Crítica de arte

CRÍTICA DE UNA EXPOSICIÓN.
EXPOSICIÓN DE ELENA CAMACHO EN CALZADA DE CALATRAVA.
Desde el día 12 de septiembre hasta el día 23 de ese mismo mes, la obra de Elena Camacho ha estado
expuesta en la sala de exposiciones de la Universidad Popular de Calzada de Calatrava.
El acto inaugural contó con la presencia de numerosas personalidades del mundo político, social y
cultural de esta localidad. Francisco Espinosa, alcalde del municipio y vicepresidente de la Diputación
Provincial, tuvo palabras de elogio hacia la obra de esta artista local, también destacó en su alocución,
al numeroso público asistente al acto, la importancia de la cultura en la vida de todos y la gran labor
que desde las diferentes áreas municipales se está realizando, especialmente desde las Universidades
Populares, para su difusión.
ELENA CAMACHO.
Elena Camacho nace en Barcelona en el año 1969, con raíces andaluzas y hundidas en la Mancha,
concretamente en Calzada de Calatrava, lugar al que ahora regresa para enseñarnos su obra pictórica
como ya lo hice en el verano de 1991, hace que nos sintamos doblemente reconfortados y le demos una
especial bienvenida.
Se licenció en Bellas Artes y realizó cursos de doctorado e investigación en la Universidad de Sant Jordi
(Barcelona). Desde 1990 ha venido exponiendo por diversas ciudades y localidades de España y
Francia: Barcelona, Esplugues de Llobregat, Castelldefels, Prat de Llobregat, Santiago de Compostela,
Madrid, Toledo, Ciudad Real, Puertollano, Calzada de Calatrava, Albi y Toulouse. Actualmente
prepara exposiciones en Finlandia y Galicia.
LA OBRA.
La obra de Elena Camacho, objeto de esta exposición, trabaja sobre la tinta china en papel de arroz,
utilizando la técnica de aguada japonesa, es una clara manifestación de su imaginación y creatividad y
el avance de la artista hacia el descubrimiento de nuevas formas de contemplación y percepción, que se
manifiesta a través de trazos infinitos creando formas, texturas, manchas y claro − oscuros que
imprimen una gran profundidad y luminosidad a su obra, invitándonos a descubrir con ella el
movimiento y la vida que discurre por cada uno de sus paisajes finlandeses tocados por la aurora
boreal, temática central de esta exposición.
Su obra es un reflejo del arte Sumi − é, un arte subjetivo alejado de cualquier expresión objetiva basada
en la simple observación. Una manifestación del sentimiento basado en la percepción para la reflexión,
cuyos elementos básicos son tres: la simplicidad, la simbolización y la naturalidad. El misticismo de los
colores abreviados, puros y profundos, las líneas flexibles a pesar de la ausencia definida, llena de
contornos sumamente ricos.
La pintura de Elena Camacho se corresponde con la filosofía Zen: Sei (pureza), So (simplicidad), Jung
(suavidad), Ga (elegancia). Una vida eterna, una vida agradable, una pintura libre, un sentimiento
noble que a través de su pintura nos lleva a la comprensión de la razón de la naturaleza. Amando la
naturaleza, adquiriendo el saber suficiente para amar las bellezas naturales y a los seres vivos.
Fascinante.
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