Departamento de Docencia e Investigación RESUMEN MES DE MAYO / JUNIO 2013 Predicción de mortalidad e internación por insuficiencia cardíaca a partir de la medición del Strain longitudinal del ventrículo izquierdo, en pacientes post infarto con función ventricular preservada. JACC, Junio 11, 2013: 2365- 73 La fracción de eyección (FE) es un determinante pronóstico y fundamental para la toma de decisiones en pacientes post infarto (IAM). Sin embargo debido a la optimización del tratamiento médico, hoy en día aumentó el número de pacientes post IAM que presentan función ventricular conservada. Sin embargo no todos ellos presentan buen pronóstico. Más allá de los factores pronósticos clásicos post IAM, hoy en día existen nuevos parámetros ecocardiográficos que podrían identificar pacientes post infarto, con FE conservada, pero de alto riesgo. La medición del Strain longitudinal (GLS), medido en forma semiautomática mediante ecocardiograma bidimensional, es una de ellas. Ya se conoce que alteraciones en el GLS (menores a -14%) se asocian a mayores tamaño de IAM, peor pronóstico en insuficiencia cardíaca (ICC) crónica y en IAM. Sin embargo todos estos trabajos son retrospectivos, con muestras pequeñas, y sin distinción del grado de disfunción ventricular. Por ello se realizó dicho trabajo, prospectivo para predecir eventos clínicos en pacientes post IAM con función ventricular relativamente conservada, mediante la técnica de GLS. Se incluyeron de manera prospectiva pacientes post IAM con Fey >40%, con cinecoronariografía dentro de las 48 hs de admisión, y a todos se les realizó medición de GLS con medición semiautomatizada. El valor de corte significativo de GLS fue de > -14% (a mayor valor de strain, peor función ventricular). El endpoint primario combinado fue mortalidad de todas las causas e internación por ICC, que fue analizado mediante regresión Cox. Los endpoints secundarios fueron: mortalidad de causa cardíaca y hospitalizaciones por ICC. Se analizaron 849 pacientes (edad media 61.9 +/-12 años, 73% hombres), alcanzando el 6.7% el endpoint primario. El seguimiento fue de 30 meses. La presencia de GLS >-14% se asoció a aumento del endpoint primario más de 3 veces (HR: 3.21; IC 95%: 1.82 5.67; p<0.001). Luego de ajuste a múltiples variables clínicas (Clasificación Killip, insuficiencia renal, edad, Troponina, etc.), el GLS continuó siendo un predictor independiente del endpoint primario (HR: 1.14; IC 95%: 1.04 1.26; p: 0.007). Respecto a los endpoints secundarios, la presencia de GLS >-14 se asoció significativamente a mayor muerte cardiovascular (HR: 12.7; IC 95%: 3.0 54.6; p<0.001) y mayor hospitalización por ICC (HR: 5.31; IC 95%: 1.50 18.82; p<0.001). 1 Departamento de Docencia e Investigación Es decir, la medición de Strain longitudinal mediante un algoritmo semiautomatizado, aporta información pronóstica en pacientes post IAM, aún con función ventricular conservada, y podría determinar pacientes de alto riesgo que tal vez se beneficiarían con la inhibición del sistema renina angiotensina aldosterona, para evitar el remodelado ventricular. Como limitaciones, por un lado, se analizó solo el strain longitudinal, sin tener en cuenta el acortamiento circunferencial ni el espesamiento radial. Por otro lado, en el endpoint primario se analizaron dos eventos totalmente dispares, en cuanto a su peso: mortalidad, que es un evento duro, e internaciones por insuficiencia cardiaca. Otra falencia es el análisis multivariado, donde se tomaron en cuenta un gran número de variables (significativamente mayor al número de eventos), por lo que hay que tomar con precaución su interpretación. Y por último en los endpoint secundarios, como el número de eventos son pequeños, si bien los resultados son significativos, los intervalos de confianza son muy amplios. Resultados a un año de la revascularización temprana para limitar el tamaño del infarto de Middlesbrough (MERLIN trial). Heart 2004;91:1330 1337 El tratamiento fibrinolítico para el IAMCEST resulta en la restauración del flujo anterógrado del vaso culpable, sólo en el 50% de los casos, por lo que el número de pacientes con reperfusión fallida es alto. El mejor manejo de esta situación no está claro. Opciones a ella incluyen angioplastia percutánea de rescate; nueva administración de fibrinolíticos; agregar otro agente farmacológico adyuvante, colocación de BIAO; y combinaciones de los mencionados o ninguno. Sin datos claros para el manejo actual. Sólo un estudio previo randomizado comparó la angioplastia de rescate con el