Psicología Social Carlos Marcos Marcos 2008-2009 Tema 3. ACTITUDES Y ROLES SOCIALES La actitud es uno de los conceptos centrales de la Psicología Social. La conducta de un individuo se halla determinada, en gran medida, por sus actitudes. Las actitudes sociales sirven como indicadores o predictores de la conducta. La conducta es social porque se aprende o adquiere en el proceso de socialización, se suele compartir con otras personas y porque se refiere a objetos de naturaleza y significado social. En los antecedentes se engloban varias cuestiones importantes de estudio e investigación sobre actitudes: cómo se forman, sus funciones, por qué y cómo cambian, y cuáles son sus relaciones con la conducta de los individuos. 1. PLANTEAMIENTOS GENERALES SOBRE ACTITUDES 1.1 DEFINICIONES DE ACTITUD La definición más utilizada la formuló Allport.La actitud es el “estado de preparación“ o disposición mental o psicológica y neutral, que se organiza a través de la experiencia y que influye en la respuesta del sujeto. 1.2. DEFINICIONES SEGÚN LOS COMPONENTES DE ACTITUD 1. Definiciones de las actitudes con un solo componente: la tendencia evaluativa se refiere a la asignación de aspectos positivos o negativos a un objeto, que transcienden lo meramente descriptivo o denotativo. 2. Actitudes con componentes tripartitos: la actitud es un estado psicológico interno que se manifiesta a través de una serie de respuestas observables, agrupadas en tres grandes categorías: cognitivas, afectivas y conativo-conductuales. Según Myers, es la reacción evaluativa favorable o desfavorable hacia algo o alguien, que se manifiesta en nuestras creencias, sentimientos o conductas proyectadas. 3. Modelos de actitudes de tres componentes: a) Actitud como elemento intermedio entre estímulos y conducta: los tres componentes de las actitudes se especifican como: afectivas (concernientes a sentimientos evaluativos de agrado o desagrado), cognitivas (concernientes a creencias, opiniones e ideas acerca del objeto de actitud) y conductuales (concernientes a intenciones conductuales o tendencias de acción). b) Actitudes estructuradas en la interrelación de los tres componentes: para algunos autores, las actitudes están estructuradas en la interrelación y vinculación de tres componentes principales: el cognoscitivo (creencias sobre los hechos), el sentimental (emociones y sentimientos vinculados a un determinado objeto) y el reactivo (inclinación a actuar de una manera determinada ante el objeto). Los conocimientos se hallan influidos por los sentimientos y las tendencias reactivas hacia un objeto. Y, a su vez, los conocimientos sobre un objeto producen cambios en las emociones y en las tendencias reactivas. c) Los tres componentes de las actitudes tienen sus peculiaridades y características psíquicas: o Componente cognoscitivo: toda actitud contiene materiales nocionales, imaginativos, perceptivos, ideacionales y conceptuales, datos elementales procesados por el cerebro humano. Sus peculiaridades psíquicas son: 1 Psicología Social Carlos Marcos Marcos 2008-2009 fijación, singularidad, actitud y valores, socialización, y concienciación. o Componente afectivo: hay que distinguir el aspecto contemplativo, mental, imaginativo, conceptual, del aspecto sentimental, típico de algunas experiencias. Cuando el objeto de una actitud fuese particularmente importante para el individuo, su presencia provocaría una verdadera estimulación de todas las reacciones fisiológicas y corporales que acompañan a los estados emotivos intensos. o Componente comportamental: la actitud es también una disposición y tendencia a reaccionar ante un objeto psicosocial cualquiera, de forma más o menos fija y a veces observable en conductas externas, motóricas o verbales, intencionales y simbólicas. Constituye una disposición de conducta aprendida muy capaz de dirigir las opciones de acción del individuo por cauces relativamente estables y previsibles. d) La evaluación de la actitud se expresa en tres tipos de respuestas: o Cognitivas: la evaluación positiva o negativa de un objeto se produce a través de creencias: pensamientos, ideas y su expresión o manifestación externa. o Afectivas: son los sentimientos, los estados se ánimo y las emociones asociadas con el objeto de la actitud. o Conativo-conductuales: las conductas y las intenciones de conducta, son susceptibles de ubicación sobre el continuo actitudinal, ya que pueden ser muy positivas o muy negativas. La actitud, como variable única y unitaria, es el estado interno evaluativo, mientras que los tres tipos de respuesta constituyen sus vías de expresión. 1.3. CARACTERÍSTICAS DE LAS ACTITUDES Los objetos de las actitudes El número de objetos de la actitud de un individuo es limitado puesto que sólo se consideran como tal los objetos que poseen una existencia psicológica para ese individuo. Un individuo puede contar con un gran número de actitudes hacia los objetos que le rodean, los fenómenos sociales que enmarcan a todo miembro de una sociedad, el prójimo, los grupos, la política, la economía, etc. Supuestos sobre actitudes 1. Las actitudes son experiencias subjetivas. 2. Las actitudes son experiencias de un tema o de un objeto. 3. Las actitudes son experiencias de algún tema u objeto en términos de una dimensión evaluativa. 4. Las actitudes implican juicios evaluativos. 5. Las actitudes se pueden expresar a través del lenguaje. 6. Las expresiones de actitud son en principio inteligibles. 7. Las actitudes son comunicadas. Se realizan para ser percibidas y entendidas por otros. 8. Diferentes individuos pueden estar en acuerdo o desacuerdo respecto a sus actitudes. 9. La gente que mantiene actitudes diferentes hacia un objeto diferirá en sus creencias respecto a lo que es verdadero o falso con relación con ese objeto. 10. Las actitudes son predecibles en relación con la conducta social. Propiedades de las actitudes (Scott) 1. Su dirección bipolar positiva-negativa o neutra. 2 Psicología Social Carlos Marcos Marcos 2008-2009 2. 3. 4. 