7. PSICOLOGÍA COGNITIVA (COGNITIVISMO) 7.1. El paradigma del ordenador: almacenamiento y procesamiento de la información. Los orígenes de la psicología cognitiva: La corriente de psicología llamada cognitivismo nace tras la segunda Guerra Mundial como reacción a algunos aspectos del conductismo, pero mantiene el principio de modificación de la conducta. Frente a la tesis conductista que sostiene la no existencia de actos mentales internos (recordemos que para el conductismo sólo existen conductas observables de distintos organismos), la psicología cognitiva se basa en la existencia de actos internos y retoma el estudio de la mente como parte esencial de la psicología. A diferencia del psicoanálisis o la psicología de la Gestalt, el cognitivismo comprende la mente humana comparándolo con una máquina, concretamente con el ordenador ¿De dónde proviene esta relación mente-ordenador? Durante la Segunda Guerra Mundial se produjeron grandes avances tecnológicos. Entre ellos, aparecieron las primeras máquinas que procesaban información, es decir, recibían un mensaje y lo descifraban. Los nazis utilizaron la máquina ENIGMA para transmitir mensajes ocultos de sus estrategias de ataque y defensa. Alan Turing, un filósofo y matemático británico, trabajó para los aliados en busca de otra máquina que descifrase los mensajes ocultos de ENIGMA. Sus estudios de ingeniería y de algoritmos ya le habían permitido diseñar la máquina de Turing, un modelo computacional que realizaba lecturas y escrituras de mensajes. Durante la guerra, además de ENIGMA, nació la computadora Z3, en el bando nazi, y Colossus, en el bando aliado, máquinas programables y completamente automáticas. Colossus fue la máquina que consiguió descifrar ENIGMA y fue un paso decisivo para que la guerra fuese ganada por los aliados. Tras la guerra comenzaron una gran parte de filósofos y psicólogos norteamericanos a plantearse la pregunta: ¿pueden las máquinas pensar? Se llegó a la conclusión que, aunque las máquinas y los seres humanos son realidades distintas, el mecanismo de pensamiento humano es semejante al funcionamiento de un ordenador. Pero esto es sólo una comparación. Los ordenadores, a diferencia de los humanos, no tienen relaciones sociales, ni tampoco tienen vida emocional y afectiva. Aparte de los avances tecnológicos en la ingeniería computacional, es importante destacar dos grandes influencias que recibe el cognitivismo: los estudios sobre el lenguaje Noam Chomsky y los avances en la neurofisiología. ¿Qué estudia la psicología cognitiva? La psicología cognitiva estudia los procesos intelectuales del ser humano, más concretamente, cómo se produce el conocimiento humano y si éste tiene límites. Este campo de estudio coincide con lo que en filosofía se denomina teoría del conocimiento. 1 El cognitivismo estudia la mente humana como un conjunto de procesos donde se codifica y almacena información procedente del exterior. Los procesos se pueden clasificar de los más simples a los más complejos: 1. Percepción, 2. Atención, 3. Memoria, 4. Lenguaje, 5. Razonamiento. Además, la psicología cognitiva ha desarrollado una terapia (terapia cognitiva), una psicología social y una teoría del aprendizaje (como ya había hecho el conductismo). No existe un psicólogo fundador de la psicología cognitiva, aunque podemos nombrar a Albert Ellis (1913-2007), creador de la terapia REBT y George Kelly (1905-1967) como dos representantes importantes. La metáfora del ordenador: Un ordenador se compone de un hardware y un software. Según la metáfora menteordenador, el ser humano tendría un hardware, el cerebro, y un software, las estructuras mentales. Los psicólogos cognitivos estudiarían el funcionamiento del software humano, es decir, las estructuras del pensamiento y las operaciones de la mente. Igual que un ordenador posee dos memorias: una memoria RAM (de trabajo y procesamiento de información) y una memoria ROM (de almacenamiento de información en el disco duro), así encontramos en el ser humano dos tipos de memoria: memoria a corto plazo y memoria a largo plazo. En el apartado siguiente analizaremos mejor estos dos tipos de memoria. La psicología cognitiva, por tanto, se relaciona con ramas de las ciencias de la computación como la inteligencia artificial. La inteligencia artificial es una disciplina vinculada a la robótica y encargada de producir software y hardware inteligentes. Sus inicios se remontan a la prueba que realizó Alan Turing para saber si un ordenador puede pensar. La prueba de Turing consiste en un experimento encaminado a comprobar si las computadoras piensan. Se siguen los siguientes pasos: 1.Se toman dos personas y un computador, una de las personas es un interrogador y la otra persona y el computador son los elementos a ser identificados. 