FACULTAD DE EDUCACIÓN Programa de Maestría para Docentes de la Región Callao CONDUCTA SOCIAL PERCIBIDA POR LOS DOCENTES E INTELIGENCIA EMOCIONAL EN ALUMNOS DEL SEXTO GRADO RED 10 CALLAO Tesis para optar el grado académico de Maestro en Educación Mención en Psicopedagogía de la Infancia BACHILLER ISOLINA ROSARIO MARTÍNEZ HERNÁNDEZ Lima – Perú 2012 II CONDUCTA SOCIAL PERCIBIDA POR LOS DOCENTES E INTELIGENCIA EMOCIONAL EN ALUMNOS DEL SEXTO GRADO RED 10 CALLAO II III JURADO DE TESIS Presidente: Dr. Eulogio Zamalloa Sota. Vocal : Dr. Gilberto Bustamante Guerrero. Secretario : Mg. Leni Álvarez Taco. Mg. Leni Alvarez Taco ASESOR III IV Dedicatoria: A mis padres por darme la vida, a mi esposo por su apoyo, a mi hija, por ser todo en mi vida. Agradecimiento: A la Universidad San Ignacio de Loyola por haberme acogido, y a mis asesores, por su dedicación y apoyo. Isolina Rosario Martínez Hernández. IV V Índice de contenido Pág. INTRODUCCIÓN 1 Problema de investigación 2 Planteamiento 2 Formulación 5 Justificación 5 Marco Referencial 6 Antecedentes 6 Marco Teórico 10 Conducta social 10 Definición de conducta social 10 Tipos de conducta social 12 Teoría del aprendizaje social de Albert Bandura 13 Rasgos de conductas sociales en niños y niñas 15 Rasgos sociales adecuados 15 La amistad 15 La participación en grupo 16 Rasgos sociales inadecuados 17 Conducta de timidez 17 El negativismo 18 La rivalidad 19 La escuela frente a la conducta social 20 Historia de la inteligencia emocional 21 El concepto de inteligencia emocional 22 Modelos de inteligencia emocional 23 Inteligencia Emocional rasgo (o autoeficacia emocional) 23 Inteligencia Emocional capacidad (o capacidad cognitiva emocional) 23 Modelo de Inteligencia Emocional según Bar-On 24 Teorías sobre la inteligencia emocional 27 V VI Teoría sobre la inteligencia emocional según Bar-On 29 Implicancia de la inteligencia emocional en la escuela 30 La percepción 31 Objetivos e hipótesis 32 Objetivo general 32 Objetivos específicos 32 Hipótesis general 33 Hipótesis específicas 33 MÉTODO 34 Tipo y diseño de investigación 34 Variables 35 Definición conceptual 35 Conducta social 35 Inteligencia emocional 35 Definición operacional 35 Conducta social 35 Inteligencia emocional 35 Participantes 38 Instrumentos de Investigación 41 Ficha técnica 41 Descripción del instrumento 42 Validez y Confiabilidad del instrumento 43 Ficha técnica 43 Características principales del Baron ICE: NA 44 Validez y Confiabilidad 45 Procedimientos de recolección de datos 45 Procesos de análisis de datos 46 RESULTADOS 47 Resultados descriptivos 47 Medidas de Chi cuadrado para la contrastación de hipótesis 48 Medidas de frecuencia 50 VI VII Resultados complementarios 58 DISCUSIÓN, CONCLUSIONES Y SUGERENCIAS 62 Discusión 62 Conclusiones 67 Sugerencias 68 REFERENCIAS 70 ANEXOS VII VIII Índice de tablas Pág. Tabla 1. El modelo Bar-On de la inteligencia no-cognitiva (Gabel, 2008) 25 Tabla 2. Dimensiones e indicadores de la variable conducta social 36 Tabla 3. Dimensiones e indicadores de la variable inteligencia emocional 37 Tabla 4. Población de estudiantes de sexto grado de primaria de las 38 Instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao Tabla 5. Distribución de la muestra estratificada de estudiantes, considerando 39 las secciones correspondientes al sexto grado de primaria en las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao Tabla 6. Distribución de la muestra según género de los estudiantes del sexto 40 grado de primaria en la Red 10 en la región - Callao Tabla 7. Distribución de la muestra según edad de los estudiantes del sexto 40 grado de primaria en la Red 10 en la Región - Callao Tabla 8. Mediciones contenidas en el ICE: NA – Forma abreviada 44 Tabla 9. Medidas descriptivas de la conducta social e inteligencia emocional 47 Tabla 10. Medida de Chi cuadrado de la variable conducta social asociada a la 48 variable inteligencia emocional Tabla 11. Medidas de frecuencia por niveles de la conducta social en las 50 instituciones educativas de la Red 10 del Callao Tabla 12. Medidas de frecuencia por niveles de la dimensión amistad de la 51 conducta social Tabla 13. Medidas de frecuencia por niveles de la dimensión participación en 52 grupos de la conducta social Tabla 14. Medidas de frecuencia por niveles de la dimensión timidez de la 53 conducta social Tabla 15. Medidas de frecuencia por niveles de la dimensión negativismo y 54 egoísmo de la conducta social Tabla 16. Medidas de frecuencia por niveles de la dimensión rivalidad y pleitos 55 de la conducta social Tabla 17. Medidas de frecuencia por niveles de la Inteligencia emocional en las instituciones educativas de la Red 10 del Callao VIII 56 IX Tabla 18. Conducta social por género de los estudiantes del sexto grado de 58 primaria en la Red 10 en la región Callao Tabla 19. Inteligencia emocional por género de los estudiantes del sexto grado 59 en la Red 10 de la región Callao Tabla 20. Tabla de contingencia de la conducta social e inteligencia emocional IX 60 X Índice de figuras Pág. Figura 1. Distribución del total de estudiantes según la Conducta social 51 Figura 2. Medidas de frecuencias de la dimensión amistad 52 Figura 3. Medidas de frecuencia de la dimensión participación en grupos 53 Figura 4. Medidas de frecuencia de la dimensión timidez 54 Figura 5. Medidas de frecuencia de la dimensión negativismo y egoísmo 55 Figura 6. Medidas de frecuencia de la dimensión rivalidad y pleitos 56 Figura 7. Medidas de frecuencia de la inteligencia emocional 57 Figura 8. Conducta social por género 58 Figura 9. Inteligencia emocional por género 59 Figura 10. Gráfico de asociación de las variables en estudio 61 X XI Resumen La investigación analiza la asociación entre la conducta social percibida por los 23 docentes y la inteligencia emocional de los estudiantes de sexto grado de la Red 10 del Callao en una muestra de 240 estudiantes de 10, 11 y 12 años. Se aplicó dos instrumentos: la Escala de conducta social de Meneses, adaptada por Zamudio (2009) y el Inventario de inteligencia emocional, BarOn ICE: NA adaptado por Ugarriza y Pajares (2005). Para la Investigación se aplicó el diseño descriptivo correlacional. Los resultados evidenciaron la existencia de asociación entre ambas variables, en los estudiantes se observaron comportamientos inadecuados, lo cual se encontraría asociado al bajo nivel de desarrollo de su inteligencia emocional. Las dimensiones amistad y participación en grupo, timidez, negativismo y egoísmo así como rivalidad y pleitos de la conducta social observan asociación significativa respecto a la inteligencia emocional. Palabras clave: conducta social, inteligencia emocional. Abstract The research analyzes the association between perceived social behavior by 23 teachers and emotional intelligence of sixth graders Network 10 Callao in a sample of 240 students of 10, 11 and 12. We applied two instruments: the social behavior scale Meneses, adapted by Zamudio (2009) and the Inventory of emotional intelligence, Baron ICE: NA Ugarriza and adapted by Pajares (2005). Research applied descriptive correlational design. The results showed the existence of association between the two variables, students were observed inappropriate behavior, which would be associated with the low level of development of emotional intelligence. The dimensions friendship and group participation, shyness, negativity and selfishness and rivalry and litigation social behavior observed significant association regarding emotional intelligence. Keywords: social behavior, emotional intelligence XI 1 Introducción El aspecto conductual o comportamental a nivel social es de vital importancia en el proceso educativo, tanto así que en la formación, el componente actitudinal es esencial para el desarrollo de capacidades y habilidades. Para fundamentar ello, se cuenta con trabajos de investigadores como Salovey, Goleman y Bar-On (citados en Ugarriza y Pajares, 2005) quienes marcaron un hito explicativo en relación a la conducta social, desde la perspectiva de las emociones y sentimientos como entes rectores de ésta, circunscribiéndola al contexto de la inteligencia emocional. Es así que el presente trabajo de investigación permite establecer o determinar la asociación que existe entre las conductas sociales emitidas por los y las estudiantes del sexto grado de las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao, las cuales son percibidas por los docentes y la inteligencia emocional, medida a través del inventario de inteligencia emocional. Sobre el problema, existen diferentes estudios realizados por investigadores como Garaigordobil y Oñederra (2010), Kohaut (2009), Sánchez (2007), Castro, Díaz, Fonseca, León, Ruiz y Umaña, (2007) en el extranjero y por, Salazar (2009), Zamudio (2009), Matalinares, Arenas, Dioses, Muratta, Pareja, y Diaz, (2008) y Ugarriza y Pajares (2005) a nivel nacional, los mismos que se detallan en los antecedentes del marco teórico. Todos ellos muestran la preocupación por el estudio de la inteligencia emocional como uno de los factores que condicionan el desenvolvimiento conductual social de la persona acorde a determinado contexto familiar, educativo y social. El presente estudio, brinda información relevante, comprensible e integrada de la inteligencia emocional, que desde la perspectiva teórica - conceptual, permite la información complementaria a otras investigaciones, basado en el análisis de este tipo de inteligencia, a fin de manejar conceptos específicos aplicados al campo educacional, cuyos aportes sirven de fundamento para la construcción de las estrategias integradas que permita a los y las estudiantes, optimizar el proceso de desarrollo de una conducta social adecuada. 2 Técnicamente, la medición de la inteligencia emocional en el contexto educativo de la Red 10 en la región Callao, a través del Inventario de Inteligencia Emocional de Bar-On ICE adaptado por Ugarriza y Pajares (2005) adquiere el valor de instrumento diagnóstico eficaz que permite establecer las características del funcionamiento de las emociones en los estudiantes de sexto grado de primaria, cuyos hallazgos sirven a directivos y docentes para el diseño actualizado de proyectos pedagógicos, que favorezcan un adecuado desarrollo de la conducta social. En cuanto al marco educativo, la presente investigación permite conocer el desenvolvimiento social de los estudiantes, percibida por los docentes, asociado a la inteligencia emocional, a fin de contemplar este aspecto como punto de partida para el mejoramiento de la acción pedagógica orientándola a ser integral. Problema de investigación Planteamiento. Es sabido que una de las tantas preocupaciones del Gobierno Regional del Callao e instituciones educativas y sociales en general es proveer de alfabetización y educación a los ciudadanos, ya que el más elemental hecho de no saber leer y escribir es un indicador de pobreza y subdesarrollo para las culturas gráficas. Pero más allá de lo que concierne a la lecto-escritura y otros bagajes de información, hay otras habilidades tan o más importantes como es la inteligencia emocional. Cuando esta no se encuentra lo suficientemente desarrollada en una persona se convierte en un obstáculo para su desarrollo social y personal. Muy semejante a una forma de atraso social, una forma de subdesarrollo, que no es medido por los índices de pobreza material, sino por las formas de sobrevivencia en la que las personas han aprendido un alfabeto con el cual se leen y escriben agresiones, violencias, egoísmo, angustia, depresión, explotación, corrupción, etc.; que recaen en el circulo vicioso de las causas que se infieren como provocadoras y desencadenantes de una pobreza emocional. Entre una de las conductas más violentas se tiene al pandillaje, el cual representa un serio problema para la seguridad ciudadana de los vecinos de Lima y el Callao. Según cifras proporcionadas por la Policía Nacional del Perú (Llajaruna, 2010), solo en estas 3 dos ciudades existen alrededor de 410 pandillas que agrupan a un aproximado de 12 mil 128 adolescentes y jóvenes de las referidas ciudades, las cuales han sido responsables de los 5 mil 318 hechos delictivos registrados durante el año 2009. El pandillaje ha traído diversas consecuencias para la sociedad, estas se reflejan en la gran cantidad de actos delictivos que ocurren a diario, siendo los más frecuentes los robos al paso, asaltos con cuchillos y pistolas, robos en viviendas y locales comerciales, violaciones, muertes, actos de vandalismo y violencia callejera. Son los propios pandilleros quienes también sufren las consecuencias, pues gran parte de ellos se inician en el consumo de drogas y a consecuencia de sus actos delictivos pasan buena parte de sus vidas tras los barrotes de una cárcel o en el peor de los casos pierden su vida a manos de grupos rivales con el consecuente sufrimiento que ello representa para su familia (Llajaruna, 2010, p. 1). El Plan Regional por la Niñez y la Adolescencia de la Región Callao 2008 – 2011 (Gobierno Regional del Callao, 2011) brinda información acerca de “el problema de la agresividad en los jóvenes como uno de los trastornos que más preocupa tanto a los progenitores como maestros, y su falta de tratamiento deriva en muchos casos en fracaso escolar y en conducta antisocial. La violencia juvenil es un síntoma de la crisis social” (p.31). Las pandillas barriales, “barras bravas” y “pandillas escolares” han dado lugar al denominado pandillaje pernicioso ( Gobierno Regional del Callao, 2011) que se ubica en el campo de la delincuencia. Estos grupos generalmente se caracterizan por consumir algún tipo de sustancia adictiva, muchas veces formando parte de la comercialización de estas sustancias, de esta manera agravando su situación social y personal. Lo mencionado muestra la diversidad de indicadores sociales negativos a los cuales los estudiantes en edad escolar están expuestos, lo cual directa o indirectamente afectan su desarrollo social, formando un estado emocional inestable. Como se sabe, el desarrollo social se inicia en el seno de la familia, donde se encuentran los primeros modelos que aprenden los estudiantes, pero estos modelos no son los únicos, por añadidura se tiene a los medios de comunicación masiva, 4 especialmente el televisivo que lamentablemente está colmado diariamente de noticias violentas y por si fuera poco de programas infantiles que igualmente incitan a conductas inapropiadas. Así mismo, el entorno social en el que se desenvuelven