5. Su magnitud, extremosidad o grado de favorabilidad-desvaforabilidad. Su intensidad o fuerza del sentimiento. Su ambivalencia o presencia simultánea de aspectos favorables y desfavorables. Su prominencia o centralismo, la importancia focal o periférica de una actitud dentro de su constelación. 6. Su prominencia afectiva. 7. Su complejidad cognoscitiva. 8. Su apertura o fuerza comportamental. 9. Su encaje dentro de la estructura cognoscitiva. 10. Su flexibilidad o rigidez. 11. El grado de su concienciación Propiedades más importantes de las actitudes (Pastor) Consistencia-Inconsistencia: consistencia es la correlación significativa existente en los signos positivos o negativos de los componentes cognoscitivo-sentimental-tendencia de las actitudes. Para la existencia de una actitud, se requiere una postura bien definida del sujeto hacia el objeto y una congruencia tridimensional entre conocimiento, sentimiento y propensión a la acción. Sencillez-Complejidad: es la característica más importante de las actitudes. Éstas reflejan la complejidad o simplicidad de sus componentes, cognoscitivo-sentimentaloperativo. 2. FORMACIÓN Y ADQUISICIÓN DE ACTITUDES 2.1. LA FORMACIÓN Y DESARROLLO DE LAS ACTITUDES Las actitudes del hombre se desarrollan a la medida que él se desarrolla, pero siempre en dependencia con su prójimo. Las actitudes se desarrollan debido a la satisfacción de necesidades. Además de ofrecer un significado al mundo individual, sirven para alcanzar otros objetivos y satisfacer varios fines. Hay fuerzas determinantes que influyen en el desarrollo de las actitudes: los deseos personales, la información, la pertenencia a un grupo y la personalidad. Los deseos personales El sujeto desarrolla una serie de actitudes al intentar satisfacer la necesidad de enfrentarse a ciertos problemas. Crea actitudes favorables hacia los objetos y hacia las personas que satisfacen sus impulsos, como objetivos y como medios para alcanzarlos. Son desfavorables hacia los objetos y personas que bloquean la satisfacción de un impulso. Diferentes impulsos pueden producir a misma actitud. La información determina las actitudes del individuo Las actitudes se subordinan a los impulsos y sufren el impacto modelador de la información a la que se halla expuesto un individuo. La información rara vez determina una actitud, excepto cuando intervienen otras actitudes previas. La información es fundamental para que las actitudes no se aparten de los hechos: un déficit de datos puede dar origen a actitudes capaces de distorsionar la realidad. La pertenencia a un grupo ayuda a determinar la formación de las actitudes Las actitudes de un individuo tienden a reflejar las creencias, valores y normas de los grupos a los que se adhiere, y para mantenerlas debe contar con el apoyo de sus homólogos. Los miembros de un grupo llegan a poseer las mismas creencias acerca de ciertos 3 Psicología Social Carlos Marcos Marcos 2008-2009 objetos, personas, hechos... que produce uniformidad en sus actitudes. Dentro de un grupo se comparten muchos valores. La relación entre valores y actitudes es compleja, puesto que el mismo valor puede conducir a distintas personas a elaborar unas actitudes diversas y hasta opuestas. Las normas del grupo regulan las actividades de los participantes en todos los pasos de una conducta normal, prescriben los actos acertados y las actitudes idóneas. La homogeneidad de las actitudes de cada uno de los subgrupos refleja la aceptación de esas normas por parte de los individuos. Es de vital importancia para la formación de las actitudes la pertenencia a un grupo, Primario o de Referencia: las influencias de los Grupos Primarios son decisivas debido a que: o Las presiones del grupo se dirigen hacia la obtención de una conformidad. o Los individuos tienden a buscar aquellos grupos que congenian con sus actitudes previas. o Los miembros de los grupos primarios suelen estar expuestos a la misma información y comparten la misma subcultura y las mismas fuentes informativas. o Los nuevos miembros de un grupo adoptan las actitudes reconocidas para conseguir la aceptación del grupo. La pertenencia de un individuo a un Grupo de Referencia, modela una serie de actitudes únicamente cuando el sujeto se identifica con el grupo y lo utiliza como referencia. También puede determinar su conducta cuando no pertenece realmente a ese grupo pero desea pertenecer. Las actitudes de un individuo reflejan su personalidad Aunque la influencia de los grupos tiende a producir uniformidad de las actitudes de cada uno de sus miembros, el individuo tiende a aceptar como propias sólo aquellas que se integran con su personalidad. 2.2. ADQUISICIÓN DE LAS ACTITUDES Las actitudes se forman y se adquieren progresivamente durante la vida de cada persona. Pastor clasifica las teorías según las tendencias predominantes en su conceptuación: 1. Explicación conductista: pone énfasis en los aprendizajes condicionados. 2. Explicación cognoscitiva: se centra en el pensamiento racional, abstracto y simbólico para explicar la formación, adquisición, organización y maduración de las actitudes. 3. Explicación funcionalista: se centra en el descubrimiento de las funciones que las actitudes cumplen. 2.3. CÓMO SURGEN LAS ACTITUDES La actitud se considera mediadora entre los estímulos del ambiente social de la persona y las respuestas o reacciones de ésta a dicho ambiente. Es una forma activa de adaptación de la persona a su medio ambiente. Antecedentes cognitivos: El conocimiento que la persona ha adquirido en su relación con el objeto actitudinal, en el pasado, le proporciona una buena estimación de cómo debe ser evaluado dicho objeto. Antecedentes afectivos: la experiencia cotidiana ofrece numerosos ejemplos de la influencia de las emociones sobre muchas funciones psicológicas de la persona. Antecedentes conductuales: la accesibilidad de la actitud es decisivo, aunque la experiencia directa es uno de los determinantes de la accesibilidad. 