Documento descargado de http://www.elsevier.es el 01/12/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. ARCH SOC ESP OFTALMOL. 2014;89(1):4–9 ARCHIVOS DE LA SOCIEDAD ESPAÑOLA DE OFTALMOLOGÍA www.elsevier.es/oftalmologia Artículo original Retinoblastoma trilateral. Correlación de las alteraciones genéticas del gen RB1 y la presencia de quistes de la glándula pineal N. Ruiz del Río a,∗ , J.M. Abelairas Gómez b , F.J. Alonso García de la Rosa c , J.M. Peralta Calvo b y A. de las Heras Martín d a Hospital Manises, Valencia, España Hospital Universitario La Paz, Madrid, España c Instituto de Investigaciones Biomédicas Alberto Sols, Madrid, España d Hospital La Mancha Centro, Ciudad Real, España b INFORMACIÓN DEL ARTÍCULO R E S U M E N Historia del artículo: Objetivo: Identificar la correlación entre la presencia de alteraciones genéticas identificadas Recibido el 12 de julio de 2010 en el gen RB1 y el desarrollo de retinoblastoma trilateral. Aceptado el 2 de julio de 2013 Método: De un total de 206 pacientes con retinoblastoma, no se identificaron pacientes con On-line el 5 de octubre de 2013 tumor neuroectodérmico primario (PNET), pero sí 17 casos de quistes pineales, 11 de los Palabras clave: Resultados: De los 11 pacientes a los que se les practicó estudio genético, en 8 casos se Retinoblastoma identificó la alteración en la línea germinal, lo que equivale al 100% de los retinoblastomas Trilateral bilaterales y al 25% de los unilaterales. Es más frecuente encontrar mutación germinal en cuales tenían estudio genético. Quimioterapia los pacientes con enfermedad bilateral (p = 0,024). No hay diferencias significativas en el Genética tipo de alteración identificada, aunque el tipo nonsense-frameshift es el más frecuente Gen RB1 en los casos con afectación bilateral. La identificación de la alteración genética es más frecuente en los pacientes que presentan quistes pineales (T Fisher p = 0,490). Nueve de los 17 pacientes recibieron quimioterapia sistémica (52,29% de los casos), lo que podría abortar el desarrollo de PNET. Aunque en todos los parámetros citados se observa cierta tendencia. Hay asociación entre la presencia de quistes pineales y enfermedad bilateral (Chi cuadrado de Pearson p = 0,191):, antecedentes familiares conocidos (T Fisher p = 0,114) y edad de diagnóstico precoz (T Fisher p = 0,114). No hay diferencias significativas en el tipo de mutación identificada. Conclusiones: Considerando los quistes pineales como una forma premaligna del pinealoblastoma, encontramos una asociación con la mutación de la línea germinal del gen RB1, tanto en casos con retinoblastoma unilateral como bilateral. © 2010 Sociedad Española de Oftalmología. Publicado por Elsevier España, S.L. Todos los derechos reservados. ∗ Autor para correspondencia. Correo electrónico: noeruizdelrio@yahoo.es (N. Ruiz del Río). 0365-6691/$ – see front matter © 2010 Sociedad Española de Oftalmología. Publicado por Elsevier España, S.L. Todos los derechos reservados. http://dx.doi.org/10.1016/j.oftal.2013.07.006 Documento descargado de http://www.elsevier.es el 01/12/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. ARCH SOC ESP OFTALMOL. 2014;89(1):4–9 5 Trilateral retinoblastoma. Correlation between the genetic anomalies of the RB1 gene and the presence of pineal gland cysts a b s t r a c t Keywords: Objetive: To determine the correlation between the presence of genetic anomalies identified Retinoblastoma in the RB1 gene and the development of trilateral retinoblastoma. Trilateral Method: No patients with primitive neuroectodermal tumour (PNET) were identified out of Chemotherapy a total of 206 patients, but there were 17 cases of pineal cysts, of which 11 had a genetic Genetic study. RB1 gene Results: Of the 11 patients who had a genetic study performed, the anomaly in the germinal line was identified in 8 cases, which was equivalent to 100% of the bilateral retinoblastomas, and 25% of the unilateral ones. It is more common to find a germinal mutation in patients with bilateral disease (P=.024). There are no significant differences in the type of anomaly identified, although the nonsense-frameshift type is more frequent in cases with bilateral involvement. Identification of the genetic anomaly is more frequent in patients who have pineal cysts (Fisher test; P=.490). Nine of the 17 patients received systemic chemotherapy (52.29% of the cases), which could be able to prevent the