PAULO FREIRE, UN ACERCAMIENTO A SU OBRA UNA COMPILACIÓN DE CITAS TEXTUALES DE SUS LIBROS: PEDAGOGÍA DE LA AUTONOMÍA CARTAS A QUIEN PRETENDE ENSEÑAR PEDAGOGÍA DEL OPRIMIDO ELABORADA POR EL PROF. FELIPE DE JESÚS ANAYA CHAVARRÍA PRESENTACIÓN En el marco de la teoría de la resistencia, abogado de profesión, educador y pedagogo de corazón, el brasileño Paulo Freire (1921-1997) personifica una de las figuras más trascendentes de este movimiento. Fue encarcelado en 1964, exiliado en Chile y Estados Unidos durante diez años. Sin embargo, su producción teórica ha llegado a los rincones más remotos del mundo y su ejemplo en el terreno de los hechos ha iluminado la práctica de miles de docentes latinoamericanos y de otros diversos lugares. A través de este pequeño esfuerzo de compilación se intenta básicamente conseguir que más personas entren en contacto con la obra de este ilustre pensador y docente que fue Paulo Freire y que su lectura les sirva como un referente, como una brújula que les oriente en el laberinto en que puede llegar a convertirse en ocasiones la tarea de enseñar. En el aula los maestros encontramos una serie de desafíos al momento de interactuar con nuestros alumnos y uno de ellos es la manera en que cada alumno o colectivo de estudiantes interpretan su realidad y cómo ello influye en su forma de proceder y de aprender. La relación de los niños con el mundo puede ser ingenua o conciente, nuestro papel es ayudarles a que sea conciente, proporcionándoles elementos y herramientas para que problematicen su realidad y puedan transformarla creativamente y dejen de ser sólo sus víctimas. Espero que la lectura de estos fragmentos despierte en el lector la necesidad de revisar los textos completos y pueda serles útil en sus proyectos escolares, profesionales y personales. Como anotación final es necesario puntualizar que en última instancia la intención de esta compilación es meramente académica y tiene carácter de obra de divulgación a manera de crestomatía. FREIRE, PAULO. PEDAGOGÍA DE LA AUTONOMÍA. MÉXICO, SIGLO XXI, 1996. “Quien observa lo hace desde un cierto punto de vista, lo que no sitúa al observador en el error. El error en verdad no es tener un cierto punto de vista, sino hacerlo absoluto y desconocer que aún desde el acierto de su punto de vista es posible que la razón ética no esté siempre con él. Mi punto de vista es... el de los excluidos.” (p. 16) “La ética de que hablo no es la ética menor, restrictiva del mercado, que se inclina obediente a los intereses del lucro.” (p. 17) “La ética de que hablo es la que se sabe afrontada en la manifestación discriminatoria de raza, género, clase. Es por esta ética inseparable de la práctica educativa, no importa si trabajo con niños, jóvenes o adultos, por la que debemos luchar. Y la mejor manera de luchar por ella es vivirla en nuestra práctica, testimoniarla, con energía, a los educandos en nuestras relaciones con ellos. En la manera en que lidiamos con los contenidos que enseñamos...” (p. 18) “La preparación científica del profesor o de la profesora debe coincidir con su rectitud ética.” (p. 18) “Si soy puro producto de la determinación genética o cultural o de clase, soy irresponsable de lo que hago en el moverme en el mundo y si carezco de responsabilidad no puedo hablar de ética. Esto no significa negar los condicionamientos genéticos, culturales, sociales a que estamos sometidos. Significa reconocer que somos seres condicionados pero no determinados. Reconocer que la Historia es tiempo de posibilidad y no de determinismo, que el futuro, permítanme reiterar, es problemático y no inexorable.” (pp. 20-21) “(Hay algunas) personas, incluso las de izquierda, para quienes el futuro perdió su problematicidad.” (p. 21) “La reflexión crítica cobre la práctica se torna una exigencia de la relación teoría-práctica sin la cual la teoría puede convertirse en palabrería y la práctica en activismo.” (p. 24) “No hay docencia sin dicencia.” (p. 25) “Quien enseña aprende al enseñar y quien aprende enseña al aprender.” (p. 25) “Tarea docente es no sólo enseñar los contenidos, sino también enseñar a pensar.” (p. 28) “Hoy se habla con insistencia del profesor investigador. En mi opinión lo que hay de investigador en el profesor no es una calidad o una forma de ser o