Las Enfermedades Mentales Acosan a los Chilenos. Una de cada tres personas sufre algún trastorno siquiátrico. Depresión, angustia y ataques de pánico son las enfermedades más comunes en adultos de entre 35 y 50 años. Sin embargo, todas tienen buen pronóstico si se tratan a tiempo. Las cifras que entrega el siquiatra Raúl Riquelme, Presidente de la Sociedad Chilena de Salud Mental, asustan a cualquiera. Un 35 por ciento de la población presenta o ha tenido anteriormente un desorden mental. Todo un récord que nos acerca a la realidad de los países desarrollados, con altos índices en este tema. Aunque muchos le echan la culpa a la crisis, lamentablemente este es un problema de la vida actual. "Los datos que manejamos son de los últimos diez años y no se relacionan con la situación de hoy, aunque sin duda ésta afecta". Tiene que ver con el estilo de vida moderno y con nuestro desarrollo como país. La Organización Mundial de la Salud ha estimado que para 2020 la depresión va a ser la segunda causa de enfermedad en el mundo. Esto es producto del desarrollo industrial y tecnológico, de la globalización. No se ha tomado en cuenta a las personas en todos estos cambios; la gente se adapta más lentamente que lo que avanza el mundo. A esto, agrega el siquiatra, hay que sumar los cambios dentro de la familia. "Los niños están bombardeados de información y saben más que los padres; la mujer trabaja y es independiente". Toda esta situación hace que la vida sea más complicada; la gente está sujeta a todo tipo de presiones, exigencias laborales, largas jornadas de trabajo, problemas familiares, estrés de todo tipo. Además, el modelo chileno, que destaca principalmente el éxito económico de las personas, complica aún más el panorama. PROBLEMAS MÁS COMUNES Las enfermedades mentales afectan principalmente a las a las personas laboralmente activas. En Chile e118% de la población, sobre todo mujeres, sufre de trastornos afectivos, el mal más común: un 7% presenta depresión, un8% distinta y alrededor del 3% depresión bipolar. Los síntomas de la depresión son decaimiento, falta de fuerza, angustia vespertina o matinal; desánimo, irritabilidad o cambios bruscos de humor, además de una desmotivación en el trabajo, ideas pesimistas o suicidas. Este cuadro no dura menos de dos a tres meses y no tiene nada que ver con las depresiones causadas por el fallecimiento de una persona o un accidente, ya que en esas circunstancias experimentar ese cuadro durante dos o tres semanas es normal. La distancia, en cambio, es una depresión reiterada que evoluciona en más de dos años, con períodos de entre un mes a dos semanas libres de síntomas, que luego reaparecen. "Son menos intensas que las depresiones en cuanto a sintomatología, pero más largas en el tiempo y afectan mayormente a las mujeres". Otro grupo de dolencias importante son los desórdenes ansiosos: ansiedad generalizada, crisis de pánico y somatizaciones, que alcanzan a114% de la población. Aquellos que sufren somatizaciones experimentan dolores del cuerpo ( cabeza, cuello y estómago) debido a una causa básica. En cambio, en la anstia o atisledad generalizada, el sujeto siente que algo malo va a ocurrir. Se levanta en la mañana de mal humor y en la tarde anda igual, esperando que algo terrible suceda. Las crisis de pánico, por su parte, se caracterizan por ataques - leves o violentos - de angustia de muerte o de locura. "La persona llega al servicio de urgencia con la sensación real de que se va a morir. Pueden aparecer con relación a una situación específica, como por ejemplo una separación de la pareja, o sin causa aparente", explica el especialista. El abuso de sustancias también es un problema importante entre los chilenos y afecta especialmente a los hombres. La primera prevalencia la tiene el alcoholismo, luego las drogas (cocaína, marihuana) y la polidependencia, que son los adictos a varios estupefacientes. Muchos problemas mentales, como depresión o ansiedad, se ocultan tras estas adicciones. Ante este panorama, el médico advierte que es fundamental que quienes presenten estos síntomas consulten a un especialista; un tratamiento adecuado asegura un buen pronóstico. En algunos casos bastará con una terapia, pero en otros habrá que recetar medicamentos para atacar los síntomas más intensos y "aliviar el sufrimiento de las personas". La clave, explica el médico, "es buscar la raíz del trastorno y eso sólo se logra con terapia. Es el sicólogo o siquiatra el que debe ayudar al paciente para que logre adaptarse a la vida sin enfermar. Le entregará herramientas para enfrentar sus propias fragilidades y esto le permitirá no sólo superar las crisis, sino que prevenirlas en el futuro". La salud mental no es sólo responsabilidad del individuo, sino de toda la sociedad. Las personas deben reflexionar sobre su propio bienestar, tener conciencia de sus malestares y ansiedades, y consultar frente a algún síntoma. Pero también existe una responsabilidad social: si veo que mi hijo, mi padre o mi pareja no están bien, hay que llevarlo al especialista. Esa misma actitud debe darse en la empresa, opina el especialista, donde muchas veces se discrimina al enfermo. "Por último, las instituciones públicas y privadas tienen el deber de entregar las facilidades para que las personas puedan acceder a un tratamiento y mejorar". Claudia Hidalgo Rozenblum, El Mercurio, domingo 2- 9 – 2001. Sociedad Centro de Intermediación para el Desarrollo de las Personas en el Trabajo OTIC-ALIANZA Organismo Técnico Intermedio de Capacitación -OTICReconocido por el Servicio Nacional de Capacitación y Empleo –SENCE- Registro Nº 105. Personalidad Jurídica del 5 de Julio del año 1999. Una alianza para servir a la formación de la Empresa y de la Educación Chilena. Teléfonos: 688.87.21 - 688.5751 Fax: 688.8001 . Cienfuegos 51. Santiago de Chile. Consultas al correo electrónico: alianza@iglesia.cl Sitio web: www.otic-alianza.cl