t':. .....¡D(~r.J.: r o'. J,". LA CIENCIA SOCIAL: UNA TOTALIDAD FRAGMENTADA Alberto J Franzoia I . , ! 1 1. Jlntecedentes de la ciencia SOCia4 :-~ iO[ 1, • 1'1 I Su contexto histórico . [:1 ,~ ;1 n. il Las transformaciones revolucionarias) que se produjeron en parte de ,I;uropa, alcanzando gran desarrollo durante e!,sJ9'lo..~, marcaron el nacimiento de la ciencia social, cuyo objeto de estudio ha de"elÍtar fuertemente vinculado con los cambios que se estaban operando. . 11 H 1I 1, il ~ • t I I 1; I l. El feudalismo se habla caracterizado desde el punto de vista económico, por ser una SO!'iedadrural, ~rra9a, en la que los señores feudales concentraban la propiedad de la tierra jimto a Ji¡ iglesia, y los siervos aportaban su fuerna de trabajo (energla flsica e intelectual) al proceso productivo, repartiéndose el fruto obtenido entre propietarios y no propietarios. Como prolongación de la actividad rural se desarrollaron centros urbanos, en los que proliferaban las tareas artesanales y los gremios que nucleaban a sus representantes. Era una acanomla centrada en la producción de valores de uso, ya que el fin principal era satisfacer las necesidades. de sus miembros, que se vallan de ellos a través del uso directo. La jerarquización social adquirla un carácter re~tivarnente rlgiclOa partir de la presencia de tres estados convaliclados jurídica e Ídeológicamente: Iglesia, nobleza y tercer estado o pueblo. Desde ya esta jerarqulzación no era independiente de la estructura económico-social (en la que la propiedad de la tierra adquirla un peso superlativo) pero desempeñaba un papel esencial en la contención Y.reproducción social. En el plano polltico nos encontramos ante una sociedad atomizada, ya que cada feudo ejercía su propio poder respaldado por un ejército de vasallos, lo que le permitía al señor feudal alcanzar gran autonomla con relación a la autoridad del rey. La religión desempeñaba un papel esencial en el terreno ideológico, convalidando la estratificación existente y produciendo ideas que aseguraban la integración y cohesión social, a partir de una visión de la sociedad natural y estática. Entre fines del siglo xvm y principio~ del XIX,'momento en el que ubicamos el nacimiento de la Ciencia social, una nue~ paisaje se va instalando como consecuencia del empuje demoledor de una clase socJ;a1,la burguesla, que habiendo surgido de las entrañas del feudalismo, tras tres si$los de expansión constante, terminó por convertirse en su negación. Contra uná economla rural, cerrada y fragmentada se manifestó l¡IIanueva forma de producir, ~asada primero en el taller de manufacturas y luego en la gran industria. La producciór! de bienes de uso cedió paso a la de valores de cambio (bienes que no son elaboradd¡. para el consumo directo de sus productores y propietarios sino para ser comercializa~os). El espacio econónuco autosuficiente fue desplazado por el mercado, en el que s.e localizan los potenciales consumidores del exbédente generado por un crecimiento permanente de las fuerzas productivas (todos I { j, j.1 Ilf~~""'-~-:. I UI ,-:] .¡ l. i"_ aquellos elementos que participan de un proceso de producción). Este excedente se potenciaba mediante la reinversión diol capital acumulado como consecuencia de la actividad comercial desplegada en el mercado, y de los metales preciosos descubiertos y expropiados de las regiones colonizadas. 1;1 H! ¡, r: 1: , ¡~ ¡ I ': , j 11 I '1: 1'/ d 1 . I .I ; f¡; I I i1, l., j r. I I I Los cambios econorntcos impulsados por la clase social surgida del tercer estado feudal, alcanzaron con la Revolució~ Industrial dimensiones impe""""ples__hasta . entonces, -repercutiéndo -el"alverSOS-p;liuiosde fa: sociedad: Desde la estructura de clases, pasando por el ejercicio del poder político, hasta las cosmovisiones que suelen brindar la apoyatura teórica necesaria para el mantenimiento o cambio del statu quo, experimentaron profundas transformaéiones. Si bien la nueva sociedad capitalista mantuvo un orden jerarquizado, como 'ocurria en el feudalismo, perdió presencia la estratificación juridica en la que se apoyaban los estamentos de ésta. Tanto la ley como criterio jerarquizante, como la tierra como' principal manifestación de la propiedad privada en una economia productora dé valores de uso, perdieron peso, en la misma medida en que el mercado pasó a ocupar el centro de la escena. El mayor o menor éxito conseguido por los propietarios que participaban en la producción y comercialización de mercancias, comenzó a desempeliar un papel esencial a la hora de otorgar prestigios y poder. Por otra parte, tal corno ocurna en el feudalismo, la fuerza de trabajo ulilizada en el proceso productivo será aportada por una clase social separada de la propiedad de los medios de producción, pero que además, ahora, carecerá de su posesión: el proletariado. Sin embargo, a diferencia de los siervos que estaban atados a la tierra (corno una prolongación de ella), el proletario venderá su fuerza de trabajo en el mei-cado a cambio de un salario, es decir, será formalmente "libren para vender lo ÚlÚCO que posee. j' 1 I Ii I i. I ! El objetivo supremo de la clase conductora de este proceso, la burguesía, ha de ser la maximización del beneficio. Aumentar conStantemente la productividad del tiempo de trabajo para multiplicar las ganancias