Deshidratación Es la falta de líquidos corporales adecuada para que el cuerpo lleve a cabo sus funciones a nivel optimo(nuestro cuerpo contiene aproximadamente dos tercios de agua). Puede ocurrir por pérdidas de líquidos, falta de ingesta, o ambas situaciones juntas. Este estado tiene consecuencias negativas en mucha partes del organismo, tales como la circulación sanguínea, el estado mental, la orina, etc. La deshidratación puede producirse más fácilmente en los bebés y en los niños debido a que su cuerpo contiene una proporción mayor de agua. También resulta más factible en los ancianos que tienen menos capacidad para retener el agua y menos capacidad para sentir la sensación de sed. Además con el calor del verano, tanto los niños como los mayores son más propensos a desarrollar, lo que puede reducir demasiado los líquidos de nuestro organismo. La deshidratación se clasifica en leve, moderada o severa sobre la base del porcentaje de líquido corporal que se ha perdido o que no se ha repuesto. La deshidratación severa es una situación de emergencia potencialmente mortal. Pierdes fluidos cuando: Orina. Vomita o tiene diarrea Suda. Respira, sobre todo cuando respira rápidamente. Se esfuerza demasiado cuando el clima es cálido o húmedo. Tiene fiebre. Junto con los fluidos su cuerpo también pierde electrólitos(sales minerales), que son importantes para realizar las funciones normales del cuerpo. Deshidratación por pérdidas. Puede ocurrir en situaciones de: Vómitos. Ingestión de diuréticos o laxantes químicos o naturales. Diarrea. Exposición al calor y el sol. Exceso de pérdidas por orina poliuria. Sudoración profusa(situaciones de o fiebre Deshidratación por falta de aporte. Puede ocurrir en situaciones de: Náuseas. Falta de percepción de la sed. Estomatitis o faringitis (de la faringe). Deseo de limitar la incontinencia. Enfermedad aguda con pérdida de apetito. Es mucho más importante en niños, enfermos con fiebre, que rechazan los líquidos. Desequilibrio líquido ocasionado por enfermedades, tales como: Diabetes Enfermedad pulmonar. Problemas renales. Quemaduras. Las pérdidas de hasta 5% se consideran leves; hasta el 10% moderadas; y hasta el 15% severa. La deshidratación severa puede llevar al colapso cardiovascular(o shock) y a la muerte, si no se trata rápidamente. Síntomas Presencia de vómitos,diarrea, poliuria, Lengua y mucosas de la boca secas o sudoración. pegajosas. Sed. Fontanelas hundidas en los lactantes(curvatura hacia adentro del “punto blando” del cráneo Cara enrojecida. del bebé). Calambres en brazos y pies. “Signo del pliegue”, a la piel le falta su Dolor de cabeza. elasticidad normal y si uno la pellizca, el Poca ingesta de líquidos. pliegue resultante no vuelve a su sitio. Ojos hundidos. Orina poco abundante y, en los casos más graves, de color amarillo muy oscuro. Ausencia de producción de lágrimas. Latido cardíaco rápido. Baja presión arterial Estómago hinchado. Labios agrietados. A veces, cuando es más grave, convulsiones, aturdimiento, falta de conciencia, o shock. Diagnóstico Examen físico: Suele haber presión arterial baja y pulso rápido (taquicardia). Turgencia deficiente de la piel. Shock. Analítica: Puede haber alteraciones en los iones(electrolitos) de la sangre, aum,emntos en la urea y la creatinina del plasma(por la postura defensiva del riñon ante la deshidratación), y acidosis(aumento del CO2 en la sangre. BUN (nitrógeno ureico en sangre, puede estar elevado cuando se presenta deshidratación). Conteo sanguíneo completo(CSC) que se realiza para buscar signos de sangre concentrada. Pronóstico El reconocimiento y tratamiento precoces de la deshidratación lleva a un restablecimiento rápido. La deshidratación grave no tratada puede terminar en convulsiones, daño cerebral permanente o muerte. Prevención Beber muchos líquidos para evitar la deshidratación y compensar la pérdida de agua por el