Taller de Formación de Facilitadores para la Reconstrucción de Proyectos de Vida Universidad Nacional Experimental Simón Rodríguez (UNESR) Centro de Experimentación para el Aprendizaje Permanente (CEPAP) 1 AGRADECIMIENTO Para comenzar este agradecimiento quisiera hacer un poco de Historia: corría el mes de diciembre del año 1999, cuando se produjeron el deslave y las inundaciones que azotaron parte del territorio nacional. En esos momentos un grupo de organizaciones y personas preocupadas por prestar la ayuda requerida por las múltiples víctimas, decidieron reunirse y crear una Red con el fin de proveer ayuda de una manera coordinada; su nombre fue Red de facilitadores para la reconstrucción de Proyectos de vida. Una de las primeras preocupaciones que surgieron en las reuniones iniciales fue la necesidad de formación que teníamos sus miembros para poder dar respuesta a los diversos requerimientos de las víctimas de este desastre. De la Red emergió un grupo conformado por: Lucio Segovia, Inocencia Orellana y Mayerlin de Aliegro, que se encargó de hacer los primeros contactos con la entonces denominada Fundación Neo-Humanista, para que nos asesorara y nos enviara material de apoyo con el fin de comenzar nuestra formación; es importante destacar en este momento el apoyo desinteresado prestado por dicha organización, representada por Gilberto Brenzon y María Begoña Rodas, quienes no se conformaron con enviar el material sino que se apersonaron y dictaron en nuestro país tres niveles de formación, y se convirtieron en nuestros amigos y guías. Del grupo grande de organizaciones que conformaron la red, se desprendió simultáneamente un equipo de trabajo cuyas labores coordiné; este equipo nos comenzamos a reunir con el fin de intercambiar experiencias y materiales de otros cursos o jornadas. La primera decisión de este grupo fue crear un Plan de formación a ser dictado por nosotros en nuestro país, para lo cual se generó un Mapa de conceptos que simplificara y le diera lógica a toda la información y formación que estábamos recibiendo de manera acelerada, y una adaptación para Venezuela de la presentación diseñada por la Fundación Neo- Humanista; entre los compañeros que tuvieron una participación más permanente en esta etapa destacan: Edsijual Mirabal, José Gregorio Linares, Gloria Sardiñas, Miguel Ángel Piñero, Nelson Arriojas. Posteriormente surge la propuesta de desarrollar el Manual para apoyar el plan de formación que desarrollaríamos. Recordar en este momento a todas las personas que participaron de una u otra forma en la elaboración de este Manual sería simplemente imposible, sin embargo deseo reconocer el esfuerzo mantenido de algunas de ellas y su participación activa en la elaboración definitiva de los capítulos del documento definitivo: Gladys Quintero, Olivia Brazon, Luis Mena, Josefina de Azuaje, Edsijual Mirabal, Raquel Hernández, Gladys Cuevas, Miriam Rodríguez y mi persona. Es necesario también reconocer y agradecer el apoyo prestado por las organizaciones a las cuales pertenecíamos y representábamos la mayoría de nosotros, entre ellas destacan: CEPAP-UNESR, CESAP, SOCSAL, la Dirección de promoción Social y la Dirección de Investigación y capacitación de la Gobernación del Estado Miranda, AMAUTA, IAF... 2 Para editar la última versión del manual se necesitó del pequeño apoyo de otro grupo de compañeros entre los que puedo destacar por sus aportes: Mary Carmen García, Emily Rucoz, Yetzabé González, entre otros. El agradecimiento más grande sea para Dios Todopoderoso que nos permitió participar en esta experiencia tan maravillosa y compartir con estos compañeros y algunas víctimas, vivencias tan especiales y le pido humildemente que reconozca en su justa medida el trabajo de cada uno de ellos y de alguna persona que por omisión no haya sido nombrada. Los recuerda, Carolina Azuaje 3 PRESENTACIÓN Te invitamos a participar en una experiencia de aprendizaje con características muy especiales, entre las que se destacan: Marcarás tu ritmo de aprendizaje, Supervisarás tus progresos, Contrastarás los conocimientos que adquieras con tus experiencias anteriores y presentes, “Aprenderás haciendo”, Aplicarás todas las habilidades y destrezas que vayas desarrollando o perfeccionando. Este no es un camino solitario, en él te acompañaremos los facilitadores, tus compañeros del curso, tus hijos y todos los miembros de las comunidades que compartan contigo su proceso de re-construcción, todas estas personas podrán aportar para que tu experiencia sea lo más enriquecedora posible. Para lograr todo esto tienes que convertirte en el autogestor de tu aprendizaje, participando y aportando en las sesiones del curso, leyendo el material con anterioridad y aplicándolo a tus experiencias en el aula o en las comunidades, formándote tus propias concepciones y teorías y en general apropiándote de todo lo que sea de utilidad para complementar tu formación. En cada Unidad del Manual se presentan Planificaciones de posibles actividades que pueden servir de referencia, en el momento de trabajar con los facilitadores que vamos a formar, sólo son ejemplos, pues antes de facilitar el proceso de cada grupo, bien sea de facilitadores o de participantes, tienes que realizar un Contrato de Aprendizaje con ellos, donde realices un diagnóstico participativo de sus necesidades de formación, sus expectativas y su nivel de avance en relación con la temática a desarrollar. Éxito, son muchos los beneficiarios que necesitan de tu formación. 4 RECOMENDACIONES PARA EL USO DE ESTE MANUAL Este es un material teórico-práctico conformado por cinco Unidades, las cuales se presentan subdivididas en los siguientes aspectos: Objetivos, Contenidos, Estrategias, Ejercicios de Reflexión, Lecturas incorporadas al Manual y Bibliografía. ¿ Cómo le sacamos el máximo provecho a este material? 1. Hacer una lectura rápida de toda la Unidad, para saber en líneas generales su contenido y qué solicita de nosotros. 2. Recordemos nuestras experiencias previas en relación con el tema que se desarrolla o en las que no tengamos ninguna referencia personal, imaginarnos como las enfrentaríamos. 3. Realizar una lectura crítica del material que se nos presenta e ir tomando posición, para estar preparados para la discusión que se realizará en la sesión facilitada del curso. 4. Luego de participar en la sesión, responder a las actividades de reflexión en función de lo leído, lo vivido o aplicado en nuestra aula o comunidades con las que hemos trabajado. Recuerda que este es el momento de contrastar tus experiencias anteriores, lo aprendido y vivenciado, con este material. Estudia cuál es la aplicación práctica de lo adquirido con tus alumnos o niños y adultos de las comunidades beneficiarias de tu formación. 5. Cualquier duda o pregunta acude a tu facilitador o a cualquier persona del equipo técnico del curso. Estaremos gustosos de poder servirte. 5 Objetivo General: Valorar el proceso de crecimiento personal y el desarrollo de conocimientos, habilidades y destrezas que potencien el Rol del facilitador, como agente de cambio, en el acompañamiento de procesos de reconstrucción de proyectos de vida y la promoción del desarrollo sostenible de las comunidades afectadas o potencialmente afectables por situaciones de crisis, a través de la implementación de estrategias de ayuda psico-social individuales o colectivas. Contenido: UNIDAD I: El Facilitador como Agente de Cambio El Proceso de facilitación. Modelo para el desarrollo de la Ayuda. Herramientas Básicas de Intervención y Acompañamiento de Procesos. Auto-Observación de Conductas Esperadas. Técnicas para el Abordaje del Estrés. UNIDAD II: Enfrentándonos a la Crisis. Reacciones Inmediatas. Reacciones Iniciales. Reacciones Secundarias. UNIDAD III: Alternativas para solucionar una Crisis. La Crisis como Peligro. La Crisis como Oportunidad. Estrategias Funcionales y Disfuncionales. Herramientas de Auto-Ayuda. 6 UNIDAD IV: Preparándonos para la Reconstrucción. Limitaciones propias de una Crisis. Amenazas Externas. Recursos individuales, familiares y grupales. Pareja y familia. Amistades. Grupos Sociales. Comunidad. Plan de Reconstrucción. UNIDAD V: Reconstrucción del Tejido Social. Técnicas de Auto-diagnóstico Comunitario. Condiciones que favorecen el compromiso Comunitario. Planificación Participativa. Proceso de Negociación. Poder Social. Desarrollo Sostenible. Empoderamiento Comunitario. 7 UNIDAD I EL FACILITADOR COMO AGENTE DE CAMBIO Si puedo crear una relación que, de mi parte se caracterice por: Una autenticidad y transparencia y en la cual yo pueda vivir mis verdaderos sentimientos; una cálida aceptación y valoración de la otra persona como individuo diferente, y sensible, y una sensible capacidad de ver a mi cliente y su mundo tal como es Entonces, el otro individuo, experimentará y comprenderá aspectos de sí mismo anteriormente reprimidos; logrará cada vez mayor integración personal y será más capaz de funcionar con eficiencia; se parecerá cada vez más a la persona que quería ser; se volverá más original y expresivo; será más emprendedor y se tendrá más confianza; se tornará más compresivo y podrá aceptar mejor a los demás, y podrá enfrentar los problemas de la vida de una manera más fácil y adecuada (Carl Rogers, 1972.) 8 INTRODUCCION Cada individuo posee la energía y los recursos internos necesarios para construir y manifestar una gran plenitud, abundancia, bienestar, revitalización y logros en todas las áreas de su vida. Las etapas de crisis pueden constituir una oportunidad, un reto para redimensionar nuestra vida, familia o comunidad, o por el contrario, dejarnos abatir de tal manera, que los miedos, frustraciones, rabias acumuladas a lo largo de la vida, nos hundan cada vez más, en el fracaso y la impotencia. Nuestro es el enfoque que le imprimimos a la percepción de los hechos. Nuestra es la decisión de estancarnos o proseguir con alegría y entusiasmo, participando activamente en la construcción del evento más importante que se manifiesta día a día: Vivir. El elemento clave para el desarrollo personal es la facilitación de procesos de autoayuda; donde nosotros unidos al otro, reflexionamos, responsabilizándonos por iniciar y concretar un plan de desarrollo personal y así construimos nuestros Proyectos de Vida, que contemplen el mejoramiento continuo, la salud integral y el aumento permanente de la calidad de vida individual y colectiva. Para Gilbert Brenson, el facilitador de Procesos Sinérgicos es un agente catalizador que hace posible o más fácil una secuencia de acciones conjuntas para que el ser humano y sus sistemas sociales desarrollen su propia capacidad de lograr un mayor empoderamiento (potenciación), armonía, coevolución y realización. Los principios y herramientas que se exponen a continuación tienen su origen en los desarrollos de la psicología y en especial de la psicoterapia. Las mismas son una adaptación útil a las personas responsables de actuar como facilitadores de procesos de ayuda y recuperación psicosocial, con individuos, familias o grupos comunitarios entre otros. La intención es que posean las herramientas y destrezas para el desarrollo de relaciones de ayuda efectivas y el autocuidado personal. Ante situaciones de crisis o tragedias de amplias magnitudes, y el personal especializado no sea suficiente para la atención de las personas afectadas, y se requiera de la participación activa de trabajadores sociales, maestros, socorristas, lideres comunitarios, entre otros; es necesario que dominen técnicas para la relación interpersonal efectiva, el desarrollo de procesos de ayuda y el trabajo con grupos. De ese modo, se multiplica el número de personas que responsablemente y en forma efectiva aborden, asistan y/o ayuden desde la dimensión humana a los sobrevivientes de una tragedia. 9 Unidad I: El facilitador como agente de cambio PROPÓSITO: Formar facilitadores en el manejo de herramientas y conductas de abordaje de situaciones socioemocionales que surjan ante una crisis. APRENDIZAJES: • Destrezas y herramientas básicas para facilitar y acompañar procesos socioemocionales. • Aplicación de técnicas para la comprensión e intervención del comportamiento individual y grupal. • Caracterización del rol del facilitador. METODOLOGÍA: Utilizaremos técnicas de dinámica de grupos, que motiven y faciliten aprendizajes significativos. CONTENIDOS: • El proceso de facilitación. • Modelo para el desarrollo de ayuda. • Herramientas básicas de intervención y acompañamiento de procesos. • Auto-observación de conductas esperadas. • Técnicas para el abordaje del stress. 10 EL FACILITADOR COMO AGENTE DE CAMBIO OBJETIVOS Objetivo general: Promover el empoderamiento del agente de cambio, para la creación de espacios sinérgicos de aprendizaje y autodesarrollo individual y grupal. Objetivos específicos: Objetivo Específico 1 Desarrollar destrezas y herramientas básicas para la facilitación y el acompañamiento de procesos de ayuda. Contenido: 1. Principios básicos en el proceso de facilitación. 2. Modelo para el desarrollo de la ayuda. 2.1- Tipos de respuestas de ayuda. 2.2- Fases y metas del proceso de ayuda. 2.3- Herramientas básicas de intervención y acompañamiento de procesos. Estrategias: Pequeño grupo de discusión: Cuatro grupos de trabajo con el mismo material teórico. A cada grupo se le asigna la responsabilidad de modelar una de las técnicas. Plenaria: presentación del modelaje de cada técnica por los participantes de cada equipo y el monitoreo de las respuestas correctas, por el resto del grupo y el facilitador. Ejercicio de cierre. Aprendizajes adquiridos. Reflexión final. Objetivo especifico 2 Adquirir técnicas para la comprensión e intervención del comportamiento grupal en situaciones de crisis. Contenido: 1. Comprensión del proceso de grupo. 2. Técnicas y dinámicas para el trabajo con grupos. Aspectos a considerar: 2.1. Contenido vs proceso. 2.2. Comunicación 11 2.3. Liderazgo. 2.4. Cooperación vs competencia. 3. Técnicas para la comprensión e intervención del comportamiento grupal en situaciones de crisis. 4. Rol del facilitador en el trabajo con grupos que han vivenciado eventos traumáticos. Estrategias: Dramatización : 2 grupos en diferentes fases de su proceso de formación guiones preelaborados. Tormenta de ideas: Etapas del proceso de grupo. Elementos estructurales y funcionales de los grupos. Foro de especialistas: Entrega de material teórico a pequeños grupos. Selección de un especialista por parte del grupo, quien los representará en el foro. Plenaria : Se instala el panel de especialistas. 10 minutos de presentación para cada tema. Preguntas y respuestas. Ejercicio de cierre. Aprendizajes adquiridos. Reflexión final. Objetivo específico 3 Promover el manejo de herramientas y conductas de autocuidado en situaciones traumáticas. Contenidos: 1- Auto – Observación y conductas esperadas. 2- Técnicas para el auto – cuidado y el manejo del stress. 3- Comportamiento previsivo y conciencia de limitaciones personales. 4- Importancia de la supervisión, apoyo y asesoría individual. Estrategias: Visualización de una situación artificial de desastre. Análisis individual de autodiagnóstico de las estrategias utilizadas para enfrentar la crisis. Análisis grupal y exposición de cada grupo. Plenaria. Pequeños grupos de discusión con material teórico, preguntas orientadoras y estrategias sugeridas. Ejercicio de cierre. Aprendizajes adquiridos. Reflexión final. 12 DESTREZAS Y HERRAMIENTAS BÁSICAS PARA LA FACILITACIÓN Y EL ACOMPAÑAMIENTO DE PROCESOS DE AYUDA Principios Básicos Del Proceso De Facilitación El concepto de la relación de ayuda:1 La expresión relación de ayuda se refiere a los esfuerzos por contribuir al mejoramiento de una persona, de un modo positivo y que facilite su adaptación. Es decir, la facilitación de un proceso de ayuda, tiene como propósito básico contribuir a que otros comprendan, modifiquen o enriquezcan su conducta de un modo que produzca una evolución (Shertzer y Stone, 1968). El psicólogo humanista Carl Rogers define la relación de ayuda de la siguiente manera: .... Toda relación en la que al menos una de las partes intenta promover en el otro el crecimiento, el desarrollo, la maduración y la capacidad de funcionar mejor y enfrentar la vida de una manera más adecuada. El otro, en este sentido, puede ser un individuo o un grupo. En otras palabras, podríamos definir la relación de ayuda diciendo que es aquella en la que uno de los participantes intenta hacer surgir en una o en ambas partes, una mejor apreciación y expresión de los recursos latentes del individuo y uso más funcional de estos (1961, Pág.) Características de la relación de ayuda: Paterson (1967) define la relación de ayuda, por exclusión, indicando lo que no es: No es suministro de información, aunque durante el asesoramiento pudiera darse. No es dar consejos, sugerencias o recomendaciones. No es influir sobre actitudes, creencias o conductas por medio de la persuasión, influencias o convicción, por más indirectas, inocuas o sutiles que puedan ser. No consiste en influir sobre la conducta mediante advertencias, amenazas, prevenciones u otros modos de obligar sin el empleo de la fuerza o la cohesión física (la disciplina no es asesoramiento.) No consiste en la distribución de los individuos para diversas tareas o actividades. No consiste en realizar entrevistas, no son sinónimos. La naturaleza de la relación de ayuda, es descrita por Patterson en los siguientes términos: Se consagra en influir sobre cierta modificación de conducta que el cliente voluntariamente resuelve (el cliente desea cambiar y busca la ayuda del asesor para hacerlo.) 1 Se adaptan y se sustituyen frases y expresiones como asesoramiento, cliente, asesorado, consultante, etc. , por facilitador y facilitado. 13 Consiste en proporcionar condiciones que faciliten el cambio voluntario (condiciones tales como el derecho del individuo a realizar elecciones, a ser independiente y autónomo.) Como en todas las relaciones se ponen límites a la persona (estos están influidos por los valores y la filosofía del facilitador.) Las condiciones que facilitan el cambio de la conducta se proporcionan en las entrevistas. Implica siempre la actitud de escuchar; no obstante no sólo el acto de escuchar es facilitación. El facilitador comprende a la persona. Resguarda la confidencialidad. El Facilitador de procesos de ayuda: La persona que actúa como facilitador de un proceso de ayuda, es ante todo un ser humano con debilidades, pero con una gran capacidad para evolucionar y crecer. Es una “autoridad” en las relaciones de ayuda, pero también tiene mucho que aprender. La persona con la que trabaja es una expresión única, individual y peculiar de la naturaleza humana, tanto como lo es el facilitador, por lo cual, todo proceso de ayuda implica el crecimiento y desarrollo de quienes participan en este proceso. El facilitador que asume el compromiso de acompañar un proceso humano y construir una relación de ayuda, debe estar consciente de que su capacidad para crear relaciones que faciliten el desarrollo de otros como personas, está en función del desarrollo logrado por sí mismo, así como, estar dispuesto a actualizar de manera permanente sus potencialidades en el sentido del desarrollo. En situaciones de emergencia, la situación de ayuda, no sólo apunta a proceso psicológicos internos, sino que debe lograr que la persona se integre en sus diferentes dimensiones de vida. La relación de ayuda se amplifica del ámbito individual y psicológico al ámbito social y colectivo, es decir, en lo familiar, lo comunitario. Desde esta óptica la ayuda tienen un carácter psicosocial. De esta forma, el facilitador debe guiar su comportamiento por algunos principios básicos de intervención, entre los cuales se destacan los siguientes (AVEPSO, 2000): El facilitador debe reconocer sus propios recursos y capacidades en su labor de apoyo. No victimizar ni categorizar el comportamiento en categorías clínicas. El apoyo psicosocial no debe considerarse como una forma de terapia psicológica. El proceso derivado de la emergencia debe ser considerado en forma integral. Cada persona es un ser singular, y le atribuye significados peculiares a la experiencia vivida. Reconocer las capacidades de las personas y de los grupos para superar la situación. La labor de apoyo debe considerar la labor preventiva ante nuevas situaciones de emergencia. Crear redes de apoyo que contribuyan a brindar ayuda. Considerar el valor afectivo del intercambio. 14 Favorecer la autonomía e incentivar la participación. Promover la reactivación de organizaciones sociales (escuelas, grupos comunitarios, etc.) como agente integrador. Generar espacios de intercambio entre quienes participan en labores de ayuda. Técnicas Para La Relación Efectiva Técnicas de Apertura: El primer paso para el establecimiento de una relación de ayuda consiste en establecer un sentimiento de confianza y rapport: Salude a la persona(s) por su nombre, un apretón de manos no está de más. Puede empezar con algún tema de conversación que rompa el hielo inicial por algunos minutos; hable o indague sobre el origen o motivo del encuentro. Cree el ambiente propicio, evite la colocación de barreras entre usted y él o las personas con las que trabaja. Aclare las dudas sobre el proceso. Técnicas de Escucha: Consiste en atender de manera integral el proceso comunicativo del “otro”: lo que expresa con sus palabras, el cómo lo expresa, la postura física, su rostro, etc. De modo tal, que sea factible captar la realidad y la vivencia interior, sus sentimientos y pensamientos. Escuchar es un proceso activo, e implica brindarle atención física y psicológica. La escucha activa es el primer paso para la escucha empática, la cual además de atender lo que el otro comunica, implica estar con él, colocarse en su sentir y vivencia de una manera compresiva y aceptadora. Recomendaciones para la Escucha empática: (Breson, 1999) Despojarse de los propios criterios. Comprometerse a escuchar física y mentalmente Concentrase en la otra persona. Evitar ponerse a la defensiva. Reconocer la validez de las percepciones y los sentimientos del otro. Aceptar incondicionalmente a la persona, sin que necesariamente se apruebe su comportamiento u opinión. 15 Evitar: (Breson, 1999) Amonestar, exhortar, dar soluciones, dar consejos, juzgar, culpar, amenazar, imponer, psicoanalizar, dictar cátedra, espiritualizar, advertir, moralizar, amenazar, criticar, interpretar, avergonzar, ridiculizar, ordenar, dirigir, imponer, mandar, etc. Técnicas Reflexivas: Una de las técnicas más valiosas en el desarrollo del proceso de ayuda es el Reflejo. Esta técnica ayuda a la persona a penetrar bajo la superficie de su conciencia y más allá del ego, con el fin de clarificar sus sentimientos y tratarlos mas eficazmente. El reflejo se basa en el elemento subjetivo de la persona, por lo que se destaca el uso de expresiones como “usted”, “usted siente”, “usted piensa”, “lo que usted me quiere decir”. El reflejo de los sentimientos conduce a la clarificación de las ideas y experiencias en que se fundan los sentimientos. Consiste en expresar con nuevas palabras las actitudes y sentimientos esenciales (no el contenido), el facilitador actúa como un “espejo”, para que este comprenda mejor y para demostrarle que es comprendido. El reflejo de experiencia parte de la observación del gesto, de la postura, del tono de voz, etc., en la expresión no verbal y se enfoca en la contradicción entre lo que el cliente dice sentir y lo que el consultor ve u observa en su organismo total. Ejemplos: “Dice usted estar enojado, pero sus ojos parecen decirme que me duelen” “Usted dice odiarlo, pero me doy cuenta de cierto afecto en tu voz” El compartir la experiencia como reflejo, consiste el esfuerzo sincero del facilitador por compartir la experiencia con el otro. “Me da coraje cuando usted le permite abusar de esa manera” Dificultades del Reflejo Frases útiles para realizar Reflejos Prototipia Oportunidad Selección de sentimientos Reflejar contenidos Ser muy poco o demasiado profundo Añadir significados Lenguaje inapropiado Se puso usted furioso (apenado, etc.) Piensa usted... Usted cree... A usted le parece Según lo que yo entiendo usted quiere decir que... En otras palabras... ..... ¿es así? Por lo anterior, entiendo que... 16 Técnicas de Aceptación: Consiste en manifestar expresiones y actitudes que demuestren aceptación. Se emplea especialmente al inicio de una relación, en la que hay una elevada expresión de narraciones y contenidos, o cuando al final de una relación la persona profundiza en sí mismo y extrae sentimientos dolorosos o de reflexión. Se basa en tres elementos básicos: primero, la expresión facial y los movimientos de cabeza afirmativos, segundo, el tono y la inflexión de la voz, y en tercer lugar, la distancia y postura física. Expresiones que reflejan aceptación: “Ya veo.....” “Hummm” “Ajá” “Si, continúe...” “Prosiga...” Técnicas de Estructuración: Consiste en la definición de la naturaleza, límites y metas del proceso y de la relación. El individuo debe utilizar su libertad, y al mismo tiempo aceptar los límites impuestos por esa libertad. La estructuración tiene por finalidad evitar malos entendidos e incrementar la seguridad propia de la persona. Tipos de estructura Limites de tiempo y duración Limites de acción Limites en los roles Características del proceso y el procedimiento El Silencio como técnica: Aquí lo importante es valorar el significado de una pausa, el momento en que ocurre y por quien ha sido iniciada. Una larga pausa puede tener múltiples significados: resistencia, reflexión, perturbación emocional o experimentación del dolor, el final de una idea u otro significado; lo importante es descifrar su origen como parte de la comunicación para dar apoyo, promover la expresión emocional, el pensamiento u otra acción efectiva. 17 Técnicas de Orientación y guía: Las técnicas de orientación pretenden promover en la persona o grupo, pensamientos o nuevas formas de entender las relaciones. Es conveniente iniciar el proceso con poca orientación y no dirigir más de lo que la persona (s) pueda tolerar en su nivel presente, de capacidad y compresión. Métodos para alentar: Es esencialmente un tipo de recompensa que produce un efecto de refuerzo en el comportamiento. El facilitador dice en forma directa o indirecta frases como esta: “Usted es una persona capaz, puede resolver este problema, puede ser organizado”. La aceptación facilita y anima a la persona a explorar nuevas ideas o a probar nuevas formas de conducta. Por su naturaleza, propicia la reducción de la angustia y la inseguridad, y actúa como refuerzo de conductas apropiadas o más sanas. Técnicas de Cierre: El cierre de una actividad o proceso es tan importante como el proceso mismo. Es fundamental buscar el momento apropiado para llegar a término. Resumir o pedirle a la persona que realice una síntesis, permite focalizar los aspectos más importantes desarrollados durante el proceso. Para el cierre se recomienda tener en cuenta los límites de tiempo y no desarrollar nuevos temas o abrir nuevos procesos al final de una actividad o encuentro. La referencia al futuro, a la próxima vez u actividad; levantarse, cambiar de postura, mirar el reloj o realizar algún ademán sutil; así como las prescripciones o tareas para la casa, facilita la inducción del cierre de una conversión o actividad. 18 MODELO PARA LA AYUDA SISTEMÁTICA Y LA RELACIÓN INTERPERSONAL El modelo que a continuación se presenta fue desarrollado por Gerard Egan (1975), como una estrategia para incrementar la confiabilidad del proceso de ayuda, en el cual se promueve el desarrollo de destrezas necesarias para la relación interpersonal efectiva. El modelo se basa en los siguientes principios: Se fundamenta en que el facilitador es una persona experta, que esta viviendo mas realizada que el cliente en las áreas o problemas que este aborda y que el cliente aprenderá a vivir mas efectivamente a través del proceso de ayuda. Las destrezas de ayuda son las mismas que se necesitan para vivir efectivamente como ser humano socio – emotivo y para enfrentar las crisis de manera más efectiva. Se enfatiza la autodeterminación de la persona mas que el poder del facilitador. Es entendido como un modelo de influencia social donde el facilitador fundamentado en su pericia y en la confianza de la relación, influencia el cambio de conductas hacia patrones de comportamiento más efectivos. El facilitador es una persona que se esfuerza o que vive efectivamente, comprometido con su propio crecimiento físico, intelectual, emocional y espiritual. Este es un modelo diseccionado, progresivo, de complejidad influyente y creciente. Está centrado en la persona mas que en el problema; se centra en el ser humano y no en el problema a ser resuelto. El modelo propone una fase de pre-ayuda y tres etapas (Ver Cuadro 1): Etapa I: Respondiendo Vs. Autoexploración Etapa II: Entendimiento integrativo Vs. Autoentendimiento dinámico Etapa III: Facilitando la acción actuando Cada fase y etapa exige del facilitador destrezas específicas, a la vez que propone metas específicas a la persona o cliente que recibe la ayuda. En el marco del presente programa se considerará a profundidad la fase de preayuda y la etapa I, por lo que se presenta a continuación un resumen del modelo global y de las destrezas de la Etapa I. (Ver Cuadro 2.) Es responsabilidad del participante - en su proceso de aprendizaje permanente - profundizar las etapas siguientes: 19 Cuadro 1 MODELO DE AYUDA SISTEMÁTICA Y LA RELACIÓN INTERPERSONAL (Gerard Egan, 1975) META DEL DESTREZAS DEL DESTREZA DEL ETAPAS META DEL CLIENTE FACILITADOR FACLITIADOR CLIENTE Atender: Disposición y deseo de ayuda * Atención física Prestar atención, atender al Pre-ayuda otro, física y * Atención psicológica psicológicamente, darse completamente, estar y trabajar con el otro. Responder: Exploración de sí mismo: * Empatía primaria * Auto-exploración El orientador responde al Explorar sus sentimientos, mundo del cliente y a lo que conductas y experiencias * Respeto él tiene que decir, con entorno a su problemática de Etapa I: vida. Explorar las áreas en las Respondiendo vs respeto y empatía. * Genuinidad Establece armonía y una que está viviendo Autorelación de trabajo efectiva y inefectivamente. exploración *Ser concreto o centrar de colaboración con el cliente a fin de facilitar la autoexploración. Entendimiento integrante: Autoentendimiento * Destrezas de la Etapa I * Escuchar sin estar Sobre la base del dinámico: defensivo conocimiento obtenido en la Se basa en la comprensión de * Empatía precisa (nivel Etapa I el facilitador sí mismo, que permite Etapa II: avanzado) * Autoidentificar la necesidad de Entendimiento identifica y ayuda a entendimiento dinámico identificar al otro, temas, cambio y de acción. Desarrolla integrativo *Autodescubrimiento patrones de conducta. Lo la destreza de enmarcarse por vs ayuda a visualizar un sí mismo en un panorama Automayor. Identifica sus recursos, * Proximidad entendimiento panorama mayor y ayuda a desarrollar procesos de en especial los no utilizados. dinámico * Confrontación integración en el cliente. COMENTARIOS En esta etapa se construye una relación de confianza y respeto. El orientador es percibido como un experto, aliado y dispuesto a la ayuda sincera. Se trata de ver el mundo desde la perspectiva del cliente y le comunica entendimiento. El orientador influye sobre el cliente en la construcción de una percepción más realista de sí mismo, de su medio y de su relación con otros. Se trata de ayudar a ver el mundo desde una perspectiva mas objetiva. Las destrezas del orientador son las de las relaciones humanas profundas. * Marcos de referencia alternativos Etapa III: Facilitando la acción actuando Facilitar la acción: Preparar con el cliente programas específicos de acción. Ayudar al cliente a actuar con la nueva compresión de sí mismo, identificando vías de acción para el cambio constructivo, dando apoyo y dirección a los programas. Actuar: * Todas las de la etapa I y II Aprender las destrezas orientadas a necesarias para ser más actuar/cambiar efectivo. Manejar las destrezas socio emocionales de la vida, * Elaboración de programas cambiar patrones de acción autodestructivos y destructivos para vivir con otros; desarrollar * Apoyo nuevos recursos. 20 * Cooperación * Riesgo * Actuar Se construyen planes de acción conjunto y se orienta o se le da seguimiento a las acciones del cliente emprendidas pro sí mismo Cuadro 2 Destrezas del Facilitador u Orientador Etapa Destreza Preayuda Atención física Atención psicológica Descripción Mirar la cara directamente, mantener una postura abierta, buen contacto con los ojos, inclinarse hacia el otro, permanecer relajado, cómodo y nivelar corporalmente con el otro. Escuchar tanto los mensajes verbales como no verbales del cliente. Efectividad * Discrimina efectivamente * Comunica respeto * Refuerza * Da signos de estar presente * Anima a hablar * Establece una base de poder No es fácil recibir ayuda. Es difícil comprometerse con el cambio de uno mismo. Es difícil someterse a la influencia de un orientador, la ayuda es una amenaza para la estima, integridad y la independencia. No es fácil confiar en un extraño y estar abierto a él. Los problemas pueden parecer demasiado grandes, abrumadores, o muy personales para compartirlos con otros. Inexactitud o inadecuación. Aparentar entendimiento. Permitir divagar. Prematura empatía avanzada. Pasar mucho tiempo sin comunicar el nivel de empatía primario. No adecuar la empatía en el tono y en la manera. Lenguaje discordante o no a tono con el cliente. Brincar rápidamente. Hacer demasiadas preguntas. Ser tedioso o aburrido. Escuchar la propia conducta verbal y no verbal. Etapa I Empatía Primaria Comunicar que se entiende el mundo desde la perspectiva del cliente; por lo que aborda los sentimientos, las conductas y las experiencias que sustentan los sentimientos. Establece confianza, armonía y aumenta el nivel de conducta autoexploratoria. Tiene como fin sacar sentimientos y significados a una superficie relevante. * Hipótesis del curador herido * Prestar atención física y psicológica. * Escuchar mensajes básicos o centrales. * Responder en forma moderada y frecuente, pero brevemente. * Darle tiempo al cliente para avanzar (afirmar, negar, explicar, clarificar o cambiar el énfasis.) * Ser gentil pero no dejar escapar temas importantes. * Responder tanto a los sentimientos como a los contenidos. * Ser empático en el tono y en la manera. * Avanzar gradualmente hacia la exploración de sentimientos o tópicos críticos. * Estar atento a las respuestas que hace el cliente ante sus intervenciones, que confirmen o nieguen la exactitud de su respuesta. * Preste atención a señales de tensión o resistencia del cliente y trate de identificar si ello es por falta de adecuación o por ser demasiado adecuado. Etapa II Genuinidad/ Autenticidad * No representar el papel de Orientador. Responder según lo que experimenta, en presente y sin distorsión. * Ser espontaneo. Ser uno mismo. * No estar a la defensiva. * Ser consistente. * Compartir él “yo real”. Estar listo para revelarse a sí mismo con el otro, íntimamente, si eso ayuda. Ser genuino implica que en la interacción se es lo que se es. Una persona genuina es ella misma, siente gusto por ser ella y por ende puede ser ella misma en todas sus interacciones. No adopta roles o papeles cuando está con gente diferente o para a ser aceptado. Dificultades y/o Claves para el éxito 21 Fase Destreza Descripción Efectividad Etapa III Respeto Apreciar a la otra persona simplemente por lo que es, un ser humano, que tiene valor en sí mismo. 1. 2. 3. 4. Etapa IV Ser concreto El orientador debe ser concreto con sus respuestas con el fin de ayudar al cliente a ser concreto con su autoexploración. 1. Tratar con sentimientos, conductas y situaciones específicas. 2. Ser concreto en las respuestas 3. Usar preguntas y sondeos que guíen al cliente Estar y ser para el cliente. Estar dispuesto y tener voluntad para trabajar. Considerar al cliente como único y autodeterminado. Presumir buena voluntad en el cliente: Prestando atención Suspendiendo juicios críticos Comunicando empatía exacta o precisa Cultivando los recursos del cliente Siendo apropiadamente cálido y cordial Reforzando acciones constructivas 5. Ser auténtico con el cliente 22 Dificultad TÉCNICAS PARA LA COMPRENSIÓN E INTERVENCIÓN DEL COMPORTAMIENTO GRUPAL EN SITUACIONES DE CRISIS Los grupos han sido estudiados por cuanto generan una fuerza que incide en el comportamiento individual de sus miembros. Para la comprensión de su proceso es importante conocer algunos elementos. I.- Etapas en la vida del grupo: Los grupos pasan por etapas o fases desde su inicio, y es necesario para un facilitador/a tener claridad respecto a la etapa en que se encuentra el grupo con el que va a trabajar. 1. Primera infancia o inicio: Existe gran cantidad de actividad, los participantes necesitan conocerse y demostrar capacidad de apoyo y solidaridad. Existe un objetivo compartido, búsqueda de aceptación y pertenencia. Búsqueda de estructura que proporcione estabilidad y permanencia en el tiempo. 2. Adolescencia o confrontación: Los y las participantes comienzan a expresar sus críticas y sentimientos negativos. Se cuestionan los roles y las estrategias del grupo. Esta etapa puede ser superada trabajando los límites, clarificando roles y funciones. Favorece el compromiso hacia una participación responsable. 3. Madurez o Cohesión: Surge la confianza mutua, el respeto por las diferencias individuales, la solidaridad y el sentimiento de pertenencia. El grupo se hace productivo y eficiente. Se atienden las necesidades individuales y grupales. Se revisan los objetivos(monitoreo y evaluación) y redireccionan para dar respuestas oportunas a las necesidades. 4. Resolución o Cierre del proceso: Los miembros del grupo revisan y consideran cumplido su propósito, se difunde el aprendizaje y se elabora el beneficio de la participación para proceder al cierre. 5. Envejecimiento o burocracia: El grupo mantiene los objetivos iniciales y no acepta actualizarse, los miembros se sienten frustrados y cuestionan la estructura en forma individual pero en grupo siguen aceptando las propuestas tradicionales. Este proceso lleva al término de la vida institucional. El facilitador debe propiciar la resolución o cierre del proceso. II.- Líneas de comunicación, resolución de conflictos Implica revisar la toma de decisiones, división de las tareas, manejo de la discusión. Es importante identificar a quien habla, por cuanto tiempo, con qué frecuencia, su capacidad de escuchar. A quienes miran las personas cuando hablan. Quien 23 interrumpe a quien. Como llegan a la toma de decisiones. Calidad de consenso es por unanimidad o por renuncia de una posición. III.- Atmósfera o clima grupal: Se favorece al atender las necesidades sentidas en el contexto apropiado. Favorece la participación de todos los miembros, permite participación y expresiones genuinas. Para el crecimiento grupal y la creatividad es necesario propiciar un clima de cooperación, confianza, posibilidad de equivocarse o disentir, respeto a las diferencias individuales. IV.- Cumplimiento de normas: Es importante revisar las sanciones grupales tácitas o explícitas, a la trasgresión de las normas. V. - Actitud del grupo frente a los problemas y al éxito. El facilitador puede favorecer la apertura a experiencias novedosas luego de flexibilizar la actitud del grupo frente al éxito. VI. Actitud del grupo frente a la ausencia temporal del facilitador. Un indicador de madurez grupal que refleja la previsión del facilitador frente a esta posibilidad. PERFIL DEL FACILITADOR COMO AGENTE DE CAMBIO - Interesado e inquieto con el mundo que le rodea. - Comunicador y conocedor de la relación con los demás. - Crítico y con criterio propio. - Sensible al entorno social. - Persuasivo y dinámico. - Acepta y respeta a la persona humana como tal y las manifestaciones de su cultura, creencias y costumbres - Convencido de que las situaciones pueden cambiar y no sólo por elementos externos a las voluntades de las personas. - Responsable y solidario. - Experimentado en los comportamientos y dinámicas grupales. - Conocedor de sus limitaciones y habilidades. 24 Facilitación en situación de desastre: 1. Primera fase: La facilitación autocrática: donde una persona tiene el poder. Durante y luego de un desastre, el sistema está en involución. Se requiere una estructura autocrática, directiva y/o paternalista dirigida a satisfacer las necesidades de sobre vivencia. Puedo facilitar que otra persona sea el líder. Busco quien tome el control, si nadie lo hace lo hago yo. Ejemplo, aquí la puerta se cierra a las diez. 2. Segunda fase facilitación asesora: El facilitador sigue teniendo ingerencia en la toma de decisiones, por ejemplo: quiero que establezcamos una hora para cerrar la puerta”, ¿qué recomiendan Ustedes?. 3. Tercera fase facilitación monitora: Es una etapa proactiva, el grupo alcanza mayor autonomía, estructura democrática, coparticipativa. El énfasis es a potenciar el crecimiento del grupo. Ejemplo el albergue funcionando autogestionado, y quieren ayudar a otros. Requiere una facilitación de bajo protagonismo. El facilitador puede decir: yo voy fuera, pueden decidir y luego me informan. “Arte del progreso: mantener el orden dentro del cambio y el cambio dentro del orden. 4. Cuarta etapa facilitación coordinadora: Grupo evolucionado, logran sus tareas. Facilitador escucha, y favorece el esfuerzo grupal de multiplicar su impacto. Identifica y reconoce esfuerzo grupal. 25 FACILITACIÓN EFECTIVA Etapa Necesidad Sentida Misión vs Competencia Sobrevivir Sobrevivir vs Tareas que la garanticen sobrevivencía Individuo Grupo Facilitación Liderazgo Sobrevivencia Autocuidado Receptor de ordenes Protección Proveer Receptor de ordenes Directiva Autocrática Gran Jefe Rambo Toma de control imposición de normas, acción paternalista Seguridad Sostener Mantener Cumple ordenes Coordinadora Burocracia Eficiente Consultiva Normativa Protagónica Gerencia por objetivos Feed-Back Cortesía Reconocimiento Potenciarse Innovador Auto disciplinado Monitora Democracia Flexible Visionario Empático Democrática Participación Co-responsabilidad En todas direcciones 360 ª Visión Proactividad Responsabilidad Integrador Interdependencia Sinergia Integral Asesora Redes Sinérgicas Coach Sincrática Mediación Bajo protagonismo Reactiva Crisis Emergencia Reactivo Sangramiento emocional Receptiva Proceso de transición Inestabilidad En el refugio Autonomía Proactivo Busca Integrado Seguridad Autonomía Producir o ganar vs. Pensar Planear Concretar Calidad y servicios vs. Relaciones Interpersonales Seguridad Cumple ordenes Autonomía Innovador Auto disciplinado Eficiente Interactiva Trascendencia Dejar Huellas Co-evolución Trascendencia Interdependencia Sinergia Integral 26 Comunicación Valores De arriba hacia abajo Preservación Transparencia Empatía Reflexión Aprender a aprender Aprendizaje Organizacional Toma De Decisiones Prioridad la tarea Tomada Anunciada Vendida Clarificada Tarea / Logro personal Tomada Tentativa Asesorada Aprobada Logro personal / Tarea Autónoma Conjunta Logro personal / Tarea Complement aria USO Y PAPEL QUE DAMOS A LAS TÉCNICAS PARTICIPATIVAS Como primera afirmación, creemos que las técnicas son sólo instrumentos en un proceso de formación. Nuestra experiencia nos ha hecho precisar nuestra concepción metodológica basándonos en la teoría dialéctica del conocimiento y partiendo de esto afirmamos que la Educación Popular debe fundamentarse en una concepción metodológica dialéctica. ¿Esto qué significa? a. Significa partir siempre de la práctica, es decir de lo que la gente sabe, vive y siente; las diferentes situaciones y problemas que enfrentan en su vida, y que en un programa educativo se plantean como temas a desarrollar. b. Desarrollar un proceso de teorización sobre esa práctica, no como un salto a lo “teórico” sino como un proceso sistemático, ordenado, progresivo y al ritmo de los participantes, que permita ir descubriendo los elementos teóricos e ir profundizando de acuerdo al nivel de avance del grupo. El proceso de teorización así planteado, permite ir ubicando lo cotidiano, lo inmediato, lo individual y parcial, dentro de lo social, lo colectivo, lo histórico, lo estructural. c. Este proceso de teorización debe permitir siempre regresar a la práctica para transformarla, mejorarla y resolverla; es decir, regresar con nuevos elementos que permitan que el conocimiento inicial, la situación, el sentir del cual partimos, pueda ser entendida integral y científicamente. Por lo tanto, se pueden fundamentar y asumir conscientemente compromisos o tareas. A partir de ello se pueda decir que la teoría se convierte en guía para una práctica transformadora. Creemos que las técnicas deben ser participativas para realmente generar un proceso de aprendizaje. A través de ellas es posible: a. Desarrollar un proceso colectivo de discusión y reflexión. b. Colectivizar el conocimiento individual, enriquecerlo y potenciar el conocimiento colectivo. c. Desarrollar una experiencia de reflexión educativa común. Muchas de estas técnicas permiten tener un punto común de referencia a través del cual los participantes aportan su experiencia particular, enriqueciendo y ampliando esa experiencia colectiva. d. Realizar una creación colectiva del conocimiento donde todos somos partícipes en su elaboración y por lo tanto, también de sus implicancias prácticas. 