156 Km./h y autonomía de 2 horas 30 minutos; y el HU-10 ó Huey es también estadounidense, de 4.318 kilogramos, con una capacidad de transporte de tres tripulantes y diez pasajeros, velocidad de crucero de 166 Km./h y autonomía de 2 horas 10 minutos. En el HR-12 se recogieron dos tipos de vuelos, el “básico o de acomodación”, que corresponde a la primera fase del curso de piloto de helicóptero, el vuelo es visual y se realizan tomas, despegues y tráfico normal y el de “maniobras tácticas”, que es la segunda fase del curso de piloto y son vuelos visuales donde además de las manio- 269 Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 Figura 4. bras básicas se realizan también maniobras tácticas y formaciones. En el HU-10 también fueron dos los tipos de vuelos recogidos, el “instrumental” es la fase avanzada del curso de piloto y se realiza únicamente con los instrumentos, por lo tanto no se tiene visión del exterior y el de “perfeccionamiento” o formación de instructores, donde además de maniobras normales también se hacen emergencias. Los vuelos realizados en el simulador fueron de tipo “instrumental”. Según el helicóptero y el tipo de vuelo, incluimos a los sujetos estudiados en los siguientes grupos: • Curso de acomodación en HR-12. • Curso de maniobras tácticas en HR-12. • Curso instrumental en HU-10. • Curso de perfeccionamiento en HU-10. • Vuelo instrumental en el simulador. Dentro de la cabina del helicóptero la posición habitual del piloto es en el asiento de la derecha, con la mayor parte de los instrumentos centrados a su izquierda, pero en algunas ocasiones se pilota el aparato desde la izquierda con los instrumentos centrados a su derecha (aunque los mandos manuales, el “cíclico” y el “colectivo”, están en la misma posición en ambos asientos). Estos datos se recogen en la encuesta. Se utilizó el Muscle Tester ME300 (Mega Electronics Ltd, Kuopio, Finland) para medir la actividad muscular en la zona lumbar. El ME300 es un EMG de superficie que registra mediante dos canales los potenciales de acción de dos zonas musculares simultáneamente, siendo la sensibilidad de +/- 1 microvoltio. La actividad muscular fue medida por electrodos de monitorización con soporte de Micropore y gel sólido aplicados directamente sobre la piel, en ambas zonas paravertebrales sobre la musculatura lumbar a nivel L1-L2. Se colocaron tres electrodos en cada lado, dos activos y uno de masa, a unos 3 cm de separación formando un triángulo. Para evitar errores en el registro, se alternaron los canales 1 y 2 en los músculos paravertebrales derecho e iz- 270 quierdo, respectivamente, no influyendo la colocación en el resultado. La información recibida por los electrodos de superficie se recogió en un microprocesador de pequeño tamaño y peso reducido que el piloto llevaba en uno de los bolsillos de su mono de vuelo o en algunas pruebas lo hemos manejado personalmente, verificando las incidencias. El registro se comenzó inmediatamente después de colocarles a los pilotos los electrodos en la región lumbar, programando el microprocesador para grabar señales recogidas cada segundo. El microprocesador va conectado a un dispositivo o pulsador que nos permite hacer diferentes marcas en el registro, para así seleccionar las partes que nos interesan del registro total. Antes del vuelo, con el piloto en posición relajada, sentado y apoyando totalmente la espalda en el respaldo de la silla, seleccionamos un primer período, o periodo basal, que utilizamos para comprobar el funcionamiento correcto del electromiógrafo en situación de reposo. Durante el vuelo es el piloto el que realiza las marcas, cuando va a coger los mandos y cuando los suelta, para seleccionar únicamente los momentos en que está en la postura que queremos estudiar. Según haya transcurrido el vuelo obtendremos una o varias fases durante el mismo y una vez seleccionadas las estudiaremos como una sola, denominándola fase o periodo de vuelo (figura 2). Posteriormente fue necesario realizar nuevas marcas sobre el registro del vuelo, utilizando el ME300 software, para anular las interferencias producidas por las ondas de radio-frecuencia de la banda VHF de comunicación (30-200Mhz.) usada por los pilotos. (figura 3). Los datos acumulados en la memoria del microprocesador se transfirieron a un ordenador donde fueron analizados por Muscle Tester ME300 Software v.2.03 obteniendo los siguientes datos para los dos canales: tiempo, potencial mínimo, potencial máximo, media y área o suma de todos los potenciales de acción. El trabajo realizado por la musculatura derecha y por la izquierda se expresó en porcentajes. Al realizado por la musculatura lumbar derecha se le denominó “predominio derecho” y al realizado por la izquierda “predominio izquierdo”, siendo el 100% la suma de los potenciales de acción de ambos canales. Definimos la variable “predominio derecho” como el área bajo la curva de voltaje obtenida en la región lumbar derecha dividido por la suma de las áreas derecha e izquierda y “predominio izquierdo”, el área bajo la curva de voltaje obtenida en la región lumbar izquierda dividido por la suma de las áreas derecha e izquierda. Las variables recogidas para cada piloto procedentes de la encuesta y del ME300 software se introdujeron en una base de datos creada en el procesador estadístico SPSS para Windows versión 6.0. Para el análisis se emplearon las pruebas de comparación de medias t de Student y análisis de la varianza (ANOVA). Como criterio de significación se utilizó un valor de “p” inferior o igual a 0.05. Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 Tabla 1 Tabla 2 RESULTADOS Los 35 pilotos de helicóptero aceptaron participar en el estudio de manera voluntaria. Todos eran varones. La edad media fue de 28,2 años con un rango entre 23-39 años. Las características antroprométricas de los sujetos participantes aparecen en la tabla 1. El 80% de los pilotos practicaba al menos un deporte una vez por semana. Respecto a su experiencia como pilotos encontramos una media de 577,8 horas de vuelo totales en helicópteros (rango 56-3300 horas) y una media de 342,9 horas de vuelo en el tipo de helicóptero específico en el que cada uno de ellos realizó el estudio (rango 5-1900 horas). De los 35 vuelos en los que se obtuvieron mediciones, 17 se realizaron en el helicóptero HR-12, 12 en el HU-10 y 6 en el simulador. En cuanto al tipo de vuelo 16 fueron “instrumentales”, 9 de “maniobras tácticas”, 8 de “acomodación” y 4 de “perfeccionamiento”. En la tabla 2 se recogen la distribución de los tipos de vuelo según la clase de helicóptero. La situación del piloto en la cabina fue en el lado derecho en 28 casos (80%) y en el lado izquierdo en 7 casos (20%). La duración máxima del vuelo fue de 80 minutos y la mínima de 16 minutos, oscilando el 75% de los casos, entre 30 y 60 minutos. Unicamente 3 sujetos (9%) presentaron mayor actividad muscular lumbar izquierda que derecha, siendo para los 32 restantes (91%) predominante la actividad de la región lumbar derecha. El porcentaje medio de “predominio derecho” para el total de la muestra fue de 63.1%. En la figura 4 se representa la distribución del predominio derecho en los pilotos estudiados: 3 pilotos (9%) tuvieron un predominio derecho por debajo del 50%, concretamente entre el 40 y el 50%; el mayor grupo, 18 pilotos (51%) lo representaron aquellos cuyo predominio derecho osciló entre el 61 y el 70%; 9 pilotos (26%) se encontraron entre el 51 y el 60%; 3 (9%) entre el 71 y el 80% y únicamente dos pilotos (6%) tuvieron un predominio derecho entre 81 y 90%. En la tabla 3 se muestra la distribución de los valores medios de las características antropométricas estudiadas para tres niveles de “predominio derecho”. Como se refleja en esta tabla ni el peso, ni la talla ni el índice de masa corporal se asociaron de manera estadísticamente significativa a nuestra variable en estudio. Al comparar los valores medios de “predominio derecho” según los diferentes tipos de helicópteros empleados y tipo de vuelo realizado tampoco se encontraron diferencias significativas (tabla 4). Como vemos en la tabla 5, al aumentar los valores medios de horas de vuelo totales, de horas de vuelo especificas en el helicóptero en que se realizó la prueba y la edad, existió una tendencia de aumento del nivel de “predominio derecho”, aunque no fue estadísticamente significativo. Sí resultó estadísticamente significativa (p < 0,05) la asociación entre el nivel de “predominio derecho” y la 271 Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 Tabla 3 duración del vuelo. En la tabla 6 se expone la duración media de los vuelos en los diferentes niveles de predominio derecho, así los pilotos cuyo predominio derecho osciló entre 50 y 60%, realizaron vuelos de 37,4 minutos de media; entre 61 y 70% los vuelos duraron 40,58 minutos de media; y por último los pilotos donde el predominio derecho fue mayor del 70% volaron durante 65,6 minutos de media. DISCUSIÓN La gran mayoría de autores que han estudiado el dolor de espalda en los pilotos de helicóptero han coincidido en que el principal factor causante de la lumbalgia es la mala postura que el piloto debe mantener durante el vuelo. Froom y col. 6 realizaron un trabajo interesante para demostrarlo. Estudiaron a 18 pilotos del helicóptero AH1S que vuelan alternativamente en el asiento del copiloto, donde se mantienen en una postura vertical y en el asiento del piloto, donde se inclinan hacia adelante y a la izquierda para manejar los mandos. El dolor de espalda comenzaba antes y era de mayor intensidad cuando volaban en el asiento del piloto. Por otro lado, aunque siempre se ha afirmado que las vibraciones eran el segundo factor más importante en esta patología, no hay ningún estudio que haya demostrado que las fuerzas de vibración sean directamente responsables del dolor lumbar. Por ejemplo, Shanahan y Reading 13 estudiaron a 11 pilotos en un simulador del helicóptero UH-1H. Cada piloto realizó dos vuelos de dos horas cada uno, con la única diferencia de que el primero era con vibraciones y el segundo sin vibraciones. No apareció ninguna diferencia significativa en el tiempo de inicio y en la intensidad del dolor en los dos vuelos. Sin embargo, aunque parece ser que la vibración no juega un papel importante en la etiología del dolor agudo de espalda, autores como Aufret y Viellefond 4 piensan que la exposición repetida a microtraumas, como son las 272 vibraciones, puede provocar, a largo plazo, patología de la columna, como fracturas o hernias de los discos lumbares. Shanahan y col. 12,16 sugirieron que, el hecho de que los pilotos con más experiencia de vuelo tuvieran un dolor de espalda con unas características específicas (mayor duración, irradiación a miembros inferiores, etc.) hace pensar que, probablemente tengan alguna patología evolutiva musculoesquelética, como consecuencia de una exposición crónica a unas condiciones adversas. Es decir, hoy en día se piensa que el dolor agudo de espalda del piloto de helicóptero es un dolor, fundamentalmente postural, pero con el tiempo y debido a factores como las vibraciones y otros ya comentados, se puede desarrollar una patología en la columna que les ocasione un dolor lumbar diferente, más intenso, duradero y con irradiación a los miembros inferiores. Centrándonos en el dolor agudo de espalda y en la postura del piloto, en nuestro estudio hemos querido demostrar que durante el vuelo el piloto mantiene una postura asimétrica, para ello hemos utilizado el EMG de superficie Muscle Tester ME300, que mide los potenciales de acción mediante dos canales para la musculatura lumbar derecha e izquierda. El conocimiento de los potenciales de acción muscular es de sumo interés ya que nos permiten obtener datos objetivos de la actividad eléctrica que tiene lugar en las células musculares 23. Hamalainen y col. 24 usaron otro EMG de superficie con cuatro canales, el ME3000, para estudiar el estiramiento de la musculatura cervical en los pilotos de reactores causado por las fuerzas Gz y los movimientos de la cabeza durante el vuelo. Así calcularon el estiramiento relativo de los músculos cervicales comparando estos potenciales con los obtenidos por la máxima contracción voluntaria en cada sujeto, es decir, los potenciales del vuelo se expresaban en porcentajes respecto a la máxima contracción (100%). En nuestro estudio, el trabajo realizado por la musculatura lumbar derecha e izquierda se expresa en porcentajes respecto a la actividad total (100%) o suma de am- Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 bos, denominando a los porcentajes derecho e izquierdo, respectivamente, predominio derecho y predominio izquierdo. Con este método realizamos un test isométrico comparativo de la musculatura lumbar derecha e izquierda y así podemos demostrar la postura asimétrica del piloto. En el periodo de vuelo, es decir, en la suma de las fases durante las cuales el piloto se encuentra con las manos controlando los mandos, el trabajo realizado por la musculatura lumbar derecha fue mayor en 32 pilotos de los 35 estudiados (91%) y el trabajo de la musculatura izquierda fue ligeramente mayor en los tres restantes (9%). Estos datos nos llevan claramente a la conclusión de que, en mayor o menor medida, el piloto durante el vuelo, cuando está controlando los mandos, no mantiene una postura simétrica y eso le hace contraer un lado más que el otro. Al ser tan claramente superiores los casos de mayor actividad de la musculatura derecha respecto a la izquierda, utilizamos, para estudiar la asociación de la variable “predominio derecho” con el resto de las variables recogidas, únicamente los 32 pilotos con valores de “predominio derecho” superiores al 50%. Son muchos los autores que en sus publicaciones se han referido a esta asimetría en la postura del vuelo 6,8,11,12,13,14,15,16,17,18 . Todos coinciden en que el piloto de helicóptero mientras vuela, mantiene ligeramente flexionado el tronco hacia delante y girado hacia la izquierda, esto explicaría la mayor contracción derecha. Como vemos en la tabla 6, el aumento del predominio derecho en relación con la duración del vuelo fue estadísticamente significativo (p ≤ 0,05). Pensamos que esta estrecha relación entre la mayor contracción derecha y la duración del vuelo, se debe a que el mantener durante más tiempo una postura forzada, se traduce en una mayor tensión muscular y al ser la postura asimétrica, hay mayor diferencia entre la actividad muscular derecha y la izquierda. Hay autores que han relacionado la duración del vuelo con la aparición del dolor de espalda 18,20,25, incluso Shanahan y col. 12 realizaron un estudio en el que consideraron que el dolor lumbar en el piloto de helicóptero aparecía, por término medio, a los 88 minutos de vuelo. En cuanto a la relación entre las horas de vuelo del piloto, en cualquier helicóptero o las específicas en el helicóptero estudiado y el mayor predominio derecho, vemos en la tabla 5 que, aunque no se ha demostrado una relación estadísticamente significativa, sí existe una tendencia a una mayor actividad muscular derecha en los pilotos con más horas de vuelo, sobre todo respecto a las horas específicas en el helicóptero estudiado. Shanahan y col. 12 realizaron un trabajo estudiando dos grupos de pilotos, los que tenían dolor en el vuelo y los que no, demostrando que el primer grupo de pilotos tenía significativamente (p ≤ 0,0001) más horas de vuelo. Nuestra opinión sobre el hecho de que haya más predominio derecho sobre el izquierdo en personas con más horas de vuelo, es que puede estar relacionado con una mayor tensión en la zona, condicionada por esa patología musculoesquelética que Shanahan y col. atribuían a la exposición crónica a condiciones adversas. En la tabla 5 podemos ver también la tendencia a una mayor actividad de la musculatura lumbar derecha respecto a la izquierda cuanto mayor es la edad del piloto, estos datos corroboran lo anterior ya que edad y experiencia en vuelo están íntimamente unidas. El resto de variables, como son talla, índice de masa Tabla 4 273 Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 Tabla 5 corporal, actividad física, tipo de vuelo y de helicóptero, actividad física y posición en la cabina derecha o izquierda no presentan significación estadística con relación al predominio derecho. Quizás, 32 casos sea un número escaso y posiblemente podrían haber aparecido algunas asociaciones significativas con algunas de estas variables si la muestra hubiera sido mayor. En conclusión, con nuestros datos hemos podido demostrar, objetivamente, que el piloto de helicóptero, durante el vuelo, debe mantener una postura asimétrica que con toda seguridad sea la principal causa de su dolor de espalda. Estos datos puedan ser valiosos en un futuro, para ser usados en el proyecto y el desarrollo ergonómico de las cabinas de los helicópteros. AGRADECIMIENTOS Nuestro agradecimiento por la ayuda prestada a todo el personal del Botiquín y del Centro de Enseñanza de la Base de Helicópteros de las F.A.M.E.T. de Colmenar Viejo. En especial a los pilotos que colaboraron en el trabajo. 274 Tabla 6 Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 BIBLIOGRAFÍA 1. Hueso Calvo R. Escuela de espalda. Mapfre Medicina, 1997; 8: 263-68. 2. White A.H. Back school and other conservative approaches to low back pain. California: The C V Mosby Company, 1983. 3. Borenstein Wiesel. Dolor lumbar, diagnóstico y tratamiento. Barcelona: Ancora, 1989. 