Cuando empecé a trabajar como docente creí que todo era color de

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¿SERÁ QUE UNA SOLA GOLONDRINA HACE VERANO?
Este ejercicio no lo haré ampliando teorías, lo haré contando cómo apliqué las
teorías y metodologías a mi prácticas, procurando narrar paso a paso la historia
del proyecto que lidero y el que me representa como persona y como trabajadora
incansable por el mejoramiento de la educación.
Cuando empecé a trabajar como docente, creí que todo era color de rosa, que era
muy fácil trabajar en equipo con los compañeros para mejorar los procesos
académicos y alcanzar con mayor facilidad las metas, pues las normales y
universidades no nos preparan para enfrentar los obstáculos que se puedan
presentar. Que triste fue saber que todo no es tan fácil , y más duro reconocer que
el magisterio así como otras profesiones está lleno de miserias, que ser tan joven e
inexperta haría que fuera más difícil para mí ejecutar proyectos en beneficio de la
comunidad por falta de credibilidad. Espero no ofender, pero quiero Hablar con la
verdad desde mi experiencia personal.
Me parecía aún más cruel escuchar expresiones como: Hay que trabajar de
acuerdo al aumento salarial, para qué exigirle académicamente a los niños y niñas
de este contexto si sus capacidades e intereses laborales no dan para nada más que
trabajar en las empresas del sector y las niñas sólo piensan en casarse.
Así comprobé que en la I. E. El Hatillo pasaban los años y todos permanecían
indiferentes a sus problemáticas y a los resultados del ICFES, quien nos ubicaba
siempre en los niveles bajo e inferior, pues a los maestros igual les pagaban, era
como decirle a los estudiantes su futuro no nos interesa.
Llevaba varios años conociendo el contexto al que me habían enviado a trabajar y
procuraba porque los niños y niñas aprendieran significativamente, pero no tenía
ningún impacto. Un día me dije: Qué puede hacer un solo educador para
movilizar a toda una comunidad en el reconocimiento de sus dificultades, para
invitarlos a darles solución, y se me ocurrió crear el proyecto: “Jóvenes Escritores”
en el año 2000.
Si la necesidad más sentida era y es mejorar la lecto-escritura, debíamos trabajar
por ello y demostrarle a mis compañeros, así como dice Ferreiro que “los niños y
niñas se los aseguro están dispuestos a la aventura del aprendizaje inteligente.
Están hartos de ser tratados como infradotados o como adultos en miniatura”.
Inicié el trabajo , obtuve buenos resultados, pues el concurso de cuentos motivó
mucho a los niños y niñas no sólo por los premios que llegué a adjudicar de mis
ingresos y del señor: Javier Franco sino también por la oportunidad que ellos
veían de transmitir de manera creativa sus pensamientos y procesar de una
manera más adecuada sus problemas.
Una de las primeras historias fue Mariajuana, se escribió para hacer alusión al
origen de la Marihuana en el colegio El Hatillo, en un lugar llamado el Amazonas
al lado del río
Fue todo un acontecimiento no sólo por su significado sino porque fue el inicio de
una etapa más segura en el proceso ya que un compañero pretendió empañar el
proyecto con comentarios dañinos al joven, como robo de autoría en fin…
Consideré necesario invitar a los demás compañeros del área a que participaran de
este trabajo, para que abarcáramos mayor población y aunque en un inicio no se
unieron todos a él, porque eran docentes con muchos años en el ejercicio; no iban a
hacer lo que una “novata” les dijera, por lo que me veían realizar las actividades
sola , pero, se involucraron posteriormente cuando en el 2003 la Universidad de
Antioquia seleccionó mi proyecto como una experiencia significativa y sin egoísmos
los invité a que me acompañaran en la exposición que se realizó en el Paraninfo de
Antioquia. El proyecto no pasó de la fase departamental porque carecía de una
teoría sólida, pero fue este día el que marcó mi vida, porque aprendí mucho de las
otras experiencias, me llamó la atención el concepto transversalizar y el desarrollo
de competencias básicas desde todas las áreas, además tuve la oportunidad de
conocer el Nodo de Lenguaje de Antioquia en el que me fui involucrando
lentamente.