27 Uso efectivo de las técnicas: Para que la aplicación de una técnica sea efectiva en su sentido pedagógico, es imprescindible que el facilitador: 1. Antes de escoger la técnica se haya contestado las siguientes preguntas claramente: ¿Qué tema vamos a trabajar? ¿Cuál es el objetivo que se quiere lograr? (¿Para qué?) ¿Con quienes se va a trabajar? (características de los participantes) 2. Una vez contestadas esas tres preguntas, plantearse qué técnica es la más adecuada para tratar ese tema, para lograr esos objetivos propuestos, con esos participantes específicos. 3. Un tercer paso: Todo coordinador debe precisar cómo va a implementar la técnica, detallar el procedimiento que va a seguir en su aplicación. Una vez precisado esto, calcular y ajustar el procedimiento de acuerdo al tiempo disponible. 4. Un elemento imprescindible es que los que coordinan, conozcan el tema que se está tratando, para poder conducir correctamente el proceso de formación y enriquecerlo con todos los elementos que surjan de la participación de la gente. Sugerencias para la discusión de una técnica: Al aplicar cualquier técnica, los siguientes pasos básicos ayudan a desarrollar ordenadamente el proceso de discusión: 1. Motivación inicial para centrar el tema: que los participantes se ubiquen en el tema que se va a tratar. (En el caso de las dinámicas vivénciales, esta ubicación se debe realizar de forma general para que la dinámica no pierda su fuerza ni espontaneidad.) 2. Una vez realizada la técnica, y de acuerdo al tipo de técnica utilizada, es importante formularse las siguientes preguntas: ¿Qué escuchamos? (técnicas auditivas) ¿Qué vimos? (audiovisuales) ¿Qué sentimos?, ¿Qué pasó? (técnicas ¿Qué leímos o presentamos? (técnicas vivénciales) escritas o gráficas) Estas sugerencias de discusión sobre las técnicas debemos asumirlas con creatividad y en forma flexible. Esto nos facilitará un proceso participativo, profundo y sistemático. Autor: Laura Vargas FORJA 28 HERRAMIENTAS Y CONDUCTAS DE AUTOCUIDADO EN SITUACIONES TRAUMÁTICAS Síntomas probables de auxiliadores y profesionales de ayuda: El concepto de “Vulnerabilidad Universal”, desarrollado por el Dr. Jeffrey T. Mitchell (Compassion Fatigue, 1994), sostiene que no existe ningún tipo de entrenamiento que pueda eliminar completamente la posibilidad de que una persona que trabaja con víctimas primarias, sea afectada por el Desorden de Estrés Traumático Secundario (síndrome de la compasión), debido a que todas las personas que realizan este tipo de trabajo (ya sea por largo tiempo o por una sola experiencia), son vulnerables al estrés postraumático de las personas que auxilian. De acuerdo al National Center for PTSD, en los Estados Unidos, uno de cada tres auxiliadores llegan a presentar algunos o todos los síntomas de estrés que se mencionan a continuación, los cuales pueden conducir al Trastorno por Estrés Postraumático, a Trastornos Disociativos, a Trastornos Adaptativos y a Trastornos de la Personalidad. Síntomas de Estrés: 1. Disociación: Sentirse irreal o fuera de uno mismo, como en un sueño. Sensación de embotamiento. Experimentar períodos de "tiempo en blanco" (la persona no recuerda nada.) 2. Reexperimentación del acontecimiento traumático: Pesadillas. Flashbacks (revivir el acontecimiento.) Recuerdos recurrentes e intrusos. 3. Evitación de estímulos asociados al traumatismo: Esfuerzos para evitar caer en pensamientos, sentimientos, conversaciones, actividades, situaciones o personas que recuerden el acontecimiento. 4. Disminución de la capacidad de respuestas al mundo exterior: Incapacidad de sentir emociones, especialmente las que hacen referencia a la intimidad, ternura y sexualidad. Sensación de alejamiento de los demás. 5. Aumento de la activación: Hipervigilancia, irritabilidad o ataques de ira, dificultades para conciliar o mantener el sueño. 6. Ansiedad severa: compulsiones. Preocupación paralizante, impotencia extrema, obsesiones y/o 7. Depresión severa: Pérdida total de esperanza, autoestima, motivación o del propósito en la vida. El National Center for PTSD, nos dice que los individuos que tienen más riesgo de desarrollar Trastorno por Estrés Postraumático, son aquellos cuyas historias se caracterizan por: - Exposición a otros traumas, como accidentes severos, abuso criminal o familiar, asalto, peligro de su propia vida o la de los seres queridos. - Enfermedades físicas crónicas o trastornos psicológicos. 29 - Pobreza extrema, desempleo, discriminación. Situaciones estresantes recientes como divorcios, abandonos. INDIQUE CON UNA PALOMITA, CADA SITUACION QUE CONSIDERA APLICABLE A USTED EN ESTE MOMENTO2 CUMPLIMIENTO DE TAREAS LABORALES: - Disminución de la calidad en el trabajo. Disminución en cantidad de trabajo. Baja motivación. Evitación de tareas laborales. Aumento en errores en el trabajo. Sentido perfeccionista. Carácter obsesionado con los detalles. ACTITUD / MOTIVACION: - Disminución de la confianza en sí mismo. Pérdida de interés en las cosas que antes le atraían. Insatisfacción en general. Actitud negativa. Apatía. Desmoralización Sentimientos de ser incompleto. INTERPERSONAL: - Distanciamiento emocional de los colegas y amigos. Impaciencia. Disminución en la calidad de las relaciones personales. Disminución de la comunicación con los amigos. Baja priorización de las necesidades propias. Conflictos con el equipo de trabajo. CONDUCTUAL: - Ausentismo laboral. Agotamiento. Juicio poco certero. Irritabilidad. Impuntualidad. Irresponsabilidad. Sobrecarga de trabajo. Si usted ha presentado tres o más de estos síntomas por más de un mes, es muy probable que esté sufriendo Trastorno de Estrés Postraumático y debe ponerse en contacto con el Centro de Salud de su localidad, a la brevedad posible. 3 Asociación Mexicana para Ayuda Mental en Crisis, A.C. Email: pericles @ prodigy.netwx 30 MANEJO DE ESTRES PARA PERSONAL DE EMERGENCIA: PROTECCION CIVIL, RESCATISTAS Y GRUPOS DE APOYO VOLUNTARIO, INVOLUCRADO EN OPERATIVOS DE RESCATE EN INUNDACIONES Las grandes inundaciones están dentro de los desastres más complejos. Pueden aparecer rápidamente, cobran vidas humanas, causan severa destrucción y producen desolación dentro de las comunidades. Después las aguas bajan lentamente y las comunidades quedan agobiadas con las enormes tareas de limpieza y programas de reconstrucción, que pueden llevar meses o años. Muchas organizaciones con servicios de emergencia, ven a su personal directamente afectado con la inundación. Algunos mueren o sufren heridas en las inundaciones, el equipo y las instalaciones frecuentemente se dañan o se pierden, y aún así, tienen la responsabilidad de auxilio a sus comunidades. Las exigencias de los operativos en inundaciones pueden causar considerable estrés de manera inmediata y a largo plazo. La información que se da a continuación, puede ser de ayuda para enfrentar la crisis: PRECAUCIONES PARA UNO MISMO DURANTE INTERVENCION EN CRISIS: - Al enfrentarse a la situación crítica, se debe intentar tener una respuesta intelectual en lugar de una emocional. - Es importante entender que el personal de rescate no causa el incidente – por más horrible que este sea – y que su trabajo es hacer todo lo posible para reparar los daños o para alterar el curso de los daños. - No se debe nunca aceptar la responsabilidad por la tragedia de otra persona. Uno puede decir: “que cosa más horrible les sucedió, pero yo no soy responsable de eso”. - Si el rescatista piensa: “fue horrible, fue espantoso, me siento muy mal por estas personas”, puede quedar atrapado por estos sentimientos durante su trabajo. En lugar de eso, debe observar la situación y decirse: “si, es un evento difícil, pero debo mantener mi cabeza fría para ser útil a estas personas”. “¿Qué acciones debo de tomar para ayudar?". - Asimismo, es importante reconocer que el rescatista es vulnerable y que si es imputado por un evento, necesita madurez para reconocerlo y buscar soporte en las personas apropiadas: familia, compañero, amigo, profesionales en salud mental. 31 Buscando el equilibrio: Los seres humanos podemos integrarnos en un "nosotros", "nosotras", entender que somos un continuo, estamos todos unidos; es importante recordar ese vínculo, el contacto nos equilibra, es un elemento vital. Es necesario atendernos a nosotros mismos. Hay situaciones de mucha carga emocional, o situaciones bastante difíciles o muy tóxicas de las cuales somos testigos, tales como: injusticias, atropellos, frustraciones; y en ocasiones eso nos altera. Un compromiso en el rol de ayuda es que al volver a casa, el rescatista debe volver bien, equilibrado, si se está cargado por algo presenciado o vivido puede dañar a seres queridos. En la Autoayuda, es necesario tomar el tiempo para conocer tanto el potencial como las limitaciones propias, y así poder apoyar de manera distinta, no como un desafío a la propia capacidad, sino logrando una entrega de lo mejor de nosotros y nosotras y que, las oportunidades de aprendizaje nos nutran y nos hagan crecer. Es importante tener presente que el trabajo que se realiza es con seres humanos que necesitan respeto; es necesario tratar de construir un clima de armonía y felicidad. El compromiso es incorporar prácticas, actitudes, y aprender alguna técnica, que permita mantener el equilibrio emocional. Ejercicios de carga y descarga: Hay dos ejercicios muy cortos: uno que es de descarga, para sacar cualquier emoción que nos alteró como: tristeza, rabia, dolor, frustración, que en un momento, en el trabajo, en la calle o en otro lugar nos cambió el estado de animo. De esta forma nos equilibramos y protegemos a nuestra familia, a los compañeros de trabajo o a quien tengamos cerca. EJERCICIO DE DESCARGA: Consiste en pararse en la posición que se llama 8: Piernas separadas (unos 20 ó 30 cm), lado externo de los pies paralelos, brazos extendidos hacia adelante con las manos quebradas hacia abajo (palma hacia arriba), rodillas flexionadas, hacemos una inspiración profunda llevando los codos flexionados, lo más atrás posible, luego exhalamos con fuerza, extendiendo los brazos hacia adelante, y visualizando que cuando sale aire, sale también la emoción que está generando malestar. La energía que se expulsa, la que nos altera, se dedica a la naturaleza que nos rodea: matas, árboles, flores, pedimos porque ellas se puedan nutrir con esa energía que a nosotros nos altera. Este ejercicio se puede hacer en cualquier parte, y sirve para descargar energía y aligerar la carga de emociones. 32 Algunas emociones no es conveniente llevarlas a casa. Sobre todo si hay niños, es necesario soltar el apego a las preocupaciones. Existe una ley natural que busca el equilibrio, cuando sacamos algo, dejamos un vacío y existe la tendencia a que cualquier cosa pueda entrar allí sin la participación de nuestra voluntad. Entonces, para volver a cargarnos de energía, una vez que ha salido aquella que nos oprimía, pasamos a un nuevo ejercicio. EJERCICIO DE CARGA: De pie, en la misma posición del ejercicio anterior, inspiramos, retenemos la respiración y dejamos salir el aire, con un chistido como de hacer callar. Comenzamos con los brazos extendidos arriba inhalando, y a medida que los bajamos, los cruzamos por delante del cuerpo hasta llegar abajo, exhalando. Al hacerlo, pensamos que estamos distribuyendo esa energía por todo nuestro cuerpo. El ejercicio de descarga lo podemos hacer muchas veces, en cambio el de carga de energía, con dos o tres veces es suficiente. Cuando lo hacemos con los y las jóvenes, les permite centrarse mejor en la próxima actividad y les ayuda a cortar con todos los problemas que pueden haber tenido antes de empezar la actividad en que estamos. Tenemos una gran responsabilidad, cada uno de nosotros mismos, con nuestro propio cuerpo y sus necesidades. Se trata del instrumento más grande de ayuda que tenemos que atender: Si tengo sed, tomo agua, si necesito ir al baño, voy. Debemos aumentar nuestra atención en esta área recordando que permanentemente somos observados y muchas veces imitados por las personas con quienes trabajamos, ellos son los primeros en percibir cuándo estamos bien, y cuándo estamos desatendiéndonos. Para conocernos hace falta, antes que nada, ver hacia adentro, estar dispuestos a revelarnos, porque podemos encontrar algo que nos gustaría que fuera distinto. Nuestras características positivas nos permiten aceptar y superar nuestras limitaciones. El equilibrio es lo que trae la armonía. El reconocer nuestras características positivas, nos permite sentirnos bien con nosotros mismos. Todas las personas tenemos características positivas y negativas. Cada individuo es valioso y merece ser amado y respetado por el solo hecho de ser una persona, de existir; sin distinción alguna. Si queremos que las personas se respeten, se valoren y se cuiden, el modelo tiene que partir de aquí: yo me respeto, yo me valoro, yo me cuido, yo atiendo mis necesidades, yo busco mi equilibrio. Sabemos que no somos súper como Superman o cualquier personaje de caricaturas. Cuando toca presenciar una situación difícil o ver algo doloroso, hay que tratar de reencontrar el equilibrio, descargar tensiones, tomar agua, relajarse o hacer ejercicios respiratorios muy breves y fáciles de hacer; en un lugar a solas, hacer unos ejercicios y en corto tiempo seguir trabajando. 33 Es importante ese compromiso personal de estar claro con tu realidad interna, para poder modelar y para poder acompañar en sus propios procesos a los afectados con los que interactúas Ese es el primer compromiso nuestro: es básico escuchar nuestras necesidades. A veces necesitamos darnos un descanso, en ocasiones necesitamos tomar más tiempo para las actividades, y otras en que no podemos contestar todas las preguntas. QUÉ DEBE HACER EL PERSONAL DE EMERGENCIA: PROTECCION CIVIL, RESCATISTAS Y GRUPOS DE APOYO VOLUNTARIO, PARA PREVENIR ESTRÉS POSTRAUMATICO, DURANTE SU TRABAJO, E INMEDIATAMENTE DESPUES DURANTE EL TRABAJO: - Apoya y anima a tus compañeros/ras. - Cuídate físicamente, descansando, haciendo ejercicio y comiendo frecuentemente en pequeñas cantidades, en cuanto sea posible. - En cuanto te sea posible, toma un descanso cuando notes que disminuye tu fuerza, tu coordinación o tu tolerancia. - Mantén contacto con tu familia y amigos lo más que puedas. - Conversa con tus compañeros / as sobre tus sentimientos y pensamientos, después de una experiencia particularmente fuerte, al final de cada jornada de trabajo, o en cuanto te sea posible. INMEDIATAMENTE DESPUES DEL TRABAJO: - Organiza lo antes posible, una reunión de “descarga” con tus compañeros / as, en dicha reunión, conversen de sus sentimientos y pensamientos tal y como aparezcan (sin juzgarlos), escúchense respetuosamente y bríndense apoyo mutuo. - No se tome el enojo de los compañeros / as como algo personal, pues normalmente es una expresión de frustración, culpa o preocupación. - Manifiesta a tus compañeros / as reconocimiento y aprecio por el trabajo realizado. - Toma algunos días para volver paulatinamente a la rutina. 34 PROBABLES REACCIONES DEL PERSONAL DE EMERGENCIA: PROTECCION CIVIL, RESCATISTA Y GRUPOS DE APOYO VOLUNTARIO, AL TERMINAR SU TRABAJO - Dificultad para regresar a casa. - Tristeza, depresión relacionada con la pérdida de algunas de las experiencias positivas. - Deseo de mantener contacto con otros compañeros (as) o víctimas del desastre. - Sentimientos de inquietud, desilusión y frustración. - Sentimientos de depresión y aburrimiento al volver a un trabajo rutinario. - Cambios repentinos de humor. - Enojo, si no se reconoce el trabajo hecho durante el desastre. - Sentimientos de distanciamiento o aislamiento de las personas (miembros de la familia, compañeros de trabajo, amigos.) - Conflictos con los miembros de la familia. QUÉ DEBE HACER EL PERSONAL DE EMERGENCIA CUANDO YA HAN REGRESADO A LA NORMALIDAD DEL HOGAR En lo Físico: - Realiza ejercicios físicos suaves, alternados con relajación. - Regresa a tus rutinas lo antes posible. - Descansa y duerme lo suficiente. - Come balanceada y regularmente. - No trates de disminuir el dolor con el uso de alcohol o drogas. En lo Familiar y Social: - Habla con las personas acerca de cómo te sientes. - Comparte tus sentimientos y pensamientos con otros. - Pasa tiempo con otras personas. Busca compañía. - Realiza actividades familiares y sociales. - Habla con tus seres queridos de lo que ellos vivieron mientras estuviste ausente. 35 En lo Psicológico: - Observa tus sentimientos y pensamientos. - Observa qué es lo más importante para ti y tu familia, ahora que has vuelto a casa. - Reflexiona sobre la experiencia que has vivido y lo que significa como parte de tu vida. - Busca contacto con la naturaleza. - Ríe mucho, es muy sanador. - Busca expresarte creativamente: Cantar, dibujar, escribir, bailar, etc. - Realiza actividades que te den tranquilidad y te hagan sentir bien. - Permítete un tiempo a solas. 4. Asociación Mexicana para Ayuda Mental en Crisis, A.C. Email: pericles @ prodigy.netwx 36 REFLEXIONES FINALES A continuación se presentan una serie de preguntas, con el objeto de promover la reflexión en los que trabajamos o deseamos trabajar en relaciones humanas de ayuda. Las mismas forman parte de las reflexiones desarrolladas por Carl Roger en el libro El proceso de Convertirse en Persona. ¿Cómo puedo crear una relación de ayuda? ¿Cómo puedo ser para que el otro me perciba como una persona digna de fe, coherente y segura, en sentido profundo? ¿Puedo ser lo suficientemente expresivo, como persona, de manera tal que pueda comunicar lo que soy sin ambigüedades? ¿Puedo permitirme experimentar actitudes positivas hacia esta otra persona: actitudes de calidez, agrado, interés, respeto? ¿Puedo ser lo suficientemente fuerte como persona para distinguirme del otro?, ¿Puedo respetar con firmeza mis propios sentimientos y necesidades, tanto como los de otros?, ¿Soy dueño de mis sentimientos y capaz de expresarlo como algo que me pertenece, y que es diferente de los sentimientos del otro?, ¿Es mi individualidad tan fuerte como para no sentirme abatido, atemorizado o absorbido por su depresión, rabia, etc.?. ¿Estoy lo suficientemente seguro para admitir la individualidad del otro?, ¿Puedo permitirle ser lo que es: honesto, falso, infantil, adulto, desesperado o pleno de confianza?, ¿Puedo otorgarle libertad de ser?. ¿O siento que debería seguir mi consejo, depender de mí en alguna medida o bien tomarme como modelo?. ¿Puedo permitirme penetrar plenamente en el mundo de los sentimientos y significados personales del otro y verlo tal como él lo ve?, ¿Puedo aceptarlo tal cual es y comunicar esa actitud?. ¿Puedo comportarme en la relación con la delicadeza necesaria como para que mi conducta no sea sentida como una amenaza?, ¿Puedo liberar a la persona de la amenaza de la evaluación externa?. ¿Puedo enfrentar a ese otro individuo como una persona que está en proceso de transformarse o me veré limitado por mi pasado y por el suyo?. 37 LECTURAS COMPLEMENTARIAS Lectura 1 CREDO DEL FACILITADOR (Adaptación realizada por veinte profesionales de la Fundación Neo-Humanista, con base en el Credo Internacional del Desarrollo de Sistemas Humanos y Organizacionales de la ODN- Agosto de 1996.) Mí misión como profesional de la facilitación es la de contribuir, con mis conocimientos, destrezas y energía, a que los seres humanos y los sistemas sociales puedan convivir en paz y trabajar juntos para su mutuo beneficio, bienestar y desarrollo. Cumpliré esta misión mediante la facilitación de procesos de Auto-Desarrollo Psicosocial Integral, con metodologías contextual izadas basadas en una visión del ser humano realizado, productivo y feliz que aporta sus talentos a su propio crecimiento y al de su familia, su trabajo, su comunidad, la sociedad y el mundo. Creo en la total interdependencia de los seres humanos entre sí y con sus sistemas sociales, y que su co-evolución requiere de un compromiso de cada persona con unos valores primarios, los cuales también son los que guían mis actividades profesionales como facilitador. Esto valores son: - Respeto: aceptar el derecho de auto-determinación de cada ser humano y sistema social; - Autonomía: Concientizarse de todas las opciones reales y escoger libremente entre ellas; - Justicia: aplicar con equidad todos los derechos humanos fundamentales; - Honestidad: relacionarse con autenticidad, asertividad, transparencia y congruencia; - Empoderamiento: desarrollar el poder y las capacidades propios y facilitar que los demás lo hagan; - Flexibilidad: valorar la espontaneidad, la creatividad y la diversidad perceptual y conductual; - Calidad: buscar la excelencia personal, interpersonal y grupal mediante la eficiencia y la eficacia; - Participación: aportar, según la capacidad de cada persona, a la sinergia interpersonal y grupal; - Solidaridad: comprender, cooperar y co-evolucionar en comunidad con amor, paz y alegría; - Armonía: consigo mismo, con el prójimo, con la naturaleza y con Dios. Adicionalmente, creo que mi efectividad como profesional requiere cinco niveles de responsabilidad personal, a los cuales me comprometo: - Responsabilidad conmigo mismo: vivir con integridad, buscando continuamente mi propio empoderamiento, la proactividad de mis acciones y mi crecimiento personal integral; - Responsabilidad como profesional: desarrollar y mantener un alto grado de idoneidad y de actualización, realizando actividades profesionales dentro de los límites éticos del contexto, de lo concertado, de lo co-evolutivo y del compromiso personal; - Responsabilidad con los clientes: mantener como prioridad el bienestar integral y la evolución del sistema cliente y de todos sus elementos, realizando todas mis actividades profesionales con ética profesional, claridad, honestidad y sin conflictos de intereses; - Responsabilidad con los colegas: contribuir al desarrollo profesional de los conocimientos y destrezas profesionales; - Responsabilidad social: sopesar el impacto de mis acciones, sea por comisión o por omisión, sobre la vida y el bienestar no solamente del sistema cliente, sino también sobre los macrosistemas sociopolíticos, culturales y ecológicos. 38 Lectura 2 Un camino de transformación personal Mirían Testa de Rivas En esta época de grandes cambios es oportuno recordar que la transformación personal es más que un deseo o intención momentánea. Es un camino, una elección para alcanzar el éxito abundante y un encuentro constante con la felicidad. Hoy existen grandes retos para quienes sueñan una ecología humana de calidad, asumirlos requiere de individuos con una personalidad cada vez más integrada, actualizada, protagonistas de su propia historia, que pueden responsabilizarse del momento presente con claridad, que armoniosamente inviten a otros a correr el riesgo de ser ello mismos, por el propio bienestar y el del medio en el que interactúan. Individuos capaces de generar cambios sociales, “transformadores”, mirando más allá de su propio crecimiento para ayudar a que la humanidad se convierta en un lugar de relaciones humanas gratificantes. Estamos ante un compromiso histórico que reclama auténticos líderes que nos conduzcan al progreso y a la construcción de un mundo mejor. Para muchos la vida sólo consiste en nacer, reproducirse y morir, no se preocupan en desarrollar todo su potencial, su energía, mueren sin saber para que existieron, sin descubrir que todas las virtudes humanas descansan en el dominio de un campo de fuerza interna de asombrosa súper conciencia, que facilita la aceptación de lo que es y la habilidad de elevarlo a su mayor nivel con base en el amor y la conciencia. Los seres humanos podemos crecer y desarrollarnos durante toda la vida, vivir con alegría y esperanza es realmente una posibilidad que vale la pena disfrutar. Esta experiencia exige de nosotros una respuesta asertiva ante los cambios de cada época, creatividad, intuición, deseos espirituales, propósitos, amor sabiduría, el desarrollo de las cualidades que dan sentido a nuestra vida y que nos permitirán llegar al final de nuestros días con una sensación de totalidad, de caminar hacia la excelencia. Aunque ninguno de nosotros está libre de sufrimientos, contratiempos y frustraciones, existe un espacio de luz que no podemos olvidar. Estos momentos, junto al gozo y la satisfacción del logro de pequeños triunfos, nos regalarán un nuevo despertar, concientizando la relación que existe entre nuestros actos y la consecución de los mismos. La transformación para ser entendida debe experimentarse y es maravilloso descubrir que parte de la sabiduría está en gozar el intervalo que existe entre la luz y la oscuridad, la alegría y la tristeza, esto es en realidad tener el don del crecimiento y saber que todo lo que nos ocurre en la vida tiene un propósito útil, vivir de esta forma es convertir tanto los momentos malos como los buenos en oportunidades y sólo en la medida que asumamos responsablemente nuestra vida podremos disponer de todos nuestros recursos. Por esta razón es necesario movilizarnos para autoayudarnos, ya que todas las cosas de la vida, el crecimiento es algo que nadie puede hacer por nosotros y sólo responsabilizándonos estaremos iniciando el recorrido hacia la transformación personal para desarrollar nuestro potencial al máximo, tarea ardua e importante, sobre todo cuando tenemos que participar de ambientes de trabajo donde existen diferentes tipos de relaciones, necesarias para llevar a cabo una tarea con éxito. Si nos preocupamos por lograr la calidad, el encuentro, trabajo o actividad se llevarán a cabo con menos tensión, en un clima de confianza y comunicación, generando los resultados esperados, productivos y sanos. ¡Crecer es una oportunidad! ¿Por qué negárnosla? Es hora de iniciar una nueva vida con plenitud para beneficio personal. 39 Lectura 3 Visualización y autosugestión Mirían Testa de Rivas Nuestras ideas, personas y acontecimientos ejercen una fuerza notablemente poderosa sobre nuestra conducta. Esta influencia puede controlarse si utilizamos eficazmente nuestra imaginación, practicando la autosugestión. No olvidemos que la realización de nuestros actos precede a una representación mental. “...siempre nos han formado previamente en nuestra imaginación”; así que si queremos usar nuestras imágenes mentales para obtener un resultado constructivo, sólo tenemos que dirigirlas hacia la conducta deseada. Entendiendo la imaginación como representación mental, y visualizar cómo ver, podemos decir que la visualización es el arte de ver a través de la imaginación. Es un método mental que nos prepara para la acción. Es imaginar cómo serían las cosas que queremos para estar en bienestar. Muchas veces jugamos con nuestra imaginación soñando y construyendo castillos en el aire, utilizándola negativamente como una pantalla que nos separa de nuestra realidad y nos mantiene fuera de nuestro aquí y ahora, del momento presente o para imaginar que la acción que vamos a realizar será un fracaso. En ambos casos la autoestima es baja y nuestro autoconcepto es pobre. Podemos usarla positivamente para aumentar la creencia, voluntad e interés por aquello que realmente intentamos hacer, dándonos la confianza de que sí se puede. A través de la imaginación nos observamos, realizando cualquier hecho antes de la acción real. Esto nos permite prepararnos y confiar en el resultado. “Por medio de la imaginación preparamos el canal por el cual correrán nuestros sentimientos cuando llegue el momento de actuar”. A través del proceso de visualizar, podemos alcanzar la sugestión. Entre ambas existe una relación importante, la primera tiene el poder de influir en nuestra conducta y en todas las circunstancias en las cuales nos encontremos y la segunda estimula este proceso. “La sugestión es un mensaje destinado a la mente que afecta nuestra conducta por medio de una apelación directa a la imaginación”, experiencia que despierta nuestros sentimientos a través de una palabra, frase u objeto. Cuando la aplicamos a nosotros mismos es autosugestión. Considero importante señalar que ninguna sugestión tendrá efecto, si va en contra de nuestra autoestima; por lo cual debemos preocuparnos por entendernos y comprender nuestros sentimientos, para lograr una actitud positiva acerca de nosotros. Esta actitud y lo que creemos que piensan los demás de nosotros, representan un grandioso poder. Si pensamos que somos hábiles y sabemos que lo demás esperan que lo hagamos bien, así será; si por el contrario lo que esperamos y esperan es negativo, fracasaremos. Técnica de autosugestión: 1- Imagina claramente lo que deseas hacer, o el cambio de conducta que esperas. 2- Considera las razones que te han impedido ese deseo... sentimientos y obstáculos. 3- Pregúntate si la actitud que desea adoptar te resultará satisfactoria, si va d acuerdo a tus sentimientos y qué aporte te da para tu plan de vida. Recuerda que si es en contra de tu estima no tendrá resultado. 4- Expresa una afirmación personal y positiva, una oración simple que comience “yo puedo y quiero...” 5- Aíslate durante unos minutos al levantarte y al acostarte para realizar la autosugestión. 6- Relájate en posición confortable. 40 7- Durante unos minutos deja que tu imaginación traiga a tu mente imágenes de ti, haciendo en presente lo que deseas hacer, siendo aquí y ahora la clase de persona que quieres ser. 8- En los minutos finales repítete lenta y con seguridad la oración que escribiste de sugestión, en voz alta, con confianza, como si tu deseo ya se estuviese realizando. 9- Cuando lo desees puedes salir de tu estado de relajación con esperanza y optimismo. 10- No critiques tus acciones cuando no obtengas resultados. Realiza tu ejercicio con confianza y espera el resultado. No quieras lograrlo al instante. Ten paciencia y cree en ti. 41 Bibliografía 1. Asociación Mexicana para Ayuda Mental en Crisis, A.C. Email: pericles @ prodigy.netwx 2. Brensón Lazan, Gilbert. El Credo del Facilitador. Fundación Neo-Humanista. Correo Electrónico, Gbl @ neo-humanista. Org.website:http://neohumanista,org 3. Carl R. Rogers (1972), El proceso de Convertirse en Persona, Editorial Paidos, Barcelona. 4. Gerard Egan (1975), El orientador experto: Un modelo para la ayuda y la relación interpersonal, Grupo editorial Iberoamericana, México 5. Lozada, M.; Montero, M. y otros (2000), Guía para el apoyo psicosocial de niños en situaciones de emergencia: Recomendaciones para maestros, facilitadores y adultos cercanos. , AVEPSO, Caracas Venezuela. 6. Shertzer y Stone (1968), Manual para el Asesoramiento Psicológico (Counseling) Editorial Paidos, Buenos Aires. 7. Tapia de Peralta, Irene. Guía de Autoayuda. Asociación Civil Niña Madre. 8. Testa de Rivas, Mirían. Anfitriones del Nuevo, Milenio. Manual de Autoayuda. Ediluz. Maracaibo- 1998. 9. Psicología terapéutica (sf), Técnicas de relación. 42 UNIDAD I PARA REFLEXIONAR ¿Cómo puedo ser para que el otro me perciba como una persona digna de fe, coherente y segura, en sentido profundo? ¿Puedo ser lo suficientemente expresivo, como persona, de manera tal que pueda comunicar lo que soy sin ambigüedades? ¿Puedo permitirme experimentar actitudes positivas hacia esta otra persona: actitudes de calidez, agrado, interés, respeto? ¿Puedo ser lo suficientemente fuerte como persona para distinguirme del otro?, ¿Puedo respetar con firmeza mis propios sentimientos y necesidades, tanto como los de otros?, ¿Soy dueño de mis sentimientos y capaz de expresarlo como algo que me pertenece, y que es diferente de los sentimientos del otro?, ¿Es mi individualidad tan fuerte como para no sentirme abatido, atemorizado o absorbido por su depresión, rabia, etc.? ¿Estoy lo suficientemente seguro para admitir la individualidad del otro?, ¿Puedo permitirle ser lo que es: honesto, falso, infantil, adulto, desesperado o pleno de confianza?, ¿Puedo otorgarle libertad de ser?. ¿O siento que debería seguir mi consejo, depender de mí en alguna medida o bien tomarme como modelo?. ¿Puedo permitirme penetrar plenamente en el mundo de los sentimientos y significados personales del otro y verlo tal como él lo ve?, ¿Puedo aceptarlo tal cual es y comunicar esa actitud? ¿Puedo comportarme en la relación con la delicadeza necesaria como para que mi conducta no sea sentida como una amenaza?, ¿Puedo liberar a la persona de la amenaza de la evaluación externa? ¿Puedo enfrentar a esa otro individuo como una persona que está en proceso de transformarse o me veré limitado por mi pasado y por el suyo? ---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------- 43 UNIDAD II ENFRENTÁNDONOS A LA CRISIS 44 INTRODUCCIÓN Según Caplan (1961) una crisis se produce cuando una persona se enfrenta a obstáculos – insuperables por sus métodos habituales de resolución de problemas- para la consecución de objetivos vitales. Sigue un período de desorganización y perturbación con intentos fallidos de resolución, tras los que la persona puede buscar ayuda exterior. Aunque el proceso de una crisis es idiosincrático para cada tipo de situación y de persona, se puede generalizar una secuencia habitual compuesta de las siguientes fases: 1. Elevación de la tensión emocional y busqueda inicial de solciones entre los recursos habituales disponibles. 2. Si esas respuestas fallan se buscan nuevas soluciones y recursos de emergencia que son sometidos a “ensayo y error” ya que no se tiene experiencia previa sobre su funcionamiento y efectos. 3. Si esas respuestas no tienen éxito para reducir la tensión y resolvver el problema, se procucirá un estado de gradual agotamiento de las reservas intelectuales y emocionales acompañados de un aumento de tensión como reacción al propio fracaso del sujeto, que puede llevarle al auto-aislamiento, encerrándose en sí mismo y generando patologías auto-deformantes o a pedir ayuda externa. Es muy importante que los recursos personales y asistenciales necesarios estén disponibles en el lugar y momento adecuados (cuando el sujeto en estado de necesidad pide ayuda) ya que, si no, no tendrán efecto alguno sobre la desorganización presente, que seguirá su curso de formación de síntomas más o menos irreversibles. Elementos o componentes característicos de las situaciones de crisis y de stress agudos, que debemos tener en cuenta a la hora de intervenir: a) Emociones o sentimientos negativos como temor, ansiedad, ira, frustración ó culpabilidad. b) Sensación de impotencia e ineficacia acompañada de la incapacidad de resolver problemas y controlar las emociones desatadas en el propio sujeto, lo cual resulta altamente desagradable y psicológicamente amenazante para la persona, induciendo además, a largo plazo, peligrosa tendencia a la auto-devaluación y depresión. c) Búsqueda intensiva de soluciones, el sujeto esta “fijado” en el problema, comienza a tener fallos de memoria, concentración y atención respecto al mundo externo y asuntos vitales. Estos fallos son como con frecuencia, los primeros indicios externos de que aquella persona ya “no es la misma” y de que algo va mal. d) El contexto social inmediato en que se dan las crisis es sumamente importante. Si la victima es ayudada y el comportamiento de las personas con las que entra en contacto es correcto, el efecto será saludable y positivo; si la acción de esas personas es equivocada el efecto será nefasto, añadiéndose al de la propia crisis. En este capítulo se analizan las posibles reacciones inmediatas, iniciales y secundarias que se manifiestan en victimas de desastres; y se plantean actitudes y conductas apropiadas para prestar ayuda psico-emocional efectiva, por parte de los facilitadores de procesos, contribuyendo así, a la reconstrucción de proyectos de vida individuales y a la del tejido social. 45 46 Unidad II: ¿Cómo reaccionamos ante una crisis? PROPÓSITO: Analizar las posibles reacciones iniciales y secundarias en personas afectadas por una crisis, para brindarles apoyo psicosocial pertinente en cada situación. APRENDIZAJES: • Conocimiento de las reacciones iniciales y secundarias al momento de vivir una crisis. • Incorporación de técnicas que faciliten el abordaje ante una crisis individual, familiar, grupal y comunitario. METODOLOGÍA: Utilizaremos técnicas de dinámica de grupos, que motiven y faciliten aprendizajes significativos. CONTENIDOS: • • • 43 Reacciones inmediatas Reacciones iniciales Reacciones secundarias. UNIDAD II ENFRENTANDONOS A LA CRISIS OBJETIVO GENERAL: Analizar las posibles reacciones inmediatas, iniciales y secundarias en personas afectadas por una crisis, para brindarles el apoyo psico social pertinente en cada situación. OBJECTIVO ESPECIFICO N° 1 Identificar las reacciones inmediatas y realizar la facilitación de los primeros auxilios emocionales. Contenidos: Concepto de reacciones inmediatas. Manifestaciones. Qué son los primeros auxilios emocionales. Estrategias: Dramatizar distintas reacciones inmediatas y prácticas de auxilio emocional pertinente a cada caso. OBJETIVO ESPECÍFICO N° 2 Identificar las reacciones iniciales, considerando sus efectos en las distintas dimensiones. Contenidos: Concepto de reacciones iniciales. Manifestaciones en las dimensiones física, psicológica, social y espiritual. Estrategias: Ejercicio de lluvia de ideas para definir crisis y en qué aspectos nos afecta. Ejercicio de reflexión personal donde se reconozca una vivencia de crisis y sus manifestaciones en las distintas dimensiones (física, psicológica, espiritual y social) compartirlo en pareja y llevarlo a la plenaria para su análisis. Exposición con uso de láminas sobre el contenido. Ejercicio de cierre: aprendizajes adquiridos. Reflexión final. 44 OBJETIVO ESPECIFICO N° 3 Identificar las reacciones secundarias para su debida atención y/o canalización. Contenidos: Concepto de reacciones secundarias. Manifestaciones. Atención y canalización. Alternativas de respuesta. Estrategias: En pequeños subgrupos, realizar un estudio de casos y dramatizar las reacciones secundarias que serán analizadas y discutidas posteriormente en plenaria con guías preelaboradas en las cuales aparezcan dos o tres reacciones patológicas. 45 REACCIONES INMEDIATAS Según Ignacio Jarero (Compendio de: Guía Básica) Síntomas probables: Confusión para pensar y culpa de haber sobrevivido. Llanto. Problemas de concentración. Fatiga. Problemas de memoria. Problemas para dormir y descansar. Disminución de la higiene y cuidado personal. Cambio de hábitos alimenticios. Pérdida de la confianza en sí mismo. Disminución de la resistencia. Tiene recuerdos “vivos” del evento. Culpa a los demás por lo sucedido. Frustración. Desorientación en el tiempo y en el espacio. Impotencia. Abuso de alcohol y drogas. Depresión. Uso excesivo de sus incapacidades. Tristeza. Enojo, ira, problemas en el trabajo o con la familia. Irritabilidad en la escuela (si es estudiante). Inseguridad. Siente que necesita estar solo. Miedo. Pánico por ideas suicidas. Ansiedad. Sentirse aislado, abandonado. Frío emocionalmente. Preocupación por otros. Náuseas, dolor en el pecho o la cabeza Temblores musculares y dificultad para respirar. Taquicardia y aumento en la presión sanguínea. 46 PRIMEROS AUXILIOS EMOCIONALES ANTE LAS REACCIONES INMEDIATAS Por Ignacio Jarero Hablar con otras personas. Compartir los sentimientos y pensamientos. Hacer pasatiempos, buscar compañía. Ayudar a otros compañeros, compartir y escuchar. Permitirse el sentirse mal. Hacer ejercicios físicos y de relajación. Mantenerse ocupado. No disminuir el dolor con drogas o alcohol. Mantener una rutina de vida lo más normal posible (comer y dormir.) Escribir durante las horas de insomnio. Hacer y/o pensar en cosas que le hagan a uno bien. Tomar pequeñas decisiones cotidianas. No combatir los sueños recurrentes. 47 REACCIONES INICIALES (Concepto) Se refiere a manifestaciones emocionales como temor, ansiedad, tristeza, llanto, sensación de terror y desamparo, usualmente asociadas a características fisiopatológicas como palpitaciones, dificultad para respirar, desasosiego y temblores. En algunos casos puede haber excitación marcada hasta alteraciones de la conciencia. Todas ellas suelen ser reacciones ordinarias o normales frente a situaciones extraordinarias, es decir, son las manifestaciones esperadas ante situaciones inusuales como es el caso de tragedias o desastres naturales. Por lo tanto, no hay funcionalidad y su duración puede ser, aproximadamente, de dos meses y medio. Estas reacciones iniciales normales se caracterizan porque no requieren tratamiento psicoterapéutico, ni tratamiento farmacológico, solo requieren de calidez y comprensión. Estas manifestaciones iniciales pueden ser psicológicas, físicas, sociales y espirituales. DIMENSION PSICOLÓGICA (Según Brenson y Sarmiento) Incredulidad o negación. Así como el cuerpo reacciona con un estado de choque (shock) ante un trauma físico, la mente también lo hace, inmediatamente después del impacto. Esta reacción tiene la función protectora de darle a la persona tiempo para prepararse a resistir el impacto de lo sucedido. Dura unas horas y se caracteriza por la negación de la pérdida. Esto puede reaparecer a veces durante el proceso posterior al duelo y no implica un problema psicológico serio Ansiedad traumática. Ocurre en las personas que han estado directamente involucradas en el accidente. Su característica es que deja una huella mental o “imprinting”, o sea que el evento queda grabado en la persona. Generalmente comienza cuando pasa el choque inicial o los efectos de los sedantes. Puede durar muchos años, como en el caso de la neurosis de guerra. Las características de la ansiedad traumática son: interrupción del sueño, pesadillas, ansiedad, angustia, inquietud, frecuente irritabilidad, reflejo exagerado del susto, desconfianza, sentimiento de impotencia e inadecuación y aislamiento social. Somatización. Una de las primeras reacciones es la conversión del choque emocional en síntomas físicos. Entre las más frecuentes manifestaciones se encuentran: dolores generalizados de huesos, jaquecas, mareos y desmayos, taquicardia, alteraciones de la tensión arterial, presión toráxica, aletargamiento y cansancio, insomnio y problemas gastrointestinales. Estos problemas disminuyen al pasar la primera etapa y solo deben ser tratados con fármacos cuando la salud de la persona esté en peligro. 