tratamiento conservador (tratamiento médico convencional) en pacientes con un primer IAM anterior (1990, RESCUE). Reportaron una tendencia hacia la reducción en la incidencia del end-point de muerte o IC severa (no preestablecidos) a los 30 días en el grupo de rescate. La baja incidencia de end-points adversos en ambos grupos del estudio plantea la duda sobre la validez externa del estudio. El objetivo del análisis es determinar el rol de la angioplastia de rescate (ATCr) post fibrinólisis fallida en el IAMCEST y comparar la angioplastia de rescate con el tratamiento conservador (tratamiento médico convencional) Es un estudio prospectivo randomizado, realizado en único centro de derivación. Tomo una población de 307 pacientes con reperfusión fallida post tratamiento fibrinolítico en IAMCEST que no desarrollaron shock cardiogénico. 2 Departamento de Docencia e Investigación Se randomizaron para Angioplastia de rescate vs Tratamiento médico convencional. Se definió como End point primario: Muerte de todas las causas a los 30 días. End points secundarios: combinado de muerte, reinfarto, stroke, revascularización no programada, o IC a los 30 días. Los mismos end points fueron evaluados al año. En el grupo ATCr, 61 pacientes tuvieron flujo TIMI 3 inicial en el vaso culpable y 88 pacientes flujo TIMI<3. A un total de 4 pacientes no se realizó angiografía por razones clínicas o técnicas. ATCr se realizó en 82 de los 88 pacientes con flujo TIMI<3 obteniéndose un resultado exitoso en 77 de estos pacientes. En 6 pacientes con flujo TIMI<3 que no se realizó ATCr (por inestabilidad hemodinámica, requerimiento de CRM, lesión menor no angioplastiabe). Todas las causas de mortalidad al año fue similar en el grupo conservador y ATCr (13,0% vs 14,4%, p = 0,7). La incidencia del punto final secundario compuesto de muerte, reinfarto, ictus, revascularización no planificada, o IC fue significativamente mayor en el brazo conservador (57,8% v 43,1%, p = 0,01). Esto se debió casi exclusivamente por una incidencia significativamente mayor de revascularización no planificada en el grupo conservador (29,9% v 12,4%, p, 0,001). Reinfarto e insuficiencia cardíaca clínica fueron numéricamente, pero no estadísticamente, más común en el brazo conservador. En el intento de alcanzar la permeabilidad del vaso culpable luego de un IAMCEST la ATCr es una estrategia atractiva luego de un tratamiento fibrinolítico fallido. Algunos estudios observacionales han sugerido buenos resultados con ATCr si se obtiene rápidamente un flujo anterógrado normal en el vaso culpable y sin complicaciones, particularmente si se obtiene resolución del ST. Sin embargo, en el estudio MERLIN, los beneficios de la ATCr fueron pocos. Se demostró que la ATCr tenía una alta tasa de éxito en la restitución del flujo anterógrado normal en un vaso ocluido o parcialmente ocluido. Resultados exitosos también se obtuvieron en pacientes con flujo TIMI 3 en la angiografía inicial pero con una lesión crítica de la arteria. A pesar de esto, la ATCr no confería una ventaja en la sobrevida a los 30 días. Además de la falta de ventaja en la sobrevida temprana, el grupo de ATCr no tuvo ventajas en la sobrevida a un año comparado con el grupo conservador. De hecho, más pacientes murieron entre los 30 días y el año de seguimiento en el grupo ATCr, aunque el número total de eventos luego de los 30 días fue bajo. A los pacientes que se les ofreció ACTr en el estudio MERLIN tuvieron una reducción significativa en la incidencia a los 30 días del end point combinado de muerte, reinfarto, ACV, revascularización no programada o IC y esto se mantuvo al año de seguimiento. Esta ventaja está dada casi exclusivamente por una reducción significativamente alta en el requerimiento de revascularización no programada. 3 Departamento de Docencia e Investigación En concordancia con estudios previos, se observa que la ATCr fallida está asociada con un muy mal pronóstico. Aunque el número de pacientes en quienes la ATCr es técnicamente fallida es pequeño (6% fallida en aquellos con anatomía adecuada en el MERLIN), la morbimortalidad en este grupo puede exceder la de los pacientes con fibrinólisis fallida tratados en forma conservadora. Una política sistemática de ATCr por lo tanto no es sustentable con estos datos siempre y cuando los pacientes manejados en forma conservadora sean tratados agresivamente por reinfarto o APIAM. A pesar de los años pasados desde la realización de este estudio, el propósito de revisarlo es por ser una publicación precursora en un tema