las y los estudiantes chalacos en su gran mayoría, si bien es cierto los llevan a vivenciar relaciones amistosas y participaciones grupales en diversas actividades vecinales ya sean lúdicas o de otro tipo; por otro lado y en contraposición a ello estos entornos sociales son focos de un constante vocabulario soez, actitudes egoístas, rivalidad y pleitos entre sus pobladores, además de constantes agravios e insultos. Sin embargo, este aspecto debe considerarse en las escuelas para que permita superar esta limitación e influencia ya que es sabido que la inteligencia emocional es susceptible de cambio y desarrollo. Al respecto Llerena (2010) plantea que la función de la escuela es brindar las condiciones para la formación intelectual, social y vocacional de niños y adolescentes; es también un medio importante para la inserción del joven en la vida adulta a través de la profesionalización educativa. Por ejemplo, para las personas de sectores populares, la educación es el principal medio de ascenso social. Generalmente los pandilleros han asistido a colegios estatales y la mayoría de ellos han sido expulsados o han desertado. Esto evidencia la crisis del sistema educativo nacional que es uno de los más atrasados de Latinoamérica: los contenidos no responden a las necesidades reales y cotidianas de los educandos, maestros con deficiente formación y baja remuneración, entre otros. Ahora, con relación al tema presentado, el sistema educativo estatal tiende a expulsar o a hacer insostenible la asistencia de un adolescente o joven que presenta problemas de conducta y disciplina al colegio. Por ello, para los expulsados o desertores escolares, el no haber terminado la secundaria significa un trauma, pues al verse frustrado el mandato generacional de ascenso social a través del estudio, el adolescente o joven ve truncadas sus expectativas de éxito, y como consecuencia desiste de poder lograr un proyecto de vida formal y reconocido por la sociedad (p.66). Considerando este punto de vista, la escuela se convierte en la puerta que otorgará a los y las estudiantes, las posibilidades de observar una conducta adecuada de acuerdo 5 a las circunstancias y altura que les corresponde como seres humanos; siendo dicha conducta el reflejo de un apropiado desarrollo y manejo de su inteligencia emocional. Formulación. En función a lo expuesto, la presente investigación pretende responder a la siguiente interrogante: ¿Existe asociación entre la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional de los estudiantes de sexto grado de primaria, de las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao? Justificación. Como se sabe, los principales problemas psicosociales ocurren durante la adolescencia, es decir cuando los estudiantes se encuentran cursando el nivel secundario, sin embargo, últimamente se observa a niños de menor edad que se están viendo involucrados en dichos problemas psicosociales, por ello, una de las primeras razones por las cuales este estudio es relevante, es que precisamente aborda la realidad educativa en la etapa previa a la secundaria, es decir, en el sexto grado. Es así como el presente estudio tiene una relevancia social en la medida que aporta datos sobre cómo se están desarrollando los estudiantes al culminar la educación primaria en cuanto a la formación de su inteligencia emocional y a su vez cómo son percibidos por sus docentes en lo que respecta a su conducta social. Sin duda, la relevancia educativa del presente estudio radica en que si el maestro implementa estrategias favorables al desarrollo de la inteligencia emocional conseguirá establecer un ambiente escolar de relaciones horizontales, además de un buen clima de aula el cual redundará en el logro de los aprendizajes por parte del estudiantado ya que la experiencia docente ha demostrado que cuando el clima del aula es conflictivo, éste influye negativamente en el rendimiento escolar. Mejorar el rendimiento de los estudiantes es el anhelo y por cierto el objetivo principal de todo docente, es por ello que su intención es contribuir con este estudio, sobre la relación del binomio inteligencia emocional-conducta social, que este conocimiento permita abrir senderos en la búsqueda de la calidad educativa y el éxito escolar de los estudiantes del Callao. 6 Desde la perspectiva socio-educativa, la evaluación de la inteligencia emocional juega un rol trascendental, ya que al reconocer la tendencia orientadora de esta sobre el comportamiento de los estudiantes, permite elaborar propuestas que conlleven a potencializar las fortalezas de los estudiantes del Callao en las actitudes y conducta social, favoreciendo la gestión pedagógica e institucional. Desde el punto de vista científico la presente investigación adquiere un valor fundamental al alcanzar su aporte a las ciencias sociales ya que permite visualizar cómo el estado emocional afecta no solo el cuerpo y la salud, sino, cómo tiene sus implicancias en las relaciones sociales, comprender cómo las emociones positivas y negativas influyen en el comportamiento, en éste caso en la de los estudiantes del sexto grado, sabiendo que este comportamiento está vinculado con el éxito personal, estudiantil y social. Por último, desde el punto de vista práctico, el presente estudio, conlleva a generar herramientas didácticas eficaces para mejorar la práctica docente y el desarrollo de los estudiantes en forma equilibrada, permitiendo prever problemas de aprendizaje y de conducta social, estimulando un adecuado desarrollo de la inteligencia emocional. Asimismo, los resultados de este estudio pueden servir a los directivos y docentes de las instituciones educativas en referencia como un aporte para la toma de decisiones futuras para el mejoramiento institucional. De igual manera, es útil para todo aquel investigador que desee emplear los lineamientos vertidos con el fin de aplicarlo a otros contextos educativos. Marco referencial Antecedentes. Entre los antecedentes a nivel internacional se tiene los siguientes: Garaigordobil y Oñederra (2010) realizaron un estudio, cuyo propósito fue analizar las relaciones existentes entre ser víctima de acoso escolar y ser agresor con parámetros asociados a la inteligencia emocional (emotividad, eficacia, pensamiento supersticioso, rigidez, pensamiento esotérico, ilusión). La muestra estuvo constituida por 248 alumnos 7 de 12 a 16 años del País Vasco: 144 varones (58.1%) y 104 mujeres (41.9%). Para medir las variables se utilizaron 3 instrumentos de evaluación: el Inventario de pensamiento constructivo, la lista de chequeo mi vida en la escuela y el cuestionario de conductas antisociales-delictivas. Los resultados obtenidos confirmaron que los adolescentes que habían sufrido muchas conductas de intimidación o bullying, evidenciaron un bajo nivel de inteligencia emocional, baja emotividad, baja autoestima, baja tolerancia a la frustración, baja eficacia, y poca actividad; y los adolescentes que tenían un nivel alto de conductas antisociales-delictivas mostraban bajo nivel de inteligencia emocional, de eficacia, de actividad, de responsabilidad, y de tolerancia. La discusión gira en torno a la importancia de implementar programas para fomentar la inteligencia emocional con la finalidad de prevenir el acoso escolar. Por su parte, Kohaut (2009; citado por Guerrero, A. & Sierra, M., 2011) realizó una investigación cuyo propósito fue establecer la relación entre la inteligencia emocional de estudiantes y el logro académico. Para ello trabajó con 200 estudiantes, realizando un análisis exploratorio de los datos para revisar las diferencias en la inteligencia emocional entre grupos raciales / étnicos. Para ello se les administró la prueba de Barón Emotional Quotient. Las nota finales de estudiantes fueron tomadas de sus informes finales, en base a un examen tipo, obtenidos de los registros de la escuela. “El análisis de los datos reveló las correlaciones seguras entre el grado emocional total de la prueba de Barón EQ-i: YV y las notas. Además el grado emocional total tenía correlación con la cantidad de cartas de recomendación de disciplina negativamente” Kohaut (2009; citado por Guerrero, A. & Sierra, M., 2011). La dimensión de tensión y la capacidad de adaptación tenía correlación con las puntuaciones en las pruebas de desempeño académico normalizadas de los estudiantes. Para terminar, ninguna diferencia fue encontrada entre la afiliación racial / étnica de estudiantes y su inteligencia emocional. Así mismo, Sánchez (2007) realizó un estudio cuyo propósito fue establecer la relación entre la inteligencia emocional autoinformada y el ajuste perceptivo en la familia. Se trabajó bajo un diseño correlacional con una muestra de 302 sujetos entre estudiantes y padres de familia, cuyo único requisito era tener características psicológicas normales y ser mayores de 11 años, quedando formada por 73 padres, 73 madres y 156 hijos/as (71 varones y 85 mujeres). Los instrumentos empleados fueron la escala de inteligencia 8 emocional autoinformada (TMMMS – 24) de Fernández y Berrocal, la escala de inteligencia emocional percibida y la escala de clima familiar de Moos y Tricket. Se concluyó que existe una clara relación entre la inteligencia emocional autoinformada de los padres con la de los hijos; a su vez existe una clara desventaja de los hijos frente a los padres en inteligencia emocional autoinformada, pero sobre todo de las hijas y una alta inteligencia emocional autoinformada de parte de la familia se correlaciona con determinados aspectos del clima familiar, favorecedoras de un ambiente óptimo para el desarrollo de las competencias emocionales de sus miembros. Castro, Díaz, Fonseca, León, Ruiz y Umaña, (2007) efectuaron la investigación titulada: Las relaciones interpersonales en la transición de los estudiantes de la primaria a la secundaria, realizada entre los años 2006-2007. Esta investigación plantea, como uno de sus objetivos, recabar la opinión del alumnado de 6º, 7º y 8º años, respecto a lo que consideran como los factores claves para lograr una transición exitosa entre primaria y secundaria. Utiliza técnicas cuantitativas y cualitativas, siendo los instrumentos utilizados: un cuestionario para estudiantes de 7° y 8° años (sobre preferencias escolares, características personales y relaciones interpersonales) y un cuestionario para docentes del 7° y 8° año (sobre factores personales que favorecen la transición, relaciones interpersonales y el papel de los padres). Para la investigación se seleccionaron 10 instituciones de educación secundaria, específicamente fueron 1671 alumnos además de 64 docentes. Los hallazgos más importantes permiten concluir que, al ingresar a la secundaria, los estudiantes manifiestan tener buenas relaciones interpersonales con sus padres, sus profesores y sus compañeros, razón por la cual la aprobación y el apoyo que cada uno de ellos les brinde es fundamental para lograr consolidar su posición en el nuevo grupo académico y, por supuesto, para mejorar la percepción que ellos tienen de sí mismos. A nivel nacional se exponen los siguientes trabajos: Salazar (2009) realizó un estudio cuyo propósito fue establecer la efectividad de las estrategias de aprendizaje cooperativo en la modificación de la conducta social de los niños del segundo grado de una institución educativa de la región Callao. La muestra fue de 70 estudiantes, distribuidos en 2 secciones correspondientes al 2° grado de primaria. Para efecto del estudio se trabajó con toda la población, siendo 35 alumnos del grupo 9 experimental y 35 alumnos del grupo control. Los instrumentos empleados fueron la escala real de medición de habilidades de interacción social PEHIS de Monjas y el programa de habilidades de interacción social basado en el aprendizaje cooperativo. En dicho estudio se concluyó que es posible establecer la efectividad del aprendizaje cooperativo como estrategia para el mejoramiento y modificación de la conducta social, así mismo se encuentra que el empleo de la estrategia de aprendizaje cooperativo, desarrolla la capacidad cognitiva y actitudinal de apoyo, colaboración y ayuda, promoviendo una mejor interacción social entre los alumnos. A la vez promueve la activación de conocimientos previos para la asimilación de nueva información, que ayude en forma procedimental a poner en práctica modelos de interacción social, la interacción permite la activación y reflexión, y contribuye a establecer la ZDP. Zamudio (2009) tuvo como propósito investigar acerca de la relación entre la ausencia de la figura paterna y la conducta social en estudiantes de educación primaria en instituciones educativas pertenecientes a la Red Nº 10, en la Región Callao. Se trabajó con una muestra de 63 estudiantes. Empleó como instrumentos la escala de ausencia de la figura paterna de Symonds y la escala de conducta social de Meneses adaptándolas al contexto trabajado. “El procesamiento estadístico de los datos obtenidos permitió concluir la existencia de una relación negativa entre la ausencia de la figura paterna y la conducta social, es decir que los estudiantes que no contaban con la figura paterna reflejaban este hecho en rasgos comportamentales inadecuados” (Zamudio, 2009, p.30). Matalinares, Arenas, Dioses, Muratta, Pareja, y Diaz, (2008) llevaron a cabo una investigación cuyo propósito fue establecer la relación entre la inteligencia emocional y el autoconcepto en los colegiales de Lima Metropolitana. Para su realización, se evaluó inicialmente a 601 colegiales de ambos sexos, cuyas edades fluctuaban entre los 15 y 18 años, que cursaban el quinto de secundaria, procedentes de ocho centros educativos estatales de Lima Metropolitana, a quienes se aplicó el Inventario de inteligencia emocional Bar-On ICE y el test de evaluación de autoconcepto, propuesto por Musitu, García y Gutiérrez. Los criterios de exclusión de ambas pruebas, determinaron una muestra final de 203 colegiales. Los resultados arrojaron una correlación positiva entre ambas variables. Se encontró, también una relación positiva entre la inteligencia emocional y los componentes social y emocional del autoconcepto. Se encontró, 10 además, una relación positiva entre el autoconcepto y la comprensión emocional de sí y el cociente emocional de la prueba de inteligencia emocional. “Al comparar el auto concepto de varones con el de las mujeres, se encontró diferencias significativas en el componente académico, a favor de las mujeres, y en el componente emocional, a favor de los varones. Por