PROMOCION Y PROTECCION DE LA SALUD SEXUAL Y LA PROCREACION RESPONSABLE EN EL MARCO DE MUNICIPIOS SALUDABLES 1 Introducción: La incorporación del concepto del ejercicio responsable de la sexualidad se incorpora en el proyecto de Municipios Saludables con el objetivo de prevenir circunstancias que puedan dar lugar a problemas en salud de la población como el embarazo no deseado, particularmente en adolescentes, el aborto provocado y sus consecuencias, las Infecciones de Transmisión Sexual (ITS ), el HIV/SIDA, enfermedades prevalentes ginecológicas y problemas psicológicos y sociales relacionados como la violencia y el abuso sexual. Frente a estas situaciones es necesario reconocer, en primer lugar, que la sexualidad es un tema íntimo de las personas y que generalmente se halla refrendado por mitos, creencias, represiones, costumbres y hábitos propios transmitidos de generación en generación. Ellos constituyen el andamiaje de múltiples inequidades de género, comportamientos y prácticas que lesionan la Salud Sexual y Reproductiva. Es de suponer, entonces, que los cambios necesarios pueden ser difíciles de lograr si además de la participación grupal no se promueven espacios individuales y particulares para las necesidades propias de cada integrante de la comunidad. Estas necesidades particulares no satisfechas son generadoras de angustias, frustraciones, sentimientos de culpa y en ocasiones respuestas violentas que afectan directamente la calidad de vida e influyen negativamente en el desarrollo humano. Se genera de esta manera, un círculo vicioso que impide la participación positiva en los grupos de trabajo. En Salud Sexual y Procreación Responsable, el trabajo directo con la comunidad necesariamente debe ser complementado con espacios de encuentro bidireccionales (Consejería) para que las decisiones individuales sean tomadas libre, voluntaria y razonablemente con la base de una adecuada y fidedigna oferta de información y el acompañamiento para la toma de decisiones. Esto significa que las intervenciones a desarrollar asegurarán el respeto de los derechos de las personas incluyendo sus derechos sexuales y reproductivos, lo que requiere la utilización de metodologías e instrumentos apropiados que faciliten la reflexión y el análisis personal. Si bien las acciones, estarán destinadas a toda la población comunitaria es importante tener en cuenta la focalización prioritaria en grupos de mayor vulnerabilidad como son los niños y adolescentes, jóvenes que viven con su pareja, mujeres en el período post parto y post aborto, mujeres en período climatérico y adultos mayores, mujeres discapacitadas, hombres, trabajadoras sexuales, homosexuales y víctimas de violencia física y/o abuso sexual . Desarrollo de actividades La prevención en Salud Sexual y Procreación Responsable en las comunidades es una herramienta fundamental para acercarnos a la realidad del barrio. Los problemas que en ellos se reconocen sólo pueden ser solucionables con un compromiso de esa misma sociedad organizada. Las autoridades locales en conjunto con la sociedad civil involucrada actúan como un eslabón de apoyo y orientación y multiplican su importancia en situaciones donde la familia no puede asumir plenamente su rol. 1 Lic. Inés Martínez, Programa Nacional de Salud Sexual y Procreación Responsable, Dirección de Maternidad e Infancia, Ministerio de Salud de la Nación . 1 Por lo que, el primer paso es la creación de una red comunitaria de prevención compuesta por actores institucionales y civiles de la comunidad. La tarea de prevención no puede estar reservada a expertos en la temática sino formar parte de prácticas colaborativas de distintos actores, cada uno desde su rol y ámbito propio. Dicha red comunitaria propiciará actividades de sensibilización o sea intentará atraer la atención de los integrantes de la comunidad para un fin determinado: prevenir enfermedades ginecológicas, ITS /HIV/SIDA y procrear responsablemente, temas que mejoran la Salud Sexual de los individuos. Esta propuesta significa sumar esfuerzos para que en los ámbitos considerados de riesgo se implementen acciones que enfrenten las dificultades y problemas reconocidos particularmente en cada comunidad. Es recomendable la constitución de un grupo de trabajo comunitario interdisciplinario que coordine y articule las acciones y esté conformado por autoridades gubernamentales, representantes del sector salud, educación, organizaciones no gubernamentales y participantes elegidos por la comunidad ( dos por lo menos o en número