development of PNET. Although a certain trend was observed in all the mentioned parameters, there was a relationship between, the presence of pineal cysts and bilateral disease (Pearson Chi X2: P=.191), a known family history (Fisher test; P=.114) and age of early diagnosis (Fisher test; P=.114). There were no significant differences in the mutation type identified. Conclusions: Considering pineal cysts as a pre-malignant form of pinealoblastoma, we found a relationship between the germinal line mutation of the RB1 gene and the cases with bilateral or unilateral retinoblastoma. © 2010 Sociedad Española de Oftalmología. Published by Elsevier España, S.L. All rights reserved. Introducción La asociación de retinoblastoma con un tumor intracraneal en la región de la glándula pineal fue descrita por primera vez por Jacobiec et al., en 19771 . El término de retinoblastoma trilateral se acuñó para designar retinoblastomas bilaterales asociados con tumores intracraneales de la línea media2 . Originalmente, el tumor de localización intracraneal se denominó pinealoblastoma, dado que presentaba células pequeñas, redondeadas y típicas, con poco citoplasma y se localizaba en la región pineal. Hoy en día ha pasado a denominarse tumor neuroectodérmico primario (PNET)3 . Histológicamente, salvo porque está mas vascularizado, es idéntico al meduloblastoma de fosa posterior4 . La incidencia de PNET en los pacientes con retinoblastoma que presentan mutación en el gen RB1 es de aproximadamente 2-3%2 . Aunque en la mayoría de los casos el retinoblastoma es bilateral, se han descrito algunos casos de retinoblastoma unilateral heredable asociado a PNET3,5 . Los signos clínicos de los tumores pineales son la fiebre, vómitos, meningismo, cefalea, papiledema bilateral, hidrocefalia o crisis epilépticas6 . El diagnóstico del PNET puede preceder, coincidir o secundar al diagnóstico de retinoblastoma2–4 . En la actualidad, se considera retinoblastomas trilaterales no solo a los que presentan el tumor en la región pineal sino también en la línea media cerebral. Kingston reportó una revisión de 360 pacientes con retinoblastoma, 12 de los cuales asociaban PNET, 8 localizados en el área pineal y 4 en la región supraselar3 . En los estudios histológicos se ha descrito la presencia de rosetas en los PNET asociados a retinoblastoma, también se han identificado distintos antígenos comunes en ambos tumores; algunos estudios han demostrado la positividad en ambos tumores de un mismo paciente para la enolasa específica de neuronas (NSE), antígeno S, rodopsina y proteína ácida fibrilar glial7 . Hay una hipótesis que valora la posibilidad de que esos tumores de línea media tengan su origen en alguna célula vestigio de fotorreceptores, y se apoya en el hecho de que esos tumores pueden presentar diferenciación celular hacia fotorreceptores, fleuretes y rosetas de Flexner-Wintersteiner, muy característicos del retinoblastoma7 . Este tipo de tumores no tiene un tratamiento efectivo: la supervivencia media tras el diagnóstico de PNET es de 8 meses en los pacientes que asocian retinoblastoma3 . La vincristina y la ciclofosfamida parecen tener un efecto beneficioso temporal6 . Clásicamente, el diagnóstico del tumor trilateral se hacía con TC, objetivándose una masa calcificada en la región selar o supraselar que se realza con el contraste. Hoy en día, el diagnóstico se efectúa con RM. El empleo de la RM para hacer screening de las lesiones intracraneales de línea media es controvertido, y es dudoso que el diagnóstico presintomático alargue la supervivencia. Algunos como Nelson o Ryan proponen un protocolo con RM seriadas para hacer un diagnóstico precoz. Sin embargo, dado el escaso beneficio del screening en cuanto a supervivencia, la mayoría de los autores no lo usan de modo rutinario. El cribado mediante RM cerebral de los pacientes con retinoblastoma hereditario permite detectarlo más Documento descargado de http://www.elsevier.es el 01/12/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. 6 ARCH SOC ESP OFTALMOL. 