LAS PIRÁMIDES ALIMENTICIAS DIFERENCIAS INTERRELACIÓN Y CONCLUSIÓN Efectuado por Maria del Carmen Rodríguez Ferrández Para el curso de INESPA (ELCHE) Alicante 1 ¿EN QUE CONSISITE LA GUÍA PIRÁMIDE DE ALIMENTOS ORIGINAL? La Pirámide original traducía recomendaciones nutricionales para los consumidores de las Guías Alimentarias y de la Dosis de Dieta Recomendada (RDAS), publicadas en el año 1989 en los Estados Unidos de América, de los tipos y cantidades de alimentos que se debía consumir por día. Desarrollada en el año 1992, la Pirámide original consistía en una herramienta educativa que se utilizaba para ayudar a los norteamericanos a elegir una dieta saludable. Ahora, MyPyramid (MiPirámide), el nuevo sistema de orientación alimenticia, reemplaza la Guía Pirámide de Alimentos original. ¿RELACIÓN ENTRE LAS GUÍAS ALIMENTARIAS Y MYPIRAMID (MIPIRAMIDE)? Las Guías Alimentarias para los estadounidenses representan la política federal sobre nutrición. MyPyramid (MiPirámide) es una herramienta educativa diseñada para ayudar a los consumidores a elegir alimentos y actividades físicas más saludables para lograr así un estilo de vida sano de conformidad con las guías. El Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (U.S.D.A), el Departamento de Salud y Servicios Humanos (H.H.S) de forma conjunta publicaron las Guías Alimentarias para los Norteamericanos, las cuales fueron publicadas por primera vez en el año 1980 y revisadas en los años 1985, 1990, 1995, 2000 y recientemente en enero de 2005. ¿QUE ES LA PIRÁMIDE DE LOS ALIMENTOS? El Departamento de Agricultura Servicios Humanos y de Salud (USDA/HHS) de los E.E.U.U, expone en la pirámide de la guía de alimentos, recomendaciones dietéticas diarias para los alimentos, en seis grupos diferentes de alimentos. Por último recordar que la pirámide alimenticia no entiende de sexo ni edades, se quiere decir con esto que es apta para hombres, mujeres, niños y mayores. LA PIRÁMIDE DE LOS ALIMENTOS La correcta interpretación del gráfico es imprescindible. En la parte superior de la pirámide están los alimentos que deben comerse de forma muy moderada. A medida que descendemos por la pirámide, el número sugerido de porciones aumenta. Los alimentos de más arriba en la pirámide no significan que son más importantes o de alguna manera mejores. El hecho de que estén más arriba en la pirámide simplemente significa que debes comer menos de ese tipo de alimento cada día. 2 Pirámide de los alimentos Grupo I: Grasas, aceites, dulces con moderación. Grupo II: Leche, yogur, queso 2-3 porciones. Grupo III: Carne, pollo, pescado, huevos, nueces 2-3 porciones. Grupo IV: Verduras 3- 5 porciones. Grupo V: Frutas 2-4 porciones. Grupo VI: Pan, cereales, arroz y pastas 6-11 porciones. 3 LA NUEVA PIRÁMIDE DE LOS ALIMENTOS En respuesta a las crecientes tasas de obesidad, el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (U.S. Department of Agriculture) creó una Guía de los Grupos Básicos de Alimentos llamada “MyPyramid” (MiPirámide) La nueva guía, que reemplaza a la guía introducida en 1992, invita a los consumidores a seleccionar alimentos ajustados a sus necesidades calóricas y agrega una nueva categoría: ejercicio regular. Una de las novedades que incluye la pirámide es que, en su lado izquierdo, se representa una figura subiendo escaleras que pretende ilustrar la importancia del ejercicio, elemento que no figuraba en la vieja pirámide. El nuevo símbolo pretende además crear un sistema personalizado de orientación nutricional vía Internet. Ahora, los grupos de alimentos están organizados verticalmente, en lugar de forma horizontal, como en el viejo modelo, y están representados por seis colores diferentes: Nueva pirámide de los alimentos Naranja: Granos (legumbres secas) Verde: Verduras Rojo: Frutas Amarillo: Aceites Azul: Productos lácteos Púrpura: Carnes y legumbres Diariamente se deben consumir alimentos de cada grupo. Cuanto más amplia sea la banda del grupo de alimentos, se debe consumir mayor cantidad de ese producto, aunque la amplitud es una guía general para el tamaño de las porciones y no una recomendación exacta. 