último, al comparar varones y mujeres en inteligencia emocional, se encontró diferencias significativas a favor de las mujeres, en el cociente emocional interpersonal de la prueba de inteligencia emocional” (Matalinares, et.al., 2008, p. 41). Ugarriza y Pajares (2005) llevaron a cabo un estudio cuyo propósito fue realizar la adaptación y validación del ”inventario de inteligencia emocional de Bar-On ICE en niños y adolescentes, en una muestra de 3374 niños y adolescentes de Lima Metropolitana, entre los 7 y 18 años de edad” (Ugarriza y Pajares, 2005, p.11). Los hallazgos permiten establecer la adaptación y validación de dos versiones del inventario de inteligencia emocional, una versión completa y otra abreviada. El instrumento presenta validez y confiabilidad estadística. El estudio concluye que el inventario de Bar-On ICE adaptado permite la medición de los cuatro componentes de la inteligencia emocional y el inventario presenta validez de constructo, midiendo los componentes de la inteligencia emocional por edad y sexo. Marco teórico. Conducta social. Alguna de las experiencias más intensas del hombre, y muchos de sus principales logros, se deben a su carácter social, a su afán de hacer algo y compartir conocimientos, ideas y emociones con los otros, lo que se evidencia a través de lo que se llama conducta social. Seguidamente se plantean algunos aportes teóricos que permitirán conocer mejor esta temática, partiendo de su definición, los tipos de conducta social y otros tópicos significativos para la comprensión de este constructo. Definición de conducta social. En relación a la definición de conducta social, es posible encontrar en los últimos tiempos una serie de conceptos brindados por diferentes investigadores, así se tiene que: 11 Hill (2006) conceptualiza la conducta social como “un conjunto de manifestaciones comportamentales acorde a su edad, sobre la base de enseñanzas familiares y sociales en el sentido del contexto donde se interactúa, lo cual le permite desarrollar y afianzar habilidades de tipo social” (p. 6). Soundy (2006) la define como la manera de proceder que tienen las personas en relación con su entorno o mundo de estímulos. Donald (2005) la define, como “el conjunto de habilidades que adquieren los niños a lo largo de su desarrollo, para interactuar de forma asertiva en la sociedad” (p.15). Mientras que Hamilton (2006) la define como “el proceso a través del cual niños y niñas aprenden a interactuar con sus pares, demostrando un conjunto de habilidades” (p.19). Como se puede observar estas primeras definiciones tienen como característica común la evidencia de diversas actitudes adquiridas del entorno, lo que quiere decir que la conducta social es aprendida por el individuo en el medio en el que se desenvuelve. Por otro lado la experiencia viene a demostrar que la conducta social puede ser consciente o inconsciente, voluntaria o involuntaria, pública o privada según las circunstancias que se encuentren las personas que conviven en una comunidad, los comportamientos sociales de todo individuo es parte de una buena comunicación interpersonal. La conducta se presenta en un determinado contexto ambiental, donde los integrantes presentan características específicas y este actúa o responde a determinada situación. Meneses (citado por Zamudio, 2009) define conducta social como: “El conjunto de rasgos sociales que desarrollan los niños, en forma adecuada o inadecuada, los mismos que sirven de base para la interacción social con sus pares, acorde al contexto donde se desarrollan, donde intervienen la familia, la escuela y la sociedad en general. Esta se expresa en manifestaciones comportamentales y en actitudes propias de la edad”. (p.32). La visión en esta definición es integral en el sentido que convergen todos los elementos interactuantes en el proceso de desarrollo social de los niños y niñas siendo los elementos aportantes para la formación de actitudes y de conductas manifestadas en 12 las relaciones sociales. Por ello es que en el presente estudio, esta es la definición que se emplea. Tipos de conducta social. Seguidamente se alcanza una categorización de los tipos de conducta social según la función que el individuo ejerce en sus relaciones interpersonales y dentro de la sociedad: Conducta Social. El individuo cumple con las normas de convivencia dentro de la sociedad, la que no ataca en forma alguna a la colectividad, es la que cumple con todas las reglas de convivencia. Conducta asocial. Es el individuo que carece de toda norma de convivencia y poca comunicación con el resto de la comunidad. Conducta parasocial. Se establece en la comunidad, pero se diferencia de las demás conductas. No se relaciona con lo social, no tiene aceptación de los valores creados por la colectividad, pero sin destruirlos: no realiza el bien común, pero no lo ataca. Conducta antisocial. “La conducta antisocial se define como cualquier conducta que refleje infringir reglas sociales o sea una acción contra los demás. En concreto, se exploran conductas antisociales asociadas al gamberrismo y a conductas de trasgresión de normas sociales en relación con la edad tales como romper objetos de otras personas o romper objetos de lugares públicos en la calle, el cine, autobuses..., golpear, pelearse o agredir a personas, fumar, beber, falsificar notas, no asistir al colegio o llegar tarde intencionalmente, copiar en un examen, robar, colarse cuando hay que esperar un turno, ensuciar las calles y las aceras 13 rompiendo botellas o vertiendo las basuras, tirar piedras a la gente, tirar piedras a casas, coches o trenes...” (Garaigordobil, 2005; p. 198). Teoría del aprendizaje social de Albert Bandura. La teoría del aprendizaje social de Bandura es con la cual se aborda el tema de conducta social en la presente investigación. Esta teoría es una de las pioneras dentro de las teorías cognitivas, denominada teoría cognitiva social, debido a que el término social reconoce los orígenes sociales de una gran parte del pensamiento y la acción del hombre, mientras que el término cognitivo hace referencia a la influencia de los procesos del pensamiento. Boeree (1998) da un alcance bastante didáctico al respecto: El conductismo, con su énfasis sobre los métodos experimentales, se focaliza sobre variables que pueden observarse, medirse y manipular y rechaza todo aquello que sea subjetivo, interno y no disponible (p.e. lo mental). En el método experimental, el procedimiento estándar es manipular una variable y luego medir sus efectos sobre otra. Todo esto conlleva a una teoría de la personalidad que dice que el entorno de uno causa nuestro comportamiento. Bandura consideró que esto era un poquito simple para el fenómeno que observaba (agresión en adolescentes) y por tanto decidió añadir un poco más a la fórmula: sugirió que el ambiente causa el comportamiento; cierto, pero que el comportamiento causa el ambiente también. Definió este concepto con el nombre de determinismo recíproco: el mundo y el comportamiento de una persona se causan mutuamente. Más tarde, fue un paso más allá. Empezó a considerar a la personalidad como una interacción entre tres “cosas”: el ambiente, el comportamiento y los procesos psicológicos de la persona. Estos procesos consisten en la habilidad para abrigar imágenes en la mente y en el lenguaje. Desde el momento en que introduce la imaginación en particular, deja de ser un conductista estricto y empieza a acercarse a los cognitivistas. De hecho, usualmente es considerado el padre del movimiento cognitivo. El añadido de imaginación y lenguaje a la mezcla permite a Bandura teorizar mucho más efectivamente que, digamos por ejemplo, Skinner con respecto a dos cosas 14 que muchas personas consideran “el núcleo fuerte” de la especie humana: el aprendizaje por la observación (modelado) y la auto-regulación (p. 4). Al respecto Marchesi (2009) opina que el aprendizaje de conductas se produce siempre, según esta teoría, en un marco social. Esto implica que, además de perder las normas de conducta por medio de las reacciones que los demás tienen ante sus actos, los niños adquieren los modelos de comportamientos adecuados por observación, viendo a los otros actuar. Este último medio de comportamiento de aquellas personas que, por su aceptación social, lugar importante en su mundo, etc. Se convierten en modelos de conducta apropiada. Según Marchesi (2009) existiría una evolución en el desarrollo de la conducta y el pensamiento moral: Los niños comenzarían controlando su conducta por las sanciones externas, premios o castigos, y completarían su desarrollo moral cuando el control fuera interno y los llevara a una conducta altruista y al cumplimiento de los valores morales. En este sentido, “el desarrollo moral es el aprendizaje de la conducta socialmente aceptable y la adquisición e internalización de las normas y valores transmitidos por las personas que rodean al niño en diversos ambientes (p.8). A ésta (Soundy, 2006) agrega que el comportamiento social tiene muchas causas, entre ellas la imitación, la persuasión, el juego y la identificación son sendas explicaciones posibles, pero ninguna excluye a las demás. Soundy (2006), de acuerdo a Bandura y Walters, plantea que la imitación es uno de los medios más comunes de aprender conductas sociales. La información temprana que recibe el niño en casa se basa en la imitación y observación de los demás. Por ejemplo, se observa que en ciertas ocasiones hay que persuadir a los niños que se porten de determinada manera. Hay madres y padres, que con calma, tienden una servilleta al niño que se está limpiando la grasa de los dedos en el mantel, mientras otros gritan, los golpean o castigan dejándolos sin cenar; éstos últimos son proclives a usar después las mismas técnicas para modificar la conducta. 15 Al respecto Soundy (2006) sugiere que las técnicas de persuasión verbal tendrían que permitir la discusión, el debate, la retroalimentación de preguntas, evitando la conducta dictatorial. Hay que enseñar a los niños que existen formas aceptables de manifestar ira, cansancio, decepción, tristeza u orgullo. Así mismo se puede hablar con ellos acerca de los modelos con los que desean identificarse. Rasgos de conductas sociales en niños y niñas. Entre los diferentes rasgos sociales planteados por Meneses (citado por Zamudio, 2009), se presentarán aquellos que se constituyen en las dimensiones del instrumento que medirá la conducta social de los niños en el presente estudio. Al respecto, se expone una serie de rasgos sociales que podrían asumir niños y niñas de esta etapa, los cuales están clasificados en rasgos sociales adecuados y rasgos sociales inadecuados: Rasgos sociales adecuados. La amistad. La amistad permite compartir alegrías, risas, tristezas, momentos de desesperación, permite comprender el sufrimiento del otro constituyéndose en una comunión afectiva y particular, una forma de amor incondicional, de lealtad de franqueza y, sobre todo fidelidad. Para Gonzales (2007) en el trato con sus amigos el niño y la niña aprende a cooperar y a superarse; se inicia en los principios del juego limpio, en el valor de dar y recibir, en el significado de la aprobación y conformidad sociales, y en el límite de sus capacidades. Aprende también a llevarse con personas de diferentes capacidades intelectuales y físicas. La amistad depende de los niños considerando entre ellos la edad contemporánea, sociabilidad e intereses comunes. Sin embargo, cada amistad reviste características peculiares. Las amistades pueden basarse en verdadera afinidad entre los chicos o en una relación oportunista uno tiene juguetes que otro carece o bien entre uno que manda y otro que se somete. 16 Algunos niños no tienen amigos porque se comportan de modo que provocan a otros rechazarlos. La falta de amigos puede también deberse a que los intereses del niño difieren a los de los otros niños de su edad o bien a que es agresivo, e impide que se le acerquen. Según Bulletín (s/f) la amistad es un afecto recíproco entre dos personas que no pertenecen a la misma familia. La amistad en su estado puro e incondicional permanece a través del tiempo, sobrepasando los valores individuales y temporales. La amistad es confianza, honradez, complicidad, saber aceptar los defectos y cualidades del amigo (a), saber escuchar, encontrar soluciones en caso de dificultades, es poder compartir las alegrías, las penas, las lágrimas, las dudas, en definitiva la amistad es una bella mezcla de sentimientos recíprocos. Así mismo la amistad permite a la persona no sentirse juzgado ni envidiado, por el sentimiento muy profundo y sincero que ennoblece a las personas que establecen una amistad. En tal sentido no cabe la frase “un amigo sincero”, ya que de no ser sincero, no se podría reconocer como amistad. Autores como Moreno (2006) y Toullier (2007) notan que, cuando se deja a los niños a sus propios recursos en sus relaciones con otros chicos, logran un grado notable de cooperación entre ellos mismos a pesar de frecuentes altercados. Los adultos pueden fomentar el sentido de cooperación en el niño desde que es pequeño, si en vez de mandarlo a recoger sus cosas, se ponen a hacerlo juntos. Siente entonces gusto de ser útil y así se le enseña la provechosa lección de los beneficios de la cooperación. La participación en grupo. Respecto a este tema, estudios realizados por Meléndez (2005) indican que a medida que el niño sale del círculo familiar y entra en el mundo de sus coetáneos logra obtener satisfacción de su trato. Aprende a llevarse con los extraños y a agasajar a los amigos, que reemplazan gradualmente la influencia de la familia sobre las actitudes del niño. Este autor define al grupo como un conjunto de chicos de la misma edad que tienen sentimientos semejantes y actúan de la misma manera. Así, desde los seis años los niños entran a la edad de la inclusión a un grupo, la pertenencia a un grupo. 