4 Psicología Social Carlos Marcos Marcos 2008-2009 3.FUNCIONES DE LAS ACTITUDES Varios autores coinciden en proponer las cuatro bases funcionales principales de las actitudes, fundamentalmente de naturaleza motivacional: funciones defensivas del yo, funciones de valor-autorrealización expresiva, funciones instrumentales, adaptativas o utilitarias, y funciones de conocimiento o economía. Echebarría añade que las actitudes cumplen funciones sociales, psicológicas y cognitivas. Morales y Moya presentan cinco funciones como aportación del análisis funcional al estudio de las actitudes: 1. Función del valor de orientación: focalizada en el proceso psicológico de la atención, por el que la persona está obligada a seleccionar sólo aquellos objetos de su campo visual a los que desea o quiere prestar atención (función de conocimiento o economía). 2. Función de valoración instrumental: tiene lugar cuando se considera el objeto actitudinal como un fin en sí mismo, evaluándolo positivamente si se cree que va a resultar útil (función instrumental, adaptativa o utilitaria). 3. Función expresiva de valores: la cumplen aquellas actitudes cuyo objeto parece ser un medio necesario para conseguir ciertos valores (función valor-autorrealización expresiva). 4. Función de separación: son, sobre todo, las actitudes prejuiciosas que permiten a las personas justificar la discriminación que se ejerce sobre otras y eludir la posible responsabilidad propia (función defensiva del yo). 5. Función ideológica-hegemónica: relacionada con la función anterior, se distingue en que ha estudiado exclusivamente actitudes racistas y porque su base es un conflicto manifiesto entre varios grupos sociales. 4. CAMBIO DE ACTITUDES 4.1. VARIABILIDAD DE LAS ACTITUDES Las actitudes formadas en un individuo tienden a constreñir, conservar y estabilizar su mundo. Las dificultades que surgen al intentar adaptarse a un mundo cambiante pueden conducir a aceptar o rechazar las variaciones en sus propias actitudes. La variabilidad de una actitud depende de: a) Ciertas características de la actitud preexistente, y del individuo que la mantiene o Extremosidad: las actitudes más extremas presentan menor susceptibilidad para el cambio que las menos extremas. o Multiplicidad: una actitud simple puede ser relativamente más susceptible a un cambio que una actitud muy compleja. o Consistencia: un sistema consistente de actitudes tiende a ser estable, al apoyarse sus componentes mutuamente entre sí. o Interconexión: la cuantía y naturaleza de la conexión de una actitud respecto a otras son factores importantes para determinar la facilidad con que una actitud puede modificarse. o Consonancia de la constelación de actitudes: una actitud tenderá a variar según el grado en que sea consonante con las restantes actitudes de la constelación. o Intensidad y número de impulsos satisfechos por la actitud: la resistencia de una actitud ante el cambio depende, en parte, de la intensidad y del número de las necesidades satisfechas. o Centralización de los valores vinculados a las actitudes: muchas de las actitudes de 5 Psicología Social Carlos Marcos Marcos 2008-2009 un individuo reflejan sus valores, su concepción de lo que es bueno o deseable. b) La personalidad del individuo o El nivel de inteligencia del sujeto: las diferencias individuales en inteligencia ayudan a determinar las diferencias en la velocidad con que cambia una actitud. o La persuasividad: consiste en la facilidad para aceptar los influjos sociales, independientemente del emisor de la comunicación, de la materia y contenido de los medios, y las circunstancias intervinientes en la comunicación. o La autodefensividad: las personas que defienden su autoprestigio a toda costa se agarran tenazmente a las actitudes que enaltecen su yo, y por tanto es muy difícil desarraigar en ellos ciertas actitudes. o Las necesidades y estilos cognoscitivos: influyen en la facilidad a aceptar un cambio. c) Pertenencias a determinados grupos Las actitudes que poseen un soporte social muy intenso, a través de la afiliación de un individuo a un grupo, son difíciles de cambiar; pues el individuo trata de mantener su estatus dentro del mismo. 4.2. CAUSAS DE LOS CAMBIOS EN LAS ACTITUDES a) Una información adicional El que una nueva información cambie las actitudes depende de: o La naturaleza de las circunstancias en que se produce la comunicación. o Las características del comunicante. o El medio de comunicación. Los mensajes directos suelen ser más eficaces. o La forma y el contenido del mensaje. b) Variaciones en la pertenencia a los grupos La eficacia de las nuevas afiliaciones a un grupo para incluir un cambio de actitudes, está en función de las características del grupo y de la naturaleza de la afiliación a ese grupo. Si el individuo se siente inseguro tenderá a adoptar con más intensidad las normas del grupo para obtener su aprobación. La intensidad con la que el sujeto valora su afiliación al grupo contribuye también a determinar el poder que el grupo ejerce sobre él. c) Modificación en la conducta en relación hacia un objeto de la actitud Poniendo al individuo en contacto con el objeto utilizando la ley o las circunstancias. El individuo puede ser coaccionado por la autoridad, por las normas sociales, por la ejecución de un rol gratificante para él pero expresando actitud contraria a sus actitudes privadas, pero tendría efectos positivos si obtiene apoyo social. d) Procedimientos que cambian la personalidad La eficacia de las técnicas de variación de la personalidad para producir cambio de actitudes depende de la adecuación de las técnicas a la función que representa para la personalidad del individuo una determinada actitud. 