4 La nueva pirámide, creada por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, sustituye a la anterior ya que los niveles de Obesidad y Sobrepeso son alarmantes en muchos países. Tanto, que la OMS ha incluido esta pandemia entre los 10 riesgos principales de salud en todo el mundo. Esta nueva pirámide tiene muchas más opciones que la anterior ya que cada persona tiene un estilo de vida diferente: el desgaste y las necesidades calóricas varían en cada caso. El objetivo es encontrar el equilibrio entre la variedad, cantidad, moderación, individualización y ejercicio. Interpretación de la pirámide. Consta de 6 bandas organizadas verticalmente, cada una de un color diferente, y cada color significa un grupo de alimentos. Además, agrega como algo importante el ejercicio regular. Se deben consumir alimentos de cada grupo diariamente. Cuanto más amplia sea la banda del grupo alimenticio, se debe consumir mayor cantidad de ese producto. La antigua pirámide, como hemos visto antes, presentaba sus recomendaciones en porciones, pero la nueva guía utiliza términos tales como tazas y gramos. 1. Naranja: Cereales Este grupo de alimentos incluye todos los cereales, panes y pastas. Y se aconseja una ingesta diaria de 180 gramos. Trigo Harina de maíz, de avena, blanca Arroz integral y blanco Sémola Pan de maíz 2. Verde: Verduras y hortalizas Dentro de este grupo están incluidas todas las verduras ya sean frescas, congeladas, crudas o cocidas. Se recomienda comer mayor cantidad de vegetales de hoja verde y hortalizas naranjas como por ejemplo la zanahoria. Lechuga Espinaca Brécol Zanahorias Calabaza Patata Maíz Garbanzos Lentejas 3. Rojo: Frutas Todas las frutas forman parte de este grupo ya sea frescas, o congeladas, enteras, procesadas, en trozo, en jugos, licuados, crudas o cocidas. Se recomienda un consumo diario de dos tazas que incluyan la mayor variedad de frutas posible. Banana Manzana Naranja Arándanos Pera Kiwi Mangos Uva Melón 5 4. Amarillo: Aceites y grasas Los aceites provienen de plantas y pescados. Se aconseja limitar al máximo el consumo tanto de aceites como de grasas. Entre los aceites están: Aceite de oliva Aceite de maíz Aceite de girasol Aceite de soja Aceite de cártamo Entre las grasas están: Manteca Mantequilla Margarina Grasa de carne, cerdo, pollo 5. Azul: Productos lácteos Todas las leches y sus derivados componen este grupo alimenticio. Se recomienda el consumo preferentemente de lácteos descremados en una cantidad de 3 tazas al día. Leches enteras y descremadas Postres lácteos Quesos Yogures 6. Púrpura: Carnes, legumbres y huevos Todas las carnes y productos elaborados en base a ellas, forman parte de este grupo de alimentos, las de ave, los pescados, las de vaca, cerdo, cordero, etc. Se recomienda una ingesta diaria de, aproximadamente, unos 155 gramos Carne de vaca Carne de cerdo (jamón) Carne de cordero Ternera Conejo Venado Pavo Pollo Pescados Huevos Es muy importante tener en cuenta que las cantidades mencionadas para cada uno de los grupos alimentarios son recomendaciones generales, y que cada persona necesitará una cantidad diferente en función de sus circunstancias. Por ejemplo, no necesita las mismas pautas alimentarias una persona deportista que una sedentaria. Así que cada caso es único y no deberíamos fijarnos en la guía que sigue cualquier otro individuo. Como hemos se menciona anteriormente, el ejercicio no puede faltar, es indispensable, y la pirámide nos lo representa en forma de "hombrecito" colocado en la parte izquierda del dibujo. Lo recomendable para reducir la posibilidad de adquirir enfermedades crónicas relacionadas con la obesidad, seria como mínimo 30 minutos al día. Otro aspecto importante en esta nueva guía es la ingesta regular de agua representada en la parte derecha del dibujo. La clave está en comer de todo con discreción, hacer mucho ejercicio físico y llevar una vida sana en general. 