17 Meléndez (2005) refiere que el grupo local espontáneo se forma sin intervención externa y sin ningún fin interno. Es resultado del esfuerzo espontáneo de los niños por formar un grupo adecuado a sus necesidades que suple lo que la sociedad adulta deja de darles y les proporciona tregua de la vigilancia de los mayores. El grupo establece su propia disciplina y su propia autoridad; existe independientemente de las actividades personales de cada uno de sus miembros, aunque orienta las actividades del grupo. Para Grover (2004) el grupo domina la forma de vida del niño, le señala el estilo de su indumentaria, el tipo de sus actividades y aún sus ideales. Pertenecer a un grupo depara a los niños no solamente compañía y oportunidad para divertirse, sino también produce sentimientos de orgullo de haber sido aceptados por el grupo y ser leales a él. El grupo usa nombres peculiares, obliga al secreto a sus miembros e incluso muchas veces establece ceremonias de iniciación que ponen a prueba la fuerza física de los nuevos miembros. Los grupos de las niñas difieren de las de los niños en que constan de pocos miembros, se rodean de mayor secreto, sus líderes son más autoritarios, difícilmente admiten nuevos miembros y rehúsan tratar también con chicas que no pertenecen al grupo. Rasgos sociales inadecuados. Con respecto a los rasgos sociales inadecuados, según Matturo (2006) se tiene la timidez, el negativismo y la rivalidad, los que a continuación detallaremos: Conducta de timidez. Para Meneses (2005) esta se manifiesta en niños pequeños al tratar personas desconocidas o aún con personas conocidas en circunstancias extrañas. Tiende a acentuarse con el tiempo, si no se remedia oportunamente. En cualquiera de sus formas, despierta en los padres considerable desencanto, porque, cuando esperan con mayor interés que el niño haga buena impresión, parece incapaz de hacerlo. El desencanto paterno agrava el problema en lugar de resolverlo. 18 La timidez del niño nace en parte del temperamento más delicado; pero, frecuentemente depende de que se ha asustado al niño no una sino varias veces. Los papás contribuyen inadvertidamente a la timidez del niño, porque se muestran muy contrariados cuando da muestras de inhabilidad. En realidad, era demasiado lo que se esperaba de él. El niño teme entonces que sus padres le retiren su amor. La impaciencia e inconsideración que manifiestan, a causa de sus limitaciones y errores, persuaden de que no sólo debe amar a sus padres, si no temerles. Luego extiende esa actitud a los demás y procura evitar su presencia. Carretero (2006) indica que la mejor manera de combatir la timidez es dejar de expresar en cada caso la falta de satisfacción con el niño. Si se logra que se sienta más seguro de sus papás, se sentirá a largo plazo más seguro de los demás. La timidez es fundamentalmente inseguridad de sí mismo y de las propias habilidades. Esta se origina ordinariamente en la inseguridad que experimenta el niño en las relaciones con los papás. El negativismo. Aquí se hablará de la desobediencia en su aspecto representado en la negación a cumplir órdenes. Para Lowell (2006) el negativismo permite al niño expresar su hostilidad en la forma de no aceptar lo que se le indica. Entendido como desobediencia en su aspecto representado en la negación a cumplir órdenes. El niño se parapeta entonces en el negativismo, escudo magnífico en contra del rechazo que percibe en la actitud de los padres. Nada se gana con intentar reprimir las manifestaciones del negativismo. Más bien debe atenderse la hostilidad disimulada del niño que reclama reexaminar las relaciones entre hijo y padres. Los niños, normalmente responden favorablemente a la corrección e instrucción, cuando están seguros del amor de los padres. En cambio, como atienden más el lenguaje emocional que al lenguaje verbal, identifican la ira de los padres en los esfuerzos por corregirlos e interpretan como señales de desaprobación o aún de rechazo y pérdida de amor. 19 La rivalidad. Linares (2007) entiende a la rivalidad como una de las reacciones sociales más precoces en los niños. A veces se presenta con carácter agresivo; en sí misma es enteramente natural. El ser buen competidor no solamente acrecienta el goce del juego, sino también la opinión que uno se forma de sí mismo. La competencia tiene sus raíces en los esfuerzos del niño para el amor de sus padres y se extienden a otras cosas, además de este mismo amor. Si el niño siente que debe esforzarse mucho para conseguir el amor de sus padres, compite exageradamente. Percibe que su propia dignidad está en juego si no consigue lo que se ha propuesto. Los pleitos, ocurren siempre que el niño ataca a otro niño o sus cosas. Presentan diferentes formas, como: destruir la obra de otro niño, quitar los juguetes, gritar, llorar y atacar corporalmente a puñetazos y empujones. La agresión es reacción contra la frustración. Mientras más se contraría una persona, se vuelve más agresiva. Si se castiga a un niño debido a su agresividad, se le frustra más y solo se consigue que se vuelva más agresivo. Por eso fracasan muchos intentos de controlar la agresividad. Dulanto (2007) considera que los niños pueden controlar su agresividad ante sus padres por miedo al castigo. Pero esto sirve sólo para producirles más frustraciones que engendrarán más agresividad cuando los padres se ausenten. El niño no es agresivo gratuitamente. Algo le ha sucedido que le impide lograr un fin importante para él. Por su parte Roldán (2006) refiere que desde los cuatro años en adelante, disminuyen las expresiones directas de agresividad y aumentan las expresiones indirectas, especialmente en forma de ataques o de culpar a los demás. Este autor considera que los niños demuestran distintos tipos de agresión que dependen de numerosos factores, como: el ambiente en que viven, la actitud de los padres y la clase de niños con los cuales se asocia. La intensidad de la agresión depende del grado de frustración de sus necesidades. Otro dato importante que refiere Roldán (2006) es que los niños mal adaptados son menos capaces de dominar las reacciones agresivas que los niños bien adaptados. 20 Aquellos no han adquirido formas de reaccionar adecuadamente a la frustración o encuentran mayor dificultad en aprenderlas. Los distintos rasgos sociales de los niños y niñas, tratados en líneas anteriores nos llevan a reconocer en los padres la importancia de ayudar a los hijos a ser aceptados socialmente, de esta manera facilitar que lleguen a su madurez humana. Aunque con la consideración que alcanzar la aceptación social no garantiza necesariamente que el niño esté bien adaptado; ya que un niño puede ser aceptado por sus compañeros porque lo admiran y lo respetan, mientras que a otro, porque está siempre dispuesto a hacer lo que se le diga, sacrificando sus valores personales o sus normas de conducta. La escuela frente a la conducta social. El papel de la escuela frente a la conducta social es abordado por De la Fuente (1981), este autor manifiesta que la conducta social no se desarrolla directamente en la escuela por distintos motivos. En algunos casos se piensa que la función principal de la escuela es la enseñanza de aspectos académicos, se cree además que la competencia social es responsabilidad de la familia o de otras instituciones, se piensa también, que el aprendizaje de comportamientos sociales se hace de modo espontáneo o por simple instrucción verbal, sin necesidad de una enseñanza sistemática. En muchos casos, aunque se valore la importancia de las habilidades sociales resulta un campo nuevo y los profesionales implicados no se encuentran preparados para afrontar sus enseñanzas. Ocurre que la escuela como consecuencia fundamental de los cambios sociales y económicos acoge a niños cada vez desde edades más tempranas, atiende a niñas y niños de poblaciones marginales, atendiendo a la inclusión acoge e integra a alumnos con minusvalías. La escuela actualmente detecta un notable incremento de los problemas en los alumnos y resulta que muchas de estas dificultades, están relacionadas con déficit e inhabilidad social en los niños y por lo tanto demanda nuevas estrategias de intervención. La institución escolar no puede permanecer ajena a estos hechos y tiene que modificar sus estrategias de enseñanza e intervención adaptándolas a las nuevas responsabilidades en este campo ya que parece indiscutible que un objetivo claro de la institución educativa es el enseñar al niño y a la niña a relacionarse adecuadamente con las personas de su entorno. 21 La enseñanza de las habilidades sociales a los niños y niñas es una competencia y responsabilidad clara de la escuela como institución junto a la familia y en coordinación con ella. Por tal motivo, los maestros deben tomar parte activa en las actividades de recreo infantil, proporcionar múltiples oportunidades de intercambio social dentro de la clase, por ejemplo proyectos cooperativos, discusiones, debates, campañas, proyectos comunitarios, entre otros. Historia de la inteligencia emocional. En principio, es importante anotar que el tema es reciente. Mestre, et al. (2007) refieren que, “primariamente se halla ligada a la inteligencia social de Thorndike, definiéndola como la habilidad para comprender y dirigir a los hombres, mujeres muchachos y muchachas y actuar sabiamente en las relaciones humanas” (p.81). Décadas después aparece la propuesta de Gardner (2005) sobre las inteligencias múltiples, y más específicamente referente a los conceptos de inteligencia interpersonal e inteligencia intrapersonal, tal autor explica que todos los seres humanos tienen siete inteligencias: la inteligencia lingüística, la inteligencia lógico matemática, la inteligencia musical, la inteligencia corporal cinética, la inteligencia interpersonal y la inteligencia intrapersonal, el mismo autor explica que algunas de ellas se desarrollan más que otras. Como se puede observar la inteligencia ya no solo se considera como habilidades cognitivas sino también se va incorporando los aspectos emocionales. Mestre et al. (2007, p.82) concluyen en que el término Inteligencia Emocional fue formalizado por Salovey y Mayer y posteriormente fue difundido por Goleman, influyendo en la mayoría de las conceptualizaciones. Salovey y Mayer estuvieron enterados de los trabajos previos sobre los aspectos no cognitivos de la inteligencia. Estos autores la definieron como una forma de inteligencia social que implica las habilidades de monitorear los sentimientos y emociones propias y de los demás. 22 El concepto de inteligencia emocional. Goleman (2000) define inteligencia emocional como el “ser capaz, por ejemplo de refrenar el impulso emocional; interpretar los sentimientos más íntimos del otro; manejar las relaciones de una manera fluida” (p.20). Para él, ello indica que cada persona puede identificar los propios sentimientos y los ajenos, logrando manejarlas en forma positiva así como autocontrolarlas. Para Mayer y Salovey, la inteligencia emocional implica la habilidad para percibir y valorar con exactitud la emoción; la habilidad para acceder y /o generar sentimientos cuando éstos facilitan el pensamiento; la habilidad para comprender la emoción y el conocimiento emocional, y la habilidad para regular las emociones que promueven el crecimiento emocional e intelectual. (Mestre et al. 2007, p.32) Por otro lado, Weisinger (citado por Alcocer, 2002), propone otra definición, en la que asume que “la inteligencia emocional es el uso inteligente de las emociones, de forma intencional hacemos que nuestras emociones trabajen para nosotros, utilizarlas con el fin de ayudarnos a guiar nuestro comportamiento y a pensar de manera que mejore nuestros resultados” (p. 215). Para este autor, la inteligencia emocional tiene la finalidad de tornarse en una guía intencional de la conducta y las actitudes en la persona. Bar-On (citado por Ugarriza y Pajares, 2005), define la inteligencia emocional como “un conjunto de habilidades emocionales, personales e interpersonales que influyen en nuestra habilidad general para afrontar las demandas y presiones del medio ambiente” (p.45). Desde esta perspectiva, la inteligencia emocional es vista como un proceso interno en el ser humano basado en habilidades emocionales, personales e interpersonales que permite a las personas interactuar en el contexto donde se desenvuelve, tornándose en una fuente directriz y generatriz de actitudes. Es por ello que en el presente estudio, ésta es la definición que se empleará, dado que integra los elementos conceptuales de las dos anteriores como son las emociones y los sentimientos, los cuales pueden ser autocontrolados, guiando el comportamiento, logrando que las personas puedan desenvolverse asertivamente ante situaciones y contextos donde interactúan. 23 Como tal, la inteligencia emocional es un factor importante e influye en el bienestar emocional general. De acuerdo al modelo de Bar-On que se expone a continuación, considera que las personas emocionalmente inteligentes son capaces de reconocer y expresar sus emociones, comprenderse a sí mismos, actualizar sus capacidades potenciales, llevar una vida regularmente saludable y feliz. A su vez son capaces de comprender cómo las otras personas se sienten, de tener y mantener relaciones interpersonales satisfactorias y responsables, sin llegar a ser dependientes de los demás. Modelos de inteligencia emocional. En el afán de buscar medidas para el constructo inteligencia emocional, muchos investigadores optaron por autoinformes, por su naturaleza destinados a medir el rendimiento típico; mientras que otros optaron por tests de rendimiento máximo de inteligencia emocional. Siendo Petrides y Furnham (citados por Mestre et al., 2007, p.82), “los que distinguieron a la IE rasgo (o autoeficacia emocional) y a la IE capacidad (o capacidad cognitivo emocional)”, las que a continuación se detallan. Inteligencia Emocional rasgo (o autoeficacia emocional). Constructo cuya diferencia con el de IE capacidad se basa en el método de medida utilizado para su medición más no en las dimensiones del modelo teórico, el cual es medido a través de cuestionarios o autoinformes, aduciéndose en ocasiones como un serio defecto en que la inteligencia emocional rasgo se relacione con las dimensiones básicas de la personalidad y que no siempre contribuya incrementalmente a la predicción de la varianza de la variable criterio, (Mac Cann, Matthews, Zeidner y Roberts; Salovey, Woolery y Mayer citados por Mestre et al., 2007, p.93) Inteligencia Emocional capacidad (o capacidad cognitivo emocional). Constructo que debe ser medido a través de test de rendimiento máximo lo cual tiene implicancias teóricas y prácticas de gran importancia. “Por ejemplo no cabría esperarse que la IE rasgo correlacionase fuertemente con medidas de capacidad cognitiva general o de variables semejantes, mientras que la IE capacidad sí debería mostrarse inequívocamente relacionada con este tipo de medidas” (Mestre et al., 2007, p.82). 