4.3. CAMBIO POR COMUNICACIÓN PERSUASIVA Para Gómez, los elementos que intervienen en este modelo son: comunicador, mensaje y receptor. Pastor añade otro elemento más, el canal. El comunicador ha de tener en cuenta, para conseguir el cambio de actitudes dimensiones como: credibilidad, experiencia, confianza, estatus, efecto letargo o atractivo. El mensaje basará su impacto en aspectos como: contenido emocional, agresión, miedo, discrepancia, orden de presentación o argumentación. El receptor está condicionado por aspectos como: implicación personal, compromiso, 6 Psicología Social Carlos Marcos Marcos 2008-2009 relevancia social, relevancia de la respuesta o inoculación. El canal afecta al cambio de actitudes, siendo las comunicaciones, cara a cara o personalizadas las que tienen un mayor impacto persuasivo 4.4. CAMBIO POR AUTOCONVENCIMIENTO Y DEFENSA CONDUCTUAL Este tipo de cambio se basa en las propiedades de las actitudes denominadas: o Consistencia interna: relación íntima entre los tres elementos de la actitud: cognitivo, afectivo y comportamental. o Consistencia externa: relación correcta de una actitud con el resto de actitudes afines dentro de un mismo conjunto. La ley de consistencia cognitiva es una ley sobre la buena forma de las estructuras mentales y también afecta a las actitudes. Según esta ley, las actitudes se organizan en estructuras coherentes y en cuanto se produce una incompatibilidad se produce una fuerza motivacional dirigida a reducir la inconsistencia produciéndose cambios de actitud. 4.5. CAMBIOS DE ACTITUD SEGÚN EL ENFOQUE COGNITIVO Pastor considera tres tipos de teorías: 1. Teoría del balance: investigada por seguidores de la escuela Gestáltica, estudia la relación lógica que guardan entre sí los elementos cognoscitivos, que sirven para explicar el cambio de actitudes. Heider supone que en cado de equilibrio cognoscitivo, el individuo no se siente movido a cambiar de opinión, mientras que si su estructura cognoscitiva está desequilibrada se engendrará en él una necesidad de cambio de actitud para poder restaurar el equilibrio. 2. Teoría de la congruencia: estudia el cambio de actitud que se produce en una estructura cognoscitiva compuesta de tres elementos que son los mismos que en la teoría del balance: una fuente comunicativa, un mensaje o comunicado emanado de esa fuente y un sujeto que evalúa tanto la fuente como el mensaje. Osgood y Tannenbaum proporcionan una serie de reglas precisas para calcular la inconsistencia de una estructura y para predecir la dirección que tomará el cambio de actitudes: o Primera regla: para medir la magnitud total de incongruencia en cada estructura. Técnica del diferencial semántico. o Segunda regla: necesaria para poder predecir el cambio de actitudes que permita descubrir en qué direcciones se efectuará el cambio. Sigue al principio: “en caso de comunicación asociativa, las actitudes del sujeto tenderán a moverse en sentido convergente, disminuyendo entre sí la distancia que les separa. En caso de comunicación disociativa las actitudes del sujeto tenderán a moverse en sentido unidireccional o paralelo, manteniendo la distancia inicial que las separaba”. o Tercera regla: necesaria para prever la intensidad de las mutaciones actitudinales, trataría de pormenorizar las porciones de cambio que, del total de incongruencia, afectarían a las dos actitudes. 3. Teoría de la disonancia: se refiere a disonancias de vivencias psíquicas subjetivas, más que a disonancias de formalismos lógicos. Siempre que se mantengan objetos de actitud disonante, se producirá un estado de incomodidad cognitiva capaz de actuar como instigadora para obligar al sujeto a iniciar conductas reductoras del impulso. Hay disonancia cognoscitiva cuando el sujeto evidencia que en su campo psicológico coexisten dos elementos opuestos entre sí. Para reducir la disonancia, Pastor propone cinco maneras de reducir la tensión producida por la presencia de dos cogniciones contradictorias: 7 Psicología Social Carlos Marcos Marcos 2008-2009 o Enviando alguna de las cogniciones al inconsciente. o Disminuyendo la importancia de la relación disonante. o Añadiendo nuevos elementos al campo psicológico que alteren la disonancia entre ese par. o Modificando la conducta vinculada a uno de los elementos disonantes. o Distorsionando una o ambas cogniciones disonantes. 5. RELACIÓN ENTRE ACTITUD Y CONDUCTA 5.1. ELEMENTOS DIFERENCIALES Los fenómenos sociales se hallan dirigidos por las actitudes. Las características estructurales de una actitud pueden determinar una conducta. No todas las actitudes tienen la misma estructura, difieren en sus características básicas que pueden pertenecer a: la naturaleza de los componentes, la naturaleza del sistema en sí mismo y la constelación total de actitudes dentro del mismo. Tanto las actitudes como la conducta pueden caracterizarse mediante cuatro elementos diferentes: o El elemento acción: qué conducta se va a ejecutar. o El elemento objetivo: a qué objetivo se dirige la conducta. o El elemento contexto: en qué contexto se ejecuta la conducta. o El elemento tiempo: en qué momento se realiza la conducta. 5.2. MODELO DE LA ACCIÓN RAZONADA Y ACCIÓN PLANIFICADA Según los autores de este modelo, la intención conductual viene determinada por la actitud hacia las consecuencias de la conducta de carácter individual y por la influencia de los grupos específicos de referencia. La confluencia entre las creencias individuales y grupales constituye la base para la formación de actitudes, intenciones y conductas. La teoría de la acción planificada añade un nuevo eslabón a este modelo: el control percibido de la conducta, es decir, las personas sólo intentarán hacer algo si hay una oportunidad realista de poder llevar a cabo esa conducta. Ajzen incorpora las normas personales, que constan de creencias acerca de la corrección o falta de corrección de la conducta y las repercusiones afectivas de la realización de la conducta correcta o no. 5.3. MODELO DEL ACTITUDINAL PROCESAMIENTO ESPONTÁNEO O ACCESIBILIDAD En el llamado continuo actitud-no actitud, en uno de sus polos estaría la no actitud, aquellos casos en los que la persona no almacena en su memoria ninguna evaluación del objeto. En el polo opuesto estaría la actitud propiamente dicha. 