de actuar que se agregue a la de enseñar. La indagación, la búsqueda, la investigación, forman parte de la naturaleza de la práctica docente. Lo que se necesita es que el profesor, en su formación permanente, se perciba y se asuma, por ser profesor, como investigador.” (p. 30) “Pensar acertadamente... demanda profundidad y no superficialidad en la comprensión y en la interpretación de los hechos. Supone disponibilidad para la interpretación de los hallazgos.” (p. 35) “El clima de quien piensa acertadamente es el de quien busca seriamente la seguridad en la argumentación.” (p. 36) “El rechazo definitivo a cualquier forma de discriminación forma parte del pensar acertadamente.” (p. 37) “No hay entendimiento que no sea comunicación e intercomunicación y que no se funde en la capacidad de diálogo. Por eso el pensar acertadamente es dialógico y no polémico.” (p. 39) “Cuanto más me asumo como estoy siendo y percibo la o las razones de ser del por qué estoy siendo así, más capaz me vuelvo de cambiar, de promoverme, en este caso, del estado de curiosidad ingenua al de curiosidad epistemológica.” (pp. 40-41) “La educación que no reconoce un papel altamente formador en la rabia justa, en la rabia que protesta contra las injusticias... contra el desamor, contra la explotación y la violencia, está equivocada.” (p. 41) “Si tuviéramos claro que fue aprendiendo como percibimos que es posible enseñar, entenderíamos con facilidad la importancia de las experiencias informales en las calles, en las plazas, en el trabajo, en los salones de clase de las escuelas, en los patios de recreos, donde diferentes gestos de alumnos, del personal docente, se cruzan llenos de significación.” (p. 45) “Enseñar no es transferir conocimiento, sino crear las posibilidades para su... producción o construcción.” (p. 47) “(No es) posible existir sin asumir el derecho o el deber de optar, de decidir, de luchar, de hacer política.” (p. 52) “Me gusta ser hombre, ser persona, porque sé que mi paso por el mundo no es algo predeterminado, preestablecido. Que mi “destino” no es un dato sino algo que necesita ser hecho y de cuya responsabilidad no puedo escapar. Me gusta ser persona porque la Historia en que me hago con los otros y de cuya hechura participo es un tiempo de posibilidades y no de determinismo. Eso explica que insista tanto en la problematización del futuro y que rechace su inexorabilidad.” (p. 52) “Todo eso nos lleva de nuevo al radicalismo de la esperanza. Sé que las cosas pueden incluso empeorar, pero también sé que es posible intervenir para mejorarlas.” (p. 52) “El hecho de percibirme en el mundo, con el mundo y con los otros, me pone en una posición ante el mundo que no es la de quien nada tiene que ver con él. Al fin y al cabo, mi presencia en el mundo no es la de quien se adapta a él, sino la de quien se inserta en él. Es la posición de quien lucha para no ser tan sólo un objeto, sino también un sujeto de la Historia.” (p. 53) “Contra toda la fuerza del discurso fatalista neoliberal, pragmático y reaccionario, insisto hoy, sin desvíos idealistas, en la necesidad de la conscientización.” (p. 54) “La inconclusión que se reconoce a sí misma implica necesariamente la inserción del sujeto inacabado en un permanente proceso social de búsqueda.” (p. 54) “El respeto a la autonomía y a la dignidad de cada uno es un imperativo ético y no un favor que podemos concedernos unos a los otros.” (p. 58) “Que alguien se vuelva machista, racista, clasista, lo que sea, pero que se asuma como transgresor de la naturaleza humana. Que no me venga con justificaciones genéticas, sociológicas o históricas o filosóficas para explicar la superioridad de la blanquitud sobre la negritud, de los hombres sobre las mujeres, de los patrones sobre los empleados. Cualquier discriminación es inmoral y luchar contra ella es un deber.” (p. 59) “Saber que debo respeto a la autonomía y a la identidad del educando exige de mí una práctica totalmente coherente con ese saber.” (p. 60) 4 “¿Cómo puedo yo, en verdad, continuar hablando del respeto a la dignidad del educando si lo trato con ironía, si lo discrimino, si lo inhibo con mi arrogancia? ¿Cómo puedo continuar hablando de mi respeto al educando si el testimonio que doy es el de la irresponsabilidad, el de quien no se