2.-cada uno de los elementos del experimento esta en un cuarto distinto. 3.-la comunicación entre los elementos es escrita y no se puede ver. 4.-si después de un cierto número de preguntas y respuestas el interrogador no puede identificar quien es el computador y quien es la persona, entonces podemos decir que el computador piensa. La prueba de Turing recibió diversas críticas. Otras ciencias y disciplinas como la teoría de la información (rama de las matemáticas que se centra en cuantificar la información – destaca Shannon) y la cibernética (disciplina que estudia sistemas reguladores, sistemas de control y comunicación – destaca Wiener) también se relacionan con la psicología cognitiva. 7.2. Percepción, atención y memoria. 2 La percepción es el proceso cognitivo más elemental y es fundamental dentro del proceso de adaptación del organismo a su ambiente. Principalmente se divide en percepción interna (hambre, sed, dolor, etc.) y percepción externa. Los interoceptores son sentidos que reciben estímulos internos a nuestro organismo, mientras que los exteroceptores reciben estímulos externos a través de los cinco sentidos. Los órganos de los cinco sentidos captan información del exterior y la procesan. Los objetos del mundo externo emiten señales que son luego codificadas por nuestro organismo. El oído, por ejemplo, codifica la actividad mecánica de las moléculas en sonido. La vista codifica un número determinado de espectros electromagnéticos en forma de luz. El olfato y el gusto procesan información proveniente de la naturaleza química de los objetos. El tacto es un sistema complejo de sensación, compuesto por la piel, músculos, articulaciones, tendones etc. Gracias al tacto codificamos información exterior en forma de movimiento, calor, placer, dolor, etc. La percepción es siempre selectiva, pues dependiendo del organismo y sus órganos sensoriales, se puede codificar un número limitado de informaciones. Así ocurre que muchos animales tienen algunos órganos sensoriales más desarrollados que el ser humano (por ejemplo, el olfato en los perros). En la percepción se diferencia el umbral máximo, el umbral mínimo y el umbral diferencial de percepción. Los umbrales de percepción pueden variar en diferentes organismos y también en un mismo organismo cuando se producen alteraciones en la percepción. Las alteraciones del proceso más importantes son las ilusiones y alucinaciones. La atención es un segundo nivel dentro del proceso cognitivo y es también muy importante para la adaptación. La podemos definir como la capacidad que tiene la mente de ser consciente de sucesos internos o externos al organismo. La atención se divide en atención involuntaria (cuando atendemos a un fuerte dolor involuntariamente) y atención voluntaria (cuando hacemos consciente un proceso perceptivo) La atención voluntaria es siempre selectiva, pues captamos en nuestra conciencia ciertos elementos dejando otros en segundo plano. La atención se puede medir mediante grados de concentración y existen una serie de prácticas para aumentar la concentración (desde el juego de ajedrez hasta técnicas de meditación, como el yoga). También existen alteraciones de la atención como la distracción (el sujeto se deja llevar por pensamientos o estímulos externos irrelevantes), labilidad de la atención (se produce una fluctuación constante de la atención), fatigabilidad (rápido cansancio de la atención) Uno de los trastornos de atención más frecuentes se deben a la hiperactividad. La falta de motivación, la depresión o el consumo de drogas pueden conducir a una importante disminución de la atención. La memoria, en un tercer nivel, es un proceso mental que permite al sujeto almacenar, codificar y recuperar información. Para ello se requiere de percepción y atención. La memoria es uno de los procesos que más ha sido estudiado por la psicología cognitiva. Algunos autores 3 distinguen tres tipos de memoria: a) memoria sensorial; b) memoria a corto plazo; c) memoria a largo plazo. a) Memoria sensorial: Es la que retenemos a partir de la información de los sentidos. Especialmente han sido estudiadas la memoria visual y la memoria auditiva. Es una memoria muy débil y dura aproximadamente medio segundo. b) Memoria a corto plazo: La memoria a corto plazo codifica la