al incorporar nuevos consumidores, sólo era posible a partir de un desarrollo sostenído de las fuerzas productivas. La expansión de " la producción necesitaba como correlato un mercado cada vez más amplio, de esta manera la atomizada economla feudal será progresivamente desplazada por la constitución de mercados nacionales e internacionales. Producción y comercio habrán de constitúir: una unidad de elementos interrelacionados. que se reforzaban ¡.:' mutuamente, pero no exenta de conflictos: las llamadas crisis ciclicas del capitalismo. ',¡ Éstas van a jalonar la historia de un sistema económico en el que el desarrollo permanente de las fuerzas productivas va a entrar en contradicción con el carácter c,; privado de las relaciones de producción (relaciones de propiedad de los medios de producción). Es justamente la falta de propiedad y la imposibilidad de apropiarse lo producido, lo que genera una pauperización creciente de las masas trabajadoras que conduce a l¡¡ superproducción. El sistema, sin ningún tipo de planificación general. lanza al mercado una cantidad de mercaderias que carecen de la demanda suficiente, no porque las necesidades estén plenamente satisfechas, sino porque las posibilidades de consumo de la población están acotadas por los límites que impone el propio sistema. • Así como ,la expansión permanente de los mercados aparece como una necesidad existencial del capitalismo, paralelamente se va dando una concentración del poder polltico que aconipafia y refuerza las nuevas caracteristicas de la economía, siendo su expresión más acabada el Estado Nacional Burgués. Las manifestaciones de éste I : 31 variaron de acuerdo con el contexto en el que se constituyó. En Gran Bretaña, por ejemplo, nació a partir de las alianzas que la burguesía logró Impulsar con la aristocracia; mientras que en Francia, con la Revolución de 1789, se produjo un violento desplazamiento del poder de los representantes del viejo orden. En otros lugares como Alemania, el Estado cumplió un papel relevante en la unificación del mercado, ya que la burguesía se manifestó débil para hacerlo por sí misma; mientras que en España y Portugal, que habían sido las potencias conquistadoras de una parte significativa del continente americapo en la etapa mercantilista, no lograron desembarazarse de las resistentes expresiones feudales y perdieron el tren del capitalismo, por lo que debieron resignarse a ser desplazadas en el dominio del nuevo mundo que se constituía. . 1 1; Las ciencias de la naturaleza y algunas ramas de las ciencias formales iniciaron un e,' proceso de espectacular desarrollo J; impulsadas en principio por los progresos económicos, pero a su vez los poteni::ia.roncon sus aplicaciones en los medios de comunicación yen la producción de armas (lo que permitia abrir nuevos mercados), así como en el desarrollo de las fuerzas productivas (lo que garantizaba una mayor productividad). Este conocimiento científico libró memorables batallas con el conocímiento religíoso, alcanzando alturas máximas primero con la Revolución Copernicana y luego con la Teoria de la Evolución de Darwin. Una lectura posible tanto del texto de Umberto Eco "EJ nombre de la rosa", como .del film homónimo, se vincula con los comienzos de un debate inconcluso entre dos formas alternativas de explicar la realidad .. Más allá de las manifestaciones generales del proceso revolucionario que con trazo grueso estamos abordando, las cuales no tuvieron un desarroll() lineal ya que fueron permanentemente amenazadas por intentos _de.re~ta.11~"tÓ!l_._C9J\9J.\cidQs_ -por_Jos _ - -representantes -dei-agonIZante-feudaliSmo,nos ínteresa detenernos en sus principales expresiones filosóficas, no sólo por la significación que van a tener para apuntalar o frenar los profundos cambios que se estaban operando en la estructura económicosocial, como así también en los planos politico y jurídico, sino porque fueron los antecedentes teóricos para la construcción de una ciencia social. • I ! I I l' I Il. I El numinismo. En la filosofía occidental del siglo :xvn tenia una fuerte presencia la concepción racional-idealista. cuyo método consistia en la deducción lógica de enunciados teóricos a partir de axiomas considerados irrefutables. Las ideas eran punto de partida y llegada, la razón como expresión de ',Ilnsaber absoluto libre de toda injerencia del mundo exterior. Sin embargo, por la misma época, otros pensadores se ubicaban en las antípodas de este planteo, fundamentando sus estudios en la observación directa de la realidad; así como para los idealistas la razÓnocupaba un lugar excluyente en la construcción del conocimiento ya que, éste era consecuencia de aquella. para los empiristas dicho espacio era cubierto por los sentidos, lo que ellos experimentaban se reflejaba en el campo de las ideas constituyendo un saber. A partir del siglo xvm va a surgir el intento más serio por entonces para fusionar estas dos corrientes de la filOsofía,que hasta allí habían recorrido caminos paralelos. Los .; I L 32 iluministas, presentados habitualmente como exponentes del racionalismo puro, fueron en realidad los responsables de favorecer el encuentro de la razón con la observación. Pero, a diferencia de lo que había ocurrido en el siglo anterior, esta razón ya no será la responsable absoluta de un conjunto de verdades incuestionables atesoradas por el cerebro de algunos, hombres, sino que se la concebía como una fuerza adquirida y a la vez creadora. EJiautilizada como un instrumento de trabajo que permitía acceder al conocimiento reflexionando sobre lo óbservado, una razón aplicada a la realidad con la posibilidad de actuar sobre ella modificándola. 