5.4. ¿LAS ACTITUDES DETERMINAN LA CONDUCTA? El resultado de variadas investigaciones a través de las últimas décadas, no dan testimonio de que conociendo las actitudes de las personas se pueda predecir sus acciones. El panorama en desarrollo de lo que controla nuestra conducta enfatiza las influencias sociales externas y resta importancia a factores internos como las actitudes y la personalidad. Nuestras actitudes expresadas predicen de manera imperfecta nuestra conducta 8 Psicología Social Carlos Marcos Marcos 2008-2009 porque ambas están sujetas a otras influencias. Minimizar: Myers afirma que el vínculo actitud-conducta es débil, pues las personas pueden distorsionar sus actitudes reales cuando las expresan. Sin embargo las actitudes podrían predecir la conducta bajo algunas condiciones: o Cuando se minimizan otras influencias sobre las declaraciones de actitudes y la conducta de un sujeto. o Cuando la actitud es específicamente relevante para la conducta observada. o Cuando la actitud es poderosa. Maximizar: las actitudes suelen estar inactivas al actuar de forma automática. Las actitudes que se adoptan son más potentes cuando se piensan. Las actitudes influyen en la manera en que se perciben e interpretan los acontecimientos y la manera en que se reacciona. Las actitudes incluyen no sólo la adquisición de respuestas afectivas, cognitivas y conductuales, sino también las destrezas comunicativas para expresar la experiencia subjetiva de cada uno. 5.5. ¿LA CONDUCTA INFLUYE EN LAS ACTITUDES? La conducta puede determinar las actitudes. Es probable que no sólo se piense en una manera de actuar, sino que se actúe de acuerdo a una manera de pensar. Cuando las personas se comprometen con conductas públicas perciben estos actos como obra propia, llegan a creer más intensamente en lo que han hecho. Myers refiere tres teorías competidoras para explicar por qué las acciones afectan los reportes de actitud: a) La teoría de la autopresentación: las personas adaptan sus declaraciones de actitud preocupándose por lo que pensarán otras personas, pero también puede ocurrir algún cambio de actitud genuino. b) La teoría de la disonancia: explica este cambio de actitud suponiendo que se siente tensión después de actuar en contra de las propias actitudes, o tomar una decisión difícil. c) La teoría de la autopercepción: cuando las actitudes son débiles, se observa la propia conducta y sus circunstancias, infiriendo en esas actitudes. 5.6. CÓMO INFLUYEN NUESTRAS CONDUCTAS SOBRE NUESTRAS ACTITUDES Moya explica que la teoría de la disonancia se ajusta a cómo la conducta influye en las actitudes. El cambio de actitudes es un factor antecedente del cambio de conducta. Pero no siempre ocurre así, en ocasiones se cambia la conducta porque previamente ha cambiado la actitud. La teoría de la disonancia cognitiva considera tres elementos básicos para se produzca la disonancia: o Por consonancia, cuando están vinculadas por una relación de implicación. o Por disonancia, cuando se contradice con lo que la otra implica. Son incompatibles. o Por irrelevancia, cuando no hay relación de implicación. Para explicar esta teoría, se toman las investigaciones de varios autores: 1. Teoría de la disonancia cognitiva: a veces los individuos logran reducir su disonancia incluso teniendo más inconsistencias de las que previamente tenían. 2. Los conceptos de compromiso y voluntad: el individuo debe tener sentimiento de responsabilidad, control y elección cuando está realizando la conducta para que surja disonancia. 3. El autoconcepto: se lograría disonancia cuando el sujeto ve amenazado su 9 Psicología Social Carlos Marcos Marcos 2008-2009 autoconcepto, cuando realiza una conducta inconsistente con la visión que tiene de sí mismo. 4. La responsabilidad personal: la reducción de la disonancia sólo ocurriría cuando los elementos disonantes han sido vinculados mediante la responsabilidad el individuo que experimenta disonancia. 5. Activación de la disonancia: sólo puede ser etiquetado positiva o negativamente y producirse cuando la persona realiza una conducta contraactitudinal. Para que haya cambio de actitud es necesario que se produzca motivación de la disonancia, que los individuos tengan conciencia negativa de una acción libremente realizada de consecuencias negativas. 6. La teoría de la autopercepción: se funciona hacia las propias conductas y actitudes como observadores externos. 6. LAS ACTITUDES Y PERCEPCIONES EN EL TRABAJO EN EQUIPO 6.1. DINÁMICA DEL CAMBIO DE ACTITUDES o No importa si el “otro” me gusta o no. o Las personas no son siempre como nos parecen o como las vemos. o Al juzgar a los demás, proyectamos en muchas ocasiones nuestra subjetividad, pero es un error. o Antes de sacar conclusiones conviene asegurarse de que se conocen todos los detalles de la cuestión. o No rechacemos la realidad ni dejemos de enfrentarnos a ella porque sea contraria a nuestras opiniones e intereses. o No nos quejemos de no poder realizar algunas cosas por culpa de los demás. Actitudes en la comunicación 1. Actitud barrera: evaluación, imposición, estrategia, neutralidad, superioridad y certidumbre. 2. Actitud cauce: descripción, orientación, espontaneidad, comprensión, igualdad e imparcialidad. 6.2. LAS ACTITUDES EN EL TRABAJO EN EQUIPO Las interacciones que se dan entre grupos distintos son habituales. Por eso, al trabajar en grupo hay que formular dos preguntas: qué nos está sucediendo como grupo ante los demás grupos y cuál es nuestra interacción con ellos. La primera pregunta trata de las interacciones intragrupales, los procesos psicológicos ante la amenaza del “equipo B”. La segunda manifiesta las interacciones explícitas ante el otro grupo. a. ¿Qué sucede dentro de los grupos?: cuando acecha la amenaza del otro grupo, los grupos se transforman y llegan a adoptar actitudes internas como experimentar sentimientos de lealtad y orgullo gregario, considerarse el mejor o aceptar una mayor estructura y liderazgo autocrático. b. ¿Qué sucede entre grupos?: se modifican las relaciones externan con los “vecinos indeseables”. La interacción disminuye y se hace hostil y la comunicación se vuelve muy selectiva. c. ¿Qué sucede con los ganadores?: el equipo que resulta vencedor en las disputas sufre otra transformación interior. El clima de ganador se puede calificar de “opulento y feliz”, desaparece la tensión, no se desean examinar los conflictos 10 Psicología Social Carlos Marcos Marcos 2008-2009 anteriores y aumenta la cohesión. d. ¿Qué sucede con los perdedores?: el grupo derrotado varía sus percepciones del entorno y sufre numerosos cambios interpersonales que repercuten en el trabajo en equipo. 