CONTEMPLACIÓN PARA ALCANZAR HUMOR Oración para pedir buen humor “Tened siempre la alegría del Señor; lo repito, estad alegres” Flp. 4, 4 Como estamos en el tiempo de la Pascua me he atrevido a proponer una oración para pedir humor del bueno y en serio, porque es bien serio haber vencido la muerte y al tiempo motivo de enorme alegría. Y también porque no es fácil reírse de este mundo y amarlo al mismo tiempo. Pero antes de nada, recuerda que este espacio es un regalo que el Señor te ha hecho para que te encuentres con El. Toma el tiempo que necesites para organizar este ratito, para estar, para pedir, para agradecer... Y que el Señor te vaya llevando... Busca el lugar que más te ayude a este encuentro y confíate... porque estás en las manos del Señor. Señor, dame una buena digestión y, naturalmente, algo que digerir. Dame la salud del cuerpo y el buen humor necesario para mantenerla. Dame un alma que no conozca el aburrimiento, los ronroneos, los suspiros ni los lamentos. Y no permitas que tome demasiado en serio esa cosa entrometida que se llama “el yo”. Dame, Señor, el sentido del humor. Dame el saber reírme de un chiste para que sepa sacar un poco de alegría a la vida y pueda compartirla con los demás. (Tomás Moro) ORACIÓN Anda, pasa. Pasa, anda, no tengo más remedio que admitirte, Tú eres el que viene cuando todos se van, El que se queda cuando todos se marchan El que cuando todo se apaga, se enciende, El que nunca falla. Mírame aquí, sentado en una silla dibujando... Todos se van, apenas se entretienen. Haz que me acostumbre a las cosas de abajo. Dame la salvadora indiferencia, haz un milagro más, dame la risa, ¡hazme payaso, Dios, hazme payaso! (Gloria Fuertes) TU FIDELIDAD TU FIDELIDAD ES GRANDE TU FIDELIDAD INCOMPARABLE ES. NADIE COMO TÚ BENDITO DIOS GRANDE ES TU FIDELIDAD Hay momentos, que las palabras no alcanzan, para decirte lo que siento, Bendito Salvador (bis) El humorista es como un funámbulo, que está en la cuerda floja, en un equilibrio entre la amargura y la ingenuidad. No es un ingenuo, es una persona lúcida, y por tanto una crítica. En esto se distingue de un pánfilo que es el que lo ama todo. No es un amargado, es el peligro del lúcido que lo ve todo con tanta lucidez y en tal profundidad que se quedan insatisfechos de sí mismos, de los demás, del mundo, de la vida... El humorista es el que acepta la realidad con lucidez, es decir el que sabe reírse de una cosa y seguir amándola... YO TE DOY GRACIAS POR TODO LO QUE HAS HECHO, POR TODO LO QUE HACES, POR TODO LO QUE HARÁS, (BIS) Ahora voy hacia ti; y todavía en el mundo digo esto para posean mi alegría completa (Jn. 17, 13) ...por eso el humorista o el que aspira a ello tiene que pedirlo mucho. Es el que se acepta como es, el mundo y a las demás personas, el que acepta su propia limitación, sinceramente, aunque no esté satisfecho de ellos. Y lo hace tiernamente. Y junto a eso el humorista es un “poco loco” y apuesta frente al esquema lógico y calculado por el entendimiento y la ternura. Dice que hay que ser un poco lunático y aportar una brizna de locura a tanta racionalidad. Es el que se atreve a ponerse de puntillas y soñar, ilusionarse por algo. Con todo podríamos reírnos de nosotros mismos, con ternura, de los demás, con ternura, de Dios, con ternura porque Dios tiene mucha gracia. SALMO 126 CUANDO CAMBIÓ EL SEÑOR LA SUERTE DE SIÓN, CREÍAMOS SOÑAR; SE NOS LLENABA DE RISAS LA BOCA, LA LENGUA DE JÚBILO. HASTA LOS PAGANOS COMENTABAN: “EL SEÑOR HA ESTADO GRANDE CON ELLOS”. -EL SEÑOR HA ESTADO GRANDE CON NOSOTROS, Y CELEBRAMOS FIESTA”. CAMBIA SEÑOR, NUESTRA SUERTE, COMO LOS CAUCES DEL NEGUEB. LOS QUE SIEMBRAN CON LÁGRIMAS COSECHAN CON JÚBILO. AL IR IBA LLORANDO LLEVANDO LA BOLSA DE SEMILLA; AL VOLVER VUELVE CANTANDO LLEVANDO SUS GAVILLAS.