4. Auffret R.,Viellefond H. Spinal Stresses in Flight. In: Physiopathology and pathology of spinal injuries in aerospace medicine, 2nd ed. AGRD-AG-250, (Eng.) 1982; 48-53. 5. Fitzgeral J. G. An approach to the problem of backache in aircrew. 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El conjunto del personal auxiliar de vuelo está sujeto a las siguientes circunstancias laborales: * Condiciones de Trabajo: - Puntualidad-estricto control del cumplimiento de los horarios de trabajo. - Ausencias del hogar-frecuentes, prolongadas, en el caso de los destacamentos, o imprevistas. - Irregularidad en los horarios de trabajo y comidas. - Condiciones diversas en cuanto a climas y alimentación. - Alteraciones de los biorritmos, en vuelos transmeridianos. * Condiciones relativas al ambiente de cabina. - Discreto nivel de hipoxia durante el vuelo. - Bajo grado higrométrico del aire. - Iluminación artificial. - Cierto nivel de ruido continuado. - Ocasionales cambios bruscos de presión. - Fenómenos de aceleración, turbulencias. * Condiciones sociales: - Se trata de un trabajo realizado en equipo, sometido a programaciones mensuales que modifican el grupo. Por las características apuntadas, incide en la Correspondencia: Dr. J.L. Rodríguez Villa Servicio Médico IBERIA 28042 Madrid - Barajas Recibido el 1.11.98 276 vida familiar y social del tripulante, precisando realizar adaptaciones en las relaciones sociales, obligaciones familiares y aprovechamiento del tiempo libre. En virtud de tales circunstancias, hemos considerado oportuno estudiar la posibilidad de empleo de una prueba psicológica de fácil aplicación, que ayudase al médico aeronáutico a resolver los problemas adaptativos de los tripulantes. A tal efecto, hemos aplicado, a título experimental, el Test de los 8 colores del prof. Luscher. En este trabajo presentamos el test en sus aspectos teóricos y de aplicación práctica, valorando su utilidad a través de un caso concreto. MATERIAL Y METODOS El test de los 8 colores fue administrado a 12 tripulantes auxiliares (1 varón casado y 11 mujeres, de las cuales, 4 estaban casadas, 6 eran solteras y 1 estaba divorciada); cada uno de estos sujetos presentaba algún antecedente de orden psicológico (depresión, reacciones de stress y astenia, sospecha de drogadicción); problemas psicosomáticos y/o de adaptación al vuelo (renuncia al cargo de sobrecargo, miedo al vuelo). El test se presentó con ocasión del control de altas por enfermedad, sin vincularlo a una anamnesis o estudio psicológico. El test de Luscher está diseñado para ser administrado a personas de toda condición (raza, nivel cultural). Es un test sencillo y breve, su administración se realiza en escasos minutos. Consta de 8 cartulinas de color. Al sujeto objeto de estudio, se le solicita que, abstrayéndose de cualquier asociación con objetos concretos de color, criterio decorativo o artístico, ordene los colores expuestos desde el que más le guste hasta el que menos. Una vez obtenida la selección cromática, se procede a analizar su significado en las tablas que configuran el test. Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 Las bases estructurales del test de Luscher se compendian en los siguientes aspectos: - El test se compone de 4 colores fundamentales (azul, verde, rojo y amarillo) y 4 accesorios (marrón, gris, violeta y negro). Cada color fundamental representa una necesidad psicológica básica: * azul: afecto * verde: estabilidad * rojo: actividad * amarillo: libertad. - Además, los colores fundamentales poseen un significado de orden fisiológico: * azul: reposo * verde: tensión * rojo: excitabilidad * amarillo: laxitud. Según la circunstancia psico-física del sujeto, la contemplación de los tonos cromáticos del test, induce a éste a manifestar criterios discriminativos en cuanto a la preferencia, el rechazo o la indiferencia de cada color en particular. Los colores rechazados traducen, con mayor o menor intensidad, según su ubicación en la selección adoptada, circunstancias personales que entrañan un conflicto interior, problemas a menudo desapercibidos o no apreciados en su justa medida por el sujeto. - Rechazo del azul: miedo a la soledad. - Rechazo del verde: miedo a la infravaloración de sí mismo. - Rechazo del rojo: miedo a la propia impotencia. - Rechazo del amarillo: miedo a la pérdida de expectativas, posesiones o menoscabos. Los colores preferidos muestran la conducta compensatoria utilizada para superar la situación de conflicto. El procedimiento de aplicación del test contempla la posibilidad de realizar una 2ª selección, pocos minutos después de efectuar la 1ª, para ampliar los datos extraídos de las tablas. En los casos estudiados por nosotros, no se ha considerado preciso tal proceder. RESULTADOS La presentación de los protocolos de los 12 casos estudiados, aparte de ser farragosa, dificultaría la comprensión del test, en consecuencia, expondremos un ejemplo representativo: - PAA, mujer soltera, de 26 años en el momento de la prueba. * Antecedentes familiares: madre alcohólica. * Antecedentes personales: gastroduodenitis, ansiedad, stress. * Enfermedad actual: depresión, drogadicción, hepatitis. * Secuencia de selección: VIOLETA-AZUL-ROJO-NEGRO-VERDE-AMARILLO-GRIS-MARRÓN * Resultado: Según reflejan las tablas del test, se ob- jetiva el choque del sujeto con la realidad1: “Juzga que soporta una carga de problemas que es bastante superior a lo que en justicia cree que le corresponde”; “la frustración y el temor ante la posibilidad de que resulte inútil plantearse nuevos objetivos, ha originado un estado de ansiedad”; “Ansía una unión íntima satisfactoria”; “Polarizada en el realce de su personalidad, a tal fin, las necesidades de complacencia física y sensual, quedan en un segundo término, aplazadas”; “Propende a sentirse atraída por temas originales y por aquellas personas que le resultan descollantes”. El caso presentado constituye un ejemplo de los problemas de índole afectiva que acontecen en tripulantes jóvenes, particularmente de sexo femenino, en los momentos en que se establecen los lazos de compañero. El ejemplo muestra los intentos de una persona joven para superar una frustración afectiva, entregada a una conducta compensatoria consistente en el realce “a toda costa” de su personalidad. En éste sentido, en virtud del significado del color violeta, cabe apreciar un fenómeno exacerbado de identidad: el anhelo mimético de emular y ser como otros sujetos; una conducta, por lo demás normal en el sujeto adolescente -soñador, creador de metasque, de no ser bien canalizada, por su perduración en el tiempo, polariza al sujeto en ambiciones desmedidas, adhesión excesiva a otros sujetos, normas, ideales, hasta el punto de caer en conductas extremas. En el caso que nos ocupa, tras repetidas bajas y pérdidas temporales de licencia, ésta fue definitivamente rescindida debido a una afección de SIDA. Evidentemente, el género de vida propio del personal de vuelo, es susceptible de incidir negativamente en aquellos sujetos que, por circunstancias personales y/o del entorno, encuentran dificultades para satisfacer ese sentimiento vital, básico para el ser humano que describió Adler como “sentimiento de asociación”, la vivencia de sentirse relacionado. CONCLUSIONES El test de Luscher constituye una prueba de fácil aplicación útil para el médico no especializado en el estudio de las interacciones del sujeto con el medio y especialmente en la valoración del estado anímico y de los sentimientos. La repetición de la prueba en el tiempo, en virtud de la ubicación de los colores en la selección, permite evidenciar los cambios, favorables o desfavorables en la circunstancia vital del sujeto. Un resultado del test de carácter desfavorable (rechazo evidente de colores fundamentales), constituye una prueba de apoyo de los criterios médicos establecidos (anamnesis biográfica, diagnósticos, calificación para el trabajo); a su vez, esta prueba puede facilitar la relación del médico con el paciente y el enfoque de las medidas a adoptar para la mejor adaptación del sujeto a su vida personal y a su trabajo. Desde nuestra experiencia, hemos de resaltar, sin embargo, que una selección calificable de normal (sin re- 277 Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 chazo de colores fundamentales) no excluye la existencia de problemas en la circunstancia del sujeto o psicopatológicos; evidentemente algunos sujetos intuyen o recuerdan de pruebas anteriores los elementos desfavorables de la prueba. En toda prueba psicológica han de tenerse en cuenta sus limitaciones, el test de Luscher evidencia fundamentalmente los problemas de orden afectivo y de la autoestima, las situaciones de stress, las limitaciones en el campo de acción, las represiones. Esto lo atestiguan los siguientes enunciados tomados de las tablas del test: “La resistencia y tenacidad se encuentran sobrecargadas por el intento permanente de superar las dificultades existentes”. “Se siente en una posición desagradable. La confianza y el aprecio le resultan negados y se siente tratado con una falta de consideración humillante. Juzga que se le ha valorado de un modo inferior al que necesita para su autoestima”. “Se siente sometido a una gran presión y/o manejado contra su voluntad”. “Esperanzas irrealizadas le han originado un estado de incertidumbre, apresión y vigilancia”. “Una asociación sentimental ha resultado profundamente decepcionante”. Se trata de enunciados que reflejan conflictos de orden interno susceptibles de ser encauzados de la forma más favorable posible por la persona a la cual se otorga confianza, por el médico. BIBLIOGRAFIA 1.- Lüscher, “Test de los colores”. Buenos Aires, Paidós, 1974. 2.- Erfolg durch Menschen henntnis im Beruf, rud Privatheben. Rudolf. Spieth 1976. München Heyue Verlag. 3.- Régimen de vida y alimentación del personal de vuelo. Eugenio Llorente Barrueco. 1976 Madrid. SCEAVAC. 4.- Psicología de los grupos humanos. Jean Drevillon. 1978. Buenos Aires. Ediciones Nueva Visión. 278 5. Signale der Persönlich Reit. Prof. Dr. Max Lüscher 1976. Reinbek Rowohlt Verlag GmbH. 6.- Phycologie du vol. Hygiene de l’aviateur. Dr. E. Eurand. 1956. Bruxelles. Office de publicite S.A. 7.- Aviation Medicine. Erusting/king 1998. Cambridge. Butterworths. Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 Original Med. Aeroesp. Ambient. 1999; 6: 279-280 Desorientación espacial en un piloto de combate español Spatial disorientation in a spanish flighter pilot JULIO ANTONIO CARBAYO HERENCIA Doctor en Medicina. Médico de Vuelo. Base Aérea de Albacete. RESUMEN ABSTRACT La desorientación espacial es una causa importante de incidentes y accidentes aéreos y casi la totalidad de pilotos experimentados la han padecido en alguna ocasión. Exponemos a continuación un caso descrito por un piloto que la padeció. Se trata de un piloto de combate, varón, destinado en la Base Aérea de Albacete (Ala 14), de 30 años de edad, con una experiencia de 1.000 horas de vuelo, 200 de las cuales en F-1, aeronave del Ala 14. El tipo de desorientación espacial descrito corresponde al tipo II y se puede encuadrar como ilusión somatográvica, inversión gravitoinercial. Most of pilots has suffered in some occasion an episode of spatial disorientation, which is important cause of air incidents and accidents. In the present paper we describe a case. It is a male fighter pilot assigned in Albacete Air Base (Wing 14), 30 years old, with an experience of 1.000 hours of flight, 200 of those in F1, aircraft of the Wing 14. The described type of spatial disorientation corresponds to the type II and it can frame as somatogravic illusion, gravitoinertial inversion.. Key Words: Spatial disorientation, fighter pilot. Palabras Clave:Desorientación espacial, piloto de combate. INTRODUCCIÓN L a desorientación espacial (DE) es un término amplio que indica una incorrecta apreciación de la posición o del movimiento en relación con el espacio que nos rodea1. Dado que el piloto cumple sus misiones en el medio aéreo, sometido a una fuerza gravitoinercial diferente a 1G y por tanto, expuesto a estímulos muy variables en magnitud, dirección y frecuencia, casi todos los pilotos han experimentado en alguna ocasión algún episodio de DE. Así, solo un 2% de 300 pilotos de helicóptero encuestados refirieron no haber sufrido ningún episodio de DE; en cambio, un 61% padeció una importante DE en Correspondencia: Sección de Sanidad. Base Aérea de Albacete. Carretera de Murcia s/n, km 3. 02071 ALBACETE. Teléfono: 967-223450. Extensión: 256 ó 276 Recibido 10-5-99 una o más ocasiones2, contribuyendo, junto con la atención focalizada y la pérdida de conciencia situacional a explicar aproximadamente el 30% de las causas de incidentes por error del piloto en el F-163. Asimismo es causa importante en la eyección del piloto4, de modo que a la DE se le ha atribuido tanto pérdida de vidas humanas como de aeronaves5,6. La mayoría de datos disponibles proceden de encuestas complimentadas por pilotos. Exponemos a continuación un caso de DE ocurrido en la Base Aérea de Albacete (Ala 14), en noviembre de 1994. DESCRIPCIÓN DEL CASO Características del piloto, de la misión y ambientales.- El piloto tenía 30 años, medía 189 cm de estatura y pesaba 95 kg. Llevaba destinado en la Unidad 18 meses, con una experiencia de 1.000 horas de vuelo, de las cuales, 200 correspondían al F-1, la aeronave del Ala 14. La misión programada consistía en una interceptación aérea, en un día claro y despejado a un nivel inferior a 30.000 pies. El vuelo fue visual. 279 Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 Descripción.- El piloto, durante la misión, debía cruzar unas nubes. Penetró en ellas mirando al radar y comprobó que se aproximaba a su compañero (en otro avión) en sentido ascendente. Aunque estaba en los límites de seguridad, en ese momento cedió palanca (dirigió el avión hacia abajo). Súbitamente, sintió que volaba en posición invertida. Y a pesar de que el cuadro de mandos le indicaba lo contrario, notó un fuerte impulso a rotar el avión 180º. Impulso que dominó, conectó el piloto automático y comentó por radio la interrupción momentánea de la misión. Cuando el avión salió de nubes y el piloto recuperó la referencia visual externa, el cuadro desapareció. A los 4-5 minutos del comienzo de la DE, el piloto recuperó la confianza y pudo concluir la misión. Al aterrizar sin novedad comentó el hecho como incidente y se lo comunicó al Médico de Vuelo de la Unidad. Sensaciones del piloto.- El piloto describió la experiencia con auténtico terror. No podía creer que él estuviese en vuelo invertido y el panel de instrumentos le indicara lo contrario. Su intensa sensación era que éste estaba averiado. Sin embargo, recordó que esta situación podía suceder y obró correctamente. Estaba convencido que el cuadro no hubiera sucedido si él no hubiera cedido palanca sin ninguna referencia visual, tanto del panel de instrumentos como del exterior. Igualmente creía que de haber entrado en nubes mirando a horizonte artificial, tampoco habría ocurrido el incidente. Antecedentes del piloto.- En la historia realizada al piloto, éste no reflejó ningún dato de riesgo para sufrir la DE. Su vida habitual no había experimentado cambios especiales, las horas de sueño no fueron diferentes a las de otros días, su vida familiar y social no había presentado ningún altibajo, las relaciones laborales no eran distintas a otras ocasiones, el desayuno fue correcto y no había tomado ninguna medicación. DISCUSIÓN El caso corresponde a una DE de tipo II, es decir, existe un importante conflicto entre lo que el piloto siente y lo que los instrumentos le dictan, con solución favorable del problema1. Puede encuadrarse como ilusión somatográvica, dependiente del órgano otolítico, denominada “Inversión gravitoinercial”6. Nos hallamos ante un piloto experimentado, sin factores de riesgo para DE, lo que apoya el que la DE puede aparecer en cualquier piloto, independientemente de su experiencia. Sí, sin embargo, aparecen como desencadenantes los dos puntos que el propio piloto identificó como causa: entrar en nubes observando el radar y ceder palanca. Desde el punto de vista de la prevención nos queda insistir en el importante problema que la DE representa para la Seguridad de Vuelo. Aparte de factores como los dependientes de la aeronave (instrumentación y aspectos ergonómicos), operacionales y humanos (selección del piloto, aptitud psicofísica, medicación y entrenamiento)6,7, podemos resumir que la más importante herramienta del piloto es tener conciencia de que la DE puede suceder, conocer sus causas y lo que se puede hacer para prevenirlas como: conocimiento de las propias limitaciones, corregir factores que pueden solucionarse, utilizar adecuadamente las propias aptitudes, conocer las situaciones de alto riesgo y permanecer alerta8. De este modo, lograremos que el piloto sepa, como en nuestro caso, que en determinadas circunstancias sus sentidos pueden engañarle y guiado por las enseñanzas teóricas, entrenamiento y conocimiento, pueda vencer las diferentes situaciones adversas y contarlas con el objeto de evitar nuevos incidentes y/o accidentes. Agradecimiento: Al Dr. Carlos Velasco Díaz, Diplomado Superior en Medicina Aeroespacial (CIMA), por sus acertadas apreciaciones. BIBLIOGRAFÍA 1. Ríos F. Integración de aferencias sensoriales: Desorientación espacial e ilusiones. En: Velasco C (ed.). Medicina Aeronáutica. Actuaciones y Limitaciones Humanas. Madrid: Paraninfo, 1995; 101-111. 