48 Desasosiego. Incluye manifestaciones que pueden ser experimentadas juntas, por partes o alternadamente. Dichas manifestaciones son: Apatía: Desinterés y desmotivación. Deseo de permanecer acostado en el día. Hiperactividad: agitación psicomotora general, inhabilidad para conciliar el sueño, ejemplo; trabajar hasta el cansancio de quedar exhausto. Hiperquinesia: Hiperactividad y agitación psicomotora general, caracterizada por movimiento constante, inhabilidad para conciliar el sueño, deseo de estar trabajando o actuando constantemente. En el caso de una tragedia puede ser el deseo de buscar sobrevivientes aun cuando lógicamente no es posible, o ayudar a otros damnificados hasta quedar exhaustos. Alucinaciones: Muy común y normal después de una tragedia. Los individuos están seguros de haber oído o visto a sus seres queridos perdidos o muertos. Aunque se le confronte a la persona con su realidad externa, su realidad interna sigue vigente y real. Ideas Suicidas: Quienes no las tienen ante un trauma, están más perturbados que los que las tienen. Si las ideas se salen de las manos y se convierten en amenazas o intentos de suicidio, es necesaria la ayuda profesional para quienes presenten estos síntomas. Emotividad. Son reacciones ante un trauma y es importante expresarlas y sentirlas para poder elaborar el duelo. Las emociones no expresadas oportunamente pueden provocar serios problemas más adelante. Tristeza: Es un pesar por lo perdido y por la situación en que quedó el individuo, su familia y la comunidad. Se manifiesta en forma de “oleadas” que surgen al pensar o hablar de la tragedia. Rabia: Puede estar dirigida contra la naturaleza, el destino, Dios, los que murieron, los que sobrevivieron y aún contra aquellas personas que quieren ayudar. Debido a factores socioculturales, esta es la emoción más reprimida entre los damnificados. Las secuelas de esta represión aparecen en las crisis secundarias de agresividad y violencia física. Miedo: A un futuro sin las personas y los bienes perdidos. Se agrava por el temor constante a una posible repetición de la tragedia, especialmente cuando, por ejemplo, la tierra sigue temblando. Culpa: Cuando hay una tragedia natural, esto se presenta con frecuencia. Los sobrevivientes se llenan de culpa sin tenerla. Se pueden sentir culpables por haber sobrevivido, mientras otros murieron; por no haber rescatado a otros; por tener cosas que otros no tienen después de la tragedia o por no haber tratado mejor, en vida, a aquellos que murieron. 49 DIMENSION FISICA Pérdida del apetito. Comer en exceso. Alteraciones del sueño. Enfermedades (dolores, cansancio permanente, mareos, alta o baja tensión, problemas digestivos.) Alteraciones de la apariencia física (falta de higiene personal, abandono en el vestir.) DIMENSION SOCIAL Tensiones interpersonales (puede aumentar la agresividad) manifiesta en el maltrato o poca tolerancia al otro. Igualmente pueden aparecer conductas de dependencia y de resistencia a la realización de cualquier esfuerzo, esperando a que otros decidan o conductas sobre protectoras por temor o miedo a perder al otro. Uso inadecuado de objetos y dinero pudiéndose llegar hasta conductas delictivas. DIMENSION ESPIRITUAL Aumento del pensamiento mágico, apego a sectas religiosas, rechazo a lo espiritual. Las crisis pueden ser transformadas en oportunidades para el crecimiento y desarrollo espiritual Luisa L. Hay afirma: “Deja de sentirte una victima, deja de compadecerte. Agradece el simple y maravilloso hecho de vivir, y recuperarás tu poder. Los problemas son peldaños en nuestro camino de aprendizaje. Ábrete para recibir tu bien. Hay tanto amor en este mundo y en nuestro corazón..., pero solemos olvidarlo y pensar que no hay suficiente. Cuanto más amor expresamos más tenemos en nuestro interior y más recibimos. Recuérdalo, y recuerda también que el amor es la fuerza curativa más poderosa que existe. Exprésalo tanto como puedas, y el amor que des y recibas no tendrá límites.” 50 REACCIONES SECUNDARIAS (Tomado de: Recuperación psicosocial, de Gilbert Brenson y María Mercedes Sarmiento) DEPRESIÓN REACTIVA Cuando el individuo no elabora el duelo oportuna y adecuadamente y/o reacciona disfuncionalmente ante el trauma y sus consecuencias iniciales, se produce una crisis que conduce a esta reacción secundaria. Factores que aumentan el riesgo de la Depresión Reactiva Retardo en iniciar el duelo. Relación ambivalente antes de la tragedia con el difunto o aquello perdido. Falta de preparación psicológica. Carencia de valores espirituales. Ansiedad traumática unidad a la pérdida. Dependencia del difunto. Dificultad para tolerar o expresar emociones. Antecedentes de pérdidas anteriores no resueltas, pérdida de alguien importante durante la infancia o depresión por otros problemas psicológicos. Conflictos emocionales y psicosociales que no fueron resueltos a tiempo (enseguida de la crisis.) HOLMES Y ROCHE: De acuerdo con sus estudios, realizados con víctimas de diferentes sucesos traumáticos, concluyen que el aumento o disminución del valor del trauma depende de la cultura. Por ejemplo, en América Latina, las situaciones donde más valor tienen los traumas son aquellas en las que se produce la pérdida de un cónyuge u otro familiar. Con ayuda apropiada, la persona afectada puede romper el círculo vicioso de: reacción disfuncional-crisis secundaria-reacción más disfuncional-peor crisis, etc. Por lo tanto, la ayuda apropiada hace que la víctima aprenda en camino de la oportunidad. MANIFESTACIONES DE LA CRISIS SECUNDARIA Hiperactividad: La hiperquinesia inicial se vuelve obsesiva. La persona se puede volver adicta al trabajo. Otras veces disminuye para ayudar a otros damnificados, hasta que descubre que no puede huir de sí misma. Es común en los profesionales y voluntarios que trabajan en zonas afectadas. Hipoactividad: Extensión de la apatía inicial pero más prolongada. Puede ser que la persona no se quede acostada en la cama, como sucede en los albergues, sin embargo puede estar más de seis meses sin buscar trabajo y pasar el día con poca actividad. Es resistente a sugerencias de autoayuda. 51 Esta manifestación es común en los damnificados de las clases más pobres porque viven materialmente mejor en el albergue que antes del desastre, por lo tanto ésta reacción debe ser tomada como crisis secundaria... Este comportamiento es provocado por la actitud paternalista de parte de quien lo ayuda. Sobre-identificación: El individuo se puede identificar excesivamente con un difunto, adoptando rasgos de su personalidad, hábitos, gestos, actividades y enfermedades. Todo ésto refleja un problema de presión y requiere atención. Somatización crónica: Las somatizaciones iniciales se convierten en un patrón habitual (por razones psicológicas, fisiológicas y sociales.) La enfermedad es real y requiere tratamiento medico y psicoterapéutico. Alteración Relacional: La desorganización personal se convierte en un patrón habitual y afecta las relaciones con la pareja y familia. En relaciones anteriormente equilibradas y estables, se observa exceso de machismo, separación y abandono, dependencia excesiva, impotencia, frigidez sexual y otras manifestaciones. Todas las anteriores reflejan las crisis secundaria de un miembro de la familia y la relación de la pareja. Se recomienda terapia de pareja o familia. Fármacodependencia: Consumo excesivo de alcohol y drogas, inclusive las recetadas. La persona no responde a los tratamientos tradicionales. Agresividad o intentos suicidas: Sucede cuando los sentimientos iniciales no se tratan de forma adecuada, viene la agresión desbordada contra otros y contra sí mismo. Esta conducta se ve en mucho niños y los regaños habituales y la acentuada disciplina no funcionan. Es necesario un manejo grupal. Criminalidad: La unión de varios de los anteriores problemas puede llevar a que la persona desarrolle comportamientos ilícitos. El simple castigo del delito no da resultado. Es necesario un tratamiento psicoterapéutico. Inafectividad: La persona pierde el deseo de dar o recibir cariño. Se vuelve indiferente y necesita ayuda profesional para no terminar en un suicidio. Depresión psicótica: La no-elaboración normal del duelo o el continuo círculo vicioso que empeora las crisis secundarias, hacen que la persona opte por romper con la realidad externa y vivir dentro de su realidad interna, o sea la psicosis. En estos casos se requiere de hospitalización y atención psicológica inmediata para que la persona pueda recuperarse. (Tomado de: Recuperación Psicosocial. Una Guía para Facilitadores de Apoyo en Crisis y Desastres. Por Gilbert Brenson y María Mercedes Sarmiento) 52 LECTURAS COMPLEMENTARIAS MARCO CONCEPTUAL BASICO DEL ORGANISMO BIOPSICOSOCIAL Sistemas de apoyo (mediadores-reguladores) Asistencia (en cada nivel) al individuo después del desastre, en el intercambio de persona a persona: apoyo proporcionado a efecto de la identificación; intercambio de información útil; oportunidad de compartir técnicas de resolución de crisis; aumento de la sensación de valor, gracias al apoyo; refuerzo para el cambio y persistencia del esfuerzo (reinformación sobre el desempeño); ayuda concreta y actuación como partidarios; opciones de solución de problemas y orden de priorización de las soluciones; actividad y potenciación de las habilidades, mediante el apoyo ante las condiciones adversas. RESOLUCIÓN DE CRISIS (CONFRONTACIÓN) La confrontación es la conducta que nos protege de volvernos psicológica y fisiológicamente desorganizados. El proceso de confrontación suele comprender las respuestas conductuales tendientes a la acción. También utiliza procesos de evaluación cognoscitivos, emocionales y conceptuales. 1. Puede haber un intento por cambiar la fuente del estrés. 2. Puede haber un intento por redefinir la situación de amenaza (significado, gravedad.) 3. Intentos de encontrar ajuste y conciliación (aceptación pasiva, resignación, creencias religiosas, destino.) REPERTORIO DE RESOLUCIÓN DE CRISIS 1. Capacidad de orientarse de manera rápida. 2. Planificación de una acción decisiva en respuesta al cambio. 3. Movilización de los mecanismos de solución de problemas en urgencias. 4. Uso apropiado de los recursos externos para la asistencia (sistemas de apoyo.) 53 5. Capacidad de tratar en forma simultánea las dimensiones afectivas de su experiencia y la tarea. 6. Afloramiento a la conciencia de las emociones dolorosas y expresión apropiada de las mismas. 7. No hay una obsesión con los sentimientos perturbados, sino un reconocimiento del dolor. 8. Formulación de estrategias (contingencias) para convertir la incertidumbre en riesgo manejable: “Proceso de dominio coyuntural” (trabajo por preocupación-ensayo del estrés de los cambios en la vida.) 9. Capacidad para reconocer la necesidad de depender más, de pedir, recibir y aprovechar la ayuda. 10. Capacidad para tolerar la incertidumbre, sin recurrir a la acción impulsiva. 11. Repertorio de aptitudes de dominio activo para reaccionar a los desafíos ambientales y reconocer su valor positivo para el crecimiento. 12. Capacidad de usar defensas y modalidades de alivio de la tensión, al adaptarse a la ansiedad sin consecuencias destructoras. HABILIDADES NEGATIVAS DE RESOLUCIÓN DE CRISIS 1. Uso excesivo de la negación, retraimiento, reclusión, evitación, uso frecuente de la fantasía, deficiente prueba de la realidad. 2. La conducta es impulsiva, ventila su furia contra individuos más débiles, los victimiza. 3. Dependiente en exceso, evita la separación, contra dependiente, la persona es incapaz de evocar en los demás su deseo de cuidarla. 4. Supresión de emociones, lo cual produce el síndrome de “desaliento-desamparorenuncia”. 5. Uso de conductas hiperritualistas, sin propósito. 6. Regulación deficiente del ciclo descanso-trabajo: fatiga. 7. Adicciones. 8. No sabe cómo usar los sistemas de apoyo. TEORIA DE CRISIS: DEFINICIÓN “Estado de crisis”: el organismo está en un estado temporal de desequilibrio que precipitó un factor estresante, el cual se caracteriza como una situación intensa “inevitable” que abruma nuestros mecanismos habituales de resolución de crisis. 54 Hay una perturbación del estado de estabilidad normal: biológico, psicológico, cognoscitivo, conductual, interpersonal, social (emociones fluctuantes.) La situación puede ser un desastre abrumador concreto, un sutil evento simbólico vinculado a un significado emocionalmente cargado, que amplifica y distorsiona las respuestas a eventos de la realidad, también podemos entrar en crisis por un evento previsto. El pasado, el presente y el futuro se pueden confundir al predisponer, precipitar y perpetuar una crisis. ULTIMAS CONSECUENCIAS Un porcentaje de la población seguirá manifestando distintas clases de reacciones. Fisiológicas: Recuerdo recurrente de los eventos, hipersensibilidad a los sonidos. Retorno a los momentos traumáticos. Trastornos del sueño, pesadillas. Cansancio, apatía, falta de motivación. Ira, frustración, irritabilidad. Aumento de problemas psicosomáticos. Aumento en el uso de medicamentos o alcohol. Psicológicas: Ideas suicidas. Sentido de impotencia y falta de control. Desconfianza en las soluciones futuras. Ataques de llanto. Depresión. Falta de tolerancia, resentimiento. Temor por la anticipación de un nuevo desastre durante eventos recordatorios (lluvia.) Sociales: Problemas persistentes con personas del sector privado/gubernamental de la reconstrucción. Problemas con arrendadores. Ocupación de casas hacinadas, remolques. Aumento de la violencia en el hogar y de las pandillas. Problemas de tránsito. Falta de programas para los niños Elevación de la tensión familiar. 55 GUIAS PARA EL TRABAJO • EJERCICIOS DE TRABAJO EN GRUPO Proyecte una película o video a los estudiantes y pida que identifiquen las reacciones emocionales de los damnificados durante las fases de amenaza e impacto. A cada participante se le asignará un rol para observar (damnificado, trabajador.) Pídales que compartan sus observaciones con el grupo. Sugerencias para el uso de los videos: Este video puede usarse en su totalidad o en partes para proporcionar material en la conferencia de introducción a los consejeros de salud mental y trabajadores de socorro en urgencias. Planificación de las actividades de intervención antes de un desastre. Asigne a los estudiantes la tarea siguiente: A usted le avisan con un mes de antelación que va a ocurrir un desastre. Tiene que hacer planes por anticipado, para atender las necesidades de salud mental de la población destinataria de damnificados (elija el desastre y la población.) Grupo 1: ¿ Qué planes harían para los primeros días después del desastre? 1. Determine cuáles serán las necesidades de salud mental de la población. Las necesidades básicas serán de supervivencia. Las personas tratarán de satisfacer sus necesidades básicas e intentarán comunicarse con sus seres queridos. 2. Prepare una lista de los consejeros de salud mental que se asignarán y capacitarán en materia de intervención en crisis. 3. Planee la coordinación del trabajo de salud mental con otros organismos especializados en casos de desastre. Grupo 2: ¿Qué planes harían para el primer mes después del desastre? 1. Aclare cuáles son las necesidades básicas en esa etapa (apenas está empezando el de búsqueda activa de víctimas. Los damnificados todavía están bajo los efectos del impacto, la orientación debe ser breve y directa.) 2. Establezca qué clase de recursos tiene. 3. Use redes para establecer la comunicación con los colegas y familiares de las víctimas. 4. Ayude a asignar personal que atienda las necesidades básicas en diferentes zonas y en la movilización de las personas sin techo. 5. Cerciórese de que se atiendan las necesidades de los consejeros. (Para prevenir el desgaste de los consejeros de salud mental, programe turnos de un máximo de tres horas de trabajo continuo, organizándolos para que ellos se tomen descansos en bloques aunque el tiempo libre sea breve. La intensidad de trabajo es tan grande que las pausas son necesarias.) 56 Grupo 3: ¿Qué planes haría para los primeros tres a seis meses después del desastre? 1. En esta etapa, el impacto está desapareciendo. La desesperación y la impotencia, lo mismo que la ira se están volviendo persistentes y es posible que esté aumentando el abuso de sustancias. 2. Podría ser útil hacer planes de contingencia para atender las distintas necesidades del grupo. Consiga las direcciones de las personas que tienen planes de mudarse, de manera que se les pueda seguir prestando ayuda, como orientación a más largo plazo. Seleccione ejemplos de las reacciones en la etapa posterior al desastre en las primeras horas. Presénteselos al grupo. Ejemplo de un cambio brusco en la vida es el que ilustra el caso siguiente que narró una mujer en la etapa de recuperación después de un huracán. Tenía 48 años de edad, era madre de dos adolescentes, divorciada recientemente; en su automóvil había quedado atrapada por cables eléctricos que cayeron; padeció quemaduras graves. Permaneció en esa situación de peligro durante más de siete horas, hasta que el equipo de rescate la liberó. La llevaron al hospital, donde se enteró que su vecindario tenia daños graves; sin embargo, nadie podía informarle si sus dos hijos estaban a salvo, ni a qué refugio los habían llevado. Durante varias horas trató de averiguarlo, pero debido a las condiciones del camino, la interrupción de las líneas telefónicas y las demás prioridades de los pocos trabajadores de socorro, no pudo conseguir la información. Cuando se le hizo la entrevista, expresó ansiedad y turbación de verse “acosada”, balbuceaba y repetía sin cesar que nunca debió haber dejado solos a sus hijos. Creía que el divorcio había sido lo bastante traumático para ellos, como para que tuvieran que pasar de nuevo por otro trauma y que era una mala madre. Su sensación de impotencia, angustia, desorientación, las autoacusaciones, sus intentos constantes y frenéticos para determinar dónde estaban sus hijos, junto a su renuencia para escuchar o aceptar cualquier explicación, ilustran el primer ciclo de la conducta de crisis. Discusión: Pida al grupo que identifique Las reacciones de autoestima, social y cultural de esta victima. Divida el grupo en subgrupos pequeños. Pida a cada subgrupo que escriba un guión de 5 minutos, sobre una situación familiar que describa lo que podrían hallar después de un desastre: a) en la primera semana, en un refugio; b) en el primer mes, en una tienda de campaña; c) en el tercer mes, en una vivienda temporal; d) en el noveno mes, en una vivienda permanente. El guión debe incluir a un consejero y un grupo o familia de damnificados, debe constar del diálogo y la descripción del entorno. Luego escenificará su guión, se hará un análisis constructivo y después se sostendrá una discusión en el grupo. (Tomado de: Raquel Cohen. Salud Mental para Víctimas de Desastres. Organización Panamericana de la Salud. Editorial Manual Moderno. México. Octubre 1999. Páginas: 47-50) 57 POBLACIONES CON DIAGNOSTICO DE TRASTORNOS MENTALES RESUMEN DEL CONTENIDO Considerando los cambios históricos de los servicios para las personas con diagnóstico de trastornos mentales o retardo mental y aquellas sin casa, que viven en la comunidad, constituyen una población en riesgo que necesita ayuda especial después del desastre. Aunque las cifras sobre las personas reubicadas en los refugios o cuyas viviendas sufrieron daño podrían ser bajas en comparación con la población total, cada caso puede requerir un manejo hábil y diferentes criterios de los que se aplican a la población general. Si bien es difícil identificar las características de los damnificados con problemas mentales, caben algunas generalidades. La mayoría de ellos necesitarán más ayuda que la intervención en crisis, pero es importante proponer algunas preguntas para ayudar al consejero y aclarar algunas guías para la acción durante los primeros días caóticos después de un desastre. Las siguientes preguntas se centran en algunos puntos importantes. ¿Cómo identificar a las personas con trastornos mentales? Los individuos que sufren de enfermedades mentales tendrán reacciones distintas que el resto de los damnificados a los múltiples factores estresantes en la etapa de las consecuencias de un desastre. En está etapa, las personas se clasifican en tres categorías principales que determinan la atención que necesitarán. a) Las personas que viven en los hospitales situados en las zonas dañadas o físicamente inaccesibles. La organización de su vida cotidiana ha sido interrumpida por problemas provocados por la falta de electricidad, el agua, los alimentos, la atención y los miembros del personal de enfermería. b) Las personas que viven en los hogares de grupo. Estos pacientes pueden tener problemas al perder sus hogares o no contar con medicamentos y sus habituales alrededores estructurados pueden estar alterados. Para ellos la pérdida de un entorno familiar puede aumentar la intensidad de sus reacciones emocionales, que se manifiestan en síntomas. c) Las personas que viven con sus propias familias o familias sustitutas. En estas personas también se pueden recrudecer los síntomas como consecuencia de los mismos factores que afectan a las personas que viven en los hogares de grupo. Si se encuentran acompañadas de un adulto conocido que los ayude (por ejemplo, su padre) quizá no sea difícil hacer una evaluación diagnóstica y prescribir los medicamentos correspondientes. Lo contrario sucede cuando se descubre sola a una de estas personas. Los signos cognoscitivos del trastorno, la desorientación y la comunicación extraña (dificultades graves para explicar quién es y lo que ha sucedido) serán indicativos de un individuo que necesita atención especial. Además, un individuo que no es capaz de comprender las órdenes o sugerencias para que realice ciertas 58 acciones sencillas que preservan vida, necesitará supervisión individual. Siempre hay que descartar cualquier traumatismo craneoencefálico no diagnosticado ocurrido durante el desastre, puesto que puede causar síntomas similares. ¿Cómo se distingue a las personas que padecen estrés agudo de las que tienen trastornos mentales? Los individuos cuya conducta parece inapropiada para la situación en que se manifiesta deben ser evaluados con prontitud en busca de lo siguiente: • • • • reacción de estrés intensa reacción psicótica aguda efectos de traumatismo craneoencefálico desorganización de las funciones en un individuo con retraso mental. Estos cuatro trastornos producen signos que facilitan el diagnóstico diferencial. Las reacciones de estrés se manifiestan en cambios que se producen en: 1) Las funciones cognoscitivas, la orientación, la memoria, el pensamiento y la capacidad de tomar decisiones con distintos grados de dificultad. 2) Las emociones, es decir, labilidad, abatimiento, aplanamiento. No hay la más mínima pérdida de contacto con la realidad ni de la propia identidad, la persona se comporta conforme a las normas sociales y se relaciona de una manera pasiva durante la etapa aguda. Las reacciones psicóticas agudas tienen tres manifestaciones graves que se pueden clasificar en expresiones de ansiedad, afectivas y del pensamiento. Se ha informado que los pacientes psiquiátricos diagnosticados se suelen comportar de una manera sumisa, más tranquila que lo normal, cuando se enfrentan a situaciones de urgencia. Puede haber personas que hayan tenido un episodio psicótico si sufrieron un trauma grave y prolongado, su conducta podría fluctuar de apática, deprimida con expresiones de pensamientos extraños y dificultades para comprender las rutinas del refugio/hospital, a hiperactiva, maníaca, poco realista y con dificultades para controlar la conducta habitual. El efecto de los traumatismos craneoencefálicos consiste en signos y síntomas que al manifestarse pueden corresponder a las características de muchos trastornos psiquiátricos, pero un examen neurológico cuidadoso puede revelar signos localizados del traumatismo. Este diagnóstico se debe descartar cuando surge un cuadro clínico agudo grave que indica desorganización mental. Los individuos con retraso mental pueden manifestar conductas que se caracterizan por la desorganización y la desorientación a causa de los cambios súbitos en sus hábitos de rutina. Pueden expresar esta nueva experiencia como ansiedad, conducta de apego infantil, que disminuye con órdenes sencillas, apoyo y orientación. Manifestarán más conductas infantiles, su lenguaje será sencillo y concreto y su comprensión de las órdenes o sugerencias será lenta. ¿Qué hacer para ayudar a las personas con trastornos mentales? Un gran número de pacientes con trastornos mentales depende del tratamiento psicoterapéutico y farmacológico. La necesidad de obtener información acerca de su régimen debe ser una de las primeras prioridades, luego se debe tratar de estructurar su calendario y evitarles las situaciones en las que haya estímulos intensos, de ser posible. También podría 59 resultar provechoso recurrir a otros damnificados para ayudar al paciente con un trastorno mental a realizar las actividades básicas de la vida. ¿Cuáles son las necesidades especiales de las personas con retraso mental? Excepción hecha de los pacientes con retraso grave, casi ninguna de los que padece retraso mental necesita medidas especiales. Algunos de ellos necesitarán ayuda con las instrucciones administrativas del refugio. Una explicación cuidadosa se ha producido y los planes que se han hecho para los próximos días, puede ser un gran alivio para ellos. Cuando el retraso mental es grave y conexo a discapacidad física, pudiera ser necesario pedir a otro damnificado que ayude a la persona en la higiene diaria, la alimentación y las actividades para dormir. ¿Cómo movilizar los sistemas de apoyo social después de una urgencia? Las manifestaciones de interés y asignaciones de recursos desbordantes, de los miembros de la comunidad durante un desastre y la etapa posterior, son típicas. El problema de los sistemas de socorro no es la cantidad, sino la calidad, es decir, se trata de la “congruencia” existente entre las necesidades de los damnificados (según edad, sexo, cultura, estado socioeconómico, salud, etc.) y el interés y el apoyo humanitario a su alcance. La asistencia tiene que ser a la medida de las necesidades de los damnificados, y organizarse de una manera eficaz, que podría ser flexible y sencilla, pero prestando atención genuina y cuidadosa a la motivación, conformidad e idoneidad. Hay muchos grupos organizados, por ejemplo, en diferentes regiones de USA cuya finalidad es ayudar a los individuos en crisis; además, los grupos religiosos están dispuestos a atender a los damnificados de las diferentes denominaciones, si pide ayuda de una determinada institución religiosa. Se podría elaborar una lista de los grupos existentes por región geográfica. Los grupos de apoyo informativos (no familiares), aunque generosos y entusiastas, pueden necesitar cierta gestión y organización en su labor de ayudar a los damnificados. (Tomado de: Raquel Cohen. Salud Mental para Víctimas de Desastres. Organización Panamericana de la Salud. Editorial Manual Moderno. México. Octubre 1999. Páginas: 103110) 60 POBLACIONES CON PROBLEMAS DE ABUSO DE SUSTANCIAS RESUMEN DEL CONTENIDO Las personas que dependen del consumo diario de drogas o alcohol plantean difíciles problemas de gestión para los administradores de los programas de socorro. A los consejeros se les pide que ayuden de manera directa o mediante la consulta, a resolver los problemas múltiples que esta población presenta durante las fases en las que se les aloja en refugios o vivienda temporal (carpas, casas remolque) sea a corto o a largo plazo, mientras dure la asistencia. ¿Cómo identificar a un drogadicto? Fase post-impacto Los drogadictos manifiestan signos fisiológicos de abstinencia cuando no pueden obtener los estupefacientes. En La mayoría de las zonas devastadas, las reservas de medicamentos son pequeñas e irán disminuyendo rápidamente. La conducta y el contenido de la comunicación verbal, identifican al usuario de drogas consciente de la realidad de no poder obtener la sustancia que necesita. El personal de socorro debe contar con una lista de las manifestaciones psicofisiológicas de la abstinencia de drogas. ¿Cuáles son estos signos psicobiológicos en la persona adicta que se abstiene? Después de un desastre, en los damnificados se pueden esperar los siguientes signos cuando no tienen ningún acceso a drogas: • • • • incomodidad vaga o temor a una catástrofe inminente. debilidad muscular: evidente con el esfuerzo más leve. temblores: gruesos, rítmicos, no estructurados, evidentes durante los movimientos voluntarios y que ceden en reposo. psicosis o delirio, o ambos: se suelen asemejar al “delirium tremen” con posibles ataques agudos de pánico. Otros padecimientos con signos que imitan los de la abstinencia son los trastornos histéricos o la toxicidad debida a la falta de drogas. ¿Qué hacer para ayudar a la persona adicta a las drogas? El consejero debe acudir a los miembros del personal médico o de enfermería para ayudar a la persona que está manifestando síntomas de abstinencia a las drogas. Hay que vigilar a la persona, buscar síntomas cardiovasculares y del sistema nervioso central. Si estos síntomas indican un pronóstico inquietante, se deben adoptar de inmediato las medidas médicas correspondientes. El consejero necesita acudir al personal médico para que lo ayuden a dar tratamiento a estos damnificados. Después de controlar la fase aguda, el método de asistencia es la intervención en crisis de tipo psicosocial. ¿Qué se puede hacer en los casos de abuso de alcohol después de la urgencia? Las personas adictas al alcohol manifestarán signos de abstinencia si no tienen acceso a bebidas alcohólicas. A menos que el abuso haya sido crónico y grave, estas personas 61 presentarán signos variables de irritabilidad del sistema nervioso central y malestar pero “sobrevivirán” la fase aguda en la etapa posterior al desastre. Si las manifestaciones y los signos del sistema nervioso central se traducen en conductas disfuncionales, la persona planteará un problema al personal administrativo del refugio y habrá que enviarla a consultar al personal médico. Para ayudar al individuo que exhibe una conducta desorganizada y disfuncional es necesario instituir un horario estructurado de asistencia psicológica. En general, estos individuos causan dificultades en forma agresiva-pasiva, en vez de perturbar mediante provocación activa en las áreas de vivienda. ¿Cuáles son los signos de abstinencia del alcohol? A continuación figuran los signos y síntomas de abstinencia del alcohol. Síntomas tempranos o leves (delirium tremen inminente) pueden aparecer en la primera semana después de la última bebida. Quedan afectados los sistemas del organismo entero: aparato digestivo, muscular, sistema nervioso central y vegetativo (sueño) y las pautas generales psicológicas y de conducta. Los síntomas avanzados o graves se pueden observar en un grupo de damnificados con síntomas tempranos. Una irritabilidad más intensa, temblores y alucinaciones auditivas graves pueden ser indicios de delirium tremen inminente. AYUDA EN LA ETAPA POSTERIOR AL DESASTRE, A LOS DAMNIFICADOS QUE ABUSAN DE LAS DROGAS Las siguientes circunstancias pueden darse después de un desastre. Es útil para un consejero reconocer estas características para ayudar y remitir de manera eficaz. No está dentro del alcance del programa de asistencia en crisis proporcionar tratamiento ni trabajar con grupos con necesidades especiales... DESCRIPCIÓN DEL ESTADO EMOCIONAL Los sentimientos que se observaron con mayor frecuencia después del desastre en esta población, se pueden resumir como estrés producido por las preocupaciones laborales y financieras (es decir, la frustración ante su incapacidad para conseguir un trabajo, falta de aptitudes adecuadas y calidad migratoria o de “damnificado”.) Otro sentimiento recurrente del que informan muchos damnificados que abusan de las sustancias, es un sentimiento intenso de inferioridad que se suele relacionar con la falta de ingresos suficientes para sostener a la familia. La resignación y la impotencia son comunes a casi todos los casos. Estos sentimientos se evidencian sobre todo en los damnificados que tenían problemas matrimoniales no resueltos o de adaptación con otros miembros de la familia. Una gran proporción de estos damnificados que abusan de este tipo de sustancias también sienten temor. La manifestación más frecuente es la ira desplazada y las percepciones distorsionados, que conducen a conductas no adaptativas y reacciones graves de estrés. Aunque se observaron algunos signos de trastorno de estrés postraumático, en general, los damnificados que en algunos países estuvieron expuestos de manera directa a la guerra y sus 62 consecuencias parecían ser los más traumatizados. En apariencia los desastres desencadenan emociones recurrentes y conductas asociadas con la destrucción y el caos (es decir, intrusión de pensamientos acerca de los familiares o amigos muertos en la guerra.) METODOS DE IDENTIFICACION PARA ENCONTRAR DAMNIFICADOS CON PROBLEMAS DE ABUSO DE SUSTANCIAS Una de las actividades de los equipos es la búsqueda activa de víctimas mediante evaluaciones en los domicilios; el equipo completo debe participar en esta operación. Una pregunta que se debe responder es si hay un problema de abuso de sustancias. Si el miembro de la familia entrevistado admitiera que hay un problema de alcohol o drogas en la familia, el consejero a cargo de la entrevista de evaluación debería remitir el caso a un especialista en abuso de sustancias. Ya que son pocas las personas que admiten con facilidad tales problemas, los miembros del equipo deben estar adiestrados para reconocer los signos de abuso de sustancias en la familia, como latas de cerveza afuera, una casa desordenada, falta de alimentos, niños descuidados, olores y sobre todo evasión al responder a las preguntas. Se les debe dar a los consejeros instrucciones de remitir al damnificado si sospechan que hay abuso de sustancias. La técnica consiste en ganarse la confianza de la víctima, haciendo preguntas que no se relacionen con el tema y conversando. Casi siempre, tarde o temprano el damnificado se sincera y admite que tiene un problema con el alcohol o las drogas. EVALUACION DEL ESTADO Y LAS NECESIDADES DEL DAMNIFICADO Una vez que el damnificado admite que tiene un problema de drogas o alcohol y está de acuerdo en recibir ayuda, el consejero le presta asistencia remitiéndolo a una evaluación y a un organismo de tratamiento. A menos que él reconozca fácilmente que tiene un problema para el cual requiere asistencia, la intervención consiste en expresar, con empatía, inquietud acerca de sus circunstancias actuales, proporcionan cualquier asistencia material posible hasta que exista confianza en la relación y luego introducir el tema del tratamiento, explicando las opciones que tiene dadas sus circunstancias. Si el damnificado se resiste, hay que dejar pasar el tiempo, lo que suele hacer que la situación empeore. Intente un nuevo acercamiento con la misma empatía, asegurándose siempre de que la persona sepa cómo procurarse la ayuda a su alcance, si la desea. Los objetivos son lograr que la persona empiece el tratamiento, de ser posible, o plantar la semilla de esta idea. En caso contrario, hay que intentar vincular a la familia a las fuentes de asistencia, como Familias Anónimas. 1. Cuando el damnificado no admite que tiene un problema de drogas o alcohol, el consejero busca una excusa para volver a la casa y trata de relacionarse mejor con la persona, acercándose a ella y ganándose su confianza. Se inicia una conversación general de tipo social. 2. Cuando se ha obtenido la cooperación de la familia y no hay riesgos, se emplea el modelo de intervención familiar para ayudar a la remisión para el tratamiento. Cuando es posible, varios familiares u otros seres queridos pueden organizar una reunión con el damnificado y el consejero procede con la revisión. Este método es eficaz y va seguido de los arreglos con un centro de tratamiento para que reciba al damnificado. 63 3. En algunos damnificados coexisten la drogadicción y los trastornos de salud mental. En estos casos se envía a la persona a un establecimiento de salud mental que colabore. RECURSOS DIDACTICOS • EJERCICIOS DE TRABAJO DE GRUPO Ejercicio 1: Respuesta de la familia en la etapa posterior al desastre Video: “Hurricane Blues” (solicitado a Emergency Services and Disaster Relief Branch, Center for Mental Health Services, HHS, Washington, USA). 1. El instructor divide a los estudiantes en grupos y le pide a cada uno que, después de analizar el video, haga un grupo con lo siguiente: Expresiones emocionales Conducta de los miembros de la familia Interacción dinámica: a) entre los niños; b) entre los adultos; c) entre los niños y los adultos. 2. En grupo, los estudiantes citan los objetivos de las intervenciones para ayudar a la familia. 3. Cada estudiante elige un objetivo y hace la escenificación de roles correspondiente a la técnica de la intervención. Nota: El instructor debe detener la cinta antes de la parte de la presentación del consejero y proceder con el ejercicio. Después de que termine el ejercicio, se debe exhibir la parte de la presentación del consejero y someterla a discusión. Ejercicio 2: Video: “Children and Disaster” (solicitada a Emergency Services and Disaster Relief Branch, Center for Mental Health Services HHS, Washington, USA). 1. El instructor muestra el video y el grupo completo discute la presentación y las técnicas de intervención. Ejercicio 3: 1. EL instructor pide a los estudiantes que mencionen Los problemas que presentan los subgrupos de damnificados con enfermedades mentales e infección por VIH/SIDA Ejercicio 4: 1. El instructor pide a los estudiantes que escriban un guión y actúen varios episodios de situaciones con ancianos. (Tomado de: Raquel Cohen. Salud mental para Víctimas de Desastres. Guía para Instructores. Organización Panamericana de la Salud. Editorial Manual Moderno. México, Octubre 1999. Páginas:122- 64 UNIDAD II PARA REFLEXIONAR Después de haber desarrollado este capítulo detente por unos minutos a reflexionar: ¿De las dimensiones que desarrollamos en esta unidad, en cuál te sientes más fortalecido y cuál consideras que debes fortalecer? ¿Cuáles son los aprendizajes que te quedan al cerrar esta actividad? Elabora una lista de aquellas acciones que debes emprender para fortalecer aquellas dimensiones donde sientes debilidades: Menciona cómo incorporarías los aprendizajes adquiridos en esta unidad al plan de reconstrucción de tu Familia. ------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------- 65 UNIDAD III ALTERNATIVAS PARA SOLUCIONAR UNA CRISIS 66 INTRODUCCIÓN Una de las alternativas para solucionar crisis es una intervención eficaz la cual debemos asumir como un proceso secuencial de toma de decisiones (o resolución de problemas) en función de la información de que disponemos (ó vamos obteniendo) sobre la situación y personas implicadas y de las prioridades de actuación que de ello concluyamos (qué atendemos primero, qué dejamos para después, qué se atiende, qué se refiere a otras instituciones, etc). En una intervención situacional las tareas básicas son: 1.- Alejar a los afectados del lugar o entorno estresante lo antes posible. Es tanto más fundamental cuanto mayor sea el potencial (real o percibido) de peligro, amenaza o letalidad de la situación. La exposición continuada de las personas a una situación estresante tiende a multiplicar su efecto traumatizante y, según el caso, producir sensación se impotencia y desesperación, de no tener salida, lo cual es sumamente pernicioso para la salud mental de los afectados, produciéndose efectos acumulativos y a largo plazo 2.- Resolver o recomponer la situación y organizar las tareas urgentes e inmediatas: hospitalización y tramites asociados; alojar y alimentar a las personas adultas; buscar una casa o estancia temporal para los niños; llamar a la familia, a otras personas explicando lo sucedido. Siempre que haya familiares, amigos o compañeros de trabajo que puedan ocuparse apropiadamente de estas tareas, conviene contactarlos para que el facilitador no quede enredado en un sinfín de menesteres rutinarios que puedan hacer otros, actuando en ese caso de organizador y coordinador de esfuerzos 3.- Transferencia de responsabilidades: debe hacerse cuando el facilitador juzgué que su trabajo ha finalizado. Pueden darse dos posibilidades: que el afectado(o afectados) pueda funcionar y tomar responsabilidades por sí mismo o que no. a)Si en afectado esta en contacto con la realidad y puede funcionar por sí mismo, la responsabilidad de las acciones a seguir le será transferida a él cuanto antes para evitar la dependencia o la expectativa de que otros se van a ocupar de sus problemas. b)Si en sujeto no es funcional la responsabilidad será transferida a la familia o entorno comunitario inmediato. 4.- Tranquilizar y bajar el nivel de excitación generados en forma de ansiedad y otras emociones que, además de hacer sufrir intensamente al sujeto, interfiere con su capacidad de pensar y actuar, dificultando considerablemente el progreso de la intervención a la crisis. Facilitar la expresión de las emociones acumuladas (ansiedad, temor, impotencia, frustración, ira, agresividad, culpa, tristeza, etc.), dado que la energía que movilizan, puede desplazarse irracional y destructivamente contra uno mismo o contra otras personas. Hay una serie de consecuencias de las crisis que pueden necesitar tratamiento psicológico específico más allá de las tareas básicas aquí enunciadas: fobias, imposibilidad de dormir, pesadillas y reexperiencia persistente de lo sucedido, irritabilidad, nerviosismo, desinterés relacional, sexual o por actividades habituales; evitación de cosas, situaciones y personas relacionadas a lo sucedido, etc., estas son manifestaciones que habitualmente siguen a un estrés post-traumático, si persisten en el tiempo, requieren adicionalmente, un tratamiento terapéutico específico. En este capítulo se presentarán otras alternativas para solucionar las crisis ocasionadas por eventos inesperados, los cuales pueden producir estrés, que de no ser tratado a tiempo y eficazmente, llevará a las victimas a comportamientos patológicos. 67 68 PROPÓSITO: Diferenciar las respuestas disfuncionales y funcionales para enfrentar una crisis. Unidad III: Alternativas para solucionar la crisis APRENDIZAJES: • Cómo aprovechar la situación de crisis como oportunidad para solventar situaciones cotidianas a nivel individual, grupal, familiar y comunitario. CONTENIDOS: • • METODOLOGÍA: Utilizaremos técnicas de dinámica de grupos, que motiven y faciliten aprendizajes significativos. • • 69 La crisis como peligro. La crisis como oportunidad. Estrategias disfuncionales y funcionales. Herramientas de autoayuda. UNIDAD III ALTERNATIVAS PARA SOLUCIONAR UNA CRISIS OBJETIVO GENERAL: Analizar las estrategias de afrontamiento de una crisis como representativas del peligro u oportunidad para la recuperación y reconstrucción individual y colectiva. OBJETIVO ESPECIFICO N° 1 Considerar las dimensiones de peligro y oportunidad presentes en una crisis. CONTENIDOS: La crisis como peligro. La crisis como oportunidad. ESTRATEGIAS: Compartir en pequeños grupos situaciones de crisis personales que han constituido peligro y a la vez se han convertido en una valiosa oportunidad. Discusión de textos en pequeños grupos, donde se ejemplifique como en algunos países las crisis han sido aprovechadas como excelente oportunidad para el desarrollo. Plenaria: presentación de las conclusiones de cada grupo. Exposición teórica breve utilizado recursos audiovisuales. Ejercicio de cierre: Aprendizajes adquiridos y reflexión final. OBJETIVO ESPECIFICO N° 2 Evidenciar el peligro que representan las estrategias disfuncionales para el desarrollo individual y social. CONTENIDOS: Las estrategias disfuncionales o pseudo-soluciones. Definiciones. 69 Consecuencias. Estrategias disfuncionales más frecuente. La lucha estéril Agresividad - Pasividad Huida o evasión La fantasía El suicidio (señales de alto riesgo) ESTRATEGIAS: Compartir reflexiones en pequeños grupo basadas en experiencias personales de crisis, donde se haya actuado en forma disfuncional. Elaboración en pequeños grupos de un cuento donde el protagonista responda a una crisis en forma disfuncional. Plenaria: Lectura de los cuentos de cada grupo. Análisis de la experiencia. Revisión teórica breve con proyección de láminas de acetato. Ejercicio de cierre: Aprendizajes adquiridos y reflexión final. OBJECTIVO ESPECIFICO N° 3 Instrumentar herramientas de ayuda y autoayuda para superar las respuestas disfuncionales a una crisis. CONTENIDOS: Algunas herramientas de ayuda. Escuchar empáticamente. Facilitar la catarsis. Elaboración del duelo. Reenmarcar la conducta. Algunas herramientas de autoayuda. Auto-observación Relajación Autodirección Proyecto de vida 70 Utilización del LARO Utilización de manuales de autoayuda para adultos y niños. ESTRATEGIAS: Monitoreo. Ejercitación vivencial de estrategia de ayuda y autoayuda. Dramatización de algunas herramientas. Establecimiento de conclusiones. OBJETIVO ESPECIFICO N° 4 Valorar la oportunidad de crecimiento individual y comunitario que proporciona las estrategias funcionales ante la crisis. CONTENIDOS: Estrategias funcionales ante las crisis. Definición. Consecuencias. Estrategias funcionales más frecuentes: Reflexión Catarsis Asertividad Cooperación. ESTRATEGIAS: Realización de juego cooperativo y reflexión sobre la importancia de la cooperación. Análisis en pequeños grupos de experiencias personales donde se hayan utilizado estrategias funcionales. Dramatización de conductas asertivas. Establecimiento de conclusiones. Ejercicios de cierre. 