ESTUDIO DE CASO CEMUR Centro de Mujeres Rurales Elaborado por: Lithzy Flores -2011- 1 Los estudios de caso en esta serie han sido elaborado en el marco del estudio de impacto del Fondo de Fortalecimiento Económico de las Organizaciones Económicas Campesinas 2010-2013, implementado por LEI Wageningen UR, el instituto de economía agrícola de la Universidad de Wageningen. El coordinador del estudio fue el economista Giel Ton, responsable de la metodología. Las entrevistas han sido realizadas por Lithzy Flores, Evaristo Yana y Rubén Monasterios. Primera Edición La Paz, Abril 2013 Escuela de Lideres CIOEC-Bolivia El estudio contó con el apoyo financiero de ICCO y LEI Wageningen UR, como parte de AGRINATURA. AGRINATURA canalizó recursos del Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA) y el Ministerio de Asuntos Económicas de Holanda mediante el programa de apoyo en investigación Empoderando Pequeños Productores en Mercados (ESFIM – www.esfim.org). 2 CEMUR Informantes: - Martha Pedriel, Presidenta Carlos Yepez, Administrador Sonia Vaca, Responsable de Contabilidad 1. LA ORGANIZACIÓN El Centro de Mujeres Rurales – CEMUR, es una asociación de base sin fines de lucro, creada el año 1981, con sede en el municipio de Minero, provincia Obispo Santiestévan. Está integrada por clubes de madres, que tienen registradas a 150 mujeres, de las cuales solo 80 tienen condición de socias activas. La filiación se realiza directamente al club de madres, que a su vez se constituye en la unidad afiliada a CEMUR. Actualmente se tiene 8 clubes afiliados, mismos que están en los municipios de Minero, Fernández Alonzo y San Pedro del Departamento de Santa Cruz. Los objetivos de la organización, descritos en su Estatuto, son los siguientes: - Coordinar programas de promoción social capacitando y concientizando a la mujeres campesinas Prestar asesoramiento a los grupos afiliados y mejorar su situación socio-económica en todos sus componentes: económico, de salud y educación. Propiciar la capacitación integral permanente de las socias de los clubes de madres afiliados mediante programas apropiados a sus necesidades. Cooperar y trabajar conjuntamente otras organizaciones similares. Brindar apoyo a sus afiliados en la adquisición de bienes y servicios que requieran, igualmente en la venta de productos elaborados por los clubes de madres. Establecer servicios de provisión de asistencia técnica social para la atención a las socias. CEMUR se reconoce como una institución de desarrollo social-productivo para la mujer y describe su MISIÓN como: “Producir, comercializar y transformar productos avícolas y porcinos, según la demanda del mercado, generando ingresos para la organización, además de acompañar las iniciativas económicas de las socias y comunarios a través de procesos de capacitación y asistencia técnica. Su VISIÓN es ser una asociación productiva social de mujeres urbanas y rurales emprendedoras. 3 La historia de la organización se remonta a la década de los años 80, por lo que cuenta ya con 30 años de funcionamiento. Esta organización nace con la provisión de alimentos donados. CEMUR era una organización receptora de alimentos, que tenía la función de repartir a los clubes de madres a través de programas ejecutados por CARITAS. Esta asistencia dio lugar al fortalecimiento de muchos clubes de madres que empezaron a promover actividades de capacitación y formación de mujeres, sobre todo en áreas como manualidades (bordados, tejidos, costura) e incluso de alfabetización. Actividades como la costura y tejidos, dieron lugar a que los clubes de madres, se beneficiaran con proyectos que facilitaron la implementación de talleres, que incluso consideró la capacitación a jóvenes, tanto mujeres como varones. Una vez concluidos los programas de donación de alimentos, los clubes de madres empezaron a debilitarse, sin embargo, hubo clubes que se mantuvieron e impulsaron la realización de actividades productivas, con el fin de apoyar en la generación de ingresos para las madres de familia. Fue así como empezaron los proyectos de panaderías, elaboración y venta de comidas, producción de fideo y otras actividades que permitieran contar con un ingreso diario para las mujeres. La generación de este tipo de iniciativas, llevó a CEMUR a la decisión de constituirse en una organización productiva, que lleve adelante actividades económicas con las cuales se pueda impulsar negocios individuales de las mujeres rurales. “En todo este tiempo de trabajo con mujeres, aprendimos que no es conveniente dar regalos, porque así la gente solo viene por interés al regalo y no por aprender a valerse por sí misma frente a cualquier adversidad. Aprendimos que lo que más necesitan las mujeres es un apoyo para el desarrollo de sus potencialidades. Por eso lo que hacemos como CEMUR es facilitarles oportunidades, desarrollar potencialidades, que es lo que hace que la gente crezca. Les demostramos que la organización es un medio para mejorar las condiciones de vida y por eso hay que saber cuidarla”. Con las actividades de la organización, se muestra a las socias, los mensajes para emprender negocios individuales. “Una organización tiene que ser seria y responsable con sus obligaciones, esto le da prestigio y solo así llega a tener credibilidad y apoyo de otras instituciones. CEMUR ha construido una buena imagen, esto nos permite tener una respuesta inmediata a nuestros pedidos, con solo una llamada”. Actividades Las actividades que hacen al funcionamiento de la organización, están directamente relacionadas con el objetivo de beneficiar a mujeres rurales, socias de los diferentes clubes de madres, de manera principal, pero también para beneficiar a poblaciones de comunidades que participan de los proyectos que ejecuta la organización. 