prepara u organiza para su práctica, el de quien no lucha por sus derechos ni protesta contra las injusticias? La práctica docente, específicamente humana, es profundamente formadora y, por eso, ética. Si no se puede esperar que sus agentes sean ángeles, se puede y se debe exigir de ellos seriedad y rectitud.” (p. 64) “La lucha a favor del respeto a los educadores y a la educación significa que la pelea por salarios menos inmorales es un deber irrecusable y no sólo un derecho.” (p. 65) “Una de las formas de lucha contra la falta de respeto de los poderes públicos hacia la educación es, por un lado, nuestro rechazo a transformar nuestra actividad docente en una pura “chamba”... ellos y ellas (los maestros) deben verse a sí mismos como profesionistas.” (p. 60) “La capacidad de aprender, (debe servir) no sólo para adaptarnos sino sobre todo para transformar la realidad, para intervenir en ella y recrearla.” (p. 67) “Politicidad, (es la) cualidad que tiene la práctica educativa de ser política, de no poder ser neutral.” (p. 68) “(Tenemos) La esperanza de que profesor y alumnos podemos aprender, enseñar, inquietarnos, producir y juntos igualmente resistir a los obstáculos que se oponen a nuestra alegría.” (p. 70) “La esperanza es un condimento indispensable de la experiencia histórica.” (p. 71) 5 “Es preciso que, en la resistencia que nos preserva vivos, en la comprensión del futuro como problema y en la vocación de ser más como expresión de la naturaleza humana en proceso de estar siendo, encontremos fundamentos para nuestra rebeldía y no para nuestra resignación frente a las ofensas que nos destruyen el ser. No es en la resignación en la que nos afirmamos, sino en la rebeldía frente a las injusticias.” (p. 76) “Es a partir de este saber fundamental: cambiar es difícil pero es posible, como vamos a programar nuestra acción político-pedagógica.” (p. 77) “No puedo aceptar como táctica del buen combate la política del cuanto peor mejor, pero tampoco puedo aceptar, impasible, la política asistencialista que, al anestesiar la conciencia oprimida, prorroga... la necesaria transformación de la sociedad.” (p. 78) “No puedo prohibir que los oprimidos... voten por candidatos reaccionarios, pero tengo el deber de advertirlos sobre el error que cometen, de la contradicción en que se enredan. Votar por el político reaccionario es ayudar a la preservación del statu quo.” (p.78) “La miseria es violencia y no es la expresión de la pereza popular o fruto del mestizaje o de la voluntad punitiva de Dios, violencia contra la que debemos luchar.” (p. 78) “Como educador, necesito ir “leyendo” cada vez mejor la lectura del mundo que los grupos sociales con los que trabajo hacen de su contexto inmediato y del más amplio del cual el suyo forma parte.” (p. 79) “Si, por un lado, no puedo adaptarme o “convertirme” al saber ingenuo de los grupos populares, por el otro, si soy realmente progresista, no puedo imponerles arrogantemente mi saber como el verdadero, El diálogo en el que se va 6 desafiando al grupo popular a pensar su historia social como experiencia igualmente social de sus miembros, va revelando la necesidad de superar ciertos saberes que, desnudos, van mostrando su “incompetencia” para explicar los hechos.” (p. 79) “Uno de los equívocos funestos de los militantes políticos de práctica mesiánicamente autoritaria fue siempre desconocer por completo la comprensión del mundo de los grupos populares. Al verse como portadores de la verdad salvadora, su tarea no es proponerla sino imponerla.” (p. 79) “Es importante tener siempre claro que inculcar en los dominados la responsabilidad de su situación forma parte del poder ideológico dominante. De allí la culpa que ellos sienten... por encontrarse en esta o aquella situación de desventaja.” (p. 80) “El educador que sigue procedimientos autoritarios o paternalistas que impiden o dificultan el ejercicio de la curiosidad del educando, termina por entorpecer su propia curiosidad.” (p. 82) “El autoritarismo y el libertinaje son rupturas del tenso equilibrio entre autoridad y libertad.” (p. 86) “En función de nuestro pasado autoritario, no siempre impugnado con seguridad por una modernidad ambigua, oscilamos entre formas autoritarias y formas libertinas.” (p. 86) “El profesor que no lleve