6 CONCLUSIÓN Desde la más remota antigüedad, las prácticas higiénico-dietéticas correctas eran recomendadas para prevenir y curar ciertos procesos patológicos. Los indios y egipcios hacían uso frecuente, junto con otros medicamentos, de la miel, vino y leche, siendo el pueblo hebreo, por boca de Moisés, el primer codificador de la higiene alimentaria (suprimió los alimentos porcinos). Pero es durante la civilización griega, cuándo alcanza un grado sumo de prestigio, reivindicando Hipócrates que “el médico debe ayudar mediante substancias dietéticas a que la Naturaleza equilibre el organismo enfermo debilitado”. Esta observación, reconocida por personalidades cualificadas de épocas posteriores, ha sido olvidada en nuestro siglo desgraciadamente marcado por el signo de la ansiedad y automatización, con gran escasez de raciocinio y reflexión. Si pensamos, por breves instantes, que la energía gastada diariamente por nuestro organismo para realizar sus funciones, y conseguir con óptimo rendimiento sus objetivos, proviene de los nutrientes ingeridos en la alimentación, nos daremos cuenta que dedicamos muy poco tiempo en establecer una dieta equilibrada, malgastándolo en otras actividades improductivas y nocivas para nuestra salud. El arte de la nutrición es una ciencia y, como tal, debe ser conocida y planificada en todos los niveles de evolución ontogénica del hombre, de niño a anciano, pasando por las etapas de máxima realización socio-económica. Es notorio y gratificante, sin embargo, el ver surgir en ciertos círculos culturales las distintas “Pirámides alimentarias” y dentro de ellas las diferentes dietas alimenticias. Ciertamente, la medicina actual, hoy por hoy, no resuelve todos los problemas y conlleva numerosos efectos secundarios por emplear compuestos químicos que nuestro organismo desconoce y no acostumbra a frecuentar, ¿no sería mucho mejor ofrecer a nuestras células, moléculas naturales que además de nutrir ejerzan una acción benéfica específica para corregir determinadas alteraciones fisiológicas? Actualmente, se separan y compartimentan los alimentos de los medicamentos sin que existan una interrelación armónica entre ambos, pero llegarán tiempos en los que se conseguirá la íntima unión de ambas palabras y conceptos, constituyendo el término “alimento – medicamento” la base de la terapia. Para poder comprender adecuadamente el buen funcionamiento y la utilización de dichas Pirámide de los alimentos, ya sea la antigua o la nueva, debiéramos tener una mínima idea, (sin necesidad de ser personas especializadas) de cómo se transforma el alimento y su función como nutriente en nuestro organismo. Pero esta quimera, que pudiera ser asignatura desde párvulos a primaria, nunca ha sido de interés para ningún gobierno, no solo de este País, si no de casi ninguno otro del mundo. Los alimentos están compuestos por una serie de elementos químicos, llamados “Bioelementos”, que forman parte de la estructura de los organismos vivos. Los bioelementos pueden dividirse en Oligoelementos (hierro, yodo, etc.) si se encuentran en pequeña proporción y Macroelementos si están en mayor proporción; carbono, hidrógeno, oxígeno e hidrógeno principalmente. (Oligo = pequeño, mínimo. Macro = grande). Estos bioelementos se combinan entre sí formando numerosas y complejas moléculas que reciben el nombre de “Nutrientes”, 7 llamándose macronutrientes cuando están en el organismo vivo en mayor proporción y micronutrientes si están en menor proporción. Los nutrientes son compuestos químicos con una misión clara y establecida, capaces de ser absorbidos por el intestino y ser vertidos a los vasos sanguíneos para su correcta distribución a las células. Aislados e ingeridos son suficientes para mantener y formar los organismos vivos. La suma de los distintos nutrientes constituye el “Alimento”. Se puede definir, por tanto, el alimento como un producto constituido por uno o varios nutrientes dotado de una serie de propiedades sensoriales (olor agradable, sabor apetecible) y de un cierto tono emotivo capaz de estimular el apetito (factor psicológico para que nos guste el alimento). El alimento debe reponer las pérdidas sólidas o fluidas del organismo. Tras un proceso normal de ingestión del alimento, la maquinaria orgánica humana actúa desmenuzándolos en nutrientes que, tras pasar la pared intestinal, se transforman en constituyentes del organismo. No hay ningún alimento completo que nos aporte todos los nutrientes necesarios