2014;89(1):4–9 precozmente y parece prolongar la supervivencia del paciente (16 vs. 8 meses; p = 0,001), pero esto probablemente sea un sesgo, debido al diagnóstico precoz, dado que no se identifican diferencias estadísticamente significativas en la edad de fallecimiento (36 vs. 37 meses)8 . Todos los pacientes cuyo tumor es mayor de 15 mm fallecen8,9 . Su pronóstico es funesto, generalmente debido al desarrollo de metástasis cerebrales, aunque se han descrito respuestas con protocolos similares a los utilizados en el tratamiento de metástasis cerebrales, incluyendo trasplante autólogo de médula ósea10,11 . También se ha descrito una menor incidencia en los pacientes tratados con quimiorreducción, sugiriéndose que esta podría prevenir o retrasar la aparición del PNET12 . Los quistes pineales son considerados, en la mayoría de los casos, hallazgos incidentales; se identifican en RM realizadas en pacientes por cualquier enfermedad craneal; tienen una prevalencia de entre 2-8% de la población general, 0,5% en los menores de un año y 1,6% de los menores de 5 años de edad13 . Sin embargo, se identifican en el 5% de los pacientes con retinoblastoma14 . El gen RB1 es un gen supresor y se transmite con una herencia autonómica recesiva. Es preciso que se alteren las 2 copias del gen para que se manifieste la enfermedad. El gen RB1 codifica una proteína, la Rb que se localiza en el núcleo celular y regula el control del ciclo celular. Está implicada en el desarrollo de la mayoría de los tumores, aunque no en todos los casos está alterado el gen que la codifica. Sujetos, material y método Se ha elaborado un estudio observacional y retrospectivo. Presentamos una serie de 206 pacientes y 282 ojos con retinoblastoma. Un total de 115 de los pacientes tienen disponible el resultado del análisis genético para el gen RB1. Son pacientes diagnosticados o remitidos y tratados en el Hospital Universitario La Paz, por el servicio de Oftalmología Infantil. El análisis genético ha sido realizado por el Instituto de Investigaciones Biomédicas Alberto Sols CSIC-UAM en Madrid. Para el análisis genético se toma muestra de sangre periférica a los pacientes y a sus familiares en primera o segunda línea, cuando se ha identificado mutación en la línea germinal, para elaborar patrones de herencia completos. Se realiza PCR para amplificar la región del cromosoma 13 que codifica el gen RB1 y, posteriormente, se analiza mediante secuenciación, southern blot y análisis de fragmentos. El análisis estadístico se ha realizado utilizando como herramienta el programa informático SPSS (IBM, Chicago) para Windows en su versión 15.0. El nivel de significación estadística se situó a priori en todas las pruebas en un valor de probabilidad (p) menor a 0,05. Tabla 1 – Relación entre la presencia de quiste pineal y la lateralidad del proceso Lateralidad Unilateral Bilateral Quiste pineal No Sí 122 8 67 9 189 17 Total 130 76 206 Chi cuadrado de Pearson p = 0,191. Tabla 2 – Relación entre la presencia de quiste pineal y la existencia de antecedentes familiares de enfermedad AAFF No Sí Quiste pineal No Sí 177 14 12 3 189 17 Total 191 15 206 Estadístico exacto de Fisher p = 0,114. hipófisis, tres anomalías de Arnold Chiari y 17 quistes pineales. De los 17 casos en que se han descrito quistes pineales, 11 disponen de estudio genético para el gen RB1. Para algunos autores estos quistes corresponden a formas benignas de pinealoblastoma14 . No se encontraron diferencias estadísticamente significativas entre los pacientes con quistes pineales y los que no los presentan, ni en cuanto a la lateralidad (Chi cuadrado de Pearson p = 0,191) (tabla 1), ni en los antecedentes familiares (estadístico exacto de Fisher p = 0,114) (tabla 2), ni en la edad de presentación (estadístico exacto de Fisher p = 0,114) (tabla 3), aunque en todos los parámetros se observa cierta tendencia. Los quistes pineales son más frecuentes en pacientes con enfermedad bilateral, con antecedentes familiares conocidos o con retinoblastoma diagnosticado entre los 12 y 24 meses de vida. De los 11 pacientes a los que se les practicó estudio genético, en ocho casos se identificó la alteración, lo que equivale al 100% de los casos con enfermedad bilateral y al 25% de los unilaterales (tabla 4). La distribución de los pacientes según el tipo de mutación identificada en la línea germinal y la lateralidad del Tabla 3 – Relación entre la presencia de quistes pineales y la edad de diagnóstico Edad al diagnóstico <6 m Resultados En el total de nuestra serie, en 206 pacientes no se ha diagnosticado ningún PNET. Las enfermedades de línea media que se han identificado han sido las siguientes: un angioma cerebral, dos quistes aracnoideos, dos macroadenomas de Total 6-12 m 12-24 m > 24 m Quiste pineal 52 No Sí 5 37 2 41 6 59 4 189 17 57 39 47 63 206 Total Estadístico exacto de Fisher p = 0,114. Documento descargado de http://www.elsevier.es el 01/12/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. 