1Para estos filósofos, la observación de la realidad, más la capacidad intelectual para analizar lo observado, constituirán los, pilares para una nueva concepción acerca de cómo se construye el conocimiento, dando un paso monumental hacia el desarrollo de una ciencia social. De allí en más los métodos utilizados para abordar la realidad social con pretensiones científicas, no abandonarán la complementariedad entre observación (o práctica para otros) y razón; por lo tanto las principales diferencias metodológicas se van a manifestar a partir del mayor o menor peso que adquieran cada una de ellas, pero en ningún caso la demostración empírica, o a través de la práctica, quedará excluida, superando de esta manera la mera especulación teórica como camino habitual para la construcción cognitiva del mundo social. --- ! I Ij I l' I l' I II 1: -- - - - - Los iluminislas analizaron la sociedad de su tiempo desde una perspectiva absoiutamente critica (por lo que la razón debía modificarla), ya que consideraron que las instituciones del agonizante feudalismo representaban un impedimento para el desenvolvimiento de la libertad humana. Según Rousseau (1712-1778), el más radicalizado de sus exponentes, las leyes e instituciones de la época contradecían la naturaleza del hombre. A través de un recurso metodológico original postuló la noción del hombre en "estado de naturaleAl",- ci~Qj~!l9.9!0_d_e_ tQdQ_adilamento_culturaLe__ ' - - infínendo sus -cañlCteliSticas Unaturales" para comprobar hasta que punto la expresión libre del ser humano se hallaba reprimida por la sociedad. Esto no significa que creyese posible alcanzar la libertad rechazando cualquier forma de convivencia social y cultural, ya que su planteo se vincula con l<inecesidad de conocer las leyes naturales, para construir nuevas leyes sociales que guarden la mayor armonia posible con ellas. Rousseau planteó un problema que luego seria retomado y desarrollado por Marx: las desigualdades sociales y el surgimiento del poder político para defender los intereses de grupos propietarios. Sin embargo, como existen necesidades mutuas entre los integrant~s de una sociedad, propone el contrato social como expresión de una voluntad común que protegerá a cada individuo de otros individuos o grupos privilegiados. principales Desde una perspectiva mucho más moderada, otro exponente de esta corriente filosófica; Montesquieu (1689-1755), tuvo el mérito de construir tipologías que le permitieron comparar distintos tipos de sociedades entre sí, recurso muy utilizado a posteriori por cientistas sociales como Max Weber, quien recurrió permanentemente (aunque con ciertas diferencias) a este instrumento intelectual y metodológico para. facilitar la comprensión de las acciones humanas, Montesquieu consideraba que allí donde la propiedad privada estaba menos desarrollada existía una mayor solidaridad social; muchas décadas después Durkheim llamó a esta solidaridad "mecánica", pero diferenciándose del pensador iluminista creyó que la forma de solidaridad social que él consideraba superior, la "orgánica", ,se correspondía con el desarrollo pleno de la propiedad en el capilalismo. También sé preocupó por las leyes, que según su postura o ¡ 33 no sólo rigen el mundo de la naturaleza sino que además están presentes en el mundo social, por esta razón cada vez que abordó hechos sociales lo hizo con la intención de poder explicarlos, convencido al igual, que Rousseau que estas leyes solian violentar en la sociedad de su tiempo a las naturales. , Si bien los iluministas han sido presentados habitualmente como representantes de un pensamiento exclusivamente negativo, por sus criticas filosóficas y sociales, también expresaron una alternativa positiva, ya,que iniciaron un camino equidistante tanto del racionalismo puro como de. la simple recolección de hechos observados, para la construcción de una nueva sociedad. Ésto, junto a la atención que le prestaron a los avances producidos en la ciencia natural (con la idea de incorporarlos al estudio de la sociedad, como lo indicaba Montesquieu), los convirtieron en un antecedente esencial en la senda que condujo al surgimiento de la ciencia social. Por otro lado, al promover la creación de leyes que se adecuaran a la naturaleza humana, como en el caso de Rousseau, se erigieron en inspiradóres de los principios enarbolados por los revolucionarios franceses: libertad, igualdad y fraternidad. I , 1 !