al organismo. Tampoco es fácil encontrar un alimento que aporte un sólo nutriente (quizá el azúcar refinado sea el único alimento que aporte un único nutriente), por ello, se ha de tender a ingerir alimentos complementarios entre sí para tener una aportación de nutrientes necesaria y equilibrada. El organismo humano necesita prioritariamente unos macronutrientes que se conocen por; glúcidos o hidratos de carbono, lípidos o grasas y proteínas. Así pues, necesitamos tres principios básicos: Hidratos de carbono. Grasas. Proteínas Estos compuestos químicos, al reponer las pérdidas sólidas y líquidas del organismo, realizan una “función plástica”. Las proteínas tienen principalmente esta misión al intervenir mayoritariamente en la formación de la estructura del organismo vivo. Sin embargo, tanto grasas como hidratos de carbono, colaboran o realizan esta labor. Los alimentos contribuyen de forma decisiva en el desarrollo de las funciones vitales tomando de ellos toda la energía que necesita el organismo. Esta “función energética” se le atribuye principalmente a las grasas y glúcidos (Hidratos de carbono) aunque los tres contribuyen a esta misión. La “función esencial” la desarrollan preferentemente los micronutrientes. Las denominadas enfermedades carenciales como escorbuto, beri-beri, etc. , están producidas porque se carece de alguna vitamina o elemento mineral. Se incluye también en este grupo de elementos esenciales a ciertos ácidos grasos, hormonas y componentes de las proteínas que el organismo humano no puede sintetizarlos: Los Aminoácidos. No creo que estas lecciones sean de tal complejidad como para no comenzar en los colegios desde párvulos y continuar hasta terminar primaria, tratada como asignatura... Pero... Sin embargo se prefiere explicar a los adultos del pueblo llano de diferente forma, por ejemplo: ¿En qué consisten las calorías? (Párrafo extraído de la explicación de calorías de la nueva pirámide alimentaria de EE.UU) “Las personas necesitan un determinado número de calorías para mantener su cuerpo en funcionamiento y proveer energía durante las actividades físicas. Éste es el requisito de energía total. El requisito de energía de una persona depende de la edad, el género, el tamaño del cuerpo y el nivel de activad físico de la misma. Si una persona comiera todos los alimentos bajos en grasa y sin azúcares agregados, podría alcanzar sus necesidades de nutrientes utilizando una menor cantidad de calorías que las calorías correspondientes a su requisito de energía total. Esto dejaría un saldo restante 8 de calorías necesario para alcanzar las necesidades de energía, pero no necesario para alcanzar las necesidades específicas de los nutrientes. Este saldo constituye la cantidad de calorías discrecionales permitidas. En otras palabras, la cantidad de calorías discrecionales permitidas consiste en el saldo restante de calorías en el requisito de energía total de una persona una vez contabilizadas las calorías necesarias para satisfacer las necesidades de los nutrientes al consumir alimentos bajos en grasas o sin azúcares agregados”. ¡Todo muy clarito! ¿Verdad? ¿CUÁLES SON LOS DÉFICIT DE LA DIETA NORTEAMENRICANA? La dieta norteamericana no se encuentra equilibrada. En promedio, los norteamericanos no ingieren la cantidad suficiente de verduras de color verde oscuro, naranja y legumbres, frutas, granos (legumbres secas) integrales y productos lácteos de bajo contenido graso. Consumen mayor cantidad de grasas y azúcares agregados. Para equilibrar la dieta, MyPyramid (MiPirámide) recomienda consumir mayor cantidad de aquellos alimentos que actualmente no se consumen y menor cantidad de grasas sólidas, azúcares agregados y edulcorantes calóricos y alimentos ricos en éstos. Para el director en política nutricional del Center for Science in the Public Interest, uno de los mayores problemas de la nueva pirámide es que no dice claramente “comer menos”. El U.S.D.A. parte de la base de que la nueva pirámide no es una guía para hacer dieta y perder peso. En conclusión, muchos expertos consideran que con esta nueva pirámide es difícil que se consigan mejorar los hábitos alimenticios de los