sudor. Resulta muy recomendable beber, al menos, un par de litros diarios. Cuando la actividad es muy fuerte y se suda mucho, puede ser conveniente, a no ser que se tengan problemas de presión arterial, añadir un poco de sal al agua. No tome alcohol ni bebidas con cafeína. Evitar hacer ejercicio en las horas de pleno calor. Es más conveniente hacerlo por la mañana o por la tarde. La gente mayor debería permanecer en su casa en las horas más calurosas. Vestir con ropa ligera y fresca. Lo más aconsejado es llevar ropa de algodón fina y proteger la cabeza con sombrero de paja o con alguna gorra. (Esto se hace especialmente indicado en los bebés que no deben colocarse al sol con la cabeza desnuda) Si el calor es muy fuerte, puede colocarse entre la cabeza y el sombrero un pañuelo húmedo. Las fibras acrílicas no permiten transpirar bien y retienen demasiado calor. Comer comidas ricas en líquidos. Lo más adecuado es alimentarse a base de alimentos vegetales naturales crudos(ensaladas, frutas o verduras). Descansar de tanto en tanto si se realiza trabajo o ejercicio físico duro. Dejar de trabajar unos minutos para refrescarse a al sombra, descansando y bebiendo agua para que el cuerpo recupere su temperatura. Si se sienten síntomas de mareo dejar de trabajar o hacer ejercicio. Nunca se deberían realizar deportes o caminatas duras solo. Es conveniente hacerlo, como mínimo, en pareja para que uno de los pueda ayudar al otro en caso de necesidad. Situaciones que requieren asistencia médica Siente vértigo o mareo. Presenta letargo o confusión. Ausencia de producción de lágrimas. Ojos hundidos. Ausencia o poco gasto urinario durante 8 horas. Piel reseca que regresa a su posición lentamente al pinzarla en un pliegue. Resequedad en la boca y en los ojos. Fontanelas hundidas en la cabeza de un bebé. Latidos cardiacos rápidos. Sangre en las heces o en el vómito. El bebé tiene menos de dos meses y presenta diarrea o vómitos. Asimismo, se debe buscar asistencia médica si: Se presenta una enfermedad combinada con la incapacidad de retener líquidos. El vómito se ha presentado en forma continua durante más de 24 horas en un adulto o más de 12 horas en un niño. La diarrea ha durado más de 5 días en un adulto o en niño. El bebé o el niño es mucho menos activo de lo usual o está irritable. El adulto o el niño presenta micción excesiva, especialmente si hay antecedentes personales o familiares de diabetes o la persona está tomando diuréticos. FLUIDOTERAPIA La fluidoterapia es una de las medidas terapéuticas más importantes y más frecuentemente utilizada en la Medicina Intensiva. El equilibrio del volumen y la composición de los líquidos corporales que constituyen el medio interno se mantiene por la homeostasis, que W.B.Cannon (1932) definió como “el conjunto de mecanismos reguladores de la estabilidad del medio interno”. Si falla la regulación el equilibrio se altera. El objetivo principal de la fluidoterapia es la recuperación y el mantenimiento del equilibrio hidroelectrolítico alterado. Por desequilibrio de líquidos se puede dar una deshidratación (por defecto de líquido corporal) o una hiperhidratación (por exceso de líquido corporal). En cuanto al desequilibrio electrolítico cabe destacar los siguientes aniones que se pueden ver alterados:, potasio, calcio, magnesio y cloro. El empleo de la terapéutica hidroelectrolítica requiere unos conocimientos básicos sobre la fisiología del agua y los electrolitos, la clínica y la fisiopatología de los desequilibrios hidroelectrolíticos y ácido-base puros y mixtos. Sólo disponiendo de esta información estaremos en condiciones de saber en cada situación clínica qué líquido se necesita, cuanto y cuando debe administrarse. VOLUMEN Y DISTRIBUCION NORMAL DE LOS LIQUIDOS CORPORALES En el individuo adulto, el agua corporal total (ACT) se estima en un 60 % del peso corporal magro, que equivaldrían a unos 40 litros. Estos valores varían en función de la edad, sexo y hábito corporal. Así, éste valor puede ser mucho menor en un individuo obeso, alrededor del 50% del peso corporal, ya que el tejido adiposo contiene poco agua. l ACT se distribuye en 2 compartimentos principales: 1-El Agua Intracelular (AIC) que corresponde a dos tercios del ACT, unos 25 litros aproximadamente. 