Lic. Nutrición Dietética 3-A TIPOS DE ANEMIAS Vargas Baltazar Daniela Guadalupe 31 de enero 2025 ¿Qué es la anemia? La anemia es un trastorno más frecuente de lo que se llega a imaginar. Popularmente se le conoce a la anemia como “falta de sangre”, lo que es incorrecto. La anemia es la reducción de glóbulos rojos, mejor llamados eritrocitos en sangre. Los glóbulos rojos son las células encargadas de transportar el oxígeno a todos los órganos y tejidos del cuerpo. Entones, en general la anemia es un signo de enfermedad y surge cuando el porcentaje de eritrocitos en sangre se reduce y queda diluida. La anemia puede ser la manifestación de una enfermedad hematológica o una manifestación secundaria a muchas otras enfermedades por eso es importante conocer el tipo de anemia que presenta y evaluar las posibles causas. A continuación, enlistamos los distintos tipos de anemia, que nutrientes intervienen y algunos alimentos recomendados para cada una de ellas. 1. Anemia Ferropénica Uno de los tipos más comunes de anemia, se produce principalmente debido a la disminución del consumo de alimentos ricos en hierro. Sin embargo, este tipo de anemia también puede surgir después de una hemorragia o menstruación severa, debido a la pérdida de hierro en sangre. Debido a la disminución de la cantidad de hierro, es posible observar la disminución de la cantidad de hemoglobina circulante, ya que el hierro es esencial para la formación de hemoglobina, causando síntomas como cansancio, debilidad, somnolencia, sensación de mareos o desmayo, uñas débiles y quebradizas, piel seca y caída de cabello. Los nutrientes clave que intervienen en su prevención y tratamiento incluyen: -Hiero: Es esencial para la producción de hemoglobina en los glóbulos rojos. Alimentos: Carnes rojas, hígado, mariscos, legumbres, espinaca, frutos secos. -Vitamina C: Mejora la absorción del hierro. Alimentos: Cítricos, fresas, kiwi, pimiento. -Ácido fólico (vitamina B9): Necesario para la producción de glóbulos rojos. Alimentos: Vegetales de hoja verde, legumbres, aguacate, hígado. 2. Anemia Falciforme Trastorno genético que afecta la forma y función de los glóbulos rojos, haciéndolos más frágiles y propensos a bloquear vasos sanguíneos. No se debe a una deficiencia nutricional, pero una alimentación adecuada puede ayudar a manejar los síntomas y reducir las crisis, Este tipo de anemia caracterizada por la alteración en la forma de los eritrocitos, los cuales adquieren forma de hoz o de medialuna, causa síntomas como cansancio excesivo, palidez, dolor generalizado, hinchazón de los pies y manos, además de ojos y piel amarillenta. Los nutrientes clave que intervienen en su prevención y tratamiento incluyen: -Ácido fólico (vitamina B9): Esencial para la producción de glóbulos rojos y síntesis de ADN. Alimentos: Vegetales de hoja verde, legumbres, cítricos, aguacate, hígado. -Vitamina B12: Ayuda en la formación y maduración de los glóbulos rojos. Alimentos: Carnes, pescados, huevos, productos lácteos. -Zinc: Refuerza el sistema inmunológico. Alimentos: Nueces, semillas, grasas magras. -Omega 3: Propiedades antiinflamatorias que ayudan a mejorar la circulación sanguínea. Alimentos: Pescado azul, salmón, sardina, chía, linaza. 3. Anemia megaloblástica En este tipo de anemia, los eritrocitos son más grandes de lo normal, pudiendo haber disminución de la cantidad de eritrocitos circulantes, además de que se puede observar una disminución de la cantidad de plaquetas y glóbulos blancos circulantes. Se produce debido a la disminución de la ingesta de vitamina B12 o ácido fólico, siendo más común que suceda en personas que tienen una alimentación vegetariana. Los nutrientes clave que intervienen en su prevención y tratamiento incluyen: -Vitamina B12: Ayuda en la formación y maduración de los glóbulos rojos. Alimentos: Carnes, pescados, huevos, productos lácteos. -Ácido fólico (vitamina B9): Esencial para la producción de glóbulos rojos y síntesis de ADN. Alimentos: Vegetales de hoja verde, legumbres, cítricos, aguacate, hígado. 4. Anemia Perniciosa Se produce cuando la persona ingiere vitamina B12, pero el cuerpo no logra absorberlo debido a la ausencia o disminución de la cantidad de una proteína responsable de unirse a esta vitamina y favorecer su absorción, el factor intrínseco. Este tipo de anemia es más común en personas con enfermedad celíaca, desnutrición infantil u homocistinuria. El tratamiento para la anemia perniciosa debe estar orientado por el médico y normalmente se realiza con la aplicación de inyecciones de vitamina B12 o el uso de suplemento de vitamina B12. Además, es importante que en la alimentación del día a día se añada una mayor cantidad de alimentos ricos en vitamina B12, como carnes, huevo y queso. 