4 Entre las actividades de tipo social, se tiene principalmente la capacitación, misma que se logra a través de la canalización de proyectos financiados por otras instituciones. Los temas o áreas de mayor atención son: Administración, Contabilidad, Leyes, Liderazgo y la capacitación referida a aspectos productivos, como la avicultura, porcinocultura y agricultura. Entre las actividades económicas que realiza la organización se tiene a la avicultura, porcinocultura y procesamiento de productos derivados. Estas actividades tienen una historia propia, y en ella se muestra cómo la organización ha ido generando una experiencia con éxitos y fracasos. a. Granja avícola para producción y comercialización de huevos. Por los años 89-90, habiéndose concluido con los programas de donación de alimentos, CEMUR emprendió con el negocio de la crianza de gallinas ponedoras comercial. Se había empezado con 500 gallinas como inversión de CEMUR, que luego las distribuía a socias que se ocupaban de la crianza y con ello tenían la posibilidad de generar ingresos por la venta de huevos. Paralelamente CEMUR como institución, también realizaba la misma actividad en galpones alquilados para este fin. Esta actividad pudo continuar hasta que se presentó el problema sanitario del cólera, cuyas consecuencias económicas para socias, así como para la organización, fueron considerables. La actividad afectó también a grandes empresas productoras que proveían de pollos bebé, con lo que el negocio definitivamente quedó paralizado por un tiempo. Una vez que pasó la crisis, CEMUR retoma la actividad y actualmente la unidad productiva cuenta con 15.000 gallinas ponedoras de huevos comerciales, haciendo la crianza en dos sistemas: el 60% en piso y 40% en jaulas con una producción de 8.500 huevos día que son comercializados en el municipio. b. Granja avícola para la producción y comercialización de pollos parrilleros. Para esta actividad económica, CEMUR organizó grupos de madres, unos que se ocupaban de la crianza de los pollos por el tiempo de 15 días y otros grupos que criaban a los pollos desde los 15 días hasta el punto terminado. Eran 15 a 20 mujeres involucradas. Esta actividad y modalidad permitió el inicio de la actividad productiva a nivel asociado con la participación de diferentes comunidades. Fueron entre 4 a 5 años de funcionamiento de la actividad hasta que se presentó el problema de abastecimiento de granos, sobre todo de maíz (año 1995), situación que hizo insostenible y poco rentable el negocio de la cría de pollos parrilleros, por lo que se dejó la actividad hasta una regularización en precios y abastecimiento de alimento, retomando la actividad con la particularidad explicada en el siguiente inciso. c. Granja avícola para la producción de pollos de doble propósito: huevo criollo y carne. Esta es la principal actividad de CEMUR, en la que ya no tiene un relacionamiento con mujeres socias de los clubes de madres, sino más bien es una actividad que involucra a 5 familias de las comunidades, que son las se ocupan de criar los pollos de manera doméstica o rústicamente, lo cual hace que el proceso de crecimiento sea más tardío, pero con la ventaja de que esta forma de crianza tiene menos costos de producción (los de granja que son más delicados, altamente sensibles al contagio de enfermedades, requieren de condiciones técnicas adecuadas) y el producto tiene mejor precio en el mercado. CEMUR tiene toda la cadena productiva, incluyendo en el negocio a familias de comunidades campesinas. d. Servicio de matadero avícola. Con un sistema manual, que permite un proceso más higiénico del faeneo. Con capacidad de 500 aves día. Este servicio se inició con el objetivo de mejorar las condiciones de comercialización de pollos que realizaban las mujeres, toda vez que la crianza y el faeneo que se hacía en sus casas, no contaba con condiciones apropiadas para un manejo higiénico y esto generaba problemas de contaminación por los desechos de restos que no se hacían de manera adecuada e higiénica, ocasionando reclamos permanentes por parte de la población. Actualmente la crianza de gallinas para la venta de carne, se realiza más en las comunidades rurales y CEMUR cuenta con un terreno para la crianza de pollos. Por tanto, el matadero avícola es mayormente utilizado por CEMUR y continúa el servicio para socias y beneficiarios de proyectos que demanden del mismo. e. Crianza y comercialización de cerdos. La actividad de porcinocultura es impulsada desde CEMUR, que arrancó con la compra de 5 porcinos madres. Las crías fueron entregadas a las socias para su respectiva crianza y comercialización. Esta actividad funcionó hasta que se tropezó con el problema del alza de precios de alimentos, básicamente el maíz y grano, frente al bajo precio de la carne de cerdo que hizo insostenible el negocio para las socias, que dejaron la actividad, quedándose CEMUR con la responsabilidad de todo el proceso. Actualmente la cabaña porcina cuenta con 20 cerdos madres y una producción de 324 lechones año.Hay un grupo de mujeres que realiza la cría de cerdos y vende la carne a CEMUR o lo hace de manera directa al mercado. f. Producción de embutidos de carne de cerdo. Contando con carne de cerdo en una cantidad difícil de comercializar en su mercado, CEMUR inicia con la actividad de producción de embutidos, logrando hasta la fecha contar con una producción que tiene aceptación, además de contar con gente capacitada para el proceso productivoque dispone del equipamiento básico necesario. Esta actividad económica está en una fase inicial, toda vez que aún la producción es limitada y no se tiene definido una organización para su funcionamiento. 