2-El Agua Extracelular (AEC) que representa el tercio restante y que se distribuye entre los compartimentos intersticial, plasmático y transcelular, constituyendo los 15 litros de agua restante. Este volumen de líquido transcelular,estimado en un 2,5 % del ACT, incluye los fluídos formados por glándulas ( glándulas salivares, páncreas ) así como los líquidos del líquido cefalorraquídeo, árbol traqueobronquial, tracto gastrointestinal, sistema genitourinario y ojos (humor acuoso) Además, hemos de asumir que 1/4 del AEC se encuentra en el espacio vascular, mientras que los 3/4 restantes ocupan el espacio intersticial. COMPOSICION IONICA DE LOS LIQUIDOS DEL ORGANISMO La composición de los dos compartimentos principales, extracelular e intracelular, difieren en forma significativa. Además, ningún compartimento es completamente homogéneo, y también varían los diversos tipos celulares que los componen. Por supuesto, la amplia diferencia en la composición de los compartimentos intracelular y extracelular es el resultado de barreras de permeabilidad y mecanismos de transporte , tanto activos como pasivos, que existen en las membranas celulares. Dentro de los factores que determinan el movimiento entre los distintos compartimentos, la ósmosis es el principal factor que determina la distribución de los líquidos en el organismo. La osmolaridad de todos los fluídos orgánicos es el resultado de la suma de electrolitos y no electrolitos presentes en un compartimento. Un organismo fisiológicamente estable mantiene una presión osmótica casi constante y uniforme en todos los compartimentos. Cuando se producen cambios de concentración de solutos confinados preferentemente en un compartimento, se trata de restablecer el equilibrio osmótico mediante la redistribución del disolvente, el agua. Por lo tanto, un cambio en un compartimento como el vascular tiene repercusión en el intracelular. En la práctica médica diaria, el compartimento vascular es el más fácilmente accesible a la exploración y modificación según las necesidades. 3. 1. COMPOSICIÓN DEL LIQUIDO EXTRACELULAR Como ya hemos comentado, la composición del líquido extracelular es muy distinta a la del líquido intracelular. En cambio, la composición de los diferentes espacios en que se divide el líquido extracelular es muy parecida. En la tabla 2 se expone la composición iónica de los principales compartimentos corporales. En el suero, el sodio (Na+) es el catión predominante y alcanza una concentración media de 142 mEq/L ( normal:136-145 mEq/L ). Las concentraciones de otros cationes como el potasio (K+) , el calcio (Ca++ ) y el magnesio (Mg++) son mucho menores. El K+ tiene una concentración media de 4 mEq/L ( normal: 3,5-5,0 mEq/L ), el Ca++ de 5 mEq/L ( normal: 3,5-5,5 mEq/L ) y el Mg++ de 2 mEq/L ( normal: 1,5-2,5 mEq/L ). Los iones del hidrógeno (H+) se hallan a una concentración muy baja ( 4 x 10-5 mEq/L ), pero ésta es crítica, ya que de ella depende el pH del medio ( pH de 7.4 ). El anión predominante en el suero es el cloro (Cl-) cuya concentración es de alrededor de 103 mEq/L ( normal: 96-106 mEq/L ), seguido del ión bicarbonato (COH3 ) de 26 mEq/L ( normal: 24-27 mEq/L ) y de las proteínas de aproximadamente 6-8 gr/dl. En cantidades menores, se hallan los iones sulfato (SO-), fosfatos (HPO4 y H2PO4-) y diversos ácidos orgánicos. Entre estos últimos, figuran los ácidos láctico, pirúvico, cítrico y otros procedentes del metabolismo de los hidratos de carbono, de los lípidos, así como de diferentes aminoácidos. En condiciones normales, la concentración de los ácidos orgánicos es muy baja, inferior a 1 mEq/L, excepto para el ácido láctico. La composición iónica del líquido intersticial es muy parecida a la del suero, pero no idéntica. Las proteínas, debido a su elevado peso molecular, apenas difunden al líquido intersticial y su concentración en este medio es inferior a 2 gr/dL. 3. 