5. Salinas JC, Velasco C. Desorientación Espacial en Vuelo. Aspectos Médicos. Revista de Aeronáutica y Astronáutica 1988; febrero: 195-203. 2. Benson AJ. Spatial disorientation-general aspects. En: Ernsting J, King P (eds.). Aviation Medicine. Oxford: Butterworth, 1994; 277-296. 6. Ríos F, Cantón JJ, Alonso C, Valle del JB, Velasco C, Velamazán V. Conceptos básicos de la desorientación espacial en el vuelo. Med Mil (Esp) 1992; 48: 267-276. 3. Knapp CJ, Johnson R.. F-16 Class A mishaps in the U.S. Air Force, 1975-93. Aviat Space Environ Med 1996; 67: 777-783. 7. Benson AJ. Spatial disorientation-common illusions. En: Ernsting J, King P (eds.). 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La severidad de las lesiones a nivel del Oído Medio osciló desde mínimos cambios en la membrana timpánica hasta un caso de hemotímpano. A diferencia de los casos habituales de Barotitis Media que ocurren en personas con problemas de permeabilidad de la Trompa de Eustaquio, este caso ocurrió en personas sanas con un grado permeabilidad de la Trompa normal. Consecuencia de este hecho no observamos ningún caso de retracción de la membrana timpánica, debido a que todos los pasajeros observados habían repermeabilizado la Trompa tras la exposición a los cambios de presión que ocurrieron durante el vuelo . Dos de los cinco casos ocurrieron en niños dada su especial susceptibilidad a padecer estos cuadros. No encontramos inconveniente en que los casos más leves prosiguieran vuelo, dado que la Trompa era Permeable. We present a communication of five cases of Middle Barotitis attended in our Service on 3 rd August 1999 as a result of a failure in the cabin pressurization system of Flight 631, with 139 passengers flying to Madrid. The degree of the damages to the Middle Ear ranged from minimun changes in the eardrum to a case of hemotympanum. Unlike common cases of Middle Barotitis that affect individuals with permeability disorders in the Eustachian Tube, this case affected healthy individuals with normal degree of permeability. Hence, we did not notice any cases of eardrum retraction as the Eustachium of all the passengers examined repermeabilized again after exposure to the pressure chages ocurred during the flight. Two of the five cases affected children since they are particularly prone to develop these patologies. We saw no reason why the passengers with minor damages would not continue their journey in view of the permeability of the Eustachian Tube Palabras Clave:Barotis Media, Barosinusitis, Trompa de Eustaquio, Sistema de Presurización de Cabina. 1.- INTRODUCCIÓN E l pasado 3 de Agosto de 1999, un avión MD 82 con 139 pasajeros a bordo despegó del Aeropuerto de Bilbao con destino a Madrid a las 7:56 horas locales. Doce minutos mas tarde, el comandante de la aeronave Correspondencia: Alfredo Goitia Gorostiza Servicio Médico del Aeropuerto de Bilbao Teléfono 94 – 486 93 59 / 60 Telefax 94 – 486 92 13 Email bio.agoitia@aena.es Recibido el 4.10.99 Key Words: Barosinusitis, Cabin Pressurization System, Eustachian Tube, Middle Barotitis. comunicó a la TWR de este aeropuerto su intención de regresar al mismo, por presentar un fallo en el sistema de presurización, cuando se encontraba a una altura de 12.000 pies (4.000 m. aprox.), a 20 millas del VOR Bilbao, en el radial 183. El avión aterrizó en este Aeropuerto a las 8:18 horas locales, tras 22 minutos de vuelo. Como consecuencia del fallo de presurización de la cabina de pasajeros, estos se expusieron a una presión atmosférica de aproximadamente 500 mm Hg, alcanzándola en aproximadamente 8 minutos tras el despegue. La Presión Parcial de O2 que a nivel del mar es de 160 mm de Hg (y que permite alcanzar una Presión Arterial de O2 de 95 mm de Hg), es a este nivel de vuelo de tan solo 281 Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 100 mm de Hg (que solo permite alcanzar una Presión Arterial de de O2 de 70 mm de Hg). A este nivel la actividad compensadora de los aparatos respiratorio y cardiovascular hacen que esta disminución tenga un mínimo efecto sobre personas sanas1. 2.- CASOS APORTADOS Como consecuencia de los bruscos cambios de presión que acontecieron en el interior de la aeronave durante el corto vuelo, se atendieron en nuestro Servicio a cinco pasajeros que presentaban diversos grados de Barotitis y Barosinusitis. El primero de ellos, un varón de 34 años, que volaba a la República Dominicana vía Madrid en viaje de novios, sufrió un cuadro de Barotitis Media y Barosinusitis Bilateral de carácter moderado, fue visto en nuestro Servicio 27 minutos tras el aterrrizaje. A pesar de lo cual decidió continuar el viaje. El segundo de ellos, una mujer de 32 años, que volaba a Madrid en viaje de trabajo, sufrió un cuadro de Barotitis Media en oído izquierdo de carácter leve, fue vista en nuestro Servicio 30 minutos tras el aterrizaje del avión. Por la levedad del cuadro no se le desaconsejo el vuelo. El tercero, una mujer de 39 años, que volaba a Lanzarote vía Madrid, en viaje de vacaciones, sufrió un cuadro de Barotitis Media en oído derecho con cambios timpánicos mínimos (ingurgitación vascular de la membrana), fue vista en nuestro Servicio una hora y siete minutos después de que aterrizara el avión. Por la levedad del cuadro no se le desaconsejo el vuelo. El cuarto, un niño de 12 años, que volaba a Lanzarote vía Madrid, en viaje de vacaciones, sufrió un cuadro de Barotitis Media de carácter leve en oído izquierdo, fue visto en nuestro Servicio una hora y siete minutos después de que aterrizara el avión. Por la levedad del cuadro no se le desaconsejo el vuelo. El quinto, una niña de 8 años, que volaba a Palma de Mallorca vía Madrid , en viaje de vacaciones, sufrió un cuadro de Barotitis Media con Hemotímpano de carácter severo en oído derecho, fue vista en nuestro Servicio dos horas y doce minutos después de que aterrizara el avión. Por la severidad del cuadro se le desaconsejo el vuelo. 3.- DISCUSIÓN La Trompa de Eustaquio se permeabiliza con cada deglución, lo que ocurre durante la vigilia cada 40 segundos aproximadamente y durante el sueño cada cinco minutos2. La educación sanitaria hizo que muchos de los pasajeros de este vuelo bostezaran, tragaran o realizaran algún otro tipo de maniobra con objeto de permeabilizar la trompa cuando notaron "sensación de oído taponado" o alguna otra molestia auditiva. Si consideramos que el ascenso de la aeronave fue mantenido durante los ocho minutos que duró, la presión descendió a razón de 32 mm de Hg por cada minuto. Además, si tenemos en cuenta que diferencias de presión entre el oído medio y el aire ambiente superiores a FILIACION CASO 1 2 3 4 5 DIAGNOSTICO ANTECEDENTES MÉDICOS Barotitis Media y Barosinusitis Bilateral Barotitis Media OI Leve Barotitis Mínima Barotitis Media OI Leve Barotitis con Hemotímpano OD EDAD SEXO 34 32 39 12 8 Varón Mujer Mujer Varón Mujer Sin interés para el caso Sin interés para el caso Sin interés para el caso Asmático Sin interés para el caso SINTOMATOLOGIA CASO PREVIA AL DESPEGUE FASE ASCENSO 1: Barotitis y BaroSinusitis 2: Barotitis Leve 3: Barotitis Mín. 4: Barotitis Leve 5:Hemotímpano Asintomático Oído Taponado Dolor OD, OI Dolor Frontal Oído Taponado Molestias OI Oído Taponado Molestias OD y OI Oído Taponado Dolor franco en OI Asintomático Dolor intenso en OD 282 Asintomático Asintomático Asintomático Asintomático FASE DESCENSO MEDIDAS EN VUELO TRAS EL ATERRIZAJE Maniobra de Valsalva Ninguna Ninguna Ninguna Tragar Saliva y Abrir la Boca Molestias OD y OI Asintomático Asintomático Asintomático Oído Taponado Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 OTOSCOPIA Y TRATAMIENTO CASO TIEMPO ATENCIÓN OTOSCOPIA TRAS EL VUELO VUELO NO Si 1:BarotitisBaroSinusitis 27´ OD: Tímpano hemorrágico, no retraído OI: Tímpano algo menos hemorrágico, no retraído Antihistaminico vía oral + Gotas Óticas (Corticoide+Antibiótico) 2:Barotitis Leve 30´ OD: Normal OI: Tímpano Eritematoso, no retraído Gotas Óticas (Corticoide+Antibiótico) OD; Ingurgitación Vascular OI: Normal No Precisa 3:Barotitis Mínima 1h 7´ No No 4:Barotitis Leve 1h 7´ OD: Normal OI: Tímpano Eritematoso con pequeñas hemorragias. No retraído Gotas Óticas (Corticoide+Antibiótico) 5:Hemotímpano 2h 12´ OD: Tímpano discretamente abombado que deja ver derrame hemorrágico OI Normal Retirada de tapones para SI visualización de la membrana timpánica. Remisión a ORL 60-80 mm de Hg impiden la permeabilización de la trompa durante periodos mas o menos prolongados, incluso con la realización de maniobras activas como la práctica de la maniobra de Valsalva2. Nos encontramos en la encrucijada de que en dos minutos la presión descendió en el interior de la aeronave en 64 mm de Hg, cifra límite para obliterar la trompa de manera duradera. Considerar, además, que las últimas fases de descenso en vuelo instrumental tienen un régimen inferior al que siguió la aeronave durante el ascenso, por la pendiente marcada por el ILS (que en el Aeropuerto de Bilbao es de 3,4 grados3, pendiente que este avión abordó prácticamente desde el principio del descenso, dada su altura de vuelo). Por lo que podemos concluir que la fase de descenso fue más gradual que la de ascenso, y por lo tanto la presión fue aumentando de una manera más progresiva. Fig. 1: Régimen de Ascenso y Descenso de una Aeronave durante las maniobras de Despegue y Aterrizaje. No A pesar de todo ello, todos los pasajeros consiguieron repermeabilizar la trompa (no encontramos en ningún caso retracción de la membrana timpánica), lo que indica que en ningún caso se alcanzó la presión diferencial indicada (60-80 mm de Hg) capaz de sellar la trompa de una manera prolongada. Hecho muy frecuente en las Barotitis habituales, que ocurren en personas con procesos en vías respiratorias altas4. Esta singularidad ha cambiado parcialmente nuestra actitud terapéutica, en el aspecto en que no fue necesario administrar medicación para repermeabilizar la trompa de Eustaquio4. La niña que presentó el cuadro de Barotitis Media con Hemotímpano fue remitida al ORL y no prosiguió el viaje. Solo se administró antihistamínicos orales en un caso, puesto que el pasajero en cuestión presentaba daños a nivel del tímpano y posiblemente también a nivel de la trompa, al desear el mismo continuar el viaje, a pesar de nuestra recomendación para que no lo hiciera. En el resto de los casos no vimos inconveniente en que estos pasajeros continuasen el vuelo, tres horas mas tarde, una vez que el problema del sistema de presurización de la aeronave fue solucionado. Ya que los mismos presentaron daños timpánicos mínimos, la trompa era permeable y no presentaban sintomatología de ningún tipo. En cuanto a las lesiones observadas, estas se originaron como consecuencia de la tensión que sufrió la mem- 283 Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 Fig. 2: Posición de la Membrana Timpánica durante las fases de Ascenso y Descenso de una Aeronave cuando no la Trompa de Eustaquio no es permeable brana timpánica a consecuencia del aumento/disminución del volumen del aire encerrado en la caja del tímpano (hasta un máximo de 1,5 veces el volumen que tenía inicialmente)5, durante las fases de ascenso y descenso de la aeronave respectivamente. Dos de los cinco casos se produjeron en niños (8 y 12 años). Esta especial susceptibilidad a sufrir Barotitis Media queda recogida en la literatura clásica, y cuya explicación se atribuye a una característica disposición de la trompa de Eustaquio en la infancia6. BIBLIOGRAFIA 1.- Ríos F, Azofra JA. Aspectos Aeromédicos de los viajes por vía aérea. Med Aer Amb (Mad) 1994. 1 (1):16-22. 2.- Wooldridge WE. Medical complications of air travel. Who is at risk?. Postgrad Med 1990. 87(7): 75.82. 3.- Dirección General de Aviación Civil. Aviation Information Publication. Revisión de Datos para el Aeropuerto de Bilbao de Abril de 1999. 284 4.- Goitia A, Estellés AV, Aguirre J, et al. Revisión de 137 casos de Disbarismo. Med Aer Amb (Mad) 1999. 5(II): 221-227. 5.- Nieto Boqué M. Disbarismos. En Vida Humana y Espacio. JIMS. Barcelona 1965. 6.- Hanna HH, Yarington CT. Otolaryngology in Aerospace Medicine. En Fundamentals of Aerospace Medicine. De Hart RL (ed). Lea and Febiger. Philadelphia 1985. Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 Comunicaciones Med. Aeroesp. Ambient. 1999; 6: 285-293 Symposium Nacional de Medicina Aeroespacial. Resúmenes de ponencias y comunicaciones libres LIMITACIONES MEDICAS EN AUTORIZACIONES DE TRANSPORTE DE PASAJEROS ENFERMOS EN LINEAS AEREAS COMERCIALES JOSÉ MARIA PÉREZ SASTRE Servicio Médico Iberia Madrid/Barajas jmperez@iberia.es Las líneas aéreas comerciales tienen como objetivo el transporte de personas y materiales en condiciones seguras, rápidas y económicas. Cuando se trata de transportar enfermos o personas con capacidad psico-física reducida, generalmente hay dos grupos. Aquellos en los que la incapacidad o enfermedad son incidentales al propio viaje, y aquellos otros en los que el viaje es fundamental para obtener tratamiento o diagnóstico especializado. La mayoría de los que viajan en vuelos comerciales pertenecen a la primera categoría, son pasajeros estables pero con enfermedades o limitaciones médicas. Además de los aspectos comerciales, deben tenerse en cuenta aspectos operacionales fuera del control de la compañía, como el handling, aduanas o facilidades aeroportuarias. Cada compañía tiene el derecho a decidir si vuela o no vuela tal pasajero en dichas circunstancias, y esa decisión se toma tras el consejo especializado del departamento médico. El doble objetivo de evitar el agravamiento del pasajero debido a las especiales condiciones del vuelo y evitar las molestias que se puedan producir a pasajeros sanos que vuelan en el mismo avión, hace necesario conocer las peculiares condiciones en las cabinas de vuelos comerciales y como éstas van a afectar a pasajeros con distintas patologías. A lo largo de esta presentación se mostrarán las limitaciones médicas más importantes para poder realizar autorizaciones a pasajeros enfermos en vuelos comerciales de transporte de pasajeros. Symposium Nacional de Medicina Aeroespacial. Palma de Mallorca. 5 y 6 de noviembre de 1999. N. de la R.: en próximos números se publicarán los trabajos originales. PASAJEROS DE AVION CON MOVILIDAD LIMITADA DR. RAMON DOMINGUEZ-MOMPELL Servicio Médico Iberia Iberia como tantas compañías aéreas pone a disposición de sus clientes y de la clase médica un servicio que facilita el transporte de pasajeros con movilidad limitada. Dentro de este epígrafe de movilidad limitada, habría que subdividir los diferentes casos que se presentan entres grandes apartados. 1º Casos No médicos. 2º Casos Médicos. 3º Casos que no pueden volar. La clasificación anterior es dinámica; ya que un caso determinado puede evolucionar hacia cualquiera de los otros dos estados. Para delimitar los casos y dar un mejor servicio tanto al pasajero con la limitación como a los pasajeros que no la tienen; las compañías aéreas exigen que los pasajeros que se encuentren en una situación médicamente declarable, movilidad limitada, deben de rellenar un documento oficial llamado el IATA MEDIF 1 & 2. EI MEDIF consta de dos partes. Dependiendo de los casos médicos será obligatorio rellenar la parte 1 o la 1 y la 2 y aveces con todo se denegará el permiso para que el potencial viajero enfermo sea autorizado a volar. TRANSPORTE SANITARIO AEREO EN AVION-AMBULANCIA BARTOMEU MUNAR Con esta ponencia se pretende dar a conocer el servicio de traslado de enfermos en las Illes Balears en estos últimos 20 años. Dicho traslado se ha realizado con aviones preparados como ambulancias, al disponer las Islas de buenos aero- 285 Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 puertos y siendo el medio de transporte más rápido y mejor para el enfermo. Durante estos 20 años, los modelos utilizados han sido: Turbo-Comanders, Islander, Cessna. Todos pertenecientes a Ambulancias Insulares. Con personal médico formado, con experiencia y aparataje adecuado. La operatividad del servicio es de 24 h. Los 365 días del año, con médico, piloto y copiloto localizados por busca. Tiempo de respuesta 30-45’. Los servicios son secundarios de hospital a hospital. Hasta la fecha se han realizado alrededor de 7.000 vuelos. Cuyos orígenes en 3/4 partes han sido Menorca e Ibiza y destino mayoritario Palma. Haciendo un estudio de los últimos 1445 vuelos, podemos conocer unos datos, como patologías, edades, complicaciones más frecuentes…, que nos dan una visión del servicio realizado hasta el momento. Como patologías destacan las cardio-vasculares y las Neuroquirúrgicas, en las edades predominan algo más los pacientes mayores aunque hay de todas y en complicaciones durante el vuelo, muy pocas. El médico durante el vuelo únicamente tiene la función de observar y vigilar al enfermo, ya que la primera condición del traslado es la estabilización del enfermo. No debemos convertir el avión en un Hospital. ¿El futuro Helicóptero? Para primarios sí que son indicación si se preparan al respecto los diferentes Hospitales, para secundarios las condiciones creemos que son más idóneas en AviónAmbulancia. PROBLEMAS RESPIRATORIOS EN EL TRANSPORTE AEREO DR. F. RIOS TEJADA, DR. C. VELASCO DIAZ, DR. J.A. AZOFRA CIMA. Arturo Soria, 82. 