que aun en la actualidad sigue llevando a la discusión. Los investigadores concluyeron que los beneficios encontrados con la estrategia de angioplastia de rescate eran pequeños y se centran en una reducción de la tasa de revascularización repetida. Desde el punto de vista estadístico, en base a la evidencia de aquel momento para demostrar una reducción de la mortalidad en el rango presumible se hubiera necesitado incluir a 3000 pacientes. El end point primario no es negativo como afirman los autores; es más claro decir que el estudio no tiene poder estadístico para un end point primario de mortalidad total. Probablemente un nuevo estudio a la luz de los stents disponibles, la mayor experiencia operativa a la fecha y bajo el adyuvante de la terapia antiagregante actual, proyectar mejores resultados. Mecanismos de los SCA y sus implicancias terapéuticas Peter Libby, NEJM 2013; 368:2004-2013 La enfermedad aterosclerótica se desarrolla durante décadas, y podría considerarse como las de mayor incubación en el ser humano. A pesar de su cronicidad, lo más temido que son los eventos agudos, suceden generalmente de manera súbita y sin previo aviso, a la cual estamos acostumbrados. Históricamente clasificábamos el IAM con SST como obstrucción progresiva que culmina en estenosis crítica que se ocluye totalmente con un trombo e IAM sin ST cuando esta obstrucción es parcial o intermitente, y sus tratamientos son la revascularización.ç En pacientes post trombolíticos aprendimos que una vez eliminado el trombo es frecuente que el grado de obstrucción de la placa no cause isquemia. En pacientes con seguimiento post ATC sólo un 50% de los próximos SCA fueron causados por Las placas que causan SCA en angio TC suelen tener baja atenuación (poco calcio), excéntricas. 4 Departamento de Docencia e Investigación Por IVUS de SCA se demostró que frecuentemente el sector responsable del SCA posicionar el stent). Esta disociación entre el grado de estenosis y la posibilidad de SCA explica por qué generalmente los IAM con SST no tienen síntomas de isquemia previo al evento. Por lo tanto hay una disociación carga de placa con el grado de estenosis, la cual es evolutiva. Ejemplos de que abrir las obstrucciones no es de por sí beneficioso se demostró en diferentes ensayos (COURAGE y OAT entre otros). La asociación entre evento trombótico y SCA es de larga data proveniente de estudios de anatomía patológica. La mayoría de los SCA fatales son por ruptura de placa y erosión de la superficie de la placa. La rotura de la íntima mediada por calcio y las hemorragias intraplaca son menos frecuentes. La capa fibrosa divide la sangre cargada de factores de la coagulación con el core lipídico (necrótico) muy protrombótico. El factor anatomopatológico que más se asocia a SCA es tener una capa fibrosa delgada (menor a 55 um). Otros factores con gran core lipídico, abundantes células inflamatorias y pocas células musculares. Un 30% de las placas con capa fibrosa fina tenían lesiones menores a 75% (en condiciones de autopsia, que exageran el grado de obstrucción por ausencia de presión positiva en el lumen arterial). La resistencia de la capa fibrosa depende de colágeno sintetizado por las células musculares lisas. La inflamación promueve el degradamiento de la capa fibrosa, por eso los mediadores inflamatorios predicen SCA. Se ha demostrado en modelos experimentales que el interferón gamma (sintetizados por células T) inhibe la síntesis y mantenimiento del colágeno por parte de células musculares lisas. Se demostró que el SIRS posterior a un IAM induce inflamación de las placas coronarias, reduciendo la capa fibrosa. Por eso los pacientes tienden a agrupar los SCA y no siempre sobre la arteria responsable inicial. Por eso es posible que una revascularización temprana podría evitar nuevos SCA. El factor tisular activa la coagulación y la agregación plaquetaria, y es producido en mayor cuantía por macrófagos activados y la activación del sistema colagenolítico incrementa el factor tisular también. La erosión superficial justifica el 25% de los SCA fatales y puede visualizarse mediante OCT intracoronario. Si bien es poco frecuente, es una entidad sub analizada y estudiada, y sucede más frecuentemente en mujeres y en hipertrigliceridemias. No es típico que esté inflamada la placa al momento del SCA y es típico alto contenido de proteoglicanos. En esta entidad tendría un papel más protagónico la apoptosis endotelial. 