2. COMPOSICION DEL LIQUIDO INTRACELULAR A diferencia del medio extracelular, en el interior de la célula el catión principal es el potasio ( 156 mEq/L ) , seguido del magnesio ( 26 mEq/L ), mientras que la concentración de sodio es muy baja ( 10 mEq/L ). En relación con los aniones intracelulares, las mayores concentraciones corresponden a los iones del fosfato ( 95 mEq/L ), seguidos de las proteínas ( 16 gr/dl ) y los sulfatos ( 20 mEq/L). Las concentraciones de cloro y bicarbonato son muy pequeñas. Distribución de líquidos en el organismo Líquido intravascular Líquido intersticial (extracelular) Líquido intracelular Líquido en cavidades naturales pleura peritoneo retroperitoneo luz intestinal Líquido que ha salido al exterior del organismo 1º espacio 1º espacio 2º espacio 3º espacio (cavidades) 4º espacio (exterior) COMPOSICION Y PROPIEDADES DE LAS DISTINTAS SOLUCIONES DISPONIBLES PARA LA TERAPEUTICA INTRAVENOSA En el comercio existen muchas soluciones ya preparadas para la reposición de déficit de líquidos. Cuando el volumen plasmático se encuentra contraído como resultado de la simple pérdida de líquido y electrolitos, el defecto puede ser corregido en muchos pacientes por la simple reposición de soluciones cristaloides. Cuando las pérdidas iniciales son de naturaleza más compleja, por ejemplo en el shock hemorrágico, estas mismas soluciones también tienen la capacidad de mejorar transitoriamente la función cardiovascular. En estas condiciones, el volumen de solución cristaloidea requerida es mucho mayor que la cantidad del fluído perdido. Sin embargo, puede emplearse solución fisiológica como medida de emrgencia inicial. Cuando el volumen plasmático es amenazado en forma crítica, el uso de soluciones coloidales es otra medida intermedia que resulta más eficaz que las soluciones cristaloides. Así pues, en función de su distribución corporal, las soluciones intravenosas utilizadas en fluidoterapia pueden ser clasificadas en: 1) Soluciones cristaloides y 2) Soluciones coloidales. VIII. TIPOS DE SOLUCIONES. CARACTERÍSTICAS Y CLASIFICACIÓN VIII.1. SOLUCIONES CRISTALOIDES Son soluciones electrolíticas y/o azucaradas que permiten mantener el equilibrio hidroelectrolítico, expandir el volumen intravascular y en caso de contener azúcares aportar energía. Pueden ser hipo, iso o hipertónica respecto del plasma. Su capacidad de expandir volumen esta relacionada de forma directa con las concentraciones de sodio. El 50% del volumen infundido de una solución cristaloide tarda como promedio unos 15 min en abandonar el espacio intravascular. A- CRISTALOIDES HIPOTÓNICAS 1- HIPOSALINO AL 0,45% Aporta la mitad del contenido de ClNa que la solución fisiológica. Ideal para el aporte de agua libre exenta de glucosa. B- CRISTALOIDES ISOOSMÓTICAS Se distribuyen fundamentalmente en el líquido extracelular, permaneciendo a la hora sólo el 20% del volumen infundido en el espacio intravascular. Se distinguen varios tipos: 1- SOLUCIÓN FISIOLÓGICA AL 0,9% ndicada para reponer líquidos y electrolitos especialmente en situaciones de pérdidas importantes de cloro (ej: estados hipereméticos) ya que en la solución fisiológica la proporción cloro:sodio es 1:1 mientras que en el líquido extracelular es de 2:3. Se requiere infundir de 3-4 veces el volumen de pérdidas calculado para normalizar parámetros hemodinámicos. Debido a su elevado contenido en sodio y en cloro, su administración en exceso puede dar lugar a edemas y acidosis hiperclorémica por lo que no se indica de entrada en cardiópatas ni hipertensos. 