en serio su formación, que no estudie, que no se esfuerce por estar a la altura de su tarea no tiene fuerza moral para coordinar las actividades de su clase.” (p. 88) 7 “Si no somos tratados con dignidad y decencia por la administración privada o pública de la educación, es difícil que se concrete el respeto que como maestros debemos a los educandos.” (p. 92) “La educación es una forma de intervención en el mundo.” (p. 95) “La educación nunca fue, es, o puede ser neutra, “indiferente” a cualquiera de estas hipótesis, la de la reproducción de la ideología dominante o la de su refutación.” (p. 95) “Es una inmoralidad que a los intereses radicalmente humanos se sobrepongan... los intereses del mercado.” (p. 96) “Hablo de la resistencia, de la indignación, de la “justa ira” de los traicionados y de los engañados. De su derecho y deber de rebelarse contra las transgresiones éticas de que son víctimas.” (p. 97) “El empresario moderno... acepta, estimula y patrocina naturalmente el adiestramiento técnico de “su” obrero. Lo que él rechaza necesariamente es su formación que, al paso que incluye el saber técnico y científico indispensable, habla de su presencia en el mundo.” (p. 98) “No puedo ser profesor si no percibo cada vez mejor que mi práctica, al no poder ser neutra, exige de mí una definición. Una toma de posición.” (p. 98) “Soy profesor a favor... de la democracia contra la dictadura de derecha o de izquierda. Soy profesor a favor de la lucha constante contra cualquier forma de discriminación, contra la dominación económica de los individuos o de las clases sociales. Soy profesor contra el orden capitalista vigente que inventó esta aberración; la miseria en la abundancia.” (p. 99) 8 “Tan importante como la enseñanza de los contenidos es mi testimonio ético al enseñarlos.” (p. 99) “A veces, el mismo profesor no tiene certeza de haber rebasado o no el límite de su autoridad.” (p. 100) “Es decidiendo como se aprende a decidir.” (p. 102) “Asumir las consecuencias del acto de decidir forma parte del aprendizaje.” (p. 102) “Nadie madura de repente, a los 25 años. Las personas van madurando todos los días o no. La autonomía, en cuanto maduración del ser para sí, es proceso, es llegar a ser.” (p. 103) “La neutralidad de la educación es, en verdad, imposible. Y es imposible no porque profesores y profesoras “alborotadores” y “subversivos” lo determinen. La educación no se vuelve política por causa de la decisión de este o de aquel educador. Ella es política.” (p. 106) “Lavarse las manos” frente a la opresión es reforzar el poder del opresor, es optar por él.” (p. 107) “Ni la educación es una fuerza imbatible al servicio de la transformación de la sociedad, porque yo así lo quiera, ni tampoco la perpetuación del statu quo porque el dominante así lo decrete. El educador y la educadora críticos no pueden pensar que, a partir del curso que coordinan o del seminario que dirigen, pueden transformar al país. Pero pueden demostrar que es posible cambiar. Y esto refuerza en él o en ella la importancia de su tarea político-pedagógica.” (p. 108) 9 “La globalización que refuerza el mando de las minorías poderosas y despedaza y pulveriza la presencia impotente de los dependientes, haciéndolos todavía más impotentes, es un destino manifiesto.” (p. 110) “Quien tiene algo que decir tiene igualmente el derecho y el deber de decirlo. Sin embargo, es preciso que quien tiene algo que decir sepa, sin sombra de duda, que no es el único o la única que tiene algo que decir.” (p. 112) “Quien tiene algo que decir debe asumir el deber de motivar, de desafiar a quien escucha, en el sentido de que quien escucha diga, hable, responda.” (p. 112) “Escuchar, en el sentido aquí discutido, significa la disponibilidad permanente por parte del sujeto que escucha para la apertura al habla del otro, a las diferencias del otro. Eso no quiere decir, evidentemente, que escuchar exija que quien realmente escucha se reduzca al otro que habla. Eso no sería escucha, sino autoanulación. La verdadera escucha no disminuye en nada mi capacidad de ejercer el derecho de discordar, de oponerme, de asumir una posición.” (p. 115) “Si discrimino al niño o a la niña pobre, a la niña o al niño negro, al niño indio... si discrimino a la mujer, a la campesina, a la