5. Anemia de Fanconi Tipo de anemia genética rara que se caracteriza por alteraciones congénitas y disminución progresiva de la función de la médula ósea, en que se observa disminución de la producción de células de la sangre. Aunque no es causada por deficiencias nutricionales, una dieta adecuada puede ayudar a mejorar la función inmune y reducir el estrés oxidativo en las células. Los nutrientes clave que intervienen en su prevención y tratamiento incluyen: -Ácido fólico (vitamina B9): Esencial para la producción de glóbulos rojos y síntesis de ADN. Alimentos: Vegetales de hoja verde, legumbres, cítricos, aguacate, hígado. -Vitamina B12: Ayuda en la formación y maduración de los glóbulos rojos. Alimentos: Carnes, pescados, huevos, productos lácteos. -Omega 3: Propiedades antiinflamatorias que ayudan a mejorar la circulación sanguínea. Alimentos: Pescado azul, salmón, sardina, chía, linaza. 6. Talasemia Es un trastorno genético en el que el cuerpo produce menos hemoglobina de lo normal, lo que causa anemia. Aunque no es causada por deficiencias nutricionales, una alimentación adecuada ayuda a mejorar la calidad de vida y reducir complicaciones. Los nutrientes clave que intervienen en su prevención y tratamiento incluyen: -Ácido fólico (vitamina B9): Esencial para la producción de glóbulos rojos y síntesis de ADN. Alimentos: Vegetales de hoja verde, legumbres, cítricos, aguacate, hígado. -Antioxidantes: Protegen los glóbulos rojos del daño oxidativo. Alimentos: Frutas cítricas, kiwi, fresas, aceites vegetales, mariscos, champiñones. -Vitamina D y Calcio: Previenen la debilidad ósea, que es común en personas con talasemia Alimentos: Pescados grasos (salmón, atún), huevo, exposición al sol, lácteos, almendras, tofu, brócoli. Consejos Nutricionales en Talasemia: ✔ Evitar exceso de hierro si se reciben transfusiones frecuentes. ✔ Consumir suficiente ácido fólico y antioxidantes para apoyar la producción de glóbulos rojos. ✔ Mantener huesos fuertes con calcio y vitamina D. ✔ Consultar con un médico antes de tomar suplementos. 7. Anemia hemolítica La anemia hemolítica ocurre cuando los glóbulos rojos se destruyen más rápido de lo que el cuerpo puede reemplazarlos. Puede ser causada por enfermedades autoinmunes, infecciones, medicamentos o factores genéticos. Aunque la alimentación no cura la enfermedad, ciertos nutrientes pueden ayudar a reducir los síntomas y mejorar la salud general. Los nutrientes clave que intervienen en su prevención y tratamiento incluyen: -Ácido fólico (vitamina B9): Esencial para la producción de glóbulos rojos y síntesis de ADN. Alimentos: Vegetales de hoja verde, legumbres, cítricos, aguacate, hígado. -Vitamina B12: Ayuda en la formación y maduración de los glóbulos rojos. Alimentos: Carnes, pescados, huevos, productos lácteos. -Antioxidantes: Protegen los glóbulos rojos del daño oxidativo. Alimentos: Frutas cítricas, kiwi, fresas, aceites vegetales, mariscos, champiñones. Consejos Nutricionales en Anemia Hemolítica: ✔ Evitar deficiencias de ácido fólico y B12 para ayudar a la producción de glóbulos rojos. ✔ Consumir suficientes antioxidantes para reducir el daño celular. ✔ Consultar con un médico antes de tomar hierro, ya que su acumulación puede ser dañina. ✔ Mantenerse hidratado para facilitar la eliminación de desechos derivados de la destrucción de glóbulos rojos. 8. Anemia aplásica Tipo de anemia en que la médula ósea disminuye progresivamente la producción de células sanguíneas, lo cual puede ser debido al uso de medicamentos, enfermedades autoinmunes, infección o exposición frecuente a sustancias tóxicas. Por ello, debido a la disminución de la cantidad de células sanguíneas pueden observarse síntomas como manchas moradas en la piel, sangrados que pueden demorar mucho para coagular, falta de aire, dolor de cabeza, palidez en la piel y mucosas. En este caso, el médico puede indicar la realización de transfusión de sangre y uso de medicamentos que estimulan la función de la médula ósea y /o inmunosupresores. En algunos casos, también puede recomendarse el trasplante de médula ósea. -Hiero: Es esencial para la producción de hemoglobina en los glóbulos rojos. Alimentos: Carnes rojas, hígado, mariscos, legumbres, espinaca, frutos secos. No tomar suplementos de hierro sin indicación médica, ya que la hemólisis (destrucción de glóbulos rojos) puede liberar hierro en exceso en el cuerpo. -Ácido fólico (vitamina B9): Esencial para la producción de glóbulos rojos y síntesis de ADN. Alimentos: Vegetales de hoja verde, legumbres, cítricos, aguacate, hígado. -Vitamina B12: Ayuda en la formación y maduración de los glóbulos rojos. Alimentos: Carnes, pescados, huevos, productos lácteos.