6.3. ESTRATEGIAS PARA REDUCIR LAS CONSECUENCIAS NEGATIVAS La competitividad entre grupos suele derivar a posiciones enfermizas y poco gratificantes. Las estrategias siguientes tratan de minimizar esos efectos y reconducir la energía de los grupos hacia metas diferentes. a. Estrategias a posteriori o Ubicar un objetivo común: deben establecerse objetivos compartidos por los grupos en litigio para mejorar la productividad y la cooperación intergrupal. o Fijar una meta superior: si se consigue fijar una meta superior en la que los grupos no tengan que competir directamente, se estará subsanando parte del problema. b. Estrategias preventivas o Poner un énfasis relativamente mayor en la eficacia general de la organización y el papel de los departamentos sobre la base de su contribución al esfuerzo general. o Estimular la interacción elevada y la comunicación frecuente entre grupos para trabajar en problemas de coordinación y ayuda de grupo. o Realizar rotación frecuente de miembros entre grupos o departamentos para estimular el incremento de la comprensión mutua y empatía respecto de los problemas de cada uno. o Evitar las situaciones en las que haya únicamente un ganador y un perdedor. 7. ROLES SOCIALES 7.1. TEORÍA DEL ROL GRUPAL En el trabajo en grupo, sus miembros desempeñan diversas funciones o actitudes. Si esos papeles se desempeñan con cierta periodicidad o asiduidad, se tratará de roles o papeles grupales definidos. El comportamiento de cualquier persona dentro de una organización o grupo es el resultado de fuerzas motivadoras que además de ser íntimas suyas, se derivan en gran parte de los otros miembros que forman “el conjunto de su rol”. a) Puesto: se trata de la posición que ocupa el individuo en el espacio organizativo. Tiene un sentido relacional, ya que viene definido en términos de las relaciones que debe establecer con otros muy próximos y con el sistema total. b) Expectativas: son los deberes, prohibiciones, procedimientos, creencias y actitudes que, aunque no estén formalmente escritos en ningún sitio, responden a lo que se cree que una persona en un cierto puesto o posición debe ser y forman parte de las normas bajo las que evalúa su comportamiento. Las expectativas existen en la mente de las personas o grupos que forman el “conjunto del rol”. En una organización cada rol, cada papel, está relacionado con otros; y la relación depende de la complejidad de la organización de que se trate. c) Rol: es la respuesta típica, la conducta del individuo en una posición concreta en virtud de las normas, los valores, y las expectativas que sobre él tienen. El rol viene a ser el “Yo social”: o El rol, como puesto de trabajo, viene definido por: el flujo de trabajo, la tecnología 11 Psicología Social Carlos Marcos Marcos 2008-2009 que se utiliza (incluido los procedimientos de trabajo) y la estructura de autoridad de la organización. o Cada uno tiene una visión personal propia de cómo debe ser su papel en ese grupo u organización. o Cada tipo de organización plantea unas expectativas más o menos exigentes. d) Funciones de rol: dentro de las organizaciones o grupos el rol cumple una serie de funciones y hace que el comportamiento en la situación sea más predecible, dando seguridad: o Asigna una posición en el sistema. o Ayuda a definir nuestras relaciones con otros y con el total. o Ayuda a los otros a definir sus relaciones. o Nos da a nosotros y a los otros, indicaciones de comportamiento. o Clarifica el status, prestigio, privilegios, responsabilidades... e) Conflictos y tensiones del rol: o Intra-emisor: una misma persona nos formula expectativas incompatibles y contradictorias. o Inter-emisor: las expectativas transmitidas por distintos componentes se oponen unas a las del otro, planteándose un conflicto de lealtades. o Inter-rol: en la vida, al desempeñarse múltiples roles, a veces, simultáneamente o más secuencialmente, puede haber conflictos entre ellos. o Persona-rol: como persona cada uno tiene unos valores y unos principios que quizá el Rol que desempeña en algún momento de su vida le exija violarlos. o Sobrecarga: plantea un problema de prioridades, que no suele ser fácil de solucionar. o Ambigüedad: las expectativas sobre el rol no están claras, no parece que se quieran aclarar. El concepto del rol aporta un punto de vista significativo para comprender el comportamiento personal. Está claramente relacionado con dos de las necesidades humanas básicas formuladas por Maslow: la pertenencia, la necesidad de integrarse, ser parte de grupos humanos, y la necesidad de status. 8.2. ROLES O “PAPELES” EN EL GRUPO Se denomina “papel grupal” o rol a la forma en que cada individuo colabora en la tarea del grupo, puede crear tensiones o resolverlas, mostrarse solidario y complaciente o bloquear las tareas a realizar. Una de las formas más clásicas de analizar estos roles grupales la propuso Robert Bales apoyándose en dos aspectos básicos del trabajo de un grupo: la tarea a realizar y la satisfacción por la calidad de la relación interpersonal. Satisfacción y tarea completan el juego dinámico de los grupos y las organizaciones. Las organizaciones actuales insisten en pedir simultáneamente un elevado nivel de relación y un elevado nivel de tarea. Los componentes de los grupos no siempre desempeñan el mismo rol, aunque pueden tener preferencias por alguno de ellos. El tipo de tareas a realizar condiciona con frecuencia el desempeño de roles: 1. El Solidario: rol positivo que se dirige al aspecto de satisfacción grupal. El rol del solidario es un excelente modo para configurar un ambiente sincero, en que cada uno se acepta tal como es. 2. El Antagónico: sujeto con alto nivel crítico. Todo lo analiza y critica desde su propia perspectiva. Es un rol contrario al solidario. El antagónico se pone en contra de lo que otros dicen originando insatisfacción y rechazo en el grupo. 