Me propuse mejorar más mis prácticas docentes asistiendo a una capacitación
gratis que ofrecían desde este organismo y para mí fue hacer una licenciatura en
Español, porque a pesar de estar constantemente estudiando reconocía que si todos
los maestros del país estaban como yo, con razón el sector oficial no lograba
obtener buenos resultado a nivel educativo. Esta capacitación en Lenguaje duró 5
meses y se asistía los viernes de 1:00 p.m. a 6:00 p.m., los sábados de 8:00 a.m. a
4:00 p.m. No dieron créditos, ni tiempo laboral, pero no me importó, ya que mis
intereses consistían en hacer del proyecto un trabajo sólido.
La teoría y la metodología aprendida a partir del curso permitieron recuperar
conceptos trascendentales del baúl de Jaibaná que terminó en un rincón o en la
basura en la mayoría de las instituciones educativas. Fue necesario rescatar al
menos los libros porque los juegos nadie sabe en dónde pararon.
Aplicando la EPC (Enseñanza para la Comprensión) de la Universidad Harvard
enlazada con el desarrollo de competencias a partir de todas las áreas me ha
parecido la receta mágica que todos los docentes hemos buscado. La aplicación en
el proyecto y en todas las clases me permitió comprobar que el trabajo de área no
era suficiente, que sólo unos profesores aplicando la metodología no bastaba.
Me propuse hacer del proyecto un Macroproyecto; lancé la idea en asamblea de
educadores e invité a los profesores de todas las áreas a que conformáramos un
grupo coordinador, la idea fue acogida por la gran mayoría.
El objetivo primordial sería mejorar el nivel lecto-escritural no sólo de alumnos,
también de docentes. Esta situación generó encuentros con algunos profesores que
vieron atacado su nivel de preparación, creo que es en estas situaciones que
demostramos si somos humildes o no, partiendo del reconocimiento de las
incapacidades porque las culpas no la tienen sólo los padres, los niños, el gobierno,
los maestros; las tenemos todos.
Entre las invitaciones generales estaba que convirtiéramos las clases en una
coautoría y que fuéramos autodidactas, para que el conocimiento sea construido
entre todos.
Ha sido difícil convencer a algunos maestros que es importante cambiar y llegaron
momentos en los que recibimos ataques muy fuertes, llegaron hasta comprometer
mi reputación y cuestionar mi ejercicio laboral.
Lo que no permitió que flaqueara fue encontrar un grupo de docentes de distintas
áreas que creyeron en las bondades de la propuesta y se unieron al trabajo.
Iniciamos la etapa en la que capacitamos a los compañeros y empezamos a realizar
ensayos para mirar si era posible la transversalización del lenguaje en todas las
áreas para que los niños y niñas pudieran pasar del dominio de un lenguaje básico
al dominio de un lenguaje más técnico y científico. Así no verán minadas sus
posibilidades a nivel personal, laboral y profesional.
Los ensayos fueron arrojando resultados positivos a nivel micro (clase) y a nivel
macro (institucional) pero, las oposiciones presentadas por algunos continuaban,
arguyendo: ¿Por qué tenemos que hacer lo que otros inventan?, cada quien es
autónomo. Llegaron al extremo de movilizar a alumnos en contra del proyecto.
Estábamos desanimadas y en una asamblea renunciamos, decidimos no continuar
con el proyecto.
Al pasar 20 días, en una des esas noches en las que se habla con Dios, con la luna,
me dije: ¿Por qué renunciar a algo en lo que creo y con lo que se han obtenido
buenos resultados?, me llené de fuerzas y quise que el Macroproyecto renaciera
como el ave fénix entre las cenizas y motivé a mis compañeras coordinadoras para
que continuáramos. Así fue, seguimos trabajando aunque en ocasiones me he
sentido sola porque puedo decir con seguridad que todas las tareas,
responsabilidades cayeron en mí, desde las ideas, sistematización, corrección,
exposición hasta la consecución de los recursos económicos.
Esto no me ha importado aunque implica muchas noches de desvelo, porque puedo
contar con mis compañeras de guerra para la ejecución de todas y cada una de las
actividades, así sean pasivas en esos otros menesteres.
Empezamos a ver los resultados en el año 2004 cuando los primeros alumnos
beneficiados subieron por primera vez el nivel del colegio, según el ICFES
quedamos en el nivel M; los alumnos del 2005 lo sostuvieron y los del 2006 que
estuvieron con algunos docentes que aplicaban la metodología en 8, 9, 10 y 11 nos
ubicaron en el nivel Alto.
