MONICIÓN DE ENTRADA. Lector 1: Ha llegado el momento de hacer una parada en el camino, retomar fuerzas para seguir caminando y acercarnos a la juventud busca referentes para sus vidas. Después de esta jornada sigamos poniendo con ánimo renovado todo lo que esté a nuestro alcance para recorrer el camino junto a los jóvenes que nos rodean y que llevemos a nuestras comunidades un mensaje renovador: Lector 2: Nunca digas, no sé, no valgo, no puedo, no tengo fuerzas, no entiendo, esas cosas son para los que saben. Para hacer Iglesia y Pueblo, todos valemos, sabemos y podemos. Si tienes cinco dones… pon cinco; si tienes uno… pon uno. Se valiente y humilde para descubrir y reconocer tu don; Si Dios te dio corazón que tu boca no falte en la hora de la fraternidad. Si te dio alegría, que tu alegría no falte en la fiesta de los pobres. ¡Anímate! Juntos hacemos Iglesia. Juntos formamos la familia vicenciana. CANTO DE ENTRADA: A encontrarte venimos/ Ven Jesús ACTO PENITENCIAL Porque muchas veces no es que no queramos mirar como miras tú, sino que nos dejamos llevar por nuestras ideas y prejucios. Perdón Señor. Por las veces que no nos detenemos ante las necesidades de los jóvenes y nos dejamos llevar por las prisas del quehacer. Perdón Señor Porque muchas veces no sabemos dejarnos mirar por ti, porque sabemos que tu amor incondicional nos compromete. Perdón Señor. LECTURAS: Monición a la Lectura Dios se escoge lo que el mundo no quiere para anunciar su mensaje. Porque sabe mirar más allá de las apariencias, no se queda ni en lo externo ni en lo negativo, sino que nos mira en toda nuestra plenitud y nos llama a darnos a los demás. Es la experiencia que hoy nos propone Pablo. Es nuestro mayor tesoro, de lo único que merece la pena presumir. Primera Lectura Lectura de la Primera carta del Apóstol San Pablo a los Corintios 1, 26-31 Esto es lo que predicamos; esto es lo que habéis creído Considerad si no, hermanos, vuestro grupo de llamados: no hay muchos sabios, ni muchos poderosos, ni muchos nobles; Dios eligió lo que el mundo tiene por necio para humillar a los sabios; lo débil, para humillar a los fuertes; lo vil, lo despreciable, lo que es nada, para anular a los que son algo; para que nadie presuma delante de Dios. Por él vosotros estáis en Cristo Jesús, el cual de parte de Dios se ha hecho para nosotros sabiduría, justicia, santificación y redención, para que, como dice la Escritura, el que quiera presumir de algo, que presuma de lo que ha hecho el Señor. Salmo: El Señor es mi Pastor nada me falta/ El Señor es mi luz Antífona de Interleccional: Dame alguien que me guíe Lectura del Evangelio: Mt 11, 25 – 27 (ó. Construir la casa) En aquel tiempo, tomando Jesús la palabra, dijo: « Yo te bendigo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has ocultado estas cosas a sabios e inteligentes, y se las has revelado a pequeños. Sí, Padre, pues tal ha sido tu beneplácito. Todo me ha sido entregado por mi Padre, y nadie conoce bien al Hijo sino el Padre, ni al Padre le conoce bien nadie sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo se lo quiera revelar. Oración de los fieles: En este día te pedimos por cada uno de los miembros de la Familia Vicenciana para que estemos abiertos a la voluntad de Dios en nuestra vida, y respondamos con generosidad en la construcción del Reino, roguemos al Señor. Pedimos por nuestras comunidades, parroquias, grupos… para que sean mensajeros de la fraternidad y de la paz en medio del mundo. Roguemos al Señor. Para que ante las grandes necesidades del mundo, Dios ayude a los jóvenes a sacar lo mejor de sí mismos y ponerlo al servicio de los más pobres. Roguemos al Señor. Para que no dudemos de plantear la vida como vocación y recordemos