6 “Hemos conformado grupos para que estén en la producción de embutidos, pero no hay grupos que quieran asumir la venta masiva. Lo que queremos es que este negocio sea de un grupo de emprendedoras, y aún no lo logramos porque la gente no se anima, no quieren ir más lejos. Ellas no ponen su tiempo, ya tenemos la inversión necesaria. La idea es que alguien se ocupe del negocio, si el grupo no prospera tendremos que dejar, hacer que una persona se dedique a la producción y buscar que otras lo vendan. Nuestro producto es más carito porque es 100% carne y competir en este mercado es difícil, solo tenemos un mercado pequeño, selecto que valora la calidad y el sabor”. a. Fábrica de alimento balanceado. CEMUR cuenta con una planta pequeña para el procesamiento de alimento balanceado, cuya capacidad alcanza a 12.000 qq./año. Esta actividad permite un relacionamiento con productores campesinos de comunidades cercanas, quienes proveen de la materia prima, básicamente de maíz y grano. Beneficios para socias Los beneficios que genera CEMUR están orientados hacia mujeres socias de los clubes de madres, así como a familias campesinas de comunidades vecinas que se constituyen en beneficiarias de los proyectos que ejecuta la institución. Entre los beneficios más importantes de tiene: - Capacitación para el desarrollo social y personal. Este es el principal servicio/beneficio orientado a mujeres. Actualmente CEMUR ejecuta un proyecto educativo en el que también involucra a familias campesinas de comunidades. Con este proyecto se está formando a mujeres, con la idea de que a futuro ellas mismas asuman funciones que ahora están encargadas a técnicos contratados. “El proyecto de “Fortalecimiento a la organización” involucra a comunidades y no solo a socias. Hay grupos de mujeres que están aprendiendo, por ejemplo, a elaborar informe de actividades, es un proceso de formación para que ellas puedan dirigir y movilizar sus comunidades.Con recursos del proyecto se paga a los técnicos y CEMUR apoya para que mujeres se capaciten y posteriormente continúen ellas con el trabajo que hacen los técnicos”. Normalmente CEMUR ofrece capacitación en temas de liderazgo, temas de salud, computación y sobre nuevas leyes, de acuerdo al interés y demanda de cada club de madres. En opinión de los entrevistados, este es un aspecto que ha permitido el funcionamiento de CEMUR durante ya 30 años. - Capacitación en temas productivos, relacionados a las actividades económicas, orientado a mujeres y otras familias involucradas. Por ejemplo para el manejo y control de la crianza de pollos y cerdos. 7 - Compra de materia prima para la elaboración de alimento balanceado (grano y maíz) de socias y no socias. El beneficio es que al vender productos a CEMUR, no incurren en gastos de transporte, porque la otra opción es vender su producto en Montero o Yapacaní, lo que significa un incremento de 3 Bs. por quintal, que hace al precio de transporte. El precio que se paga en Montero o Yapacaní, es el mismo que paga la organización. - Diferenciación de precios en la venta de productos. Cuando las socias compran pollo para alguna actividad festiva a nivel familiar o de sus clubes de madres, CEMUR tiene un precio rebajado para ellas. Por ejemplo, un pollo cuesta 25 Bs. para el mercado, para socias el precio es 23 Bs. - Generación de empleo para socias. Todo trabajo que realiza la socia en la organización, es reconocido económicamente. Hay socias que se han especializado en la vacunación de pollos. Años atrás, CEMUR había canalizado becas de estudio para hijos de socias y también otro tipo de ayudas como la carnetización de mujeres. También benefició con el apoyo jurídico para el saneamiento de sus terrenos. Estas ayudas y otras han sido posibles por la gestión de proyectos que ha realizado la institución. Todas las actividades que hace CEMUR consideran la capacitación a las socias, con el objetivo de que ellas lleguen a ser independientes y puedan manejar sus propios negocios, lo que significa un apoyo en la identificación de oportunidades de negocio, capacitación en la actividad productiva relacionada al negocio, apertura y gestión de su propio mercado, facilitándoles las herramientas necesarias para que puedan competir. Como CEMUR hemos trabajado mucho en la concientización a mujeres, para que comprendan que si no se trabaja con seriedad, la cosa no funciona. Ahora hay mujeres que tienen sus propios negocios de venta de pollos y les va muy bien, además el negocio no es solo de ellas, sino de toda su familia. Hemos demostrado que las mujeres pueden llevar sus familias, aún cuando sus esposos las abandonen. Al lado de la parte productiva siempre está la parte social. Les hacemos ver que cuando las cosas se hacen con empeño, con mucho cuidado, hay buenos resultados. Esto nos sirve también para hablar sobre el cuidado de la familia. Por ejemplo, para el cuidado de las gallinas, había que poner luz, y se vio casos en que las socias ponían luz para las gallinas, pero la familia todavía estaba usando el mechero. Luego, como había que registrar muchos datos y ellas no sabían escribir, eran los hijos que ayudaban con esta tarea, todas estas situaciones ayudaron no solo a mejorar sus ingresos sino a mejorar sus propias vidas. Muchas mujeres a partir de estas experiencias aprendieron a escribir y firmar. La estructura orgánica de CEMUR, tiene a la Asamblea General como máxima instancia de decisión, al directorio que delega todas las funciones operativas a Gerencia, no interfiriendo en decisiones operativas. 