Rol de los agentes económicos en el Sistema de Libre Mercado. a) FUNCIONAMIENTO DEL MERCADO: Todos los días usamos, compramos o contratamos productos o servicios para satisfacer nuestras necesidades como seres humanos. Estas acciones forman parte de nuestro diario vivir y son el punto de partida para lo que llamamos “economía”. Pero, ¿qué es la economía? Tal vez muchos de nosotros relacionamos esta ciencia con trabajo, riqueza, pobreza, dinero; otros, seguramente con escasez, ahorro e impuestos. El concepto que se ha elegido, “el objeto de estudio de la economía, es el comportamiento humano en la producción, intercambio y uso de bienes y servicios”.1 Las sociedades en general y las personas en particular, necesitan satisfacer múltiples necesidades como alimentación, educación, salud, seguridad, entre otras, y lo hacen con recursos (dinero) que muchas veces resultan insuficientes para cubrir las necesidades. Aparece entonces lo que se conoce como el “problema económico”, que significa que nuestras necesidades materiales son ilimitadas y nuestros recursos para satisfacerlas no lo son. Tenemos muchas necesidades pero el acceso (dinero) a los bienes (productos o servicios) que las satisfacen es escaso. En particular, vemos qué necesidades satisfacemos con el sueldo de cada mes: la educación de nuestros hijos, salud, vestuario o alimentación, entre las múltiples necesidades que enfrentamos durante nuestra vida. El Estado enfrenta el dilema de qué necesidades públicas puede cubrir con los ingresos que tiene, en qué gasta, que prioridad le otorga a los recursos que posee. Por otra parte, no podemos dejar de lado a las empresas e industrias, que con sus proyecciones de utilidades o ganancias, deben evaluar qué y cuánto producir, entre otras cosas. Cuando se habla que la economía intenta satisfacer estas necesidades múltiples con recursos escasos, se hace hincapié en que esta función se realice de la forma más eficiente posible; es decir, que la economía mejore el bienestar económico de una persona sin empeorar el de otra. A la vez, la economía está estrechamente ligada a otro concepto: el Consumo. Cuando tenemos alguna necesidad, consumimos productos o adquirimos servicios para satisfacer esas necesidades. De esta forma, pasamos a ser consumidores. Cuando consumimos estos bienes y/o servicios tenemos que elegir, ya que nuestros recursos son escasos Por ejemplo, cuando vamos a comprar algún detergente al supermercado, normalmente buscamos el mejor detergente, pero también nos fijamos en que el precio se ajuste a nuestro presupuesto. Por lo tanto, como consumidores nos vemos diariamente en la situación de buscar un bien o servicio que nos dé el mejor resultado al precio que podemos pagar. ¿Qué es un consumidor? Es una persona natural o jurídica que adquiere algún bien o contrata un servicio, mediante el pago de un precio o de una tarifa, para hacer uso de ellos como destinatarios finales o para aplicarlos en la satisfacción de las necesidades propias o de su grupo familiar. 1 Economía. David Begg, Stanley Fischer y Rudiger Dornbusch. Editorial McGraw Hill, 2002. En las últimas décadas, existe una mayor conciencia de nuestro rol como consumidores y es por esto que se han generado mecanismos para plasmar nuestros derechos. En Chile, se dictó la Ley N° 19.496 de Protección de los Derechos del Consumidor, donde se especifican los derechos y responsabilidades que tenemos como consumidores, y se establecen normas que regulan las relaciones entre proveedores y consumidores. b) LOS AGENTES ECONOMICOS. Dentro del sistema económico, intervienen diferentes agentes económicos. En esta categoría entra el Estado, las Industrias, las Empresas, los Consumidores y sus Asociaciones y el Sector Externo. Cada uno de ellos cumple distintos roles dentro del proceso económico. a) Mercado: Son lugares en los que los compradores y los vendedores se reúnen para intercambiar bienes y servicios libremente. El mercado es una institución, no necesariamente formal o con una ubicación física determinada, donde participan los interesados en comprar o vender algún producto o servicio. Aquí se produce lo que conocemos como oferta y demanda, donde los proveedores ofrecen sus productos (oferta) y los consumidores compran (demandan) estos productos o