obrera, no puedo evidentemente escucharlas y, si no las escucho, no puedo hablar con ellas.” (p. 117) “La falta de humildad, revelada en la arrogancia y en la falsa superioridad de una persona sobre otra, de una raza sobre otra, de un género sobre otro, de una clase o de una cultura sobre otra, es una transgresión de la vocación humana del ser más. Lo que la humildad no puede exigir de mí es mi sumisión a la arrogancia y a la rudeza de quien me falta al respeto, lo que la humildad exige de mí, cuando no puedo reaccionar como debería a la afrenta, es enfrentarla con dignidad. La dignidad de mi silencio y de mi mirada que transmite mi protesta posible.” (p. 117) 10 “La falta de respeto a la lectura del mundo del educando revela el gusto elitista, por consiguiente antidemocrático, del educador que, de esta manera, sin escuchar al educando, no habla con él.” (p. 118) “La lectura del mundo revela, como es evidente, el entendimiento del mundo que se viene constituyendo cultural y socialmente. También revela el trabajo individual de cada sujeto en el propio proceso de asimilación del entendimiento del mundo.” (p. 118) “Una de las tareas esenciales de la escuela, como centro de producción sistemática de conocimiento, es trabajar críticamente la inteligibilidad de las cosas y de los hechos y su comunicabilidad.” (p. 118) “Es preciso que el educando vaya asumiendo el papel de sujeto de la producción de su entendimiento del mundo y no sólo el de recibidor de la que el profesor le transfiera.” (p. 119) “Mi papel de profesor progresista no es sólo enseñar matemáticas o biología sino, al tratar la temática que es, por un lado, objeto de mi enseñanza, y por el otro, del aprendizaje del alumno, ayudar a éste a reconocerse como arquitecto de su propia práctica cognoscitiva.” (p. 119) “La ideología neoliberal se esfuerza por hacernos entender la globalización como algo natural... y no como una producción histórica.” (p. 122) “La gran fuerza sobre la que se apoya la nueva rebeldía es la ética universal del ser humano y no la del mercado.” (p. 124) “La libertad de comercio no puede estar por encima de la libertad del ser humano.” (p. 124) 11 “Parece cada vez más importante debatir lo que se dice y lo que muestra y cómo se muestra en la televisión. Como educadores y educadoras progresistas no sólo no podemos desconocer la televisión sino que debemos usarla, sobre todo discutirla.” (p. 133) “Pensar en la televisión o en los medios de la comunicación (es) un proceso imposible de ser neutro.” (p. 133) “La práctica educativa es todo eso: afectividad, alegría, capacidad científica, dominio técnico al servicio del cambio.” (p. 136) “El nuestro es un trabajo que se realiza con personas, pequeños, jóvenes o adultos, pero personas en permanente proceso de búsqueda.” (p. 137) “(Podemos) Entender la práctica educativa como un ejercicio constante a favor de la producción y del desarrollo de la autonomía de educadores y educandos.” (p. 139) 12 FREIRE, PAULO. CARTAS A QUIEN PRETENDE ENSEÑAR. MÉXICO, SIGLO XXI, 2000. “No sólo aprendemos con lo que es diferente de nosotros sino hasta con lo que es nuestro contrario.” (p.2) “El analfabetismo... se constituye en un obstáculo para asumir la plena ciudadanía.” (p. 6) “¿Cómo podemos esperar de una administración de manifiesta opción elitista, autoritaria, que considere la autonomía de las escuelas dentro de su política educativa? ¿en el nombre de la llamada posmodernidad liberal?” (p. 17) “Una administración autoritaria huye de la democracia como el diablo de la cruz.” (p. 18) “No existe el discurso técnico y competente que no sea naturalmente ideológico a la vez.” (p. 20) “No se puede... esperar un gobierno popular de un candidato de un partido autoritario y elitista.” (p. 21) “Si mi utopía, mi sueño por el cual lucho al lado de tantos otros, es lo opuesto o antagónico del sueño del candidato reaccionario, no puedo votarlo.” (p. 21) “Los que tienen el poder... definen lo que es buen gusto, lo que es ético, lo que es bonito, lo que es bueno. Las clases populares, subalternas, al introyectar la ideología dominante obviamente introyectan muchos de sus criterios de valores.” (p. 22) 13 “Estudiar es en primer lugar un quehacer crítico, creador, recreador, no importa si yo me comprometo con él a través