3. El Relajado: se trata de un rol con referencia a la satisfacción grupal. Tiene 12 Psicología Social Carlos Marcos Marcos 2008-2009 generalmente una visión positiva de sí mismo y de los demás. Sabe ganar y perder, vive y convive con sus defectos y virtudes y con lo positivo y negativo de los demás sin que se sienta amargado. Es un rol muy positivo en el grupo. 4. El Tenso: para vivir en paz necesita la guerra. En los grupos se le teme porque crea discusiones acaloradas, pero por otra parte, se necesita su aportación para dinamizar la acción grupal con sus preguntas y dificultades. 5. El Acorde: busca siempre los puntos coincidentes, los datos más útiles para llegar a un acuerdo. Sus acciones y sus comportamientos son muy positivos y ayudan a que el grupo se comprenda mejor y trabaje con más efectividad. 6. El Desacorde: no soporta que el grupo se lleve bien o coincida en algo común. Origina insatisfacción grupal. 7. El Creador: cuando interviene es para dar sugerencias ricas y útiles. Su rol se refiere a la tarea. Ofrece soluciones y métodos para llegar a cumplir los objetivos. 8. El Criatura: suelen ser personas que piden y reclaman sugerencias, necesitan saber qué camino deben seguir. Suelen formar una buena pareja con el creador a quien apoyan y a quienes necesitan. Aceptan bien las sugerencias y son capaces de llevarlas a cabo. 9. El Técnico: es uno de los roles más frecuentes en los grupos. Dan su parecer, emiten opiniones, afirman siempre, saben de todo. Es un rol típico de tarea que, si se enfoca correctamente, evitando exageraciones, constituye un paso decisivo para determinar objetivos y métodos para el grupo. Sus aportaciones suelen ayudar notablemente en el establecimiento y desarrollo de la tarea común. 10. El Espontáneo: cuenta lo que hizo y cómo lo hizo, pidiendo la opinión de los demás. Con el técnico forma una excelente pareja para la realización de tareas. 11. El Brújula: es quien se da cuenta de los desenfoques, el que avisa y comunica datos objetivos, clarifica, sintetiza, resume, aclara cuando el grupo tiene dificultades y pierde el rumbo. El desempeño de este rol es básico para el desarrollo y finalización de la tarea. 12. El Anemómetro: busca datos, hechos, información. Es un rol de tarea, ayuda al grupo a conectar con las realidades y los datos y a no dejarse influir por las opiniones subjetivas. Si se une al brújula forma una pareja muy eficaz para la realización de la tarea. 8.3. OTRAS TIPOLOGÍAS Hay tanto tipos de equipo como personas que los conforman. Los “tipos” deben considerarse como modelos de análisis representativos pero inexistentes en la práctica. Algunos de los roles o papeles que se pueden desempeñar son: a. Por su actividad: - Activos: dinamizan el equipo con sus ideas. Son personas muy valiosas capaces de trabajar en varios proyectos a la vez. Su inconstancia a veces les hace desechar proyectos ya empezados. - Pasivos: reflexivos y observadores, a veces les cuesta tomar decisiones. b. Por su apertura mental - Introvertido: frialdad, timidez, impenetrable, de pocas palabras. No se deja convencer públicamente ni recibir presiones. Nunca admite que se ha equivocado. Desecha las entrevistas largas. - Extravertido: amable, “amigo rápido”, poco formalista, le gusta la flexibilidad y rechaza las previsiones. c. Por su comportamiento ante la creatividad - Innovador: le gusta probar lo nuevo, despuntar y ser el primero en conocer y 13 Psicología Social Carlos Marcos Marcos 2008-2009 hacer. Es activo e impulsivo-racional. - Rutinario: sólo admite lo conocido y practicado, rechaza lo nuevo y desconfía de los cambios. - Maníaco: engrandecen las pequeñeces, se deja enganchar por un embaucador. Rechaza, por completo, al que tiene antipatía y desea cosas para él. No se le pueden discutir los detalles. - Desconfiado: no cree en nada ni en nadie, desconfía de todo y de todos. Llega fácilmente a la ofensa verbal y rechaza totalmente a las personas con contradicciones. d. Por su reacción ante el trabajo - No perseverantes: - Primarios: actúan por las primeras impresiones. Son activos pero aportan poca calidad. - Secundarios: profundizan en las cuestiones. Son más cualitativos que cuantitativos. - Perseverantes: - Primarios: ofrecen continuidad y emotividad. - Secundarios: ofrecen continuidad y excelencia. e. Por su egocentrismo - Privilegiado: tiende a exhibirse y distinguirse autoelogiándose, busca aparentar y le gusta ser halagado. Odia que le discutan y jamás da la razón a los demás. - Dominador: quiere ser obedecido constantemente y odia obedecer. Considera a todos como empleados suyos. Exigente sin condiciones. Más temido que admirado, se enfurece cuando halla resistencia. - Pesimista. es capaz de inspirar lástima y sufrir, ya que son las condiciones que necesitan para ser felices. Se queja de todo y rechaza a los que le ofrecen soluciones optimistas. - Resistente: pone pegas a todos y se muestra cabezota. Es algo irónico y cínico, amargado que le gusta dañar a los demás. Lo que más repudia es que le presionen para que modifique sus criterios y recibir lecciones de orden social. 