28027 Madrid. Tel. 91-4084028, Fax: 91-4084027 La patología cardiopulmonar supone hasta el 40-60% de las incidencias médicas a bordo de aeronaves comerciales. La identificación de los potenciales riesgos que puedan plantearse antes del inicio del viaje es fundamental en el momento de planificar el mismo. Desde esta perspectiva se plantean los medios de valoración objetiva más adecuados a su valor predictivo y pronóstico en determinada patología cardiorespiratoria. Además se revisan los medios que como soporte terapéutico se consideran más adecuados para el control del paciente respiratorio subsidiario de oxígenoterapia. Finalmente se describen los factores inherentes al medio (característicos de la cabina de pasaje) y los condicionantes medioambientales secundarios al desplazamiento por vía aérea (aeropuertos, fobia al vuelo, ansiedad, stress, jet-lag, esperas, experiencias previas). 286 ALTERACIONES DEL SUEÑO EN PERSONAL DE VUELO Y EN REGIMEN DE JORNADA A TURNOS F. CAÑELLAS, A. COLOM, L. MONSERRAT, L.R. MAYORALAS, E. JUAN El sueño es un estado activo durante el cual se producen cambios metabólicos y hormonales imprescindibles para el mantenimiento de una buena vigilia. En condiciones normales el cuerpo está preparado para dormir durante la noche y estar despierto durante las horas de luz, con un ritmo de 24 horas. Si no se duerme bien o no lo suficiente durante la noche, la persona se encuentra irritable, con pérdida de memoria, malhumor, falta de concentración y fatiga durante el día. La fatiga produce una disminución del estado de alerta y si existe relajación aparece la somnolencia. Las alteraciones del sueño más frecuentes que se producen en las personas que tienen un trabajo a turnos o que realizan vuelos transmeridianos son las alteraciones del ritmo circadiano. Estas se manifiestan con dificultades para dormir durante las horas en que el sujeto podría hacerlo y cansancio, somnolencia durante las horas de vigilia. Las consecuencias de estas alteraciones serán sueño insuficiente, fatiga, disminución del rendimiento en el trabajo, mayor riesgo de sufrir accidentes laborales y de tráfico, etc. La prevención de estos trastornos no es fácil, sin embargo, se pueden dar algunos hábitos higiénicos y tratamientos farmacológicos que permitirán mejorar la calidad de vida de las personas que lo padecen. SINDROME DE APNEA DEL SUELO A. COLOM, F. CAÑELLAS, L.R. MAYORALAS, L. MONSERRAT, E. JUAN El síndrome de apneas del sueño es una patología frecuente, la padecen el 4% de los varones y el 2% de las mujeres de la población general. Apnea se define como la detención del flujo aéreo nasobucal de una duración superior a 10 segundos. Existen tres tipos de apneas: central, mixta y obstructiva, siendo esta última la más frecuente. Y se origina al producirse un colapso en la vía aérea superior. Se considera que un paciente sufre el síndrome de apnea-hipopnea de suelo (SAS) cuando el nº de eventos respiratorios es superior a 10 por hora de sueño. Los síntomas más frecuentes son: Ronquidos intensos asociados a apneas, mala calidad de sueño con despertares frecuentes, hipersomnolencia diurna, cefalea matinal, disminución de las capacidades cognitivas, etc. Los pacientes afectos de SAS son más propensos a padecer enfermedades cardiovasculares y de sufrir más accidentes de tráfico y laborales que la población general. El diagnóstico se basa en la historia clínica y se confirma en la unidad de sueño mediante la realización de un registro poligráfico de sueño nocturno. Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 Se han postulado distintos tratamientos, desde medidas higiénico-dietéticas en los casos leves, a tratamientos quirúrgicos, actualmente el tratamiento de elección es la CPAP (presión positiva continua por vía nasal). SISTEMA DE VALORACION Y TRANSFERENCIA DE INFORMACION ANTE EMERGENCIAS MEDICAS EN VUELO ALFREDO GOITIA GOROSTIZA. Médico de Empresa y Aeroportuario Servicio Médico. Aeropuerto de Bilbao. Ctra. Asua-Erletxes s/n. 48150 - Sondika e-mail: bio.agoitia@aena.es La experiencia acumulada en los Servicios Médicos Aeroportuarios a los que pertenecemos, con motivo de situaciones de emergencia médica ocurridas en vuelo, nos indica que en la mayoría de las ocasiones la información que recibimos y que transferimos es, generalmente, poco adecuada para valorar la importancia de la emergencia médica que se está desarrollando en la aeronave. Esto dificulta, o incluso puede impedir, la asignación óptima de los recursos sanitarios necesarios, influyendo negativamente sobre el sufrimiento y pronóstico del enfermo. El problema es múltiple ya que la Tripulación de Vuelo, responsable de transmitir la información a Control (ACC/TWR), no ve físicamente al enfermo. Habitualmente se limita a comunicar aquello que la Tripulación Auxiliar (TCPs) le ha informado. La situación se complica dado que frecuentemente este tipo de incidencias origina el aterrizaje prematuro de la aeronave, momentos en los que tanto Piloto como Copiloto deben dedicar toda su atención al control de la maniobra de aproximación y aterrizaje en aeropuertos que, en ocasiones, no son el de destino. Con el objeto de obtener la información más relevante de la emergencia médica, minimizar el deterioro de esta información en su proceso de transferencia y permitir la respuesta más adecuada conforme a los medios disponibles, hemos ideado un sistema de valoración y transferencia de información mediante unas tarjetas que recogen los cinco parámetros más importantes que pueden ser recogidos por el TCP a bordo de la aeronave en vuelo. ESTUDIO ETIOPATOGENICO DE LA LUMBALGIA EN LOS PILOTOS DE HELICOPTERO DRA. PILAR VALLEJO DESVIAT, DR. JOSÉ ANTONIO LOPEZ LOPEZ, DR. FRANCISCO RIOS TEJADA, DR. RODRIGO JIMÉNEZ GARCIA INTRODUCCION La lumbalgia es un problema muy importante en los pilotos de helicóptero. El principal factor etiológico es la mala postura que el piloto mantiene durante el vuelo. El asiento y la configuración de los mandos de la mayoría de los helicópteros, le obligan a mantener una postura asimétrica durante largos periodos de tiempo. En este trabajo se ha estudiado, con un método objetivo, la asimetría de esta postura. MATERIAL Y METODO Se comparó la actividad muscular lumbar, derecha e izquierda, de 35 pilotos durante un vuelo real, utilizando un electromiógrafo de superficie. RESULTADOS 32 sujetos (91%) presentaron mayor actividad derecha respecto a la izquierda. Teniendo en cuenta únicamente la actividad muscular del lado derecho, medida en porcentaje respecto al izquierdo, 3 pilotos (9%) tuvieron un porcentaje por debajo del 50%, es decir, predominó la actividad del lado izquierdo; 9 pilotos (26%) tuvieron un porcentaje entre 51-60%; 18 pilotos (51%) tuvieron un porcentaje entre 61-70%; 3 pilotos (9%) entre 71-80% y 2 (6%) por encima de 81. Al comparar estos valores con el resto de las variables no encontramos ninguna relación estadísticamente significativa salvo con la duración del vuelo (p<0,05). CONCLUSION El piloto de helicóptero cuando vuela y mientras está controlando los mandos de la aeronave, mantiene una postura asimétrica que es posiblemente la principal causa de la lumbalgia que la gran mayoría sufre durante el vuelo. Esta asimetría en la postura se pone más de manifiesto cuanto más dura el vuelo. VALORACION DE LA UTILIZACION DE UN VENTILADOR VOLUMETRICO EN CONDICIONES HIPOBARICAS. METODOLOGIA DE UN MODELO EXPERIMENTAL J.A. LOPEZ LOPEZ*, A. HERNANDEZ ABADIA**, M. PRADAS SEGOVIA*, F. RIOS TEJADA* * C.I.M.A. ** Jefe de U.C.I. Hospital Militar de Ceuta. INTRODUCCION La aplicación de la tecnología actual a los medios más modernos de transporte aéreo de enfermos, nos invita a buscar y desarrollar métodos que nos faciliten el mayor conocimiento y perfeccionamiento de los avances en esta materia. La Ventilación Mecánica Controlada nos permite el transporte aéreo de pacientes en estado crítico con garantías, pero no siempre podemos prever todos los factores ambientales que nos rodean. La disposición del ma- 287 Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 terial apropiado para la simulación del ambiente hipobárico nos ha llevado a desarrollar un método objetivo experimental de observación del comportamiento de un aparato, en este caso de un ventilador volumétrico, utilizado actualmente en las aeroevacuaciones. MATERIAL Se ha realizado en la Cámara Hipobárica situada en el Centro de Instrucción de Medicina Aeroespacial (C.I.M.A.) un perfil de vuelo en el que se ha ascendido y descendido escalonadamente entre los 680 metros y los 10.000 metros. El Ventilador Mecánico Volumétrico utilizado es de los que ciclan por flujo en función del tiempo, y nos permite hacer las mediciones de la mecánica ventilatoria a tiempo real. Se realizan los vuelos utilizando animales de experimentación, en este caso de raza canina, a los que se ha mantenido en todo momento con monitorización cardiaca y respiratoria. METODO Preparado el animal de experimentación bajo anestesia general, con monitorización cardiorespiratoria (electrocardiograma continuo, frecuencia cardiaca y respiratoria, y Saturación de O2) se conecta al ventilador mediante intubación orotraqueal. El ventilador se programa de acuerdo a la Capacidad Vital del animal y se conecta a una Bala de Oxígeno Medicinal como fuente de gases. Una vez hecha la descompresión en tierra, se realizan 16 paradas escalonadas en ascenso hasta los 10.000 metros, y otras 6 en descenso hasta el nivel de tierra. Cada parada es utilizada para constatar el correcto estado del animal y para realizar las mediciones de su función cardiaca (frecuencia y estabilidad del ECG) y función respiratoria (frecuencia, Volumen Corriente, Presión en Vía Aérea, Pulsioximetría y perímetro torácico). CONCLUSIONES La actuación con rapidez en un perfil de vuelo escalonado en una cámara de baja presión ofrece seguridad en las pruebas así como un método útil y aplicable a la experimentación con aparatos, o acerca de ellos, en ambiente hipobárico. IMPORTANCIA DE LA ENTREVISTA A TESTIGOS Y SUPERVIVIENTES EN LA INVESTIGACION DE ACCIDENTES E INCIDENTES AEREOS DRA. BEATRIZ ESTEBAN BENAVIDES, DR. FRANCISCO RIOS TEJADA. de seguridad de vuelo. Su finalidad consiste en reunir y analizar todos aquellos datos, hechos, condiciones y circunstancias que rodearon al suceso para intentar determinar las causas que lo provocaron y extraer conclusiones aplicables en materia de prevención. Su objetivo, por tanto, prevenir futuros accidentes e incidentes y de esta forma evitar o minimizar, en la medida de lo posible, la pérdida de vidas humanas y daños personales y materiales. La investigación puede ser más o menos compleja dependiendo de las características específicas del accidente o incidente, abarcando múltiples áreas o disciplinas siendo por tanto indispensable, como en cualquier estudio técnico, seguir una estructura definida, organizada y sistematizada con el fin de alcanzar los objetivos propuestos. Dentro del esquema general establecido en la investigación de estos sucesos un área que consideramos importante y no lo suficientemente analizada es la entrevista a supervivientes y testigos de los hechos. Una entrevista adecuadamente realizada puede aportar una valiosa información en las tareas de investigación en tanto que una entrevista incorrectamente manejada puede conducir a la obtención de datos inexactos, erróneos, confusos e incluso a la pérdida de dicha información. Nuestro propósito, por ello, es remarcar la importancia de la entrevista en las labores de investigación estableciendo sus objetivos, aspectos que debieran ser tenidos en cuenta en su realización así como el proponer un esquema general de desarrollo de la misma con el fin de complementar de forma adecuada el resto de áreas de la investigación. NORMATIVA EQUIPAMIENTO SANITARIO EN AERONAVES DE TRANSPORTE DE PASAJEROS DR. ÁLVARO HEBRERO ÓRIZ, DRA. MARGARITA CASASAYAS LADARIA De todos es sabido que cada vez volamos más, a todas las edades y no siempre en adecuadas condiciones de salud; es por ello que durante el vuelo pueden aparecer dolencias médicas más o menos importantes. En nuestra exposición comentaremos las distintas disposiciones sobre los equipamientos sanitarios de las aeronaves dedicadas al transporte de pasajeros; normativas o recomendaciones que en algunos puntos son coincidentes y en otros pueden ser temas de debate por las contradicciones que presentan. Analizaremos los distintos tipos de botiquines, sus características, su composición, su uso y el número de los mismos que deben llevarse a bordo. INCIDENCIAS MEDICAS EN PASAJEROS DE LINEAS AEREAS Centro de Instrucción de Medicina Aeroespacial (C.I.M.A.). BARTOLOMÉ POL PUJOL. La investigación de accidentes e incidentes aéreos se ha revelado como una tarea útil e importante en materia Durante los últimos años el número de pasajeros por vía aérea ha seguido un crecimiento constante a nivel 288 Sanidad Aeroportuaria Aena. Médico Examinador Aéreo. Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 mundial, consecuentemente el volumen de incidencias médicas se ha incrementado. Las previsiones de la Organización Internacional de Aviación Civil son para este año un aumento cercano al 4%, un 5% para el año 2000 y de un 6% para el año 2001. En general en las patologías observadas en los usuarios del transporte aéreo no presenta grandes diferencias ni en incidencia ni en prevalencia de las que puedan sufrir el resto de la población; no obstante, cabe destacar que, debido a ciertas peculiaridades que se dan en este campo (factores potencialmente estresantes, retrasos, desconocimiento del medio, etc.), existe mayor número de problemas cardiovasculares y relacionados con respuestas de ansiedad. Es importante señalar que tanto en los aeropuertos como en vuelo, cualquier dolencia de carácter leve sufrida por un pasajero puede convertirse en una llamada de urgencia que moviliza de forma inadecuada los recursos disponibles. Tomando como muestra el aeropuerto de Palma de Mallorca durante el período comprendido entre 19911998 se ha efectuado un estudio del que se obtienen qué incidencias de tipo médico se detectan en los pasajeros de líneas aéreas y cuál es la problemática que plantean tanto a bordo de las aeronaves como en aeropuertos, así como las posibles formas y procedimientos de resolverlas. TECNICAS DE ENFERMERIA EN URGENCIAS EN AERONAVES J. LUIS MARTI SEGOVIA. D.U.E. Sanidad Aeroportuaria Aena. MARGARITA SASTRE BONET. D.U.E. Hospital Son Dureta. CONCEPCION SALOM JUAN. D.U.E. Urgencias 061. JOSÉ MARTINEZ BOIX. D.U.E. Hospital General. Las técnicas y procedimientos de Enfermería en urgencias producidas en aeronaves plantean una serie de problemas debido al espacio físico y ambiente en donde se desarrollan. Para la presentación de esta ponencia se ha dividido en cinco partes que tratarán de los siguientes aspectos: - Estadística, casos, repercusión de las incidencias en el conjunto de las urgencias y emergencias (tipos de aeronaves, recuento de casos, explicación de algunos por su gravedad). - Técnicas comunes de enfermería aplicadas a incidencias en el interior de aeronaves. - Técnicas especiales de enfermería de aplicación en el interior de las aeronaves. - Extracción de pasajeros enfermos del interior de aeronaves (utillaje, técnicas). - Problemas que se plantean al realizar las técnicas descritas debido al medio. - Posibles soluciones. WPW, ABLACION Y MEDICINA AERONAUTICA DR. CARLOS VELASCO DIAZ. C.I.M.A. Con relativa frecuencia encontramos en los reconocimientos médicos de personal de vuelo algún síndrome de preexcitación, entre ellos el más frecuente y conocido el Wolf-Parkinson White, caracterizado por una serie de alteraciones electrocardiográficas -PR corto (<0.12 segundos), onda delta, complejo QRS ancho- asociadas a una taquicardia paroxística. Las alteraciones electrocardiográficas sin taquicardia se conocen como situaciones de preexcitación. Se calcula una incidencia de dichas alteraciones ECG en un 0,25% de los individuos asintomáticos, con un riesgo de taquiarritmias en torno al 2%. Palpitaciones de comienzo y fin bruscos, sensación de falta de aire, molestias pecordiales, mareo o incluso síncope, pueden aparecer en algunos casos, especialmente cuando la taquicardia supera los 170 lpm. El mecanismo de producción es la existencia de una vía de reentrada constituida por bandas de múculo auricular que pueden encontrarse en cualquier zona alrededor de los anillos del nodo auriculo-ventricular (AV). Las derivaciones AV pueden asociarse a algunas malformaciones congénitas (ej. anomalía de Ebstein). Estas vías accesorias pueden conducir el impulso eléctrico anterógradamente llevando a una activación ventricular precoz que queda reflejada en las alteraciones ECG mencionadas. Más del 60% de las taquicardias supraventriculares paroxísticas son taquicardias por reentrada a nivel del nodo auriculo-ventricular. Cuando la frecuencia ventricular alcanza los 300 lpm el desenlace puede ser una parada cardiaca o una muerte súbita. El riesgo de incapacitación brusca de un individuo con un síndrome WPW es por lo tanto real y en consecuencia motivo de preocupación en medicina aeronáutica. La presente comunicación analiza la postura médicoaeronáutica en relación con este problema, valorando especialmente las técnicas de ablación por radiofrecuencia, y presenta la experiencia actual del C.I.M.A. FACTOR EDAD Y TOLERANCIA A LA HIPOXIA DR. JOSÉ ANTONIO LOPEZ LOPEZ, DRA. PILAR VALLEJO DESVIAT, DR. FRANCISCO RIOS TEJADA, DR. RODRIGO JIMÉNEZ GARCIA. INTRODUCCION La hipoxia es uno de los grandes problemas dentro del mundo aeronáutico. Definimos hipoxia como la falta de un adecuado aporte de oxígeno a los tejidos. La falta de oxígeno afecta a la capacidad intelectual, psicomotora y estado de alerta del individuo. Estas alteraciones pueden ser muy variadas. 