71 LECTURAS COMPLEMENTARIAS LA CRISIS COMO PELIGRO U OPORTUNIDAD Según Brenson (1999) cualquier tragedia o trauma puede desatar una crisis personal, familiar y/o comunitaria de menor o mayor grado y ésta puede provocar una serie de reacciones psico-sociales, según el grado del trauma y de la crisis resultante. Una crisis es una combinación de dos realidades: un peligro y una oportunidad. El peligro está en las reacciones disfuncionales que pueden tener las personas ante la tragedia; la oportunidad está en el crecimiento personal, en el fortalecimiento de los lazos familiares y en la solidaridad comunitaria que pueden surgir de las reacciones funcionales ante ella. En muchos casos las personas comienzan a elaborar las reacciones iniciales ante una crisis como parte de una nueva patología personal y social; crean nuevos sistemas psicosociales que refuerzan las reacciones iniciales. En otros casos niegan o reprimen una o varias de las emociones iniciales y comienzan a elaborar otras que constituyen una nueva reacción. En ambos casos las personas están actuando disfuncionalmente ante su realidad y corren el riesgo de desarrollar una crisis secundaria o depresión reactiva. Se ha creado una pseudo-solución, es decir, se ha convertido una dificultad en problema mucho más peligroso que la dificultad inicial. Este es el peligro que constituye uno de los caminos ante la crisis. En otros casos, las personas elaboran adecuadamente los síntomas a su debido tiempo y sin represión. Comienzan a actuar funcionalmente ante su realidad, no solamente han superado una crisis, sino también han aprendido de ella, madurando como personas, obteniendo mayor cohesión como familia y fortaleciendo a la comunidad. Esta es la oportunidad que constituye el otro camino ante la crisis. REACCIONES DISFUNCIONALES Según Brenson (1999), las reacciones disfuncionales más frecuentes son: 1. - Aislamiento o Huída: Consiste en evitar la confrontación física o psicológica con la (s) pérdida (s) 2. - Negación o pseudo-catarsis: La persona niega haber sentido o se niegan a expresar una o más de las cuatro emociones básicas que se sienten intensamente después de un trauma o pérdida; en ocasiones exageran una o más de ellas para compensar otra emoción reprimida, 72 como es el caso del llanto continuo, aún meses después del trauma, el cual sirve para evitar sentir la rabia o la culpa. 3. - Agresividad o pasividad: La persona se comporta en forma poco asertiva, irrespetando los derechos de otros o no exigiendo los propios. 4. - Dependencia Simbiótica: Se relaciona con los demás en forma dependiente, rebelde o con una exagerada competencia con las demás personas, especialmente con otros damnificados. REACCIONES FUNCIONALES Entre las reacciones funcionales más frecuentes, Brenson (1999) señala las siguientes: 1. -- Reflexión: Consiste en meditar sobre lo sucedido y pensar claramente en las implicaciones que tiene para el presente y el futuro. 2. - Catarsis: Es la expresión intensa de los sentimientos generados por el trauma, incluyendo cualquier sentimiento anteriormente reprimido. 3. -Asertividad: La persona comunica en forma clara y directa lo que quiere y no quiere de los demás, defendiendo sus derechos sin violar los de los demás. 4. - Cooperación: Consiste en relacionarse con los demás en una forma co-creadora, sinérgica y mutuamente provechosa. EL CONCEPTO DE AFRONTAMIENTO Según Lazarus y Folkman (1986), el afrontamiento es “el conjunto de esfuerzos cognitivos y conductuales, permanentemente cambiantes, desarrollados para hacer frente a las demandas específicas externas y/o internas, evaluadas como abrumadoras o desbordantes de los propios recursos”. En esta definición se plantea el afrontamiento como proceso y no como rasgo de una persona. El afrontamiento sirve para dos funciones primordiales: manipular o alterar el problema con el entorno causante de perturbación (afrontamiento dirigido al problema), y regular la respuesta emocional que aparece como consecuencia (afrontamiento dirigido a la emoción), ambos tipos de afrontamiento se influyen el uno al otro y pueden potenciarse o interferirse. El modo de afrontamiento de un individuo viene determinado por los recursos de que dispone como son: la salud y la energía física, las creencias existenciales (como la fe en Dios), y las creencias positivas, constituyen un importante recurso psicológico de afrontamiento (Ej. Las creencias de que la situación es controlable, de que uno tiene la fuerza necesaria para cambiarla fortalecen la esperanza), el 73 locus de control interno (la creencia de que los resultados dependen de mi propia conducta y no del azar, el destino o de fuerzas que están fuera de mi control personal, (creencia característica del locus de control externo.) Conocer estrategias para la solución de problemas que incluyen, la habilidad para conseguir información, analizar las situaciones, examinar posibilidades alternativas, predecir opciones útiles para obtener los resultados deseados y elegir un plan de acción apropiado, las habilidades sociales, el apoyo social y los recursos materiales, producen mayor actividad y persistencia en el afrontamiento. Este proceso, también está determinado por las coacciones que limitan la utilización de los recursos disponibles. Los condicionantes personales incluyen valores y creencias culturales interiorizadas, que proscriben ciertas formas de conducta y los déficits psicológicos. Los condicionantes o factores coactivos ambientales incluyen las demandas que compiten por los mismos recursos y las empresas o instituciones que impiden los esfuerzos de afrontamiento. Los altos grados de amenaza también pueden evitar que un individuo utilice sus recursos de afrontamiento en forma efectiva. PROYECTO DE VIDA Este concepto se está utilizando cada vez con mayor frecuencia cuando trabajamos con el desarrollo personal y con los problemas afectivos de las personas, sin embargo, no existe mucha literatura ni investigaciones al respecto. Toman (s/f), señala que cada uno de nosotros tiene metas y proyectos que nos trascienden, los cuales en conjunto conforman nuestros proyectos de vida. Lo importante es que estos proyectos no se conviertan en sueños irreales sino que estén sustentados por nuestros recursos de conocimientos, talentos, fuerza de voluntad y persistencia. Deberíamos saber que es lo que realmente deseamos, cuando queremos obtenerlo y cómo. Ese es nuestro plan de vida; un programa para nuestra existencia que debemos confrontar con nuestras propias posibilidades y las que nos ofrece la sociedad.. El proyecto de vida comprende objetivos a largo plazo, los cuales no pueden planificarse con mucho detalle, pero nuestros objetivos a corto plazo deben ser tan minuciosos como sea posible. Con el fin de tener la fuerza suficiente para alcanzar, paciente y sistemáticamente nuestros objetivos a largo plazo, debemos fragmentarlos en etapas más breves. Estas etapas se pueden verificar de manera más fácil y su consecución nos infunde un sentimiento de satisfacción. Se ha demostrado que mientras más intereses tengan una persona y más variadas sean las metas que se proponga, mejor dotada se halla para sobrellevar el fracaso y las desilusiones. Dicho en otras palabras, no deberíamos apostar todo a una sola carta, debemos tener más de un interés y más de un 74 conocimiento que puedan ser puestos en práctica cuando fracasamos, es decir, tener otras cartas más en reserva. Recomendaciones para el establecimiento de metas: .- Una determinada tarea puede representar un medio para alcanzar una meta, la meta misma o ambas cosas. Por ejemplo la salud es una meta, pero al mismo tiempo es un medio que nos facilita el logro de las otras metas. .- Asegúrese de que las metas que se plantee estén a la medida de sus capacidades y oportunidades. No debe sobreestimarse ni infravalorarse .- Las metas dan significado a la existencia, si usted no se propone alcanzar alguna meta la vida no le será tan agradable. .- El cumplimiento de cada objetivo propuesto, no sólo le infundirá un sentimiento de satisfacción sino que le dará confianza en sí mismo y la seguridad de que la siguiente etapa se alcanzará con éxito. .- Si no logra alcanzar la meta que se propone, considere plantearse otra meta o abordar una meta distinta que haya mantenido en reserva. .- Antes de abordar una determinada tarea, piense en el método que habrá de aplicar para su consecución 75 BIBLIOGRAFÍA Brenson Lazán, Gilbert Y Sarmiento, María M.(1999) Recuperación Psicosocial, Bogotá, Fundación Neo-Humanista. Tercera edición. Lazarus, Richard y Folkman, Susan (1986) Estrés y Procesos Cognitivos, Barcelona, España. Martínez Roca Editores. Cáp. 5 Toman, Jiri (sin fecha) Personalidad Clave del Éxito, México, Compañía Editorial Continental, S.A. De C.V. pp. 34 a la 37. 76 PERSONALIDAD CLAVE DEL ÉXITO 3. Objetivos y proyectos de vida Cada uno de nosotros posee realmente algún tipo de meta y proyecto que nos trasciende; por ejemplo, qué haremos esta tarde, a dónde iremos de vacaciones, si compraremos un automóvil o una casa de veraneo, etc. En conjunto, todo ello conforma nuestros proyectos de vida. La cuestión está en que si estan -como tantas veces sucede- en el nivel de los sueños irreales o si tienen firmes bases realistas, fincadas en nuestros conocimientos, talentos, fuerza de voluntad y persistencia. Deberíamos saber qué es lo que realmente deseamos, cuándo queremos obtenerlo y cómo. Eso es nuestro plan de vida: un programa para nuestra existencia. Debemos confrontar lo anterior con nuestras posibilidades y las de la sociedad. Nuestros objetivos a largo plazo -y en éstos incluimos a nuestros proyectos de vida- no pueden planearse con mucho detalle, pero nuestros objetivos a corto plazo deberían ser tan minuciosos como fuera posible. Con el fin de tener la fuerza suficiente para alcanzar paciente y sistemáticamente nuestros objetivos a largo plazo debemos fragmentarlos en etapas más breves. Estas etapas se pueden verificar de manera más fácil y, además, su concesión nos infunde un sentimiento de satisfacción. 4. A mayor cantidad de intereses, mayor cantidad de metas. Hay personas que no tuvieron una existencia fácil y pese a ello, sé encuertran llenas de optimismo. Con respecto a la experiencia de su vida responden: “Si he logrado sobrevivir a diversas desilusiones de la vida sin tener un accidente del tipo de aquellos contra los que todos luchamos, fue porque no aposté todo mi capital en un solo caballo”. Mire alrededor suyo y vea cuántas personas han encontrado valiosa esta experiencia. Examinese usted mismo con respecto al hecho de que mientras más intereses tengan una persona y más variadas sean las metas que se proponga, mejor dotada se halla para sobrellevar el fracaso y las desilusiones. Si no puede dominar a un caballo, lo hará con otro. En ocasiones sucede que una persona experimenta un fracaso considerable en su trabajo. En tal caso, quizá debería cambiar de ocupacion. Pero esa persona no lo puede tolerar, se amarga y, como un carnero, sigue golpeándose la cabeza contra un muro tratando de penetrarlo, lo que en ese caso es 77 imposible. No hace otra cosa: sólo se aleja de la solución, cuando podría aplicar sus conocimientos adecuadamente en otro trabajo. La moraleja de lo anterior es: No deberíamos apostar todo a una carta. Deberíamos tener más de un interés y más de un conocimiento que pudiesen ser puestos en práctica. Por tanto, no deberíamos sentirnos infelices si esa carta no triunfara. No importa, porque tenemos otras más en reserva. 5. Recomendaciones con respecto al establecimiento de nuestras metas. - Una determinada tarea puede en ocasiones representar un medio para alcanzar una meta, en ocasiones la meta misma y en ocasiones, ambos. Por ejemplo, la buena salud es una meta de nuestros esfuerzos, pero al mismo tiempo es un medio necesario que nos facilita satisfacer nuestras otras metas. Lo mismo vale en el caso de otras exigencias. - Asegúrese de que las metas que usted replantee estén a la medida de sus capacidades y oportunidades. Del mismo modo que usted no debe sobrestimarse, no debe infravalorarse. Principie con tareas más sencillas y aumente gradualmente el nivel exigencias. - El objetivo y su realización infundirán significado a su existencia. Si usted no se propone alguna meta, La vida no le será tan agradable. No olvide que establecer y llevar a cabo sus metas le ayudará a vencer la insatisfacción y la depresión, no permitiéndole aburrirse al estar solo. - El cumplimiento de tareas individuales, parciales en las que usted haya fragmentado su propósito global no sólo le infundirá un sentimiento de satisfacción, sino que -y esto es más importante- le dará confianza en sí mismo, la seguridad de que la etapa siguiente se alcanzará con éxito. - Si alguien no logra alcanzar la meta que se propone, la razón de tal desilusión no radica tanto en el hecho de que la meta sea inalcanzable, como en el hecho de que ha perdido una actividad que era parte de su vida. Deberá, por tanto, considerar plantearse otra meta, o tal vez abordar otra, distinta, que se había mantenido en reserva. - Antes de abordar una determinada tarea, piense en el método que habrá de aplicar a su consecución. En este punto, sin embargo, haga a un lado todas las dudas y pensamientos referentes a sí planeó el método correcto; actúe de acuerdo con su plan. Sólo si se interpone algo inesperado y desconocido deberá usted reconsiderar el método utilizado para lograr su objetivo. - Concéntrese un instante en la mañana, quizá mientras esté todavía acostado en la cama, y analice lo que deberá hacer durante el día. Al mismo tiempo, motívese repitiéndose las razones por las que usted desea que se realice la tarea determinada o intente infundirse renovadores ímpetus para 78 realizar esa tarea en particular. 6. Cómo elaborar una hoja de balance personal y un plan de desarrollo. Si hemos puesto en claro y precisado nuestros objetivos en la vida, resulta entonces esencial confrontarlos con las posibilidades reales que tenemos, mismas que podemos aclarar mas si elaboramos una hoja de balance de nosotros mismos. Luego de descubrir los hechos y elaborar un plan de desarrollo, entonces alteramos nuestros objetivos. Aqui, de paso, también recomendaríamos el uso de papel y lápiz. Elaboramos una hoja de balance de la manera siguiente: Examine de nueva cuenta el capítulo anterior sobre la manera de conocerse a sí mismo. Elabore una lista de componentes individuales de su personalidad y áreas de su vida. Entonces, junto con esto y nuestras metas, pensamos en qué rasgos, habilidades y capacidades necesitaremos dominar Y cuáles, en virtud de su indeseabilidad, deberemos suprimir cuando llegue el momento de realizar esto, asi como la manera en que se hará. Debemos pensar en qué cosa realmente es loque queremos realizar en la vida. En nuestra profesión, que entretenimientos e intereses especiales tener, qué queremos lograr en relación con las personas, como mejorar y mantener nuestra salud, etc. Debemos analizar a que componentes debemos darles prioridad y cuáles pueden ser puestos en reserva. También debemos definir un programa cronológico para la realización de las tareas primordiales. En determinados puntos de la hoja de balance y del plan, debemos entrar en mayores detalles; por ejemplo, en cuanto se refiere al carácter, debemos actuar de acuerdo con una lista de rasgos de esté. Lo mismo ha de aplicarse al analizar en detalle aquellos talentos necesarios para relacionarse con la gente y convivir, así como en otras áreas de nuestra autoeducación, pasatiempos y cultivo de la aptitud física. Estos componentes más o menos amplios de nuestra hoja de balance deberán extenderse sobre varias páginas individuales. Recomendamos, de hecho, que aborde su hoja de balance y determine sus propósitos después de haber leído el libro entero. Sólo entonces descubrirá usted si ha obtenido algún conocimiento que pueda ser puesto en práctica para evaluar su vida. Así podía decidir si el libro será su guía y si desea usted actuar de acuerdo con él. Hay por tanto, tiempo suficiente para pensar en elaborar una hoja de balance, propósitos y planes. Elabore, primero, una lista de sus buenos y malos puntos. A continuación defina un orden de importancia. Finalmente comience a elaborar un plan de desarrollo para sí mismo. 79 ¿ Qué es lo que ha de atender usted al hacer esto? 1. Defina sus propósitos sobre la base del análisis de su propia personalidad. 2. Elija una o más metas a las que convenga dar preferencia. 3. Su meta ha de estar en armonía con el tiempo que tiene usted disponible, con su preparación, con sus capacidades (la cuestión del tiempo se aborda en otro capítulo.) 4. La tarea ha de definirse con precisión: si no tiene usted una tarea clara, no podrá cumplirla. 5. Establezca un método de trabajo con relación a la forma en que pretende usted llevar a cabo su tarea. 6. Divida la tarea entera en etapas y elabore una tabla cronológica de ejecución para cada etapa. 7. Verifique La realización de estas tareas parciales. 8. Tras completar cada tarea, lleve a cabo un análisis y descubra lo que hizo correcta y lo que hizo incorrectamente. 7. El plan y su realización. Para llevar a efecto un plan es necesario pensar en él detenidamente de antemano y tomar nota detallada de muchas cosas. Por ejemplo, analice la manera en que usted intentará mejorar su condición física, la manera en que aprenderá a jugar al tenis, la manera en que gradualmente dorninará los principios de las buenas relaciones con las personas, la manera en que comenzará ha adquirir un interés serio por la música, etc. Esto significa que usted debe obtener toda la información posible acerca del tema en cuestión. Véase el tenis, por ejemplo: averiguará cuál de sus conocidos podrá orientarle o dónde podrá jugar al tenis, etc. Si quiere mejorar sus relaciones con las personas usted puede decidir, por ejemplo, que cada semana (o cada mes) practicará uno de los principios enlistados en este libro (en el Cáp. 17), que tomará nota de lo bien o mal que otros actúan en sus relaciones con la gente, etc. Será mucho mejor si usted toma nota escrita de sus resoluciones. ¿ Qué hacer para alcanzar el éxito en la realización de sus planes y metas? Cada tarea que usted planee y para la cual establezca una fecha de realización debe estar bajo control. Esto deberá hacerlo usted mismo. Por tanto resulta mejor, luego de decidirse a comenzar a mejorar, que establezca usted mismo tareas que no sean ni demasiado grandes ni demasiado pequeñas. Asegúrese de no pretender mejorar en todas las áreas de inmediato. Ello constituiría un paso demasiado grande y, si usted no alcanzara el éxito en 80 todo y de inmediato, ello podría desalentarle por completo aun en el caso de que hubiese comenzado con enorme entusiasmo. Podría darse por vencido en una semana, lo cual sería una enorme lástima. Es mejor enfrentar las cosas de una manera más moderada y decidirse primero por una tarea que pueda ser ejecutada en un periodo breve. Hasta no ver que puede realizar una o dos tareas en otros campos, deberá con toda circunspección ampliar sus planes. (Los capítulos individuales de este libro le ofrecen consejos metodológicos acerca de cómo dominar ciertos principios y aplicar métodos individuales.) • Comience por realizar sus planes tan pronto como sea posible, de tal modo que su inicial entusiasmo se expanda a lo largo de buena parte de la tarea. No olvide que es bastante común que la diaria rutina obstaculice la consecución de su meta. Es, por tanto, una buena idea la de adquirir autoconfianza al través de la realización de tareas parciales. • Hacer un inventario y revisar sus tareas le ayudará a evaluar su vida en general. Asegúrese de que el plan se halla en armonía con su amplitud total; es decir, que incluya trabajo, cultura, deporte, tiempo dedicado a la familia, vida emocional, etc. Por ejemplo, Darwin admitió hacia el final de su vida que sus intereses profesionales habían relegado al segundo plano su inicial amor por la lectura poética y la audición de la música. Al armar su plan, tome en cuenta a aquellas personas que podrían interponerse, inadvertida o deliberadamente, en el camino que conduciría a La realización de sus proyectos. Tal vez, debiera usted incorporar al esbozo de su plan, una columna titulada “Obstáculos anticipados”. Si usted desea fervientemente alcanzar un determinado objetivo, debe entender que, de seguro, tendrá que sacrificar algo para ello. Tenga cuidado de no sacrificar algo que sea importante para usted, cuyo valor tal vez no aquilate debidamente (el amor de su esposa, de los hijos o de los amigos.) • Quien establezca un objetivo no personal (trabajar para los demás o para un grupo) obtendrá siempre mayor satisfacción, que si sólo piensa en sus propios intereses personales. • Sabido es que “dos cabezas piensan más que una”. Si tiene usted un amigo con quien poder trabajar, ciertamente aprovéchelo. Más aún, trabajar en un grupo, de preferencia uno pequeño, trae buenos resultados. ¿Por qué? Porque si alguien piensa claudicar, el otro o los demás no se lo permitirán. Más aun, dos personas o un grupo pueden mutuamente supervisarse unos a otros, evaluar lo correcto de sus métodos, etcétera. 81 • Supongamos que al planear sus tareas, usted establece el orden de importancia que tiene para sí mismo e intenta gradualmente añadir más y más objetivos que involucren a todos los aspectos de la automejoría. Así, sin duda alguna, usted tendrá éxito al desarrollar su personalidad total y convertirse en una persona armónica y equilibrada para beneficio propio, de sus más allegados, de la comunidad o de los grupos a los que pertenece. Tomado de: Jirí Toman. Personalidad Clave del éxito. Compañía Editorial Continental. México, Sin fecha. Páginas: 34-40. 82 El proceso de afrontamiento: una alternativa a las formulaciones tradicionales (…) Definición de afrontamiento Definimos el afrontamiento como aquellos esfuerzos cognitivos y conductuales constantemente cambiantes que se desarrollan para manejar las demandas específicas externas y/o internas que son evaluadas como excedentes o desbordantes de los recursos del individuo. Esta definición obvia las limitaciones de los planteamientos tradicionales por lo siguiente En primer lugar, se trata de un planteamiento orientado hacia el afrontamiento como proceso en lugar de como rasgo, lo cual se refleja en palabras constantemente- cambiante y demandas específicas y conflictos. Más adelante entraremos en más detalles. En segundo lugar, esta definición implica una diferenciación entre afrontamiento y conducta adaptativa automatizada, al limitar el afrontamiento a aquellas demandas que son evaluadas como excedentes o desbordantes de los recursos del individuo. En efecto, esto limita el afrontamiento a aquellas condiciones de estrés psicológico que requieren la movilización y excluyen a las conductas y pensamientos automatizados que no requieren esfuerzo. En tercer lugar, el problema de confundir el afrontamiento con el resultado obtenido queda solventado al definir el afrontamiento como los esfuerzos para manejar las demandas, lo cual permite incluir en el proceso cualquier cosa que el individuo haga o piense, independientemente de los resultados que con ello obtenga. En cuarto y último lugar, podemos decir que al utilizar la palabra manejar, evitamos también equiparar el afrontamiento al dominio. Manejar puede significar minimizar, evitar, tolerar y aceptar las condiciones estresantes así como intentar dominar el entorno. El afrontamiento como proceso El planteamiento del afrontamiento como proceso tiene tres aspectos principales: Primero, el que hace referencia a las observaciones y valoraciones relacionadas con lo que el individuo realmente piensa o hace, en contraposición con lo que éste generalmente hace, o haría en determinadas 83 condiciones (Lo cual pertenece al planteamiento de rasgo.) Segundo, lo que el individuo realmente piensa o hace, es analizado dentro de un contexto específico. Los pensamientos y acciones de afrontamiento se hayan siempre dirigidos hacia condiciones particulares. Para entender el Afrontamiento y evaluarlo, necesitamos conocer aquello que el individuo afronta. Cuanto más exacta sea la definición del contexto, más fácil resultará asociar un determinado pensamiento o acto de afrontamiento como una demanda del entorno. Tercero, hablar de un proceso de afrontamiento significa hablar de un cambio en los pensamientos y actos a medida que la interacción va desarrollándose. Por tanto, el afrontamiento es un proceso cambiante en el que el individuo, en determinados momentos, debe contar principalmente con estrategias, digamos defensivas, y en otros con aquellas que sirvan para resolver el problema, todo ello a medida que va cambiando su relación con el entorno. Se hace difícil adivinar como el gran número de posibles situaciones estresantes y la dinámica en su afrontamiento, podría describirse adecuadamente con una medición estática de un rasgo general o de una construcción del tipo de personalidad … Etapas en el proceso de afrontamiento Aquellos investigadores que consideran el proceso de afrontamiento en términos de etapas están utilizando un punto de vista de proceso explícita o implícitamente… Muchos otros autores han prestado atención a los aspectos temporales del afrontamiento. Klinger (1977), por ejemplo, sugiere que la pérdida o la amenaza de un compromiso origina en primer lugar un aumento del esfuerzo y del nivel de concentración. Si la contrariedad continua, la frustración y el enfado también aumentan La probabilidad inmediata de responder primitivamente con protestas y actos estereotipados del modelo ilustrado por Barker, Dembo y Lewin (1941) en un estudio clásico realizado con niños. Finalmente, no conseguir el objetivo deseado o no lograr acercarse a él, conduce a la depresión, caracterizada por pesimismo y apatía. Klinger considera esta secuencia como la normal en las etapas de afrontamiento; en su opinión, la desvinculación y la depresión, en principio son formas adaptativas de afrontamiento (cf Lazarus y DeLongis, 1983.) Por último, existe una recuperación psicológica de la pérdida y se disipan los pensamientos al respecto, perspectiva que coincide con la imagen de Horowitz (1974, 1976, 1982) cuando sitúa al individuo en un círculo de dos direcciones, hacia adelante y hacia atrás, moviéndose entre dos etapas o síndromes de respuesta al estrés: la negación y la vigilancia. Shontz (1975) ha propuesto la idea de que cuando el individuo se enfrenta a una enfermedad física importante o a una incapacidad, procederá de acuerdo a una serie de etapas de afrontamiento iniciadas a partir del momento en que él informa de su estado. Para Shontz, La primera etapa es La de 84 shock, que aparece principalmente cuando la crisis ocurre sin previo aviso. Esta etapa se manifiesta por un sentimiento de distanciamiento: algunas veces, por una sorprendente lucidez y eficacia en el pensamiento y en la acción. A esto le sigue una fase de encuentro, un período extremadamente intenso en el cual el individuo puede experimentar desesperanza, pánico y desorganización. Ello seguido de una tercera fase la de retirada, que parece corresponder a negación, fase dudosa para Horowitz (1976.) Sin embargo, en el planteamiento de Shontz, la etapa de retirada va siendo poco a poco abandonada en favor de una creciente comprobación de la realidad. El proceso de afrontamiento incluye un continuo ir y venir desde la confrontación o esfuerzo a la retirada o negación / evitación y, como en el análisis de Klinger, la fase de retirada representa un importante recurso natural de prevenir temporalmente el desmoronamiento. Cuando el proceso de afrontamiento se ha completado satisfactoriamente, los ciclos se dan con menos frecuencia y prácticamente desaparecen. El proceso de afrontamiento descrito es considerado por Shontz como un recurso necesario para la maduración psicológica, en la cual hay un sentimiento renovado del propio valor personal, una mayor sensación de satisfacción y una disminución de la ansiedad... Por otra parte, el modelo por etapas crea expectativas tanto en el individuo como en los que le rodean respecto a lo que se supone que son sentimientos y actos apropiados... Aunque determinados modelos pueden ser más frecuentes que otros por las formas de respuesta culturalmente compartidas, dudamos de la existencia de un modelo dominante de etapas de afrontamiento. Pero, incluso más importante que la universalidad o frecuencia de las secuencias de afrontamiento, es la necesidad de información sobre la mayor o menor utilidad de determinados modelos para individuos, tipos de estrés psicológico, momentos y condiciones asimismo determinadas. Los investigadores apenas han tocado estos aspectos. La literatura que existe sobre desastres (Baker y Chapman, 1962) dibuja etapas de acontecimientos más etapas de afrontamiento. Generalmente se definen tres: anticipatoria o de aviso, de impacto o de confrontación y de postimpacto o postconfrontación. Nuestro planteamiento cognitivo-fenomenológico del problema es que la amenaza al bienestar se evalúa de forma distinta en las distintas etapas y da lugar a distintas formas de afrontamiento (‘véase también Lazarus, 1966.) Consideramos que el período de anticipación, el de impacto y el de postimpacto tienen sus propias características... Estos procesos cognitivos que comienzan durante el período de impacto, muchas veces persisten hasta el periodo de post-impacto, en el que además emerge todo un conjunto de nuevas consideraciones. ¿ Cómo puede uno reaccionar psicológica y materialmente después del daño? ¿Cuál es el significado o importancia personal de lo que ha ocurrido? ¿Qué nuevas demandas, amenazas y desafíos traerá? ¿Puede volver uno a su statu quo anterior o pueden haber cambiado las cosas de forma apreciable? 85 Aunque el acontecimiento estresante haya terminado, su final suscita todo un conjunto nuevo de procesos anticipatorios. Incluso el período de impacto o confrontacional contiene una serie de procesos dc evaluación y de afrontamiento dirigidos no sólo al pasado y al presente, sino también al futuro. Los prejuicios y daños que ya han ocurrido contienen también elementos de amenaza en cierto sentido anticipatorio del término, y nunca es posible separar del todo, excepto para fines de análisis y comunicación. Los procesos cognitivos y de afrontamiento asociados a cada etapa de un acontecimiento estresante. Durante la interacción, el individuo descubre la realidad de lo que está ocurriendo y lo que puede hacer al respecto, y esto afecta al afrontamiento. Por ejemplo, saber que uno no tiene control sobre la mayoría de los aspectos importantes de la situación favorecerá el uso de estrategias que regulen las emociones; las acciones directas sobre el entorno quedarán para otra ocasión más apropiada. Recíprocamente, los cambios en esta relación del individuo con el entorno, promovidos por la conducta llevada a cabo durante la interacción estresante pueden poner en claro la necesidad de regular las emociones o indicar que tal regulación se ha hecho todavía más necesaria. Recursos para el afrontamiento: Salud y energía Se hallan entre los recursos más generalizados y los más relevantes en el afrontamiento de muchas, sino de todas, las situaciones estresantes. Una persona frágil, enferma, cansada y débil tiene menos energía que aportar al proceso de afrontamiento que otra saludable y robusta. El importante papel desempeñado por el bienestar físico se hace particularmente evidente cuando hay que resistir problemas e interacciones estresantes que exigen una movilización importante. Desde luego, puede que se exagere la importancia de la salud y de la energía en el afrontamiento. Muchas de las investigaciones realizadas (p. e., Bubman y Wortman, 1977; Dimsdalc, 1974; Hamburg y Adams, 1967; Hamburg et al. , 1953; Visotsky et al. , 1961) sugieren que los individuos son capaces de afrontar las situaciones sorprendentemente bien a pesar de una escasa salud física y del agotamiento de su energía. Por tanto, mientras que la salud y la energía ciertamente facilitan el afrontamiento -es más fácil afrontar una situación cuando uno se encuentra bien que cuando se encuentra mal-, las personas enfermas y debilitadas generalmente pueden movilizarse lo suficiente como para afrontar una situación cuando lo que se halla en juego es suficientemente importante para ellas. Creencias positivas 86 Verse a uno mismo positivamente puede considerarse también un importante recurso psicológico de afrontamiento. Incluimos en esta categoría aquellas creencias generales y especificas que sirven de base para la esperanza y que favorecen el afrontamiento en las condiciones más adversas. Como observamos en el capítulo 3, la esperanza puede ser orientadora por la creencia de que la situación puede ser confrontable, de que uno tiene la fuerza suficiente para cambiarla, de que una persona (p.ejemplo un médico) o un programa determinado (p. e., un tratamiento) resultarán eficaces, o bien por el hecho de tener fe en la justicia, la voluntad o en Dios. La esperanza existirá solo cuando tales creencias hagan posible un resultado positivo, o por lo menos probable. Considerar las creencias positivas como un recurso de afrontamiento, va implícito en la tradición de escritores ((de inspiración, como Normal Vincent Peale: que reclama para el pensamiento positivo poder funcional y capacidad para iluminar las experiencias. Lo que no queda claro es darle la existencia o no de costos para este tipo de pensamiento y tampoco esta claro si estas creencias son transferibles a las personas que no las tienen. Es posible que aquél que más necesita recurrir a la creencia positiva sea el menos hábil para conseguirlo. Pensamos que es importante estudiar el pensamiento positivo, incluidas las condiciones que lo favorece, sus costos y beneficios y hasta qué punto puede desarrollarse mediante intervenciones. No todas las creencias sirven para el afrontamiento y algunas incluso pueden disminuirlo o inhibirlo. Por ejemplo, la creencia en un Dios castigador puede llevar al individuo a aceptar una situación perturbadora como un castigo divino y a no hacer nada para dominar o manipular las demandas de tal situación. De hecho, una creencia (un locus externo de control) puedo conducir a una evaluación de desesperanza que, a su vez, disminuye el afrontamiento dirigido al problema. De forma similar, una creencia negativa sobre la propia capacidad para ejercer control sobre una situación y sobre la eficacia de una determinada estrategia puede disminuir la capacidad de afrontar los problemas. El grado de generalización de un determinado sistema de creencias influye también sobre su papel en el afrontamiento. Tal como observamos en el capítulo 3, los sistemas de creencias pueden aplicarse prácticamente en todos los contextos o bien tener un espectro de aplicabilidad muy estrecho. La creencia en un Dios paternalista permite la evaluación de su intervención por parte del individuo que en prácticamente todas las situaciones estresantes, puede influir sobre la actividad de afrontamiento, tanto en dirección como en intensidad, mientras que las creencias sobre el control personal y el dominio pueden limitarse a determinadas situaciones. La creencia de que uno tiene menor control sobre las situaciones laborales que sobre las domésticas puede mermar el afrontamiento dirigido al problema en el primer contexto. Por tanto, vemos que tanto la naturaleza de un sistema de creencias como su grado de generalización determinan su valor como recurso y su influencia en los 87 procesos de evaluación y de afrontamiento... Técnicas para la resolución del problema Las técnicas para la resolución de problemas incluyen habilidad para conseguir información, analizar las situaciones, examinar posibilidades alternativas, predecir opciones útiles para obtener los resultados deseados y elegir un plan de acción apropiado (Janis, 1974; Janis y Mann, 1977.) Son importantes recursos de afrontamiento que, aunque abstractos, se expresan a través de acciones específicas, como cambiar una rueda pinchada, conseguir un empleo, prepararse para un examen, etc. Las técnicas para la resolución de problemas derivan de otros recursos, como experiencias previas, almacenamiento de información, habilidades cognitivas-intelectuales para aplicar esa información y capacidad de autocontrol (p. e., Rosenbam, 1980a, b, en preparación.) Habilidades sociales Las habilidades sociales constituyen un importante recurso de afrontamiento debido al importante papel de la actividad social en la adaptación humana. Estas habilidades se refieren a la capacidad de comunicarse y de actuar con los demás en una forma socialmente adecuada y efectiva. Este tipo de habilidades facilitan la resolución de los problemas en coordinación con otras personas, aumentan la capacidad de atraer su cooperación o apoyo y, en general, aportan al individuo un control más amplio sobre las interacciones sociales. La importancia de las habilidades sociales como recurso se hace evidente en muchas áreas, incluidos los programas terapéuticos que ayudan al individuo a manejar mejor los problemas cotidianos asi como los programas de entrenamiento que persiguen mejorar la comunicación interpersonal. El interés de las organizaciones para enseñar varias técnicas de comunicación refleja una tendencia a considerar que la solución de los problemas depende medios, de los actos individuales que de la capacidad de la acción grupal (Mechanic, 1974.) Cuánto más acusada sea esta tendencia, más influirán las habilidades sociales en las relaciones cooperativas con los demás... Apoyo social 88 El hecho de tener a alguien que proporcione apoyo emocional, informativo y/o tangible, ha recabado mucha atención como recurso de afrontamiento en las experimentaciones realizadas sobre estrés, tanto en la medicina conductual como en la epidemiología social... Recursos materiales Hacen referencia al dinero y a los bienes y servicios que pueden adquirirse por su medio. Este recurso obvio se menciona raramente en las discusiones sobre afrontamiento (véase también Antonovsky, 1970), aunque su importancia queda implicada en las discusiones sobre las fuertes relaciones que existen entre el estatus económico, el estrés y la adaptación (cf Antonovsky, 1979; House, 1979; Syrme yr Berkman, 1976.) Las personas con dinero, sobre todo si saben cómo utilizarlo, generalmente viven mucho mejor que los que carecen de él. Obviamente, los recursos económicos aumentan de forma importante las opciones de afrontamiento en la mayoría de situaciones estresantes ya que proporcionan el acceso más fácil y a menudo más efectivo a la asistencia legal, médica, financiera y de cualquier otro tipo. Simplemente el hecho de tener dinero, incluso aunque no se use, puede reducir la vulnerabilidad del individuo a la amenaza y de esta forma facilitar el afrontamiento efectivo. Limitaciones en la utilización de los recursos de afrontamiento La novedad y la complejidad de muchas situaciones estresantes dan lugar a una serie de demandas que muchas veces exceden los recursos del individuo. Sin embargo, en muchas ocasiones los recursos son de hecho adecuados, pero es el individuo el que no los utiliza al máximo porque hacerlo podría crear conflictos y perturbaciones adicionales. Los factores que restringen el afrontamiento del enfermo pueden llamarse caracteres y algunos derivan de factores personales en tanto que no dependen del entorno. Condicionantes personales Los condicionantes personales hacen referencia a los valores y creencias internalizadas que proscriben ciertas formas de acción y de sentimientos y a los déficits psicológicos que son producto del desarrollo del individuo. También llamamos a los condicionantes personales esquemas o factores de coacción. Los valores y las creencias culturales sirven como normas que determinan cuando ciertas conductas y ciertos sentimientos son apropiados o no... Indudablemente, existen algunas situaciones donde el individuo se verá más influido por las 89 normas culturales, dependiendo de lo que se halle en juego y de las consecuencias de violarlas. Los individuos también difieren entre sí en el grado de aceptación de tales normas. Por consiguiente, aún dejando un amplio margen de diferencias situacionales e individuales, vemos que los valores, las creencias y las normas derivadas de la cultura actúan como importantes agentes de coacción. Por ejemplo, es posible que el individuo en crisis tenga a su disposición muchas formas de apoyo social, pero sea incapaz de utilizarlas por la forma en que se siente coaccionado por este apoyo. Puede que no acepte la ayuda que se le ofrece porque aceptarla significaría que está necesitado o desvalido; o puede no querer sentirse obligado o quizá desconfía de los motivos por los que tal ayuda se le brinda. Los análisis de las reacciones de los minusválidos que reciben ayuda sugieren que, generalmente, ésta se les ofrece con falta de tacto y de comprensión de lo que realmente necesitan, lo que puede dar lugar a que encuentren difícil o degradante su aceptación... Grado de amenaza La amenaza puede ser evaluada como mínima cuando se experimenta escasa sensación de estrés, o como máxima cuando provoca emociones negativas intensas como el miedo. Junto con los recursos y los condicionantes, el grado de amenaza que experimenta el individuo juega un papel importante en la determinación del afrontamiento. Aquí caemos en un círculo vicioso: el grado en que una persona se siente amenazada depende, en parte, de su evaluación de los recursos de que dispone frente a las demandas internas y externas de una situación determinada y, en parte, de los condicionantes que limitan su aplicación. El grado de amenaza, a su vez, influye en el grado en que tales recursos pueden aplicarse. Rompamos arbitrariamente este círculo, considerando los efectos de la amenaza sobre el afrontamiento. Cuanto mayor es la amenaza, más primitivos, desesperados o regresivos tienden a ser los modos de afrontamiento dirigidos a la emoción y más limitados al abanico de los modos de afrontamiento dirigido al problema. Con respecto a los del primer tipo, Menninger (1945) escribe: Los grados menores de estrés generalmente se afrontan con técnicas relativamente “normales” o <<saludables>>; un grado mayor de estrés o un estrés prolongado estimula el aumento de la actividad energética y expansiva para mantener la homeóstasis (p. 280)... La amenaza extrema interfiere con los modos de afrontamiento dirigido al problema mediante sus efectos sobre el funcionamiento cognitivo y la capacidad de procesamiento de la información. Esta cuestión se hace principal en el modelo de conflicto de Janis y Mann (1977) sobre la toma de 90 decisiones, en el que la amenaza extrema conduce a una acumulación inefectiva de la información y a una evaluación incorrecta, debido a lo que ellos llaman hipervigilancia. La hipervigilancia se caracteriza por fantasías obsesivas, funcionamiento cognitivo limitado y establecimiento prematuro de conclusiones (véase Eastembrook, 1959; Hamilton, 1975; Korchin, 1964; Sarasen, 1975)... El control como evaluación y el control como afrontamiento Intuitivamente, podría pensarse que afrontar una situación es intentar controlarla, ya sea modificando el entorno, cambiando el significado de la situación y controlando las propias conductas y emociones, es realmente, cuando el control se refiere a los esfuerzos cognitivos o conductuales desarrollados al enfrentarse a una situación estresante; consideramos afrontamiento y control como sinónimos y los distinguimos de las creencias generales y/o situacionales sobre el control, que influyen sobre las evaluaciones cognitivas de amenaza y desafío. La distinción entre control como creencia que influye en la evaluación y control como afrontamiento es sutil, pero importante para aclarar la forma en que e1 control opera en los procesos de estrés y afrontamiento... En adelante, para no crear confusión con respecto a las definiciones, utilizaremos el término de afrontamiento en lugar del de control cuando éste implique esfuerzo, aun cuando ambos términos puedan ser sinónimos. Tomado de: Richard Lazarus y Susan Folkman. Estrés y Procesos Cognitivos. Martínez Roca. Nueva York, 1986. Páginas: 162-194. 