de la lectura de un texto que trata o discute un cierto contenido que me ha sido propuesto por la escuela o si lo realizo partiendo de una reflexión crítica sobre cierto suceso social o natural, y que como necesidad de la propia reflexión me conduce a la lectura de textos que mi curiosidad y mi experiencia intelectual me sugieren o que me son sugeridos por otros.” (p. 30) “Una posición crítica... no dicotomiza el saber del sentido común del otro saber, más sistemático o de mayor exactitud.” (p. 30) “El acto de estudiar siempre implica el de leer, aunque no se agote en éste.” (p. 30) “Leer no es mero entretenimiento ni tampoco es un ejercicio de memorización mecánica de ciertos fragmentos del texto.” (p. 30) “Enseñar a leer es comprometerse con una experiencia creativa alrededor de la comprensión. De la comprensión y de la comunicación.” (p. 31) “Al estudio crítico corresponde una enseñanza igualmente crítica que necesariamente requiere una forma crítica de comprender y de realizar la lectura de la palabra y la lectura del mundo, la lectura del texto y la lectura del contexto.” (p. 36) “El escritor que utiliza el lenguaje científico, académico, al tiempo que debe tratar de ser más accesible, menos cerrado, más claro, menos difícil, más simple, no puede ser simplista.” (p. 36) “Si nuestras escuelas, desde la más tierna edad de sus alumnos, se entregasen al trabajo de estimular en ellos el gusto por la lectura y la escritura, y ese gusto continuase estimulado durante todo el tiempo de su escolaridad, posiblemente 14 habría un número bastante menor de posgraduados hablando de su inseguridad o de su incapacidad para escribir.” (p. 40) “Si el estudiar no fuese para nosotros casi siempre una carga, si leer no fuese una obligación amarga que hay que cumplir, si por el contrario estudiar y leer fuesen fuente de alegría y placer, de la que surge también el conocimiento indispensable con el cual nos movemos mejor en el mundo, tendríamos índices que revelarían una mejor calidad en nuestra educación.” (p. 40) “Ése debe ser el sueño legítimo de todo autor –ser leído, discutido, criticado, mejorado, reinventado por sus lectores.” (p. 49) “Es posible que algunos cursos de capacitación del maestro sean, irresponsablemente, simples “tragamonedas”.” (p.52) “La práctica educativa...es algo muy serio. Tratamos con gente, con niños, adolescentes o adultos. Participamos en su formación. Los ayudamos o los perjudicamos en esa búsqueda. Estamos intrínsecamente conectados con ellos en su proceso de conocimiento. Podemos contribuir a su fracaso con nuestra incompetencia, mala preparación o irresponsabilidad. Pero también podemos contribuir con nuestra responsabilidad, preparación científica y gusto por la enseñanza, con nuestra seriedad y nuestro testimonio de lucha contra las injusticias, a que los educandos se vayan transformando en presencias notables en el mundo.” (p. 53) “Debemos asumir con honradez nuestra tarea docente, para lo cual nuestra transformación tiene que ser considerada rigurosamente.” (p. 53) “Se hace urgente que aumentemos las filas de la lucha por la escuela pública en este país. Escuela pública y popular, eficaz, democrática y alegre con sus 15 maestros y maestras bien pagados, bien formados y en permanente capacitación.” (p. 54) “Es evidente que los problemas relacionados con la educación no son solamente problemas pedagógicos. Son problemas políticos y éticos...” (p. 57) “Cuando falta dinero para un sector pero no falta para otro, la razón está en la política de gastos.” (p. 57) “Ninguna sociedad se afirma sin el perfeccionamiento de su cultura, de la ciencia, de la investigación, de la tecnología, de la enseñanza.” (p. 59) “Todos sabemos algo, todos ignoramos algo. Sin humildad difícilmente escucharemos al que consideramos alejado de nuestro nivel de competencia.” (p. 60) “Escuchar con atención a quien nos busca, sin importar su nivel intelectual, es un deber humano y un gusto democrático nada elitista.” (p. 61) “La tolerancia es la virtud que nos enseña a convivir con lo que es diferente. A aprender con lo diferente, a respetar lo diferente.” (p. 64) “A veces es preciso que luchemos junto al sindicato y a veces contra él si su dirigencia es sectaria, de derecha o de izquierda.” (p. 71) “La sensibilidad