289 Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 Esta variabilidad individual dependerá de muchos factores, uno de los factores que podría influir en la respuesta del SNC a los efectos de la deprivación de oxígeno es la edad. Sin embargo no tenemos conocimiento que se haya estudiado los efectos centrales de la deprivación de oxígeno, en distintas personas, según la edad. La revisión bibliográfica realizada muestra una enorme escasez de trabajos que estudian los efectos de la deprivación de oxígeno en personas (tripulantes aéreos) en relación con la edad. OBJETIVOS El objetivo de este trabajo es estudiar si existen diferencias, respecto a la edad, en la capacidad de actuación y reacción del personal de vuelo, bajo condiciones de hipoxia. MATERIAL Y METODO Se estudiaron 161 tripulantes aéreos que realizaron un vuelo de entrenamiento en una cámara de baja presión. Se cuantificó el grado de alteraciones de las funciones cognitivas, mediante un test desarrollado durante un vuelo. RESULTADOS El grupo de sujetos cuyas edades estaban comprendidas entre 30 y 39 años obtuvieron estadísticamente (p<0,05) mejores resultados en el test que el grupo entre 20-29 años y aunque no es estadísticamente significativo, el primer grupo tiende a una mejor respuesta en el test sobre el grupo de mayores de 40 años. borales ha ocasionado un profundo cambio en la organización de la Prevención. No solo hay que evitar accidentes y enfermedades, sino que la Prevención ha tenido que ser reconvertida y dirigida a identificar y evaluar las causas de los riesgos en los procesos técnicos o situaciones humanas que conllevan probabilidad de producir daños a los trabajadores para ser combatidos en sus orígenes. Todo ello plantea una nueva filosofía activa y una reorganización técnica de las empresas y, en particular, en la gestión de sus recursos humanos, sobre todo en lo que se refiere a la Vigilancia de la Salud, versión actualizada de la Medicina del Trabajo. Las Empresas de Aviación se verán así afectadas por este profundo cambio en el ámbito de la calidad de las relaciones humanas, en el seno de ellas mismas, ya que de no hacer los cambios oportunos su supervivencia estará seriamente comprometida, por la trascendencia que tiene el factor humano en sus resultados económicos. Tradicionalmente los Servicios Médicos de las Empresas de Transporte Aéreo, ahora englobados en la Especialidad de Vigilancia de la Salud dentro de los Servicios de Prevención, se ocupaban de la Medicina Preventivo Laboral, solucionando los problemas sanitarios del personal de vuelo y del personal de tierra, la propagación de epidemias, el asesoramiento sobre la correcta alimentación, la organización de la asistencia de urgencias y los primeros auxilios. El ejercicio de todo ello, naturalmente, se mantendrá intacto, pero enfocado y ampliado de una manera muy diferente, pues resultará indispensable el que la Medicina Laboral contribuya al bienestar biológico de los trabajadores, clave esencial de la organización y soporte fundamental de las Empresas Aeronáuticas. Los autores exponen en esta Mesa Redonda un esbozo detallado de la nueva Medicina del Trabajo en el ámbito Aeronáutico. CONCLUSIONES Los tripulantes aéreos entre 30 y 39 años reúnen las condiciones idóneas de experiencia, por un lado y por otro se encuentran en una edad donde todavía no se ha manifestado el deterioro de las capacidades cognitivas y psicomotoras por el envejecimiento, para tolerar las condiciones de hipoxia. SALUD LABORAL EN LAS EMPRESAS DE AVIACION JOSÉ MARIA SEVILLA MARCOS, JOSÉ SEVILLA RIBAS. Profesores Asociados de Salud Laboral de la Universitat de les Illes Balears. RESUMEN La aparición reciente de Normas Internacionales, Directivas Europeas y Leyes con sus correspondientes Reglamentos Nacionales sobre Prevención de Riesgos La- 290 SERVICIO DE ATENCION E INFORMACION EN ACCIDENTES CON MULTIPLES VICTIMAS (GOVERN BALEAR) Gobierno Balear. Centro de Emergencias. El Govern de las Islas Baleares pondrá en funcionamiento, durante el año 2000 y dentro de la estructura de su Centro de Emergencias 112, una sala de atención e información en casos de accidentes con múltiples víctimas. Este servicio se pretende que tenga un carácter no sólo gubernamental, sino que también se orientaría a aquellas entidades y organizaciones que, por razón de su actividad, puedan verse obligadas por el marco legal vigente a adoptar medidas de actuación en caso de una gran emergencia. La estructura se basará en la plataforma tecnológica y operativa que soporta el Centro de Emergencias 112 de Baleares y, además, en una aplicación informática expresamente diseñada y desarrollada para tal fin. Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 La sala tendrá dos cometidas principales: 1. Aglutinar y gestionar todo el flujo de información que sobre un incidente de las características antes mencionadas se genere, tanto desde el sitio de ocurrencia como desde el puesto de mando avanzado y de los diferentes particulares y entidades que pidan o proporcionen datos sobre el mismo. 2. Movilizar y coordinar, junto con el puesto de mando avanzado de la emergencia, la actuación de todos los recursos, de dentro y fuera de la Comunidad Autónoma, que se necesiten para la debida atención a las víctimas del siniestro. De la misma manera, fuera de su carácter estrictamente gubernamental y en el ámbito del transporte aéreo, la sala podrá prestar servicio a aquellas compañías que sean susceptibles de tener accidentes en el resto del territorio del estado y en otros países donde tengan operación. Palma de Mallorca; 802 Escuadrón en la Base Aérea de Gando en Las Palmas de Gran Canaria y el 803 Escuadrón de la Base Aérea de Cuatro Vientos en Madrid. Para llevar a cabo sus misiones los Escuadrones SAR disponen de una serie de medios humanos: pilotos, mecánicos, buscadores, operadores de radar, rescatadores y Diplomados en Enfermería; y medios materiales: aeronaves (de ala fija y de ala rotatoria) y material sanitario (de recogida y transporte, de soporte vital, medicación etc.); que serán también analizados, tomando como referencias el RCC Baleares y el 801 Escuadrón de Fuerzas Aéreas. DEMOSTRACION EJERCICIO DE SALVAMENTO SIMULACRO EMERGENCIA EN AERONAVE “OPERACION SYMP 99” Aeropuerto de Palma de Mallorca. ORGANIZACION Y FUNCIONAMIENTO DEL S.A.R. BEATRIZ PUENTE ESPADA. Médico de Vuelo, B.A. Son San Juan. RAQUEL SANCHEZ MUÑOZ. ATS de Vuelo, 801 Escuadrón. SONIA GOMEZ MORENO. ATS, 801 Escuadrón. La principal misión del Servicio de Búsqueda y Salvamento es localizar las aeronaves siniestradas dentro del espacio aéreo español o áreas de responsabilidad española y hacer llegar lo más rápidamente posible al personal de las mismas los auxilios que pudiera necesitar. Pero tiene también como misiones cooperar con otros organismos civiles y militares cuando por haberse producido un accidente, catástrofe o calamidad pública, se requiera su colaboración. En España, las Unidades de Búsqueda y Salvamento (Unidades S.A.R. -Search and Rescue-, según nomenclatura internacional) son principalmente tres y pertenecen al Ejército del Aire. El servicio S.A.R. español depende del General Jefe de Estado Mayor del Ejército del Aire, a través de la División de Operaciones del Estado Mayor del Aire. La Jefatura SAR tiene su sede en Madrid (Base Aérea Cuatro Vientos) y bajo su control los Centros Coordinadores de Salvamento (R.C.C.) y las Unidades Aéreas. Existe un RCC en cada Región de Búsqueda y Salvamento (S.R.R.), las cuales coinciden con las Regiones de Información de Vuelo (F.I.R.): RCC Baleares-FIR Barcelona; RCC Madrid-FIR Madrid; RCC Canarias-FIR Canarias. Se analizarán la organización, funcionamiento y método de activación de las misiones SAR por parte del Centro Coordinador correspondiente; así como los acuerdos de colaboración nacionales e internacionales con Organismos tanto civiles como militares. Las Unidades Aéreas son tres: 801 Escuadrón de Fuerzas Aéreas en la Base Aérea de Son San Juan en INCIDENTE: Aeronave MD-80 de la Cia Air Symp estacionada en el Parking 99 está siendo repostada con pasaje a bordo. Vigilando la operación se encuentra presente una dotación del Servicio de Extinción de Incendios del aeropuerto. El conductor de un vehículo de la empresa “Jinxed”, que circula por la plataforma, sufre una repentina pérdida de conocimiento. Ocurre una colisión contra el camión que efectúa el repostaje y una zona del ala derecha del avión. Se produce un incendio. Hay derrame de combustible por la plataforma. ACTUACION: - El Servicio de Extinción de Incendios del aeropuerto debe sofocar las llamas, proteger las salidas para la evacuación del pasaje y efectuar las tareas de salvamento necesarias. - Activación del Plan de Emergencia del Aeropuerto. - Constitución del Puesto de Mando Principal (PMP) y Puesto de Mando Avanzado (PMA). - Asistencia médica y traslado de víctimas urgentes a centros hospitalarios. RESULTADO: 1 fallecido. 1 intoxicación inhalación gases. 3 traumatismos producidos en la evacuación del avión. INTERVIENEN: - Servicio Extinción de Incendios Aeropuerto. - Policía de Plataforma. - Centro Coordinación Operaciones. 291 Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 - Sanidad Aeroportuaria. - Seguridad Aeroportuaria. - Dpto. Ejecutivos y Directivos Aeropuerto. - Ambulancias exteriores (Ambulancias Illes Balears). MIEDO A VOLAR: CARACTERISTICAS CLINICAS DE LA FOBIA A VOLAR Y ESTRATEGIAS DE INTERVENCION MIQUEL TORTELLA-FELIU. Departament de Psicologia. Universitat de les Illes Balears. El objeto de esta ponencia es el de presentar el estado actual de la investigación sobre el miedo a volar en avión, tanto en la vertiente psicopatológica como en la dedicada al tratamiento de esta alteración. A pesar de tratarse, como se verá, de un problema con una elevada tasa de prevalencia y con importantes repercusiones personales, sociales y económicas, la investigación desarrollada hasta hace pocos años ha sido más bien escasa y asistemática. De todos modos, en los últimos años se ha observado un creciente interés por el estudio del miedo fóbico a volar en avión que hace que se haya incrementado sustancialmente el número de publicaciones sobre la materia. En general, y a pesar del avance de los últimos años, los datos epidemiológicos sobre el miedo a volar son poco precisos y las cifras de prevalencia que se aportan se mueven en un rango muy amplio, desde el 3% de prevalencia total puntual de la fobia específica situacional (volar en avión), señalada en el estudio de (Fredrikson et al., 1996) hasta valores cercanos e incluso superiores al 30% cuando se tienen en cuenta diferentes grados de temor a volar en avión (p. ej. Ekeberg, Seeberg y Ellesten, 1989; Greco, 1989; Van Gerwen et al, 1997). Curtis et al. (1998), en el último estudio epidemiológico publicado del que tenemos conocimiento, calcularon una prevalencia global del 15% para el miedo a volar y del 5% para la fobia a volar, respectivamente. Nuestros propios datos (Tortella-Feliu et al, 1998; Tortella-Feliu y Fullana, 1999) sitúan la prevalencia puntual del miedo fóbico a volar en avión en un 13.19% y un 14.4% de la muestra estudiada (n=523) presentan malestar moderado o elevado al viajar en avión aunque no cumplan los criterios para considerar el miedo como fóbico. Un aspecto de especial relevancia en el miedo a volar, y que también ha empezado ha recibir atención detallada últimamente, es el del análisis de los diversos componentes del miedo a volar y el de su ubicación diagnóstica. Se ha indicado repetidamente que el miedo a volar no es un miedo unitario (Greco, 1989; Howard, Murphy y Clarke, 1983; Tortella-Feliu et al, 1998; Tortella-Feliu y Fullana, 1999; Van Gerwen et al, 1997; Walder, McCraken, Herver, James y Brewitt, 1987; Wilhelm y Roth, 1997) sino que puede presentar diferentes dimensiones o factores subyacentes como son: el miedo a los accidentes, a las alturas, a experimentar sensaciones físicas desa- 292 gradables, a la inestabilidad, a permanecer en un lugar cerrado o a encontrarse en una situación de no control. En relación con esto también se ha señalado que el miedo fóbico a volar en avión puede ser clasificado, en función de sus características clínicas, como una fobia específica situacional, puede ser la expresión de otras fobias no situacionales o como una problemática secundaria o asociada a alteraciones de pánico-agorafobia. Por tanto el análisis de estos aspectos tiene remarcables implicaciones no únicamente nosológicas sino también para el tratamiento de este problema. Una de las direcciones futuras de la investigación debería dirigirse al análisis de la diferente respuesta al tratamiento que presentan estos sujetos y a avanzar en el diseño de intervenciones modificadoras que se ajusten a los diferentes tipos de manifestación de este trastorno fóbico. En cuanto al tratamiento de la fobia a volar, aunque no pueda hablarse todavía de evidencia empírica irrefutable, la mayoría de los trabajos existentes destacan el papel central jugado por la exposición en la eficacia global de las intervenciones. Se presentarán los datos relativos a las últimas intervenciones para el tratamiento de este trastorno a través de la realidad virtual y la exposición asistida por ordenador, en la que trabaja nuestro grupo de investigación. También se discutirán las características y la eficacia terapéutica de los programas multicomponentes ofrecidos por diversas compañías aéreas y clínicas privadas. TRASTORNOS PSIQUIATRICOS: INCIDENCIAS, PROBLEMAS DIAGNOSTICOS Y PERICIALES EN MEDICINA AERONAUTICA DR. JESUS MEDIALDEA CRUZ. Servicio de Psiquiatría del Centro de Instrucción de Medicina Aeroespacial. Arturo Soria 82. 28027 Madrid. Tel. 91-4084028, Fax 91-4084027. En el presente trabajo se aborda un estudio sobre la incidencia de los trastornos psiquiátricos en Medicina Aeronáutica mediante revisión de algunas publicaciones existentes en estos aspectos, y por recogida de los datos obtenidos en este Centro. Asimismo, se estudian los principales métodos diagnósticos en Psiquiatría y las dificultades de su aplicación al medio aeronáutico, y se analizan los problemas periciales planteados al aplicar los reglamentos existentes. MINIMIZACION DEL ESTRES EN AUXILIARES DE VUELO. EXPERIENCIA EN LA CIA AIR EUROPA. CARMEN RUIZ HERNANDEZ. Air Europa. Se trata de una exposición de los principales factores de estrés que están actualmente afectando a los Auxiliares de Vuelo. Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 La ponencia estará enfocada al estudio de los pasajeros conflictivos como grandes agentes estresores hacia los auxiliares de vuelo. Según la recogida de información de los TCP’s en los cursos de instrucción, este agente estresor es cada vez mayor y preocupa en gran medida a las Auxiliares de vuelo. Se hablará de la experiencia desde la Cia Air Europa en como estamos trabajando en cambiar diversos enfoques que nos parecen importantes para la minimización de estrés en nuestras tripulaciones. MIEDO A VOLAR Y TRASTORNOS DIGESTIVOS DR. RAFAEL BATTESTINI PONS Institut d’Estudis de Medicina de Muntanya. Barcelona. RESUMEN El miedo a volar es responsable de trastornos psicosomáticos. También puede provocar trastornos digestivos. Presentamos tres casos de miedo a volar fóbico compulsivo, responsable de un ulcus duodenal agudo y de empeoramientos en un ulcus duodenal y un intestino irritable previos. El diagnóstico se establece mediante interrogatorio orientado. Al tratamiento específico hay que añadir psicoterapia dirigida a aumentar la confianza en los aviones. El propranolol puede corregir la hipertonía simpática. MEDICINA ALTERNATIVA O COMPLEMENTARIA DR. JOSÉ AZOFRA GARCIA. CIMA. La Medicina Alternativa o Complementaria (MAC) despierta cada vez más interés tanto en la clase médica como entre los pacientes. La homeopatía, quiropraxia, acupuntura, etc. vienen siendo utilizadas cada vez con mayor frecuencia por pacientes defraudados con los resultados ofrecidos por la medicina ortodoxa, o por sujetos sanos que quieren mejorar su salud o prevenir la enfermedad. La Medicina aeronáutica oficial carece de criterios claros sobre el uso de la MAC por el personal de vuelo, y se desconoce la prevalencia de la utilización de la MAC por parte de este personal. Presento los resultados de la encuesta epidemiológica realizada al personal de vuelo reconocido por el CIMA durante el mes de Octubre de 1999, y lo comparo con otro período similar del año 1997 cuando en la entrevista no se hacía contar de forma expresa cuestiones en torno al uso de la MAC. De igual forma reviso brevemente las formas más frecuentes de MAC, y su posible trascendencia en la Seguridad en Vuelo. Se concluye que la MAC se usa con mucha frecuencia por el personal de vuelo, y que éste no es muy consciente de las repercusiones posibles que ello puede conllevar sobre su capacidad para realizar el trabajo de una manera segura. El Médico Examinador Aéreo (MEA) debe ser consciente de este hecho y valorarlo de manera conveniente durante el reconocimiento aeromédico. 293 Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 Formación Continuada Med. Aeroesp. Ambient. 