91 UNIDAD III PARA REFLEXIONAR: Después de haber revisado algunas situaciones de crisis: Menciona ¿cuáles fueron tus principales descubrimientos?. Escribe una auto-biografía, donde resaltes las metas más importantes que has tenido y el nivel de logro que has alcanzado. Define ¿cuál es en la actualidad tu proyecto de vida y si después de la tragedia has tenido que rediseñarlo?. ¿Cómo afrontas generalmente tus problemas? ¿Cuáles son los mayores aprendizajes que te quedan al finalizar esta unidad? Escribe qué alternativas incorporarías a tú plan de reconstrucción. --------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------- 92 BIBLIOGRAFÍA Brenson Lazán, Gilbert Y Sarmiento, María M.(1999) Recuperación Psicosocial, Bogotá, Fundación Neo-Humanista. Tercera edición. Lazarus, Richard y Folkman, Susan (1986) Estrés y Procesos Cognitivos, Barcelona, España. Martínez Roca Editores. Toman, Jiri (sin fecha) Personalidad Clave del Éxito, México, Compañía Editorial Continental, S.A. De C.V. 93 UNIDAD IV PREPARANDONOS PARA LA RECONSTRUCCIÓN 94 INTRODUCCION Un desastre implica el rompimiento extenso y casi completo de todos los procesos sociales, de la estructura social (patrones recurrentes, actividades del diario vivir) y de las interacciones primarias y secundarias. Conlleva la destrucción extensa de las infraestructuras funcionales tales como: edificios, sistemas de comunicación y sistemas de apoyo social. El desastre afecta los sistemas de supervivencia biológica, el orden social, la motivación y el manejo de crisis. Un desastre tiene un alto costo en términos sociales, demográficos, económicos y políticos. En esencia, un desastre es una crisis social. Curson (1989), indica que “los desastres se refieren a la población, cómo sus vidas y actividades son puestas en peligro o cambiadas; cómo los individuos reaccionan ante la crisis, las actitudes que toman, los ajustes que hacen y cómo se enfrentan a los problemas cotidianos de riesgo y vulnerabilidad”. El manejo de la crisis asociadas a desastres, llevado a cabo por el Estado y otras instituciones, pueden aliviar o agravar las consecuencias de tales eventos. En esencia, entonces, el desastre es un fenómeno social y tiene que ser abordado en términos sociales. Es importante señalar que la literatura sobre desastres identifica cuatro fases en el manejo de la situación: mitigación, preparación, respuesta, y recuperación o reconstrucción. El aspecto más importante es, precisamente, la etapa de reconstrucción que implica educación y entrenamiento de todas las organizaciones involucradas en el proceso. Este capítulo espera cumplir con un doble objetivo. En primer lugar, brindar una serie de herramientas conceptuales para la elaboración de un Plan de Reconstrucción y, en segundo lugar, proporcionar un conjunto de estrategias para la apropiación y aplicación en el abordaje de una crisis. 95 PROPÓSITO: Brindar aportes conceptuales y estrategias para la elaboración de un plan de reconstrucción y el abordaje de una crisis. Unidad IV: Preparándonos para la Reconstrucción APRENDIZAJES: • Incorporación de las limitaciones, amenazas, recursos y oportunidades individuales y colectivas para elaborar un plan de reconstrucción. METODOLOGÍA: Utilizaremos técnicas de dinámica de grupos, que motiven y faciliten aprendizajes significativos. CONTENIDOS: • • • • • • • 97 Limitaciones propias de una crisis. Amenazas externas. Recursos individuales, familiares y grupales. Pareja y familia Amistades. Grupos sociales. Comunidad. Plan de Reconstrucción. UNIDAD IV PREPARANDONOS PARA LA RECONSTRUCCION OBJETIVO GENERAL: Acompañar el proceso de reconstrucción con un enfoque sistémico, analizando las limitaciones, amenazas, recursos y oportunidades individuales y colectivas. OBJETIVO ESPECIFICO N°1 Identificar las principales limitaciones propias de una crisis y sus manifestaciones, en los afectados. CONTENIDOS: Limitaciones propias ante una crisis: Falta de recursos materiales. Falta de conocimientos y experiencias. Problemas emocionales y psicológicos no resueltos. Problemas de salud. ESTRATEGIAS: Presentación por parte del facilitador de una pequeña definición del LARO, a fin de que los participantes tengan una noción de lo que se va a trabajar. Reflexión individual: cada participante selecciona una situación personal que le haya generado una crisis, y en base a ella anota la descripción de lo que observó a su alrededor, las reacciones que se manifestaron en su cuerpo, las interpretaciones que extrajo de la situación y las decisiones que tomó en torno a ella (desarrollo del ORID.) Discusión en pequeños grupos: se conforman grupos de 5 ó 6 personas para discutir los resultados individuales del ORID, resaltando cuales fueron las limitaciones presentes en esa situación. Síntesis y puesta en común: un representante de cada grupo registra las limitaciones que enfrentó su grupo, para ser compartidas en plenaria. OBJETIVO ESPECIFICO N°2 Reconocer las amenazas externas que dificultan la elaboración de un Plan de reconstrucción. CONTENIDOS: Amenazas externas: La inseguridad o violencia social. 98 Relaciones familiares y sociales destructivas o estancadas. Hábitat hostil. Exceso de competitividad. ESTRATEGIAS: Discusión en pequeños grupos: se continúa trabajando con los grupos conformados anteriormente. Cada persona destaca las amenazas externas que cada uno enfrentó en la situación de crisis que le tocó vivir. Síntesis: un representante de cada grupo registra las amenazas que enfrentó su grupo y las expone al colectivo. OBJETIVO ESPECIFICO N° 3 Señalar actitudes individuales, familiares y grupales que facilitan el abordaje de una crisis. CONTENIDOS: Recursos individuales, familiares y grupales. Creatividad. Inteligencia. Experiencias y conocimientos. Actitudes específicas. Salud Sentimientos. Espiritualidad. ESTRATEGIAS: Discusión en pequeños grupos: Se continúa trabajando con los grupos conformados anteriormente. Cada persona resalta cómo abordó esta situación y qué actitudes personales, individuales y grupales se manifestaron en cada caso. Síntesis : Un representante de cada grupo registra los recursos que observó en sí mismos y en los demás y los socializa en el grupo mayor. OBJETIVO ESPECIFICO N° 4 Reconocer los factores externos que representan oportunidades para la elaboración de un plan de reconstrucción. 99 CONTENIDOS: Pareja y familia. Amistades. Grupos sociales. Comunidad. ESTRATEGIAS: Discusión en pequeños grupos: se continúa trabajando con los grupos conformados anteriormente. Cada persona resalta las oportunidades externas que pudo aprovechar de alguna crisis vivida. Síntesis : un representante de cada grupo registra las oportunidades que observó y vivió en dicha situación. Puesta en común: la persona que ha llevado los registros en cada grupo presenta en plenaria los resultados de su trabajo. Aportes del facilitador: partiendo de las conclusiones de cada grupo, el facilitador refuerza los contenidos del LARO. OBJETIVO ESPECIFICO N° 5 Facilitar el proceso de reconstrucción individual y colectivo, desde las diferentes dimensiones. CONTENIDOS: Cuidado de la dimensión física. Cuidado de la dimensión psíquica. Cuidado de la dimensión social. Cuidado de la dimensión espiritual. ESTRATEGIAS: Dibujo individual: Cada participante en una hoja blanca se dibuja a sí mismo, identifica y ubica en su cuerpo las diferentes dimensiones: física, psíquica, social y espiritual. Cada área debe ser trabajada por separado, describiendo cómo se encuentra cada una de ellas en este momento: qué se quiere cambiar, qué se necesita para lograrlo, qué compromisos se asumen y en cuánto tiempo se quiere lograrlo. Seguidamente se escriben en una hoja los compromisos que asumirá cada participante, con la finalidad de verificar su cumplimiento. Elaboración de una maqueta: En equipo se construirá una maqueta de la comunidad que se quiere tener en 5 años. 100 Cada participante debe ubicarse en esa comunidad, resaltando cómo se ve insertado dentro de la misma, cómo se ve físicamente, psíquicamente, socialmente y espiritualmente, qué actividades se ve realizando, con quien las está compartiendo. En grupo discutan que acciones deben emprender para lograr esa comunidad que desean y en cuanto tiempo quieren lograrlo, destacando las responsabilidades de cada uno y cuando le van a iniciar las actividades. 101 LECTURAS COMPLEMENTARIAS LIMITACIONES Y AMENAZAS PROPIAS ANTE UNA SITUACIÓN DE CRISIS: LIMITACIONES Limitaciones están referidas a los procesos internos de una persona, que limitan o inhiben su desempeño normal y el logro de sus metas u objetivos. Dentro de estas limitaciones se encuentran: 1. - Falta de recursos materiales, relacionados con la pérdida de vivienda, de empleo, mascotas y cualquier tipo de objetos y enceres de su propiedad. El o la sobreviviente necesita aceptar la realidad de la pérdida y admitir este dolor, además debe encontrar nuevas vías para canalizar la energía emocional que había invertido en las relaciones con las personas muertas o desaparecidas, así como con los objetos. La reacción ante una pérdida suele ser inmediata, aunque en algunos casos las reacciones aparecen después de seis meses, a esto le llamamos "duelo congelado". Las reacciones normales en niños y adultos suelen ser: tristeza, llanto fácil, irritabilidad, agresividad, dificultad para conciliar el sueño, dificultad para dormir durante toda la noche, dificultad para levantarse por la mañana, falta de apetito, falta de interés, desgano generalizado. Existen otras reacciones que deben llamarnos la atención, ya que son síntomas de un proceso de duelo que se está llevando a cabo de forma dificultosa. Entre estas reacciones tenemos: culpabilidad por lo que hizo o dejó de hacer, ideas de muerte, pensamiento de que nada vale la pena, pérdida de interés por el mundo exterior, alucinaciones. 2. - Falta de conocimiento y experiencia: Como consecuencia de la falta o escasez de investigaciones sobre los efectos psicosociales generados por situaciones de desastre natural, lo que genera una necesidad de conocer acerca de los duelos de pérdidas sucesivas y el abordaje de los mismos, lo cual en nuestro país hasta el momento estuvo rezagado. Es importante señalar, la escasez de investigaciones en nuestro país, sobre efectos psicosociales de experiencias en desastre natural 3. -Problemas emocionales o psicológicos no resueltos: Muchos de las actitudes y conductas, tanto personales como colectivas, de alguna manera están relacionadas con traumas psicosociales acumulados, mal elaboradas o no resueltos, entre estas tenemos: Fatalismo Relacionado con una visión de desgracia permanente. Falta de iniciativa y desmotivación Dificultad para relacionarse con los demás en la búsqueda de soluciones. Se irrespetan los derechos de otros o no se exigen los propios. Pasividad 102 Despreocupación por los problemas Manifiesto en apatía o desinterés por todo lo que rodea a la persona, muchas veces expresadas por el deseo de sociales permanecer inactivo. Presencia de sensibilidad o irritabilidad marcada que Violencia familiar generalmente desencadena en violencia doméstica. Por lo que pudieron haber hecho o dejaron de hacer. Los sobrevivientes se llenan de culpabilidad sin ser culpables de nada. Se pueden sentir culpables de haber sobrevivido (mientras otros murieron), de no haber rescatado a otros, de tener cosas que otros sobrevivientes no tienen, de no haber tratado mejor en vida a las personas ya Autocrítica y culpabilidad desaparecidas. Aparecen sentimientos de falta de aceptación de lo sucedido y pensamientos como " debo de estar teniendo una pesadilla". El impacto y la negación causan problemas para la toma de decisiones, y la concentración. Pequeñas decisiones se ven como grandes tareas. Las personas Resistencia mediante la negación, o afectadas, frecuentemente fantasean para evadir la realidad de la situación. Un poco de esta fantasía no está mal, pero la huida del dolor negación excesiva puede eventualmente bloquear importantes decisiones de la vida. En algunos casos justifica la omisión, sin embrago el pasado tiene que ser una referencia de los obstáculos a Vivir en el pasado superar. Es el profundo pesar por lo perdido y por la situación en la que se quedó el individuo, la familia y la comunidad; se experimenta en "oleadas" que surgen al pensar o al hablar acerca de la tragedia, al recibir el pésame o al suceder Tristeza cualquier otra cosa que evoque en las personas la memoria de lo perdido. Rabia Actitudes violentas o destructivas (personales y con los demás) Temor o miedo Vergüenza Contra: la naturaleza, la apatía de los demás, el destino, la suerte, la situación actual, la injusticia de todo, la falta de comprensión de otros y hasta con Dios. Irrespeto a los derechos propios y ajenos. Amenazas o intentos de suicidios Por un futuro incierto, sin las personas o los bienes perdidos. Este sentimiento es agravado por el temor constante a una posible repetición de la tragedia. Es común para las personas, sentirse avergonzadas y con pena de aceptar ayuda. Pueden pensar: "yo debí de haberme hecho cargo de mi persona y de mi familia". Lo que están olvidando, es que el desastre nos vuelve impotentes para hacernos cargo de nosotros mismos o de los demás. 103 4.- Problemas de salud, están vinculados a enfermedades o síntomas presentes en las personas antes de la tragedia, generados o agudizados por esta. Estas reacciones son parte del proceso de sanidad y son necesarias para la restauración del equilibrio, sin embargo se tornan alarmantes cuando su manifestación se extiende por un periodo de tiempo mayor de lo previsto. Falta de apetito y desgano para ingerir alimento. Cambios de hábitos alimenticios. Fatiga. Debilidad. Vómito. Desmayos Mareos. Contracciones Musculares Dolores Musculares. Dolor de estómago Diarreas. Náusea. Dolores de pecho o cabeza Temblores Musculares Dificultad para respirar Taquicardia Aumento de la presión sanguínea. Pérdida de sueño. Cambios en los patrones de sueño. Cansancio extremo. AMENAZAS: Son aquellos fenómenos existentes en el contexto que pueden constituirse en obstáculos que frenan el logro de los objetivos 1.- La inseguridad o violencia social La violencia social es una forma de agresión que está diferenciada de otras formas de agresión por la gravedad del hecho que se comete. La misma está relacionada con factores biológicos, económicos, emocionales, sociales y culturales. Toda violencia es agresiva, pero a su vez toda agresión no es violencia. Los factores principales de violencia son: incertidumbre, hacinamiento, precarias condiciones económicas, la dinámica y las normas de convivencias poco claras. Que se transforman en: Violaciones Saqueos a viviendas y sitios de abastecimientos. Abusos de autoridad y poder Linchamientos Vejaciones Privaciones del libre tránsito. Ajusticiamientos 104 Cobro de peaje por el uso de servicios básicos como el agua La conducta violenta es esencialmente aprendida y la familia, la cultura, la sociedad son fundamentales en esto. Si una sociedad tiene valores violentos, producirá conductas violentas. Hay muchos ejemplos de esto; pero también hay ejemplos de sociedades no violentas, sin embargo son sociedades aisladas, esos que se llaman pueblos ágrafos, en los cuales no existe la conducta de agredir intencionalmente de manera deliberada para causar daño y producir resultados de interés a otras personas. Por lo tanto es posible que no haya violencia, aun cuando tengamos la capacidad de ser violentos. 2.- Relaciones familiares y sociales destructivas o estancadas: Ante un trauma, los valores y normas organizadoras de la vida cotidiana de los individuos, de las familias o grupos comunitarios, frecuentemente se derrumban y las personas empiezan a operar en un vacío existencial. A veces abandonan hasta las creencias espirituales más sagradas y las normas morales o éticas más importantes que tenían antes del trauma. También, a un grado u otro, se desorganizan en cuanto al cumplimiento de sus actividades y obligaciones rutinarias. Expresándose en: Desarticulación de las relaciones familiares, sociales y comunitarias. Opinión de familiares, amigos u otras personas allegadas o no, que emiten juicios de lo que hubiese sido mejor (muerte de las personas que han quedado incapacitadas.) Constantes quejas respecto a que nada mejorará. Pérdida masiva de las redes sociales, bien por muerte de las personas con quienes se relacionaban las víctimas anteriormente o por la reestructuración forzada por la reubicación. Irritabilidad antes situaciones familiares o laborales que anteriormente pasaban desapercibidas, como los juego de los niños, algunas acciones de compañeros de trabajo etc. Distanciamiento emocional de los colegas y amigos. Impaciencia. Disminución en la calidad de las relaciones personales Disminución de la comunicación con los amigos. Conflictos con los equipos de trabajo. Perdida de la prioridad de las necesidades propias. Incumplimiento de compromisos asumidos con de familiares y amigos. Pérdida del interés o apetito sexual. Alteración relacional: Aislamiento. 3.- Hábitat: Generalmente el proceso de urbanización está acompañado en la mayoría de las ciudades de América Latina por una segregación social y espacial, manifiesta en las extensas áreas ocupadas y desarrolladas por pobladores de escasos recursos, en condiciones ambientales deficitarias, las cuales surgen como respuesta a: Elevado costo de las viviendas adecuadas en zonas urbanas y el bajo poder adquisitivo, conlleva a las familias a acceder a terrenos y construir sus viviendas en zonas de alto riesgo, como laderas empinadas, márgenes de quebradas, o zonas sometidas a riesgos, etc. Generando agudos problemas sociales, económicos, culturales físicos y ambientales. 105 Escasa participación en la toma de decisiones y el uso irracional de los recursos, la adopción de medidas que pueden no considerar las necesidades reales de la población. La incapacidad del estado para eliminar el déficit de viviendas y afrontar el mejoramiento urbano, generado por una carencia de planes de desarrollo y procesos de planificación con políticas claras de prevención. 4. - Exceso de competitividad: Es frecuente en las situaciones de desastres o catástrofes se pueden producir algunos problemas sociales, tales como: Liderazgo positivo o negativo. Conductas heroicas y humanitarias o conductas egoístas. Conductas agitadas o pasivas. Conductas sociales, constructivas o conductas destructivas y desorganización social. RECURSOS INTERNOS 1. - Algunas nociones sobre la Creatividad. Según Graciela Aldana de Conde(1988), la creatividad “es una manera especial de pensar, sentir y actuar que conduce a un logro o producto original, funcional o estético, bien sea para el propio sujeto o para el grupo social al que pertenece”. David Perkins (1988) La creatividad como rasgo individual no es unitaria ( una esencia) o categórica ( se es creativo o no se es), sino que involucra una serie de rasgos contribuyentes, un análisis de los cuales incluye la investigación, estética, el hallazgo de problemas, la movilidad, la capacidad para funcionar en los bordes, la objetividad y la motivación intrínseca. Es la manera de pensar no convencional, dar un uso original a materiales como pintura, barro etc. Usar palabras imaginativamente o vislumbrar soluciones no usuales o nuevas a los problemas. La creatividad está considerada por los psicólogos como un aspecto de la personalidad. Esta supone flexibilidad, cambio, apertura, toma de riesgo, un reordenamiento de “sí mismo” y de los “contextos” que hace que ella persona tenga mayor claridad y fuerza, mayor visión de totalidad. El ser creativo no es un acto aislado, casual, accidental; es, antes que nada, una necesidad del organismo curioso a nivel cognitivo, afectivo, sensorial, fisiológico, neurológico. La vida es un acto creativo, no basta aceptar pasivamente los sufrimientos, los momentos difíciles; en necesario asumir la decisión de vivir la propia vida, creativa y responsablemente. 2. - Inteligencia El término inteligencia se emplea con diferentes significados, no solo cuando es utilizado dentro de contextos culturales distintos, sino aún en el uso diario. 106 Dentro del empleo general se refiere a la comprensión, rapidez, capacidad individual para resolver los problemas planteados por la interacción con el ambiente: esta es la inteligencia como adaptación. Se emplea también con el significado de habilidad para aprender, fijar y al mismo tiempo aplicar lo aprendido a la solución de nuevas situaciones. La inteligencia como característica peculiar de cada individuo, forma parte de la descripción general de su personalidad, y es además uno de los rasgos que en mayor medida la determinan, ya que afecta de forma generalizada a todos los ámbitos del comportamiento. La inteligencia como capacidad intelectual se desarrolla en la infancia. Los niños que crecen en un ambiente familiar estable tienen más posibilidades de desarrollar la inteligencia que los que se ven envueltos en permanentes conflictos emocionales. La Dra. Elaine de Beanport propone un modelo de inteligencia múltiple, el cual proporciona un sistema de libertad mental a cada persona, para que seleccione los procesos que den mejor resultado en sus vidas. A continuación se definen brevemente cada una de estas inteligencias: Tipos de Inteligencia Racional Asociativa Espacial Visual y Auditiva Intuitiva Afectiva Motivacional De los Estados de Animo Básica De los Patrones De los Parámetros Definición Es el proceso por el cual percibimos información por medio de conexiones secuenciales destacando las razones lógicas; la causa y el efecto. Es el proceso que nos permite percibir información por medio de la conexión del azar. Es asociar información. Es el proceso de percibir en imágenes o sonidos. Es el conocimiento directo sin el uso de la razón. Es conocer desde adentro. Es el proceso de dejarnos afectar por alguien o algo; es desarrollar la habilidad de acercamiento a una persona, lugar, cosa o idea. Es la capacidad de reconocer lo que queremos y lo que más nos emociona y poder guiar nuestra vida en relación con nuestro querer y desear. Es saber qué nos mueve a la acción. Es la capacidad de entrar y salir de distintos estados de ánimo que van desde un rango de placer hasta el dolor. Es la capacidad de movernos hacia algo o alejarnos de ello. Es ser capaz de imitar y de inhibir algo o alguien que esté a nuestro alrededor. Es la capacidad de concientizar las huellas que condicionan nuestros comportamientos y desarrollo, aceptándolas o cambiándolas. Es la capacidad de reconocer, transformar y extender los ritmos, rutinas o rituales de la vida. Tú eres el conductor de tu cerebro y los resultados dependen de dónde enfocas. Sabiendo que tienes a la disposición estas muchas inteligencias, puedes empezar a guiar tu vida por tu capacidad de enfocar en la inteligencia apropiada y desenfocarte de las otras. 3. - Experiencia y conocimientos: 107 Teniendo como horizonte un plan de reconstrucción, podría plantearse dos directrices: la experiencia y los conocimientos Usualmente cuando estamos enfrentando una situación de crisis, le dedicamos un tiempo considerablemente mayor a comprender lo que pasó, antes de actuar impulsivamente a partir de la primera idea que se nos ocurra. Aquí la experiencia cumple un papel muy importante, ya que para este tipo de situaciones para las cuales no tenemos respuestas previas, conviene diferenciar tres momentos en el proceso, cada uno de los cuales aporta comprensiones, elaboraciones y modificaciones importantes. Estos tres momentos son: Comprensión de la crisis: Tiene que ver con la recolección de información, el análisis flexible de los puntos de vistas, el análisis de las causas, la priorización de información, la escucha y clarificación sobre el papel que nos toca desempeñar de allí en adelante, el análisis de recursos, en una palabra, una visión amplia y profunda de todos los factores que configuran la situación de crisis. Alejamiento del problema: Consiste en un “olvido temporal” de la situación para explorar en diferentes campos en busca de nuevos enfoques e ideas. Algunos autores denominan esta fase como generación de ideas, pues el objetivo es olvidarse de los lugares comunes y de las soluciones obvias, con el fin de descubrir nuevas relaciones, de encontrar puntos de vistas nuevos. Diseño y puesta en marcha de la solución: Implica definir acciones para cada uno de los factores claves y organizarlas en un plan coherente, que permita visualizar qué hacer, quién lo va hacer, por qué, cómo y cuándo. Se habla entonces que desde ese diálogo con la experiencia, se genera nuevos conocimientos, que se traduce en puntos de vistas nuevos y genera alternativas que pueden ser retomadas y elaboradas dentro de la misma situación de crisis. Desde el conocimiento se adquieren nuevas habilidades, competencias, actitudes. Desapego de aquello que ya no funciona, desprender hábitos, creencias, estilos, incluso información que nos genera sentimientos negativos. Mejora nuestra relación con uno mismo, con nuestros seres queridos. La revisión y continua transformación de lo que hacemos para evitar caer en la rutina y el estancamiento. De allí la importancia de generar nuevos conocimientos desde la experiencia, acompañado de un proceso de cambio, para estar preparados para sumir nuevos retos en la vida. Para reflexionar… “En el ámbito del conocimiento tendemos a identificar cualquier cosa que nos perturba como un problema que hay que resolver, pero al entrar al ámbito del comprender, ya no se trata de plantear problemas y buscar soluciones. En el mundo del comprender no hay problemas, hay transformaciones de las cuales somos parte, sin que nos podamos retirar. Sólo hay problema cuando me desprendo de aquello que identifico como problema. Cuando soy parte de él ya no hay problema sino transformación integral y completa. Y eso tengo que aprender a vivirla y convivirla, para desde dentro ser capaz de influenciar los procesos de transformación, algo muy distinto a resolver problemas” Manfred Max Neef. 4. - Aptitudes específicas: 108 En esta etapa trabajaremos las aptitudes específicas, en el cual el énfasis está dado en percibirlas como herramientas básicas para emprender con responsabilidad nuestra propia vida y la realidad que construimos. En esta mirada, nos convertimos en gestores de nuestro propio proceso de cambio y el contribuir a la transformación de nuestras familias y la comunidad, respetando las individualidades. Estas aptitudes son las siguientes: Asertividad: El termino asertividad, en este contexto, se puede definir como la confianza puesta en nuestra propia persona, nuestras opiniones, en nuestros derechos y en nuestras reclamaciones, es decir, es una firmeza que emana de la propia personalidad, es una autoafirmación personal. Cuando poseemos esa confianza aceptamos sinceramente sentimientos y los expresamos ante los demás de una manera segura y abierta. La asertividad hace que nos hagamos responsables de nuestros sentimientos y que con toda responsabilidad de los demás. Significa que sentimos respeto por los demás, pero también respetamos nuestra propia persona. La asertividad es una forma de conducta normal. Los seres humanos tenemos derechos, opiniones, reclamaciones, etc. Que afectan a otros seres humanos, y en muchas ocasiones la única forma de conseguir que se oigan todas las opiniones, se satisfagan las reclamaciones y se respeten los derechos, el único modo de hacer justicia, consiste en que los individuos levanten la voz y defiendan o exijan todo lo que a su parecer les corresponde por algún motivo. Las personas asertivas tienen la capacidad de reconocer e identificar sus necesidades ha hacerlas saber a los demás con toda confianza y claridad. Aceptan que los demás también tienen exactamente el mismo derecho que ellos a hacerse valer. Por ese motivo, presentan sus ideas o reclamaciones con toda cortesía y escuchan con el mayor respeto las reclamaciones que les presentan los demás. Comparación entre comportamiento pasivo, asertivo y agresivo Pasivo Permite a otros elegir por él. Poco sincero. Inhibido, autonegativo, Características indirecto. En situaciones de ganapierde. Si alguna vez consigue o que desea, es siempre indirectamente. Angustiado, desvalido, manipulado, sin ninguna Sentimientos en la importancia. Más tarde: enfadado con uno mismo relación y con los demás. Otros sentimientos Culpable, o superior. Frustrado consigo en la relación mismo. Poco respetado. Otras visiones de Desconfianza. No saber Asertivo Decide por sí mismo. Sincero, pero cortés. Se respeta a sí mismo, expresa lo que siente de forma directa, clara. Convierte situaciones de gana-pierde en ganagana. Confiado, respetuoso consigo mismo, orientado al objetivo, estimado. Luego: autorrealizado. Estimado y respetado. Agresivo Decide por los demás. Sincero, sin tacto. Directo, expresa lo que siente, se alaba a sí mismo. Mandón. En situaciones ganapierde, gana. Respetado, lleno de confianza. Sabe donde Vengativo, colérico, desconfiado, temeroso. 109 Superior, riguroso, controlado, dispuesto al perdón. Más tarde: posiblemente culpable. Humillado, resentido, a la defensiva, ofendido. uno mismo en la relación Resultado Ideas básicas de esa forma de pensar la posición que ocupa. No se le tiene en cuenta. Otros consiguen sus objetivos a costa de él. Se violan sus derechos. está su puesto. Se consigue todo gracias a negociación adecuada. Se respetan sus derechos y los de todos. No debo Tengo la molestar, ni desagradar a responsabilidad de nadie excepto a mí defender mis derechos. mismo. Respeto los derechos de los demás, pero no respetaré siempre su conducta. Consigue sus objetivos a costa de los demás. Pisoteados los derechos de los demás. Los propios, guardados celosamente. Debo hundir a los demás para protegerme a mí mismo. Dar y recibir: En la medida en que mejoramos nuestra capacidad de escuchar nuestras necesidades, de recibir y descansar, enriquecemos significativamente nuestra capacidad de dar, de aportar, de ser genuinos en la entrega y en el recibir. En otras palabras, habremos comprendido el arte de la reciprocidad, pues ésta es la energía que subyace a esta polaridad. Desaprender y aprender: El desapego a aspectos de nuestra manera de hacer, pensar y ser, ciertamente es uno de los más difíciles de realizar, pero a la vez es el que nos permite asumir una identidad evolutiva, abierta al cambio. La paradoja radica, en la medida que nos desaprendemos, estaremos verdaderamente en capacidad de aprender. De la misma forma que a veces nos cuesta deshacernos de una prenda de vestir, porque era nuestra favorita, o de un espacio físico que por las actuales circunstancias no estamos viviendo, debemos tener el coraje de despedirnos de maneras de pensar, sentir y actuar que en el pasado nos dieron gratificaciones pero que, en determinado momento, nos impiden alzar el vuelo y continuar nuestro viaje de transformación, o lo que es más grave, porque son pautas de comportamiento adictivo con las cuales nos autodestruimos y dañamos la vida de quienes nos rodean. Sinergia: Aceptar las diferencias individuales, a partir del principio básico según el cual cada vez que lo diferente interactúa de manera apropiada, se potencia significativamente la capacidad productiva y el resultado puede llegar a ser infinitamente mayor y mejor que la sumatoria de lo que cada uno lograría individualmente. La sinergia interna se refiere al hecho en virtud del cual, si logramos una adecuada interacción de estas fuerzas múltiples y diversas que conviven dentro de nosotros, sin asumir de manera parcial los extremos aceptados socialmente, sino asumiéndolos de manera integral y completa, el potencial transformador que se genera es increíble. 110 Para reflexionar … “Quizás los dragones que amenazan nuestra vida no sean sino princesas anhelantes que sólo aguardan un indicio de nuestra apostura y valentía. Quizás en lo más hondo Lo que más terrible nos parece Sólo ansía nuestro amor” Rainer María Rilke Motivación al logro: Se refiere, en general, a estados internos que energizan y dirigen la conducta hacia metas específicas. Son pensamientos y sentimientos relacionados con el logro de una meta. Esta aptitud incluye acciones relacionadas con áreas de experiencias que pueden ser básicamente fisiológicas (hambre), marcadamente psicológicas (autonomía), o de claras implicaciones sociales (afiliación, poder, logro.) Trabajar en equipo: Se define como entidad propia y de duración limitada, compuesta por personas con distintas especialidades que persiguen unos objetivos comunes de carácter puntual. Esta aptitud es una gran oportunidad para estimular: La responsabilidad La participación. Proponer mejoras para simplificar y facilitar el trabajo; optimizando el resultado. Potenciar el ambiente familiar y comunitario. Solucionar los problemas comunes de forma coordinada y propiciar la “sinergia grupal”, que anime la creatividad, la generación de ideas y la originalidad de las soluciones. Conciencia de unidad. Reconocimiento de las potencialidades. Reconocimiento de destrezas comunes. Respeto y confianza. Delegación de funciones. 5. - Salud Superación del estrés: El estrés puede ser controlado. Es posible reducir el estrés excesivo y toda persona es capaz de manejar sus reacciones de estrés. La persona puede adiestrarse mejorando determinadas facultades que le ayudarán a identificar sus potenciales factores de estrés y modificar sus perjudiciales reacciones ante él sin el empleo de pastillas, cigarrillos, alcohol u otras drogas. Una vez que la persona posee esos conocimientos y facultades, estará en capacidad para manejar cualquier situación de estrés que se le presente, pero, además, sabrá como evitar el estrés excesivo impidiendo que aumente y se desarrolle desde el primer momento. Para superar el estrés se necesita desde el inicio adoptar una actitud positiva, optimista. Pero a nadie sé le exigirá que se adapte, amolde, integre o cambie su propia personalidad para satisfacer a los demás. 111 Al contrario, en este enfoque para la superación del estrés, el personaje principal es la propia persona sometida a estrés; en ella se enfoca todo el cambio. Tampoco se intentarán vanalizar ciertos factores estresantes que afectan a la persona. Si algo le molesta o le preocupa, será estudiado con la máxima atención, por mucho que para otras personas aparezca como una nimiedad sin importancia. De manera que lo más importante es que la persona no se subestime a sí misma. Nadie debe sentirse imperfecto o inferior porque aparentemente reaccione con más intensidad ante el estrés que las personas que le rodean. Simplemente, puede ocurrir que esas otras personas reaccionen de una manera menos aparente. Es necesario generar y desarrollar una actitud optimista, positiva. Con ella, el estrés puede ser superado. Están en juego la salud y el bienestar de la persona, y ambas merecen que se realice el esfuerzo. a) Requisitos básicos: Los requisitos fundamentales para superar el estrés son conciencia, aceptación, responsabilidad y facultades suficientes para superarlo. En primer lugar, debemos conocer lo indicadores que señalan la presencia del estrés, ser conscientes del nivel de estrés que padecemos, de los aspectos de nuestro carácter que pueden estar relacionados con el estrés, y conocer las causas de nuestro estrés y saber las maneras de superarlo. Y es importante, porque la falta de esa conciencia es en parte la culpable de que las enfermedades relacionadas con el estrés se hayan generalizado tanto. Es fundamental que hagamos un esfuerzo para saber y ser conscientes de lo que ocurre a nuestro alrededor, lo que nos ocurre a nosotros y lo que ocurre en nuestro interior. El segundo paso para un cambio positivo es la aceptación de sí mismo. Lo que somos ahora es el resultado de todas las experiencias de nuestra vida. Siempre es posible cambiar, pero hay que partir de la base de que los cambios importantes no se producen en un instante. No debemos juzgarnos a nosotros mismos con demasiado rigor; aceptar o que somos y quiénes somos es un paso esencial. Por último, debemos conocer que la responsabilidad de realizar los cambios es nuestra y sólo nuestra. Cualesquiera que sean los factores estresantes, una oficina bulliciosa, un jefe autoritario, un matrimonio desgraciado, un apartamento poco confortable, nosotros mismos tenemos la capacidad para iniciar y fomentar los cambios que necesitamos. No debemos culpar al destino, ni a nuestro padre, ni a la General Motors, por nuestro estrés. Seamos responsables. Actuemos, cuando la persona empieza a superar el estrés, se le presentarán oportunidades para unirse a otras personas y cambiar las fuentes de ese estrés. 6.- Sentimientos: Ante alteraciones adversas, donde la mayoría de las personas sucumben, se encuentran algunas que actúan como si tuviesen un antídoto ante la adversidad. Estudios psicológicos realizados en diferentes partes del mundo han evidenciado en estas personas la presencia de factores que los hace resistentes a la negatividad ambiental, (los norteamericanos lo han denominado “resitience”), que los protege de la acción devastadora del medio ( aquí, en Venezuela los denominamos “protectores”.) Se definen factores protectores: aquellos que modifican o mejoran las respuestas a condiciones ambientales dañinas, las cuales presuponen resultados favorables. 112 Los mismos se clasifican a nivel: Personal: - Poseer un temperamento positivo - Tener un buen rendimiento intelectual. - Autoeficiencia. - Alta autoestima. - Participación en actividades diversas. Familiar: - Buena relación con uno o ambos padres. - Buena comunicación familiar. - Familia unida y respaldadora. - Normas y reglas adecuadas bien establecidas en el hogar. - Contar con una familia. Social: - La amistad (confidentes) - Grupo de pertenencia. - Contar con guías - La religión y la Fe. Si analizamos estos factores, encontramos que son válidos como base para afrontar situaciones negativas y que muchas veces contamos con ellos pero no le hemos dado su valía, así es conveniente desarrollarlos y hacer uso de ellos en situaciones de crisis. Partamos del hecho que la CRISIS: debe ser vista como una oportunidad de actuar y progresar. Para ello es necesario partir: ¿Con qué cuento? Mis conocimientos, mi experiencia, mis habilidades, mi familia, mis amigos, mis compañeros de estudio o trabajo, mis vecinos, mis guías, mi comunidad, mi país, mi religión, mi fe y lo más importante YO ESTOY VIVO, y cuento con todo este apoyo, ellos creen en mi. Así que “puedo “ hacerlo “yo puedo superar esta crisis”. Y, ¿Cómo lo hago? ¿Qué es lo positivo de esta situación? ¿Qué me esta planteando? ¿Cuál es la oportunidad que se me está ofreciendo? ¿Cuándo me acerca esta oportunidad a lo que siempre he querido?. Las respuestas a estas preguntas me van dando un impulso para dejar el papel de víctima y sumir el protagonismo en la situación (yo puedo – yo decido – yo actúo.) ¿Y si fallo, si fracaso? No importa, yo actué, no me quede esperando que surgiera la solución como por arte de magia, yo la facilito, y de todas maneras, siempre puedo corregir el error eso me acerca más a lo que “yo quiero, lo que yo decidí”, y no estoy “a merced de lo que otros decidan por mí”. Además, en mis momentos de debilidad puedo reunir a: mi familia, a mi amigo, a mi guía, algunos de ellos me dará el sostén, apoyo y aliento necesario para seguir. A ellos puedo manifestarle mis miedos, mis temores y mis esperanzas, y ellos podrán darme el abrazo que necesite en ese momento. Y en caso de que no lo encuentre allí, o no me alivie, siempre tengo mi religión, mi fe, las cuales son para mí una poderosísima protección, que siempre me está cuidando y ayudando para seguir porque (en quién yo crea), me ama y me sostiene y por eso estoy aquí por algo sobreviví. 113 Esta podría ser la guía de pensamientos de una persona que cuenta con estos factores en una situación de CRISIS, no necesariamente los tendrá todos, pero si es así puede buscarlos, y apoyarse en los que tenga a la mano, lo esencial es actuar para salir de esa situación, no quedar paralizado por el miedo, por el “pobre de mí”, allí la solución de tú situación queda a capricho de otros. Recuerda tú decides: ser víctima o ser protagonista de tu futuro, es tú decisión la que cuenta. 7. - Espiritualidad: El estar en contacto con la naturaleza, el sentir profundamente sus cambios de humor, experimentar plenamente su hechizo, saber cómo funcionan las cosas llamadas inanimadas, todo ello equivale a quedar prendados de la espiritualidad y divinidad de todas las cosas. El hecho de que plantemos una semilla y se convierta en una flor, compartir un fragmento de conocimiento y que se convierta en algo de otro, sonreír a alguien y recibir a cambio una sonrisa, todo eso, no es otra cosa que continuados ejercicios espirituales. La espiritualidad implica una conciencia de cuanto existe, y una apertura hacia lo que no existe. Es la fuerza y la intrepidez para permitirnos trascender la realidad y a nosotros mismos. Los individuos funcionando de modo pleno, saben que es esta magia lo que le da su sabor a la vida, lo que erradica el aburrimiento y eleva la existencia más allá del espacio y del tiempo. OPORTUNIDADES 1. - La familia: Constituye un microsistema funcional sujeto a leyes y reglas que responden a una necesidad interna de perpetua adaptación y refleja, a su modo, la realidad externa a cuyas necesidades se adapta. Es una institución determinada por necesidades biológicas y sociales. Biológicamente, su función es reproducir y perpetuar la especie. Socialmente, su función es preparar a sus integrantes para la vida en sociedad y su adaptación al medio. Como núcleo central de la sociedad y principal agente socializador y por ende protector, tiene responsabilidad primaria en la formación del individuo. Es conveniente que la familia propicie la participación de todos sus miembros en un proyecto de vida familiar compartido, en le cual se definan claramente objetivos, metas, valore y normas. En un ambiente familiar de aceptación y respeto, comunicación sincera, con limites y normas bien definidas, particularmente tolerante y comprensivo, donde las exigencias se correspondan con la capacidad de cada uno y los padres ejerzan adecuadamente la autoridad y brinden afecto, se facilitará la formación de una buena autoestima en los hijos, lo que les ayudará a enfrentar las dificultades con mayor firmeza. 114 2. - Grupos Sociales Las personas que tienen familiares y amigos que les prestan apoyo y las animan se restablecen mejor. El sistema inmunitario funciona con mayor eficiencia y efectividad cuando hay apoyo social. Beneficios: Integración al ambiente social, proporcionando mayor bienestar: psicológico, familiar, laboral, escolar y social. Aceptar la protección: Está bien que otros te cuiden por un rato. Acepta la comprensión y la protección de tus amistades, tus parientes, tus compañeros y tus compatriotas. Tu herida emocional es real, debilitante y dolorosa; está bien que te protejan. Sé tan valiente que puedas aceptar la protección y la ayuda de otros. ¿Quiénes te han ofrecido algún tipo de protección hasta ahora? Pedir apoyo: No temas pedir lo que necesitas. Es lo más humano que puedes hacer Movilízate a tus otros familiares y amigos a colaborar con ustedes. No te olvides del mejor apoyo que existe: el que puedes conseguir a través de la oración y de la comunicación con Dios a través de la Biblia. ¿Qué puedes pedir y de quién? 