7 ARCH SOC ESP OFTALMOL. 2014;89(1):4–9 Tabla 4 – Identificación de la mutación en sangre periférica, según la lateralidad del retinoblastoma, en los casos con quistes pineales Lateralidad Tipo de alteración Unilateral Unilateral Missense-splice Bilateral Portador de la mutación identificada 3 No Sí 1 Total Tabla 7 – Relación entre la existencia de quistes pineales y el tipo de mutación identificado 4 0 7 3 8 7 11 Nonsenseframeshift Deleción Quiste pineal No Sí 15 1 26 3 11 1 52 5 Total 16 29 12 57 Estadístico exacto de Fisher p = 0,024. Tabla 8 – Tratamiento recibido por los pacientes con quiste pineal Tabla 5 – Tipo de alteración genética identificada según la lateralidad del proceso Frecuencia a Lateralidad Unilateral Bilateral Tipo de alteración genética No identif. Missense Nonsense-Frameshift Splice Deleción 3 0 1 0 0 0 1 3 2 1 3 1 4 2 1 Total 4 7 11 Enucl 1 QTP RTP Local QTP+RTP QTP+local RTP+local Total 4 4 1 2 1 4 1 17 Porcentaje 23,5 23,5 5,9 11,8 5,9 23,5 5,9 100,0 Enucl 1.a : enucleación primaria; Local: tratamiento local, termoterapia o crioterapia; QTP: quimioterapia; RTP: radioterapia externa o braquiterapia. Estadístico exacto de Fisher p = 0,115. retinoblastoma es la representada en la tabla 5. No hay hallazgos estadísticamente significativos, sin embargo, el tipo de mutación nonsense-frameshift es el más frecuente en los casos con afectación bilateral, en general, además de ser el grupo con mejor pronóstico, en nuestra serie, en cuanto a conservación del globo ocular. Por otra parte, en los pacientes con quistes pineales es más frecuente identificar la mutación asociada al gen RB1 respecto a los pacientes sin quistes, aunque estadísticamente no es significativo (estadístico exacto de Fisher p = 0,490) se aprecia una marcada tendencia, que se expresa en la tabla 6. La distribución de los pacientes según el tipo de mutación identificada se representa en la tabla 7, tanto en los casos que asocian quistes como en los que no. La mutación más frecuente es la del tipo nonsense-frameshift. En la mayor parte de los casos en los que se identificaron quistes pineales se había empleado la quimiorreducción como tratamiento. En la tabla 8 se describe el tratamiento que recibió cada uno de los pacientes en los que se diagnosticó quiste Tabla 6 – Asociación entre la presencia de quistes pineales y la identificación de alteración genética en sangre periférica Pineal No Mutación genética identificada 55 No Sí 52 Total 107 Estadístico exacto de Fisher p=0,490. No Sí 3 5 58 57 8 115 pineal. Un total de 9 de los 17 pacientes han sido tratados con quimioterapia sistémica, ya fuera de forma aislada o adyuvada con otros tratamientos. Algunos autores han señalado la importancia que podría tener el uso de quimioterapia en el desarrollo del retinoblastoma trilateral12 . Discusión Como han señalado otros autores, la supervivencia del paciente con retinoblastoma viene determinada fundamentalmente por la existencia de 3 factores: el desarrollo de metástasis, la aparición de segundas neoplasias malignas en pacientes genéticamente predispuestos y el desarrollo de retinoblastomas trilaterales. En nuestra serie no contamos con ningún paciente que haya desarrollado metástasis, solo uno con una segunda neoplasia maligna, una leucemia, y ninguno que haya desarrollado un pinealoblastoma. A pesar de que la incidencia de pinealoblastomas o tumores de la línea media en pacientes con retinoblastoma bilateral está documentada con una frecuencia de entre 2 y 3%2 , no hemos encontrado ningún caso en nuestra serie. Recientemente han aparecido publicaciones científicas en las que se considera a los quistes de la glándula pineal como formas benignas de pinealoblastoma14,15 . En nuestra serie se han descrito 17 casos con quistes pineales. Es una incidencia relativamente alta para un signo que podría considerarse un hallazgo incidental. La identificación de los quistes se hace con el estudio de RM, que se efectúa en los pacientes de manera protocolizada. No encontramos diferencias estadísticamente significativas de los pacientes con quistes pineales respecto al resto de nuestra serie ni en cuanto a la bilateralidad, ni en la existencia de antecedentes familiares conocidos, ni en la edad de Documento descargado de http://www.elsevier.es el 01/12/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. 