1999; 6: 294-296 La visión binocular en el ámbito de los requisitos aeronáuticos (JAR-FCL) The binocular vision in the aeronautical requeriments (JAR-FCL) JOSÉ LUIS RODRIGUEZ VILLA Oftalmólogo. Servicio Médico de IBERIA. C/ Sándalo, 3, 3º J 28042 MADRID RESUMEN ABSTRACT Se destaca la importancia de la visión binocular en la operación de vuelo. La normativa europea JAR-FCL incluye requisitos oftalmológicos vinculados a la visión binocular. La valoración de los requisitos binoculares propiamente dichos: límites de las heteroforias, ausencia de diplopia, ausencia de defectos significativos de la visión binocular tiene como pilar fundamental el estudio de los márgenes de la fusión. Se define este concepto, el procedimiento exploratorio (uso del synoptoforo), y los criterios de suficiencia/normalidad que posibilitan la estabilidad de la función binocular. Asimismo, se valora el estrabismo en el conjunto de patologías oculares susceptibles de reducir la performance visual del piloto. Palabras clave: Visión binocular / norma JAR-FCL / synoptoforo / amplitud de fusión / estabilidad binocular / performance visual del piloto. It is emphasized the roll of binocular vision played in operatinal fly duties. The european normative JAR-FCL includes ophtalmological requirements in relation with binocula vision. The evaluation of the basical binocular requeriments: hetheroforia limits, the diplopia avoidance, the exclusion of “signifiance defeats in the binocular vision”, its bassed on the assesment of the fusional range. This concept is defined, the exploration procedures are explained (use of the synoptofore) and the sufficience or normal criteria are sujested in order to validate binocular stability. The strabismus in relation with other pathological eye conditions which reduce the pilots visual performance, is also discussed. Key words: Binocular vision / normative JARFCL / synoptofore / fusional ranfe / binocular stability / pilots visual performance. LA VISIÓN BINOCULAR EN EL ÁMBITO DE LOS REQUISITOS AERONÁUTICOS La visión binocular se define como la percepción de una imagen única (single vision de los anglosajones) a partir de la imagen formada en la retina de cada ojo. En relación con la stereopsis (percepción de la profundidad, orientación espacial), la propia norma europea admite que, más allá de los 30 metros de distancia (20 pies) la visión binocular deja de participar en la apreciación de las distancias. Para juzgar la distancia, existen otros elementos interpretativos, de carácter monocular, como son: la identificación del tamaño real de los objetos, la interposición en la línea de visión de objetos de distinto tamaño, el efecto de las sombras, la perspectiva geométrica, el paralaje de movimiento, la perspectiva aérea, etc. Desde esta perspectiva cabe preguntarse: ¿Cuál es en definitiva el interés de la visión E l tema de la Visión binocular (VB) cobra notoriedad en Medicina Aeronáutica desde el momento que la norma europea relativa al otorgamiento de licencias al personal de vuelo (Norma JAR-FCL 3) incluye limitaciones en consonancia con este aspecto de la visión. La performance visual del piloto se encuentra avalada no solamente por la AV lejana y próxima, la integridad de los Campos Visuales, percepción cromática “safe”, adecuada, sino también por la función binocular. En su consecuencia, hemos creido oportuno revisar la actual normativa JAR con el fin de esclarecer algunos aspectos conceptuales y de diagnóstico. 294 Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 binocular?, ¿Por qué ha sido incluida en la nueva normativa europea?. La cuestión cabe enfocarla de la manera siguiente: En virtud de las circunstancias actuales del tránsito aéreo: alta densidad de tráfico, eliminación del o.t.v. en cabina técnica, niveles crecientes en la información procesada, información presentada a través de pantallas, -de rayos catódicos, o de cristal líquido-, el trabajo visual del piloto se ha incrementado considerablemente. De otra parte, la visión binocular es factor a tener en cuenta en los procesos de esfuerzo visual (eye strain) y de astenopia. Dado que una visión binocular confortable favorece el rendimiento visual es fácil comprender que las autoridades aeronáuticas hayan incorporado el parámetro visión binocular en la normativa. A diferencia de los requisitos en la percepción de los colores, que posee su propio apartado (JAR-FCL 3.225), los factores en torno a la visión binocular se encuentran incluidos en el apartado JAR-FCL 3.220 titulado “Requisitos visuales”. Siete son los puntos que hacen referencia a la visión binocular: En primer lugar, los requisitos propiamente visuales. “La AV lejana, con o sin corrección, deberá ser de 6/9 o superior en cada ojo por separado y la agudeza visual binocular, -lo subrayamos-, deberá ser de 6/6 o superior”. Esto es así porque la visión binocular supera a la de cada ojo por separado. No obstante, es de advertir que, como la VB no suele superar dos niveles de la escala a la monocular, para alcanzar visión 1 (6/6) binocular, si un ojo ve 6/9 (0.7) el otro verá al menos 0.8 o más. En el requisito b, punto 4 se dice: “La diferencia en el error de refracción entre los 2 ojos (anisometropia), no deberá exceder de 2 dioptrías”, lo cual es oportuno puesto que la diferencia dióptrica entre ambos ojos, con la correspondiente diferencia de tamaño de las imágenes, puede ser un obstáculo para el establecimiento de la VB. Requisito d.: “Un solicitante con diplopia deberá ser evaluado como no apto”. Obviamente la condición de diplopia entraña ausencia de visión binocular confortable, desorientación espacial. Requisito e: “Un solicitante con anomalía de la convergencia deberá ser evaluado como no apto”, puesto que la convergencia es factor esencial para la stereopsis y, por tanto, para la VB, en la visión próxima. En el Requisito f, se establecen unos límites máximos para las “heteroforias”, (del griego heteros, diverso y foria, situación); desequilibrios oculo-motores sin presencia de estrabismo, en ocasiones con predisposición a éste, que significan, en el caso de las exoforias: tendencia de los ejes visuales a posiciones de divergencia; endoforias, -también llamadas esoforias-, tendencia a posiciones de convergencia, hiperforias: tendencia a la disociación vertical. Las heteroforias, como bien señala la norma JAR en su Sección 2, pueden presentarse en visión lejana, y/o en visión próxima, estar compensadas o descompensadas y, esto último, fundamentalmente en función de los mecanismos de acomodación/convergen- cia y de la capacidad de fusión. La aclaración de este concepto: “capacidad de fusión” nos lleva de la mano a reflexionar sobre el Requisito c que intencionadamente habiamos dejado aplazado: “Un solicitante con defectos significativos en la visión binocular será evaluado como no apto”. Surje aquí el problema de establecer qué se entiende por “defectos significativos de la visión binocular”. En primer lugar, para que exista visión binocular debe existir “fusión”, entendiendo por tal al proceso de integración cortical por el cual los estímulos visuales captados en cada retina dan lugar a una sola imagen. Esta capacidad se explora de forma precisa en el “synoptóforo”. Nos extenderemos en su descripción de uso, pues su complejidad es pareja, pongamos por caso, a la exposición que del cover test o del estrabismo hace la norma en su Sección 2. Consta este instrumento, de dos visores ajustables que presentan una imagen-test iluminada para cada ojo. En el llamado “grado 1 de Fusión” (Percepción simultánea), se presentan a cada ojo tests de figuras disimilares (p.e. un círculo y un cuadrado). De existir Fusión grado 1 el sujeto ve el círculo dentro del cuadrado; de existir una Fusión imperfecta, el sujeto percibe el movimiento del test: el círculo se mueve, tiende a salirse del cuadrado (indica inestabilidad de la fijación); el círculo desaparece, de forma intermitente, (supresión intermitente) o no está nunca dentro (incapacidad para la fusión). Como cada test representa a un ojo, puede darse la situación inversa, que sea el cuadrado, el que se muestra inestable o desaparece. En el estudio del “Grado 2 de Fusión” se utilizan test similares para cada ojo; (p.e. una misma figura humana para cada ojo), con la particularidad de que el test comporta controles para cada ojo, (p.e. un sombrero en la mano, a percibir por OD, un bastón a percibir con OI). Al superponerse las imágenes el individuo con fusión percibe un individuo con los dos controles, el bastón en una mano, el sombrero en la otra. El sujeto puede alternar y entonces habrá momentos que vea un bastón y momentos que vea el sombrero o dejará de ver un control si tiene supresión. La fusión puede llevarse a cabo a pesar de estas imperfecciones, pero cuando la normtiva busca identificar los sujetos con defectos significativos de la visión binocular, la fusión debería ser: estable, sin supresión y poseer unos “márgenes de amplitud” (fusión range). La amplitud de fusión se mide de la siguiente manera: Partiendo de la posición primaria (ángulo de las miras a 0) o del ángulo en que el sujeto fusiona las imágenes, se hacen converger las miras del aparato hasta que el sujeto aprecie diplopia, haya perdido el control de un ojo o entre en alternancia. El ángulo alcanzado representa la “amplitud positiva”; repitiendo la maniobra en el sentido de la divergencia se obtiene la “amplitud negativa”. Se consideran valores representativos de una amplitud de fusión normal los siguientes: Aducción (Amplitud +): +15, +20° Abducción (Amplitud -): -2, -4° 295 Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 Estos datos se refieren al empleo de “tests de fusión periféricos”; cuando se realiza la exploración con “tests de fusión macular o foveal” -proyectados para estimular estas áreas de retina- los resultados son algo menores. Existe entre ambos tipos de tests una relación de 2 a 1 en el margen de fusión alcanzado. Al realizarse estas exploraciones debe tenerse en cuenta que la capacidad de fusión varía en un mismo individuo, en función del conocimiento y el aprendizaje de la prueba, del estado psico-físico del sujeto (ingesta de fármacos, enfermedades debilitantes, etc). Los “márgenes de fusión” también pueden ser explorados en el espacio por medio de las barras de prismas; la abducción se explora con los prismas en posición out, (base externa) y la abducción con prismas base in (base interna). Con fines prácticos, entre las anomalías de la fusión incompatibles con una visión binocular confortable cabe distinguir: - Fusión deficiente: Sin margen de amplitud. - Ausencia de fusión: el sujeto no es capaz de superponer las imágenes; realiza intentos en diversos ángulos, sin conseguir la visión de una figura única. En relación con el Estrabismo, la norma en su Sección 2., describe diversos tipos de estrabismo, precisando algunos aspectos de su establecimiento, características sensoriales y evolución pero, en ningún momento, indica si el Estrabismo es considerado apto o qué tipos de estrabismo se consideran aptos y cuales no. Contrasta esta ex- posición con el capítulo 11 de la Sección 2, titulado: “Condiciones oculares patológicas”, donde se reseñan procesos patológicos en párpados, cornea, conjuntiva, retina, etc., señalando con claridad aquellas situaciones que entrañan “unfittness”, incompatibilidad con la aptitud para el vuelo. A nuestro entender, la mención del Estrabismo entraña ambigüedad. Tengamos en cuenta que la persona que no tiene una binocularidad confortable puede adoptar posiciones compensatorias de cabeza, atender los instrumentos de una forma asimétrica, prestando mayor atención a aquello que le resulta más fácilmente visualizable, con el inconveniente de que no es consciente de que algo, un detalle, en un momento dado no ha sido percibido. Nos estamos refiriendo al “predominio monocular”, a “la supresión o inhibición” de un ojo. En otras ocasiones, la falta de una buena visión binocular origina cansancio precoz, visión borrosa ocasional, sobreesfuerzo, desajustes en el paso de la visión de cerca a la visión de lejos o a la inversa, menoscabo de la performance visual en situaciones de vuelo prolongado, bajo discretos niveles de hipooxia, de surmenage pisco-físico. La dificultad o el esfuerzo pueden ponerse de manifiesto en la lectura prolongada, el dibujo de precisión, enhebrar una aguja, durante la atención mantenida ante un monitor. A decir verdad, los pilotos deberían gozar del mayor confort visual posible, es decir, ser “buenos binoculares” o, al menos poseer una amplitud de fusión, sin intermitencias ni supresión, que garantice estabilidad binocular. BIBLIOGRAFÍA 1.- JAR-FCL. Licencias para personal de vuelo. (Requisitos médicos). Ed. 28-08-97. 2.- JAR-FCL. Part 3. (Medical). Subpart A, B and C. Ed. 22-05-96. 3.- OACI. Manual de Medicina Aeronáutica Civil. Montreal. Ed. 1985. 4.- Lyle and Jacksonn’s. Practical ORTHOPTICS in The Treatment of Squint. London: HK. Lewis and Co. 1953. 5.- Kramer. Clinical Orthoptics. St. Louis. The C.V. Mosby Co. 1953. 296 6.- Worth & Chavasse’s. Squint. London. Bailliere, Tindall & Cox. 1950. 7.- De Hart. Fundamentais of Aerospace Medicine. Philadelphia. Lea & Febiger. 1985. 8.- Vaughan, Cook & Taylor. Oftalmología General. Mexico. El Manual Moderno. 1973. 9.- Benitez del Castillo. Estrabología práctica. Barcelona. Lab. Cusí. 1996. Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 Humanidades Med. Aeroesp. Ambient. 1999; 6: 297-297 La oxigenación hiperbárica. Recuerdo de Boerema. I te Boerema nacido el 14 de octubre de 1902 en Uituizen (Holanda) puede ser considerado el precursor y promotor de la cirugía hiperbárica. Sus primeros estudios en este campo datan de 1948. Como cirujano que fue, trataba a la sazón de solucionar la interrupción de la circulación cardiaca reduciendo la temperatura del animal de experimentación hasta 27°C; sin embargo, optó por un nuevo plan de acción: en lugar de reducir el metabolismo, se le ocurrió incrementar el suministro de oxígeno al organismo, administrándolo a alta presión. Las primeras investigaciones se llevaron a cabo en animales; utilizando el tanque hiperbárico de Den Helder, donde la Escuela Naval de Holanda adiestraba a los futuros miembros del arma submarina. En un principio, los investigadores comprobaron que los animales que inhalaban oxígeno a presión normal no podían sobrevivir con un 10% de sat. de Hemoglobina, si se les reemplazaba la sangre por plasma o dextranos. Posteriormente descubrieron que si los cochinillos respiraban oxígeno a una presión de tres Atmósferas, podían sobrevivir durante periodos de hasta 15’ con solamente un 0,4 de sat. de Hb, ya que sus cuerpos se saturaban de oxígeno disuelto. Finalmente se demostró que el contenido de oxígeno del plasma sanguíneo aumenta veinte veces si se inhala a una presión de tres atmósferas. “Resulta sorprendente comentaba Boerema- ver cómo un animalillo de piel normalmente sonrosada adquiere un color blanco como un lienzo, en tanto se conserva con todo su vigor y energía”. En 1959, una vez superadas dificultades de orden económico, se construyó en el Wilhelmina Gasthuis de Amsterdam una gigantesca cámara de acero que albergaba en su interior un quirófano de 3.5x5.5 mts, un pequeño armario para instrumental y una antesala donde los médicos y enfermeras se sometían a la compresión o descompresión. Boerema, a través de un teléfono, ordenaba “inmersión” y “superficie” según se requerían la compresión y la descompresión. La hiperpresión de 3 Atmósferas se alcanzaba en unos 12 minutos. Los médicos e instrumentistas estaban entrenados al efecto: reconocían el timbre nasal de la voz que esta adquiere bajo hiperpresión y realizaban degluciones a fin de adaptar sus oídos a la hiperbaria. Algunos ayudantes de Boerema recurrían a pulverizaciones de Adrenalina para mitigar el dolor en los senos paranasales. Antes de exponer los pacientes anesteCorrespondencia: J.L. Rodríguez Villa Sándalo, 3, 3º J 28042 Madrid. JOSÉ LUIS RODRIGUEZ VILLA siados a los efectos de la presión, un ORL les practicaba una pequeña perforación timpánica. Una vez concluido el acto quirúrgico, el equipo de Boerema realizaba el método de descompresión de JBS Haldane, permaneciendo de pie y en movimiento para impedir la formación de burbujas de Nitrógeno en el tejido celular subcutáneo de la región glutea. La adaptación resultaba mejor en individuos jóvenes y delgados que en los sujetos de edad o de peso. En el año 1960 se realizaron las primeras experiencias quirúrgicas bajo hiperbaria: se practicaron en niños afectos de cardiopatía congénita (anastomosis aorto-pulmonar a corazón abierto). No obstante, la aplicación de la oxigenación hiperbárica tuvo sus mayores éxitos en el tratamiento de la gangrena gaseosa. Actualmente se sabe que la oxigenoterapia hiperbárica detiene drásticamente la infección por Clostridium al elevar los potenciales de oxidación-reducción ya que la producción de toxinas está condicionada por la existencia de bajos potenciales de oxidación-reducción. Boerema utilizó también la oxigenoterapia hiperbárica, no directamente, sino a través de cámara, para revitalizar colgajos de piel en politraumatizados, fracturas complicadas y casos de congelación. Por aquellos tiempos, se introducían en la cámara hiperbárica pacientes coronarios que habían sufrido un infarto reciente. Si el lapso de tiempo desde el comienzo del ataque no superaba las 2 horas, esta técnica permitía superar la crisis. En la actualidad, la oxigenoterapia hiperbárica conserva su indicación, fundamentalmente como única arma eficaz, para corregir los estados de embolismo gaseoso; asimismo, en el tratamiento de intoxicados por monóxido de carbono y cianuro. En algunas clínicas se aplica para mejorar el trofismo celular (tejidos irradiados, arteriopatías periféricas en estados avanzados, casos de enf. De Crohn, enf. De Raynaud, o en los retardos de calcificación). La oxigenación hiperbárica favorece la hidroxilación de la prolina y finalmente la formación de abundante tejido de granulación. La hiperoxia arterial, venosa y tisular, y sobre todo, el gran aumento del transporte y disponibilidad del oxígeno plasmático, proporcionan un efecto terapéutico en todas las enfermedades en que exista un fenómeno de hipoxia tisular como factor etiopatogénico desencadenante. La oxigenoterapia hiperbárica, como demostró Boerema, proporciona un aporte adicional de oxígeno, disuelto en el plasma, ajeno a las limitaciones reológicas o condicionamientos metabólicos que en algunas ocasiones limitan la transferencia o el aprovechamiento del oxígeno ligado a la Hemoglobina. 