3. - Comunidad Se entiende por comunidad la agrupación de familias o grupos de familias que ocupan espacios cercanos y se relacionan, con la finalidad de enfrentar sus problemas y satisfacer necesidades comunes o particulares. Las comunidades tienden a organizarse con el objeto de resolver sus necesidades y, de esta manera, mejorar sus condiciones de vida. La posibilidad de organizarse se manifiesta en el momento en que se presentan necesidades o aspiraciones que no han sido satisfechas y que no tienen una solución a corto plazo a partir de la simple acción individual. La organización es un instrumento de vital importancia para que la participación sea una realidad. Si la sociedad no cuenta con redes organizativas se hace muy difícil enfrentar la crisis. Las formas organizativas constituyen instancias ideales para fortalecer: Intereses comunes. 115 La ejecución de iniciativas y/o propuestas a partir de las cuales se establecen relaciones de: interlocución, cooperación, de negociación; con distintos actores de la sociedad y del Estado. El diagnóstico de su realidad, identificando sus problemas y planteando las soluciones más acordes a su realidad. Planes y proyectos para mejorar sus condiciones de vida. La distribución de los recursos humanos y financieros de manera más eficiente. La toma de decisiones 4. - Trabajo comunitario Adicionalmente, mediante la organización es posible promover acciones colectivas que traduzcan las aspiraciones y deseos de sus miembros. Esta promoción de acciones colectivas conduce a fortalecer lo que se denomina trabajo comunitario. En efecto, el trabajo comunitario es la acción que se realiza en el seno de las comunidades concretas, de allí surgen las primeras iniciativas para la movilización, se circunscribe a un ámbito y espacio determinado e incorpora la participación de las personas e instituciones que habitan ese espacio para luego trascender de lo local a acciones más generales para consolidación de los grupos sociales. Los objetivos que se plantean el trabajo comunitario responden a tres dimensiones consideradas como básicas para cualquier propuesta que busque producir una transformación permanente. Estas dimensiones son las siguientes: Dimensión productiva: No se logran los cambios si antes no se conquista la superación de los problemas inmediatos. Responde a las necesidades sentidas en la búsqueda de reivindicaciones básicas. Se hace presente en la medida que las experiencias son exitosas y ofrecen alternativa real (ganancias) para las personas que participan en ellas. Dimensión Organizativa: Es el esfuerzo común para lograr que la comunidad incida directamente sobre su propia realidad, es el resultado de la generación y promoción de espacios en los cuales las personas puedan encontrarse, discutir, fijar y trabajar por objetivos y metas comunes. Dimensión formativa: Las comunidades deben comprender las causas de sus problemas para buscarle soluciones. La necesidad de organización es asumida como una herramienta para la solución de problemas y como un espacio para las personas que están en su misma condición. Existe la percepción de compromiso personal, identificación afectiva con proyectos y personas. Ubicación de la importancia que tiene la participación, el aporte. Sólo de esta forma se es protagonista. Esta dimensión permite crear espacios para conocer otras experiencias y problematizar la propia; del análisis, discusión e información de acciones futuras. 116 Lecturas Complementarias Lectura 1 LA CULTURA DE LA PREVENCIÓN La construcción de una cultura de la prevención es una labor de largo plazo, en la que deben comprometerse todas las fuerzas vivas del país, sean del orden político, educativo, económico, religioso, técnico o institucional. Sin duda alguna, hay factores de carácter estructural como la pobreza y la desigualdad, la dependencia externa o la ignorancia, que dificultan la generación de esta cultura pero que no pueden constituirse en disculpa para nuestra impreparación e indefensión con la que estaremos elevando la vulnerabilidad del grupo social. Para lograrlo, se deben conjugar por lo menos siete factores: Proceso formativo que lleve a la comunidad al conocimiento científico de los fenómenos naturales que pueden desencadenar desastres colectivos: qué son, por qué se presentan, cuál ha sido el comportamiento histórico, cuáles los riesgos y cuáles las amenazas de terremoto, erupciones volcánicas, fenómenos hidro meteorológicos, deslizamientos. Proceso de investigación acción sobre los rasgos culturales de las comunidades con mayores amenazas, sus vulnerabilidades y potencialidades frente a posibles desastres y el desarrollo de habilidades para prevenirlos y afrontarlos. Proceso educativo para la formación de valores frente a las relaciones con la naturaleza, el medio ambiente, los ciclos ecológicos, valores socio políticos, que faciliten la organización y participación comunitaria, la autonomía política. Desarrollo de una responsabilidad social de los medios masivos de comunicación tanto en aspectos preventivos como de información en caso de desastres. Diseño de un modelo de participación comunitaria que permita a la población usuaria apropiarse del proceso de planeación para prevenir, atender y recuperarse de las situaciones de emergencia. Organizar una estructura de respuesta a través de comités operativos locales que ofrezcan seguridad a la comunidad de que en caso de una emergencia se tendrá una respuesta efectiva y eficiente. Establecer un sistema de prevención técnica que incluya redes sísmicas nacionales, monitoreos volcánicos, vigilancia hidrometeoro lógica, vigilancia de represas, incendios y riesgos químicos. El sistema debe incluir subsistemas de comunicación e información que se constituyan en canales para la construcción de la cultura de la prevención. Debe la comunidad elaborar su análisis de vulnerabilidad y el plan de emergencia, los cuales al ser agregados constituirán el plan municipal de prevención. Esto requiere un proceso participativo en el que se lleve a cabo una fase de recuperación crítica que les permita construir sus propios mapas de amenaza asesorados por expertos en el área. Calderón Hernández Gregorio E-mail:gcaldero@nevado.manizales.unal.edu.co 117 LECTURA 2 ¿POR QUÉ SOMOS VIOLENTOS? Psicólogos, antropólogos, médicos, sociólogos, psiquiatras no han llegado a un acuerdo tan sencillo. Si hay algo complicado es la génesis de la violencia. Sigmund Freud decía, todos los seres humanos nacemos con un instinto de muerte que nos lleva a ser agresivos y a causar el daño a uno mismo y a personas u objetos. Lorens (Biólogo) decía, que había una urgencia natural a la violencia en los seres humanos. Esa especie de predisposición, ese carácter innato de la violencia, esa necesidad podía dispararse en algunos momentos. En los años 60 una corriente, la socio-biología comienza a trabajar algunas hipótesis sobre la violencia y llegó a la siguiente conclusión: los seres humanos somos los robots de los genes, es decir, nosotros seríamos unos parapetos construidos por genes, lo único que le interesa a un gen es seguir viviendo y la única manera para seguir viviendo es la reproducción. En el camino para la mejor reproducción se aplica todo desde casarse por dinero, aplastar a otros, etc. Estos señores además nos dicen que un gen que está en el nivel socioeconómico bajo de una población tarda tres (3) generaciones para llegar al nivel socioeconómico alto, si es un gen fuerte. Esta corriente nos deshumaniza y reduce nuestra capacidad de razonamiento, de distinción, de acción, de intervención y de modificación de las circunstancias tanto internas como externas y en las cuales estamos inmersos. Esta teoría igual que la de Lorens y la de Freud tienen muchas contradicciones. Un grupo de psicólogos entre ellos Dollard, Doob y Miller (1939) planteaban: lo que ocurre es que hay una relación de la violencia con la frustración, algo de razón hay en ello. Si no podemos realizarnos nos sentimos frustrados, si nos reprimen, nos tan, nos produce una gran frustración y nos da rabia y sentimos disgustados. Alrededor de 1960 otro autor Leonard Berkowitz nos dice que hay una capacidad innata para la violencia, todo el mundo tiene la capacidad de la violencia; pero es necesario aprender las respuestas violentas de la sociedad. Si a la persona se le enseña no tendrá una conducta violenta. Es necesario aprender y el problema es que el aprendizaje no es formal: violencia I, II y III, o clases de violencia de 3 a 5 pm. La violencia la aprendemos en todos los hechos cotidianos, en los medios de comunicación de masa, televisión, en el cine, etc. Lo importante de este tema es que una de las causas de la violencia es ese aprendizaje y el reforzamiento, la recompensa que tienen las conductas violentas en la sociedad. Ponencia de la Dra. Maritza Montero. Foro “Organización Comunitaria y Violencia”. Centro al servicio de la acción Popular.Caracas.1992 118 LECTURA 3 PROBLEMAS DE SALUD MENTAL EN DESASTRES El desastre señala compromisos de los integrantes de una población, tanto individuales como colectivos, al alterarse súbitamente todas las condiciones de vida cotidiana, donde son afectadas física y psíquicamente por pérdida de la integridad orgánico-psicológica, además del daño en lo que representa la seguridad para el individuo o la comunidad, como es el trabajo, la vivienda, sistemas de recreación e integridad socio cultural. En el campo de la salud mental cobra mayor fuerza la necesidad de dar atención integral a las comunidades y sujetos sometidos a riesgos de enfermedades mentales, dadas, precipitadas o agravadas como consecuencia de una situación de desastre. De esto se deriva que hay necesidad de planificar y ofrecer ayuda al individuo, a la familia y a la comunidad, dándole elementos u ofreciéndole soporte para superar o afrontar la situación de crisis que se ha planteado en su ámbito bio psico social, en procura de devolverle o replantearle su cotidianidad. Frente a los problemas individuales que se presentan luego de un desastre, natural o artificialmente producido, es necesario tener en cuenta: la personalidad previa del sujeto la edad, sexo, estado civil y posición económica los mecanismos de defensa y adaptación que utiliza el individuo para hacer frente a los problemas. La intensidad de la fuente de estrés, la intensidad de la amenaza y el grado de vulnerabilidad La correspondencia adecuada entre la necesidad individual y los sistemas de apoyo El grado de pérdida personal experimentada La disponibilidad de socorro y recursos comunitarios de asistencia Uno de los problemas más frecuentes en salud mental se presenta en la adaptación, entendida como la discapacidad de un ser vivo para adecuarse a los cambios internos y externos, haciendo difícil superar la crisis o proteger la integridad del individuo, generando procesos de angustia o depresión, trastornos del sueño, conflictos maritales y familiares, ausentismo escolar y laboral. Se entorpece la respuesta a las múltiples demandas de lo cotidiano. La conducta humana es susceptible de adaptación. Hasta un 75 % de la población es capaz de manejar su miedo, evaluar la situación y tomar una acción rápida y eficaz; el 60% sufre cuadros de temor o terror en períodos cortos (una hora) y sólo un 15 % puede requerir de uno a dos días para adaptarse y adecuar su conducta. Es indiscutible el poder de los medios de comunicación sobre los individuos y la comunidad: pueden enardecer, calmar, orientar, educar o conducir una multitud hacia su destrucción, pues a través de ellos se calibra la tensión y reactividad emocionales. Los trastornos mentales que se observan con mayor frecuencia en la población que ha sufrido el impacto de un desastre son: Síndrome postraumático. Cuando a un individuo se le quiebra su cotidianidad y es sometido a una situación tensionante, siendo el suceso claramente superior a su capacidad de manejar sus 119 defensas psicológicas y sus posibilidades de adaptación, entonces presenta síntomas que son leídos como síndrome postraumático. Su ocurrencia se da en relación con un evento tensionante que produce severa ansiedad, trastornos del sueño, disminución de la interacción e interés en el mundo exterior y presenta reexperimentación del acontecimiento traumático. Problemas psicosomáticos. Alteraciones físicas que tienen gran componente psicológico, al sufrir tensión prolongada, presentándose alteraciones del sueño y problemas disfuncionales en cualquier parte de la economía corporal. Depresión y suicidio. Dificultades en el sueño, pérdida del apetito, ideas de minusvalía, pérdida de interés de vivir, trastornos que se reflejan en lo somático y que pueden conducir a intentos de suicidio. Los sujetos que presentan depresión generalmente exteriorizan tristeza, frustración, desánimo, llegando a veces hasta a invalidar al paciente. Trastornos de ansiedad generalizada, relacionada con tensión muscular, sensación de muerte inminente, irritabilidad, trastornos del sistema nervioso vegetativo manifestado en diarrea, sudoraciones, palpitaciones... Reacciones de adaptación. Abuso y dependencia de drogas y alcohol que a su vez incrementan las dificultades de relación, el volumen de accidentes y los actos de violencia. PERIODOS QUE COMPRENDE EL DESARROLLO DE UNA SITUACIÓN DE DESASTRE Las reacciones humanas ante la ocurrencia de hechos traumáticos o desastres se presentan en tres períodos, en cada uno de los cuales se presentan reacciones específicas: pre-impacto, impacto y postimpacto. Período de pre-impacto Se presenta cuando hay probabilidades de que un desastre ocurra. Se subdivide en períodos de amenaza y de alerta. La fase de amenaza se inicia cuando los medios de comunicación alertan a al comunidad mediante mensajes, marcando las expectativas individuales y colectivas, generando niveles de estrés y de ansiedad. La experiencia de cada individuo o comunidad se refleja, de alguna manera, en el comportamiento que asumen durante este período. El estado de alerta de los individuos crece, los informes o noticias masivos juegan un papel importante en el manejo de la vida presente y futura. Período de amenaza: en la esfera psicológica se presenta gran confusión, indecisión para tomar medidas, sensación de impotencia, aumento de la ansiedad en los individuos ante la posibilidad real de un desastre. Las personas pueden hacer negación del riesgo o, por el contrario, presentar actitud fatalista. Hay un estado de intenso sobresalto. Se puede presentar el llamado "mito de la invulnerabilidad personal" que se refleja en la actitud y la creencia de que el suceso no le traerá consecuencias a él o a su familia. Hace referencia a la imposibilidad de que dichos sucesos lo involucren o descarga la responsabilidad de su protección en el gobierno. En la esfera colectiva, a medida que la amenaza se hace patente y es percibida como tal, en las reacciones interpersonales aparecen conductas que fluctúan entre la hostilidad y el más estrecho acercamiento para planificar medidas de apoyo. A veces aumenta el fervor religioso como elemento aglutinante y de seguridad. Período de alerta: Hace relación a la situación de inminencia de que un desastre ocurra. Se pueden presentar cuadros relatados como hiperactividad que bajan la funcionalidad del individuo y lo hacen ineficiente. 120 También puede presentarse la negación manifestada como rechazo de la percepción de la realidad externa cuando hay sentimientos dolorosos o atemorizantes. Período de impacto o choque. Se presentan reacciones psíquicas manifestadas en disturbios psicológicos y en perturbaciones orgánicas. Los cuadros más frecuentes son: Reacciones conversivas: cesación de una función corporal, eliminándose o atenuándose a través del síntoma el sentimiento penoso a través del cual se enfrenta el conflicto psicológico. Pánico individual: se suplanta la capacidad de juicio y hay pérdida del control que el individuo tiene sobre sí mismo, acompañado de otros síntomas psicológicos y somáticos. Hiperactividad: ráfagas de actividad que no llevan a mejorar la funcionalidad del individuo y no son aplicables en pro de la comunidad afectada. Reacciones psicóticas: perturbaciones mentales graves (poco frecuentes) Las reacciones psicológicas y las conductas de supervivencia están muy relacionadas con la personalidad del individuo, el grado de adaptación que ha tenido en experiencias anteriores, el manejo adecuado de las defensas psicológicas y los antecedentes de entrenamiento previo, razón por la cual son diferentes las reacciones individuales y colectivas durante este período. A nivel individual las personas presentan dificultades para adaptarse y hacer frente a la situación. Aumenta la ansiedad, el temor, la preocupación y a veces, el manejo excesivo de la culpa. Puede presentarse entorpecimiento de la capacidad de respuesta, sentimiento de ser el mayormente afectado, desorientación, confusión y dificultad para la toma de decisiones. El miedo es la emoción dominante y ponerse a salvo la mayor preocupación. El pánico se presenta cuando hay imposibilidad para escapar. A nivel colectivo, las comunidades son dóciles a las órdenes de los socorristas y se fortalece la red social de ayuda. Al llegar a un lugar seguro, las víctimas emprenden la organización de auxilios, ayudando a otros damnificados. Período post-impacto En esta fase las víctimas, tanto individual como colectivamente, deben enfrentarse a las contingencias del diario vivir frente a un ambiente que ha cambiado en forma radical, constituidas a su vez por sensaciones de desarraigo, sustentadas en la pérdida parcial o total de su familia, su comunidad, sus recuerdos personales... Se presenta un inventario de las pérdidas emocionales, físicas y socioeconómicas. Se inicia el intento de búsqueda de recuperación de lo que fuera el hábitat de la persona. Pueden presentarse sentimientos de dependencia, pasividad, frustración. Se presentan cuadros de ansiedad, apatía, temor, depresión, indiferencia, impotencia, desesperanza. Sentimientos que conforman lo que se ha llamado el síndrome del derrotismo (que se sufre frente a tensiones intensas.) En el campo de la salud mental cobra mayor fuerza la necesidad de dar una atención integral a las comunidades y sujetos sometidos a riesgos de enfermedad o a enfermedades mentales dadas y precipitadas o agravadas como consecuencia de la situación de desastre. De lo anterior se deriva la necesidad de planificar y ofrecer ayuda al individuo, a la familia y a la comunidad, dándoles elementos u ofreciéndoles soporte para afrontar y superar la situación de crisis que se ha planteado en su ámbito biopsicosocial, en procura de devolverle o replantearle su cotidianidad. 121 Al analizar las descripciones de las reacciones de los individuos ante sucesos traumáticos, se ve una constelación signológica, sintomatológica, que se refleja en los aspectos biológicos, psicológicos, interpersonales y socioculturales del comportamiento que no dan una idea de cómo y cuán profundamente un suceso traumático, que no forma parte de la escala normal de la experiencia humana, afecta al individuo y a su medio familiar, entorpeciendo con ello el presente y el futuro de la comunidad. De esto se deriva la necesidad del manejo de las contingencias por medio de experiencias multidisciplinarias. Reacciones individuales: Se presentan sentimientos de impotencia frente a la pérdida de la cotidianidad, gran sensación de dolor frente a las pérdidas sufridas. A veces el individuo reacciona en forma hostil al verse invadido en su espacio vital y ver reducida su autonomía, lo que reactiva sus conflictos de dependencia / independencia. Algunas personas necesitan tratamiento y hospitalización por problemas mentales graves, mientras otras continúan presentando ansiedad y depresión crónica. Sin embargo, la gran mayoría sume la experiencia y las pérdidas sufridas. Es frecuente la presencia de un aturdimiento psíquico que hace relación al sentimiento de monotonía, desinterés, distanciamiento e indiferencia hacia personas que anteriormente eran importantes en la vida de la víctima. Reacciones colectivas: Se presentan dificultades para mantener relaciones estables, dándose situaciones de hostilidad manifiesta. Se empieza a culpabilizar de su situación al Estado o a otros estamentos. Algunas comunidades, o partes de estas, asumen el papel de víctimas y expresan el sentimiento de tener derecho a todo. A veces estas posiciones alteran y distorsionan las reacciones entre las personas y los sistemas de apoyo. Algunas comunidades continúan presentado dificultades para integrarse. A nivel psicosocial hay gran dependencia y baja iniciativa. La sensación de frustración crece, así como su hostilidad. A nivel colectivo se presenta también el llamado síndrome de desastre que ocurre cuando las personas parecen estar desorientadas, vagan sin rumbo, son apáticas y sin voluntad propia. Presentan como reacciones la sorpresa, incredulidad, miedo, angustia y búsqueda inconsciente de familiares y pertenencias, pasando por una serie de etapas contempladas como trauma, estado de sugestión, estado de euforia y de ambivalencia. Bruno de Lima y sus colaboradores describen los períodos que se presentan en el post-impacto: Período heroico: las personas son llamadas a actuar y desarrollan actitudes heroicas para salvar la vida y la propiedad, aumenta el altruismo y la solidaridad. Período de luna de miel: puede extenderse hasta seis meses después de ocurrido el desastre. Hay fuerte sentimiento de solidaridad, grandes expectativas frente a ayudas externas. Período de desilusión: puede extenderse entre dos meses y dos años. Ante ayudas no concretadas o que las víctimas consideran insuficientes, aparecen sentimientos de frustración, fracaso, rabia, amargura. Se empieza a manifestar en su haber conductual irritabilidad, negativismo, oposicionismo, agresión y actitudes violentas. Es lo que se ha llamado el segundo desastre. Período de reconstrucción: los individuos y las comunidades asumen la responsabilidad de solucionar sus necesidades básicas de vivienda, educación, empleo y salud. Ante este panorama los individuos sienten la necesidad de verbalizar sus vivencias con la esperanza de aquietar sus emociones y como medio de clarificar en lo ocurrido, lo que puede ser agravado por el segundo desastre. 122 Segundo desastre. Erickson ha llamado segundo desastre a las consecuencias de tipo emocional que se derivan de la desorganización social y física de una comunidad destruida por una catástrofe, presentándose cuadros de carácter psicológico o psiquiátrico que obedecen a la incapacidad de hacer frente a todos los cambios sociales que ocurren súbitamente. La desorganización social que sobreviene a un desastre, repercute en un aumento de los ingresos a hospitales por problemas de origen mental. Síndrome de desarraigo. Sensación de aniquilamiento dada por un cambio profundo y repentino que produce pérdida del pasado del individuo y del aquí y del ahora. Sensación de extrañeza ante la pérdida de un sistema familiar, su entorno físico, la alteración de sus expectativas o el cambio profundo de estas estructuras. Se responde a las nuevas y extrañas circunstancias con temor, intensas pesadillas nocturnas, reacciones depresivas y profundos sentimientos de culpa por estar a salvo cuando sus seres queridos han perdido la vida. Puede presentarse un comportamiento neurótico que se presenta como reacción al desastre que comparten por igual víctimas y no víctimas y se observa en que los ingresos a hospitales crecen de manera notable en los años sucesivos. Investigaciones derivadas de estudios realizados en Europa y América Latina han concluido que individuos y familias, por igual, son vulnerables a las reacciones de tipo emocional. La experiencia de Armero obtenida por el grupo de salud mental del Tolima nos enseña que las víctimas de desastres que presentan problemas mentales, se recuperan prontamente entre un 20 y un 25 %, presentan trastornos transitorios de intensidad leve o moderada del 70 al 75% y desarrollan trastornos mentales persistentes o graves entre un 5 y un 10 %. Calderón Hernández Gregorio E-mail:gcaldero@nevado.manizales.unal.edu.co ESTRATEGIAS DE RECUPERACIÓN CUIDADO DE LA DIMENSIÓN FÍSICA Indicadores: Revisión médica Evitar abuso de drogas Hacer ejercicio Buena alimentación Relajación Disfrutar las sensaciones Comer bien. Dormir las ocho horas Bañarse y arreglarse frecuentemente. 123 Estrategias: Jornadas médico-asistenciales. Campañas de vacunación Charlas sobre prevención en los diferentes tópicos de salud. Plan de actividades recreativas, deportivas y culturales. Control de la madre y el niño. Consultas sobre planificación familiar y enfermedades de transmisión sexual. Control de la mujer embarazada. En la medida de lo posible comer balanceada y regularmente (aunque no tengas ganas) METODOLOGÍA PARA DESARROLLAR ESTAS ESTRATEGIAS: Visitas. Entrevistas Reuniones Aplicación de cuestionarios. Charlas Sesiones educativas Elaboración de carteleras y rotafolios. Orientaciones individuales y colectivas. Distribución de material educativo Conformación de voluntarios para las actividades recreativas y deportivas. Actividades de control sanitario. CUIDADO DE LA DIMENSIÓN PSÍQUICA Indicadores: Valoración de uno mismo Pensar positivamente Desarrollar nuevas habilidades Expresar sentimientos Ser más flexibles Cultivar el humor Estrategias: Hablar con alguien de confianza sobre lo que sientes. Decidir por ti mismo lo que quieres ser y hacer. 124 Entender que tus parientes también están sufriendo. Hablar con la gente, es la medicina más curativa. Compartir tus sentimientos y pensamientos con otros. Pasar tiempo con otras personas. Buscar compañía. Realizar ejercicios físicos suaves, alternados con relajación, esto aliviará algunas de tus reacciones físicas. Estructurar tu tiempo, mantente ocupado. No tomar decisiones drásticas. Buscar contacto con la naturaleza. Buscar expresarte creativamente: cantar, dibujar, escribir, bailar, etc. Permítete expresar tus sentimientos a través del llanto. METODOLOGÍA PARA DESARROLLAR ESTAS ESTRATEGIAS: Trabajo en pequeños grupos. Grupos de encuentro. Diálogo con personas allegadas. Ejercicios de relajación y visualización. Jornadas de creatividad o encuentros creativos. Talleres de crecimiento personal y autoestima. Ejercicios de respiración para canalizar las emociones. CUIDADO DE LA DIMENSIÓN SOCIAL Indicadores: Cada familia funciona por determinados principios y normas, los cuales se resumen en valores sociales, familiares y culturales, sin embargo toda familia cumple unas funciones claramente definidas, como lo son: Satisfacer las necesidades afectivas de sus miembros. Satisfacer las necesidades físicas. Establecer patrones positivos de relaciones interpersonales. Permitir el desarrollo de la identidad individual de cada uno de sus miembros. Favorecer la adquisición de un patrón psicosexual adecuado. Promover el proceso de socialización de los miembros menores. Estimular el aprendizaje y la creatividad de sus miembros. Acciones positivas dentro del ambiente familiar: Amor y afecto, sin mimos exagerados ni sobreprotección. Dictar normas de conducta y exigir su cumplimiento. Dedicar tiempo y tranquilidad para escuchar inquietudes y compartir sentimientos. Cada familia representa un equipo maravilloso que le permite a sus miembros crecer biológica, fisiológica y socialmente, con virtudes, defectos y sus propias metas. Sin embargo cada uno elige lo que quiere ser con su propia vida, aunque para ello necesite del apoyo de otros. 125 En los momentos de crisis la pareja, la familia y los amigos representan el mejor apoyo con el que se pueda contar para redefinirnos individual, familiar y socialmente. Esta redefinición pasa por: Volver a estar en contacto conmigo mismo mediante mi historia, según lo realizado. Es la conciencia de saber quién soy en las actuales circunstancias. Entender que lo que suceda conmigo tiene repercusiones en el universo. La energía, la pasión, el amor con que quiero hacer las cosas grandes y las pequeñas conociendo cada momento que se me da para realizarme. Entrar en contacto con el otro, tomarlo en cuenta, darle apoyo, comunicarme y lograr que el mundo sea un lugar de crecimiento para todos. El pluricontacto con lo grande y lo pequeño, con lo hermoso y lo feo de la vida, con todas las realidades y todas las posibilidades. La dedicación y disciplina para planificar mi crecimiento y llevarlo a cabo como el proyecto de mi existencia. Expresar agradecimiento por estar vivo y entrar en contacto con el universo. Expresar a todos los seres que conozco; cercanos y lejanos, presentes y ausentes, familiares y extraños, que vivir es una experiencia maravillosa que sí vale la pena. Estrategias: Ser buen hermano, hijo y amigo. Establecer nuevas amistades. Amar y compartir con los demás. Defender tus derechos y defender de los demás. En cualquier momento, aun en una fuerte crisis, con ayuda adecuada, podemos romper el círculo vicioso y aprender a tener reacciones funcionales y seguir un proceso de crecimiento personal, familiar y comunitario. Organizarnos como grupo. Trabajar en equipo. Organizar eventos culturales que involucren a todos los miembros de las familias. Compartir fechas y eventos importantes para todos. Elaborar un periódico mural colectivo de manera permanente. Organizar obras de teatro. 126 METODOLOGÍA PARA DESARROLLAR ESTAS ESTRATEGIAS: Talleres referidos a la organización comunitaria, trabajo en equipo, actividades culturales, periódico mural y planes de acción comunitaria. Distribución de responsabilidades, de acuerdo a las capacidades individuales. Periodicidad en la ejecución de las actividades. Seguimiento de las actividades planificadas. Sistematización de la experiencia. CUIDADO DE LA DIMENSIÓN ESPIRITUAL Autoayuda Estrategias: Cada día hablar unos minutos con Dios. Gozar y cuidar tus cosas y las de los demás. Reflexionar sobre lo que vas a hacer de ahora en adelante para no seguir en el dolor. Realizar ejercicios de perdón (formulando afirmaciones positivas) Reunirse con amigos y parientes para celebrar un triunfo y recordar lo que haz aprendido. Disfrutar de la naturaleza. METODOLOGÍA PARA DESARROLLAR ESTAS ESTRATEGIAS: Dedicar unos minutos a escuchar nuestra voz interna. Observar detenidamente todo lo que sucede a nuestro alrededor, reflexionando sobre lo hermoso de estar vivo. Escuchar y compartir música de relajación. Realizar ejercicios de relación y visualización. ASPECTOS PREVENTIVOS Y DE REHABILITACIÓN FRENTE A DESASTRES Las labores correctivas y preventivas descansan en una buena planeación, capacitación y educación de la población, entrenamiento adecuado, buena red de comunicaciones y entrenamiento y preparación de líderes. Las labores preventivas deben incluir: preparación para enfrentar el desastre, condiciones previas de saneamiento básico, sistemas de atención médica con capacidad de respuesta frente a emergencias, preparación, organización social e institucional para enfrentar el desastre, sistema de aviso a la población, calidad de las edificaciones y ubicación de las mismas. Dentro del conjunto de acciones y opciones para enfrentar un desastre ocupa lugar preponderante la toma de decisiones que hace relación al trabajo central de la planeación, donde se toma un curso de acción escogido luego de un juicio frente a varias alternativas y en donde se comprometen recursos, dirección y representación. En esta acción se define: 127 lo que se debe hacer con quién se debe hacer cuándo se debe hacer dónde se debe hacer cómo se debe hacer El impacto de una decisión sobre el grupo humano es grande e importante y su utilidad se mide en términos de afectación a dicho grupo. Las decisiones operan hacia el futuro lo que implica incertidumbre, por lo cual se debe tener una muy buena información para tomar la decisión. Estas decisiones es necesario tomarlas dentro de los límites de la racionalidad, teniendo en cuenta la magnitud y naturaleza de los riesgos, además de los factores limitantes o estratégicos, análisis de la relación costo / efectividad y costo / beneficio, entendiendo lo que pasa y lo que puede pasar. Para seleccionar alternativas frente a un área problema se deben tener en cuenta las experiencias, la investigación y el análisis. Igualmente, es necesario evaluar la intensidad, masividad y duración del desastre. Otro de los elementos por manejar es la información cuya función primordial es la reducción de la incertidumbre y aportar bases para la acción. La información debe permitir comprender lo que ha pasado y lo que ocurrirá e infundir confianza. Debe posibilitar el mantener la confiabilidad de la población respecto a su contenido y a lo que se puede hacer. A través de ella se debe evitar el estado de sobresalto para impedir que se actúe con confusión o aturdimiento. Además debe ser factor de orientación, desvirtuando o no apoyando rumores, sus contenidos deben estar orientados a explicar y enseñar. El informar correctamente ayuda a mantener un estado de alerta adecuado, con el fin de conservar la capacidad de reacción, diferente a mantener a la población en una esfera temerosa, de hipervigilancia y atención exagerada que entroniza un estado de angustia, con efectos penosos y desagradables que minan la seguridad de la comunidad e influyen negativamente sobre el buen desarrollo socioeconómico de una región. La prevención debe descansar en: El conocimiento y estudio de las calamidades que han sucedido en la ciudad o región ala cual está circunscrita determinada comunidad, además de las fallas y aciertos que se han tenido en su atención y prevención. Tener en detalle el riesgo y la vulnerabilidad Establecer un sistema de prioridades en la ocurrencia de desastres. Verificar la capacidad de reducción de la vulnerabilidad, definiendo acciones y objetivos. Identificar la capacidad de respuesta y alivio que se tiene en los individuos, las comunidades y las instituciones. Determinar las expectativas a largo plazo de reconstrucción y rehabilitación. Los sistemas de preparación de los grupos que deben actuar directamente frente al desastre, preparación y educación de la comunidad y experiencia y preparación de quienes lideran y dirigen la toma de decisiones y acciones para enfrentar los desastres en el corto y el largo plazo. La forma de poner en situación de alerta a una comunidad y el manejo de las alarmas. La aplicabilidad de los planes en desastres, su coordinación y los recursos necesarios para ponerlos a funcionar. Evaluación del impacto a mediano y largo plazo tanto en lo biológico, como en los psicológico y lo social. 128 Es necesario saber que el proceso de rehabilitación que se instaure a nivel individual y colectivo debe ser un proceso integral y debe tender a ser un proceso básico para el bienestar, respondiendo a acciones continuas y coordinadas que busquen disminuir el impacto negativo del desastre y que correspondan a un esfuerzo mancomunado de las comunidades y el Estado. CUADRO RESUMEN: CRISIS Se traduce en LIMITACIONES AMENAZAS RECURSOS OPORTUNIDADES Tiene manifestaciones FÍSICAS EMOCIONALES SOCIALES ESPIRITUALES Repercute en los contextos: INDIVIDUAL FAMILIAR GRUPAL 129 SOCIAL UNIDAD IV PARA REFLEXIONAR Después de haber desarrollado este capítulo, dedique unos minutos a reflexionar: ¿Cómo podemos acompañar a otro ser humano que está reconstruyendo su vida? ¿De qué te pudiste dar cuenta durante el desarrollo de las actividades?. ¿Cuáles son los mayores aprendizajes que te quedan beneficiar posteriormente a este trabajo?. Escribe en este espacio ¿cuáles son las conductas que emprenderás desde este momento, para contribuir a la reconstrucción?. ----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------- 130 BIBLIOGRAFÍA 1. - Actuemos: alternativas para la prevención del tráfico y consumo de drogas. Caracas: Conacuid, 1995. 2. - Aldana de Conde, Graciela. La travesía creativa: asumiendo las riendas del cambio. Santa Fe de Bogotá: Creatividad e Innovación Ediciones, 1998. 3. - Barroso, Manuel. Autoestima: ecología o catástrofe. Caracas: Editorial GALAC, 1987. 4. - Beanport, Elaine de. Las tres caras de la mente. Caracas: Editorial GALAC, 1987. 5. - Brenson Lazán, Gilbert y María Mercedes Sarmiento Díaz. Compendio de lecturas: materiales para Damnificados y para los profesionales que los atienden. Bogotá: fundación Neo-Humanista, 1999. 6. - Buscaglia, Leo. Ser persona. El arte de ser plenamente humano. Caracas: Editorial EMECE, 1985. 7. - Castanyer, Olga. La asertividad: expresión de una sana autoestima. Bilbao: Desclée De Brouwer, 1999. 8. - Davison, Geral G. Psicología de la conducta anormal: enfoque clínico experimental. México: Editorial Limusa, 1980. 9. - Desastres y Sociedad. Revista semestral de la Red de Estudios Sociales en Prevención de Desastres en América latina, Enero-Julio 1994/N°2/Año 2 Especial: Tragedia, cambio y desarrollo. 10. - González R., Esperanza. Manual sobre participación y organización para la gestión local. Santa fe de Bogotá: Ediciones Foro Nacional por Colombia, 1995. 11. - Goodman, Susan. El libro guía de su hijo. Madrid: Biblioteca Práctica Salvat, No.3, 1980. 12.- Neihardt, J. Seis programas para prevenir y controlar el estrés. Madrid: Ediciones Deusto, 1989. 13.- Recagno, Ileana. Hábitos de crianza y marginalidad. Caracas: Instituto de Psicología de la UCV, 1987. 131 UNIDAD V RECONSTRUCCION DEL TEJIDO SOCIAL 132 INTRODUCCIÓN Este capítulo trata de elementos fundamentales para elaborar planes de reconstrucción individuales y colectivos, tales como: participación, solidaridad, comunicación, organización, cambio social, autogestión, entre otros; destacando la importancia de las Redes como herramienta para lograr un mejor y más rápido desarrollo social. Para Montero (1998) tanto los agentes comunitarios como los facilitadores de procesos deben reflexionar acerca de cuál es el sentido del cambio social que se pretende generar. Enumera los principales lineamientos que se deben tomar en cuenta: - El cambio social e individual de los agentes internos y externos como meta Ese cambio debe ir acompañado de producción de conocimientos El cambio se da por el proceso de empoderamiento y la creación y mantenimiento de redes de intercambio Se concibe a la gente como “actores sociales” que están en condiciones de decidir su destino La investigación como forma de intervención y la intervención como una forma de investigación con participación de la comunidad Tiene un carácter político en el sentido de la producción de relaciones de poder democráticas . Martín-Baró (1987) considera que el cambio social en Latinoamérica pasa por la eliminación del fatalismo, o sea: “...cambiar la relación entre la persona y su mundo, lo que supone tanto un cambio personal como un cambio social. Para esto no sólo hace falta que modifiquen sus creencias sobre el carácter del mundo y de la vida, sino que tengan una experiencia real de modificación de su mundo y determinación de su propio futuro. Se trata de un proceso dialéctico en el que el cambio de las condiciones sociales y el cambio de las actitudes personales se posibilitan mutuamente”. (Martín-Baró, 1987, Pág. 156). 133 PROPÓSITO: Facilitar estrategias que propicien procesos de interacción e integración en el trabajo comunitario, como vía para la consolidación de un plan de reconstrucción. Unidad V: Reconstrucción del tejido social APRENDIZAJES: • Conocimiento de autodiagnóstico comunitario. • Habilidades para desarrollar planes de acción que motiven la participación y organización de la comunidad. • Pertinencia de los estilos de liderazgo en el trabajo comunitario. METODOLOGÍA: Utilizaremos técnicas de dinámica de grupos, que motiven y faciliten aprendizajes significativos. CONTENIDOS: • Técnicas de autodiagnóstico comunitario. • Condiciones que favorecen el compromiso comunitario. • Planificación participativa. • Proceso de negociación. • Poder social. • Desarrollo sostenible. • Empoderamiento comunitario 135 UNIDAD V RECONSTRUCCION DEL TEJIDO SOCIAL OBJETIVO GENERAL: Facilitar procesos de sinergia comunitaria, que permitan la reconstrucción del tejido social, como una vía para la consolidación de un desarrollo sostenible. OBJETIVO ESPECIFICO N° 1 Identificar estrategias que propicien la interacción e integración con la comunidad. CONTENIDOS: Estrategias de contacto inicial con la comunidad. Técnicas de Auto-diagnóstico comunitario. Dinamizadores comunitarios: personas y procesos. Condiciones que favorecen el compromiso comunitario. ESTRATEGIAS: Dramatización: representación de dos comunidades, una muy agresiva y cerrada al cambio y la otra más abierta y receptiva. Ejercicios: en pequeños grupos de discusión se analiza material teórico y una pregunta orientadora de la discusión. Plenaria: presentación de las conclusiones por equipo y discusión del material por el grupo completo. Dramatización: representación de las mismas comunidades que al principio, resaltado cómo cambian las estrategias del facilitador cuando tiene herramientas de trabajo comunitario. Plenaria y análisis de los aprendizajes adquiridos durante está sesión. 136 OBJETIVO ESPECÍFICO N° 2 Valorar el espacio comunitario a partir de su historia, recursos, potencial y limitaciones. CONTENIDOS: Diagnóstico y jerarquización, por parte de la comunidad, de sus necesidades sentidas. Conocimiento, por parte de la comunidad, de sus Limitaciones, Amenazas Recursos y Oportunidades, a nivel individual y grupal (MATRIZ LARO.) Planificación participativa, por parte de la Comunidad, de su Auto-desarrollo. Proceso de negociación con entes externos. ESTRATEGIAS: Ejercicios de Reconstrucción de la Historia Comunitaria. Ejercicios de narración de “el aquí y ahora” de la Comunidad. Ejercicios en pequeños grupos: ¿Qué le puedo ofrecer a la Comunidad? ¿Qué espero yo de la Comunidad? Finalmente, análisis del LARO comunitario, como grupo. Visualización del futuro a través de un dibujo colectivo de la comunidad: dentro de 5 años, ¿cómo deseo que sea mi comunidad? Ejercicios de planificación del desarrollo comunitario, dividiendo el dibujo en áreas de acción, con distribución de funciones y procesos de negociación con entes externos. OBJETIVO ESPECIFICO N° 3 Analizar las acciones que promueven la auto-determinación a partir de los procesos organizativos comunitarios. CONTENIDOS: La Persona como ser social Formas de Organización Comunitaria. Estilo de liderazgo comunitario. Dinamizadores de los procesos de Autodeterminación comunitaria. 137 ESTRATEGIAS: Ejercicios de “las canoas cruzando el río”, destacando el valor de la cooperación versus la competencia. Ejercicios de “el foro de especialistas”, entregando material teórico a los participantes para que se preparen y luego se conforme un panel, donde tendrán un tiempo para presentar su ponencia y responder una ronda de preguntas de los participantes. Ejercicios de “la torre” modificados: “construyendo la organización comunitaria que queremos”. Se conforman tres grupos, al primero se le permite que funcione con un liderazgo situacional, al segundo se le asigna un líder autoritario y al tercero se le asigna un líder externo, supuestamente mandando por el gobierno, en cada grupo trabajará un observador que al final expondrá sus conclusiones. El trabajo consiste en elaborar entre todos, con material de desecho, una maqueta de la Organización Comunitaria que desean. Plenaria con análisis de cada grupo y discusión sobre los aprendizajes logrados durante la sesión. OBJETIVO ESPECIFICON° 4 Evaluar los factores que determinan la consolidación del empoderamiento de las organizaciones comunitarias para el logro de un desarrollo sostenible. CONTENIDOS Concepto de Poder y Poder Social Características del Desarrollo Sostenible. Condiciones que favorecen el Empoderamiento Comunitario. Habilidades de negociación con los agentes externos. ESTRATEGIAS: Ejercicio de “lluvia de ideas” sobre Poder, Poder Social y Empoderamiento Comunitario. 