8 La membresía implica el cumplimiento con el pago de aporte mensual, que es mínimo, pero ante todo permite simbolizar la necesidad de aportar para recibir. Cada socia debe aportar con un boliviano (1.00 Bs.) y aunque hay retrasos en el pago que realizan los clubes a CEMUR, que alcanza hasta 4 o 5 meses, el aporte se cumple. Asamblea General Directorio de Supervisión Directorio Ejecutivo Gerencia Administrativa Producción Granja Avícola Equipo técnico de capacitación Contabilidad tamento de apoyo tamento apoyo Producción Fábrica de alimento. Comercialización Cabaña porcina Matadero de Producción de embutidos Puesto de venta. El Directorio, es electo cada 2 años y la parte administrativa tiene la característica de contar con personal que lleva muchos años de antigüedad, ellos son el Administrador y la contadora. EL funcionamiento de la organización tiene una clara delegación de funciones operativas al personal contratado, siendo el Directorio una instancia que acompaña el funcionamiento, pero no interfiere en decisiones operativas. Ventas: Las ventas en CEMUR en los últimos dos años muestran una estabilidad en el comportamiento de los negocios. Cuentan con un mercado asegurado y toda la producción logra venderse, esto debido a que la organización ha desarrollado una relación más estable con clientes y por el incremento de la producción atendiendo la demanda del mercado. 9 “El 2010, los ingresos por concepto de ventas llegó como al millón de bolivianos. El 2009 era algo menos porque el huevo estaba más barato, el 2008 era más, como un millón doscientos, porque teníamos un galpón alquilado. El 2007 era como 700, el 2008 tuvimos más ingresos, pero eso es relativo, porque también subió mucho la materia prima y nos hizo estragos, además nuestro producto, el huevo, bajó de 50 a 40 centavos. El negocio avícola mueve mucho dinero, pero también el riesgo es muy alto”. INGRESOS (Bs.) Venta de productos en general 2007 2008 2009 2010 700.000.00 1’200.000.00 800.000.000 1’000.000.000 Patrimonio De acuerdo a información proporcionada por entrevistados y la documentación presentada a tiempo de gestionar el plan de negocios con el FONDOECAs, el patrimonio de la organización, por año, se muestra en el cuadro siguiente: Valor del patrimonio 2006 1.479.421.10 2007 1.508.916.65 2008 2009 2010 2’800.000 2. EL PLAN DE NEGOCIOS La relación con el FONDOECAs se dio a través de su afiliación a CIOEC Santa Cruz. La idea del proyecto para equipamiento de embutidos, surge ante la necesidad de comercializar la carne de cerdo que la organización asumió en su totalidad ante el desinterés de socias que aducían la dificultad de asumir costos altos en la provisión de alimentos y con ello dejando la total responsabilidad de la crianza y la comercialización en CEMUR .El proyecto o plan de negocio consideró la adquisición de equipamiento para embutidos, así como la capacitación. “ … ahí nace la idea de diversificación con la producción de embutidos. No había mercado para la carne de cerdo, y con este problema se pudo gestionar el proyecto de diversificación como alternativa para vender la carne excedentaria, transformando en embutidos. Así está funcionando ahora y de vez en cuando alguna socia quiere criar para vender, entonces le vendemos un cerdo bebé, ellas lo crían y también les vendemos alimento y cuando ya está criado ellas tienen también la opción de venderlo a CEMUR y les pagamos al contado”. 10 En este sentido el apoyo del FONDOECAs permitió una tecnificación de la actividad de diversificación de productos derivados de la carne de cerdo, quedando aún pendiente la producción a mayor escala, para garantizar la rentabilidad del negocio. La gestión del proyecto no tuvo dificultades sustanciales, toda vez que se presentó en una segunda convocatoria, cuando CEMUR tenía mayor conocimiento sobre el funcionamiento del FONDOECAs. “ La primera vez pedimos para la adquisición de gallinas reproductoras y no nos aceptaron. Por otra parte veíamos que el monto no era muy atractivo, sin embargo, analizando la oportunidad y conociendo que ellos aceptaban equipamiento e infraestructura, presentamos el proyecto en la segunda convocatoria. Tuvimos el apoyo en lo más importante, porque teníamos carne y necesitábamos procesar, ya lo hacíamos pero era una forma muy manual, por ello decimos que con el apoyo del FONDOECAs, respondimos una necesidad muy sentida en la organización” El proceso de tramitación, en opinión de la organización, fue ágil. La formulación del proyecto la realizó el equipo técnico, siguiendo el formato proporcionado y cumpliendo con las exigencias establecidas, como la contraparte, por lo que el desembolso se dio en el tiempo previsto por ellos (2008-2009). En la implementación del proyecto, la dificultad que enfrentó la organización estuvo referida a la capacitación. Primeramente se había contratado un consultor, con poca experiencia práctica, más bien solo con conocimiento teórico. La capacitación no satisfizo a los responsables de CEMUR, por lo que contrataron otra consultoría, que igualmente no pudo responder a su demanda. “La primera vez contratamos un egresado de la universidad, esto fracasó. Luego insistimos y por recomendaciones de otros, contratamos a un técnico de la Prefectura. El problema que encontramos fue que su capacitación no se adecuaba a nuestra situación, al tamaño de nuestra organización, al nivel de nuestras socias y sus expectativas. Sus recomendaciones y prácticas estaban orientadas a productos caros, que para nosotros era imposible pensar en producir así y querer competir con eso productos en el mercado. Fue difícil, y dejamos algún tiempo la capacitación, porque aprendimos que si no contamos con una capacitación que realmente responda a nuestras necesidades, es solo gastar para no beneficiarse. La capacitación