- -- _._-- - _. __ ._--- La burguesía, clase en ascenso por entonces, que expresaba en su VlSlon de la realidad el deseo de cambio de la mayoria del conjunto social, halló en los planteos iluministas la apoyatura teórica necesaria para promover una revolución política, que estaba en estricta correspondencia con las transfonnaciones económicas que se estaban produciendo. De esta fonna, la Revolución Francesa se convirtió en la institucionalización de la Revolución Industrial. Claro está que las fonnulaciones teóricas de los filósofos que estamos tratando, no hubieran sido posibles sin el previo desarrollo del incipiente capitalismo. Sus idea.s representaron la justificación del cambio ya iniciado con la manifiesta intención de profundizarlo, aunque éste siguió luego.un rumbo no previsto por sus exponentes más radicales, . . ~ La Reacción Romántico-Conservadora. La historia, tal como la entendemos en este trabajo, no es un proceso pennanentemente lineal y ascendente ni un conjunto de ciclos que se reiteran, sino que está jalonada por avances y retrocesos, flujos y reflujos. De esta manera podemos comprender porqué al planteo revolucionario de los iluministas se le opuso, algunas décadas después, una nueva comente filosófica que expresaba la defensa del pasado: la Reacción Romántico-Conservadora. Esta representó la visión de mundo de una clase social, la nobleza, que habia sido dominante en el orden feudal, pero que en el momento histórico que analizarnos se hallaba en pleno retroceso. Sin embargo, lejos de aceptar la inevitabilidad de su destino, sus miembros encabezaron movimientos de restauración que hallaron el adecuado soporte teórico en las ideas de los filósofos conservadores; la Santa Alianza constituida en 1815 por Rusia, Austria y Prusia representó el intento más contundente al respecto. Los filósofos analizados sustentaron una,teoria del conocimiento radicalmente opuesta a la de los iluministas. Mientras éstos defendieron incondicionalmente un racionalismo empirista, los conservadores reivindicaron la fe, la intuición y los sentimientos como instrumentos idóneos para conocer la realídad. Si bien esta comente del pensamiento apuntaba a la defensa del statu quo feudal, tuvo característicaS algo distintas según I I I ~ _ 34 fuese el contexto en el que se manifestaba. En Alemania e In9"laterra,por ejemplo, adquirió un tinte conservador y nacionalista, ya que pretendian defenderse de las amenazas expansionistas y revolucionarias de Napoleón Bonaparte; aunque los exponentes u\9"lesesaceptaban un cambio lento, or9"ánico.En Frazlcia,país en el que ya se había producido la revolución política de 1789, se puso énfasis en la necesidad de recuperar el orden feudal perdido, adquiriendo rasgos claramente reaccionarios. A pesar de los düerentes matices los unia una innegable decepción ante los avances de una nueva sociedad, la capitalista, a la que no pertenecían ni respetaban; come así también el convencimiento acerca de la superioridad de la fe y la intuición sobre la razón, más un desprecio inocultable por todo aquello que alterase el orden y las jerarquías del feudalismo. Su romanticismo basado en la recuperación de los sentirñientos ante el embate demoledor de la razón, 100ro penetrar en el arte 9"enerando producciones valoradas por la humanidad. Pero esa defensa de la irracionalidad trasladada al terreno filosófico habria las compuertas para la negación delp~reso. ; ! -1 ! I 1; I i i! l' 1:1, I Los conservadores consideraban a la sociedad como una unidad orgánica, éticamente superior ,a los individuos que la integraban. A sus instituciones y costumbres le adjudicaron un carácter positivamente ñ:¡ncional,por lo que todo cambio (sobre todo si era brusco) era evaluado negativamente. Estas ideas incipientes, utilizadas para justificar la permanencia de un orden ~n extinción, fueron retomadas por distintos exponentes de uno de los dos ejes teóricos en que se va a expresar la ciencia social que surge a partir del pensamiento de S,aint- Simon, como es el caso de positivistas y funcionalistas. Por otro lado, al9"unoses,iudiosos de la historia del pensamiento social, creen ver puntos de contacto entre el rechazo al capitalismo de los filósofosanalizados y los planteos desarrollados luego por Marx y En9"els. Consideramos que esto constituye un verdadero desproposito; ya que si bien existen algunos puntos de contacto en la critica, sus fundamentos san distintos; lo que conduce a los primeros a un pertinaz intento de frenar el avance de la historia, mientras los segundos, en cambio, postulan la superación del capitalismo mediante el p.aso a un nuevo tipo de sociedad (socialista). La reacción conservadora pretende .regresar al pasado, o en el mejor de los casos conservarlo, porque ven en el avance capitalista la encarnación del mal que amenaza las bondades del bucólico medioevo. Desde una perspectiva antitética, los exponentes del materialismo dialéctico expresan la búsqueda de !in futuro desalienante, pero reconociendo la superioridad de la sociedad burguesa con respecto al feudalismo. Asi como los ilurninistas plantearon el conflicto entre la superestructura juridica y política del viejo sistema, y las nuevas necesidades institucionales de la expansión económica impulsada por la burguesía, los conservadores deseaban mantener el statu quo de la sociedad feudal, regresar a él, o en su versión más moderada aguardar el cambio evolutivo y natural de las instituciones. Estas posiciones alternativas brotaban de realidades que se diferenciaban por la posición que ocupaba la aristocracia terrateniente en las naciones europeas. En Inglaterra, donde había logrado algunos acuerdos con la burguesía, uno de los principales intelectuales de la clase, Edmund Burke (1729-1797), si bien se manifestó decididamente contrario al cambio radical como consta en su obra "Relleziones sobre la Revolución Francesa", de todas maneras incorporo a sus análisis el concepto de evolución orgánica para explicar el cambio que consideraba positivamente posible. Mientras que en Alemania la debilidad de la '-', ;.;{.". ¡:_ C~ .