memoria sensorial, la procesa y la elabora para luego enviarla a la memoria a largo plazo. Tiene una duración aproximada de medio minuto y poca capacidad de almacenamiento. Se utiliza cuando nos enfrentamos a nuevos aprendizajes y conocimientos. Existen muchas técnicas para codificar la información de la memoria a corto plazo. Se han utilizados recursos mnemotécnicos como asociar palabras a lugares, utilizar rimas o juegos de palabras. La memoria a corto plazo es equivalente a la memoria RAM de un ordenador y almacena pocos elementos, que podrían compararse con los bits. c) Memoria a largo plazo: La memoria a largo plazo almacena todos los conocimientos que están en posesión de un ser humano, todo lo que hemos ido adquiriendo a través de la experiencia. Se asemeja al disco duro de un ordenador, a la memoria ROM, aunque su capacidad es ilimitada. Mucha información de la memoria a largo plazo permanece oculta durante largos años y es necesario el uso de unas técnicas para hacerla aparecer. Existe una estrecha relación entre la memoria a corto plazo y la memoria a largo plazo, pues cuando codificamos una información nueva en la memoria a corto plazo, en seguida se establece una relación de retroalimentación (feedback) con informaciones anteriores almacenadas en la memoria a largo plazo (la memoria antigua ayuda a retener nuevas informaciones). Para que la memoria a largo plazo funciones correctamente es necesario que sea un proceso de acuerdo a criterios claros y sencillos. En este sentido, la mente humana dispone de una serie de programas, al igual que un ordenador, es decir, esquemas o estructuras que le permitirían encontrar informaciones guardadas en la memoria a largo plazo. Resumiendo, el proceso de la memoria se podría esquematizar de la siguiente manera: Hechos externos – Memoria sensorial – codificación de información – Memoria a corto plazo – almacenamiento y recuperación de información – Memoria a largo plazo. 7.3. Lenguaje y razonamiento. Dentro del paradigma del cognitivismo existe una teoría del lenguaje humano ampliamente aceptada. Esta teoría deriva de los estudios lingüistas de Noam Chomsky, quien admite una capacidad y estructuras innatas al ser humano que le permitirían el desarrollo del lenguaje. La psicología cognitiva defiende la creencia en una gramática universal que está presente en todos los idiomas humanos. Existe una facultad innata en nuestra especie, que nos 4 diferenciaría del resto, y que es localizable en un área del cerebro humano. Además, existe una transmisión genética de esta facultad de producir lenguaje, que se transmite de generación en generación. Desde esta perspectiva, los orígenes del lenguaje no pueden explicarse desde un punto de vista empírico, como defienden algunos psicólogos asociacionistas o conductistas. Por el contrario, para el cognitivismo existe un mecanismo de adquisición del lenguaje en el ser humano que es activado en la relación que tiene un niño con el entorno. Este mecanismo es siempre el mismo, independientemente de la cultura o sociedad donde se desenvuelva el hablante. Apoyándose en la tradición racionalista, la psicología cognitiva comprende el pensamiento o razonamiento como proceso que consiste en un cálculo basado en determinadas operaciones lógicas. La relación que tiene el pensamiento con el lenguaje es muy estrecha, de hecho, es una expresión de lo mismo. La expresión del pensamiento se realiza a través del lenguaje, siendo el lenguaje humano el único capaz de expresar pensamientos (los lenguajes animales expresan instintos, sensaciones, etc.). El pensamiento se puede relacionar con los programas de ordenador. Como los programas, los pensamientos son esquemas o estructuras que sirven para clasificar la información de una manera predeterminada y unos criterios preestablecidos. El pensamiento es el modo de aplicar distintas estrategias en la resolución de problemas. El pensamiento transforma la información guardada en la memoria con la intención de responder a alguna pregunta, resolver un obstáculo o alcanzar un objetivo. Por eso, el pensamiento se puede entender como la capacidad de manipular y controlar representaciones mentales. En este sentido, la psicología cognitiva tiene relación con corrientes pragmáticas y conductistas, pues comprende el pensamiento a la manera de una facultad operacional, programada a resolver problemas y a adaptarnos mejor al ambiente. 