1 EL FIN DE LA ENFERMEDAD David Agus Ideas generales ▪ Muchas enfermedades no se pueden curar, pero podemos evitarlas y prevenirlas. Necesitamos un nuevo paradigma de salud individualizada y basada en las tecnologías que incrementan la calidad de vida y la longevidad. ▪ ▪ La salud (el equilibrio, la homeostasis) no es una mutación, un microorganismo, una deficiencia ni un parámetro como la presión arterial o la glucemia; el cuerpo es un sistema global y su equilibrio requiere la aplicación de una estrategia de sistema. ▪ La inflamación está en la raíz de todas las enfermedades y es el fundamento de la mayor parte de los trastornos que afectan al cuerpo, incluido el cáncer; la inflamación altera la reparación del ADN, el mecanismo molecular básico que da origen al cáncer. ▪ La eliminación del cáncer depende radicalmente de su prevención y detección precoz, no de su curación, en muchos casos imposible. El estudio del árbol genealógico clínico es la mejor herramienta para predecir el riesgo de cáncer, junto con el estudio genético del ADN y de los polimorfismos de nucleótido único (PNU), que permite definir el perfil genético personal. ▪ Imprescindibles la personalización o individualización de la medicina y el conocimiento de los parámetros médicos personales. Cada persona responde de una manera muy específica frente a las distintas enfermedades y sus tratamientos. Lo saludable y lo no saludable, lo bueno y lo malo, no son conceptos universales, dependen de las características de cada persona y, en este sentido, cada persona es su mejor médico porque es quien se conoce mejor a sí misma. Es nuestra responsabilidad optimizar nuestra salud individual. 2 Soluciones para nuestra salud ▪ Altamente recomendables las estrategias antiinflamatorias de carácter preventivo: consumo regular de una estatina (un medicamento antiinflamatorio) a partir de los 40 años de edad si están aumentadas las cifras de la proteína C reactiva (PCR) o del colesterol; consumo diario de 75 mg de aspirina (disminuye en un 10-60% el riesgo de cáncer); evitar la obesidad (fuertemente asociada a la inflamación), e incluso utilizar un calzado adecuado. ▪ La proteómica (el estudio de las proteínas del cuerpo) permite determinar de antemano la respuesta individual frente a los medicamentos, el perfil individual de los efectos adversos de los medicamentos y el perfil individual del grado de eficacia de los medicamentos. ▪ Los suplementos hormonales están contraindicados siempre, excepto en las situaciones demostradas de deficiencia clínica de hormonas concretas. La hormona de crecimiento, por ejemplo, no solo carece de efectos frente al envejecimiento sino que puede estimular el cáncer y la diabetes en la vejez. ▪ No se ha demostrado en ningún estudio científico que haya algún suplemento nutricional que tenga algún tipo de utilidad clínica, excepto en las situaciones demostradas de deficiencia clínica y, como excepción, el consumo de suplementos de ácido fólico en las fases iniciales del embarazo. ▪ Excepto en los cuadros demostrados de deficiencia o consumo insuficiente, no está indicado el consumo de suplementos de vitamina D, vitamina C, complejos multivitamínicos ni compuestos antioxidantes. 3 ▪ Hay que tener mucho cuidado con los titulares de prensa relativos a los suplementos nutricionales, que en muchas ocasiones llevan a error e introducen confusión; siempre tenemos que analizar los datos antes de aceptarlos como un dogma. ▪ Todo lo que necesita el cuerpo desde el punto de vista nutricional está en la comida natural, no procesada. Los alimentos deben ser lo más naturales posibles y principalmente de origen vegetal; lo ideal es una dieta con contenido bajo en grasas y azúcares refinados, contenido elevado en fibra natural, baja en calorías y consumida en pequeñas raciones a lo largo del día, en horarios regulares, y es muy importante no comer entre comidas. ▪ La obesidad está muy relacionada con la dieta inadecuada y es una enfermedad que ha alcanzado rango de epidemia en los países industrializados. ▪ El ejercicio físico es imprescindible para la salud del cuerpo. Hay una relación científica demostrada entre la falta de ejercicio y la práctica totalidad de las enfermedades, como el cáncer, las enfermedades autoinmunitarias y las enfermedades degenerativas. ▪ El sueño es un elemento clave para la salud, tanto en su calidad y cantidad como en sus horarios regulares. El sueño ideal, entre 7 y 9 horas de duración, y entre las 10 horas PM y las 6 horas AM. Muy importante para el sueño: regularidad en los horarios, prepararse para el sueño 30 minutos antes de iniciarlo, higiene del sueño, no consumir cafeína, estimulantes ni alcohol desde varias horas antes. ▪ Ejercicio, sueño y comida, los tres elementos clave de la salud. Respecto a los tres es imprescindible la regularidad en los horarios y, en este sentido, está demostrado que tener un perro facilita enormemente el mantenimiento de horarios diarios regulares. ▪ Finalmente, el arte de no hacer nada, la importancia de no estar continuamente haciendo cosas, de no exigirnos más y más cada vez bajo un estrés sostenido e insoportable. ▪ El cuerpo se cura por sí mismo porque es inherentemente homeostásico. Amenazamos nuestra homeostasis (nuestra salud) si 4 tomamos medicamentos o suplementos, alteramos los horarios, no dormimos lo necesario, hacemos demasiado ejercicio o comemos y bebemos demasiado. ▪ Tenemos que planificar nuestra salud para el próximo año, no a 10 años vista. Es importante conocer las nuevas tecnologías relacionadas con la salud y aprovecharlas, así como compartir a través de Internet la información personal de salud. El fin de la enfermedad es posible porque la mayor parte de las enfermedades se puede prevenir y retrasar