• 35 clase burguesa le dio a la aristocracia suficiente oxígeno para mantener un statu quo que sólo fue alterado por la burocra";ia estatal, cuando ésta emprendió el proceso modernizador. Pero en Francia, país en el que los nobles y su monarca hablan sido expulsados viohmtamente del poder, Louis Bonald (1754-1850) y Joseph de Maistre (1754-l821)postularon un regreso al orden anterior, demostrando que los reflujos de la historia estaban presentes. Las dos corrientes filosóficas mencionadas fueron producto de intelectuales que expresaban a 'clases sociales y sociedades distintas. Nobleza, campesinos precapitalistas, Iglesia y orden feudal por un lado; burguesía, pequeña burguesía progresista y capitalismo por el otro. Si bien en algunos países el cambio fue menos violento y ciertos compromisos resultaron posibles, de todas formas la suerte de la vieja sociedad estaba echada. Resulta indudable que las ideas iluministas repercutieron en el desarrollo intelectual posterior, sin embargo también algunos planteos de los conservadores encontraron eco, aunque adaptados al nuevo periodo histórico que se habría paso. 2. Surgimiento de la ciencia social. • . El pensamiento de Saint-5imon. El conde Claude Henri Saint-8imon (1760-1825), considerado positivista por unos y socialista utópico por o!{os, recibió las influencias de las dos corrientes filosóficas ---------~m~e~n~Cl=o=n=a~das; ellas nutrieron su pensamiento constituyéndose en la clave para la explicación de lo aqui presentamos como la fisión binaria de la ciencia social, concepto éste inn-oducido con meridiana lucidez por el sociólogo AJvinGouldner(3). El encuenn-o entre empirismo y racionalismo gestado por los iluministas, sentó las bases para el desarrollo de un conocimiento científico en el campo social. Saint-8imon. heredero de esta visión, se planteó la necesidad de trascender el conocimiento especulativo' de la filosofía para construir una ciencia de lo social, superando el abordaje general de la realidad, mediante la formulación de teorías más acotadas y verificables. Para conquistar dicho objetivo tomó como referentes a las ciencias de la naturaleza, particularmente la fisica, '.demostrando en este campo una profunda admiración por el descubrimiento de Newton sobre la ley de la gravitación. El conde francés consideraba a la ciencia como un conjunto de enunciados teóricos verificables, que hablan logrado una gran unidad "en las ciencias naturales, la cual debía ser alcaru:ada en el terreno de los estudios humanos. Por otro lado, le asignaba a estos conocimientos la función que habla desempeñado la religión en el feudalismo, como fuerza cohesiva para la sociedad. A ellos se habla llegado a través de un largo proceso evolutivo constituido por tres etapas: teológica, metafísica y positiva o cientifica. Cada una de ellas representaba por un lado una necesidad y por otra una superación, adoptando una típica concepción evolutiva que seria retomada por los representantes del paradigma positivista. 36 • ,! Saint-Simon se habla identificado en su práctica de juventud con los revolucionarios franceses, aunque en ocasiones lo negó, quienes como ya dijimos se apoyaban en los planteas anticipados por los filósofos iluministas. Desde ese momento tuvo clara conciencia acerca de las contradicciones entre la vieja y la nueva sociedad, expresadas según su análisis a través las clases ociosa y productiva. Esta última incluía un amplio espectro conformado tanto por industriales, banqueros y científicos, como por obreros manuales; con lo que dejaba entender que todos ellos conflulan en una unidad de intereses. Si bien era un 1}oblefue partidario de la Revolución, ya que comprendía que el conflicto social entre los representantes del viejo y nuevo orden, se resolvería con ,el remplazo de sus pares en la conducción de la sociedad. En el plano económico-político los empresarios estaban llamados a desempefiar dicho papel, en el polltico-espiritualles asignaba un lugar preponderante a los científicos. Asl como en el medioevo el conocimiento y la cohesión espiritual de la sociedad estaban garantizados por la religión, en esta nueva etapa la ciencia cumpliría esa tarea que adquiría un carácter absolutamente funcional, favOreciendo el desarrollo de las ideas morales y valores necesarios. Ellas resultaban indispensables para que la nueva sociedad se consolidara, la ciencia debía contribuir para alcanzar la unión y estabilidad social, superando la anarquía que siguíó a la Revolución. ~-'-- ----- La concepción que Saint-Simonsostuvo' acerca de la ciencia en el campo social estaba fuertemente influenciada por la filosofía iluminista, ya que hacia converger a la observación con una razón aplicada. Sin embargo a ésta la despojaba del tono crítico de sus antecesores, reemplazándolo por un positivismo que era entendido como sinónimo' de objetividad en el abordaje de los fenómenos, tanto naturales como sociales. Mientras los iluministas intentaban conocer la realidad para transformarla a partir del empleo de la razón, su objetivo era conocer las leyes de la sociedad tal como se manifestaban, así como los científicos natuIEles Jratªban_d~conoceLlas.de.la... -.