24 Modelo de Inteligencia Emocional según Bar-On. Este modelo clasifica las capacidades emocionales (Rosas, 2010), de la siguiente forma: Bar-On dividió las capacidades emocionales en dos tipos principales: Las capacidades básicas (core factors), que son esenciales para la existencia de la IE: la autoevaluación, la autoconciencia emocional, la asertividad, la empatía, las relaciones sociales, el afrontamiento de presiones, el control de impulsos, el examen de realidad, la flexibilidad y la solución de problemas; y las capacidades facilitadoras (facilitators factor), que son el optimismo, la autorrealización, la alegría, la independencia emocional y la responsabilidad social (Bar-On, 2000). Cada uno de estos elementos se encuentra interrelacionado entre sí. Por ejemplo, la asertividad depende de la autoseguridad; mientras que la solución de problemas depende del optimismo, del afrontamiento de las presiones y de la flexibilidad (p.11). El modelo de Bar-On (Rosas, 2010), es una de las medidas de inteligencia emocional rasgo más ampliamente utilizadas en la literatura, como se observa en la tabla 1, comprende cinco componentes principales: intrapersonal, interpersonal, adaptabilidad, manejo del estrés y estado de ánimo general. A su vez, cada una de estas dimensiones consta de algunos sub componentes, habilidades que están relacionadas entre sí. Seguidamente se plantean las diferencias de cada uno de los componentes del modelo Bar-On de la inteligencia no-cognitiva explicados de forma más detallada. 25 Tabla 1. El modelo Bar-On de la inteligencia no-cognitiva (Gabel, 2008) Componente intrapersonal (intrapersonal Evalúa component) autoconciencia emocional, la asertividad, la autorealización e la autoidentificación general del individuo, la independencia emocional, la autoconciencia (emotional selfawereness), la autoevaluación (self regard). Componente interpersonal (interpersonal La empatía, la responsabilidad social, las relaciones sociales. component) Componente de manejo de emociones La capacidad para tolerar presiones (tolerance stress) y la (stress managment component) capacidad de controlar impulsos (impulse control). Componente de estado de ánimo El optimismo (optimism) y la satisfacción (happiness). Componente de adaptación-ajuste Este componente se refiere a la capacidad del individuo para (adaptability) evaluar correctamente la realidad y ajustarse de manera eficiente a nuevas situaciones, así como a su capacidad para crear soluciones adecuadas a los problemas diarios. Incluye las nociones de prueba de la realidad (reality testing), flexibilidad (flexibility) y capacidad para solucionar problemas Fuente: Rosas (2010) Componentes del modelo Bar-On de la inteligencia no cognitiva, planteados por López (2008): (problem solving). Intrapersonal. Referida a la capacidad que tiene la persona de reconocer en su momento los propios sentimientos, para comprenderlos y no someterse a estos de modo que la persona guíe un estilo de vida. Consigna entre sus habilidades relacionadas al Autoconcepto 26 (respetarse y ser consciente de uno mismo, aceptando lo bueno y malo), Autoconciencia Emocional (conocimiento de los propios sentimientos), Asertividad (expresarse abiertamente y defender los derechos con pertinencia), Independencia (control de sus acciones y pensamiento considerando las opiniones) y Autorrealización (alcanzar su potencialidad y llevar una vida rica y plena). Interpersonal. Capacidad de establecer interacciones sociales satisfactorias a partir del manejo de las emociones en otros. Conllevando a conductas de popularidad, liderazgo y de comunicación eficaz. Considera entre sus habilidades relacionadas a la Empatía (reconocer las emociones de otros, comprenderlas y mostrar interés), Responsabilidad social (miembro constructivo del grupo social, mantener las reglas sociales y ser confiable), Relaciones Interpersonales (dar y recibir afecto, establecer relaciones amistosas) Adaptabilidad. Adecuarse a las exigencias del entorno evaluando y enfrentando de manera efectiva las situaciones problemáticas. Entre sus habilidades relacionadas tenemos a la Prueba de realidad (correspondencia entre lo que emocionalmente experimentamos y lo que ocurre objetivamente, confirmar nuestros sentimientos sin fantasear) y Flexibilidad (adaptar nuestros comportamientos y pensamientos a las condiciones del medio) y Solución de problemas (Identificar y definir problemas así como implementar soluciones efectivas) Manejo del estrés. Tolerar al estrés, logrando soportar eventos adversos, situaciones estresantes, y fuertes emociones, enfrentándolas activa y positivamente; logrando controlar los impulsos. Observamos entre sus habilidades: Tolerancia al estrés (ser optimista para resolver un problema, y sentir que uno tiene capacidad para controlar e influir en la situación) y Control de impulsos (resistir o retardar un impulso para conseguir un objetivo de mayor interés). 27 Estado de ánimo general. Capacidad para disfrutar de la vida, la perspectiva que tenga de su futuro, y el sentirse contento(a) en general. Sus habilidades son Optimismo (mirar siempre el lado positivo de la vida) y Felicidad (disfrutar y sentirse satisfecho con la vida). Teorías sobre la inteligencia emocional. Existen varias teorías sobre la inteligencia emocional, de las cuales se desarrollarán entre otras las de Stemberg, Gardner, Salovey y Mayer, Goleman y Bar-On. Cloquell (s/f) plantea algunas teorías sobre inteligencia desde un enfoque cognitivo, las que se resumen a continuación: Stemberg desarrolló la teoría triárquica de la inteligencia, la cual fue una de las primeras en ir en contra del enfoque psicométrico, otorgando una significación a la inteligencia referida a cuan bien un individuo trata con los cambios en el entorno a lo largo de su vida. La teoría de Sternberg abarca tres partes: componencial, experiencial, y práctica. Sternberg asocia el funcionamiento de la mente a una serie de componentes. Estos componentes los etiquetó como metacomponentes: componentes de rendimiento, y componentes de adquisición de conocimiento. Subteoría componencial, Sternberg la asocia con la capacidad analítica. Éste es uno de tres tipos de capacidad que Sternberg reconoce. La capacidad analítica permite separar problemas y ver soluciones no evidentes. Subteoría Experiencial / Creativa, esta etapa trata principalmente de cuan bien se realiza una tarea, con relación a lo familiar que sea. Sternberg divide el papel de la experiencia en dos partes: novedad y automatización. Subteoría Práctica/Contextual, esta capacidad implica el poder aplicar habilidades sintéticas y analíticas a las situaciones diarias. Sternberg también reconoce que mucha gente puede poseer una integración de las tres y tener altos niveles en las tres inteligencias. (Stemberg, 1985, citado por Rodriguez, p.57 ) 28 Otra teoría muy conocida es la de inteligencias múltiples de Gardner (2005), quien define la inteligencia como “la capacidad de resolver problemas o elaborar productos que sean valiosos en una o más culturas” (Gardner ,2005, p.10). Primero, amplía el campo de lo que es la inteligencia y reconoce lo que todos sabíamos intuitivamente, y es que la brillantez académica no lo es todo. Triunfar en los negocios, o en los deportes, requiere ser inteligente, pero en cada campo utilizamos un tipo de inteligencia distinto. No mejor ni peor, pero si distinto. Segundo y no menos importante, Gardner define la inteligencia como una capacidad, por consiguiente la convierte en una destreza que se puede desarrollar. Gardner no niega el componente genético, pero las potencialidades se van a desarrollar de una manera o de otra dependiendo del medio ambiente, nuestras experiencias, la educación recibida, etc. Howard Gardner añade, que al igual que hay muchos tipos de problemas que resolver, también hay muchos tipos de inteligencia. Entre otras se han identificado la inteligencia lógico-matemática, inteligencias lingüística, inteligencia espacial. Inteligencia musical, inteligencia cinestésico, inteligencia intrapersonal, inteligencia interpersonal y la inteligencia naturalista, no habiendo tipos puros. Salovey y Mayer (citados en Mestre et al., 2007) describieron a la inteligencia emocional como una forma de inteligencia social que implica la habilidad de monitorear los sentimientos y emociones propias y de los demás, discriminando entre ellos de utilizar esta información para guiar el pensamiento y la acción de uno mismo. Plantean la existencia de un conjunto de procesos mentales que está relacionado emocionalmente y que está involucrado en la información emocional; tales procesos mentales son los siguientes: evaluación y expresión de las emociones en uno mismo y en los otros la utilización de las emociones de direcciones adaptativas. La definición sobre inteligencia emocional dada por Meyer y Salovey en 1997 (citados en Mestre et al., 2007) dan un mayor énfasis al pensamiento sobre los sentimientos. Hein hace una diagramación didáctica sobre la investigación de Meyer y Salovey, ordenando los procesos psicológicos desde los niveles más básicos a los más altos e integrados: percepción, validación y expresión de la emoción; facilitación emocional del pensamiento; entendimiento y análisis de las emociones y ejemplo del 29 conocimiento emocional; por último la regulación reflexiva de las emociones, promotor emocional crecimiento emocional. Goleman (2000) desarrolla un nuevo concepto de la inteligencia emocional, lo que se conoce tradicionalmente como inteligencia no garantiza el éxito ni la felicidad en la vida; tampoco determina la inteligencia emocional. Esta última se relaciona con ciertas habilidades y actitudes que determinan cómo reaccionará la persona ante sus propios sentimientos y ante los sentimientos de los demás; esto se reflejará en la forma en que maneje las relaciones con otros. Si la inteligencia es el conjunto de capacidades que nos permite resolver problemas o fabricar productos valiosos en nuestra cultura, la inteligencia emocional es el conjunto de capacidades que nos permite resolver problemas relacionados con las emociones. Con nuestras emociones (inteligencia intrapersonal) y con las de los demás (inteligencia interpersonal). Teoría sobre la inteligencia emocional según Bar-On. Esta teoría es en la que se basa la presente investigación y sobre la cual Sánchez (s/f) alcanza datos muy importantes: Bar-On construye su fundamentación teórica sobre la teoría de la inteligencia social de Thonrdike y considera como importante los factores no intelectuales que Weschler concedía a la inteligencia; incluye además el concepto de alexetimia (incapacidad para identificar las emociones propias) acuñado por Sifneos en el año 1972. Bar-On parte de la idea de que su modelo debería incluir los siguientes componentes: capacidad de reconocer, entender y expresar emociones y sentimientos; capacidad de entender cómo se sienten los otros y relacionarse con ellos; capacidad para manejar y controlar emociones y la capacidad para manejar el cambio, adaptarse y resolver problemas de naturaleza. Basándose en estos cinco componentes, propone lo que llama inteligencia socioemocional, la cual hace referencia a un conjunto de capacidades emocionales, personales e interpersonales que influyen en la capacidad del individuo de hacer frente a las demandas y a las presiones del ambiente. En tal sentido, la inteligencia emocional es un factor importante en la determinación del éxito en la vida influye directamente en el bienestar emocional general del individuo. 30 Implicancia de la inteligencia emocional en la escuela. La Inteligencia emocional es la habilidad para percibir, acceder y generar emociones para facilitar el pensamiento, comprender las emociones y los significados emocionales y regularlas reflexivamente para promover mejor la emoción y el pensamiento. Es normal que en la escuela se susciten continuamente peleas o conflictos entre compañeros, lo cual no es un problema preocupante, ya que a menudo los problemas humanos son más complejos, aunque también es cierto que cuando se suscitan estos problemas los docentes deben buscar estrategias para dar solución al conflicto. Por otro lado éstos se ven afectados irremediablemente en el desarrollo normal de la clase ya que lo que llamará la atención de todos los estudiantes no será precisamente la clase, sino muy por el contrario será el evento infortunado (Mestre et al., 2007). Como se sabe, las oportunidades para aprender habilidades emocionales no son siempre iguales. Si bien es cierto que las habilidades emocionales comienzan en casa, los padres pueden sufrir limitaciones psicológicas tan graves que los limitan para iniciar un proceso de aprendizaje cognitivo-emocional. Las lecciones sobre las emociones que un niño puede aprender pueden ser incorrectas, alejarse de sus sentimientos o a interpretarlos mal. Algunos de los aprendizajes más importantes tienen lugar entre el niño y su profesor; los profesores a menudo desempeñan un papel de modelo adulto potencialmente sabio e importante (Mestre et al., 2007). Por ello es tan importante que en las escuelas se preste atención a este constructo. En las escuelas es natural la enseñanza emocional implícita en algunas asignaturas. Probablemente la literatura es el primer hogar de la inteligencia emocional, las formas en las que los sentimientos de los personajes motivan sus acciones, que adelantan el argumento de la historia, la construcción del argumento de la historia etc. De hecho uno no puede evaluar un argumento sin preguntarse: “¿Qué sentiría este personaje con su historia, y estilo personal en esta situación? Y entonces: “¿Hasta qué punto es razonable para alguien que siente de ese modo, actuar así?”