Tomado de la Revista Argentina Paramedio.org "si no tenés celular, ¿cómo te localizan?" La cultura del celular es la cultura de la célula, localizada, particular, dividida. No se trata de estar incomunicado, se trata de sentirme más "yo mismo" al poder mediar con el mundo a través de un pequeño aparatito portátil que me localiza, es decir que me da cierta identidad: identidad comprada. ¿Necesitamos sentirnos localizables?, ¿porqué?, ¿será que hoy en día, el miedo a la soledad se ha exacerbado?, ¿será que los miedos los crea una ansiedad descontrolada provocada por la misma situación de desborde y límite en la que somos forzados a vivir? Ser "locales", "celulares" quiere decir tener una forma de autosatisfacción independiente del contacto con el otro cuerpo, quiere decir, ignorar el cuerpo presente del otro, transformarlo en ausencia a pesar de que se encuentre al lado nuestro. la celulización, la localización en realidad incrementa la separación entre el yo y el mundo al descontextualizar la relación con él. Cómica consumista. En la tv de hoy se puede ver una propaganda en la que un niño con su padre cosechan la papa de la huerta, luego el padre le enseña todo el proceso que va desde la obtención de la papa hasta la marinación de las rodajas y la futura obtención de la "papa frita". A todo esto, el niño le responde "si, están ricas, casi tan ricas como estas - y sostiene en la mano un paquete de papas fritas - pero perdimos mucho tiempo, podríamos haber jugado a la pelota, ver un programa, etc.". El mensaje es claro, ¿para qué molestarse en una huerta y el cuidado que conlleva?, ¿para qué molestarse en una elaboración casera?, ¡mejor compremos todo hecho!. Esta manía de lo "hecho" es el resabio de una cultura que quiere olvidar los orígenes de las cosas, el proceso que va desde la tierra y el trabajo hasta la realización por medio del producto obtenido Algo más… El uso del celular se está volviendo un capricho desde niños ¿Cómo los padres de familia controlan el uso del celular en sus hijos? Problemas de acoso sexual a través de los mensajes de texto Ya no solo se habla a través de los celulares, hoy se escribe, se capturan imágenes y videos. ¿Para dónde vamos? La cultura de consumo de los celulares, ya ha sufrido algunos cambios en los últimos años. Mensajes de texto y ringtones indican la explosión de un mercado que, a priori, no era significativo para los proveedores de telecomunicaciones y las tecnológicas. Hoy, los nichos de usuarios jóvenes imponen nuevas culturas de consumo y las propagan a toda la sociedad. Un caso interesante de aplicaciones Web 2.0 en telefonía móvil es el de Netgear, líder en el mercado americano de soportes WLAN, que ofrece soluciones de conectividad en Internet. Esta empresa americana diseñó un móvil (el Netgear Skype wi-fi phone) para utilizar con Skype en todo el mundo. Ofrece limitada cobertura, pero costos ínfimos. Con las tarifas actuales, es todo un lujo. ¿Usar o no usar el celular? Autora: Aurora Cuevas Cuando me piden mi número de celular y les contestó que no uso, algunos me miran con cara de extrañeza “¿cómo?”, algunos más comienzan a hablar de las bondades de usarlo, también hay para quienes, el celular, es un artículo indispensable y otros más me interrogan el porqué no lo uso. Y bueno, los motivos por los que no uso celular parecieran que son ideológicos, como estar en contra de algo, pero más allá de eso creo que en el fondo existen más motivos. ¿El celular sirve para algo? ¿para comunicarnos? ¿para localizarnos? ¿nos acerca a la gente? He escuchado tantas cosas del celular que, a veces, creo que sirve para no sentirse sólo: es cómo no saber que hacer y decidir llamar a alguien y saber con certeza que ese alguien te contestará, sin importar que hace o donde esté. Al preguntarme para qué tendría un celular debo admitir que hay muchas respuestas, aunque la mayoría me remiten a ¿para qué quieren los demás que yo tenga un celular? Parece que la respuesta es obvia, para hablar. Pero ¿en realidad es para hablar? En términos generales las llamadas a celular son cortas, tal vez por el precio o tal vez por