2- SOLUCIÓN DE RINGER. Solución electrolítica balanceada en la que parte del sodio de la solución salina isotónica es sustituida por calcio y potasio. Su indicación principal radica en la reposición de perdidas hidroelectrolíticas con depleción del espacio extravascular. 3- SOLUCIÓN DE RINGER LACTATO Similar a la solución anterior, contiene además lactato que tiene un efecto buffer ya que primero es transformado en piruvato y luego en bicarbonato durante el metabolismo como parte del ciclo de Cori. La vida media del lactato plasmático es de 20 min aproximadamente y puede llegar a 46 horas en pacientes en estado de schock. Los preparados disponibles contienen una mezcla de D-lactato y L-lactato. El D-lactato tiene una velocidad de aclaramiento un 30% mas lenta que la forma levógira. En condiciones fisiológicas existe en plasma una concentración de D-lactato inferior a 0,02 mmol/L, concentraciones superiores a 3 mmol/l pueden dar lugar a encefalopatía. La presencia de hepatopatías o bien una disminución de la perfusión hepática disminuiría el aclaramiento de lactato y por tanto aumentaría el riesgo de daño cerebral, por lo que se debe usar con precaución en estos casos. 4- SOLUCIÓN GLUCOSADA AL 5%. Sus indicaciones principales son como solución para mantener vía, en las deshidrataciones hipertónicas (por falta de ingesta de líquidos, intensa sudoración etc) y para proporcionar energía durante un periodo corto de tiempo. Se contraindica en la enfermedad de Adisson ya que pueden provocar crisis adissonianas. 5- SOLUCION GLUCOSALINA ISOTÓNICA. Eficaz como hidratante, para cubrir la demanda de agua y electrolitos. C- CRISTALOIDES HIPERTÓNICAS 1- SOLUCION SALINA HIPERTÓNICA. Se recomienda al 7,5% con una osmolaridad de 2400mOsm/L. Es aconsejable monitorizar los niveles de sodio plasmático y la osmolaridad para que no rebasen el dintel de 160 mEq/L y de 350 mOsm/L respectivamente. 2- SOLUCIONES GLUCOSADAS AL 10%, 20% Y 40%. Aportan energía y movilizan sodio desde la célula al espacio extracelular y potasio en sentido opuesto. La glucosa produciría una deshidratación celular, atrapando agua en el espacio intravascular. D- SOLUCIONES ALCALINIZANTES Indicadas en caso de acidosis metabólica. 1- BICARBONATO SODICO 1/6M (1,4%) Solución ligeramente hipertónica. Es la más usada habitualmente para corregir la acidosis metabólica. 3- SOLUCIÓN DE LACTATO SÓDICO. Ya comentada anteriormente E- SOLUCIONES ACIDIFICANTES 1- CLORURO AMÓNICO 1/6M. Solución isotónica. Se indica en la alcalosis hipoclorémica como por ejemplo los casos de alcalosis grave por vómitos no corregida con otro tipo de soluciones. En el hígado el ión amonio se convierte en urea, proceso en el que se generan protones. La corrección de la alcalosis con cloruro amónico debe realizarse lentamente (infusión de 150mL/h mxímo) para evitar mioclonias, alteraciones del ritmo cardiaco y respiratorias. Está contraindicada en caso de insuficiencia renal y/o hepática. VIII.2. SOLUCIONES COLOIDES Son soluciones que contienen partículas de alto peso molecular en suspensión por lo que actúan como expansores plasmáticos. Estas partículas aumentan la osmolaridad plasmática por lo que se retiene agua en el espacio intravascular, esto produce expansión del volumen plasmático y al mismo tiempo una hemodilución, que mejora las propiedades reológicas sanguíneas, favoreciéndose la perfusión tisular. Los efectos hemodinámicos son más duraderos y rápidos que los de las soluciones cristaloides. Están indicadas en caso de sangrado activo, pérdidas protéicas importantes o bien cuando el uso de soluciones cristaloides no consigue una expansión plasmática adecuada. En situaciónes de hipovolemia suelen asociarse a los cristaloides en una proporción aproximada de 3 unidades de cristaloides por 1 de coloide. Existen coloides naturales y artificiales.