5 Departamento de Docencia e Investigación Las estatinas son quizá la herramienta terapéutica más importante para combatir el desarrollo de SCA, a través de múltiples mecanismos: Reduce la inflamación, reduce las colagenasas, incrementa los niveles de colágeno intersticial, reduce las LDL oxidadas, induce la expresión de ON sintetasa, reduce la cantidad y actividad del factor tisular, incrementa el poder fibrinolítico y reduce el inhibidor del plasminógeno. La revascularización no logró reducir los eventos, y las estatinas sí lo lograron. Interesantemente, logran reducir el riesgo disminuyendo muy A pesar de dieta, ejercicio y tratamiento completo muchos pacientes siguen desarrollando eventos coronarios. Los ensayos que elevaron el HDL (sin ejercicio) no obtuvieron beneficios clínicos (inhibidores del CETP, niacina), ni trigliceridos de manera aislada (incluso en diabéticos). Sin embargo la Colchicina redujo eventos en un ensayo reciente, pero el análisis no era doble ciego, relativamente pequeño (500 pts con 55 eventos) y no reportaron biomarcadores de inflamación que podrían soportar el resultado primario. Actualmente se están realizando dos ensayos grandes testeando darapladib (inhibidor de la phosphorilasa de lipoproteínas), inhibidores de interleukinas e incluso metrotexate en bajas dosis. Comparación del acceso radial versus femoral en cuanto a eventos isquémicos y sangrado en pacientes con SCA sin ST tratados mediante estrategia invasiva. Am Heart J 2013;165:583-590 El sangrado es un evento adverso común que se asocia con incrementos en la morbimortalidad en pacientes cursando un SCA que requiere angioplastia coronaria (ATC). Las complicaciones hemorrágicas pueden localizarse a nivel del acceso vascular o alejadas del sitio de punción. El uso del acceso radial se ha asociado a una disminución del sangrado a nivel del sitio de punción y de complicaciones vasculares. Algunos estudios observacionales demostraron que el acceso radial se asocia además a menor riesgo de muerte o re-infarto al año, de todas formas también se asociaría a mayor tasa de fallo del procedimiento. Aún no está esclarecido si estas asociaciones se deben a la reducción del sangrado y transfusiones o la selección de pacientes de bajo riesgo para el acceso radial. Este es un análisis post-HOC del EARLY-ACS trial que fue un estudio prospectivo, doble ciego, randomizado y multicéntrico que incluyó 9406 pacientes cursando SCA sin ST de alto riesgo que requirieron tratamiento invasivo, la elección del acceso vascular quedó a criterio del cardiólogo intervencionista. 6 Departamento de Docencia e Investigación El endpoint primario del trabajo fue la aparición de cualquier tipo de sangrado dentro de las 120 hs del cateterismo (según las definiciones de sangrado mayor TIMI/ GUSTO moderado-severo) y transfusión de glóbulos rojos. Posteriormente dividieron al sangrado en: 1) relacionado al sitio de acceso (hematoma local > 5cm, hematoma retroperitoneal); 2) no relacionado al sitio de acceso (intracraneal, gastrointestinal, genitourinario o del tracto respiratorio). De manera secundaria se evaluó la tasa de eventos isquémicos (mortalidad de todas las causas, infarto de miocardio, isquemia recurrente que requirió revascularización urgente, eventos trombóticos desde el cateterismo hasta 96 hs después, muerte e infarto hasta 30 días y mortalidad al año) y su relación con el tipo de acceso. De 9126 pacientes incluidos en el análisis, a 7896 (86.5%) se les practicó acceso femoral y 1230 (13.5%). Los pacientes que fueron sometidos al acceso radial eran más jóvenes, había más hombres que mujeres, menor prevalencia de diabetes, HTA, DLP y CRM previa. Además presentaban TIMI scores y Killip más bajos al ingreso pero presentaban con mayor frecuencia cambios en el ST. La frecuencia tanto de arterias coronarias normales como de menor enfermedad a nivel de los puentes fue mayor en el grupo al que se le realizó acceso radial. Aproximadamente 60% de los pacientes en ambos grupos fueron sometidos a ATC, 13% a CRM y 26% recibieron tratamiento médico. Las variables que tuvieron mayor importancia a la hora de elegir el acceso fueron: CRM previa, año de enrolamiento, sexo femenino y edad, todas éstas de manera inversa con el acceso radial. Además antecedentes de HTA, DLP, peso en aumento y valores basales de hemoglobina más elevados también se asociaron de manera inversa al acceso radial. Hubo gran diferencia regional en cuanto al uso del acceso radial: fue utilizado con más frecuencia en Noruega y menos frecuente en Turquía, y fue mayor en el resto de los países vs Estados Unidos (17% vs 2.2%, p<0.001). No hubo