. También se tiene la importancia de los valores que determinan en parte el conocimiento de las emociones más conscientes de la persona; temas insertados en las materias de religión, educación cívica e historia, sin perder de vista a la educación 31 artística y personal social. “Las competencias emocionales deberían tratarse cuidadosamente ya que hay una escasa guía científica sobre cómo éstos deberían ser abordados” (Mestre et al. 2007, p.42) Estos autores continúan exponiendo de manera similar una serie de trabajos que en definitiva demuestran que la inteligencia emocional se suma a las habilidades cognitivas como un potencial predictor no sólo del equilibrio psicológico del alumnado, sino también de su logro escolar. La percepción. El instrumento Escala de Conducta Social (Social Behavior Scale) a utilizar en la presente investigación considera a los docentes como referentes de la conducta social de sus estudiantes, los cuales para el caso valorarán la conducta social de sus estudiantes en base a la percepción que tienen ellos acerca de cada uno de sus pupilos. Motivo por el cual en los siguientes párrafos se versará sobre la percepción según la Psicología Básica (2007). La representación mental del mundo se consigue a través de la sensación; pero sin la capacidad para seleccionar, organizar e interpretar las sensaciones, esta representación no sería completa. A este segundo proceso se le denomina percepción. Los psicólogos de la Gestalt consideraban que el ser humano, cuando recibe varias sensaciones, las organiza en un “gestalt” (conjunto o forma), según la Gestalt la percepción del conjunto excede la suma de las partes del mismo; para entenderlo se torna importante comprender los principios de isomorfismo (percibimos como un reflejo de la forma como está organizado el cerebro) y estructura (son comprendidas en su totalidad, unidades integradas). Mediante la percepción, la información recopilada por todos los sentidos se procesa, y se forma la idea de un sólo objeto. Es posible sentir distintas cualidades de un mismo objeto, y mediante la percepción, unirlas, determinar de qué objeto provienen, y determinar a su vez que este es un único objeto. Entonces, la percepción recupera los objetos, situaciones y procesos a partir de la información aportada por las energías (estímulos) que inciden sobre los sentidos. 32 Es así como los docentes deberán recuperar las actitudes comportamentales de sus estudiantes partiendo del trato y conocimiento diario que tienen ellos con sus pupilos, las cuales han sido aportadas previamente por los sentidos. En este contexto conducta social e inteligencia emocional dos constructos involucrados significativamente en los estudiantes, ante los cuales el actuar del docente se comporta como un gran influyente y aportante en base a la percepción que tiene respecto a las actitudes comportamentales y resultados escolares ligados a su bienestar emocional. Esta es la razón por la que se considera de suma importancia el estudio relacional de la conducta social y de la inteligencia emocional en los estudiantes; para lo cual se plantean objetivos definidos en esa orientación. Objetivos e hipótesis Objetivo general. Establecer si existe asociación entre la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado, de las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao Objetivos específicos. Establecer la asociación entre la dimensión amistad de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao. Establecer la asociación entre la dimensión participación en grupo de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao. Establecer la asociación entre la dimensión timidez de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao. 33 Establecer la asociación entre la dimensión negativismo y egoísmo de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao. Establecer la asociación entre dimensión rivalidad y pleitos de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao. Hipótesis general Existe asociación significativa entre la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado, de las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao. Hipótesis específicas. H1: Existe asociación significativa entre la dimensión amistad de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao. H2: Existe asociación significativa entre la dimensión participación en grupo de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de en las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao. H3: Existe asociación significativa entre la dimensión timidez de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao. H4: Existe asociación significativa entre la dimensión negativismo y egoísmo de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao. H5: Existe asociación significativa entre la dimensión rivalidad y pleitos de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao. 34 Método Tipo y diseño de investigación El tipo y diseño de investigación es descriptivo correlacional. Hernández, Fernández y Baptista (2010, p. 72) plantean que “los diseños descriptivos correlacionales en ocasiones describen relaciones en uno o más grupos o subgrupos, y suelen describir primero las variables incluidas en la investigación, para luego establecer las relaciones entre éstas”. En la presente investigación se medirán las variables conducta social e inteligencia emocional en los estudiantes del sexto grado de la Red 10 del Callao. El esquema es el siguiente: Ox M r Oy Donde en este caso: M : grupo de estudiantes de sexto grado de primaria. Ox : observaciones de la conducta social. Oy : observaciones de la inteligencia emocional. r : relación existente entre las variables. 35 Variables Definición conceptual. Conducta social. “Conjunto de rasgos sociales que desarrollan los niños y niñas en forma adecuada o inadecuada, los mismos que sirven de base para la interacción social con sus pares, acorde al contexto donde se desarrollan, donde intervienen, la familia, la escuela y la sociedad en general. Esta se expresa en manifestaciones comportamentales y en actitudes propias de la edad” (Meneses, 2007; citado por Zamudio, 2009, p.8). Inteligencia emocional. “Conjunto de habilidades emocionales, personales e interpersonales que influyen en la habilidad general para afrontar las demandas y presiones del medio ambiente” (Bar-On, 1997; citado por Rosas, 2010, p.10). Definición operacional. Conducta social. Puntaje de los estudiantes según la prueba escala de conducta social (Social Behavior Scale) considerando los aspectos de amistad, participación en grupos, timidez, negativismo y egoísmo, así como la rivalidad y pleitos, como componentes de la conducta social (Goldsteun y Michelson, 1989; citados por Zamudio, 2009). Inteligencia emocional. Puntaje que obtienen los estudiantes en edad escolar luego de la aplicación de la prueba EQI YV Bar-On Emotional Quotient Inventory en relación a sus diferentes habilidades emocionales, considerando las relaciones interpersonales, intrapersonales, nivel de adaptabilidad con la realidad y el contexto, manejo y control del stress y los impulsos, así como el manejo de la imagen personal (Bar-On, 1997; citado por Ugarriza y Pajares, 2005). 36 Tabla 2. Dimensiones e indicadores de la variable conducta social Dimensiones Indicadores Items - Conversa con un compañero (a) Amistad 1,2,3 en especial - Presta cosas a un compañero (a) en especial -Desprenderse fácilmente de objetos personales -Inclusión en grupos de trabajo Participación 4,5 -Juega en grupo en grupos -Se aparta de los demás -No conversa -No brinda opiniones Timidez 6.7.8.9 -Se inhibe y pone nervioso en público -No cumple con órdenes -Contesta en forma Negativismo y egoísmo 10,11,12,13,14 inadecuada -No comparte sus cosas -Posesivo con los objetos -No comparte alimentos -Responde agresivamente Rivalidad pleitos y -Frustración al perder -Genera acciones agresiva -Busca pleitos insultando Fuente: Zamudio (2009) 15,16,17,18 37 Tabla 3. Dimensiones e indicadores de la variable inteligencia emocional Dimensiones Indicadores Items Comprensión emocional de sí mismo Intrapersonal Asertividad 2,3,6,12,14,15,20, Autoconcepto 21,26 Autorrealización Independencia Nivel de empatía Relaciones con los demás Interpersonal 1,4,7,23,28,30 Relaciones interpersonales Responsabilidad social Manejo social Solución de problemas Adaptabilidad Plantea solución ante situaciones adversas 8,10,13,16,19, Experimentación de la realidad 22,24 Contrasta sus soluciones Nivel de flexibilidad Tolerancia al estrés Manejo del estrés Manejo del Soportar actitudes de beligerancia estrés Control de los impulsos 5,9,17,27,29 Autocontrol excesivo Imagen personal que proyectan de sí mismos Autoconocimiento Estado de Imagen que los demás perciben ánimo general Acepta la opinión de los demás con respecto a su persona. Fuente: Ugarriza y Pajares (2005) 11,18,25 38 Participantes Los informantes son los estudiantes de sexto grado de primaria, correspondientes a las siete instituciones educativas de la red 10 de la región Callao, que estudian en el turno mañana y tarde. Siendo la población de 637 estudiantes, de los cuales 308 son varones y 329 son mujeres (tabla 4). Considerando el número de la población, se procedió a obtener la muestra representativa en dos fases. La primera fase se procedió con la técnica de muestreo probabilístico. La segunda fase es la distribución por estrato, considerando el número de secciones por institución educativa. Lo cual se obtuvo luego de aplicar la fórmula del coeficiente de distribución (fm = ,38) por cada una de las secciones, obteniéndose una muestra de 240 estudiantes (tabla 5). En la muestra participaron los 23 docentes quienes fueron elegidos intencionalmente como referentes de la conducta de los estudiantes. Quienes son docentes tutores de las secciones muestrales, por consiguiente pertenecen al sector educación del Callao, cuyas edades fluctúan entre 30 y 55 años Tabla 4. Población de estudiantes de sexto grado de primaria de las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao Institución educativa Varones Mujeres total % 1 41 44 85 13 2 33 29 62 10 3 36 36 72 11 4 54 57 111 18 5 50 43 93 15 6 42 55 97 15 7 52 65 117 18 Total 308 329 637 100 Fuente: Oficina de Estadística DREC Región Callao 2011 39 Tabla 5. Distribución de la muestra estratificada de estudiantes, considerando las secciones correspondientes al sexto grado de primaria en las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao Institución educativa y Varones Mujeres total % 15 17 32 13 19 16 35 15 14 13 27 11 20 22 42 18 19 17 36 15 16 20 36 15 15 17 32 13 118 122 240 100 secciones de sexto grado 1 A-B-C-D 2 A-B 3 A-B-C 4 A-B-C-D 5 A-B-C 6 A-B-C-D 7 A-B-C Total n= 240 40 Tabla 6. Distribución de la muestra según género de los estudiantes del sexto grado de primaria en la red 10 en la región- Callao n % Femenino 122 50.83 Masculino 118 49.17 Sexo De la tabla se aprecia que el 122 (50.83%) del total de estudiantes son de sexo femenino y el 118 (49.17%) del total de estudiantes son de sexo masculino, lo que quiere decir que la distribución de la muestra es muy similar para ambos grupos. Tabla 7. Distribución de la muestra según edad de los estudiantes del sexto grado de primaria en la red 10 en la Región- Callao Edad n % 10 14 5.83 11 147 61.25 12 79 32.92 De la tabla se aprecia que el 14 (5.83%) tienen edad de 10 años; 147 (61.25%) del total de estudiantes tienen edad de 11 años y el 79 (32.5%) del total de estudiantes tienen edad de 12 años, es decir más del 50% de los estudiantes tienen 11 años. 41 Instrumentos de investigación Uno de los instrumentos empleados es la Escala de Conducta Social (Social Behavior Scale), del la cual se presenta la respectiva ficha técnica: Ficha técnica Nombre :Escala de Conducta Social (Social Behavior Scale) Autores : A. Goldstein y J. Michelson País :Estados Unidos Año :1989 Adaptación al español :María Monjas País :España Año :1995 Adaptado en Latinoamérica :Manuel Meneses País :México Año :2007 Adaptación peruana : Miguel Zamudio Barrera Localidad :Callao Año :2009 Administración :Individual o colectiva Duración :Sin límite de tiempo (20 a 25 minutos aproximadamente) Ámbito de aplicación : Niños entre 6 y 12 años Significación : Evaluar la performance de la conducta social en los niños y niñas considerando a los docentes como informantes sobre la conducta social de los estudiantes a través de cinco dimensiones. Áreas que evalúa : Amistad, participación en grupos, timidez, negativismo y egoísmo, rivalidad y pleitos. 42 Descripción del instrumento. Es un cuestionario dirigido a estudiantes de educación primaria, el cual está conformado por 18 ítems. Se encuentra estructurada en función a 5 dimensiones: Amistad, participación en grupos, timidez, negativismo y egoísmo, rivalidad y Pleitos. La escala está diseñada para ser administrada a los docentes como referentes de los estudiantes, siendo el tiempo de aplicación aproximadamente 20 minutos por cada estudiante. La calificación es manual y la puntuación oscila entre 90 (Puntuación Mayor) y 18 (Puntuaron Menor). Dado que lo que se presentan son frases en base a conductas inadecuadas, a mayor puntuación, existirá una tendencia a orientarse hacia una conducta social inadecuada en los estudiantes, y a menor puntuación, existirá una tendencia a orientarse hacia una conducta social adecuada en los estudiantes La gradiente es la siguiente: 5 = Siempre; 4 = Bastante; 3 = Regular; 2 = Poco; 1 = Nada. Validez y Confiabilidad del instrumento. La escala elaborada por Meneses (2007) en México, fue construida y validada aplicándose a 1,200 estudiantes de escuelas públicas varones y mujeres, encontrándose una confiabilidad de ,65 para varones en la escala total y ,62 para mujeres en la escala total y ,69 para la total. Presenta validez de constructo. En la adaptación de la escala a la región Callao, Zamudio (2009) a fin de determinar la capacidad de la escala para medir las cualidades para la cual fue construida, sometió a la evaluación de juicio de expertos. El nivel de validez encontrado por los expertos, se consideró para la escala de conducta social, una puntuación de ,72, equivalente al 80 %, demostrando la validez del instrumento. La confiabilidad se estableció el nivel de correlación, a través del coeficiente de correlación de Pearson y el ajuste a través del coeficiente de Spearman – Brown de ,69. 