8 ARCH SOC ESP OFTALMOL. 2014;89(1):4–9 presentación. Aunque en todos los parámetros citados se observa cierta tendencia. Tienen una mayor incidencia en los casos de enfermedad bilateral (Chi cuadrado de Pearson p = 0,191), en los casos con antecedentes familiares conocidos (estadístico exacto de Fisher p = 0,114) y son algo más frecuentes en los pacientes en los que aparece entre los 12 y los 24 meses de edad (estadístico exacto de Fisher p = 0,114). Todas ellas son características de los tumores con alteraciones genéticas en la línea germinal. De los pacientes con estudio genético, en 8 casos se identificó la alteración en sangre periférica, lo que equivale al 100% de los casos bilaterales y al 25% de los unilaterales. Todos esos pacientes presentaban alteración en la línea germinal. Como es lógico pensar, es más frecuente encontrar mutación germinal en los pacientes con enfermedad bilateral (p = 0,024), pero los casos unilaterales con mutación también son pacientes con tumores heredables. La razón por la que en los pacientes con quistes pineales es más frecuente identificar la mutación del gen RB1, aunque no es estadísticamente significativa (p = 0,490), probablemente sea porque no podemos excluir los casos unilaterales en los que no se ha identificado la mutación en sangre periférica. Si asumimos la naturaleza del quiste pineal como una forma premaligna del pinealoblastoma, lo lógico es pensar que todos estos pacientes tienen la mutación de la línea germinal, aun cuando con los métodos de los que se dispone en la actualidad no podamos identificarla. Probablemente el desarrollo de técnicas para identificación de mutaciones genéticas nos permita conocer en mayor profundidad la historia natural de los distintos tipos de retinoblastomas, e incluso verificar si los quistes pineales son en realidad formas benignas de retinoblastomas trilaterales. Recientemente, se ha señalado que la incidencia de retinoblastomas trilaterales podría estar disminuyendo debido a la introducción del uso de la quimioterapia, que podría interferir en su desarrollo14 . Nueve de los 17 pacientes con quistes pineales han sido tratados con quimioterapia sistémica (52,29% de los casos). Podría inferirse que esas lesiones corresponden a una forma abortada de pinealoblastoma. En nuestro trabajo hemos valorado la asociación de las alteraciones genéticas del gen RB1 con las distintas características epidemiológicas, clínicas y pronósticas del retinoblastoma. Sin embargo, otros genes relacionados con el desarrollo del cáncer intervienen también en estos procesos16–23 , influyendo tanto en el desarrollo del retinoblastoma como en la transformación desde un retinoma o en el desarrollo de otros segundos tumores primarios. No se conoce la totalidad de los genes implicados en el retinoblastoma, aunque la relación causal entre el gen RB1 está suficientemente demostrada. En un tiempo futuro, la ingeniería genética podría servir como arma terapéutica, al corregir las alteraciones que llevan a la pérdida de heterocigosidad del gen RB1, o al menos a la síntesis de una proteína (pRb) truncada o disfuncional. Considerando los quistes pineales como una forma premaligna del pinealoblastoma, resulta más frecuente encontrar asociación con la mutación de la línea germinal, tanto en casos de retinoblastomas unilaterales como en bilaterales. La prevalencia de quistes pineales en los pacientes con retinoblastoma es mucho más alta que la de la población general. El uso de la quimioterapia sistémica podría interferir en el desarrollo del PNET. La mutación del gen RB1 en la línea germinal podría estar relacionada con el desarrollo del retinoblastoma trilateral. Conflicto de intereses Los autores declaran no tener ningún conflicto de intereses. bibliograf í a 1. Jakobiec FA, Tso MO, Zimmerman LE, Danis P. Retinoblastoma and intracranial malignancy. Cancer. 1977;39:2048–58. 2. Bader JL, Meadows AT, Zimmerman LE, Rorke LB, Voute PA, Champion LA, et al. Bilateral retinoblastoma with ectopic intracranial retinoblastoma: Trilateral retinoblastoma. Cancer Genet Cytogenet. 1982;5:203–13. 3. Kingston JE, Plowman PN, Hungerford JL. Ectopic intracranial retinoblastoma in childhood. Br J Ophthalmol. 1985;69:742–8. 4. Meadows A. Trilateral retinoblastoma. Med Pediatr Oncol. 1986;14:323–6. 5. Bullitt E, Crain BJ. 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