8.4. ALGUNOS PAPELES GRUPALES Papeles positivos a. El líder: personalidad fuerte dentro del grupo, tiene gran autoridad y consigue oír y captar la atención. Tiene el inconveniente que sólo hable de él, amedrentando al resto. El animador deberá encauzar a esta figura, dominarlo y aislarlo si la cosa va mal. b. El moderador: calma ánimos, reduce tensiones y lleva al grupo al plano de la ideas y acciones. El animador debe recurrir a él cuando “la cosa va mal”. c. El orientador: es el guía del grupo, centra la conversación en el tema que hay que tratar y recuerda las directrices y objetivos. Al animador le sirve de apoyo. d. El experto: se encarga de informar al grupo. Tiene el inconveniente de actuar como sabelotodo, inhibir al grupo y creerse con autoridad indiscutible. El animador ha de fijar el papel y los límites del papel del experto. e. El secretario: la memoria del grupo, anota todo, redacta las actas de reuniones y proporciona informes al exterior. El animador ha de apoyarlo, ya que su valía es inestimable para el éxito de una reunión. f. El aclarador: pide explicaciones de los términos y se cerciora de que todos le han 14 Psicología Social Carlos Marcos Marcos 2008-2009 comprendido. Puede parecer una persona con pocas “entendederas”, pero lo que tiene es menos pudor que el resto para atreverse a hacer preguntas. El animador ha de evitar que sea el único sujeto que pregunte. g. El acelerador: imprime ritmo a la reunión e intenta ir siempre “al grano”, pero por intentar ganar tiempo a veces hace perderlo. Ayuda al animador al imprimir ritmo, pero debe frenarlo cuando quiera avanzar en exceso. h. El alentador: encuentra siempre las palabras precisas para infundir ánimo a los componentes del grupo. El animador debe potenciar a esta figura, ya que todo el mundo desea agradar y superarse ante el alentador. i. El líder institucional: Investido de autoridad formal, está habituado a ejercer de animador en las reuniones. El animador comprobará si es líder formal y a la vez real. Si es líder formal puede haber conflictos de papeles entre el animador y este “líder institucional”. Si es líder real, el animador debe cooperar con él. Papeles negativos a. El crítico: censura todo lo que se dice y se hace, critica pero no da propuestas válidas ni inválidas, en una postura fácil y cobarde. El animador debe procurar que el grupo lo acalle y pedirle propuestas concretas. b. El paralizador: cada vez que interviene busca bloquear al grupo. El animador ha de decirle que el tema es muy interesante, pero que se tratará más adelante; y que al ser un tema muy atractivo debería animarse a presentarlo a todos. c. El pesimista: desde el principio opina que lo que se hace no va a servir para nada, ninguna idea le entusiasma y si reconoce la bondad de alguna idea, apostillará que no es aplicable. El animador ha de inmiscuirle en un subgrupo optimista y preguntarle que consideraría válido para todo el grupo. d. El jovial: su objetivo es reírse, cada idea manifestada le sugiere un chiste. El animador pedirá que cuente los chistes en voz alta y le encargará un informe de la reunión. e. El oponente sistemático. sólo sus ideas son válidas, suele tener traumas, considerándose un experto y el único capacitado para opinar. El animador le invitará a haga él la exposición. f. El dominador agresivo: pretende que todos hagan su voluntad, impone ideas, proyectos... (por cualquier medio) y ataca a indecisos y tímidos. El animador debe buscarle un oponente digno, quizás el Sistemático y dejarle que se imponga en pequeñeces, de forma continua. g. El indiferente: es el lastre del grupo, nada le interesa, no participa, pero critica al animador. Éste debe darle protagonismo en un subgrupo y dirigirse continuamente (con la mirada) a él. h. El presuntuoso: todo lo sabe, todo lo conoce, se adueña de ideas ajenas; tiene experiencia en todo, y la máxima. El animador se dirigirá mínimamente a él y dará importancia a los que hay a su alrededor. i. El manipulador: tiene objetivos personales no confesados, se esfuerza en llevar a todos en la dirección que él desea, pero haciéndoles pensar que llegaron por su propio pie. Cuanto más hábil, resulta más peligroso. El animador ha de llevarle a su terreno, facilitar su participación y el encuentro interpersonal y enseñarle a respetar a los demás. 8. ALGUNAS ACTITUDES Y EXPRESIONES BLOQUEADORAS DE LAS RELACIONES INTERPERSONALES Las expresiones y actitudes bloqueadoras de las relaciones interpersonales están 15 Psicología Social Carlos Marcos Marcos 2008-2009 basadas generalmente en hábitos adquiridos, que habría que evitar en las relaciones con los demás. Pueden clasificarse en grupos que responden a expresiones o mecanismos de defensa que corresponden a algún aspecto negativo, o no superado, de las características personales. 1. Complejo de inferioridad: observaciones rudas y desconsideradas, hacer comentarios sarcásticos, criticar todo y por todo, dar “puñaladas por la espalda”, fanfarronear, hacer uso de humor hiriente, mostrar una actitud defensiva y clasificar a las personas. 2. Complejo de superioridad: frases y respuestas ásperas, no decir la verdad, espíritu de contradicción, mostrar un espíritu burlón, ser muy insistente, pensar con mayor rapidez de lo que uno habla, cortar a una persona, interrumpir, corregir a una persona en presencia del resto del equipo, emplear excesivamente la jerga técnica, generalizar demasiado e irresponsabilidad. 3. Falta de seguridad en sí mismo: hablar al oído a una persona delante de otras, perfeccionismo, hablar de forma fría e impersonal, ser melosos, levantar la voz, gritar, chismorreo, murmuración, expresar sentimientos de hostilidad, cambiar constantemente de tema, hacer uso de expresiones vulgares, frases hechas, falta de claridad y concisión, ser muy sensibles, mantener una actitud defensiva, falta de conciencia, susto, espanto, terror, transpiración, pestañear rápidamente y dar la mano sudada. 4. Exceso de egocentrismo: ser incapaces de apreciar las manifestaciones de buen humor en los demás, hablar únicamente en primera persona, no recordar los nombres de algunos miembros del grupo, monopolizar la conversación, no mirar al interlocutor, no prestar atención, no saber escuchar, conflictos personales, mostrar un rostro inexpresivo y escuchar sólo lo que quiere oír. 5. Pesimismo: ser pesado, monótono, expresar malhumor al hablar, recordar constantemente los fracasos, quejarse constantemente, postura floja y descuidada y encogerse de hombros. 16