43 El segundo instrumento utilizado. fue el inventario de inteligencia emocional de BarOn ICE en niños y adolescentes: Ficha técnica Nombre Original :EQI YV Bar-On Emotional Quotient Inventory Autor :Reuven Ba-rOn Procedencia :Toronto Canadá Adaptación Peruana :Nelly Ugarriza Chávez y Liz Pajares Administración :Individual o colectiva Formas :Forma completa y abreviada Duración :Sin límite de tiempo (forma completa 20 a 25 minutos aproximadamente y abreviada 10 a 15 minutos) Aplicación : Niños y adolescentes entre 7 y 18 años Puntuación :Calificación computarizada Significación :Evaluación de las capacidades emocionales y sociales Tipificación :Baremos peruanos Usos :Educacional, clínico, jurídico, médico y en la investigación. Son usuarios potenciales aquellos profesionales desempeñan psiquiatras, sociales, que se como psicólogos, médicos, trabajadores consejeros, tutores y orientadores vocacionales. Materiales :Un disquete que contiene: Cuestionarios de la forma completa y abreviada, calificación computarizada y perfiles. Año :2005 44 Características principales del Baron ICE: NA. El BarOn ICE: NA contiene 60 ítems distribuido en 7 escalas. También incluye una escala que evalúa las respuestas inconsistentes (Índice de inconsistencia), que está diseñado para identificar las respuestas al azar. El ICE BarOn: NA usa una escala de tipo Likert de 4 puntos como máximo y 1 punto como mínimo. Los puntajes altos de inventarios indican niveles elevados de inteligencia emocional y social. El BarOn ICE: NA es de fácil administración y de calificación se puede realizar en forma computarizada. El inventario completo lleva de 25 a 30 minutos y la forma abreviada BarOn ICE: NA, en un tiempo aproximado de 10 a 15 minutos. Ambas formas están diseñadas para ser administrada entre los 7 y los 18 años. La forma completa de inventario contiene 60 ítems y 8 escalas y la abreviada contiene 30 ítems y 6 escalas. Tabla 8. Mediciones contenidas en el ICE: NA – Forma abreviada ESCALAS Inteligencia emocional total Interpersonal Intrapersonal Adaptabilidad Manejo del estrés Estado de ánimo general 45 Validez y Confiabilidad. La prueba de BarOn, fue administrada en Canadá, en 5,400 estudiantes en edad escolar de instituciones educativas públicas y privadas, de diferente nivel socioeconómico, Los hallazgos permitieron establecer una validez de constructo y de contenido, encontrándose correlación ítem prueba total de ,68 y en la prueba total fue de ,72. La prueba adaptada en Perú por Ugarriza (2005), comprendió a 3,400 estudiantes de instituciones púbicas de Lima. En cuanto a la confiabilidad, la consistencia interna para la forma abreviada a través de Alfa Cronbach por grupos de edad y sexo, se tiene que para varones entre 10 y 12 años, el coeficiente en los 4 componentes y la escala total oscila entre 0,41 y 0,72 y para las mujeres éste oscila entre 0,46 y 0,73. Las correlaciones inter-ítems por grupos de edad y sexo, se tiene que para varones entre 10 y 12 años, el coeficiente en los 4 componentes y la escala total oscila entre 0,09 y 0,30 y para las mujeres éste oscila entre 0,09 y 0,30. En cuanto al error estandarte estimación (predicción) por grupos de edad y sexo, se tiene que para varones entre 10 y 12 años, el coeficiente en los 4 componentes y la escala total oscilan entre 1,91 y 4,53 y para las mujeres éste oscila entre 1,85 y 4,50. Por otro lado presenta validez de constructo, obteniéndose una correlación de 0,92, entre la prueba completa y la forma abreviada Procedimientos de recolección de datos En relación al procedimiento utilizado, es posible denotar lo siguiente: En primer lugar se solicitó la autorización del director de la institución educativa, como siguiente paso se preparó en forma impresa cada uno de los instrumentos a aplicar. En el caso de la aplicación del inventario de inteligencia emocional, se administró en forma personal el instrumento a los estudiantes en pequeños grupos para lo cual se dispuso de un ambiente amoblado en cada institución educativa.. Mientras que en el caso de la escala de conducta social, se procedió a realizar una reunión con los docentes tutores que enseñaban en el quinto ciclo de educación primaria de la institución educativa, a fin de explicar el motivo y fines del apoyo solicitado para que 46 los datos respondan a la escala. Los docentes en el plazo de una semana hicieron entrega de la escala para su procesamiento. Procesos de análisis de datos. Obtenidos los datos, se procedió a confeccionar la tabulación de datos para realizar el proceso estadístico en el paquete SPSS versión 15. El tratamiento estadístico se realizó a través de la estadística descriptiva y la estadística inferencial. En lo referente a la estadística descriptiva se mostrará a través de la frecuencia y porcentaje de los datos respectivos, así como la media y desviación estándar, del análisis y orientación de los resultados obtenidos en la escala de conducta social e inteligencia emocional.. En relación a la estadística inferencial se tiene que para efecto de la asociación de las variables se utilizó la estadística Chi cuadrada. 47 Resultados Resultados descriptivos Se realiza un estudio estadístico descriptivo para obtener la media y desviación estándar de las variables y dimensiones en investigación. Tabla 9. Medidas descriptivas de la conducta social e inteligencia emocional (N=240). Variables y dimensiones M DE Conducta Social 56.25 11.40 Amistad 6.57 2.31 Participación en grupos 6.06 1.66 Timidez 14.20 4.64 Negativismo y egoísmo 14.98 5.03 Rivalidad y pleitos 14.43 4.90 Inteligencia Emocional 88.40 13.13 En la tabla 9 se observan los valores promedios de la conducta social con sus respectivas dimensiones y la variable inteligencia emocional. La mayor desviación de los datos lo muestra la variable inteligencia emocional (13.13) así como también dicha variable muestra la media más alta (88.40). La menor desviación y la media más baja lo muestra la dimensión Participación en grupos con 1.66 y 6.06 respectivamente. 48 Medidas de Chi cuadrado para la contrastación de hipótesis. Tabla 10. Medida de Chi cuadrado de la variable conducta social asociada a la variable inteligencia emocional. Inteligencia emocional (423.000) Chi Cuadrado Sig. Conducta social 227.950 .001* Amistad 405.600 .000* Participación en grupos 210.375 .000* Timidez 221.692 .000* Negativismo y egoísmo 189.242 .000* Rivalidad y pleitos 198.800 .000* *p<.05 n=240 Al procesar la prueba estadística para contraste de la hipótesis general la cual plantea que existe asociación significativa entre la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado, de las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao, se encontró un valor Chi cuadrado de 227.950 para la Conducta Social y 423.00 para la inteligencia emocional. Se obtuvo un nivel de significación p = .001. Para dicho nivel de significación, p menor que .05, se determinó aceptar la hipótesis de asociación entre ellas. Se concluye que existe una asociación significativa entre la variable conducta social y la variable inteligencia emocional. Al procesar la prueba estadística para contraste de la hipótesis 1 la cual plantea que existe asociación significativa entre la dimensión amistad de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao, se encontró un valor Chi cuadrado de 405.60 para la dimensión amistad y 423.00 para la inteligencia emocional y 49 se obtuvo un nivel de significación p = .000. Para dicho nivel de significación, p menor que .05, se determinó rechazar la hipótesis nula. Esto permite concluir que existe una asociación significativa entre la dimensión amistad y la variable inteligencia emocional. Al procesar la prueba estadística para contraste de la hipótesis 2 la cual plantea que existe asociación significativa entre la dimensión participación en grupos de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao, se encontró un valor Chi cuadrado de 210.375 para la dimensión participación en grupos y 423.00 para la inteligencia emocional. Es así que se obtuvo un nivel de significación p = .000. el cual determina aceptar la hipótesis 2. Esto permite concluir que existe asociación significativa entre la participación en grupos de la conducta social y la inteligencia emocional. Al procesar la prueba estadística para contraste de la hipótesis 3 la cual plantea que existe asociación significativa entre la dimensión timidez de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao, se encontró un valor Chi cuadrado de 221.692 para la dimensión timidez y 423.00 para la inteligencia emocional, obteniéndose un nivel de significación p = .000. Para dicho nivel de significación, p menor que .05, se acepta la hipótesis 3. Se concluye que existe una asociación significativa entre la timidez y la inteligencia emocional y se asevera que cuanto mayor la timidez de la conducta social percibida por los docentes menor es la inteligencia emocional. Al procesar la prueba estadística para contraste de la hipótesis 4 la cual plantea que existe asociación significativa entre la dimensión negativismo y egoísmo de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao, se encontró un valor Chi cuadrado de 189.242 para la dimensión negativismo y egoísmo y 423.00 para la inteligencia emocional. Se determinó aceptar la hipótesis 4, dado el valor de significancia de p= .000. Esto permite concluir que existe una asociación significativa entre el negativismo y egoísmo de la conducta social y la inteligencia emocional y se 50 asevera que cuanto mayor es el negativismo y egoísmo, menor es la inteligencia emocional, aceptándose la cuarta hipótesis de investigación. Al procesar la prueba estadística para contraste de la hipótesis 5 la cual plantea que existe asociación significativa entre la dimensión rivalidad y pleitos de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao, se encontró un valor Chi cuadrado de 198.800 para la dimensión rivalidad y pleitos y 423.00 para la inteligencia emocional. Se obtuvo un nivel de significación p = .0000. Esto permite concluir que existe una asociación significativa entre el negativismo y egoísmo y la inteligencia emocional y se asevera que cuanto mayor es la rivalidad y pleitos de la conducta social, menor es la inteligencia emocional, aceptándose la quinta hipótesis de investigación. Medidas de frecuencia Se realiza un estudio descriptivo por niveles de cada una de las variables y sus respectivas dimensiones. Tabla 11. Medidas de frecuencia por niveles de la conducta social en las instituciones educativas de la red 10 del Callao. Niveles de conducta social n % Adecuada 52 21.7 188 78.3 Inadecuada n=240 De la tabla se aprecia que el 21.7% tienen conducta social adecuada y el 78.3% tienen conducta social inadecuada. 51 200 Porcentaje 150 100 78.3% 50 21.7% 0 Adecuada Inadecuada Conducta Social Figura 1. Distribución del total de estudiantes según la Conducta social. Nótese la predominancia del nivel inadecuado con respecto a la Conducta social. Tabla 12. Medidas de frecuencia por niveles de la dimensión amistad de la conducta social en las instituciones educativas de la red 10 del Callao. Niveles de amistad n % Adecuada 34 14.2 Inadecuada 206 85.8 n=240 De la tabla se aprecia que el 14.2% tienen conducta social con respecto a la dimensión amistad adecuada y el 85.8% de los participantes tienen conducta social con respecto a la dimensión amistad inadecuada. 52 100 Porcentaje 80 60 85,8% 40 20 14,2% 0 Adecuada Inadecuada Amistad Figura 2. Medidas de frecuencia de la dimensión amistad. Nótese la predominancia del nivel inadecuado (85.8%) con respecto a la dimensión amistad de la variable conducta social. Tabla 13. Medidas de frecuencia por niveles de la dimensión participación en grupos de la conducta social en las instituciones educativas de la red 10 del Callao. Niveles de participación en grupos n % Adecuada 67 27.9 Inadecuada 173 72.1 n=240 En la tabla se aprecia que el 27.9% tienen conducta social con respecto a la dimensión participación en grupos adecuada y el 85.8% de los participantes tienen conducta social con respecto a la dimensión participación en grupos inadecuada. 53 80 Porcentaje 60 40 72,1% 20 27,9% 0 Adecuada Inadecuada Participación en grupos Figura 3. Medidas de frecuencia de la dimensión participación en grupos. Nótese la predominancia del nivel inadecuado (72.1%) con respecto a la dimensión participación en grupos de la variable conducta social. Tabla 14. Medidas de frecuencia por niveles de la dimensión timidez de la conducta social en las instituciones educativas de la red 10 del Callao. Niveles de la dimensión timidez n % Adecuada 59 24.6 Inadecuada 181 75.4 n=240 En la tabla se aprecia que el 24.6% tienen conducta social adecuada con respecto a la dimensión timidez y el 75.4% de los participantes tienen conducta social inadecuada con respecto a la dimensión en estudio. 54 80 Porcentaje 60 40 75,4% 20 24,6% 0 Adecuada Inadecuada Timidez Figura 4. Medidas de frecuencia de la dimensión timidez. Nótese la predominancia del nivel inadecuado (75.4%) con respecto a la dimensión timidez de la variable conducta social. Tabla 15. Medidas de frecuencia por niveles de la dimensión negativismo y egoísmo de la conducta social en las instituciones educativas de la red 10 del Callao. Niveles de la dimensión negativismo y egoísmo n % Adecuada 96 40.0 Inadecuada 144 60.0 n=240 En la tabla se aprecia que el 40% tienen conducta social adecuada con respecto a la dimensión negativismo y egoísmo y el 60% de los participantes tienen conducta social inadecuada con respecto a ésta misma dimensión. 55 60 50 Porcentaje 40 30 20 60,0% 40,0% 10 0 Adecuada Inadecuada Negativismo y egoísmo Figura 5. Medidas de frecuencia de la dimensión negativismo y egoísmo. Nótese la predominancia del nivel inadecuado (60%) con respecto a la dimensión negativismo y egoísmo de la variable conducta social. Tabla 16. Medidas de frecuencia por niveles de la dimensión rivalidad y pleitos de la conducta social en las instituciones educativas de la red 10 del Callao. Niveles de la dimensión n % Adecuada 55 22.9 Inadecuada 185 77.1 n=240 En la tabla se aprecia que el 22.9% tienen conducta social adecuada con respecto a la dimensión rivalidad y pleitos y el 77.1% de los participantes tienen conducta social inadecuada con respecto a ésta misma dimensión. 56 80 Porcentaje 60 40 77,1% 20 22,9% 0 Adecuada Inadecuada Rivalidad y pleitos Figura 6. Medidas de frecuencia de la dimensión rivalidad y pleitos Nótese la predominancia del nivel inadecuado (77.1%) con respecto a la dimensión rivalidad y pleitos de la variable conducta social. Tabla 17. Medidas de frecuencia por niveles de la Inteligencia emocional en las instituciones educativas de la red 10 del Callao. Niveles de Inteligencia emocional n % Nivel de desarrollo marcadamente bajo Muy baja 12 27 5 11.3 Baja 148 61.7 Promedio 31 12.9 Bien desarrollada 12 5 Muy bien desarrollada Excelentemente desarrollada 8 2 3.3 0.8 n=240 57 De la tabla se aprecia que el 5% tienen nivel de desarrollo de Inteligencia emocional marcadamente bajo; 11.3% tienen nivel de desarrollo de Inteligencia emocional muy bajo; 61.7% tienen nivel de desarrollo de Inteligencia emocional baja. Todo esto en suma equivale a un 77.9% de estudiantes que no han alcanzado a desarrollar adecuadamente su inteligencia emocional. Asimismo, el 12.9% tienen nivel de desarrollo de Inteligencia emocional promedio; 5% tienen nivel de desarrollo de inteligencia emocional bien desarrollada; 3.3% tienen nivel de desarrollo de Inteligencia emocional muy bien desarrollada y 0.8% tienen nivel de desarrollo de inteligencia emocional excelentemente desarrollada. En suma, el 22.1% de los estudiantes que conforman la muestra si han desarrollando adecuadamente su inteligencia emocional. 