servicios. Cuando nos referimos al término “demanda”, hablamos de la acción que realizamos como consumidores cuando deseamos comprar y/o consumir un bien o servicio específico. Refleja la voluntad y capacidad económica de las personas que tienen una determinada necesidad. A la vez, hablamos de “oferta” en relación a la cantidad de bienes y/o servicios que los proveedores están dispuestos a vender para satisfacer nuestros requerimientos como consumidores en un momento determinado. En este escenario, el precio del bien toma un rol fundamental, porque en función de éste se desprende qué cantidades van a ser “demandadas” por los consumidores, y la “oferta” que los proveedores pondrán a disposición de los consumidores. Así, todo bien, producto o servicio tiene un valor expresado en dinero: el precio, que define las decisiones de los productores y consumidores en el mercado. Su aumento tiende a disminuir las compras de los consumidores y fomentar la competencia, al aumentar la producción; la baja de precios fomenta el consumo y disminuye el incentivo de los proveedores para producir. En este sentido, el mercado se encuentra en equilibrio, cuando el precio y la cantidad equilibran las fuerzas de la oferta y la demanda; es decir, cuando la cantidad que desean adquirir los compradores o consumidores es exactamente igual que la que desean vender los vendedores o proveedores. Existen mercados de todo tipo de cosas. Por ejemplo, el mercado de la fruta. Cuando vamos a este mercado, nos transformamos en consumidores dispuestos a demandar ciertos bienes (las frutas) para satisfacer nuestras necesidades de este producto; mientras que cada vendedor se transforma en un proveedor dispuesto a satisfacer nuestras necesidades, ofreciéndonos las frutas a un precio determinado. Por otro lado, dentro del desarrollo económico existen tres preguntas claves: cómo producir, qué producir y para quiénes producir. Estas interrogantes se han planteado a lo largo de la historia y su respuesta es diferente, dependiendo de la estructura económica que posee cada sociedad y la época en la cual se encuentre, ya que, en general, en las economías de mercado ninguna persona, ni organización, ni estado es responsable de resolver estas incógnitas, sino que son las empresas, consumidores, proveedores, productores y demás actores económicos quienes, mediante su accionar económico, generan las respuestas a estas preguntas. Por lo tanto, podemos afirmar que el ente encargado de las respuestas en este modelo, es el mercado. ¿Qué se entiende por competencia perfecta? Se refiere a un sistema en el que ninguna empresa o ningún consumidor son suficientemente grandes para influir en los precios del mercado. Por ejemplo, el mercado del trigo en Chile no influye en el precio del resto del mercado del trigo del mundo, por lo que es perfectamente competitivo. Sin embargo, existen mercados de competencia imperfecta, como los monopolios. Esto se refiere a que un comprador o vendedor puede influir en el precio de un determinado bien o producto, haciendo que los precios sean superiores a los costos y que las compras de los consumidores disminuyan hasta alcanzar niveles ineficientes. Los precios son excesivamente altos y los niveles de producción demasiado bajos. La mayoría de los gobiernos ha tomado medidas para frenar los tipos más extremos de competencia imperfecta a través de la regulación. El freno más importante a la competencia imperfecta es la apertura de los mercados a los competidores. Hoy en día, nuestro país ha estructurado su economía bajo un sistema denominado “Economía Social de Mercado”. Este sistema se basa en la propiedad privada de los medios de producción y en el mercado como espacio donde se asignan los recursos de forma más eficiente, siendo una condición necesaria para garantizar la libertad de los precios. Bajo esta concepción, el Estado interviene sólo en aquellas áreas donde es conveniente corregir, actuando como regulador y cumpliendo el rol de subsidiario y velador del buen funcionamiento del mercado. La economía social de libre mercado posee una serie de características, entre las cuales están: la existencia de la propiedad privada, la libertad de precios, la existencia de la competencia, y contar con legislación sobre la protección del bienestar