consumidores estadounidenses. Varias encuestas han demostrado que el 80 % de los estadounidenses reconocían que la vieja pirámide, uno de los mayores éxitos publicitarios conseguidos a nivel mundial, sólo la seguían el 16 % de los consumidores. En realidad no se de quien fue la idea de representar gráficamente los alimentos en una pirámide para orientar en el consumo saludable de dichos alimentos, con la sana intención de evitar enfermedades a la población por ejemplo; obesidad, diabetes, cardiopatías, etc. Fuera de quien fuese la idea, es digna de aplauso por varias razones, una de ellas; la preocupación por la salud de sus congéneres, y otra, la intencionalidad pedagógica educativa. Estas dos solamente serían suficientes para estar aplaudiendo todo el día... Pero... Al estudiar la pirámide alimenticia desde su origen, me surge alguna duda: ¿La pirámide fue diseñada por un (unos) especialistas en estadísticas gráficas, asesorados por un (unos) nutricionistas (que no dietistas)? ¿Hubo en algún momento criterios unificados entre diteístas, nutricionistas, pedagogos, médicos endocrinos, cardiólogos, digestivo, o químicos orgánicos? ¿Había intención de unificar la alimentación de todos los habitantes de la tierra, a pesar de sus diferencias geográficas y memoria genética? Cuanto más estudio el progreso y modificaciones de la pirámide alimentaria, más me encuentro avocada a pensar que sus inventores o iniciadores, no contaron con los poderes políticos que surgirían en cada momento, intentando dogmatizar (como es característico y habitual en ellos) a un País como EE.UU y de paso, al resto de Mundo, utilizando las hoy llamadas redes sociales (internet). 9 En un País tan industrializado y enorme como U.S.A (EE.UU) nada se hace al azar, todo está presupuestado, pensado y previsto de antemano en toda su producción, incluida la agrícola-ganadera. Ya sea para consumo propio, como para las exportaciones a terceros. De ahí la necesidad de revisiones periódicas de la famosa pirámide cada cinco años, coincidentes con los preparativos presupuestarios nacionales, induciendo gracias a la pirámide, a mayor consumo de ciertos productos alimenticios según industrialización, exportación, y mayor demanda de mercado, es decir “la bolsa”, el índice mercantil. Desde su puesta de largo, la famosa pirámide no ha demostrado que en EE.UU, haya descendido ni la obesidad, ni la diabetes y menos las enfermedades coronarias (todo lo contrario, han aumentado sensiblemente). A pesar de querer exponer que es una forma individual de alimentarse, está en la práctica, incongruentemente uniformada para canadienses, chinos, sudamericanos, europeos, y estadounidenses en general, desde Alaska a Miami, y otros. La fuerza de los EE.UU, en el comercio mundial es indiscutible, por tanto su imposición “piramidal” fue fácilmente adoptada. Visto lo cual, los demás países rápidamente tomaron nota y cada cual intentó poner en práctica su propia pirámide (o método dietético) adaptándole a sus necesidades, ahora reforzado y escudándose con los cuidados y preocupación de la salud ciudadana, llegando a tal punto que nos encontramos con unas pirámides y métodos alimentarios incomprensibles que terminan dando la impresión de que tenemos que sentarnos en la mesa a comer con un libro de instrucciones en la mano. Pero los sistemas alimenticios no se quedan solamente en la (o las) pirámides, sucede otro tanto con las dietas alimenticias en general una vez visto el chollo, y periódicamente surgen iluminados intentando imponer, con mejor o peor resultado, nuevas formas de comer: La dieta Durcan. La dieta South Besch. La dieta I.G de Helen Foster. La dieta de Michel Montigac. La del Dr. Atkins. Y un sinfín de ellas que se introducen en nuestras vidas sin pedir permiso. Tampoco escapa a esta vorágine la famosa Dieta Mediterránea, “adaptada” por muchos países, e incluso, anexionándoselas como propias en el caso de Chile, o Argentina que está entre Pinto y Valdemoro. (Leído en un artículo chileno sobre alimentación) “La antigua sabiduría mediterránea considera el equilibrio como el principio vital de toda actividad humana. Está en las artes, el humanismo y en su estilo de vida, especialmente en su alimentación. Las dietas mediterráneas equilibran bienestar y placer, alimentos apetitosos y variados que benefician la salud. Chile es uno de los cinco ecosistemas mediterráneos del planeta. Esto significa que tenemos una agricultura mediterránea, y por lo tanto se nos hace natural y fácil adoptar la cocina mediterránea. En realidad, los componentes de la dieta mediterránea han estado siempre en nuestra mesa: cultivarla es reencontrarnos con nuestras propias tradiciones culinarias”. ¡¡Y yo que creía que la costa chilena estaba bañada por el Océano Pacífico!! 