frente al dolor impuesto a las clases populares... por el desinterés malvado con que son maltratados nos empuja, nos estimula a la lucha política por el cambio radical del mundo.” (p. 77) 16 “Indispensable es la práctica docente de una maestra que en una escuela de la periferia habla a sus alumnos sobre el derecho a defender su identidad cultural.” (p. 78) “En una sociedad... es de vital importancia encontrar caminos democráticos para el establecimiento de límites para la libertad y la autoridad.” (p. 80) “Testimonio que no debe faltar en nuestras relaciones con los alumnos es el de la permanente disposición a favor de la justicia, de la libertad, del derecho a ser.” (p. 84) “Nosotros somos militantes políticos porque somos maestros y maestras. Nuestra tarea no se agota en la enseñanza de la matemática, de la geografía, de la sintaxis o de la historia. Además de la seriedad y la competencia con que debemos enseñar esos contenidos, nuestra tarea exige nuestro compromiso y nuestra actitud a favor de la superación de las injusticias sociales.” (p. 87) “Es necesario desenmascarar la ideología de cierto discurso neoliberal, a veces llamado modernizador, que hablando del tiempo histórico actual trata de convencernos de que así es la vida. Los más capaces organizan el mundo, producen, los menos capaces sobreviven.” (p. 88) “Hay momentos en que la maestra, como autoridad, le habla al educando, dice lo que debe ser hecho, establece límites sin los cuales la propia libertad del educando se pierde en la permisividad, pero estos momentos alternan, según la opción política de la educadora, con otros en los que la educadora habla con el educando.” (p. 94) “El contrario positivo, ya sea del autoritarismo manipulador o del espontaneísmo licencioso, es la radicalidad de la democracia.” (p. 96) 17 “La viabilización del país no está tan sólo en la escuela democrática, formadora de ciudadanos críticos y capaces, pero pasa por ella, la necesita, no se hace sin ella.” (p. 97) “No es lo que digo lo que dice que soy un demócrata o que no soy racista o machista, sino lo que hago. Es preciso que lo que hago no contradiga lo que digo.” (p. 101) “Uno de los desafíos para los educadores y las educadoras progresistas, en coherencia con su poción, es no sentirse ni proceder como si fuesen seres inferiores a los educandos de las clases dominantes en la red privada que arrogantes, maltratan y menosprecian al maestro de clase media. Pero tampoco, por el contrario, sentirse superiores, en la red pública, a los educandos de las favelas, a los niños y a las niñas populares; a los niños sin comodidades, que no comen bien, que no “visten bonito”, que no “hablan correctamente”, que hablan con otra sintaxis, con otra semántica.” (p. 107) “Los problemas del lenguaje siempre abarcan cuestiones ideológicas y, con ellas, cuestiones de poder. Por ejemplo, si hay un “modelo culto” es porque hay otro considerado inculto. ¿Y quién perfiló el inculto como tal? En realidad lo que he dicho, y por lo que peleo, es que se les enseñe a los niños y las niñas populares el modelo culto, pero que al hacerlo se destaque: a] que su lenguaje es tan rico y bonito como el de los que hablan el modelo culto, razón por la cual no tienen por qué avergonzarse de cómo hablan. b] que aún así es fundamental que aprendan la sintaxis... dominante para que: 1] disminuyan sus desventajas en la lucha por la vida. 2] ganen un instrumento fundamental para la lucha necesaria contra las injusticias y las discriminaciones de que son blanco.” (p. 110-111) 18 “La escuela democrática que precisamos no es aquella en la que sólo el maestro enseña, en la que el alumno sólo aprende y el director es el mandante todopoderoso.” (p. 111) “Hacer conciencia es descubrir, desvelar verdades sobre el mundo, los seres vivos y las cosas... es darle sentido objetivo a algo que las nuevas necesidades emergentes plantean a las mujeres y a los hombres.” (p. 113) “La ciencia, quehacer humano que se da en la historia que hacen los hombres y mujeres con su práctica, no es... un a priori de la historia.” (p. 114) “Es pensando la práctica como aprendo a pensar y a practicar mejor.” (p. 116) “Es imposible que enseñemos contenidos sin saber cómo piensan los alumnos en su contexto real, en su vida cotidiana.” (p. 