social. Estas características tienen como fin lograr el creciente bienestar general y no sólo el individual. Ludwing Erhard señala que la idea central es que el individuo no debe verse afectado en el desarrollo de su libertad, ni por una concentración del poder privado, ni por un intervencionismo estatal. Para eso sirve la idea de competencia y la entrega de las condiciones de desarrollo social de los económicamente débiles. El estado interviene cuando lo considera necesario, a través de la subsidiariedad, que es hacerse cargo de aquellas cosas en que al sector privado no le interesa intervenir, cumpliendo un rol responsable como promotor y regulador del mercado. En el caso de nuestro país, el Estado cumple el rol que le corresponde en este modelo al dar subsidios habitacionales, de agua potable, jubilaciones mínimas, garantías en la educación primaria y secundaria; y en planes como, por ejemplo, el AUGE, tendiente a garantizar la atención hospitalaria gratuita de una serie de enfermedades a las personas. En un país en el cual el mercado tiene una actuación más protagónica, el Estado deja muchas veces este tipo de iniciativas al sector privado; así en el caso de nuestro Estado se busca ante todo asegurar de una manera directa los derechos del ciudadano en las materias más importantes, sabiendo que el mercado no tiene entre sus funciones el atender los derechos de las clases económicamente más desposeídas. La Economía Social de Mercado exige al Estado, una estrecha cooperación con los agentes y actores que se encuentran inmersos dentro de la economía. Significa que se convierte en un agente influyente, no principal, en los procesos económicos, guiando cuando sea necesario los pasos de ésta, pero nunca deteniendo o influenciando de gran manera su accionar, garantizando de esta forma su grado de libertad. b) Estado: En la actualidad, la mayoría de las economías se orientan hacia el modelo de libre mercado. Por esto, el Estado asume la tarea de reparar o prevenir los fallos que comete el mercado. A la vez, posee un rol normativo, que se orienta a corregir situaciones provocadas por el mercado cuando éste es ineficiente. Para ello se debe demostrar que: Existe una intervención que mejora el bienestar de todo el mundo, sin empeorar el de otra persona, lo que en economía se conoce como Eficiencia de Pareto, En el intento de remediar un fallo, éste se oriente en la mejora propuesta en el sentido de Pareto. Entre las actividades características del Estado, se encuentran generalmente la manutención del ejército, la policía, la construcción de caminos, el tratar de entregar la mayoría de los derechos fundamentales como educación y salud, recaudar los impuestos y procurar que las fallas del mercado no dañen los intereses o afecten el beneficio de los consumidores. El Estado también realiza labores como el dar garantías en cuanto al desarrollo de nuestros derechos y libertades; entre ellas está el derecho a desarrollar alguna actividad económica, y, por esto, existe un Orden Público Económico el cual se vincula con los principios que propugna nuestra Constitución Política. Las garantías que nos entrega el Orden Público Económico son: El derecho a desarrollar cualquier actividad económica que no se oponga a la moral, orden público o a la seguridad nacional, respetando las normas legales que la regulen. La igualdad y no discriminación arbitraria que debe otorgar el Estado y sus organismos en materia económica. La libre accesibilidad a la propiedad de los bienes corporales(casa propia) e incorporales (aire puro) de los ciudadanos El establecimiento de restricciones específicas al ejercicio de determinados derechos o libertades para proteger el medio ambiente. Por ejemplo, las normas para el uso de la leña en ciudades con altos índices de contaminación. Por otro lado, el mercado a veces provoca daños a los consumidores en función del beneficio de los productores o proveedores, encontrándose los ciudadanos en un estado de indefensión respecto a éstos, como por ejemplo: acuerdos de precios, monopolios, reparticiones de zonas de ventas, etc. A su vez, el Estado prevé el bien común mediante la creación de leyes que proveen a la ciudadanía de bienes básicos y ejerciendo un rol de instrumento de la ciudadanía para su propia defensa. Por