138 Ejercicio en pequeños “grupos de discusión” con material de apoyo teórico y preguntas orientadoras. Ejercicio: Realización de un “collage” de “La Organización Comunitaria que queremos”, repartiendo entre los participantes, las áreas de desarrollo comunitario que debemos trabajar y los pasos se deben dar para lograr el desarrollo comunitario. Plenaria para analizar los trabajos de los pequeños grupos. Reflexión final sobre los aprendizajes adquiridos durante esta sesión y durante la experiencia de formación completa. 139 Lecturas Complementarias COMUNIDAD Se entiende por comunidad la agrupación de familias o grupos que ocupan espacios cercanos y se relacionan, con la finalidad de enfrentar sus problemas y satisfacer necesidades comunes o particulares. DIAGNOSTICO DE LA COMUNIDAD Es el estudio descriptivo-explicativo que hacemos de la realidad o problemas que la afectan, para detectar las necesidades, causas de los problemas(factores sociales) y recursos disponibles en la comunidad para acometer las acciones en función de los objetivos propuesto. INSUMOS PARA EL DIAGNOSTICO DE LA COMUNIDAD: NECESIDADES: Problemas locales y sus causas Problemas que dificulten el bienestar de la gente. Problemas que a juicio de los habitantes de la comunidad son de prioritaria atención. FACTORES SOCIALES: 1. Creencias, costumbres y hábitos que afectan la salud. 2. Estructuras familiares y sociales. 140 3. Formas tradicionales de curar las enfermedades y de resolver problemas. 4. Interrelaciones entre los miembros entre la comunidad. 5. Modalidades de aprendizajes (formal y no formal) RECURSOS: A) HUMANOS La comunidad en general, además de las personas con habilidades especiales: Lideres, Curandero, Narradores, Artistas, Artesanos, Maestros, etc. B) MATERIALES Tierras, cosechas, fuentes de alimentación, fuentes de combustibles (leña, etc.) agua, locales. Materiales para la construcción. Mercados, transporte, comunicaciones, herramientas. Existencia de empleos en la zona, ingresos con relación al costo de la vida. ¿QUE ES EL AUTODIAGNOSTICO COMUNITARIO? “Un autodiagnóstico comunitario consiste en el conocimiento que sobre un tema o problema desarrolla la propia población, a través de actividades organizadas y mediante el aprovechamiento del saber y de las experiencias de cada uno de los participantes. El autodiagnóstico se inscribe dentro de los diagnósticos participativos, es su mejor expresión y, por lo tanto, lo opuesto a los diagnósticos pasivos, autoritarios. En tal sentido, debemos llamar la atención sobre algunos puntos: El autodiagnóstico jamás parte de cero. Aprovechar la experiencia y el saber comunitario y significa, entre otras cosas, recuperar la memoria colectiva. 141 El autodiagnóstico no sólo posibilita el análisis de los problemas que vive la comunidad, permite también revalorizar los elementos positivos que existen. Asimismo, el autodiagnóstico constituye una crítica y una búsqueda de solución. Se pueden enunciar algunos campos para un autodiagnóstico, aclarando que ellos son sólo indicativos, simples sugerencias de acción. Problemas sociales. Cuestiones culturales. Cuestiones comunicacionales”. 1. AUTODIAGNOSTICO FÍSICO Ubicación territorial: Identificar sector, parroquia, municipio, distrito, estado, ámbito territorial. Situación geográfica: Precisar longitud, latitud, límites, linderos, etc. Factores climáticos: Determinar temperatura, clima, presión atmosférica, velocidad y dirección del viento, incidencia solar, etc. Suelos: Determinar uso actual, propiedad, superficie total, relieve, utilidad futura. Hidrografía: Determinar el curso de las aguas corrientes, estables y/o periódicas, torrenteras, aguas subterráneas, etc. Flora: Describir la variedad de plantas que crecen en la comunidad, precisando su utilidad y conservación. Fauna: Determinar la variedad de animales presentes en la comunidad, tanto domésticos como salvajes, precisando la utilidad y/o perjuicio que ocasionen. 142 Vías de comunicación: Determinar tipo, condiciones, tamaño, ubicación, cantidad. Urbanización: Determinar tipo, cantidad, calidad y distribución de las viviendas. Recursos: Cuantificar los recursos materiales, técnicos y financieros que posee la comunidad. 2. AUTODIAGNOSTICO SOCIAL Historia: Visión anterior y actual de un hecho, grupo, problema o lugar. Instituciones: Identificar las instituciones del Estado Venezolano representadas en la comunidad. Población: Determinar edad, sexo, nivel de instrucción, habilidades y destrezas, ocupación, lugar de procedencia. Educación: Determinar funcionamiento educacional en la comunidad (tipo, calidad, utilidad, etc.) Servicios públicos básicos: Determinar cantidad, calidad, utilidad de los servicios básicos, presentes en la comunidad (agua, electricidad, teléfono, gas, cloacas, etc.) Nivel de participación comunitaria: Precisar el rol de los vecinos y/o grupos comunales en la vida comunitaria. Funcionamiento de los grupos comunales: Precisar ubicación, situación legal, ámbito de territorial, objetivos y actividades de las asociaciones de vecinos, juntas de condominio, grupos culturales, cooperativas, etc. 143 Funcionamiento de grupos institucionales: Precisar ubicación, situación legal, ámbito territorial, objetivos y actividades de juntas parroquiales, comités de base de los partidos políticos, asociaciones civiles, cuerpos de seguridad, comerciantes, etc. Liderazgo: Determinar los distintos tipos de líderes y liderazgos presentes en la comunidad. Salud: Determinar cantidad y calidad de los organismos dispensadores de salud, tanto en el aspecto preventivo como curativo. Además, precisar los procesos endémicos, morbilidad por estrato de edad, tasa de mortalidad y natalidad. Centros de abastecimiento: Determinar ubicación, cantidad y calidad de los centros de acopio y distribución de alimentos y medicinas que abastecen a la comunidad. 3. AUTODIAGNOSTICO CULTURAL Identificar todos los recursos culturales de la comunidad. Seleccionar los recursos culturales más importantes y valorar sus formas de elaboración y expresión propias. Estudiar los orígenes y el modo en que se han consolidado las expresiones culturales de la comunidad. Procurar que todos participen de los valores culturales fundamentales de la comunidad. Recopilar las diferentes expresiones culturales plasmadas por los miembros de la comunidad, por ejemplo: canciones, chistes, juegos, cuentos, poesías, trabajos científicos. 144 Estimular la creación de objetos y/o instrumentos culturales (artesanías, instrumentos musicales, etc.) También utensilios para el hogar. Analizar los espacios vivenciales; por ejemplo: el modo de distribuir las partes de la vivienda, tipo de vestido, tipo de danzas, tipos de celebraciones, tipos de costumbres y tradiciones más importantes de la comunidad. Identificar las instituciones culturales que pueden prestar apoyo a las actividades culturales de la comunidad. Identificar las costumbres y tradiciones extranjeras presentes en la comunidad. Identificar las actitudes y potencialidades culturales de la comunidad. 4. AUTODIAGNÓSTICO COMUNICACIONAL Determinar la cantidad y calidad de los mensajes provenientes de los medios de difusión colectiva. Determinar las formas de relacionarse con las instituciones, sistemas de impresión local, etc. Cuantificar todos los medios de comunicación social públicos y privados presentes en la comunidad. Cuantificar todos los aparatos electromecánicos (multígrafos, fotocopiadoras, imprentas, máquinas de escribir, etc.) y audiovisuales (proyectores de películas y de diapositivas, megáfonos, altavoces, cámaras de video, cámaras fotográficas, microcomputadoras, walkie talkies, radio de onda corta, teléfonos, betamax o VHS, fax, antenas parabólicas, etc.) 145 Determinar y cuantificar todos aquellos profesionales de la comunicación social pertenecientes a la comunidad, es decir, periodistas, fotógrafos, dibujantes, diagramadores, locutores, escritores, etc. Identificar las formas de intercambio de experiencias y de conocimientos, que posibilitan la participación de la población. Evaluar toda la información que necesitamos y luego precisar si ella está o no en la comunidad. Determinar los mecanismos a utilizar para obtener la información necesaria: búsqueda de documentos, entrevistas, reuniones grupales, etc. Formalizar un adecuado sistema de acopio de información. Precisar la capacidad expresiva de la comunidad, es decir, expresión verbal, expresión escrita, expresión corporal. Precisar los espacios más importantes que utiliza la comunidad para expresar sus ideas y sentimientos, por ejemplo: asambleas, grupos pequeños de discusión, delegados, periódicos, carteles, periódicos murales, folletos, obras de teatro, títeres, relatos, canciones, rumor, dibujos, etc. Determinar los factores que impiden, mediatiza o potencian un contacto dialógico directo con la gente. Reconocer los lugares más comunes de comunicación en la comunidad, es decir, los puntos de reunión, la circulación de noticias, de intercambio de opinión, etc. Por ejemplo, abasto, mercado, Asovecinos, escuela, fiestas, parada de carros por puesto, etc. 146 Elaborar mapa comunicacional de la comunidad. Seleccionar sistemas eficientes para la distribución de la información. Establecer mecanismos de retroalimentación para reconocer la adhesión o la crítica de la gente a los resultados de los proyectos emprendidos en la comunidad. Seleccionar formas y mecanismos para la toma de decisiones colectivas. BIBLIOGRAFÍA: SANCHEZ ESCALANTE, Pedro. Principios básicos de la planificación comunitaria. Caracas: Fundacomun, 1991. página 22. 147 RECURSOS PARA EL CAMBIO: La información 1. La planificación compartida Disponer de información útil, organizada de forma relevante, disponible cuando se requiere, fidedigna y actualizada, no es cuestión de suerte, sino producto de una planificación que se proponga ese logro. Es el producto también de una acumulación paciente y ordenada. Se han formulado diversas metodologías con el propósito de facilitar la identificación de las estructuras de datos apropiadas para servir a los niveles de operación tácticos y estratégicos de una empresa u organización. El tema desborda lo que este pequeño libro intenta cubrir. Pero sí es necesario reiterar aquí que no toda la información que circula o se genera en el curso de la actividad cotidiana tiene la misma importancia. En cada situación, hay un conjunto de procesos de carácter critico, cuya ejecución optima es crucial. En consecuencia, centrar la atención en los datos cuyo dominio permite realizarlos con perfección supone una contribución de real utilidad. Muchos ejemplos, bien conocidos, ilustran como la concentración del esfuerzo en los procesos que determinan el éxito, en vez de una dispersión que intente abarcarlo todo, ha conducido a posiciones dominantes en el mercado. No cabe generalizar: en cierta empresa será vital el acierto en el otorgamiento del crédito; en otra, la producción o el abastecimiento; en una tercera, la atención a los clientes. Sin perder de vista que una empresa es una totalidad orgánica en la que las partes, sin excepción, deben contribuir armoniosamente al resultado global, es vital entender que la criticidad de todos los procesos no es igual. Algunos, distintos y particulares para cada caso, fijan la suerte del conjunto. La planificación compartida, aquella que integra de manera estrecha todas las áreas funcionales y, en particular, a la de informática con el resto de la organización, debe conducir a la definición de las bases de datos necesarias para que los miembros de la 148 organización encuentren un apoyo en la ejecución de sus tareas y en la adopción de las decisiones que les son potestativas. (… ) Se ha repetido muchas veces que la unión hace la fuerza. Y es cierto. La planificación cabalmente adelantada es el mecanismo idóneo para lograr la unión. No bastan buenos deseos, declaraciones emotivas, largas reuniones para asegurar que la unión sea una realidad efectiva; esto es, para que la coordinación entre los integrantes de una organización funcione con resultados óptimos. Bien están los deseos y las buenas intenciones, pero hace falta más. Hace falta que una red de compromisos formales entre sus miembros fije el perfil de responsabilidades y de actividades respectivas; que las metas se constituyan en puntos de continua referencia, capaces de polarizar las energías; y que los procesos de control y seguimiento operen sin dejar respiro. Una planificación que valga la pena no puede ser un saludo a la bandera. No puede ser un ejercicio formal, académico. Es mejor, si en ello termina el asunto, obviar el esfuerzo. 2. La ejecución visible Si la actividad de planificar se comparte, si se logra que los planes movilicen el talento y el compromiso de los cuadros de dirección y gerencia, es entonces necesario, a continuación, asegurar que la ejecución de los planes sea ampliamente visible. La planificación, según lo señalado en el capitulo correspondiente, ha de desembocar en la acción. Constatar ésta es esencial. Viene a cuento la afirmación que se atribuye a Aristóteles: El movimiento se demuestra andando. De forma idéntica, la planificación se demuestra ejecutando. (…) Disponer de posiciones de repliegue, preparadas de antemano, es parte esencial de la planificación. La tarea comienza con la identificación del grado de criticidad de las actividades que nos llevarán a las metas, con el señalamiento de la probabilidad del cumplimiento de los cronogramas subyacentes, con la cuantificación, en la medida posible, de 149 las holguras presentes. La formulación de escenarios en los que los planes se vean sometidos a perturbaciones de diversa severidad, consecuencia de variables endógenas o exógenas, debe poner en evidencia lo impensable, lo que rehusamos visualizar como posible. Y del análisis de estas situaciones hipotéticas, pero verosímiles, surgirán las estrategias de emergencia, las posiciones de repliegue. No cuestionar a fondo las vulnerabilidades de los planes, sus ocultas debilidades, puede resultar trágico. La explosión sobre los cielos de Florida de uno de los transbordadores espaciales es, al respecto, una lección muy dolorosa. La costosa reparación del telescopio orbital Hubble es otra lección, sufragada por el bolsillo de los ciudadanos americanos. Ponen en evidencia, si se profundiza en el estudio de sus causas, la tendencia a aceptar riesgos inapropiadamente analizados. Pero no es necesario acudir a estos ejemplos extremos para ilustrar la materia. En un plano más modesto, la vida de las empresas ofrece innumerables casos en los cuales se pone de manifiesto la ceguera con que se obvia el examen anticipado de las fallas de ejecución y la variabilidad impredecible del entorno. Se procede en ocasiones como si las ruedas de la diosa Fortuna estuviesen movidas por las manos de los que hacen los planes. (...) No debiera concluirse de estas consideraciones que es factible eliminar los riesgos. En absoluto, son inherentes a la existencia y no cabe sustraerse a ellos. Planificar es escoger, según lo afirmado anteriormente y es, también, renunciar. Es, por lo tanto, aceptar la posibilidad de errar. Nada nos garantiza el acierto. Dicho esto, que es esencial, lo que se trata encarecidamente de aconsejar en este punto es la incorporación, dentro de la planificación, de las vías de escape que las contingencias podrían forzarnos a emplear. (…) Pero junto al elogio de la disposición y fortaleza espiritual que encara la precariedad e incertidumbre del futuro, no olvidemos dar crédito a la prudencia. No estaríamos aquí si solo hubiese prevalecido a lo largo de la historia la temeridad irresponsable. 150 3. Los logros compartidos El papel del liderazgo recibe atención en el último capítulo de esta pequeña obra. Esta sección está dedicada a la importancia del aporte colectivo. EL progreso de la sociedad, de una empresa, de una institución es siempre el fruto del trabajo de muchos. Cada quien, individualmente, puede cambiar. Su progreso espiritual y material es consecuencia de sus personales decisiones, del grado de disciplina que imponga a su vida, de la amplitud de miras que inspire su acción, de la curiosidad intelectual con la que se sumerja en la existencia, de los anhelos más íntimos que abrigue en su corazón. Cada quien se forja su vida. Pero el progreso colectivo no es la simple suma de lo que cada uno, separadamente, hacemos. Una empresa es considerablemente más que la simple suma de sus partes. Sus logros son el fruto de la interacción de sus miembros, de todos sus integrantes. La división del trabajo y la especialización multiplican la capacidad de producción individual; la integración subsecuente de estos aportes es el elemento que imparte sinergia al todo. (…) Los servicios y bienes que una empresa ofrece al mercado son fruto de la labor de todos sus trabajadores. Y el proceso de planificación del cambio debe asegurar que sus contribuciones se sumen positivamente al resultado. Es esencial crear un ambiente en el cual la percepción de la importancia y valor del trabajo en equipo se haga manifiesta; es esencial para el logro de las metas y objetivos. Lo señalado en páginas anteriores sobre la conveniencia de que la tarea de planificar se distribuya a lo largo y ancho de la organización, delegando a cada nivel y ámbito lo que apropiadamente les compete, y las observaciones sobre la ejecución visible, deben ser complementadas con un vigoroso énfasis en la obligación de atender a la formación de un espíritu de equipo que trascienda las fronteras funcionales. Nos acompaña una terrible tendencia al fraccionalismo y a la división estéril. Quizás nuestra larga lucha por sobrevivir en la etapa anterior a los albores de la civilización ha dejado en los genes del hombre moderno 151 acentuados rasgos de lo que los etnólogos denominan el imperativo territorial. Quizás, es posible, hay algo de verdad en la intuición de Marx que atribuye a la división del trabajo todas las contradicciones que nos agobian. También, no hay que olvidarlo, el espíritu personal competitivo, que forma parte esencial de nuestra cultura, acentúa los problemas. Constituye, sin duda, un ingrediente importante del progreso; actúa como un potencial director del cambio. Pero su ascendencia incontrolada en el seno de las organizaciones puede devenir en un ambiente de trabajo conflictivo, a la postre contrario a la consecución de los logros que se persiguen. (...) Quizá no sea válida la extrapolación, pero es bueno tener presente que la disolución de muchos imperios fue causada por las luchas fratricidas que minaron su fortaleza original. Ajenos a los riesgos externos, ocupados en dirimir sus disputas internas, ignoraron que sus enemigos exteriores no descansaban. El olvido del bien común les privó de los frutos acumulados pacientemente, entre todos, a lo largo de siglos. Llegado el momento de la prueba, sus divisiones les perdieron. Tomado de: Paul Leizaola. La Gestión del Cambio. Ediciones IESA. Caracas, abril 1998. Páginas 164-171. 152 RECURSOS PARA EL CAMBIO: El liderazgo 1. La convicción personal Todo liderazgo arranca de la convicción personal de quien lo ejerce. La autoridad formal se la confiere; el liderazgo nace en el alma y en las entrañas del líder. Puede ocurrir que alguien lo sea con renuencia, puede que deba vencer su aversión a asumir la responsabilidad de conducir. Pero no cabe pensar en líderes que juegan su papel sin un profundo convencimiento intimo sobre la función que desempeñan. La adhesión que reciben, a diferencia de la popularidad que circunstancialmente pueda recaer sobre ellos, requiere que se perciba en su actuación una radical convicción. Es justo la fuerza de esta seguridad interior la que mueve, la que motiva la confianza y la disposición a colaborar lealmente. (...) El líder entiende la necesidad del liderazgo; y se siente capaz de ejercerlo. Puede o no ambicionar que recaiga sobre él, pero no abriga dudas sobre ninguna de las dos vertientes del tema: el de la necesidad y el de la congruencia de su propia capacidad con las exigencias implícitas en la situación que reclama su participación. El ejercicio del liderazgo puede fundamentarse en la ambición y en el sentido de responsabilidad. Si nos mueve sólo la ambición, si en nuestro fuero interior no tenemos una clara y exigente idea de la responsabilidad que asume el que conduce, seremos reos de un grave pecado. La contrapartida indispensable de la voluntaria adhesión y lealtad que otorgamos al líder es su apego a una conducta que esté siempre caracterizada por el mas alto sentido de responsabilidad. Podemos perdonar, quizá, las limitaciones intelectuales del líder, sus titubeos ocasionales, sus frivolidades circunstanciales. Pero retiraremos nuestra libre conformidad con su actuación en el momento mismo en que descubramos que detrás de su fachada pública, detrás de sus palabras en apariencia convincentes, no hay una postura radicalmente responsable. La ambición de convertirse en líder que no va acompañada de un sentido de 153 responsabilidad, la que surge sólo como deseo de mando, ha ocasionado innumerables tragedias. También es cierto que las ha habido como resultado de la falta de dotes suficientes en lideres a los que el destino colocó en situaciones difíciles, que exigían grados extraordinarios de competencia. De ambas situaciones está llena ha historia. No obstante, La irresponsabilidad debe conceptuarse como el mayor de los dos males. No somos nosotros quienes fijamos los avatares de la existencia, pero sí quienes podemos actuar ante ellos con sentido de profunda responsabilidad; con la que los antiguos romanos llamaban gratuitas. (...) 2. La articulación de la visión El líder no sólo es responsable; le anima una visión. Tiene una luz interior que ilumina su actuación. No confiamos la libertad que nos corresponde por derecho propio, ni siquiera parcialmente; no sometemos nuestra acción al discernimiento y a la voluntad de otro, a menos que nos conste a que presintamos su capacidad superior de guiar, conducir y motivar (...) En nuestra aceptación racional del líder, esperamos que él sea capaz de promover el bienestar de la organización. Suponemos que sus dotes, en adición a su sentido de responsabilidad, le otorgan el derecho condicionado de dirigir. En el mejor de los casos, sus habilidades han sido probadas en sus actuaciones previas; en su defecto, intuimos que las posee. Corresponde al líder articular su visión. No basta que la tenga: una personalidad impenetrable, de un mutismo hermético, reclusa, que no se deja abordar, podrá ejercer una autoridad omnímoda; podrá cohibir a quienes estén bajo su imperio inapelable. Pero, sobre todo en esta edad, escasamente inspirará a sus subordinados. Dispondrá a su alrededor de hombres y mujeres dóciles a su mando, pero no de colaboradores motivados, dispuestos a dar lo mejor de sí, entusiastas. Un ambiente de trabajo conducente al mejor desempeño de sus integrantes presupone que éstos comparten las ideas y aspiraciones, la visión, en suma, de quien les dirige. 154 Saber comunicar, en esta época en que la inmediatez del contacto humano se ha multiplicado de manera prodigiosa, tiene una importancia capital para el líder. Es un don indispensable para el político, pero también lo es para quien hace su carrera en una empresa o institución con la ilusión de ocupar posiciones de mando. ... Algo de esto pasa con la habilidad de comunicar con efectividad. Exigimos claridad, precisión, convencimiento; casi, pedimos la secuencia. Y de manera creciente, no nos bastan escritos secos y lacónicos. Queremos que la fuerza de sí expresión directa, sincera, llena de convicción, nos inspire y mueva. (...) En esa vida interna de las empresas, de modo creciente, hay la percepción de que quien ostenta la autoridad formal, en su habitual esquema jerárquico, no necesariamente son también líderes. Se traen en situaciones que requieren un cambio. Las potencialidades de la organización en la que ella se da, tenderán a disiparse. No cabe esperanza a la cosa, salvo la medida. El espíritu de corps, el sentido de equipo, no es algo que se impone, que se ordena. Su génesis es mucho más sutil, mucho más misterioso. Por desgracia, no pocas veces, se confunde un ambiente disciplinado, conformista, ordenado, con el que genera y mantiene al líder. Solo en apariencia son iguales. Un abismo separa el desempeño creativo, esforzado, responsable, sostenido, de una organización galvanizada en su acción por la visión y la energía de un líder entusiasta, capaz de comunicar su propio sentido de entrega y dedicación, del de otra que suscita solo el conformismo resignado de sus integrantes. El éxito no está garantizado para ninguna de las dos. Reiteramos que Fortuna mueve sus ruedas, ajena a nuestros deseos. Pero en una empresa poblada de líderes, podríamos afirmar como su héroe: It is not in mortals to command succeds,But we’ll do more, Sempronius, we’ll deserve it. “No está en nuestras manos ordenar que nos acompañe el éxito, pero si podemos hacer más: “ podemos merecerlo”. El apoyo de alto nivel (...) En medio de nuestras afanosas ocupaciones, tengamos siempre en mente que necesitamos muchos apoyos. Parte del talento del liderazgo debe destinarse a su logro: 155 nuestras acciones e iniciativas tienen que contar con la aquiescencia de nuestros superiores y de los pares que conforman de entorno organizacional en el que nos movemos. Más que decir que ellos deben consentir puede resultar débil; se impone, de seguro, que nos propongamos mucho más. No basta una tibia conformidad con los planes que ambicionamos adelantar, con las ideas que entendemos serán de importancia para su futuro. La articulación de la visión, cuya consideración nos ocupo en la sección anterior, ha de ser convincente no sólo para nuestros subordinados; su fuerza, su claridad, deben también mover a aquellos de quienes dependemos en los niveles superiores y de quienes nos apoyan lateralmente en la Organización. Los cambios positivos que ambicionamos (movernos de un estado inicial a otro final, de mayor perfección y exigencia), requieren una cuidadosa planificación; solicitan recursos; implican el consumo de energías vitales a tasas apropiadas. La hemos estudiado en capítulos precedentes: al potencial director que suscite los cambios, se opondrán, inevitablemente resistencias de considerable magnitud: inercias, temores, intereses creados. El éxito no puede darse por descontado. El más amplio apoyo con que podamos contar en los niveles decisorios, y en el de nuestros pares, será crucial a la hora de los tropiezos y dificultades. Solicitar ese apoyo, comprometerlo es indispensable Será una temeridad aventurarse en modificaciones sustanciales del entorno sin asegurar previamente un entendimiento cabal de lo que nos proponemos, primero; y segundo, sin el logro, de un apoyo apropiado a su magnitud. (...) Un líder debe ser, ante todo, profundamente responsable. Y debe ser de manera individual y colectiva. Lo primero está ya dicho en la sección precedente. El aspecto colectivo de la responsabilidad atañe a su obligación de apoyar el desempeño responsable de los demás, y a la de asegurar que nuestra actuación, igualmente responsable se integre a la de ellos. No es algo, lo segundo, que nace espontáneamente, requiere vencer tendencias egoístas, que nos son connaturales; individualismos inveterados; oportunismos que nos invitan a aprovechar las debilidades ajenas en beneficio propio. ,¿Cuántas veces no escuchamos en las oficinas y en los 156 pasillos, la declaración enfadada de que “Eso no es responsabilidad mía” cuando surge la percepción de un problema? En un sentido restringido, puede que tal a cual asunto no nos competa de modo directo, que no encuadre en el ámbito limitado de nuestra autoridad funcional. Pero en un sentido radical, a la vista de la organización del todo, de la indivisibilidad de la empresa, no es noble en conciencia sustraerse a la responsabilidad colectiva. En el cuerpo humano, un tumor localizado en un órgano determinado, en un miembro, no es ignorado porque no afecta al cerebro, o al corazón. La salud es una: comprende la salud de todos los sistemas que hacen del cuerpo una unidad solidaria. Lo mismo es cierto en las empresas e instituciones. La efectividad de nuestra acción requiere apoyo; otro tanto vale para la de los demás. No escatimemos el concurso real que se nos solicite, e incluso, adelantémonos a ofrecerlo. La participación Un líder no es un superhombre. No puede él solo hacer nada que sobrepase de manera notable, la que el común de los mortales realiza. Su aporte verdadero, insustituible, singular, es lo que logra de quienes lo acompañan en la acción; es éste su mérito real. (...) El líder tiene por misión incrementar la productividad del entorno en el que la Providencia le ha colocado; su propia productividad, desde luego, pero, sobre todo, la de quienes desempeñan su trabajo bajo su conducción y autoridad. No es sólo cosa de sostener el ritmo productivo habitual: esto, que de por sí, requiere talento y esfuerzo (recuérdese el crecimiento de la entropía...), no basta. La demografía se encargará de restar mérito al simple mantenimiento del estado de cosas presente. La tarea por delante es la de aumentar la producción per cápita. No hay, bajo el cielo, otra forma de generar riqueza material. Y sin ésta, es altamente probable que la de orden espiritual también se estanque. Mejorar la productividad, incorporar cambios que incrementen la producción de la empresa para un nivel dado de insumos de capital y de trabajo, es la gran meta del liderazgo. Nuestro nivel de vida es el fruto del constante aumento logrado históricamente en 157 este parámetro. El bienestar de las generaciones futuras dependerá de lo que ocurra con su evolución. Parte del progreso dependerá de la transformación que las nuevas tecnologías posibiliten en el modo actual de realizar las tareas subyacentes en el sector industrial y en el de los servicios. Es posible, por ejemplo, que la difusión generalizada de las técnicas de la informática y de las telecomunicaciones, estén comenzando a tener impacto de manera esencial sobre el perfil contemporáneo de las economías. Es sólo ahora cuando, en efecto, se ha alcanzado una masa crítica en el despliegue de sistemas. (...) Alentar la participación, dar cabida a las ideas e iniciativas constructivas, fomentar un sentido crítico, no considerar intangibles los esquemas por los que nos regimos, dejarnos sorprender por nuevas visiones que rompen los moldes convencionales, éstos son los hábitos que cambian el mundo. Entrañan, también, riesgos, pero ya se ha dicho que éstos son constitutivos, que no cabe vivir sin su forzosa compañía. Los inmovilismos, es perpetuación del statu quo, es imposición de las normas y procedimientos de ayer, puede resultar más cómodo que la innovación, pero a la postre supone esta postura un peligro mortal. Los vientos de la historia, es mudanza del tiempo, no admiten permanencias... La celebración de los logros El verdadero líder, el que encara su vocación con humildad y sentido responsable, sabe que los logros son fruto del trabajo y del esfuerzo de quienes le rodean. Conoce y valora su propio aporte, desde luego, pero no olvida el concurso de los demás, y la celebra cordialmente. Un liderazgo ayuno de este sentido de reconocimiento, mezquino en el dogma, tacaño a la hora de felicitar, incapaz de prodigar merecidos cumplidos a sus subordinados y colaboradores por el empeño puesto en la tarea realizada con éxito, escasamente suscitará en el futuro un rendimiento efectivo. Todos necesitamos que se nos aliente. No, simplemente, que se nos retribuya por el trabajo. Desde luego, y no podría ser de otro modo, exigimos esto como mínimo. Pero, 158 por sobre la remuneración, el bienestar espiritual requiere que tengamos la satisfacción de saber que se reconoce nuestra contribución cuando supera los cánones ordinarios. Alentar y halagar son cosas bien distintas. Apreciamos lo primero, y sospechamos, a menos que seamos necios, de lo segundo. Tratar de ganarse la buena voluntad de los subordinados, congraciarse con ellos, mediante lisonjas, es un inequívoco signo de que falla el liderazgo en algo esencial: el de la autoridad intelectual, el del ascendiente. La celebración del éxito no es un edulcorante que sacamos de la alacena para mitigar el sabor amargo de los problemas y dificultades que entran en la lucha en el seno de una organización. La dureza de la vida no admite que la aplacemos: sangre, sudor y lágrimas, éstos son los atributos ordinarios. La Victoria (también las hay) no nos sonríe todos los días. Pero precisamente por ello, cuando el éxito corona nuestro trabajo, hay que saber celebrarlo. Hay que hacer participes del mismo a todos los que han contribuido; e incluso, discretamente, a los que poco han aportado, para que se dejen arrastrar por el entusiasmo.. Tomado de: Paul Leizaola. La Gestión del Cambio.Ediciones IESA. Caracas Abril. 1998. Páginas: 176-186 159 PRINCIPIOS EDUCATIVOS Y METODOLÓGICOS QUE ORIENTAN EL TRABAJO COMUNITARIO: Estos principios son los fundamentos en los cuales se apoya el trabajo de los promotores para lograr el adecuado desarrollo y bienestar de sus comunidades. Su importancia radica en que son necesarios para aumentar y mejorar las relaciones de los promotores con sus comunidades, porque facilitan el adecuado desarrollo del trabajo de los promotores en sus respectivas comunidades. A continuación destacamos los principios más importantes: La participación comunitaria: Es la acción o conjunto de acciones a través de las cuales la comunidad se involucra y toma parte. Esto significa que la comunidad se responsabiliza por la situación que la afecta. En este caso la comunidad asume los aportes a los que hubiere lugar para modificar aquellas condiciones que rompen con la armonía de la vida de los integrantes de la comunidad. La organización: Es la adecuada disposición o distribución de los recursos humanos, materiales, económicos, etc., conque contamos para llevar a cabo nuestra labor en el ámbito comunitario. La acción: Es la ejecución de una o varias actividades que se tiene previsto realizar en función de los objetivos comunes o individuales. Formación: Es el desarrollo de nuestras habilidades, destreza y capacidades grupales e individuales con miras a fortalecer y enriquecer el trabajo comunitario. La autogestión: Consiste en crear las condiciones favorables para la vida en comunidad, dar respuestas a nuestras necesidades. La autogestión implica pues, crear y administrar adecuadamente los recursos (humanos, materiales, financieros disponibles en la comunidad) para el logro de los objetivos comunes o individuales. La comunicación: Es el intercambio de ideas y de experiencias con relación al tema o problema que nos ocupa. 160 LA FAMILIA ES UN EQUIPO Cuando el equipo falla... Cuando falla algún miembro de la familia, o varios de ellos, se afecta todo el equipo. Si la pareja está mal, se dificultan sus tareas como padres. Si los hijos no colaboran o se pelean ente sí, los padres se desaniman, el ambiente se torna desagradable; ahora bien, en la familia como en todos los equipos, se ofenden, sosteniendo diálogos constructivos. Ejemplo de diálogo o conversaciones constructivas: * Una madre con su hijo -Me preocupa que tu cuarto esté desordenado, sé que eres capaz de ser ordenado. ¡Mira qué bien llevas tu álbum de barajitas!, con un poco de esfuerzo podrás mantener tu cuarto arreglado. *Una señora a su marido: Aprecio que quieras agradar a los niños comprándoles juguetes, pero Necesitamos ahorrar para comprar la lista de útiles escolares, ¿Qué te Parece si hacemos una lista de los gastos de este mes? *Una hermana a su hermano -Estoy molesta contigo porque te pusiste mi camisa sin decirme nada, por Favor, la próxima vez que necesites algo mío, me lo pides. 161 *Un hijo a su padre: -Papá me sentí muy mal cuando me castigaste por romper el pantalón nuevo. Yo sé lo que te cuesta comprarnos las cosas, pero fue un accidente me caí. Algunas personas tardan más que otras en reconocer sus errores, en Reaccionar y tomar decisiones. Es necesario ser comprensivos y estar muy atentos para darse cuenta de lo que pasa, a fin de ayudar a la familia. En ocasiones es bueno conversar sobre cómo se sienten los miembros de la familia, qué necesitan, cómo van las cosa. Podemos ser Protagonistas de los cambios que la familia necesita... Lo que hacemos puede ser un estímulo para mejorar las relaciones con papá, mamá hermanos. Es conveniente hacernos preguntas como las siguientes a fin de revisar nuestra Actuación: ¿ De qué manera le hago saber a mi familia, que la quiero? * ¿ Me intereso por sus cosas o soy indiferente? * ¿ Me acerco a ellos, los abrazo o me mantengo distante? * ¿ Les digo con frecuencia que los quiero o casi nunca lo hago? ¿ De qué manera los apoyo para que logren sus metas? * ¿ Les señalo sus fallas constructivamente o los insulto cuando se equivocan ¿ Les reconozco sus capacidades y logros o no les expreso nada? * ¿ De qué manera comunico mis necesidades? * ¿ Expreso mis emociones, problemas y necesidades o espero que me adivinen? * ¿ Solcito apoyo en el momento oportuno para lograr mis metas o exijo atención en forma desconsiderada? 162 Podemos cambiar esas actitudes y conductas que dificultan nuestra Participación en la familia. Sólo necesitamos disposición, entusiasmo y apoyarnos en los aspectos positivos que tenemos. Si es preciso debemos atrevernos a pedir ayuda a algún miembro de la familia, a amigos; o a particulares como psicólogos, orientadores o psiquiatras. Recordemos que: Con la participación de todos... el equipo gana GRUPOS SOCIALES Apoyo Social: Las personas que tiene familiares y amigo que le prestan apoyo y las animan se restablecen mejor. El sistema inmunitario funciona con mayor eficiencia y efectividad cuando hay apoyo social. Beneficios : . Integración al ambiente social, proporciona mayor bienestar . Psicológico . Familiar . Laboral / Escolar . Amistades Aceptar la protección . Está bien que otros te cuiden por un rato. . Acepta la compresión y la protección de tus amistades, tus parientes, tus compañeros y tus compatriotas. . Tus heridas emocionales son reales, debilitantes y dolorosa; está bien que te protejan. . Sé tan valiente que pude aceptar la protección y la ayuda de otros. . ¿Quiénes te han algún tipo de protección hasta ahora? 163 Pedir Apoyo: . No temas pedir lo que necesitas. . Es lo más humano que puedes hacer . Movilízate con tus familiares y amistades de la región a formar un Grupo de Apoyo Mutuo. . Moviliza a tus otros familiares y amigos a colaborar con ustedes. . No te olvides del mejor apoyo que existe: el que puedes conseguir atrás de la oración y de la comunicación con Dios a través de la Biblia. . ¿ Que puedes pedir y de quién? 164 ALGUNOS HALLAZGO DE INVESTIGACIÓN ACERCA DEL PODER DE LOS GRUPOS El individuo aislado no existe. Aquel que está triste entristece a los otros. Saint Exupéry,1942. Los efectos de los grupos sobre actitud y el cambio de conducta han sido ampliamente estudiados. A continuación se ofrece unas pequeñas muestras de los hallazgos relevantes en este tema. Un tratamiento más profundo se puede ver en la cuidadosa presentación de la investigación sobre conformidad de Kiesler y Kiesler (1969) Las actitudes y opiniones de la gente están fuertemente influidas por las normas y los propósitos de los grupos a los que pertenecen y quieren pertenecer. La gente es recompensada por conformarse con los criterios del grupo y castigado cuando se desvía de ellos. Los grupos son más efectivos induciendo presiones de conformidad en sus miembros cuando satisfacen las necesidades sociales y emocionales de sus miembros, así como sus propósitos. Los miembros de los grupos tienen más poder de influencia entre sí cuando forma parte de grupos de alta cohesión. La sola frecuencia de comunicación por parte de los miembros del grupo es un determinante principal de influencia interpersonal. Las personas que más hablan y dicen cosas positivas son las que más probablemente emergerán como lideres influyentes. Las influencia de los vecinos se incrementan son su proximidad. Los grupos pueden facilitar la liberación de conductas normalmente inhibidas en sus miembros mediante la difusión de responsabilidad, imitación, anonimato y contagio conductual. Este efecto desindivilualizante de << estar sumergido en el grupo>> puede llevar a la liberación de conductas violentas antisociales o conductas prosociales restringidas, como la de llorar o ser afectuoso dependiendo de las circunstancias. 165 La estructura de las redes de comunicación dentro de un grupo influyen en la manera en que la información se procesa ( se filtra a través de una posición central o la comparten todos en la red descentralizada.) La gente que está más adherida al grupo es probablemente lo que menos influyen en las comunicaciones que contradicen las normas del grupo. L as opiniones que la gente hace saber a otros son más difíciles de cambiar que aquellas que la gente sostiene privadamente. La participación del auditorio ( discusión del grupo) ayuda a disminuir la resistencia a la persuasión. La resistencia a una comunicación que va contra las normas se incrementa con la cantidad de identificación que se tiene con el grupo. El apoyo de una que otra persona debilita el poderoso efecto de la opinión mayoritaria en un individuo. * Una minoría de dos personas puede influir en la mayoría si ellos son consientes con sus respuestas desviadas. La necesidad mantener un consenso de grupo puede llevar a pensamiento de grupo, con la que la evaluación crítica individual se suprime y las opiniones personales no se consideran. 166 EJERCICIOS REALIZADOS EN LOS GRUPOS DE CONFRONTACIÓN Y TERAPIA DEL COMPORTAMIENTO Los terapeutas conductistas empezaron a considerar la aplicación de los procedimientos de los grupos de encuentro para conducir cambios específicos en la conducta. Liberman (19 ), propuso recientemente un esquema que relaciona diversos ejercicios con objetivo conductuales, como lo ilustra la tabla 20.1. TABLA 20.1 UTILIZACIÓN DE EJERCICIOS ESTRUCTURADOS DESTINADOS A FOMENTAR CAMBIOS CONDUCTUALES EN GRUPOS (LIEBERMA, 1972,PP.101-102) EJERCICIOS OBJETIVO CONDUCTUALES Uno de los miembros interrumpe en un Permitir que un nuevo miembro aislado del grupo círculo formado por los demás miembros se siente parte del mismo (iniciación) Quienes tienen los brazos entrecruzados Enseña a los individuo excesivamente intelectual y EJERCICIOS DE CONCIENCIA verbales a integrar sus impulsos sensoriales SOCIAL Reducir ansiedades y disidencias en un nuevo Hacer ruidos, jugar a las escondidas, grupo, calentar al grupo; fomentar una regresión imitando ser niño en un campo de juego que ayuda, al menos momentáneamente, a los miembros del grupo a suspender sus conductas ofensivas Simulación de carácter de lucha libre y de Disipara tensiones hostiles entre los miembros y otros juegos “combativos” canalizar respuestas agresivas 167 Se pide a un miembro que verbalice Enseñar la autoafirmación emocional; directamente sus sentimientos hacia cada desensibilizar la ansiedad que acarrea esta uno de los demás miembros autoafirmación, la cuerda de guerra Enseñar La cuerda de la guerra la colaboración organización; enseñar en equipo reciprocidad y en la las respuestas ante el otro equipo Promover el espíritu Partes unidas; lata de sardinas de cohesión y de participación Despertar y dar a los miembros la oportunidad de Juegos de fantasías y ejercicios gestálticos resolver una relación emocionalmente problemático, experiencia emocional correctiva Los miembros expresan en una forma no Enseñar a los individuos a recibir y aceptar afectos verbal sentimientos positivos hacia los demás Enseñar cómo seguir la dirección de otra persona y Juegos de espejos a moverse de modo que la otra pueda seguir fácilmente En parejas, parafrasea un una miembro resume afirmación de y Enseñar a cada unos de los compañeros a escuchar su atentamente y a comunicarse con el otro compañero antes de emitir una afirmación propia 168 PARTICIPACIÓN COMUNITARIA Y DESARROLLO LOCAL. El incentivar la participación de la comunidad como herramienta dentro de un proceso de desarrollo local, plantea la necesidad de trabajar en función de criterios claros que permitan reconocer los propios procesos existentes y además puedan ir creando nuevos paradigmas que fijen pautas para la creación de una cultura comunitaria, necesaria para el desarrollo local efectivo, sin perder la visión global de la dinámica social. Plantear el desarrollo local, es una nueva visión sobre el papel que cumple la comunidad en los cambios sociales, y a la vez, es un reto en la medida que implica la existencia de actores comunitarios capaces de protagonizar la vida local e impactar el quehacer global del país. A partir del análisis de experiencias y el trabajo efectivo en el impulso de proyectos que realmente han incorporado a la comunidad en su proceso de transformación social, el CESAP ha logrado identificar siete criterios, los cuales actúan como piezas de un mismo engranaje para facilitar la incorporación de la gente; estos criterios son: Acción, Formación, Participación, solidaridad, Comunicación, organización y Autogestión. La Acción Es el motor de la participación y por ende del desarrollo local, así como el mecanismo que se adopta para llevar adelante una propuesta. Lo primero que la gente observa en un grupo es ¿Qué es lo que hace? Y se acercará a este si la acción que realiza es significativa para ellos(Martín Baró, 1986.) Una acción es significativa si responde a necesidades sentidas por la comunidad o si plantea alternativas que tengan sentido para ella; cuando decimos que es necesario responder a necesidades sentidas, estamos hablando de la importancia que tiene el hecho de que se apunte a reivindicaciones básicas que implica mantener un diálogo constante con la realidad en la que se quiere actuar y la ejecución de acciones, que dejen un saldo positivo inmediato en las condiciones de vida de las comunidades o personas que participan en el proceso. 