-- ----n-a-tu-ra~l-eza; a partir de allí se podría prever y sobre la base de ello planificar. El conflicto social, que en algunos planteas iluministas era presentado como un antagonismo entre las anacrónicas instituciones feudales y las verdaderas necesidades humanas que la nueva sociedad promovia, se expresó en Saint-8imon como un conflicto de clases (ociosa y productiva), que se resolvia a través del cambio social. Los filósofos como Rousseau (quien también habla plantado el conflicto de clases a lo largo de la historia) anticiparon la necesidad de una transformación radical, SaíntSimon participó en ella y la justificó. Sin embargo el desarrollo de los acontecimientos en el período posterior a la gran Revolución, lo volvieron permeable a otro tipo de influencias. La corriente filosófica que habla surgido como respuesta a los iluministas y al proceso revolucionario desencadenado, adquirió en Francia un carácter decididamente reaccionario, ya que postulaba el regreso al statu qua anterior. SaintSimon, contemporáneo de estos filósofos, rechazaba la irracionalidad romántica como fuente de conocimientos tanto como_ el regreso al pasado, pero le resultaban particularmente atractivas las ideas vinpuladas con el orden y las jerarqulas sociales formuladas por los intelectuales de ')a reacción conservadora. Ellos pretendlan recuperar el orden feudal y una jerarquización basada en los tres estados feudales. Saint-8imon sin embargo era consciente'de que el cambio habla sido necesario, por lo tanto no aspiraba a retrotraer la historia. pero sí con adecuar los conceptos de orden y jerarquías a los nuevos tiempos. ~_ 37 Los iluministas habfan contribuido con su visión critica a derribar una superestructura polftica y jurídica que no se correspondfa con las necesidades de la época, ya que lo revolucionaríos adoptaron sus planteos más radicalfzados como guia para la acción, pero Saint-Simon opinaba que no habian aportado lo imprescindible para construir el futuro. Él estaba persuadido acerca de la impostergabilidad de construir un nuevo orden, ya no feudal sino industrial, conducido por una elite que ahora estaria constituida por industriales y cientificos. Los primeros eran los conductores naturales de la producción material, y los segundos debfan aportar tanto a la producción de conocimientos como a cohesionar espiritualmente a la sociedad. • La fusión filosófica y la fisión hinaria de la ciencia social. Como vemos Saint-5imonintentó fusionar planteos teóricos provenientes de corriente filosóficas de signo contrario. De los ililministas tomó la convergencia entre razón y observación como camino para produ~ir el conocimiento de la realidad social, pero tratando de descubrir las leyes quE!'la gobiernan para trascender las hipótesis inespecfficas y especulativas de la filosofía, de allf que las ciencias naturales fueran referentes aún más fuerte que para los Iilósofos mencionados. Por otra parte coincidió con ellos en cuanto a la existencia de conflictos, justificando el cambio institucional de 1789 que acompafió a los que se venfim operando en la estructura económica y los potenció. Pero el contexto histórico en el que Saint-5imon produce gran parte de su obra es posteríor a la Revolución, por lo que a esa altura resultaba imprescindible construir un nuevo orden, con jerarquias sociales adaptadas a circunstancias distintas; fue entonces cuando prestó atención a las ideas de sus contemporáneos conservadores. Más allá de su origen noble, Saint-5imon se identificó con los intereses de la burguesfa en ascenso, convirtiéndose en el teórico que reflejó dos situaciones históricas distintas vividas por esta clase, como bien lo refleja Zeillin en "Ideología y leona sociológica". Por un lado apoyó la revolución polftica contra un régimen absolutamente decadente, utilfzando en su prédica argumentos que provenían de los iluministas; por otro priorizó la necesidad de edificar una sociedad estable y orgánica, de acuerdo con las nuevas necesidades de la clase a la que expresaba. Si bien la mayoría de los planteos de Saint-5imon están emparentados con el positivismo, hay quienes lo presentan como un socialista utópico, tal como ocurre en el trabajo en que Engels analiza a estos primeros socialistas como antecedente de lo que luego sería el socialilÍmo cientifico (5). Haciendo una evaluación de todos aquellos rasgos que consideramos esenciales en el pensamiento de' Saint-5imon, consideramos que este encuadre es básicamente incorrecto, pero si es cierto que acentuando y desarrollando algunas de sus ideas otros teóricos iniciaron un camino alternativo. La riqueza de su pensamiento, más la cantidad de discfpulos y seguidores que cosechó, dieron a luz un proceso teórico de gran singularidad, al que el cientista estadounídense Alvin Gouldner ha denominado ñsi6n binaria de la sociología (6). Este concepto tomado de la física nuclear intenta dar cuenta de cómo a partir de un núcleo intelectual (expresado por las ideas de Saint-5imon), se produjo la división de la teoría social en dos ejes, que son conocidos como: teorías del orden o consenso, y teorías del conflicto. :¡ " li .l ,'.,.' 