proporcional ) . Dicho grupo de trabajo heterogéneo e intersectorial podrá consensuar perspectivas y saberes para reflexionar sobre la temática, confirmar o corregir líneas de trabajo, buscar nuevos objetivos y encontrar alternativas adecuadas para inplementar. El objetivo particular será facilitar la disponibilidad de espacios concretos donde se intercambie información, reflexione y acompañe las decisiones que mejoren la Salud Sexual y Reproductiva de los individuos. Bases a tener presentes para la acción. La familia y sus miembros son el primer modelo de conducta para el niño. Cuando las relaciones familiares se desarrollan con afecto y comunicación eficaz, la sexualidad se expresa con sentido respetuoso para sí mismo y para el otro. El autocuidado y respeto por el otro son la base para desarrollar conductas sexuales saludables por lo que es indispensable reflexionar con la comunidad: 1.- acerca de las actitudes cotidianas dentro del grupo familiar. 2.- la observación y el análisis de esas situaciones. 3.- el alerta a actitudes negativas y sus consecuencias. Con esta base se puede iniciar un proceso comunitario de construcción de la identidad, de conservación de la capacidad crítica y la posibilidad de la libertad de elección; específicamente con grupos etáreos jóvenes se fortalece la autoestima y la seguridad individual. Prevenir es conocer con anticipación un daño o perjuicio para poder evitarlo, para que ello sea posible es necesario informar a las personas para que puedan tomar decisiones autónomas y responsables para su salud. En salud sexual cada actor social juega un papel importante: la familia en evitar daños, los docentes en brindar información fidedigna a través de la educación formal, las ONGs estimulando la participación, los gobiernos formulando la aplicación de los Programas y los medios de comunicación masiva difundiendo y ampliando conceptos claves sobre riesgos y factores protectores. Será primordial focalizar la temática referida a actividad sexual precoz, embarazo adolescente, prevención de ITS/HIV/SIDA, maltrato físico y abuso sexual, promoviendo en todos los casos, hábitos saludables y la pesquisa de factores y conductas de riesgo. En líneas concretas de implementación es necesario asegurar previamente: a.- La existencia de servicios asistenciales que puedan recibir la referencia de las demandas especiales detectadas. b.- La posibilidad de líderes o referentes comunitarios para la detección de dificultades y trabajo horizontal con la comunidad. c.- La articulación de acciones concretas y conjuntas con otros sectores. 2 Sentadas estas bases programáticas se procederá a planificar las actividades a desarrollar en cada municipio: 1. Alianza / convenio político-técnico para la implementación del Plan de Acción. Se asegurará articulación con Programas Nacionales y locales existentes. 2. Diagnóstico de situación local. Este análisis se realizará previo a la redacción e implementación del plan de acción El mismo ayudará a los promnotores a determinar el camino de sus esfuerzos y servirá posteriormente para evaluar el efecto o impacto generado. Se tendrá en cuenta para el diagnóstico: Población destinataria. Tasa de embarazo por grupo etáreo Tasa de aborto. Prevalencia de ITS/HIV/SIDA. Edad promedio de inicio de actividad sexual. Grado de acceso a servicios de atención e información. Relevamiento de actores gubernamentales y no gubernamentales que se ocupan o realizan actividades sobre el tema. Número de Programas existentes actualmente en desarrollo. Existencia o no de tareas de información realizada con adultos propias y sobre prestaciones realizadas con niños o adolescentes. 3. Formulación de objetivos y metas acordes a las necesidades relevadas. 4. Formación de redes intersectoriales . Las alianzas establecerán las funciones adecuadas a los objetivos establecidos. A modo de ejemplo: si la meta es facilitar el acceso de xxx mujeres y hombres de la comunidad a los servicios de Planificación Familiar asistenciales, los objetivos del trabajo comunitario estarán dirigidos a: . Brindar información sobre Salud Sexual y Procreación Responsable al mayor número posibles de integrantes de la comunidad. . Referenciar al hospital/ centro de salud todos los casos que requieran o demanden consejería y/o diagnóstico y tratamiento ginecológico. . Asegurar la entrega gratuita del método elegido por la mujer y/o pareja que aceptaron participar en el Programa de Salud Sexual y Procreación Responsable subsidiado por Nación. 