10 La nueva Pirámide Nutricional menos cantidad y más variedad Versión provisional actualizada de la pirámide alimenticia de la Dieta Mediterránea Presentada en el VIII Congreso Internacional de la Dieta Mediterránea que se celebra en la Feria Alimentaria 2010, la nueva pirámide alimentaria que se aconseja para la Dieta Mediterránea Saludable de un adulto sano contiene algunas variantes importantes que merece la pena tener en cuenta, aconsejándose tomar: * Alimentos de temporada y, en lo posible, del entorno. * Tomar la mayor diversidad de alimentos e intentar que el consumo de vegetales, tanto frutas y verduras, éstos sean diferentes tanto en sabor como texturas y, a ser posible, tengan diferentes colores. * Practicar regularmente alguna actividad física. * Socialización en las comidas en su orientación al consumo de 3 grupos de alimentos: cereales, verduras y frutas en las principales comidas. * Se introducen por primera vez en la dieta especias, hierbas y condimentos. 11 * También se recomienda beber agua especialmente: aconsejándose 6 vasos diarios. * El vino y alcohol de baja graduación se aconseja se tome con moderación (?), respetando creencias religiosas y sociales * Se recomienda reducir el consumo de sal. * Se resalta la conveniencia de reducir ligeramente la cantidad por ración para adaptarlo al ritmo de vida actual, que supone un menor gasto calórico. La nueva pirámide saludable de la Dieta Mediterránea contiene algunas variantes importantes. El resto de los elementos siguen un patrón similar: En las comidas principales siempre debemos tomar frutas y verduras, de una a dos raciones por comida, así como carbohidratos. También una o dos raciones a elegir entre pan, pasta, arroz, cuscús, etc., preferentemente integrales. Todos los días se deberá tomar entre una y dos raciones de frutos secos, semillas o aceitunas; 2 ó 3 raciones de derivados lácteos (preferentemente bajos en grasa), 3-4 raciones de aceite de oliva y la cantidad que se desee de hierbas aromáticas, especias, ajo y cebolla, siempre que no tengan sal añadida. Semanalmente la se recomienda tomar 1 ó 2 raciones de aves (en la pirámide pone corral, pero se refieren a todas las aves); de pescados y mariscos al menos 2 raciones semanales; de legumbres 2 raciones; de huevos hasta 4 unidades; de carnes 2 raciones y embutidos 1 ración. Respecto a los dulces, se recomienda tomar como máximo 2 raciones. En definitiva, lo que decía Francisco Grande Covián que es, figuradamente, el padre de todas las Pirámides: “Hay que comer de todo, en pequeñas cantidades”. (Es una pena que Don Francisco muriera aplastado por su propio peso) 12 La explicación científica La bajísima mortalidad por causa coronaria en la isla mediterránea de Creta asombraba a los científicos. Y la ciencia explicaría este fenómeno de buena salud y larga vida: sus hábitos alimentarios. A este modelo se le llamó “dieta mediterránea”. El concepto de “dieta mediterránea” surgió de una investigación realizada en los años sesenta, denominada “Estudio de los siete países”. Se examinó la relación entre la alimentación y las enfermedades coronarias en Estados Unidos, Japón, Finlandia, Holanda, la ex-Yugoslavia, Italia y Grecia, centrándose exclusivamente en la dieta de más de doce mil hombres. Los griegos, especialmente los cretenses, presentaron la menor mortalidad por enfermedad cardiovascular, seguidos por los japoneses. Los estadounidenses con mejores condiciones de vida y servicios médicos registraron las tasas más elevadas. Al analizar las diferentes dietas aparecieron elementos