es muy importante para toda actividad y si pagamos por ella, debe responder a nuestras necesidades”. Con esta idea, esperábamos encontrar un consultor a la medida de nuestra organización. Fue en la participación a una feria, que pudimos conocer una persona que tenía conocimiento en la elaboración de embutidos, con él encontramos lo que buscábamos. Nos enseñó desde lo que es la primera etapa, es decir desde cómo se debe matar al chancho, lo que nosotros no sabíamos. Nos enseñó a aprovechar absolutamente todo y así pudimos conocer que un aprovechamiento total, es la clave del negocio. La valoración del FONDOECAs tiene que ver también con el hecho de que permitió empezar de pequeño. “… empezamos con solo 5 chanchos y ahora tenemos 20, así se va creciendo. Con los embutidos empezamos con una moledora, una mezcladora y otra que ganamos como premio en 11 una convocatoria de ‘Ideas Emprendedoras’. Las máquinas que tenemos no son las más finas pero permiten hacer el trabajo. El desembolso sirvió y no solo fue para tener maquinaria que luego ni se la pueda usar en toda su capacidad, como suele pasar con otros financiamientos”. 3. MECANISMOS INTERNOS 3.1 Regular la cantidad a acopiar de los miembros: Ninguna de las actividades que realiza CEMUR depende para su funcionamiento, de la provisión de materiales o productos que son de las socias. Solo entre un 15 a 20 % de socias traen su producto a vender a la organización, la mayoría de las mujeres socias realizan el negocio por su propia cuenta. Por tanto la tensión respecto a la cantidad acopiada, no se tiene en CEMUR. Las socias tienen como un beneficio, el poder contar con CEMUR como un mercado seguro para su producción de huevos o la carne de cerdo, cuando no lo pueden comercializar directamente, así como la facilidad de proveerse de CEMUR el alimento balanceado. Por otra parte, CEMUR acopia/compra productos base para la elaboración de alimento balanceado, generalmente de productores de la zona que nos son socios de la organización, sin embargo, presenta esta relación como una forma de beneficiar a productores campesinos, que al vender su producto tienen la ventaja de no incurrir en costos relacionados al traslado a otros mercados. 3.2 Sistemas de garantía de calidad La observación de la calidad en CEMUR se da en todos los eslabones de la cadena productiva que ellos controlan. Primeramente con la producción – crianza de aves y cerdos - la adquisición de pollos bebé, así como de cerdos madres, se la realiza de empresas que efectivamente garantizan calidad. Posteriormente el proceso de crianza es controlado porque CEMUR se encarga de la producción de alimento balanceado, que es base para la calidad del producto. Cuando CEMUR compra carne de socias, lo hace porque tiene seguridad de que la crianza la realizaron conforme a la capacitación brindada y utilizando el alimento balanceado producido en CEMUR. El control de la calidad del producto, es a simple vista, pero en la generalidad de los casos, no se tiene problema alguno y la cantidad que se compra es mínima en comparación a la carne producida internamente. La calidad en CEMUR está avalada por el cumplimiento de normas sanitarias en el proceso productivo de la actividad avícola. En relación a los embutidos, la producción se hace con todas las recomendaciones higiénicas de las que se tiene conocimiento, aunque aún no se ha logrado concretar un registro sanitario, por la dificultad de atender a todas las exigencias, referidas principalmente a infraestructura. 12 “La calidad de nuestros productos es valorada y solo estamos llegando a un público reducido. En el caso de los embutidos, respondemos solo a pedidos (costillitas ahumadas, carnes cortaditas de chancho, queso de chancho), ya sea a través de supermercados en La Paz y Cochabamba y por contactos que logramos en las ferias. En relación a la carne de pollo y cerdo, tenemos previsto lanzarnos a un mercado más grande, pero definiendo bien cómo hacerlo, porque no podemos competir con pollos IMBA o SOFÏA, ellos tienen buena calidad, pero también sus precios son bajos. Nuestros productos en general son semi-artesanales, y los de la competencia son industriales, lo que significa mayor uso de conservantes. Nuestros productos en cambio no duran más de 10 o en extremo 15 días, en los que se debe consumir, en cambio el producto de ellos puede estar mucho más de un mes tranquilamente. Nos diferenciamos porque nuestro producto no tiene mucho químico, al igual que en el caso de los huevos. El huevo de nuestra granja es reconocido por su consistencia y todo esto para nosotros es ‘calidad’. CEMUR es afiliada a la Asociación Departamental de Avicultores- ADA, de donde recibe asistencia técnica profesional. Cuando se tiene problemas de sanidad, CEMUR tiene la posibilidad de solicitar la presencia de veterinarios, que determinan el tipo de tratamiento a seguir. El tratamiento oportuno depende en todo caso de la organización, que debe estar atenta a cualquier señal de enfermedad para solicitar la asistencia, para esto reciben orientaciones técnicas que permiten un control adecuado, y la aplicación de las recomendaciones sobre un manejo higiénico. “… muchas veces son más recomendaciones de cuidados higiénicos, tanto con los cerdos como con las aves. Este año se nos presentó una enfermedad que antes no se presentaba en el oriente, era más de los valles, pero pudimos controlar a tiempo, aunque muchos otros abandonaron el negocio. Ahora nosotros hemos tomado las previsiones, y hemos realizado la vacunación correspondiente”. En relación a la calidad del alimento balanceado, que igualmente depende de la calidad de la materia prima utilizada, la práctica que se realiza a tiempo de