CONTEXTO HISTÓRICO NIETZSCHE Nietzsche nació en 1844 en Röcken (Prusia). Hijo y nieto de pastor protestante, estudió filosofía y teología. Desde joven fue un entusiasta de la filosofía de Schopenhauer y de la música de Wagner. A los 25 años fue catedrático de filosofía clásica de Basilea. En este periodo de tiempo, Prusia se refuerza como potencia hegemónica contra Francia, y se produce la unificación de Alemania. Con la derrota de Napoleón, los príncipes alemanes crearon la Confederación Germánica de 39 estados independientes en todo, menos en política exterior, en los que Austria y Prusia eran dominantes, lo que creo una tensión entre ambos. Con la llegada del canciller Otto von Bismark, se aislará a Francia y se sustituirá su hegemonía en Europa por la germana. La disputa entre Austria y Prusia por la hegemonía se resolvió en 1866, con la victoria de Prusia. Nietzsche, que había colaborado voluntariamente en la guerra franco prusiana, apoyo a Bismarck, artífice de la unificación y canciller imperial, quien tuvo el control de la política interior y exterior de la nueva Alemania. En el S.XIX se extiende por Europa la revolución industrial y las revoluciones liberales-burguesas iniciándose el movimiento obrero, en el que tuvo un papel destacado Karl Marx. En esos momentos Alemania era uno de los países más industrializados de Europa debido a su preponderancia sociopolítica y también gracias a sus relaciones con Inglaterra. Nietzsche fue contrario al racionalismo del Estado que influyó sobre todo en el nihilismo. Desde el punto de vista sociocultural y filosófico, el S.XIX está condicionado por las consecuencias de la Ilustración alemana, y especialmente por Kant. La razón es la única guía posible pero tiene unos límites precisos. Este movimiento fue precursor del romanticismo, marco intelectual y filosófico, donde se desarrolla el pensamiento nietzscheano. Los románticos (Idealismo) vieron en la razón humana una fuerza infinita, capaz de conocer la totalidad, lo absoluto. En la segunda mitad de siglo, se produjo un fuerte rechazo al romanticismo, en particular al Idealismo hegeliano, desde varias perspectivas: 1. Desde el materialismo de la izquierda hegeliana, aceptando la injusticia social. 2. Desde un materialismo positivo que toma como paradigma los descubrimientos científicos y critica como ilusoria la metafísica hegeliana. 3. Desde un individualismo pesimista que interpreta el mundo como la expansión de una voluntad cósmica. Es la postura de Schopenhauer, cuya obra “El mundo como voluntad y representación” tuvo una cierta influencia en Nietzsche. A finales del S.XIX y principios del S.XX surge el vitalismo como corriente filosófica que reivindica la vida como la realidad primera a la que todo lo demás debe subordinarse. Pero ante todo, la filosofía de Nietzsche surge como crítica a las distintas corrientes del pensamiento de su época como son: el materialismo histórico y especialmente el socialismo pero tiene cierta semejanza, el concepto de alienación religiosa de Feuerbach con el tema nietzscheano de la muerte de Dios, como expresión suma del nihilismo. La originalidad del pensamiento de Nietzsche, se desmarca de todas las corrientes de su época, algunas de sus obras fundamentales son: “Así habló Zaratustra”, “El Anticristo”, “La voluntad de poder”, etc. Nietzsche abandona la ciudadanía prusiana en 1869. Mantiene una intensa amistad con Wagner, Paul Rée y con el teólogo Overbeck. Llevó una vida errante y en 1889 sufre una parálisis progresiva por la que pierde la razón y muere en 1900.