diferencias significativas en la tasas finales de sangrado TIMI mayor (femoral vs radial, 2.2% vs 1.6%) o GUSTO severo (femoral vs radial, 0.8% vs 0.7%). Sangrado GUSTO moderado o severo fue mayor en el grupo de acceso femoral (6.5% vs 3.9%) pero luego del ajuste multivariable no hubo diferencia significativa. De todos los sangrados TIMI mayor el 30% fue del sitio de acceso para el grupo femoral vs un 15% para el grupo de acceso radial (p=0.152). Para la clasificación de sangrado GUSTO moderado/severo también fue mayor el sangrado a nivel femoral que radial sin diferencia significativa (21.9% vs 14.9%, p=0.261). Se transfundió menos al grupo de acceso radial vs femoral (5.6% vs 7.8% p=0.006), después del ajuste esta diferencia no fue estadísticamente significativa (OR 0.89, 95% CI 0.64-1.23 p=0.261). La incidencia de stroke fue del 0.2% independientemente del acceso. 7 Departamento de Docencia e Investigación En cuanto a los eventos isquémicos no hubo diferencias en cuanto a muerte, infarto, isquemia recurrente que requirió revascularización urgente, eventos trombóticos a las 96hs, muerte o infarto a los 30 días, incluso después del ajuste multivariable, en contraste luego del ajuste, la asociación entre el acceso radial y la mortalidad al año fue significativamente menor en comparcación con el acceso femoral. A modo de discusión se plantearon 3 aristas: 1) hubo una gran variabilidad en cuanto al uso del acceso radial por región y país, 2) el acceso radial se utiliza preferentemente en pacientes de bajo riesgo de sangrado como lo son los pacientes jóvenes y hombres, 3) luego de los ajustes para covariables asociadas con sangrado y eventos isquémicos, no hubo diferencia significativa en cuanto a sangrado/eventos isquémicos con el uso del acceso radial o femoral. Una gran limitación podría ser que las clasificaciones GUSTO y TIMI no serían lo suficientemente sensibles como para diferenciar sangrado entre estos dos tipos de accesos. Implante percutáneo de válvula aortica en estenosis severa de válvula aortica bicúspide. Circ Cardiovasc Interv. 2013;6:284 La Válvula Aórtica Bicúspide (VAB) está presente en el 0.5 a 2 % de la población general y se puede observar en mas del 50 % de las válvulas aórticas extraídas de cirugía de recambio de válvula aortica según algunas series. La VAB es un criterio de exclusión en la mayoría de los trials de implante percutáneo por el riesgo de expansión irregular y la subsecuente disfunción de la endoprótesis. El objetivo de este estudio fue evaluar la eficacia y la seguridad del implante percutáneo de válvula aortica (IPVA) en pacientes con estenosis de VAB. Se usó la base de datos de IPVA del Instituto Cardiovascular de París sur que incluía pacientes de forma prospectiva de Octubre 2006 a Enero 2012. De los 470 pacientes incluidos, 229 fueron evaluados por ecocardiografía y tomografía computada. De la serie de 229 pacientes se diagnosticó BAV en 21 pacientes ( 9.2%) mediante tomografía y solo 9 fueron diagnosticados por ecocardiograma transtorácico y transesofágico. Los pacientes tenían 83.1±6.6 años y su Euroscore era de 20.0%±11.4%. El grupo con BAV era similar al que no tenía BAV excepto por la diabetes (4.8% vs 24.0%; P=0.05). El diámetro del anillo aórtico en pacientes con BAV no fue significativamente mayor en los diagnosticados por tomografía (24.7±3.0 vs 23.7±1.9 mm; P=0.07). La CoreValve fue la válvula más usada (47.6% vs 16.3%; P=0.002). 8 Departamento de Docencia e Investigación No hubo diferencias significativas respecto a complicaciones como ruptura de anillo aórtico (0% vs 1.4%; P=1.00), o insuficiencia valvular (0% vs 1.4%; P=1.00) en los pacientes con BAV comparado con el grupo control. El gradiente medio post (19.0% vs 14.9%; P=0.54) y la mortalidad a 30 días (4.8% vs 8.2%; P=1.00) fue similar en ambos grupos. Como conclusión podríamos decir que, en la experiencia de este grupo francés, el IPVA en pacientes con VAB seleccionados se asocia a bajo riesgo de complicaciones y los resultados son similares a los de los pacientes con válvula aortica tricúspide. El diagnóstico de VAB fue subestimado por ecocardiografía (comparado con tomografía). Como limitaciones del estudio podríamos señalar el pequeño tamaño muestral, por lo que serán necesarios estudios con tamaños muestrales mayores para extrapolar los resultados. No hubo criterios bien definidos sobre el método diagnóstico de VAB y que solo fueron referidos para IPVA al centro investigador pacientes con estenosis aortica degenerativa (VAB era criterio de exclusión). 9