38 Cada eje produjo un abordaje de la realidad social y un vocabulario para describirla y explicarla, que resultan incompatibles. entre sí, tal como lo reneja el trabajo de John Horton: "Las teorías de orden y conflicto de los problemas sociales como dos ideologías contrapuestas". Este cientista social afirma: "Las teorías del orden tienen en común una imagen de la sociedad como sistema de acción unincado, en el nivel más general, por un sistema compartido, por consenso de valores (o por lo menos de costumbres), de comunicación y de organización política". Y agrega: "El concepto de anomia es clave en el análisis de los problemas del sistema (problemas sociales, desviación, confliclo). Los problemas sociales pueden resultar de la anomia o promoverla. La anomia signiíica desequilibrio del sistema o desorganización social, una carencia o fracaso en la organización que se reDeja en el debilitamiento del control social, en la inadecuada institucionalización de objetivos, en los medios inadecuados para alcanzar los objetivos del sistema, en la inadecuada socialización, etc. En el nivel de análisis socio-psicológico, la anomia termina con el fracaso de los individuos para satisfacer las necesidades de conservación del sistema social". Dejando a un lado los matices particulares que se manifiestan entre los diversos representantes de este eje teórico, recurriendo a una tipología como lo hace Horton, podemos señalar que existe un planteo general compartido. Los principales componentes del mismo son: • la estabilidad social del sistema es producto del consenso con respecto a un conjunto de valores, normas, ideas y creencias; • a veces se da un desequilibrio por la presencia de situaciones anómicas que pueden ser producto de problemas sociales o generarlos; • así como la conformidad con los valores del sistema y el adecuado desempeño de los roles representan la salud, la desviación de individuos o grupos constituye una . patología;---- -.--• cuando esto ocurre, las soluciones están contenidas en el propio sistema: mejorando los procesos de socialización, favoreciendo medios más adecuados para el logro de objetivos, o fortaleciendo los mecanismos de control social. La definición de salud de Parsons. citada en el trabajo de Horton es emblemática: "Podemos deñnlr a la salud como el estado de óptima capacidad de un individuo para la efectiva realización de los roles y tareas para las cuales ha sido socializado ... " El enfoque. opuesto a éste es presentado por Horton en los siguientes términos: "Los teóricos del conflicto concuerdan en su rechazo del modelo de orden de la sociedad contemporánea. Interpretan el análisis del orden como la estrategia de un grupo dirigente, una reificación de sus valores 'y motivaciones, una racionalización para lograr un control social más efectivo." "El análisis del conflicto es sinónimo del análisis histórico: la interpretación de los procesos intersistémicos que producen la transformación de las relaciones sociales. Un concepto clave. en el análisis del cambio histórico es el de alienación-separación. no del sistema social tal como lo dennen los grupos dominantes sino separación de la naturaleza universal del hombre o de un estado de cosas deseado. El cambio es la respuesta progresiva a la alienación ". En este eje también podemos detectar un núcleo teórico compartido si recurrimos nuevamente a la construcción de una tipología: • se considera el orden vigente como el producto estratégico de un grupo dirigente que no responde a los intereses generales de la sociedad sino a los propios; l ••. 39 se incorpora la noción de cambio histórico y social a partir de la práctica colectiva de los hombres; • el concepto de alienación resulta esencial para comprender la justificación del cambio de las relaciones sociales -(ya que la alienación implica un proceso de deshumanización) . Sin embargo resulta pertinente aclarar- que en el trabajo de Horton la relación entre alienación y cambio social es confusa. El mismo es mucho más que una respuesta progresiva a la alienación generada por la sociedad Qo que puede confundirse con una relación casi mecánica entre los términos), en tanto que está indisolublemente ligado con el desarrollo de la conciencia, concepto éste que ha sido excluido por Horton. Sólo la toma de conciencia acerca del carácter alienante de la sociedad contemporánea, les posibilita a los hombres gestar un cambio radical de las =ndiciones objetivas a través de su práctica social. • Las teorías del orden se desarrollaron a partir de aquellos seguidores del pensamiento de Saint-5imon que retomando sus a'spectos más moderados, los condujeron, en muchos casos, hacia una postura =nservadora. Mientras quienes -recuperaron sus planteos críticos dieron origen a las teorías del conflicto. Los intelectuales que intentaron construir un' nuevo orden acentuaron los conceptos que provenlan de los filósofos identificados con el pasado; jerarqulas, estabilidad, valores =mpartldos y organicismo social (válido este último fundamentalmente para numerosos sociólogos y antropólogos del eje) fueron sus ideas rectoras (adaptadas a la sociedad capitalista). Sin embargo la justificación de las mismas Se hizo recurriendo a la autoridad de la ciencia, renegando en este plano del valor positivo que los románticos le asignaban a las fuentes irracionales del conocimiento. Augusto Comte, uno de los r'nás importantes discipulos de Saint-5imon,avanzó