ejemplo, protegiendo a los consumidores a través de organismos públicos como el Sernac, Superintendencia de Electricidad y Combustibles, Superintendencia de Servicios Sanitarios, entre otros. Pero, además, de toda esta amplia variedad de actividades posibles, el Estado desempeña variadas funciones económicas: Aumenta la eficiencia fomentando la competencia, frenando las externalidades, como la contaminación, y suministrando bienes públicos como las plazas, seguridad ciudadana, entre otros. Fomenta la equidad, utilizando los programas de impuestos y de gasto para redistribuir la renta a favor de los grupos vulnerables. Genera un “conjunto de normas marco” o generales contenidas en la Constitución Política, que regulan los derechos y libertades de orden económico de las personas, la actividad económica del Estado y las relaciones de carácter económico entre ellos”2. Educa a los consumidores a través de distintos planes y programas. Reconoce en forma positiva los derechos de los consumidores y crea los mecanismos de control, supervisión y solución de controversias. c) Proveedores: La ley 19.496, define a los proveedores como las personas naturales o jurídicas, de carácter público o privado, que habitualmente desarrollan actividades de producción, fabricación, importación, construcción, distribución o comercialización de bienes o de prestación de servicios a consumidores, por las que cobra un precio o tarifa. De esta definición se desprende que los proveedores, deben producir los bienes y servicios que serán comercializados en el mercado. Su rol principal es el de hacer llegar tales bienes y servicios al mercado para hacer operar la oferta. La ganancia es el objetivo principal de los proveedores, y para ello toman todo tipo de medidas económicas y extra económicas (como las publicitarias) destinadas a influir en las decisiones de los consumidores y asegurar la venta de sus productos. d) Consumidores: Según la definición de la Ley del Consumidor N° 19.496, los Consumidores o Usuarios son las personas naturales o jurídicas que adquieren algún bien o contratan un servicio, mediante el pago de un precio o de una tarifa, para hacer uso de ellos como destinatarios finales, vale decir, para aplicarlos en la satisfacción de sus necesidades personales o de su grupo familiar. Dentro de la Ley, se asigna a los consumidores derechos, a la vez que se otorgan responsabilidades para ser un buen Consumidor. Por esto es necesario que todos, como potenciales consumidores, conozcamos las normativas existentes y los mecanismos que éstas nos entregan para actuar. Es importante que se genere conciencia dentro de los consumidores de la importancia de las buenas prácticas que deben tener los productores, siendo el consumidor, quien mediante el acto 2 CEA EGAÑA, José Luis. de consumo o no consumo, castiga a los proveedores que no respeten sus derechos y opte por aquellos que sí lo hacen. La acción de los consumidores, para ser completa y eficaz, debe tener una dimensión individual y cotidiana, por ejemplo, reclamar si siente que sus derechos han sido vulnerados, y otra social y colectiva, por ejemplo, pertenecer a una Asociación de Consumidores para resolver problemas colectivos, es decir, que afecten a muchas personas. e) Sector Externo: Este es de extraordinaria importancia y aunque no está situado físicamente en la economía nacional, tiene una incidencia fundamental en el funcionamiento de ella. Lo forman los empresarios, consumidores y gobiernos de otros países (entendidos como sistemas económicos). El sector externo puede tomar decisiones respecto de comprar o no los productos que nosotros como país producimos (importaciones), de vender o no productos o bienes y servicios (exportaciones), de otorgarnos o no créditos financieros (préstamos externos), lo que indudablemente nos afecta no sólo como país sino que también a cada uno de nosotros. Este tipo de economía en la cual interactúan todos los agentes económicos mencionados recibe el nombre de Sistema Económico Abierto. Autores: Patricio Infante, Cristina Larraín, Hada Ríos © 2008 - Servicio Nacional del Consumidor, Teatinos 50 - Santiago - Chile Se autoriza la reproducción de sus contenidos, citando la fuente y con el único objetivo de difundir los derechos de los consumidores.