comunes entre las naciones mediterráneas, diferentes del modelo occidental de alimentación de los Estados Unidos. A diferencia de esta última, las dietas “mediterráneas” se caracterizan por ser: Bajas en grasas saturadas, presentes principalmente en mantequilla, leche entera y carnes rojas Altas en grasas monoinsaturadas, contenidas principalmente en el aceite de oliva Bajas en proteína animal Equilibradas en ácidos grasos poliinsaturados (Omega-3 y Omega-6), producto del consumo frecuente de pescados azules, (Dicho sea de paso, también son proteínas de origen animal) Ricas en antioxidantes, provenientes de frutas, verduras, vino tinto, especias y hierbas aromáticas. Abundantes en fibra, presente en alimentos vegetales. Hoy se llama “Dieta Mediterránea” a aquellas que tienen estas características, usando los productos de cada región. La idea original en principio siempre es buena, lo que me extraña es que el fundamento se hiciese en base a un estudio estadístico efectuado sobre siete países (Estudio de los siete países) abrumadoramente poblados, como Estados Unidos, Japón, Italia, Holanda, tomando solamente unas doce mil personas para efectuar el muestreo, entre alrededor de mil millones de habitantes. Los porcentajes estadísticos resultan irrisorios, para concluir que los habitantes de una isla de quinientos mil habitantes es la más sana en cardiopatías. Desgraciadamente en la Nueva Pirámide Nutricional (Dieta Mediterránea), no se nos indica cuanto es una ración. Y ya se vislumbra la mano oculta de los mandamases, que al amparo de dicha dieta, con anuncios, y a través de los medios de comunicación y proliferación de programas de cocina en televisión, hablan del “Oro verde” (aceite de Oliva) utilizándole de forma tan abusiva que deja de ser beneficioso para la salud, contando que el aceite de oliva, es solamente “insaturado”, que no “poliinsaturado” y además tiene 927 Kilocalorías por 100 gramos, y salvo alguna vitamina A, es el más pobre de vitamina E (antioxidante) de todos los demás aceites utilizados en la cocina, (con 13,70 mgs.) Y ya se sabe, calorías que no quemas, almacenamiento graso para el cuerpo. Una se pregunta ¿Que pintan los políticos en este caso piramidal?. Pues bien, España es un País donde se cultivan grandes extensiones de olivos que posteriormente darán la cosecha en forma de aceite de oliva, tanto para consumo interno, como para exportación. No puede perder esta baza 13 económica ningún ministerio, otro tanto sucede con la introducción del vino en la Dieta Mediterránea, en algún sitio hay que meter las cosechas de estos caldos. En este caso, no se si se ha tenido en cuenta que el alcohol es enormemente adictivo, y el vino, aunque se le considere de baja graduación (algunos tienen hasta 14, 15 ó 17 grados). Francia ofreció al mundo en los años 1950 al 1980, la tasa de alcohólicos más alta del mundo, solo con el consumo de vino (de propia producción, claro). Pretender que la baja graduación del alcohol, es menos perjudicial o adictiva, también podría pensarse lo mismo del tabaco, que siendo algunos bajo en nicotina, se les consideran igualmente nocivos y adictivos en su encarnizada persecución. Por otro lado, se reduce el consumo de proteína animal (de la cual no somos productores, pero sí importadores). Tanto en la Pirámide Alimentaria estadounidense, como en la Pirámide Nutricional (Dieta Mediterránea), pienso que se peca (quizá con el mismo interés) en el consumo un tanto abusivo de frutas, (ricas en fructosa = azúcares) y en hidratos de carbono (ojito los diabéticos). ¿O se ha podido demostrar en este País, gracias a la dieta mediterránea, la reducción de diabéticos, enfermos cardiacos, u obesos, (el año pasado, España presentó la tasa más alta de Europa de niños obesos) ¿Sería por la siesta, el jamón serrano, el pan con aceite?... Valla usted a saber. Las enfermedades no se presentan por una sola causa o motivo, y tampoco se curan por una sola acción. Cada persona es un mundo y el mundo está en cada persona, por eso somos individuos/as ¡¡Que le aproveche!! Veintiocho de Octubre de 2.0013 Redacción y conclusión para INESPA María del Carmen Rodríguez Ferrández 14