hacia una ciencia social del orden, a' la que denominó sociologia. Pero, si bien fue el responsable de la introducción del nuevo concepto, los postulados epistemológi=s, metodológicos y teóricos =ntenidos en el mismo, eran producto de la inteligencia de su maestro, deuda que, =mo sostiene Zeitlin (7), nunca fue reconocida por quien suele ser presentado como el padre de esta ciencia. Otros seguidores de Saint-5imonretomaron sus análisis del =nflicto y cambio social, pero también en este caso adecuándolos a un contexto que se modificaba velozmente. El =nflicto principal ya no era entre la clase ociosa y la productiva, ahora estaba instalado en el seno de esta última. .Industriales (o burgueses) y proletarios era la =ntradicción inherente a la sociedad capitalista; cada momento de su desarrollo históri= mereció distintos abordajes. En la etapa embrionaria fueron los socialistas utópicos los responsables de su estudio, mientras que en la madurez la tarea fue emprendida por los socialistas cientlficos a través de una concepción materialista y dialéctica dela historia. Con respecto ál cambio, los representantes del eje ya no se preocuparon por justificar la RevoluciÓnde 1789, a la que consideraban un hecho consumado y positivo, sino que explicitaron la necesidad de nuevos cambios para superar los =nfiictos propios del orden capitalista. Volviendo al texto de Horton, si bien peca de un exceso de simplificación(por más que recurra 'a una tipologia), de todas maneras tiene el mérito de presentar sintéticamente y sin ambages la innegable polarización teórica de la ciencia social. Sin embargo, resulta imprescindible proponerle al lector una profundización en estos problemas :¡ ,! • • 40 teóricos, ya que algunos exponentes del orden estudian ciertas formas de conflicto y cambio que no se deben descuidar (Robert Merton, Gino Germani), como, a su vez, representantes del conflicto incursionan en el campo del consenso presentándolo como un componente fundamental del cambio estructural(Antonio Gramsci). . 1 Por otro lado Gouldner, indagando con mayor agudeza en el tema, realiza un recorrido histórico por las diversas manifestaciones del proceso de la fisión de la teoría social En relación con el eje del conflicto nos dice: " Un aspecto de la obra de Saint-Simon fue continuado por sus discípulos franceses Enfantin y Bazard; estos la convirtieron en el "saint-siminismo", el cual una vez fundido con las infraestructuras del romanticismo y el hegelianismo alemanes, contribuyó al desarrollo del mandsmo en la obra de Karl Marx, Friedrich Engels, KaUKautsky; Nicolai Bujarin, León Trotsky; VIadimir L Lenin. AlIí donde renovó sus contactos con el hegelianismo se expresó en la obra de Georg Lukás, Antonio Gramsci y en la escuela alemana contemporánea de "sociología crítica de FranJor!, en la que participaran Herber! Marcuse, Theodore Adorno, Mar Horkheimer, Leo Lowenthal, Erich Fromm y ¡urgen Habermas". Continuando con su análisis de la polarización teórica Gouldner se refiere al eje did orden en los siguientes términos: "La otra tendencia de esta ñsión cristalizó en un comienzo en la sociología positivista, que dio base a la sociología académica convent;ional, cuando, a partir de Comte y a través de Ernile Durkheim y la antropología ingl~sa, se convirtió en una de las fuentes a que recurriría Talcott Parsons para su síntesis teórica. Esta persistente tradición de la sociología académica tiene como tema permanente la necesidad del orden social y del consenso moral" (B).Nosparecen 0P0l1unas algunas observaciones en relación con esta cita extraída del trabajo de Gouldner. Cuando recuerda a los primeros exponentes de las teorías del conflicto, además de Enfantiny Bazard deberían incluirse a otros dos de trascendencia mencionados por el propio Engels: Fourier y el inglés Owen. En cuanto al peso atribuido a las influencias románticas en la constitución del materialismo histórico y dialéctico, insistimos en relativizarlo; preferimos recordar en cambio a la economía política de Smith y Ricardo (junto al reconocimiento que Gouldner destaca de los socialistas utópicos y la filosofíahegeliana). Por otro lado, en lo que respecta a los teóricos del orden, el autor citado omite las influencias de Max Weber en la síntesis histÓricade Parsons. Resumíendo, la fusión filosófica que expresa el pensamiento de Saint-8imon,ha sido, a su vez,.desencadenante de la fisión teórica de la ciencia social, que desde el siglo XIX y hasta nuestros días se ha manifestado en los ejes del orden y conflicto. Con la presentación de estos ejes no pretendemos agotar el análisis de un panorama teórico por demás complejo, sino simplemente favorecer la comprensión de las diferencias conceptuales más significativas existentes en la ciencia social. Diversos trabajos han buceado en las profundidades de la teoría, tratando de hallar matices más sutiles entr~ exponentes de un mismo eje, por lo que deliberadamente desistimos de esta tarea; nuestro esfuerzo apunta por lo tanto, a marcar divergencias epistemológicas y metodológicas, que justifiquen encuadres paradigmáticos alternativos. Por ejemplo¡ porqué motivo si Durkheim y Weber se ubican ambos en el eje de las teorías del orde¡). o consenso socíal, sin embargo pueden ser reconocidos como referentes innegables de distintos paradigmas. " j