297 Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 Legislación Med. Aeroesp. Ambient. 1999; 6: 298-302 PROYECTO Orden del Ministerio de Fomento sobre requisitos para la acreditación de Centros Médicos Aeronáuticos y autorización de Médicos Examinadores Aéreos El Real Decreto 959/90 sobre títulos y licencias aeronáuticos civiles y el Real Decreto 3/1998 sobre el título profesional aeronáutico civil de controlador de tránsito aéreo exigen para la obtención y mantenimiento en vigor de las licencias en ellos establecidas, que los titulares se sometan a pruebas médicas conducentes a la obtención de un certificado médico aeronáutico de aptitud. Para ello en ambos documentos se hace referencia a la necesidad de Centros médicos aeronáuticos acreditados y de médicos examinadores aéreos autorizados. El objeto de esta Orden es el establecimiento de los requisitos y procedimientos necesarios para la acreditación de los citados centros médicos y la autorización de los médicos examinadores aéreos. Por ello, DISPONGO: Artículo único. Se aprueba el Reglamento para la acreditación de centros médico-aeronáuticos y la autorización de médicos examinadores aéreos, que figura como anexo de esta Orden. Disposición Adicional Se encomienda a la Dirección General de Aviación Civil la gestión de la acreditación y autorización a que se refiere el Reglamento adjunto. Disposición Final Esta Orden entrará en vigor al día siguiente de su publicación en el Boletín Oficial del Estado. Madrid, N de la R.: No existe el convencimiento de que el texto definitivo sea copia fiel de este proyecto. 298 REGLAMENTO PARA LA ACREDITACION DE LOS CENTROS MÉDICO-AERONAUTICOS Y LA AUTORIZACION DE MÉDICOS EXAMINADORES AÉREOS 1. Definiciones Centro Médico Acreditado: Centro Médico que, reuniendo los requisitos que se establecen en esta Resolución, es acreditado para realizar los informes médicos requeridos o para una evaluación médica inicial o para la renovación de cualquier Licencia o Habilitación. Instituto Médico: organización dotada de instalaciones para investigación clínica y formación, que disponga de un grupo de expertos en las distintas ramas de la medicina de aviación, incluidos especialistas en medicina aeronáutica, para satisfacer las necesidades técnicas. Médico Examinador Autorizado: Profesional de la medicina que, reuniendo los requisitos que se establecen en esta Resolución, está autorizado para la emisión de la certificación médical de clase 2 inicial y la de clase 2 y 3 para renovación de Licencias. 2. Médico Examinador Autorizado 2.1. Requisitos para la autorización: 2.1.1. Personales: 2.1.1.1. Título de Licenciado o Doctor en Medicina y Cirugía. 2.1.1.2. Diploma de Médico Examinador Aéreo, expedido o refrendado por la Dirección General de Aviación Civil, obtenido de acuerdo con los procedimientos establecidos en el punto 4 de esta Resolución. 2.1.1.3. Conocimientos prácticos y experiencia respecto a las condiciones en las que se desempeñan las funciones de los profesionales que han de ser examinados. Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 2.1.2. Medios técnicos: 2.1.1.1. Para la realización de los informes médicos necesarios para la certificación de aptitud médica deberán disponer de los siguientes medios técnicos: 2.1.2.1. Para informes médicos conducentes a una Evaluación Médica de Clase 2, exclusivamente: - Báscula de peso con talla. Martillo de reflejos. Fonendoscopio. Esfigmomanómetro. Electrocardiógrafo. Pick-flow. Linterna o cualquier otra fuente luminosa puntual. Otoscopio neumático. Oftalmoscopio. Escala de optotipos (tipo Landolt o similar) para medición de agudeza visual lejana. Escala de optotipos (tipo Jaegger o similar) para medición de agudeza visual próxima e intermedia, o láminas Times Roman. Láminas o tablas seudoisocromáticas del tipo Ishihara o similar para exploración de visión cromática (24 láminas). Sistema de despistaje por medio de tiras reactivas, tanto para análisis de sangre (glucemia) como de orina. Si pretende realizar exámenes médicos para la habilitación de vuelo instrumental deberá contar con un audiómetro. Deberán subcontratar con un laboratorio de análisis clínicos la realización de las pruebas analíticas que se exijan (hemoglobina en inicial, perfil lípido (clesterol, triglicéridos, HDL y LDL), si procede). - Equipo informático, que permita su conexión con la Unidad de Medicina aeronáutica de la Dirección General de Aviación Civil. Serán aceptables otros tipos de medios técnicos siempre que se obtengan similares resultados. 2.1.2.2. Para informes médicos conducentes a una Evaluación Médica de Clase 3: 2.1.2.2.1. Aparataje: - Báscula de peso con talla. Martillo de reflejos. Fonendoscopio. Esfingomanómetro. Electrocardiógrafo. Espirómetro. - Depresores linguales. - Linterna o cualquier otra fuente luminosa puntual. - Otoscopio. - Juego de diapasones. - Audiómetro con cabina insonorizada. - Instrumental para determinación de funciones visuales: • lámpara de hendidura con tonómetro de aplanación, campímetro, • test de visión para determinar alteraciones de la binocularidad, • optotipos para determinación de agudeza visual próxima y lejana, • test de Ishilara, • deslumbrómetro, • oftalmoscopio, • frontofocometro, • linterna oftálmica. - Material psicológico que permita la evaluación adecuada del estado psíquico del solicitante. Serán aceptables otros tipos de medios técnicos siempre que se obtengan similares resultados. 2.1.2.2.2. Subcontratación de los siguientes servicios: - Realización de análisis que incluyan las siguientes determinaciones: • análisis sistemático de sangre, • triglicéridos, • colesterol, • HDL y LDL, • glucosa, • urea, • creatinina, • ácido úrico, • GOT (AST), • GPT (ALT), • Gamma-GT, • análisis sistemático de orina. - Detección de drogas: cannabis, cocaina, heroina, anfetaminas, barbitúricos, benzodiacepinas, alcohol. En caso de resultados positivos se deberá efectuar test de confirmación e identificación (podrán hacerse conciertos con laboratorios de toxicología). Deberá establecerse un sistema de custodia de la muestra de orina. 2.1.2.3. En todos los casos, equipo informático que permita su conexión con la Unidad de Medicina aeronáutica de la Dirección General de Aviación Civil. 299 Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 2.2. Procedimiento de actuación Los Médicos Examinadores realizarán sus informes médicos de acuerdo con lo establecido en el JAR-FCL, parte 3 y los párrafos 6.2 y 6.5 del Anexo 1 al Convenio sobre Aviación Civil Internacional, según los casos. 3. Centros Médicos Acreditados - Medios para realizar detección de drogas: cannabis, cocaina, heroina, anfetaminas, barbitúricos, benzodiacepinas, alcohol. - En caso de resultados positivos se deberá efectuar test de confirmación e identificación (podrán hacerse conciertos con laboratorios de toxicología). - Deberá establecerse un sistema para la custodia de la muestra de orina. 3.1. Requisitos para la acreditación 3.1.1. Estará unido o relacionado formalmente a un Instituto médico. 3.1.2. Personal: 3.1.2.1. El equipo médico estará compuesto, como mínimo, por los siguientes profesionales: - Médico especialista en cardiología. Médico especialista en otorrinolaringología. Médico especialista en oftalmología. Médico especialista en radiología. Médico o Farmacéutico especialista en análisis clínicos. - Médico especialista en psiquiatría. 3.1.2.2. El equipo médico deberá estar presente en su totalidad durante la realización de los exámenes médicos que lo requieran. 3.1.1.3. El equipo médico contará también con un Médico Examinador Autorizado de acuerdo con lo establecido en el punto 2.1.1. de esta Resolución. Actuará como Médico general, unificará los critrios y diagnósticos médicos aportados por el resto del equipo y emitirá la certificación correspondiente. 3.1.2. Medios técnicos: Los Centros Médicos para ser acreditados deberán contar, como mínimo, con los siguientes medios técnicos: - Báscula de peso con talla. RX. Martillo de reflejos. Fonendoscopio. Esfigmomanómetro. Electroencefalógrafo. Electrocardiógrafo de 12 bandas. Ergómetro o similar, para realización de ECG de esfuerzos según protocolo de Bruce. - Espirómetro. - Medios para la realización de análisis de sangre y orina que se requieran en cada caso. 300 - Instrumental para determinación de funciones visuales: • lámpara de hendidura con tonómetro de aplanación, • campímetro, • test de visión para determinar alteraciones de la binocularidad (forías), • optotipos para determinación de agudeza visual próxima, • intermedia y lejana, • test de Ishihara (24 láminas), • deslumbrómetro, • oftalmoscopio, • frontofocómetro, • linterna oftálmica. - Instrumental para exploración de funciones auditivas y sentido del equilibrio: • otoscopio neumático, • rinoscopio, • audiómetro (vía aérea y ósea) con cabina insonorizada. • Timpanómetro de impedancia. - Material que permita la evaluación adecuada del estado psíquico del solicitante. - Equipo informático que permita la conexión con la Unidad de Medicina Aeronáutica de la Dirección General de Aviación Civil. 3.2. Procedimiento de actuación Los informes médicos que se realicen en los Centros Médicos acreditados se elaborarán de acuerdo con lo previsto en el JAR-FCL, parte 3 (clases 1 y 2) y en el Anexo 1 al Convenio sobre Aviación Civil Internacional (clase 3), según proceda. 4. Diploma de Médico Examinador Aéreo 4.1. El Diploma de Médico Examinador Aéreo se obtendrá después de haber superado un curso específico de Medicina Aeronáutica en una Facultad de Medicina oficial u organizado por la Dirección General de Aviación Civil. En el primer caso los programas deberán contar con el Visto Bueno de esta Direc- Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 ción General a efectos de cumplimiento de lo establecido en la materia en el JAR-FCL, parte 3. 5. Procedimiento para la obtención de la autorización y la acreditación. 5.1. Médicos Examinadores Autorizados 5.1.1. El interesado deberá presentar en esta Dirección General los siguientes documentos: - Solicitud de autorización, indicando la clase o clases (2 ó 3) a que aspira. - Fotocopia autenticada del DNI. - Certificación de colegiación. - Diploma de Médico Examinador Aéreo, o fotocopia autenticada. Transcurridos tres años desde la fecha de su obtención, deberá acompañarse acreditación de haber realizado un proceso de actualización aprobado al efecto. - Acreditación justificativa de conocimientos prácticos y experiencia. - Memoria de medios técnicos, correspondientes a la clase o clases para las que solicita autorización, que incluya características técnicas del aparataje. 5.1.2. Para proceder a la autorización se requerirá informe médico, sin carácter vinculante, de la Unidad de Medicina aeronáutica de la Dirección General de Aviación Civil, previa la oportuna inspección de los medios técnicos e instalaciones, cuando se considere oportuno. 5.1.3. A los Médicos Examinadores Autorizados se les expedirá un documento acreditativo de la autorización, que recogerá las condiciones de la misma. Serán dados de alta, como tales, en el organismo central de las Autoridades conjuntas de aviación. 5.1.4. Cualquier variación en las condiciones de la autorización será comunicada previamente a la Dirección General de Aviación Civil para su oportuna aprobación. 5.1.5. La autorización tendrá un plazo de validez de tres años, excepto en los supuestos contemplados en el punto 8. 5.2. Centros Médicos Acreditados 5.2.1. Deberán presentar en esta Dirección General los siguientes documentos: - Solicitud de acreditación. - Licencia Fiscal del Titular del Centro para el ejercicio de esta actividad mercantil. - Composición del accionariado y del Consejo de Administración, en su caso. - Relación nominativa de todo el personal médico, acompañada para cada caso de: • Fotocopia autenticada del DNI. • Fotocopia autenticada del Título de especialista. • Certificación de colegiación. • Acreditación del contrato o compromiso con el Centro. - Memoria de medios técnicos, que incluya descripción de las instalaciones y características técnicas del aparataje. - Certificación de subcontratación de servicios y medios técnicos, en su caso. - Memoria referente a otras actividades del Centro, si las tuviera, a efectos de valoración. 5.2.1.1. En relación con el Médico Jefe del equipo propuesto se deberá acreditar su condición de Médico Examinador Autorizado o que está en posesión del Diploma de Médico Examinador Aéreo. Transcurridos tres años desde la fecha de su obtención deberá acompañarse acreditación de haber realizado un proceso de actualización aprobado al efecto. Acreditará también los conocimientos prácticos y experiencia a que se refiere el párrafo 2.1.1.3. 5.2.2. Para proceder a la acreditación se requerirá informe médico, sin carácter vinculante, de la Unidad de Medicina aeronáutica de la Dirección General de Aviación Civil, previa la oportuna inspección. 5.2.3. A los Centros Médicos Acreditados se les expedirá un documento de acreditación, que recogerá las condiciones de la misma y que deberá estar expuesto en las dependencias del Centro. Serán dados de alta, como tales, en el organismo de central de las Autoridades conjuntas de aviación. 5.2.4. Cualquier variación en las condiciones de la acreditación será comunicada previamente a la Dirección General de Aviación Civil para su oportuna aprobación. 5.2.5. La acreditación tendrá un plazo de validez de tres años, excepto en los supuestos contemplados en el punto 8. 6. Renovación de la Autorización y la Acreditación 6.1. Los procedimientos establecidos en este capítulo son comunes para la Autorización de Médicos Examinadores y la Acreditación de Centros Médicos. 301 Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 6.1.1. Deberá formularse una petición de renovación ante esta Dirección General, dentro de los tres meses anteriores a la fecha de caducidad de la autorización o acreditación vigentes. 6.1.2. Se acompañará de los siguientes documentos: - Documento de autorización o acreditación vigente. - Memoria de los reconocimientos efectuados durante el tiempo de vigencia de la autorización o acreditación, especialmente en los últimos doce meses. - En el caso de los Médicos Examinadores Autorizados, acreditación de haber seguido un proceso de actualización de conocimientos aprobado al efecto. 6.1.3. La Unidad de medicina aeronáutica de la Dirección General de Aviación Civil emitirá informe médico, antes de la renovación de la autorización o acreditación, previa inspección si procede. 6.1.4. La renovación de la autorización o acreditación se realizará mediante la emisión de un nuevo documento de autorización o acreditación, por un plazo de tres años. M EDICINA 7. Inspección Los Médicos Examinadores Autorizados y los Centros Médicos Acreditados estarán sujetos a la inspección de la Dirección General de Aviación Civil. 