7.4. Conexionismo (redes neuronales) Además de la metáfora del ordenador es destacable dentro de la psicología cognitiva el conexionismo, una corriente posterior. ¿Qué es el conexionismo? El conexionismo hace referencia a la conexión que se establece en el cerebro humano a través de redes neuronales. La mente procesa información gracias a una serie de conexiones que se establecen entre las neuronas. Las conductas humanas, la inteligencia, el aprendizaje y la vida psíquica en general tienen unas bases en el sistema neuronal, en las células del cerebro. Por tanto, para este paradigma de la psicología existen unas bases biológicas de la conducta humana. La información de dentro de la mente se comunica a través de neurotransmisores, una sustancia química que pasa de una neurona a otra. Esta perspectiva, claramente fisicalista, biologicista y cientificista, posee una enorme actualidad y ha desplazado a la concepción mente-ordenador dentro de la psicología cognitiva, aunque se muestran claras afinidades entre ambas. La nueva perspectiva conexionista dentro de la psicología se ha impuesto en parte gracias a los grandes 5 avances de las neurociencias, es decir, el estudio de cómo los elementos del sistema nervioso interactúan para dar origen a una determinada conducta. Algunas características del conexionismo son las siguientes: 1. La red neuronal es un conjunto de unidades simples (tesis reduccionista) que reciben información, la procesan y la exteriorizan. 2. La red neuronal obtiene una serie de estímulos externos que afectan al organismo y se expresan de forma cuantitativa (se mantiene el esquema E-R del conductismo, aunque se añade el procesamiento intermedio que realiza el cerebro entre el estímulo y la respuesta) 3. El procesamiento de información se realiza de manera paralela y distribuida (como en un circuito eléctrico paralelo). 4. Existen reglas y funciones de aprendizaje que permiten a la red modificar el procesamiento para hacerlo más efectivo y rápido, reduciendo los pasos que van desde la entrada a la salida de información. 5. Las respuestas o señales de salida también se expresan de manera cuantitativa. 7.5. La terapia cognitiva Las emociones y los pensamientos irracionales. El psicólogo cognitivo Albert Ellis consideró que muchos problemas emocionales que acarrean al ciudadano medio de la sociedad occidental se deben a una serie de creencias irracionales que determinan nuestra conducta. Dichas creencias son como una especie de esquemas mentales que tenemos profundamente asumidos e interiorizados, cuyo origen desconocemos y determinan nuestra manera de ser. Según Ellis, las perturbaciones emocionales y los conflictos psíquicos, principalmente la depresión, son resultado de estas ideas irracionales. Ellis elaboró una lista de once ideas irracionales: 1. Es una necesidad absoluta el ser querido por otros y que mi conducta sea aprobada por personas importantes. 2. Para que uno sea valioso tiene que ser competente, tiene que ser capaz de conseguir cualquier cosa. 3. Determinada gente es vil, malévola y debe ser castigada por su maldad. 4. Es terrible y catastrófico que las cosas no marchen por el camino que a una persona le gustaría que fueran. 5. La desgracia humana ocurre por causas ajenas, de modo que uno no puede controlar sus penas. 6. Si alguna realidad es peligrosa y temible, se deberá tener una inquietud terrible y pensar que esa realidad puede suceder. 7. Es más fácil evitar que afrontar ciertas posibilidades y dificultades de la vida. 6 8. Debemos depender de otros, pues necesitamos confiar en alguien más fuerte que nosotros. 9. La historia pasada de una persona es determinante y decisiva en la conducta actual. Cualquier suceso del pasado nos afecta de forma indefinida. 10. Una persona debe sentirse preocupada por los problemas y perturbaciones de los otros. 11. Existe una única solución a los problemas humanos y si esa solución, que es perfecta, no se encuentra, se produce la catástrofe. Los pensamientos irracionales arriba nombrados comparten los siguientes rasgos: a) Radicalización (todo es negro o blanco); b) Generalización (se usan expresiones como “siempre pasa lo mismo”, “todo el mundo…”, etc.); c) Catastrofismo; d) Distorsión de la realidad; e) Idealización exagerada, creencia en situaciones imposibles; e) Mucha exigencia y obsesión. Según A. Ellis, el mecanismo e las ideas irracionales se pueden comprender siguiendo el modelo ABC, donde A es un hecho o acontecimiento, B es la creencia acerca de ese hecho y C son las consecuencias que se desarrollan a partir de estas creencias, consecuencias emocionales y conductuales. Por tanto, las consecuencias de