que cuando alguien recibe una llamada en realidad está haciendo algo más y no puede dedicarle mucho tiempo. O será acaso que estamos tan ocupados que no tenemos tiempo y el celular hace que las comunicaciones se reduzcan a lo indispensable, que si encuentras que alguien está cerca se pueden encontrar y compartir un momento juntos. ¿Para localizarlos? ¿De qué les sirve saber dónde estamos? Si vamos a algún lado, llegaremos en el mismo tiempo; además es seguro que no estamos con quien nos busca por que de lo contrario no nos llamaría. Estoy a favor de los avances tecnológicos, siempre que éstos sean el medio, y, en este caso, la comunicación esté sobre la tecnología. En muchas localidades la única opción de comunicación es el celular, no podría estar en contra de eso. También hay pérdidas con el uso de celulares: la gramática está siendo olvidada. Supuestamente envían mensajes por ser baratos pero, entre el cómo estás, el mensaje, las respuestas, la despedida y las gracias gastan mucho más que una llamada, ¡ah! pero eso sí, con un nuevo lenguaje para ahorrar caracteres, tiempo y la no utilización de acentos. La voz, mensajera indiscutible de los ánimos y emociones, deja su paso a frases cortas sin matices ni tonos. No hay espacio para la ironía, la complacencia, la ira o la indiferencia. Hace algunos años poseer un celular era sinónimo de una buena posición económica y por lo tanto social, poco a poco se han eliminado estas barreras, todo sea por el consumo. Ahora tu demostración de status es de acuerdo al modelo de celular y las infinitas cosas que hace. La moda consumo es un lindo binomio para generar desechos tecnológicos que aumentan de manera exponencial ¿cuántos celulares has dejado de utilizar? Detrás de la fabricación de los celulares está la guerra del coltan, material indispensable para elaborarlos. En el Congo, guerrillas de Ruanda y Uganda se disputan el control por este mineral, además de las pérdidas humanas en la lucha armada, al hacer excavaciones indiscriminadas en reservas naturales protegidas se ha mermando considerablemente la población de gorilas y elefantes en la zona, junto con éstos, los desequilibrios ecológicos que conlleva. El celular para muchos brinda “comodidad”, “libertad” y “seguridad”, claro las empresas te dan un celular para ordenarte que vayas a la oficina, que cheques tu correo, para saber dónde estás, qué haces. Eso sin contar que en Japón y Estados Unidos se utilizan los celulares para rastrear a las personas, aun cuando los aparatos estén apagados. No tener que buscar un teléfono público para llamar y tener a dónde te localicen suena muy cómodo, pero ahora tienen que estar al pendiente de tener crédito, pagar mensualmente su cuenta y traer el cargador siempre. La comodidad de traer un celular también va acompañada de la realidad en las relaciones y la comunicación, he escuchado a algunos decir ‘no me han llamado hoy’, pareciera que recibir una llamada o un mensaje son vitales para estar completos. Tener un teléfono celular brinda seguridad, en casos extremos y urgentes es una buena herramienta, pero perder un celular nos vuelve vulnerables, nos expone. Información es poder, cuántas cosas guardas en el celular: números telefónicos –muchos de los cuales no han sido transcritos–, datos de contactos, notas y un largo etcétera dependiendo del modelo. Es decir hay control disfrazado de libertad, dependencia oculta tras la comodidad y existe seguridad con otros riesgos. Parece que hemos perdido mucho, ahora es más fácil cancelar una reunión, avisarle a alguien que llegarás tarde, en lugar de preocuparnos por planear, por calcular nuestro tiempo, además no tenemos que preocuparnos por la ortografía; aunque también te comunicas más rápido cuando tienes un imprevisto o alguna desgracia sucede. Teléfonos compactos, mensajes cortos, llamadas breves ¿mejor comunicación? No estoy del todo convencida. Nota: Sus celulares me han servido, unos más que otros, pero por favor apáguenlos cuando estén en una junta, en una clase, en el cine o en el teatro. Fuente: http://vinculando.org/sociedadcivil/telefono_celular.html#_edn1