8. Suspensión de la Autorización o Acreditación La Autorización a Médicos Examinadores y la Acreditación de los Centros Médicos podrá ser suspendida o anulada cuando se produzca alguna de las siguientes circunstancias: - No haber tenido actividad en el periodo de vigencia de la autorización o acreditación que se le haya otorgado. - Modificación no autorizada de las condiciones de aprobación. - Haber dejado de reunir los requisitos exigidos para la autorización o acreditación. - Por prácticas no adecuadas a los criterios establecidos en la Orden Ministerial de 30 de noviembre de 1990 o el Anexo 1 al Convenio sobre Aviación Civil Internacional, según los casos, a este respecto. - Por conductas comprobadas contrarias al Código de Deontología Médica. AEROESPACIAL Y AMBIENTAL agradece la colaboración de 3M 302 Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 Noticias FIRST INTERNATIONAL SYMPOSIUM ON MICROGRAVITY RESEARCH & APPLICATIONS IN PHYSICAL SCIENCES & BIOTECHNOLOGY 10-15 September 2000. Sorrento, Italy Co-sponsored by ASI, CINES, CSA, DLR, ESA, NASA and NASDA. Information to Participants: Instructions to authors, details of the programme and all necessary information on registration and accommodation in Sorrento will be provided in the Second Announcement and Call for Papers. This information will also be available on the Internet site of the Symposium: http://www.estec.esa.int/COFANNOUN/ *** INTERNATIONAL FORUM ON SPACE STATION 2000 13-15 June 2000. Berlin, Germany Business, research, outreach & education. Co-Sponsored by ESA, NASA, PKA, NASDA, CSA-ASC. *** cortar por la línea BOLETÍN DE INSCRIPCIÓN A LA SOCIEDAD ESPAÑOLA DE MEDICINA AEROESPACIAL Y AMBIENTAL Nombre y apellidos Calle C.P. Población Provincia Especialidad Nº Tel. FORMA DE PAGO Cheque adjunto Nº caja/banco A nombre de Sociedad Española de Medicina Aeroespacial AUTORIZACIÓN DE DOMICILIACIÓN BANCARIA Banco o Caja de Ahorros Domicilio de la Sucursal (nombre en letras mayúsculas) Nº Calle Población Provincia C.P. Cuenta corriente o Libreta de ahorro nº (clave del (clave y nº de control de la sucursal) banco) Nombre del titular de la cuenta o libreta Ruego a Uds. se sirvan tomar nota de que, hasta nuevo aviso, deberán adeudar en mi cuenta o libreta con esta entidad los efectos que les sean presentados para su cobro por Medicina Aeroespacial y Ambiental Domiciliación bancaria (rellenar autorización adjunta con todos los datos) (nº de cuenta o libreta) a (firma del titular) de Medicina Aeroespacial y Ambiental. Apartado de Correos 46269 - 28080 Madrid 303 Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 ESA ANNOUNCEMENTS OF RESEARCH OPPORTUNITY IN LIFE SCIENCES Part 4: Announcement of Opprtunity for Proposals in Exobiology (Exobiology Multi-User-Facility) (ESA-AO-LS99-LSRA). Dear Colleagues, ESA is issuing this year several Announcements of Research Opportunity in Life Sciences. You are hereby invited to submit: Information on this Announcement is avalaible via Internet at: http://WWW.estec.esa.int/sapceflight/msmlife *** Letters of Intent Proposals prior to 1 October 1999 and prior to 1 December 1999 To: Secretariat A.O. 99 MSM-GA ESTEC Keplerlaan 1 NL-2201 AZ Noordwijk fax: +31.71.565.3661 e-mail: msmlife@estec.esa.nl RTO-HUMAN FACTORS & MEDICINE PANEL SYMPOSIUM ON “OPERATIONAL MEDICAL ISSUES IN HYPO AND HYPERBARIC CONDITIONS” To be held in TORONTO (CANADA) From the 16th to the 20th of October, 2000 The Announcement is divided into parts: DEADLINE FOR RECEIPT OF ABSTRACTS: Part 1: Information complement to the yearly International Life Sciences Research Announcement 1999 (ESA-AOLS-99-LSRA). Part 2: Announcemente for Research Opportunities in the Microgravity Applications Promotion Research Programme (ESA-AO-LS-99-LMPA). Part 3: Announcement for Research Opportunities using Bed Rest as a Tool for Countemeasures Validation (ESAAO-LS-99-BR). US ABSTRACTS: 30 March 2000 OTHER NATIONS: 5 April 2000 PROGRAMME COMMITTEE Chairman: Dr. FRANCISCO RIOS TEJADA, Maj, SPAF MC SPAF Aeromedical Center (CIMA) Arturo Soria 82. 28027 Madrid. SPAIN Tel. 34-914084028 Fax. 34-914084027 E-Mail: Francisco.Rios@aero.cima.es cortar por la línea BOLETÍN DE SUSCRIPCIÓN A MEDICINA AEROESPACIAL Y AMBIENTAL Nombre y apellidos Calle C.P. Población Provincia Especialidad Nº Tel. FORMA DE PAGO Cheque adjunto Nº caja/banco A nombre de Sociedad Española de Medicina Aeroespacial AUTORIZACIÓN DE DOMICILIACIÓN BANCARIA Banco o Caja de Ahorros Domicilio de la Sucursal (nombre en letras mayúsculas) Nº Calle Población Provincia C.P. Cuenta corriente o Libreta de ahorro nº (clave del (clave y nº de control de la sucursal) banco) Nombre del titular de la cuenta o libreta Ruego a Uds. se sirvan tomar nota de que, hasta nuevo aviso, deberán adeudar en mi cuenta o libreta con esta entidad los efectos que les sean presentados para su cobro por Medicina Aeroespacial y Ambiental Domiciliación bancaria (rellenar autorización adjunta con todos los datos) (nº de cuenta o libreta) a (firma del titular) de Medicina Aeroespacial y Ambiental. Apartado de Correos 46269 - 28080 Madrid 304 Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 Co-Chairman: Dr. A. J. F. MACMILLAN Royal Air Force Schol of Aerospace Medicine Farnborough, Hants GU14 6SZ. UK Tel. 44-1252 392 635 Fax. 44-1252 393 469 E-Mail: central-sam@btinternet.com Local Coordinator: Col. D. A. SALISBURY Deputy Director General DCIEM PO BOX 2000. 1133 Sheppard Av West. North York, Ontario M3M 3B9. CANADA Tel. 1-416-6352031 Fax. 1-416-6352011 E-Mail: david.salisbury@dciem.dnd.ca *** II JORNADA DE SANIDAD AEROPORTUARIA El pasado 12 de noviembre tuvo lugar en el Aeropuerto de Barcelona la celebración de la II Jornada de Sanidad Aeroportuaria bajo el patrocinio de Aena y Fundación Aena. El Comité Organizador estuvo formado por los Dres. Zurita y Goitia (AESA) y los Dres. Sáez, Sánchez y Pino y el Sr. Miralles (Aeropuerto de Barcelona). En el próximo número trataremos de reproducir las ponencias presentadas. *** NUEVA JUNTA DIRECTIVA DE LA SEMA En la Asamblea anual de socios de la SEMA, que tuvo lugar el pasado 5 de noviembre en el Aeropuerto de Palma de Mallorca, durante la celebración del Symposium Nacional de Medicina Aeroespacial, se eligieron los nuevos cargos de la Junta Directiva, con el compromiso de elaborar nuevos Estatutos y afrontar los próximos retos médico-aeronáuticos nacionales e internacionales. Los nuevos cargos directivos, elegidos por amplia mayoría, son: Presidente, Dr. Francisco Ríos Tejada (Madrid); Secretario, Dr. Carlos Velasco Díaz (Madrid); Vicesecretario, Dr. Alvaro Hebrero Óriz (Palma de Mallorca); Tesorero, Dr. Mario Martínez Ruiz (Madrid); Vocales: Dr. Ramón Domínguez Mompell (Madrid), Dr. Alfredo Goitia Gorostiza (Bilbao), Dr. Tomás Martín Robledo (Madrid) y Dr. Francisco Xavier Torrens Arnaldich (Barcelona). La nueva Junta agradeció las gestiones, dedicación y logros alcanzados por los anteriores miembros (Dr. José Luis López Villa, Dr. Pedro Ortiz García, Dr. José María Pérez Sastre, Dr. Fernando Pérez Torralba y Dr. Alfredo Rosado Bartolomé). 305 Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 NORMAS PARA LA PUBLICACION DE ARTICULOS L a revista MEDICINA AEROESPACIAL Y AMBIENTAL aceptará, para su publicación, aquellos trabajos originales relacionados directamente con las áreas de medicina aeronáutica, medicina espacial, medicina marítima, medicina subacuática, medicina ambiental y disciplinas relacionadas: fisiología aeroespacial, medicina del trabajo, salud y seguridad en el trabajo, ergonomía, medicina deportiva, medicina hiperbárica, biología ambiental, psicosociología, farmacología, cronobiología, bioingeniería y enfermería aeroespacial. SECCIONES: 1. Editorial: Trabajos escritos por encargo del Comité de Redacción, o redactados por alguno de sus miembros. Extensión: máximo 10 folios. Bibliografía: máximo 10 citas. 2. Originales: Trabajos de investigación relacionados directamente con las áreas definidas con anterioridad. Extensión: máximo 20 folios. Tablas: máximo 6. Figuras: máximo 6. Bibliografía: máximo 50 citas. 3. Comunicaciones: Artículos cuyo contenido suponga una aportación relevante al conocimiento de las áreas definidas con anterioridad. Extensión: máximo 10 folios. Tablas: máximo 4. Figuras: máximo 4. Bibliografía: máximo 15 citas. 2 folios. Tablas: máximo 1. Figuras: máximo 1. Bibliografía: máximo 10 citas. 9. Noticias: Difusión pública de las actividades científicas de sociedades, entidades y organismos colaboradores o de aquellas que puedan tener interés para los lectores. 10. Literatura: Resumen de textos relacionados con las áreas ya definidas y considerados de interés para los lectores, realizados e encargados por el Comité de Redacción. Extensión: máximo 1 folio. PRESENTACION Y ESTRUCTURA DE LOS TRABAJOS: Los trabajos se remitirán en folios DIN A4, mecanografiados a doble espacio, escritos por una sola cara y numerados. Para mayor agilidad y fidelidad con el original, conviene remitir además copia del texto del manuscrito en soporte informático, indicando procesador de textos utilizado, con copia en lenguaje ASCII si se trabaja en entorno Windows, utilizando disquetes de 3 1/2 pulgadas. Cada parte del manuscrito empezará con una nueva página en el siguiente orden: 4. Revisión: Trabajos que versen sobre algunas de las áreas declaradas anteriormente, ya sean encargados por el Comité de Redacción, o remitidos espontáneamente por el autor y aceptados como tales. Extensión: máximo 20 folios. Tablas: máximo 6. Figuras: máximo 6. Bibliografía: máximo 50 citas. 1. Página de presentación: La primera página aportará la siguiente información: título en castellano y en inglés; nombre completo de los autores; centro de trabajo y dirección completa del mismo; autor responsable y dirección para la correspondencia; y otras especificaciones que se consideren necesarias. 5. Abstracts: Bibliografía comentada y resúmenes de trabajos distinguidos y publicados en otras revistes afines, escritos por encargo del Comité de Redacción o redactados por alguno de sus miembros. 2. Resumen y palabras clave: La segunda página aportará la siguiente información en castellano e inglés: título del trabajo, resumen del mismo (abstract) y palabras clave (key words). 6. Humanidades: Trabajos que versen sobre aspectos históricos, bioéticos, socioculturales o educativos relacionados con las áreas declaradas anteriormente. Extensión: máximo 10 folios. Tablas: máximo 4. Figuras: máximo 4. Bibliografía: máximo 15 citas. 7. Formación continuada: Trabajos que versen sobre las áreas declaradas anteriormente, encargadas por el Comité de Redacción o redactadas por alguno de sus miembros. Extensión: máximo 15 folios. Tablas: máximo 5. Figuras: máximo 5. 8. Correspondencia: Comentarios o críticas a artículos publicados en la revista, o bien, experiencias u observaciones breves relacionadas con las áreas ya definidas. Extensión: máximo 306 2.1 El resumen tendrá una extensión en castellano máxima de 200 palabras y se caracterizará por: poder ser comprendido sin leer parcial o totalmente el artículo; estar redactado en términos concretos, desarrollando los puntos esenciales del artículo; seguir la misma ordenación del artículo (objetivos, material, método, resultados más destacados y principales conclusiones); no incluir material o datos no citados en el texto. 2.2 Al pie del resumen se especificarán de tres a seis palabras clave o lexemas, que identifiquen el contenido del trabajo para la elaboración del índice de la revista y su inclusión en repertorios y bases de datos biomédicos. 3. Partes del texto: Conviene dividir claramente los trabajos en apartados según el siguiente esquema: Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 3.1 Originales: Introducción (que será breve y contendrá la intencionalidad del trabajo de modo que el lector pueda comprender el texto que le sigue); Material y método (información completa y detallada del material utilizado en el trabajo, características, criterios de selección y técnicas empleadas, de modo que el trabajo pueda ser reproducido por otro investigador); Resultados (datos obtenidos, sin interpretación, que pueden detallarse en el texto o en forma de tablas y figuras); Discusión (opiniones sobre los resultados, interpretación, aplicación práctica y comparación de los mismos con los resultados obtenidos por otros autores). 3.2 Comunicaciones: Introducción (similar a la de los originales), Caso(s) aportado(s) (resumen de la historia clínica completa, numerándolos correlativamente si se aportan varios), Discusión (similar a la de los originales). 3.3 Otros trabajos: Estructura libre del texto. 4. Bibliografía: Las citas bibliográficas se numerarán de acuerdo con su orden de aparición en el texto. Los nombres de las revistas deben abreviarse siguiendo el estilo empleado en la “list of journals indexed” anual del Index Medicus. No son válidas como citas bibliográficas las referencias del tipo “observación no publicada” o “comunicación personal”, pero sí pueden citarse entre paréntesis dentro del texto. Los artículos aceptados, pero pendientes de publicación, pueden incluirse en las citas bibliográficas, añadiendo entre paréntesis la frase “en prensa” a continuación del nombre de la revista. capítulo. En: Autores del libro (eds.). Título del libro. Ciudad de la editorial: Editorial, año; página inicial-final. Ejemplo: Tredici TJ. Ophtalmology in aerospace medicine. En: DeHart RL (ed.). Fundamentals of aerospace medicine. Philadelphia: Lea and Febiger, 1985; 484-500. 5. Ilustraciones: Serán de dos tipos: tablas y figuras. Se presentarán en sobre aparte. 5.1 Tablas: Se presentarán en hojas aparte, una sola tabla por hoja, numeradas, con el título correspondiente en la parte superior y con las notas aclaratorias al pie. Si se prefiere, pueden enviarse tablas en diapositivas, identificándolas convenientemente sobre el marco, exponiendo en hoja aparte el texto correspondiente al pie. 5.2 Figuras: Podrán ser gráficas o fotografías, numerándose correlativa y conjuntamente como figuras, al reverso si se trata de papel (mediante etiqueta adhesiva) o sobre el marco si es diapositiva, exponiendo en hoja aparte el texto correspondiente al pie. La identificación al dorso incluirá nombre del primer autor, número de figura y una flecha que indique la parte superior. 5.2.1 Gráficas: Dibujadas a tinta china negra o impresas con calidad similar, de dimensiones nunca inferior a 9 x 13 cm. Si se prefiere, pueden enviarse gráficas en diapositivas, identificándolas convenientemente sobre el marco, exponiendo en hoja aparte el texto correspondiente al pie. 4.1 Revistas: Apellidos e iniciales del nombre de los autores o corporación (relacionar todos los autores si son seis o menos; si son siete o más, relacionar sólo los tres primeros añadiendo “et al”). Título del trabajo. Nombre de la revista. Año; volumen: página inicial-final. 5.2.2 Fotografías: Serán de buena calidad, en positivo blanco y negro de 9 x 13 cm o en diapositiva. Ejemplo:Baker SP, Lamb MW, Li G, Dodd RS. Human factors in crashes of commuter airplanes. Aviat Space Environ Med 1993; 64: 63-68. * El Comité de Redacción se reserva el derecho de rechazar los trabajos que no estime oportunos, así como de proponer las modificaciones de los mismos cuando lo considere necesario. 4.2 Libros y otras monografías: 4.2.1 Autor(es) personal(es): Apellidos e iniciales. Título del libro. Ciudad de editorial: Editorial, año. Ejemplo: Reason JJ, Brand JJ. Motion sickness. London: Academic Press, 1975. 4.2.2 Autor corporativo, editor (es), compilador(es), director(es): Corporación o autor(es). Título del libro. Ciudad de editorial: Editorial, año. Ejemplo: Commission on Accreditation of Air Medical Services. Accreditatios standards. Anderson SC: Association of Aeromedical Services, 1991. 4.2.3 Capítulo de un libro. Autor(es) del capítulo. Título del * El Comité de Redacción acusará recibo de los trabajos enviados a la Revista e informará acerca de su aceptación. * Excepto autorización expresa, no se aceptarán trabajos publicados o presentados al mismo tiempo en otra revista. * La Dirección y el Comité de Redacción no se responsabilizan de los conceptos, opiniones o afirmaciones sostenidas por los autores en sus trabajos. Caso de ser aceptados, quedarán en propiedad de la revista y su reimpresión posterior precisará la autorización de la misma. * Los trabajos se remitirán por triplicado a MEDICINA AEROESPACIAL Y AMBIENTAL. Apartado de Correos Nº 46269 - 28080 MADRID, acompañados de una carta de presentación en la que se solicite el examen de los mismos para su publicación en alguna de las secciones de la revista. * Para comunicaciones por correo electrónico utilizar la siguiente dirección: mmr@icomem.es 307 Medicina aeroespacial y ambiental. Vol. II Nº 6. Noviembre 1999 Bibliografia comentada LIBROS Manual para la Investigación Médica de Accidentes Aéreos. Un volumen de 147 páginas de 20x14 cm., que contiene 16 fotografías, 14 figuras y 13 ilustraciones. Publicado por la Secretaría General Técnica del Ministerio de Defensa. Paseo de la Castellana nº 109, 28071 Madrid, ISBN 84-7823-666-X y con fecha de Edición de Julio de 1999. Esta obra trata de forma esquemática y fácilmente comprensiva la primera recopilación en castellano que se hace sobre la estructura y metodología médica a emplear en la investigación de un accidente aéreo desde el punto de vista aeromédico. A lo largo de 20 capítulos y 13 anexos se revisan los conceptos generales, definiciones, ordenación jurídica, obligaciones del médico investigador, factores humanos, normas generales, plan de investigación, actuaciones preliminares, evaluación general del accidente, entrevistas, valoración de las muestras biológicas y pruebas, autopsia, identificación, presencia de fuego, supervivencia al impacto, análisis de las lesiones y elaboración del informe final. Además se expone un ejemplo de accidente y en sucesivos anexos información adicional sobre el equipo necesario para la in- 308 vestigación, la interpretación de niveles tóxicos, formato de entrevista, tablas sobre temperaturas de ignición de diferentes metales, límites de tolerancia humana al impacto, listado de comunicaciones y teléfonos de interés, listado de procedimientos, diagramas de impacto, formato de autopsia médico-aeronáutica, procedimientos para la recogida de muestras toxicológicas y clasificación de factores humanos. Finalmente se incluye un gran número de referencias y un glosario de términos de interés. En definitiva se trata de un elemento de ayuda al médico investigador de un accidente poniendo en sus manos un texto de consulta donde puede encontrar fácilmente respuesta y orden a un proceso siempre abigarrado y complejo como es el de la investigación de un accidente aéreo. DR. FRANCISCO RIOS TEJADA ***