una conducta no son debidas a los hechos, sino a la creencia e interpretación que hace una persona acerca de esos hechos. Resumiendo, los pensamientos irracionales son de tipo absolutista y exigencia radical: uno mismo, los otros y el mundo en general tienen que ser de una determinada manera. “Yo tengo que funcionar siempre bien, los otros tienen que tratarme bien y la vida, el mundo, tiene que darme lo que yo quiero”. Las consecuencias de este pensamiento son el tremendismo (siempre se ve lo negativo de un hecho); la poca tolerancia y la frustración; por último, la condena, desprecio a la humanidad. Terapia emotivo-racional de Ellis. La terapia cognitiva desarrollada por Albert Ellis es frecuentemente usada en la actualidad. En general, las terapias cognitivas son las más vigentes dentro de las diferentes terapias de la psicología (hasta ahora hemos visto dos: la terapia psicoanalítica y la terapia conductista). Como el conductismo, la terapia cognitiva también apuesta por una participación activa del terapeuta que ayuda a modificar la conducta, a condicionarla de otra manera (a esto se oponía el psicoanálisis). La terapia emotivo-racional de Ellis pretende descubrir las creencias irracionales del paciente y sustituirlas por creencias racionales. Esta terapia, como la terapia cognitiva en general, viene a ser una mezcla de técnicas conductistas para la modificación de la conducta y aspectos conductivos. Sin embargo, a diferencia del conductismo, esta terapia sostiene que las conductas no son debidas a aspectos ambientales, sino que dependen de aspectos cognitivos (pensamientos, creencias, ideas, etc.) Recordemos que para Ellis, los hechos no determinan nuestra conducta, sino la interpretación, las ideas que nos formamos de esos hechos. 7 En la terapia emotivo-racional de Ellis el terapeuta funciona como una especie de guía o entrenador del paciente. Lo primero que hace el psicólogo es diagnosticar el trastorno del paciente. El terapeuta debe primero descubrir el mecanismo ABC que hemos explicado más arriba. Para ello, se vale de entrevistas, formularios o tests. Una vez descubierto el problema a través de estos medios, el terapeuta aplica unas técnicas específicas para la terapia, que pueden ser: 1. El debate. Es una discusión racional entre paciente y terapeuta que tiene por finalidad cuestionar las ideas irracionales del paciente. El debate puede adoptar diversos estilos: socrático, didáctico, lúdico, etc. El más frecuente es el diálogo socrático, que incita al paciente a pensar por sí mismo a partir de una serie de preguntas y cuestionamientos que le lanza el terapeuta. El diálogo tiene como máxima el “conócete a ti mismo”, frase proveniente de la Antigua Grecia. 2. Tareas para casa. Se proponen al paciente una serie de ejercicios cuya finalidad es reforzar lo que ya se ha descubierto en otras sesiones. Pueden ser actividades de lectura, de relajación, escribir un diario, etc. Estas actividades deben centrarse en la temática que preocupa al paciente. 3. Ejercicios emotivos. Mediante este procedimiento se intenta intervenir en las emociones que se esconden detrás de las ideas irracionales. Por ejemplo, suponiendo que el paciente siente vergüenza y miedo al ridículo a causa de una idea irracional, el terapeuta incita al paciente a que realice conductas que provoquen vergüenza, por ejemplo, saludar a gente desconocida, cantar en el trabajo, pedir dinero a un desconocido, etc. Además de estas técnicas de Ellis, los psicólogos cognitivos han desarrollado otras terapias como: 1. Ensayo cognitivo. Esta técnica consiste en imaginarse una situación muy mala y que el paciente vivencie las emociones negativas causadas por ella, como la ansiedad, ira, depresión, etc. Una vez vivenciados esos sentimientos, se pide al paciente que los sustituya por otros más funcionales y útiles. El objetivo es cambiar emociones negativas inapropiadas. Con este procedimiento, se pretende demostrar que los cambios emocionales pueden modificarse en pocos minutos y que es uno mismo quien crea las emociones negativas debido a su manera irracional de afrontar los problemas. 2. Ensayo de conductas y role playing. Esta técnica trata de representarse e interpretar situaciones conflictivas de la vida real propuestas por el terapeuta o por el paciente. La representación teatral de estas situaciones ayuda a descubrir los pensamientos que tiene el paciente. También es válida para generar conductas alternativas que no provoquen angustia. Fuente: Psicología de Bachillerato. Ed. Teide. 2000. 8