acopiar/comprar los productos es observar la humedad. “Cuando compramos producto para el alimento balanceado, la calidad puede observarse a simple vista. Si notamos que por el ejemplo el grano está muy húmedo, esto es un peligro por el moho que genera y que luego puede afectar en la salud de aves o los porcinos. En estos casos hay necesidad de hacer un tratamiento previo al producto, lo cual significa más costos para la organización, por lo que se negocia el precio con el productor proveedor. Almacenar un producto con mucha humedad afectaría todo nuestro stock”. El control en la compra de materia prima tiene las mismas exigencias cuando se trata de proveedores que pueden ser socias o no socias. No hay reclamo alguno, porque el mecanismo de pagar un precio más bajo cuando el producto es húmedo, es una decisión tomada en asamblea, que aunque no está en el estatuto, se aplica y los proveedores tienen conocimiento de la medida. 3.3 Reducir la necesidad de capital de trabajo En CEMUR el capital operativo es limitado. La compra de materia prima para sus actividades económicas se realiza con recursos mínimos que llevan a una práctica de compra de insumos 13 permanente con los ingresos por ventas. No tiene capacidad de aprovisionamiento. “ Esta es una limitante, por ejemplo, para comprar grano y almacenar para que nos dure unos 3 meses, los grandes empresarios compran y llenan su silo, para que les dure por lo menos 6 meses. Esta es una diferencia con nosotros porque no disponemos de capital suficiente para hacer lo mismo”. En la práctica es más del 80% de la materia prima para balanceados, que se compra de no socias. Por tanto la tensión referida a reducir la necesidad de capital de trabajo no se da en la relación con socias proveedoras. 3.4 Prevenir deslealtad en las ventas La deslealtad de socias en las ventas, fue una tensión que CEMUR enfrentó en el pasado. Cuando las actividades económicas enfrentaban crisis, o cuando las socias encontraban mejor mercado para su producto, prevalecía el interés individual antes que el interés colectivo. La actividad avícola en CEMUR contaba con la producción avícola de las socias para acceder a mercados más atractivos, sin embargo, era muy frecuente que cuando se procedía a recoger los pollos de las socias, muchas de ellas ya lo habían vendido, con lo que CEMUR siempre tenía la dificultad de responder a sus clientes. Sin embargo esta práctica, en muchos casos ni siquiera beneficiaba a las socias, toda vez que sufrían de los engaños o pagos muy tardíos de parte de sus compradores. Aunque CEMUR estableció sanciones para que las socias cumplan con sus compromisos ante la organización, esto no funcionó. Se había acordado como sanción la suspensión de todos los beneficios, esto no cambió la situación. “Da pena decir, pero el mercado se arruinó y en parte fue por la actitud de las socias. Ellas no son muy consecuentes, no son fieles con la institución. Si venía un comerciante o un comprador grande que les ofrecía un buen precio, por ejemplo les decían que les iban a pagar a 10 (el kilo), ellas sin pensarlo dos veces lo vendían. Cuando íbamos a recoger el pollo ya no había qué recoger y como CEMUR hacíamos contratos, pero por estas actitudes, nos dejaban colgados” Analizando la situación, CEMUR cambió la modalidad de trabajo. Actualmente continúa trabajando con la producción de pollos de doble propósito (huevo y carne) pero dejó la relación de dependencia o alianza con socias para la producción o crianza. Esta decisión responde a los siguientes problemas encontrados: - - La deslealtad en las ventas, que no permitía cumplimiento de contratos Las socias no querían asumir el precio de los pollos bebés, cuando este se incrementaba conforme al precio de mercado, por tanto, varias socias no recibían los cupos programados. Socias decidían no dedicarse a la crianza, y aduciendo viajes o cualquier otra excusa, no llevaban los pollos para la crianza. Por las dificultades anteriores, CEMUR quedaba sobre saturaba en su capacidad de crianza a nivel central, debiendo muchas veces utilizar ambientes no adecuados, con la afectación correspondiente a su funcionamiento normal, así como a la actividad productiva misma. 14 - Dificultades de la crianza de pollos en la zona urbana, donde viven las socias, que ha ocasionado problemas ambientales y reclamo de la población vecina. “La actividad avícola se hace a nivel central y no a nivel de socia, porque no podíamos confiar. En la central se hace garantizando solo nuestra capacidad y sin considerar la producción de socias. Hemos dejado para que ellas atiendan personalmente sus clientes”. Ahora la crianza de pollos para la venta se realiza en alianza con familias campesinas de las comunidades cercanas, que se constituyen en proveedores de carne y huevo criollo. CEMUR recoge toda la producción. En la relación con familias campesinas, CEMUR hace la entrega de pollos bebés, haciendo una diferencia en el precio del alimento balanceado. En la primera partida el alimento lo reciben sin pagar nada, solo se hace el descuento correspondiente una vez que se acopian los pollos. En la segunda partida la familia paga un 60% del costo y se le descuenta el 40% restante al momento de la compra, en las siguientes partidas la familia debe pagar el 100% del costo. Para el caso de los productos materia prima para el alimento balanceado, CEMUR asume el mecanismo de entregar semilla a las familias productoras, solo con el 20% de pago del costo, cancelando el 80% restante con el grano cosechado. En la segunda campaña, deben pagar un 50% y en la tercera campaña deben pagar el total del costo. 