5. Fomentar actividades para aumentar la participación de toda la población y fortalecer el apoyo a los Programas existentes. Una vez constituída la red de apoyo y evaluado las necesidades se preparará material de comunicación social que permita difundir las futuras actividades y se realizarán campañas educativas que sensibilicen a la población. El apoyo a los Programas asistenciales existentes se puede planificar: . Fortaleciendo la comunicación abierta y franca entre adultos y jóvenes : la información ofrecida al adulto fortalece y asegura la promoción y /o acompañamiento del adulto a la consulta. . Impartiendo educación sexual en las escuelas: si bien es cierto que la educación sexual forma parte de la vida y contexto familiar de cada persona, la escuela desempeña una importante función. La conceptualización curricular con un contenido integral adecuado a la edad y al desarrollo cognitivo afectivo ( desde la etapa preescolar a la finalización de la enseñanza media ) 3 debería ser una tarea a trabajar localmente con las autoridades Las experiencias demuestran que los jóvenes que han recibido información no sesgada en temas sobre sexualidad y cuidados postergan el inicio de las relaciones sexuales y favorece la utilización de métodos de barrera para su protección y el uso de métodos anticonceptivos para evitar embarazos no deseados. . Favorecer la comunicación fluída entre el equipo de salud y la comunidad : cuando ambos colaboraron desde el inicio del proceso tienen claro las dificultades y necesidades mas urgentes y las respuestas mas efectivas .De esta manera se adquiere una visión complementaria facilitando las soluciones mas adecuadas y viables. El equipo de salud se asegurará contar con el recurso humano, insumo y equipamiento para abordar la demanda. Ambos constituyen un ¨sistema completo ¨ pués comparten una zona de consenso donde conocimientos y recursos, aspiraciones y acciones se acompasan para generar el impacto esperado. 6. Evaluación El mismo equipo constituído para la coordinación y articulación de actividades evaluará el proceso y los resultados del proyecto de trabajo . La combinación con evaluaciones externas siempre conlleva mayor seguridad para entender la dinámica y el proceso social que atraviesa la estrategia implementada. Por otro lado ,evita suceptibilidades y compromisos de quienes participan . Es conveniente que los participantes puedan ¨ autoevaluarse ¨. La autoevaluación propia y de los grupos de trabajo ayuda a mejorar la estrategia, identificar logros y dificultades, detectar fortalezas y debilidades y no solamente cuantificar lo transitado. - Evaluaciones de proceso No hay un momento clave para realizar las evaluaciones de proceso solo es necesario que esté vinculada con el diagnóstico de situación inicial. Es conveniente determinar los mecanismos con los que se realizará previamente. Por lo general se utiliza mas de un mecanismo : entrevistas con el equipo técnico, encuestas a grupos focales , actividades de observación . - Evaluación de resultado Cuando se implementan programas de promoción de la salud y en especial en la temática Salud Sexual y Procreación Responsable, la evaluación de resultados adquiere una dinámica mas flexible y diversa. No obstante será importante reconocer los siguientes cambios, al final del proceso: - - - Conocimentos obtenidos relacionados con la información brindada. Se medirá motivación, comportamientos, habilidades adquiridas. Grado de participación comunitaria, empoderamiento de la comunidad, participación del hombre y adolescentes, opinión pública. Condiciones y estilos de vida saludables adquiridos: grado de utilización de métodos anticonceptivos, negociación y utilización de métodos de barrera para prevención, número de consultas realizadas en consejería. Efectividad de los servicios de salud: cobertura gratuita de métodos anticonceptivos según elección del usuario, acceso brindado a actividades de información y acompañamiento, calidad de las prestaciones, disponibilidad de insumos para controles ginecológicos ( PAP , colposcopía ) , disponibilidad de reactivos para testeo ( HIV, VDRL, Hepatitis B), tratamientos implementados. Redes de apoyo comunitarias logradas. Resultados en salud de la población, relacionados con los indicadores buscados en el diagnóstico de situación y los objetivos propuestos: edad promedio de inicio de actividad sexual , porcentaje de utilización de métodos anticonceptivos por grupo etáreo, tasa de embarazo adolescente,. tasa de aborto por grupo etáreo, prevalencia de ITS/HIV/SIDA. 4