que la tarea de la Pastoral Juvenil es misión de todos y que cada uno de nosotros tenemos mucho que aportar. Roguemos al Señor. Por cada una de nosotros para que estemos atentos a las necesidades que nos plantean los jóvenes de hoy y sepamos entenderlos poniéndonos a caminar a su lado. Roguemos al Señor. Oremos para salir al encuentro de Cristo que viene en los jóvenes con lenguajes y planteamientos nuevos para rejuvenecer nuestra Iglesia. Por todos los que sufren injusticias, para que encuentren el consuelo del Señor y el auxilio de sus hermanos, roguemos al Señor. OFERTORIO. Pan Vino: El pan y el vino que traemos ante Tí es algo más que una comida. Son signo de unidad. Es el amor hecho compromiso, servicio y esfuerzo. Queremos amar al igual que Tú, sirviendo a los pobres que nos encomiendas. Cadena de Fidelidad: Señor te ofrecemos esta cadena de fidelidad, está formada por diferentes eslabones pero todos unidos a Ti y a los de nuestros fundadores. Cada uno de los eslabones es el Sí personal de una hermana de la provincia. Que seamos instrumentos tuyos para que los jóvenes se unan a esta cadena de fidelidad que Tú sostienes. Cesta con las piedras: Aquí tienes estas piedras, Señor ayúdanos a ser instrumentos tuyos y poder acompañar a los jóvenes en el descubrimiento del tesoro que llevan dentro y fundamenten su vida en ti. SEMANA VOCACIÓN MISIÓN: Por último te ofrecemos Señor el Poster de la Semana Vocación Misión, que seamos capaces de salir a los caminos de nuestro vivir cotidiano y buscar gente con hambre de ayudar. CANTO PARA EL OFERTORIO: Haced un lugar en vosotros/Sigue habiendo SANTO: Santo, en lo alto del cielo. PAZ: Gesto: Queremos llenar nuestras vidas de color, queremos ser transmisores de tu buena nueva, de los valores presentes en los que son referentes en nuestro vivir. Intercambiemos nuestro lazo de color como signo de estar unidas en Él desde la tonalidad que Él nos regala. COMUNIÓN: Hermana Confía en Dios Hermana que conoce el mundo de hoy pero crees en laminada de Jesús, acoge humildemente, ese Dos es para ti, camina confiando en el Señor. Es Dios quien nos reúne a todos para sí formando una gran fraternidad. Y nuestra buena Madre nos ayuda a decir Sí, Santa Luisa nos enseña a responder. Hermano Mío, confía siempre en _dios, Él te conoce bien, y siempre te acompañará. Hermano mío, en la dificultad Dios siempre será fiel. Su amor nunca te dejará. Extiende tú las manos y abre el corazón, al joven y al pequeño sin hogar de la pobreza amigo, del amor universal, abierto ala Palabra y a los demás. Son muchos los que han dado ejemplo al caminar, felices de entregar su vida a Dios. Nos mueve su respuesta a entregar el corazón, promesa de ser santos para Dios. ...Es como nos quería Vicente de Paúl, debemos hacer vida nuestro sí. ACCIÓN de GRACIAS: Señor hoy queremos decirte gracias. Gracias por cada hermano, por cada grupo y comunidad que viven el milagro constante de tu amor. ¡Qué grande es nuestra gran familia! Gracias por el testimonio de vuestra fe. Gracias por tanta vida callada y generosa. Salgamos a las calles de nuestras ciudades y pueblos y busquemos a gente con hambre de ayudar. Gracias Padre porque caminas a nuestro lado y nos muestras la piedra preciosa que se encuentra en nuestro interior. Gracias porque con tu ayuda seré instrumento tuyo para la juventud que nos rodea. Pon en mis labios la palabra oportuna, la mirada atenta y el deseo de caminar a su lado. Amén. Envío: El sacerdote nos envía a nuestras comunidades para llevar el deseo de acompañar a la juventud y la inquietud de buscar a gente con hambre de ayudar. (se entrega el símbolo por comunidad para que durante la semana vocación misión lo tengamos presente) Canto: Envíame