3.5 Maneras de distribuir excedentes En coherencia con la misión y visión institucional, CEMUR destina sus ganancias para beneficiar a sus socias a través de servicios de capacitación que permitan que ellas puedan constituirse en emprendedoras o mujeres que lleven adelante sus propios negocios de manera autónoma. La capacitación, es un servicio que se logra prestar a través de la canalización de proyecto de otras instituciones privadas o también públicas, para los cual las ganancias permiten cumplir con las exigencias de aporte o contraparte. Las ganancias también se reinvierten en los mismos negocios y también se usa para aplicar algunos mecanismos que permiten crear mayor identificación de la socia con su organización, como por ejemplo la entrega a todas las socias de canastones navideños a fin de año. No existiendo una contribución directa y significativa de las socias para el funcionamiento de las actividades económicas, no se presenta una tensión respecto a la distribución de excedentes. “No se distribuye excedentes porque las socias no apoyan con cantidad y tampoco asumen riesgo en las actividades. El aporte es poco, 1 Bs. cada mes, que más bien es simbólico. Hay socias que tienen 15 a 20 años de antigüedad y también hay socias nuevas. Consideramos que este hecho también traería dificultades en una posible distribución de excedentes, por eso todo se reinvierte en actividades educativas, que permiten que la organización continúe. Las mujeres se sienten 15 valoradas por ser parte de CEMUR, que es su institución que no solo depende de apoyo externo, sino que produce para continuar con sus actividades.” 3.6 Diferenciación de beneficios/servicios entre socios y no socios El beneficio central que CEMUR ofrece a sus socias es la capacitación. Sin embargo la capacitación no solo es la que está directamente relacionada con las actividades productivas, sino también con temas que hacen al desarrollo social y personal, principalmente de mujeres. En tal sentido, la capacitación, en muchos casos no se limita solo a socias. “Tenemos proyectos que benefician a más gente que solo las socias. Por ejemplo, cuando hay capacitación sobre leyes de la nueva Constitución Política, esta se dirige a socias y no socias. Lo mismo cuando la capacitación es en temas de salud”. La capacitación sobre temas productivos, es un beneficio que se canaliza principalmente para quienes están involucrados. En el caso de la producción avícola, la asistencia que se recibe por parte de ADA, llega a todos los involucrados. Asimismo la capacitación que se hace desde CEMUR sobre normas de manejo e higiene, llega a quienes se dedican a la actividad, aunque no comercialicen vía CEMUR. No todas las socias de los clubes se interesan en actividades productivas, porque también el club es el espacio para un desarrollo social de las mujeres, que reciben capacitación en diferentes temas. Las socias son libres de desarrollar una actividad productiva o no. Como CEMUR interesa que las mujeres tengan mejores condiciones, es una institución de desarrollo social, y con los proyectos queremos beneficiar no solo a socias. En CEMUR no existe ningún servicio pagado por socias, situación que no genera tensiones o diferencias en el trato con socias o no socias respecto a los beneficios ofertados. El llegar solo a socias o también a no socias, depende en gran parte del alcance de los proyectos gestionados. Hay diferencias entre socios y no-socios en la entrega de huevos en cuanto a precio y plazo de pago. Esto sin embargo creó tensiones tanto en cuanto a la competencia en precio entre las socias y la organización en el mercado final, pero también causo una presión de las vendedoras no-socios para que también los se beneficiaron de un precio menor. “Otro caso en que se evidenció la deslealtad de socia fue cuando empezamos con la producción avícola para venta de huevo. Las socias que criaban gallinas en sus casas, vendían el huevo a 40 o 50 centavos. Cuando nosotros empezamos con el negocio, vendíamos el huevo a 20 y 25 centavos. Esto generó un problema, porque las socias ya no podían vender el huevo al precio de 40 o 50 y se veían en la obligación de bajar el precio a 20 y 25 centavos. Entonces lo que empezaron a hacer fue comprarnos el huevo a 20 centavos, nosotros les vendíamos para que nos puedan pagar en plazos, pero esta venta se hacía con el objetivo de mejorar la alimentación de sus familias, con la idea de que el huevo lo utilizarían para su consumo, pero ellas lo llevaban al mercado y lo vendían hasta en 16 más bajo precio, y como nos pagaban a plazos, ellas no tenían problema alguno, porque podían seguir vendiendo su producción propia, pero sí afectó a la organización, porque hicieron que la gente no nos quiera pagar el mismo precio”. 3.7 Decisiones sobre inversiones que no benefician a todos Las inversiones hasta ahora realizadas por CEMUR, se han hecho con la idea de llegar a generar condiciones que permitan llegar con beneficios a socias y no socias. “ Actualmente tenemos deuda con el BdP. Con este crédito pudimos mejorar el tema productivo, se construyó galpones y jaulas para aumentar la producción. El alza del precio de maíz, fue crítico para sumir nuestra deuda, pero la terminaremos de pagar el 2012. Esta inversión nos ayudará a continuar con nuestras actividades y el beneficio es para todas las socias”. 