Hicimos también un estudio con el exalumno: Alex Lópera, para dar respuesta a la
pregunta: ¿Dónde están nuestros egresados? , y efectivamente, comprobamos que
los estudiantes que más han ingresado a la educación superior han sido las
promociones desde el 2004 hasta la fecha.
En el 2006 quise que estamentos de más conocimiento sobre la educación nos
dijeran si el Macroproyecto tenía pertinencia con el mejoramiento de la educación,
dispuesta a corregir las observaciones hechas o si estábamos totalmente ajenos a lo
que quiere el sistema educativo, a dejarlo para mirar que otra cosa podríamos
hacer.
Lo envié a una convocatoria que hizo la Universidad de Antioquia y a otra que
hizo la Secretaría de Educación para la Cultura de Antioquia.
Mi sorpresa no tiene calificativo alguno porque es imposible describir la alegría
que sentí en el momento cuando la Universidad de Antioquia y el CTA (Centro de
Ciencias y Tecnologías de Antioquia), nos eligen como una experiencia
significativa.
Representamos al municipio en la etapa departamental como en el 2003, pero esta
vez pasamos a la etapa nacional, por eso fuimos al encuentro de lenguaje a nivel
nacional en la ciudad de Ibagué en el mes de Septiembre de 2006; siendo
preseleccionados para el Iberoamericano que se realizará este año en Cali, en el
mes de Septiembre.
-El CTA, además de realizar talleres con nosotros para verificar una a una las
evidencias y etapas, realizará el lanzamiento de un libro con las 5 experiencias más
significativas de Antioquia entre esas la nuestra.
-Llave Maestra hizo un programa con nosotros en el mes de Octubre del 2006.
-Este año estuvimos también en el programa: Educar para la Vida, transmitido el
20 de Abril.
--Participamos en el programa de norte a sur.
-Fuimos postulados por SEDUCA para el premio de la Real Academia Española.
-Fui seleccionada como coordinadora del Nodo de Lenguaje de la subregión: Valle
de Aburrá.
-Fui seleccionada por SEDUCA para ir al Congreso Internacional de la Lengua
celebrado en Cartagena, con todos los gastos pagos y con el compromiso de
multiplicar en el municipio y en la subregión todo lo aprendido.
-En Junio del año en curso expusimos el proyecto en el Congreso Nacional de
Educación realizado por COLCIENCIAS Y la SALLE.
-Hemos publicado 7 libros con la ayuda de empresas privadas, demostrando lo que
afirma el gobierno: La escuela debe salir de su contexto y establecer alianzas o
buscar aliados para sacar adelante sus proyectos.
-Con el proyecto también logramos espacios más dignos para nuestros niños y
niñas. Mejoramos la Biblioteca y el Aula múltiple con la donación de baldosa por
industrias ROCA y la mano de obra blanca por la alcaldía. Así educamos para el
progreso y la sostenibilidad.
--FEMSA –COCACOLA, nos obsequia computadores y sillas para un grupo,
después de que los niños y las niñas, le escriben cartas a algunas empresas
solicitando ayuda y al mismo tiempo trabajando la tipología textual descriptiva.
-Hemos asistido a diferentes entidades para exponer el proyecto como: Comfama,
Empresas Públicas de Medellín, municipio de Barbosa.
-Hemos asistido a capacitaciones con Jordi Fabra y con el SENA, pues estamos
pretendiendo desarrollar competencias laborales y generales en Artes Gráficas.
-Este año tenemos 8 niños y niñas en un curso de literatura con La Escuelita
Viajera, lo hemos financiado con la venta de los libros que hacen los mismos
jóvenes y con la presentación de películas.
¿Qué he aprendido después de todo este proceso?
El trabajo cooperativo, la transversalización del lenguaje, el desarrollo de
competencias básicas desde todas las áreas, enseñar para la comprensión,
aprender significativamente y con sentido, tener el apoyo de las empresas privadas,
contar con maestros entregados(vocación), involucrar a los padres de familia en el
proceso educativo, sí es posible.
Si todos lo hacemos triunfa la educación, triunfan los niños y niñas, triunfan las
comunidades.
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