169 El carácter de las acciones va cambiando de acuerdo a como se vayan complejizando los proyectos y al grado de incorporación que se logre con las personas. Las acciones pueden ser esporádicas, continuas o permanentes. - Acciones Esporádicas: Este tipo de acción es muy importante, porque sirve como punto de partida para lograr la participación de los miembros de la comunidad. Son motivadoras y no exigen mayor esfuerzo por parte de esta, se organizan de acuerdo a momentos o coyunturas, se adaptan a las posibilidades de la gente y tienen un objetivo inmediato que se logra en la propia actividad. - Acciones Continuas: En este tipo de actividad los miembros de la comunidad comienzan a asumir tareas y responsabilidades concretas. Se comprometen con el proceso, resuelven necesidades de la comunidad que no se resuelven de inmediato y se organizan para un período de tiempo, mas largo durante el cual deben funcionar equipos o comisiones. - Acciones Permanentes: (Proyecto de acción) Estas acciones parten de un diagnóstico de la realidad y responden a una planificación con perspectiva de transformación de la misma, implica varias actividades (esporádicas, continuas, permanentes) que s e van implementando para lograr objetivos a corto, mediano y largo plazo, además de generar diversas instancias de participación, a través de distintas responsabilidades que pueden asumir los miembros de la comunidad interesados en integrarse. La formación No se puede decir que la comunidad es protagonista sólo porque se logren reivindicaciones o porque se actúe de manera organizada; un verdadero protagonista, además d e saber cuales son sus necesidades básicas, comprende las causas de sus problemas y puede buscarle soluciones globales, negocia y participa; por otro lado, conoce y comprende la necesidad de la organización y la asume, no sólo como un espacio donde se siente bien y puede lograr la soluciones inmediatas, sino como un espacio estratégico para su propio desarrollo. 170 El asumirse como protagonista no sucede de manera automática, es parte del desarrollo personal y colectivo que se logra en espacios formativos, donde se puede hablar de lo que se vive tanto en la cotidianidad, como en las acciones que se realizan. Dichos espacios se pueden aprovechar para conocer otras experiencias y problematizar la propia, así como para analizar, comentar e informarse de lo que pasa en la sociedad o en ámbitos que tienen que ver con las situaciones que se viven. La participación Es uno de los ejes centrales para el trabajo comunitario. La comunidad comienza a ser protagonista en la medida que se va involucrando, tanto en las acciones como en los proyectos. La participación es también un criterio, con sus propias peculiaridades, y de hecho, cuando se trabaja con la comunidad se va presentando en niveles paulatinos. El nivel de participación va depender del grado de identificación y compromiso, que vayan adquiriendo las personas con el proyecto que se lleva adelante. También en este criterio se puede hablar de tres niveles. -Nivel de Asistencia: Es la manera de participación más común y que se logra con mayor rapidez. No requiere una identificación con el proyecto, es mas bien una forma de reconocer su existencia, tiene características de espontaneidad, improvisación e intermitencia y se logra gracias a la promoción, motivación y convocatoria. Este es un nivel clave y necesario, mas aún, es a partir de este nivel que se podrán alcanzar los siguientes y normalmente es el grado que se logra con la mayoría de los miembros de la comunidad. -Nivel de participación Permanente: Esta participación se logra con personas que ven la importancia del proyecto y están pendientes de él, asumen responsabilidades puntuales, colaboran y apoyan. También asumen responsabilidades concretas y comienzan a manejar la idea de tomar parte en un proyecto dentro del cual su aporte es necesario. -Nivel de participación orgánica: Se trata de una participación planificada donde las personas se identifican con el programa o proyecto y lo asumen como suyo. En este 171 nivel la persona siente que el proyecto es importante y comparte sus objetivos, asumiendo tanto tareas de planificación como de ejecución y coordinación, la persona valora y tanto su aporte como el de los demás y se convierte en promotora que anima a los otros para que participen en el proyecto. A nivel general se trata de una participación continua de grupos y organizaciones que intentan construir proyectos comunes; se actúa de manera planificada proyectando lo que se quiere y precisando lo que se puede. Esto tiene que ver con la jerarquización de los problemas que se quieren resolver y la proposición discriminada de los proyectos que se van a implementar. La solidaridad Uno de los objetivos centrales que se plantea el desarrollo local es la convivencia solidaria. En la medida que se vayan logrando espacios y experiencias de solidaridad, en esa medida la comunidad se irá incorporando a propuestas que mejoren su vida. La solidaridad se va desarrollando paralelamente con los otros criterios desarrollados anteriormente. De acuerdo al nivel de compromiso presente en el acto de solidaridad, se puede hablar de tres niveles: La solidaridad espontánea y coyuntural, la de compromiso permanente y la estratégica y articulada. La Comunicación - Es el medio a través del cual se intercambian las ideas, se discute y se dialoga. La comunicación garantiza la interrelación, la adopción de acuerdos y el trabajo colectivo. Una vez que las personas de la comunidad saben de la existencia de un programa, se acercarán a este o aumentarán su participación, si conocen sus objetivos. Dependiendo de la relación que se produzca podemos hablar de tres niveles o formas de comunicación. - La información unidireccional. Es un primer momento en el proceso comunicacional, en el cual decimos lo que nos proponemos, se espera que luego lleve al diálogo; sin 172 embargo, generalmente este nivel de comunicación permanece y predomina, no sólo en las relaciones cotidianas sino también en la relación de muchos promotores con la comunidad. Se produce cuando se dicen las cosas sin tomar en cuenta lo que piensan los demás. Se le informa a ala comunidad lo que se quiere hacer, no se crean los espacios para que de su opinión y se le crean todas las soluciones. Esta manera de comunicarse se produce cuando se elaboran los planes sin haber entrado en un diálogo, con aquellos que de alguna manera se van a ver involucrados en los proyectos que se implementen. - La información bidireccional: Se habla de este tipo de información cuando cada quien conoce en el colectivo lo que el otro quiere hacer pero no se afectan entre sí. En esta forma de comunicación no se buscan caminos comunes y pocas veces los proyectos entran en diálogo. Cada persona o grupo está convencido de que su trabajo es el mejor. , y no está dispuesto a introducir elementos sugeridos, que puedan variar sus proyectos; este tipo de comunicación lleva a la existencia d gran diversidad de propuestas en un mismo espacio social y al choque entre los grupos y las personas que los impulsan y a su vez genera la dispersión o la fragmentación de propuestas globales y lleva a l surgimiento de posiciones personalistas, que dificultan la acción colectiva. - La comunicación dialógica: Es el proceso que permite el diálogo, la reflexión y el análisis colectivo. En ese nivel de comunicación todos son receptores (reciben), transmisores(llevan) y emisores(envían) de mensajes; las acciones se deciden en base a las opiniones de todos, en el caso de los proyectos hay diálogo cuando además de informarle a la comunidad lo que se hace, se oyen sus opiniones, se toman en cuenta sus necesidades y costumbres para planificar las acciones. Asumir una actitud dialógica es muy importante para incentivar la participación en el desarrollo local, porque en la medida que la gente se sienta tomada en cuenta y valorada, tiende a integrarse con identificación a los proyectos. La organización La organización implica la unión de esfuerzos para lograr metas colectivas y superar problemáticas comunes. Es el espacio ideal para mostrar la solidaridad, el 173 diálogo, el compromiso personal; así como los otros criterios que hemos nombrado hasta ahora. Es a partir de la organización que las comunidades comenzaran a ser fuerza de presión social. La organización no se decreta, se va alcanzando paulatinamente y se construye en la medida que se va avanzando en el compromiso, en la elaboración de planes permanentes y en la identificación de lo que quieren los sujetos que se están organizando. Puede ser entendida en tres niveles, que a su vez están muy interrelacionados, estos niveles van desde los grupos aislados iniciándose, hasta la organización local y finalmente la organización regional o movimiento comunitario. Saber identificar y valorar estos niveles de organización es importante, ya que implica reconocer la existencia de iniciativas, que buscan dar respuestas a situaciones que afectan a algún grupo o sector de la comunidad, independientemente de su alcance. Además representan el inicio de un camino en la búsqueda de propuestas colectivas. La autogestión Podemos decir que la autogestión es un proceso, donde la comunidad o grupo social va asumiendo por sí misma aquello que le interesa, cuando se produce la negociación entre los distintos actores y cada cual actúa a partir de sus propios recursos exigiendo a los otros cumplir con su rol. Se va logrando en la medida que la gente desarrolla la capacidad de controlar su medio y de manejar las situaciones que le afectan, en la medida que se va sintiendo capaz de determinar el mejoramiento de las condiciones en que vive. Vivir la autogestión no es algo que ocurre de un día para otro amerita ir conquistando espacios en los que se pueda vivir experiencias, que le permitan a las personas entender la importancia de ser autor y protagonista de las situaciones. Al igual que la organización, también se puede entender en tres niveles que detallaremos a continuación. - Autogestión grupal: Hablamos de que hay autogestión grupal cuando, en el colectivo son sus miembros los que determinan los objetivos y metas; de la misma manera, son los miembros los que manejan los recursos y controlan los medios para 174 conseguirlos. Es necesario que los miembros tomen conciencia del papel que cumple cada persona en el marco de la responsabilidad colectiva y que ese papel sea respetado. Para esto es indispensable que todos manejen la información de lo que pasa en el grupo, así como del funcionamiento y de los fines que este persigue. Autogestión social: Es el proceso a través de cual las comunidades, de manera organizada, van asumiendo mecanismos que les permiten presionar o controlar a los organismos encargados de administrar los servicios, los recursos y las leyes; esto por un lado, significa la toma de conciencia de las comunidades sobre sus derechos y su participación en acciones para que estos se cumplan; por otro lado exige capacidad de hacer propuestas y elaborar alternativas frente a las situaciones que viven. Autogestión política: Es aquella que se debe ir logrando paralelamente con la autogestión grupal y social. En un primer momento, significa conocer las leyes, conocer el estado y las instituciones así como saber su funcionamiento y atribuciones. En un segundo momento es ir haciendo sentir la voz como comunidades organizadas, tanto en los ministerios como en el gobierno; en fin es hacer que la palabra de la comunidad tenga peso. En un tercer momento es la acción como movimiento organizado, la cual convierte a las comunidades en fuerza social. BIBLIOGRAFÍA: Hernández Eneiza y otros: “Participación, ámbitos, retos y perspectivas” Ediciones CESAP, Caracas, 1996. 175 EMPODERAMIENTO Y PARTICIPACIÓN El intentar hacer una definición utilizable del concepto “Poder” amerita pasearse por dos definiciones clásicas que muestran el rango en el que puede entenderse este término. “La capacidad de individuos, grupos y organizaciones para imponer su voluntad aún frente a la resistencia de otros”(M.Weber.) “La capacidad de los individuos para influir en los acontecimientos”(Sharp y Fegerson) Una discusión sobre el término poder puede llevarnos a un ejercicio intelectual que por supuesto, sería interesante; pero cuando se intenta incidir en las relaciones de ese poder, ya las cosas cambian. Surge entonces el Concepto de “Empoderamiento” que de alguna manera parece proponer alteraciones, y según la perspectiva con que se asuma puede representar una real intención de que sectores más relegados y vulnerables del sistema que se trate (sociedad, comunidad, familia, organización, etc.) se conviertan en actores protagonistas de su vida y desarrollo. Como resultado de discusiones, provocada por el Nicaragüense Luis Felipe Ulloa, en diferentes talleres que ha facilitado, se ha construido la siguiente afirmación: “Una organización, o una comunidad está empoderada cuando sabe lo que tiene, sabe lo que quiere, puede hacerlo, quiere hacerlo, lo está haciendo y lo comparte... todo eso dentro de un marco de principios y valores compartidos que aseguran la armonía entre las gentes diversas, entre la gente y la naturaleza y entre cada persona consigo misma.” Se puede apreciar como el empoderamiento implica una alta capacidad y ejercicio de autogestión, no es un proceso mecánico donde alguien con poder puede desear ”concedérselo” a otro. Mientras este último no lo desee, no lo va a ejercer. La historia muestra casos de organizaciones y sectores sociales que aparentemente, ejercían empoderamiento, el cual era re-confirmado tanto por sus palabras como por dirigentes y analistas, sin embargo una vez que se presentaron cambios drásticos en el entorno político, social o cuando desaparecieron ciertas condiciones favorables del momento o beneficios laterales no explícitos, toda esa apariencia de “empoderamiento” se esfumó y el proceso pareciera haber dado reversa. El asunto es que solo hubo un empoderamiento no muy avanzado o definitivamente aparente y algún aspecto o elementos de la definición anterior no se cumplieron. Las organizaciones que pretenden empoderamiento, avizoran tres fuentes principales desde donde pueden incidir los actores sociales: - Desde los espacios donde se hacen las normas y las leyes - Desde los espacios en los que se toman las decisiones operativas. 176 - Desde los espacios de presión social que se suponen también espacios propositivos. Si bien una organización que intenta empoderarse, busca presencia en los tres espacios mencionados, existen dos aspectos a resaltar, que pueden ser actualmente oportunidades en pro de la incidencia en las organizaciones de base, estas son: a) La tendencia a la descentralización estatal y aún de organismos de la sociedad civil b) La fuerza que va adquiriendo la idea de poder local. Proyectos e instituciones que intenten promover el empoderamiento, propiciarán la intervención, desde los tres espacios de incidencia y los esfuerzos de descentralización y de realce del poder local. También deben estimular la producción local y la interrelación económica para que las organizaciones de los beneficiarios accedan a recursos, los administren y ejerzan el derecho de decidir el destino de los mismos, bajo parámetros reflexionados de convivencia social y armonía con la naturaleza. El empoderamiento es competencia principalmente del sujeto mismo, no de los demás. Quien en últimas decide empoderarse o decide no empoderarse; o simplemente no decide nada... es el sujeto mismo, esto es aplicable ya sea de manera individual o colectiva, es decir. Trátese de una persona, una organización de base o una comunidad. Sin embargo en las redes sociales y distintas expresiones de integración, se presentan juegos de poder, y allí mismo ha de estimularse el ejercicio democrático para evitar excesos. Lo que se gana más con este abordaje es devolver la responsabilidad principal a las organizaciones de base y comunidades, las que en últimas son responsables de su futuro. Responsabilidad que si es asumida en cada comunidad, en cada organización de base, sin necesidad de superhéroes que los suplanten, tiene que producir resultados realmente sorprendentes. Comunidades de base una forma de participación social. Las comunidades de base son un caso entre varios, de lo que puede llamarse “Participación popular”. Su experiencia en América latina puede equipararse a la de pobladores urbanos y campesinos pobres. Pero por otra parte, esta experiencia de participación tiene lugar a partir de un horizonte conceptual, simbólico y práctico que es propio de las comunidades de base y que constituye su identidad. Las comunidades tienen un período de auge en América Latina desde comienzo de los 70 y se extiende hasta fines de los 80. A partir de allí comienza una paulatina declinación. 177 La mayor parte de los miembros de las comunidades son “excluidos”, es decir: desempleados, trabajadores eventuales o informales; una importante proporción de mujeres y una cantidad de jóvenes pobladores así como indígenas, campesinos y pobladores pobres. Por lo general son personas que no han tenido una experiencia organizacional o de participación previa. El grueso de sus prácticas se resume en dos líneas principales: La solidaridad y los Derechos Humanos, en ambas líneas fue muy importante el apoyo de la iglesia institucional. Las iniciativas buscaban enfrentar la situación económica extrema de los pobladores a través de distintos tipos de organizaciones como lo fueron los comedores, las ollas comunes, los comprando juntos o cooperativas, los comités de allegados, los grupos de salud, los comités de desempleados, entre otros. En la otra línea las comunidades se organizaron en grupos de Derechos Humanos los cuales promovieron denuncias de carácter simbólico, como fueron las romerías, los vía crucis, las vigilias etc. A través de estas prácticas las comunidades se constituyeron en espacios importantes para la articulación de acciones populares solidarias o culturales. En la comunidad se da una relación dinámica con las personas que las constituyen ya que esta juega un papel importante en el proceso de personalización, porque allí el pobre es acogido y se le reconoce en su dignidad como persona, por sus prácticas, por los espacios de comunicación que abre, por las relaciones afectivas que establece y porque pone en marcha procesos de aprendizaje. El crecimiento personal y el desarrollo de la comunidad como actor colectivo se alimentan mutuamente, teniendo lugar así un proceso de construcción de identidad tanto a nivel personal como colectivo. En dicho proceso se recogen y valoran las raíces indígenas, populares, obreras y femeninas donde al mismo tiempo se construye y proyecta algo nuevo. La experiencia de las comunidades de base representa así un movimiento que se configura no solo sobre demandas específicas, sino sobre una identidad. La construcción de esta identidad es el presupuesto y a la vez la esencia de la constitución de la comunidad y de sus miembros en sujetos activos. BIBLIOGRAFÍA: Ulloa, Luis Felipe: “Empoderamiento de las organizaciones de base desde proyectos de desarrollo” (EmpodProyectos.) Álvarez Bueno, Elías: “Características del líder empoderador” Castillo, Fernando: “Participación y exclusión: Una aproximación al tema desde la experiencia de las comunidades de base” File://Al/Consolidación de la Part...a en Honduras_archivos/confere2.htm. 178 LAS REDES: EL CAMBIO SOCIAL Introducción Recientemente, como resultado de las nuevas maneras de pensar y de actuar, en el Tercer Sector1 han comenzado a definirse y aplicarse, o a utilizarse con mayor intensidad, principios, tales como los de autorregulación, horizontalidad, participación, transparencia, visibilidad y autosostenibilidad, algunos de los cuales no son privativos de dicho sector. Esos principios, al combinarse con los avances tecnológicos de los últimos años (y, particularmente, los de la computación y las llamadas “súper autopistas de la información”), han “potenciado” a algunas de las instituciones no lucrativas, haciéndolas integrarse en una nueva, dinámica, flexible y poderosa figura social: la red, que es capaz de producir una especie de “reacción sinérgica en cadena”. 1 Diversas definiciones se han dado del Tercer Sector. Entre otros nombres, se lo denomina “Tercer” para diferenciarlo del Sector Gobierno y del Sector Mercado o Lucrativo Juristas, sociólogos, antropólogos, comunicadores sociales, políticos y una pléyade de técnicos observan con asombro y admiración esta figura que se proyecta como una extraordinaria herramienta para un mejor y más rápido desarrollo social. Las redes nacieron para quedarse con el hombre, con la sociedad: así como el desarrollo de ésta es progresivo, lo que implica el surgimiento de nuevas y más grandes necesidades sociales, también será progresivo el de nuevas y más grandes redes, ya que ellas son el instrumento más idóneo para que el Estado pueda interpretar, conocer y satisfacer real y efectivamente a la comunidad; y transformar de manera armónica a las instituciones del Estado. No será posible privar de ellas a la Humanidad, como no es ya posible privarla de los avances de la tecnología. Cuando estudiábamos las organizaciones primarias de la sociedad civil, nos llamó la atención la circunstancia de que existían ciertos vasos comunicantes entre algunas de ellas; de modo que de manera informal, espontánea, sin existir vínculo aparente alguno, dichas organizaciones en ocasiones “tejían”una red y proyectaban una voluntad colectiva. Tomado de: Miguel Angel Itriago y Antonio Itriago. Las Redes: el Cambio Social. Sinergia. Caracas, Enero 2000. Páginas: 9-11 179 LAS REDES Y EL CAMBIO. RESUMEN En nuestro concepto, dentro del Sector No Lucrativo Latinoamericano, por “red’ debe entenderse una organización independiente, representativa, participativa, horizontal, interactiva, estable, orgánica y flexible, principalmente integrada por instituciones y personas jurídicas sin ánimo de lucro, que tiene por finalidades: a) Representar, promover, potenciar y defender general, parcial o sectorialmente derechos e intereses comunes de sus afiliadas; b) Tratar de lograr de los órganos, organismos y funcionarios del Estado la aceptación de una creciente y adecuada participación de la comunidad en las planificaciones y decisiones relacionadas con los asuntos de su incumbencia; y, muy especialmente, que dichos entes u órganos adopten o modifiquen, según el caso, las políticas y leyes que de una manera u otra puedan interesar o afectar los intereses comunes que la red representa; c) Propiciar la actuación armónica y coordinada de sus integrantes en los asuntos que les conciernan o interesen; d) Promover la interacción entre ella y sus afiliadas, y de éstas entre si, principalmente para que intercambien o compartan esfuerzos, bienes, informaciones, conocimientos y experiencias para un mejor y más económico aprovechamiento de sus recursos; e) Asesorar a sus afiliadas y orientarlas en todo lo relacionado con el establecimiento y aplicación de sus respectivos sistemas de autosostenibilidad y autorregulación;) y f) Realizar o ejecutar (por si misma o conjuntamente con otros entes) investigaciones, estudios, obras o programas sociales, en las materias de su incumbencia, y que individualmente las instituciones que la integran no podrían realizar o sólo podrían alcanzar de una manera parcial o reducida o con esfuerzos desproporcionados con relación a sus respectivos recursos. Como estructuras orgánicas y estables, las redes se encuentran mejor capacitadas para cumplir su misión de nuevas representante de la Sociedad, es decir de la dueña del Estado, y para plantear, discutir y hasta rechazar por todos los medios legales a su alcance, las decisiones que se aparten del bien de la comunidad o sector de ésta que representen. Con una actitud pasiva, sumisa ante el Sector Estado o el Sector Mercado, las redes jamás podrían realizar los cambios profundos que ameritan las estructuras sociales de la región latinoamericana. Es por eso que incluimos en la definición de red no lucrativa, la búsqueda de espacios propios y de espacios compartidos para la sociedad civil organizada dentro del llamado espacio público o espacio político. En los países que ya han logrado un verdadero desarrollo social, es decir en los que existe una sociedad civil organizada, y las instituciones, en mayor o menor grado, responden genuinamente a los intereses de sus comunidades, los fines políticos de las redes se han atemperado; pero, insistimos en este punto, las redes latinoamericanas persiguen o deben perseguir fines mucho más ambiciosos, 180 porque sus objetivos están en función de las necesidades sociales, y es obvio que esas necesidades son mayores en nuestra región que en los países más evolucionados socialmente. No obstante, no deben convertirse en partidos políticos ni en instrumentos de éstos. Destacamos que la política de la globalización es un hecho, e independientemente de que sea buena o mala para la raza humana, si no buscamos mecanismos que unan y fortalezcan sus organizaciones, Latinoamérica estará en una mayor desventaja con relación a las uniones o alianzas estratégicas, políticas, sociales y económicas que se están formando en el resto del mundo. Para poder enfrentar el desafío múltiple, variable, incesante e inclemente que implica la política de globalización, tenemos que fortalecer nuestro Tercer Sector y no existen medios más rápidos, igualitarios, justos y mejores para ello, que las redes, y las redes de redes, no lucrativas. El símil de esta figura con un tejido puede servir para fines didácticos y para su mejor comprensión: en un tejido normal no existen mayores diferencias entre un filamento y otro; cada uno conserva sus propiedades características; la resistencia, fortaleza y belleza del conjunto (tela o paño) están en función del número, calidad y colorido de los hilos, así como del número y forma de la trama, es decir de las vinculaciones o nudos; por lo general, algunos hilos pueden ser suprimidos, sustituidos o añadidos sin afectar esencialmente al resto; y el conjunto, se adapta a la forma del sitio u objeto sobre el cual se coloca; y puede ser dividido en varias piezas de la misma textura. Pero la red es un tejido vivo, integrado por comunidades, ergo seres humanos. No es una textura pasiva, inmóvil, muerta, sino que está llena de vida, de muchas vidas; de muchas mentes, pensamientos, voluntades y acciones. Muchas de las asociaciones civiles y fundaciones primarias de Latinoamérica tienen un explicable, pero infundado temor, de ser absorbidas u opacadas por las redes no lucrativas. No obstante, el éxito de la red es el respeto de la individualidad de sus afiliadas; una absoluta horizontalidad garantiza que las normas internas de la organización serán el producto acuerdo de sus voluntades y no de una imposición. Esta horizontalidad no podría garantizarse ni mantenerse sin autorregulación. Las redes no aparecieron para desplazar a las Federaciones o Confederaciones no lucrativas; antes por el contrario, la colaboración entre ellas puede ser altamente beneficiosa para el Tercer Sector. No obstante, para nadie es un secreto que la tendencia en el mundo moderno es la de dar preferencia a las organizaciones descentralizadas, horizontales y que admitan la participación de sus afiliadas en su dirección y administración; razón por la cual muchas de las asociaciones estructuradas de manera vertical o jerárquica, y no participativas, de forma progresiva irán perdiendo miembros y fuerza social, y tendrán que transformarse en redes, si desean subsistir. Las redes son el medio más efectivo de lograr una estructura social sólida, armónica, participativa, democrática y verdaderamente orientada al bienestar común. Su importancia es tal que se 181 ha definido al Tercer Sector como el desafío de la Sociedad Civil por constituirse en “un núcleo organizado de redes” que cooperen en torno de intereses comunes. Las redes y las redes de redes pueden defender de forma efectiva al Sector contra injustas e indebidas intervenciones; pueden colaborar con el Estado en la redacción de leyes y decretos en las materias de sus respectivas especialidades; pueden dar votos de confianza o de rechazo que otorguen mayor o menor credibilidad o aceptación a órganos, funcionarios, organizaciones e, incluso, a empresas o productos o servicios. Las redes son instituciones escuela en las que sus integrantes aprenden a convivir en paz y democracia, no obstante las naturales diferencias de pensamientos y objetivos. El proceso de formación de una red no es otra cosa que el mismo proceso que determinó el nacimiento de los Estados. El estudio del origen y nacimiento de las redes puede aportar una invalorable información política, jurídica y sociológica para la comprensión del Estado, de sus órganos y de sus regulaciones; y servir de instrumento eficaz para la orientación de políticas de participación ciudadana. No puede existir una sociedad verdaderamente organizada si no existen redes que en un proceso continuo de readaptación representen genuinamente los intereses de la comunidad y participen en las decisiones gubernamentales. La libertad de expresión y el derecho a la información se consideran hoy elementos inherentes al sistema democrático, y en el mundo moderno las redes están íntimamente ligadas a esos derechos. Para que exista una verdadera democracia no basta con la fórmula tradicional del equilibrio de los Poderes Públicos. El mundo ha cambiado mucho desde la Revolución Francesa: ahora también es necesario el equilibrio entre los tres Sectores: Gobierno, Mercado y Sociedad Civil. Sólo a través de sus redes puede el Tercer Sector lograr una armónica autorregulación y evitar injustas, inoportunas o intervencionistas regulaciones por parte del Sector Gobierno. Corresponde a las redes actuar como coordinadoras y orientadoras del sistema de autorregulación de sus afiliadas. Sin redes, serían una utopía las llamadas Alianzas Tripartitas o Sistemas Integrados o Programas emprendidos o ejecutados con la colaboración o cooperación de los tres Sectores, ya que el poder decisorio de las asociaciones civiles o de las fundaciones y de otras organizaciones primarias de la Sociedad Civil en esa clase de instituciones (es decir, en las Alianzas Tripartitas) seria arrollado por el inmenso poder de los otros dos Sectores. Lo mismo podría decirse de las Alianzas Bipartitas, en las que el Tercer Sector intervenga con uno cualquiera de los otros dos. La red viene a llenar un vacío que existe en nuestro Derecho, ya que nuestras tradicionales organizaciones verticales de segundo y ulteriores grados (federaciones y confederaciones), tenían un tope e techo jurídico que no les permitía: a) desarrollarse armónicamente sin perder su individualidad e 182 identidad; b) conservar la pluralidad de sus ideologías; c) evitar los gastos desproporcionados que implicaba el sostenimiento de una más pesada infraestructura; d) no remover ni sustituir, para crecer, a sus promotores, directivos o administradores particulares; ni colocarlos en situación de subordinación respecto a los de otras organizaciones de mayor grado; y e) limitar mediante parcelas jurídicas, los riesgos que las actuaciones de un departamento de la organización, podrían ocasionar al prestigio y patrimonio asociacional o fundacional. Aunque las redes, a través de la cooperación Inter-institucional, puedan implicar economía de recursos, incluso los de carácter laboral, su efecto en las regiones en donde operan es el de aumentar las fuentes de empleo, por su condición de promotoras de los desarrollos sociales y potenciadoras de las actividades de sus afiliadas o de sus respectivos sectores. Además, las redes promueven la autosostenibilidad de sus integrantes, lo que implica el diseño de nuevas y más productivas actividades económicas. No debe olvidarse la capacidad de las redes de programar, diseñar, desarrollar o ejecutar macro programas y el apoyo económico que reciben de las agencias de cooperación internacional (ACIs.) Las redes pueden ayudar a evitar que las políticas de descentralización preconizadas hoy por casi todas las democracias del mundo deriven hacia la anarquía o a la atomización de los poderes públicos, sin afectar ese proceso de desmembramiento y acercamiento de esos poderes a las comunidades. Las redes tienen una energía sinérgica de la cual carece una institución vertical, por grande y poderosa que ésta pueda ser. Si a ese agregamos el uso compartido y racional de los recursos y experiencias; el parcelamiento o deslinde jurídico de las responsabilidades, especialmente las de carácter laboral (en las redes formales); la posibilidad que tienen las afiliadas de retirarse de sus redes sin que se alteren ni la estructura ni la organización de éstas; el aval moral e institucional que implica el respaldo de las redes; la posibilidad de acceder a informaciones, programas y financiamientos, nacionales y extranjeros; el poder político que implica la participación ciudadana ejercida a través de las macro organizaciones; y el bajo costo de la afiliación a las redes; entenderemos por qué el Tercer Sector está prestando atención a la descollante figura de la red. Las redes son instrumentos que bien utilizados pueden ser muy beneficiosos para la comunidad; pero que mal o deficientemente usados podrían causar un irreparable lucrum cessans social, si se nos permite ese término para expresar los beneficios que la comunidad podría dejar de percibir o que recibiría con retardo, en caso de una ineficiente o mala administración. En el fondo la novísima figura de la red no es más que “la niñez de la Sociedad”. Volver a ella, retornar a ella, pero con las experiencias, conocimientos, medios e instrumentos de nuestra época, que nos permitirán corregir errores del pasado y crear un Estado más justo y participativo, del cual todos nos podamos sentir orgullosos. Basta imaginarse como sería el Estado si sus creadores hubiesen tenido 183 los conocimientos, experiencias y recursos técnicos (especialmente de almacenamiento y trasmisión de información) de los cuales hoy disponemos. Las redes nos conceden esa oportunidad de “rehacer” el Estado desde abajo, desde las comunidades, con los extraordinarios recursos de los cuales dispone hoy la Humanidad. Tomado De: Miguel Angel Itriago y Antonio Itriago. Las Redes y el Cambio Social. Sinergia. Caracas, enero 2000. Páginas: 207-214. 184 SOCIEDAD CIVIL Y REDES SOCIALES Dentro de una realidad dinámica cambiante las redes han existido siempre; Esto implica que existen formas de relación, interacción, comunicación e intencionalidad desarrolladas en el tiempo de determinadas coyunturas y momentos históricos asumen formas diferentes. Por lo tanto lo que podríamos considerar como factores de ruptura de las redes sociales; por ejemplo Gobiernos dictatoriales, desempleo, hiperinflación, acciones terroristas o catástrofes naturales; pueden ser, desde otro punto de vista, generadores de nuevas redes. Asimismo, los intentos de las comunidades de agruparse para lograr responder a una preocupación, una necesidad o interés pueden ser vividos solo como parte de la estrategia de supervivencia y no como una “organización en red” La propuesta que introduce la posibilidad de actuar en red, favorece, en el contexto de los cambios actuales, la necesidad imperiosa de reconstruir la sociedad civil. Se parte de la idea que la sociedad civil se desarrolla y crece a partir de que sus integrantes puedan evolucionar de persona-objeto a persona-sujeto, con un protagonismo responsable en las diferentes redes en las que actúan e incrementar la capacidad de toma de decisiones en función del bienestar de su comunidad y el desarrollo de la producción, al sentirse productores activos. “Esta perspectiva considera el sentido amplio de sociedad civil, entendida como un entramado de instituciones sociopolíticas que incluye un gobierno (o estado) limitado, que opera bajo el imperio de la ley; un conjunto de instituciones sociales tales como mercados (u otros órdenes espontáneos extensos) y asociaciones basadas en acuerdos voluntarios entre agentes autónomos, y una esfera pública, en la que estos agentes debaten entre sí y con el Estado acerca de asuntos de interés público y se comprometen en actividades públicas. La sociedad es civil en tanto sus agentes son ciudadanos – y no meros súbditos de una casta dominante o de un tirano-, y por lo tanto miembros de una sociedad “civilizada” – no de una sociedad bárbara o atrasada-. Pero la cuestión es que pueden ser ciudadanos porque son autónomos, y a su vez pueden ser autónomos frente al estado sólo porque éste tiene un poder limitado para entrar dentro del dominio reservado d e estos agentes.” 1 Al hacer referencia del surgimiento de la idea de sociedad civil en Latinoamérica, debemos remontarnos a los regímenes autoritarios de las décadas de los años 60-70 que impidieron el accionar de las organizaciones sociales que surgieron al amparo del estado. Sindicatos, asociaciones estudiantiles y de profesionales y ligas campesinas, entre otros, vieron cercenado su accionar. Empero en la lucha contra las dictaduras surgieron innumerables organizaciones y grupos sociales de base, muchos de los cuales se fueron relacionando ya no por una convocatoria desde el estado sino por los 185 puntos comunes y el aporte de recursos para resolver sus reivindicaciones. Este proceso es el que ha llevado a concebir en América Latina, de un modo muy marcado, la separación entre el estado y la sociedad civil, y ha llegado a plantearse que formaban parte de ella todos los grupos y organizaciones que no pertenecieran a la clase dominante o gobernante. Luego de años de gobiernos de facto en la mayor parte de estos países, sobrevienen las crisis hiperinflacionarias en los años 80. Este proceso agudiza la quiebra de la relación benefactora del estado con la sociedad: Los diferentes sectores al mismo tiempo que incrementan su proceso de exclusión social, profundizan las formas organizativas que habían comenzado a adoptar, a la vez que gestan nuevas con un marcado predominio de la autogestión En los años 90 nos encontramos con gran incertidumbre, predominante en el accionar y el pensamiento humano. Hay cambios en los paradigmas productivos, hay modalidades inéditas en la competitividad universal, hay una creciente complejidad y heterogeneidad en la comprensión y abordaje de la realidad. Sin embargo, ese estado de incertidumbre, ampliamente descrito en la literatura económica, psicológica, sociológica, pedagógica y política, nos coloca frente a la necesidad de revisar los paradigmas desde los cuales fue pensada la realidad. El inicio de esta década encuentra a la mayoría de los países latinoamericanos con gobiernos elegidos por el voto. Sin embargo la crisis de representatividad de las instituciones, otrora significativa, se mantiene vigente. La entrada en la democracia encontró una serie de movimientos sociales nuevos. “Una buena parte de esta experiencia surge de simples situaciones de vida, muchas veces en los barrios pobres que se convirtieron en hábitat de millones de familias obreras del todo el continente. Estas luchas-ampliamente ignoradas por la prensa- tienen lugar en todas las grandes ciudades de Latinoamérica. En muchos casos, la lucha por vivienda, agua. Luz y servicios urbanos ya no se libran en el aislamiento sino que se comienza a formar una red de movimientos de barrios. Surgen nuevas formas de autoayuda y de formación política, en grupos de vecinos, comunidades eclesiales de base, grupos de mujeres y trabajadores, cooperativas de alimentos, o hasta en sus expresiones mas negativas, en forma de delincuencia colectiva por parte de pandillas de jóvenes, desempleados en su mayoría”.2 Desde la perspectiva de reconstrucción de la sociedad civil y el pensar en red se presentan múltiples experiencias que demuestran, por un lado la posibilidad de hallar formas alternativas de reclamo frente a las necesidades y por otro que existen modos posibles de actuar con el estado y de optimizar el proceso de autogestión. De este modo, la intervención en redes sociales posibilita la creación de respuestas novedosas frente a los problemas y necesidades; la posibilidad de toma de conciencia, esto es, pasar de “aquello que hago habitualmente sin darme cuenta un darme cuenta a partir de compartirlo con otros”; el 186 incremento de la responsabilidad social, la formación y desarrollo del ciudadano, la capacitación de actuales y futuros dirigentes de la comunidad, el incremento de l grado de complejidad de las organizaciones sociales y su proceso de desarrollo así como la capacidad de gestión para abrir un mayor grado de desarrollo de los procesos autogestivos y el surgimiento de nuevas formas cogestivas. 1 Pérez Díaz, Víctor, La primacía de la sociedad civil, Madrid, Alianza, 1993. 2 Castañeda, Jorge G., La utopía desarmada, Buenos Aires, Espasa Calpe/Ariel,1993. BIBLIOGRAFÍA: DABAS, Elina y NAJMANOVICH,Dense: “Redes, el lenguaje de los vínculos” Editorial Paidós. Argentina, 1995. 187 UNIDAD V: PARA REFLEXIONAR Posterior al desarrollo de esta unidad reflexiona por unos minutos: ¿Qué aspectos trabajados en esta actividad permitirán la consolidación de un plan de reconstrucción? ¿Qué aprendizajes descubriste y cómo lo incorporarías en un plan de reconstrucción a nivel comunitario? ¿Bajo qué estilo de liderazgo te haz manejado hasta el momento? ------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------- 188 BIBLIOGRAFÍA -“Redes, el lenguaje de los vínculos” Dabas, Elina y Najmanovich,Dense Editorial Paidós. Argentina, 1995. - Seis Programas para Prevenir y Controlar el Estrés. J. Neihardt., M. Weinstein, R Contry. Ediciones Deustro S.A. Madrid. 1989 -Actuemos: Alternativas para la prevención del tráfico y consumo de drogas. Conacuid, Venezuela. 1995 - Educación Comunitaria, Ministerio de la Familia, Venezolana. 1997 -Un Manual de Recuperación Emocional encuentra cosas que puedes hacer cuando no hay nada que hacer. Brenson Lazán, Gilbert. Fundación Neo- Humanista. Santa Fe de Bogota, Colombia. - El Libro Guía de su hijo. Goodman Susan. Biblioteca Práctica Salvat No 3, Madrid, 1980 - Hábitos de Crianza y Marginalidad. Recagno Ileana. Instituto de Psicología, U.C.V. -Psicología de la Conducta Anormal Enfoque Clínico Experimental. Geral G. Davison, John M. Neale. Editorial Limusa México -Principios básicos de la planificación comunitaria. Sanchez Escalante, Pedro. Caracas: Fundacomun, 1991. página 22. 189