3.8 Delegación y supervisión de tareas de comercialización Las actividades económicas se realizan a nivel central. Hay funcionarios asignados para asumir responsabilidades necesarias. Sin embargo, el funcionamiento de todas las actividades es de pleno conocimiento del Directorio, que a través de informes presentados por el personal contratado, hace seguimiento y control. “Más que solo informes verbales, se tiene informes documentados que se presentan al directorio y cada dirigente puede revisar porque todo está a su disposición. Mensualmente se da un informe económico, todas las decisiones se informan al directorio, la tesorera es la que tiene más relación con la parte económica. Los informes se hacen porque están normados, pero también se nota en algunas dirigentes mayor interés por conocer. Nosotros estamos conscientes de que las directiva debe estar al tanto de todo lo que se hace, porque nosotros como técnicos somos pasajeros”. Desde el equipo técnico CEMUR hace mucha concientización, para que dirigentes comprendan y manejen el tema de precios de venta y precios de compra de la materia prima. Hemos tenido algunas dificultades, hubo dirigentes que nos cuestionaban sobre los precios de compra, quizá con la idea de que se quería favorecer a proveedores, siempre hay un temor o desconfianza. Lo que hicimos fue propiciar situaciones para que las socias dirigentes conozcan por experiencia propia cómo se hace las compras en la organización, para que conozcan cuáles son los criterios que se manejan. Por ejemplo el maíz de silo es diferente al maíz que se compra en un chaco. El maíz que se compra de silo, se pone al molino y no hay problema, en cambio, el maíz que se compra directamente del chaco tiene muchas impurezas y esto dificulta la molienda y la calidad. Hacemos que por lo menos unas dos dirigentes se involucren en estos procesos de compra. Ahí se dan cuenta de del por qué tenemos que pagar más caro, les explicamos la importancia de la calidad y que el pagar un precio bajo, al final nos puede generar más pérdidas. Hubo casos de dirigentes que insistían en que se podía comprar producto a más bajo precio, y les dimos la tarea que comprar a ella solas, ahí es que aprenden a diferenciar y se convencen por experiencia propia 17 de lo que les explicamos. Cuando iban a comprar en Montero, veían la diferencia del maíz, la calidad y los costos. Esto les gusta y es una forma de aprender, además que día dedicado a la organización, es un día pagado, por tanto, es también un incentivo económico para ellas. Hay decisiones sobre comercialización, que se realizan en coordinación o solo las realiza el Directorio. Decisiones como la participación en ferias o la gestión de algún crédito, corresponde al directorio. El equipo técnico tiene la responsabilidad de dar toda la información posible, para facilitar la decisión, como los riesgos y responsabilidades, así como las condiciones de la organización para poder asumirlas. El directorio toma decisiones pero no interfiere en temas productivos o más de tipo operativo. Las socias saben que en cuestión de negocios las decisiones son rápidas y no se puede demorar. Po eso se hace la delegación de decisiones técnicas al equipo técnico, que tiene la responsabilidad de informar sobre lo que hace. En los informes se explica el tema de mercado, el tema de precios, para que puedan tener claridad sobre los costos de producción y los precios de compras. 3.9 Responsabilidad jurídica en contratos y préstamos CEMUR es una institución que goza de credibilidad frente a otros actores, lo que le facilita acceso a apoyo con créditos o proyectos sociales, cuyos contratos son asumidos legalmente por la institución a través de sus representantes legales. No hay tensión relacionada con la responsabilidad jurídica. La experiencia de CEMUR ha sido positiva en este sentido, porque pese a situaciones críticas, han asumido sus deudas de manera responsable. Tienen proveedores que pueden dejar su producto sin cobrar a la entrega. 3.10 Manejo de aspiraciones políticas Las aspiraciones políticas de socias a CEMUR, no son limitadas ni favorecidas de manera directa o a través de la organización. La formación que se hace con mujeres, particularmente con las socias a través de los clubes de madres que se encuentran en diferentes zonas del municipio, se constituye en un factor que favorece el surgimiento de líderes que luego pueden ser cooptadas por los partidos políticos. Sin embargo, existe una clara prohibición respecto a usar la organización para realizar campañas políticas. “Aquí está prohibido hacer campaña política, y aunque salen muchas dirigentes y candidatas municipales, como organización apoyamos a todas en la capacitación, pero es prohibido hacer actividad política en la organización, así como es prohibido hacer actividad religiosa. Respetamos las diferentes creencias pero no permitimos que usen la organización para sus fines. Por otra parte, CEMUR tampoco se ha valido de líderes que han llegado a espacios de decisión, mostrando una coherencia con sus principios institucionales. 18 “Nosotros damos nombres de líderes, cuando los partidos políticos buscan mujeres para sus listas, pero les aclaramos que no pueden involucrar a la organización. La verdad es que se han promovido muchas líderes. Hemos tenido socias que han sido concejalas, hasta una que fue alcaldesa. Cuando van como candidatas políticas ya no ven a la organización y tampoco hemos aprovechado de eso” “Tenemos incluso socias que han llegado a ser autoridades a nivel nacional, pero nunca la organización sacó provecho de esto, es más se tuvo casos de líderes en espacios de decisión que se pusieron en contra de la organización. Esto fue porque cuando pudimos facilitar un crédito a las socias, que necesariamente se debe cobrar, había socias que en vez de agradecer el servicio y responder a su compromiso de devolución, se molestaban con la organización cuando se les cobraba y esta fue la causa de desencuentro con algunas que piensan que porque son socias, y porque la institución tiene objetivos sociales, no deben cobrar las deudas que contraen las socias”. 19