116) “No podemos dejar de considerar las condiciones materiales desfavorables que experimentan muchos alumnos de las escuelas de la periferia de la ciudad.” (p. 116) “En rigor, nadie le enseña a hablar a nadie. Uno aprende en el mundo, en la propia casa, en la sociedad, en la calle, en el barrio, en la escuela. El habla, el lenguaje propio, es una adquisición. Uno aprende el habla socialmente.” (p. 121) “Debemos estimular lo más posible a los niños para que hablen y para que escriban. Es de los garabatos, una indiscutible forma de escritura que debemos elogiar, de donde ellos parten hacia la escritura... Que escriban, que cuenten sus historias, que las inventen. Una comunidad se va haciendo letrada en la medida en que así lo exigen sus nuevas necesidades sociales de naturaleza material y espiritual. Sin embargo, 19 antes de que ocurran estos cambios, es posible ayudar a los niños a leer y escribir.” (p. 124) “La formación permanente de las educadoras... implica la reflexión crítica de la práctica, se apoya justamente en esta dialéctica entre la práctica y la teoría.” (p. 124) “No se recibe democracia de regalo. Se lucha por la democracia.” (p. 131) “La ciudadanía que implica el uso de la libertad –de trabajo, de comer, de vestir, de calzar, de dormir en una casa, de mantenerse a sí mismo y a su familia, libertad de amar, de sentir rabia, de llorar, de protestar, de apoyar, de desplazarse, de participar en tal o cual religión, en tal o cual partido, de educarse... la libertad de bañarse en cualquier mar de su país. La ciudadanía no se llega por casualidad: es una construcción que, jamás terminada, exige luchar por ella.” (p. 133) “La relación llamada cognoscitiva no concluye en la relación sujeto cognoscente-objeto cognoscible, porque se extiende a otros sujetos cognoscentes.” (p. 135) 20 PAULO FREIRE. PEDAGOGÍA DEL OPRIMIDO. MÉXICO, SIGLO XXI, 1996. “... los dominadores mantienen el monopolio de la palabra con que... masifican y dominan...” (p. 20) “... las relaciones educador-educando dominantes en la escuela actual, en cualquiera de sus niveles (o fuera de ellos)... presentan un carácter especial y determinante –el de ser relaciones de naturaleza fundamentalmente narrativa, discursiva, disertadora...” (p. 71) “La narración, cuyo sujeto es el educador, conduce a los educandos a la memorización mecánica del contenido narrado... Cuando más vaya llenando los recipientes con sus “depósitos” tanto mejor educador será. Cuanto más se dejen llenar dócilmente, tanto mejor educandos serán...” (p. 72) “... el papel del educador problematizador es el de proporcionar, conjuntamente con los educandos, las condiciones para que se dé la superación del conocimiento al nivel de la “doxa” por el conocimiento verdadero, el que se da al nivel del “logos”.” (p. 88) “Cuanto más se problematizan los educandos... se sentirán mayormente desafiados. Tanto más desafiados cuanto más obligados a responder al desafío... captan el desafío como un problema en sus conexiones con otros en un plano de totalidad... la comprensión tiende a tornarse crecientemente crítica y, por esto, más desalienada...” (p. 88) “No hay palabra verdadera que no sea unión inquebrantable entre acción y reflexión y, por ende, que no sea praxis. De ahí que decir la palabra verdadera sea transformar al mundo.” (p. 99) 21 “No podemos... entregarles “conocimientos”, como lo hacía una concepción bancaria, o imponerles un modelo de “buen hombre”...” (p. 108) “No serían pocos los ejemplos que podríamos citar de programas... que fallaron porque sus realizadores partieron de su visión personal de la realidad. Falta verificada porque no tomaron en cuenta, en ningún instante, a los hombres en situación a quienes dirigían su programa.” (pp. 108109) “Lo que se pretende investigar, realmente, no son los hombres, como si fuesen piezas anatómicas, sino su pensamiento-lenguaje referido a la realidad, los niveles de percepción sobre esta realidad, y su visión del mundo.” (p. 113) “[Un gran número de profesionales] Se ven a sí mismos como los promotores del pueblo... Para ellos, la “incultura” del pueblo es tal que les parece un “absurdo” hablar de la necesidad de respetar la “visión del mundo” que esté teniendo. La visión del mundo la tienen sólo los profesionales.” (pp. 199-200)