Por la conservación y la recuperación de la Comarca del Sureste El Parque Regional del Sureste representa uno de los espacios naturales más valiosos de la Comunidad de Madrid. Siguiendo los cursos bajos de los ríos Manzanares y Jarama, todavía es posible disfrutar de concentraciones de aves únicas en la Región, especies endémicas de invertebrados y comunidades de plantas únicas a nivel europeo, todo ello en un entorno geológico singular, que además alberga restos históricos y arqueo-paleontológicos del máximo interés. Lejos de ser un espacio privilegiado y cuidado por las distintas Administraciones Públicas, la situación del Parque y de toda la comarca del Sureste se deteriora día a día sin que exista ninguna voluntad política por remediarlo: Tras 7 años de engaños y demoras por parte de los distintos Gobiernos Regionales, la ausencia de un Plan Rector de Uso y Gestión es causa directa de gravísimos problemas ambientales. De la aprobación de este reglamento depende la solución a las más urgentes amenazas con las que se encuentra el Parque: vertederos incontrolados y extracción de áridos, la caza ilegal o el empleo masivo de fitosanitarios en la agricultura. Los cursos bajos de los ríos Manzanares y Jarama han sido convertidos en auténticas cloacas a cielo abierto, lugares donde van a parar los millones de metros cúbicos de aguas deficientemente depuradas que sueltan las depuradoras del Canal de Isabel II. A su vez, deben soportar decenas de vertidos de toda clase, canalizaciones encubiertas y una deforestación “crónica” en decenas de kilómetros de sus cursos. En pocos años los desarrollos urbanísticos especulativos y desaforados de todos los municipios del sureste han provocado una presión humana difícil de hacerla compatible con la sostenibilidad ambiental y la conservación del entorno. De seguir así, en pocos años, el Parque del Sureste se verá literalmente acorralado por las urbanizaciones, los polígonos industriales y los campos de golf que todos los Ayuntamientos reclaman para el desarrollo de sus poblaciones. San Martín de la Vega y Aranjuez son los últimos ejemplos de esta barbaridad ecológica, que pretenden hacer crecer sus poblaciones hasta límites insospechados. La masiva concentración de instalaciones de alto riesgo sanitario y ambiental en la proximidades del Parque, e incluso dentro del propio espacio protegido constituyen una amenaza para su propia existencia. La presencia de la planta de experimentación militar “La Marañosa”, verdadero complejo de actividad biológico-químico-nuclear al servicio del Ejercito, la incineradora de basuras de Valdemingómez donde se queman diariamente millones de toneladas de residuos de todo Madrid, el vertedero de residuos industriales de San Fernando de Henares, son sólo algunas muestras de la actividad contaminante que rodea el Parque Regional. Una nueva amenaza se cierne sobre el Parque Regional: la masiva instalación de Centrales Térmicas de gas y gasóleo para la producción de electricidad. Municipios cercanos al Parque como Morata de Tajuña, Fuentidueña, Paracuellos del Jarama, Villamnanrique de Tajo, Estremera, Santa Cruz de la Zarza, Colmenar de Oreja y Pinto están entre los proyectos de las compañías eléctricas y petroleras de convertir el Sureste de Madrid y el Norte de Toledo en un infierno ambiental. Incluso dentro del Parque del Sureste se ha presentado un proyecto de instalación de una central térmica de 1.200 megavatios, en el paraje de Valdemingómez, para lo cual la empresa promotora pide la modificación de la legislación ambiental, lo que constituiría un auténtico certificado de defunción para el Parque. Los grupos ecologistas y plataformas ciudadanas de la comarca no nos resignamos a ver cómo el abandono y el desinterés de ayuntamientos y gobiernos regionales acaban con la riqueza ambiental del Sureste. Por esta razón reclamamos a todos los poderes públicos un cambio en las políticas ambientales, que deben pasar necesariamente por los siguientes puntos: - - La aprobación urgente de un Plan Rector de Uso y Gestión que ponga solución inmediata al abandono institucional del Parque del Sureste. La realización de un Plan integral de conservación y restauración, con criterios ecológicos, de los ríos Manzanares y Jarama, que además suponga la reforma por completo el sistema de depuración de aguas de la Comunidad y Ayuntamiento de Madrid. La paralización de todos los desarrollos urbanísticos de la zona así como la retirada del Plan General de Urbanismo de San Martín de la Vega. El cierre de las instalaciones militares de La Marañosa y su reconversión en un centro para el desarrollo social y ambiental del Sureste. La moratoria a la instalación de centrales térmicas en las Comunidades de Madrid y Castilla-La Mancha. Jarama Vivo, Asociación Ecologista del Jarama “El Soto”, GRAMA, ARBA, Ecologistas en Acción, SEO Vanellus, Amigos de la Tierra, Grupo de Madrid de WWF/Adena, Plataforma contra las Térmicas “Aire Limpio”, Apachas, Plataforma contra la instalación del complejo militar de La Marañosa.