150 Porcentaje 100 61.7% 50 12.9% 11.2% 5.0% 5.0% 3.3% 0.8% 0 Marcadamente bajo Muy baja Baja Adecuada Alta Muy alta Exelentemente desarrollada Inteligencia Emocional Figura 7. Medidas de frecuencia de la inteligencia emocional. Nótese la predominancia del nivel bajo (61.7%) de inteligencia emocional de la muestra en estudio. Asimismo, la predominancia en suma de los niveles deficientes (marcadamente bajo, muy baja y baja) muestra un porcentaje del 77.9%. 58 Resultados complementarios Tabla 18. Conducta social por género de los estudiantes del sexto grado de primaria en la red 10 en la región Callao Conducta social Género Masculino Adecuada 24 (20.3%) Femenino 28 (23%) Inadecuada 94 (79.7%) 94 (77%) Total 118 (100%) 122(100%) n= 240 En la tabla se aprecia que 94 estudiantes (79.7%) del género masculino observan una conducta inadecuada, asimismo 94 estudiantes (77%) del género femenino observan una conducta inadecuada. 100 Conducta Social 80 Participantes Adecuada Inadecuada 60 94 94 40 20 28 24 0 Masculino Femenino Género Figura 8. Conducta social por género. Nótese la predominancia del nivel inadecuado de la conducta social en ambos géneros. 59 Tabla 19. Inteligencia emocional por género de los estudiantes del sexto grado en la red 10 de la región Callao. Género Inteligencia emocional Marcadamente bajo masculino 9 (7.6%) femenino 3 (2.5%) Muy baja 14 (11.9%) 13 (10.7%) Baja 70 (59.3%) 78 (63.9%) Adecuada 13 (11%) 18 (14.8%) Alta 6 (5.1%) 6(4.9%) Muy alta 6 (5.1%) 2 (1.6%) 0 (0%) 2 (1.6%) Excelentemente desarrollada n= 240 En la tabla se aprecia que el 59. 3% de estudiantes del género masculino observan una inteligencia emocional baja, y el 63. 9% de estudiantes del género femenino observan una inteligencia emocional baja. 80 Inteligencia Emocional Marcadamente bajo Muy baja Baja Adecuada Alta Muy alta Exelentemente desarrollada Participantes 60 40 78 70 20 18 14 13 13 9 6 6 6 3 0 Masculino 2 2 Femenino Género Figura 9. Inteligencia emocional por género. Nótese la predominancia del nivel bajo de inteligencia emocional en ambos géneros. 60 Tabla 20. Tabla de contingencia de la conducta social e inteligencia emocional. Conducta social Inteligencia Emocional Adecuada Inadecuada 12 (6.4%) Total Marcadamente bajo 0 (0%) 12 (5%) Muy baja 0 (0%) 27 (14.4%) 27 (11.3%) Baja 0 (0%) 148 (78.7%) 148 (61.7%) Promedio 30(57.7%) 1 (5%) 31 (12.9%) Alta 12 (23.1%) 0 (0%) 12 (5%) Muy alta 8 (15.4%) 0 (0%) 8 (3.3%) Excelentemente desarrollada 2 (3.8%) 0 (0%) 2 (0.8%) n= 240 En la tabla se observa que 12 estudiantes que perciben una inteligencia emocional marcadamente baja, también presentan un nivel inadecuado de conducta social. Asimismo, del total de la muestra, 148 estudiantes presentan niveles bajos de inteligencia emocional y los mismos a su vez presentan una conducta social inadecuada. Además, 30 alumnos que presentan un nivel promedio de inteligencia emocional, también poseen una conducta social adecuada y solo un estudiante posee una inadecuada conducta social y un nivel promedio de inteligencia emocional. Con respecto a los niveles más altos, 2 estudiantes poseen una inteligencia emocional excelentemente desarrollada y a su vez estos dos estudiantes poseen conductas adecuadas de conducta social. Asimismo, 8 alumnos que presentan conductas adecuadas de conducta social, los mismos participantes demuestran un nivel muy alto de inteligencia emocional. 61 150 Conducta Social Adecuada Inadecuada Participantes 100 148 50 30 27 12 12 8 2 1 0 Marcadamente bajo Muy baja Baja Adecuada Alta Muy alta Exelentemente desarrollada Inteligencia Emocional Figura 10. Gráfico de asociación de las variables en estudio. En el gráfico se observa que a niveles bajos de inteligencia emocional, la conducta social es inadecuada. 62 Discusión, conclusiones y sugerencias Discusión De los resultados obtenidos tanto en conducta social como en inteligencia emocional se puede concluir que en términos generales los estudiantes de sexto grado observan una conducta social inadecuada así como un desarrollo de su inteligencia emocional bajo, lo cual es compatible con la asociación estadística hallada. El presente estudio demostró que existe asociación significativa entre la percepción de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional de los estudiantes del sexto grado de la Red 10 del Callao, es decir, que la una está asociada a la otra, resultado que se vincula con el de Matalinares, et al. (2008) quien en un estudio encontrara relación entre la inteligencia emocional y el componente social de la variable autoconcepto. Siendo el componente social del autoconcepto “ lo que conozco de mí”, se define como el conjunto de pensamientos, ideas creencias opiniones y percepciones que manejamos con respecto a nosotros mismos; si nos referimos directamente al plano de las habilidades escolares, un nivel óptimo de autoconcepto en el estudiante permite una adaptación personal a las distintas situaciones de la vida cotidiana: en la familia, en el aula, la escuela y el barrio. Al ser la conducta social el conjunto de rasgos sociales que desarrollan los niños en forma adecuada o inadecuada y éstas a su vez el cimiento de las relaciones sociales con sus pares, en la cual intervienen la familia, la escuela y la sociedad Meneses (citado por Zamudio, 2009), los cuales se expresan en comportamientos y actitudes propias de la edad; y entendiendo según Baron (citado por Ugarriza y Pajares, 2005) a la inteligencia emocional como un proceso interno en el ser humano basado en habilidades emocionales, personales e interpersonales que permite a la persona interactuar en el contexto en el que se desenvuelve, generando determinadas actitudes. Con base a los resultados de la investigación se debe asumir que dichas interacciones , actitudes y comportamientos propios de la edad son inadecuados e insatisfactorios en los estudiantes del sexto grado de la Red 10 del Callao. 63 Por consiguiente se infiere que son estas interacciones inapropiadas las que de alguna manera se constituyen en la base de las conductas agresivas y pandillaje con las que lamentablemente muchas veces se vinculan a la juventud y/o sociedad del Callao. Los resultados evidenciaron que la hipótesis 1 de la dimensión amistad de la conducta social percibida por los docentes presenta una asociación significativa con la inteligencia emocional, lo cual indica que los estudiantes de la muestra que presentan un nivel bajo de inteligencia emocional, también presentan inadecuadas conductas amistosas, no dialoga con sus compañeros, no presta sus cosas a los demás y no se desprenden de sus cosas fácilmente. Dichas características estarían asociadas a su nivel de empatía, de relaciones con los demás e interpersonales, de responsabilidad y manejo social. Por otro lado Bulletín (s/f) manifiesta que revistiendo la amistad características peculiares, por lo que, pueden basarse en verdadera afinidad entre chicos o en una relación oportunista en la que a uno le interesa los juguetes que tiene otro, o tal vez porque uno puede someter bajo sus intereses al otro. Los hallazgos de este estudio evidencian una conducta social inadecuada así como un nivel bajo en su inteligencia emocional y esta última está relacionada significativamente con la dimensión amistad. La hipótesis 2 respecto a la dimensión participación en grupos de la conducta social percibida por los docentes, la investigación demostró que de igual manera presenta una asociación significativa con la inteligencia emocional, lo que indicaría que los estudiantes de sexto grado no manifiestan muchas condiciones para participar e incluirse en grupos de trabajo, en los juegos en grupo lo cual evidenciaría poca responsabilidad social y manejo social en su entorno. Siendo el grupo (Grover, 2004) el que domina la forma de vida del niño, señalándole el estilo de su indumentaria, el tipo de sus actividades y aún sus ideales. A la luz de los resultados obtenidos se debe inferir que los estudiantes del sexto grado de la Red 10 de la región Callao en sus participaciones grupales están propensos a la adquisición de conductas negativas como: vestimenta inadecuada, no propia de su edad; 64 actividades y uso de vocabulario inapropiado, juegos adictivos en exceso (ludopatía), barras bravas, pandillaje incipiente entre otros. Respecto a la hipótesis 3 la investigación demostró que existe asociación alta y significativa entre la dimensión timidez de la conducta social percibida por los docentes y el desarrollo de la inteligencia emocional, es decir, que los estudiantes de sexto grado presentan características de inseguridad de sí mismos y de las propias habilidades según Meneses, así como se apartan de los demás, no conversan, no brindan opiniones, se inhiben y ponen nerviosos en público según Ugarriza; esta conducta se debería a la escasa capacidad del individuo para evaluar correctamente la realidad y ajustarse de manera eficiente a nuevas situaciones, según el modelo Bar-On. Es probable que los estudiantes de la muestra no hayan superado las manifestaciones de timidez al tratar con personas desconocidas cuando niños pequeños, lo cual al no haber sido remediado a tiempo ha tendido a acentuarse (Meneses, 2005). Además es importante señalar a partir de los planteamientos de Carretero (2006), que, si se desea combatir la timidez habría que dejar de expresar la falta de satisfacción con los estudiantes de sexto grado de la Red 10 de la región Callao. Según los resultados obtenidos sobre la hipótesis 4 se demostró que existe asociación alta, y significativa entre la dimensión negativismo-egoísmo de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional, de este modo los estudiantes de sexto grado evidenciarían desobediencia y una conducta no adaptativa en el proceso de compartir, así como según Meneses, lo cual se debería a sus dificultades para dar y recibir afecto, constituir relaciones amistosas, entablar empatía y en términos generales para establecer adecuadas relaciones interpersonales (Bar-On, 2000). Por otro lado al plantear Lowell (2006) que el negativismo permite al niño expresar su hostilidad no aceptando lo que se les indica, se deduce que los estudiantes de la muestra en su mayoría son desobedientes y contradicen las indicaciones de sus padres, maestros y otros. Además estos estudiantes por puntuar en su mayoría niveles un nivel bajo respecto a su inteligencia emocional, tendrían limitaciones en su capacidad para disfrutar 65 de la vida, sin muchas perspectivas sobre su futuro. Así como evidencian escasas habilidades de optimismo manifestando dificultades para mirar el lado positivo de la vida, disfrutarla y sentirse satisfecho con ella según el modelo Bar-On (citado por López 2008). Finalmente los resultados concernientes a la hipótesis 5 se encontraron asociación alta y significativa entre la dimensión rivalidad y pleitos de la conducta social percibida por los docentes y el desarrollo de la inteligencia emocional, lo cual nos hace deducir que los estudiantes del sexto grado son agresivos e insultan, así como tienen reacciones de frustración al perder según Ugarriza; y que estas características están asociadas al inadecuado manejo del estrés, por lo que tendrían serias dificultades para ser optimistas al resolver un problema, así como para controlar e influir en la situación. Así mismo evidencian dificultades en el control de sus impulsos. Estos resultados se oponen a los encontrados por Castro et al. (2007) quienes entre sus hallazgos más importantes permiten concluir que al ingresar a la secundaria, los estudiantes manifiestan tener buenas relaciones interpersonales con sus padres, sus profesores y sus compañeros. Al presentarse la rivalidad según Linares (2007) con carácter agresivo en sí misma como enteramente natural en el niño, se deduce que los estudiantes de sexto grado de la Red 10 de la región Callao, al obtener una conducta social en su mayoría inadecuada puedan adoptar conductas agresivas como un modo de protegerse en contra de sentimientos de inseguridad. Las mismas que deben estar originándose de relaciones sociales deficientes (Dulanto, 2007). Por consiguiente se asume que la mayoría de estudiantes de la muestra presentan serias deficiencias en los siguientes componentes: capacidad de reconocer, entender y expresar emociones y sentimientos; capacidad de entender cómo se sienten los otros y relacionarse con ellos; capacidad para manejar y controlar emociones y la capacidad para manejar el cambio, adaptarse y resolver problemas de naturaleza (Bar-On citado por Sánchez, s/f). Asimismo también mostrarían deficiencias en su inteligencia socioemocional, la cual a decir de Bar-On (citado por Sánchez, s/f) hace referencia a un conjunto de capacidades emocionales, personales e interpersonales que influyen en la capacidad del individuo de hacer frente a las demandas y a las presiones del ambiente. 66 En el sentido que la inteligencia emocional es un factor importante en la determinación del éxito en la vida y que influye directamente en el bienestar emocional general del individuo. Los resultados obtenidos llevan a comprobar que cuando la conducta social de los estudiantes de sexto grado es buena, la inteligencia emocional que observan está debidamente desarrollada. Así mismo que cuando la conducta social es inadecuada, por consiguiente no se ha desarrollado debidamente su inteligencia emocional. En tal sentido, al obtener un alto porcentaje de estudiantes con conductas inadecuadas, podemos inferir que los estudiantes de sexto grado observan manifestaciones comportamentales y actitudes inapropiadas y al obtener un bajo índice de los estudiantes conductas adecuadas, podemos deducir que menos de la cuarta parte de estudiantes observan manifestaciones comportamentales y actitudes propias de la edad según Meneses. Estos resultados concuerdan con los hallados por Salazar (2009), quien en un estudio realizado en la región Callao, encontrara que en la escala real de medición de habilidades de interacción social PEHIS de Monjas los estudiantes tanto del grupo experimental y grupo control obtuvieran promedios tendientes a ser bajos. Respecto a la inteligencia emocional, los resultados indican que la mayoría de los estudiantes de sexto grado no han alcanzado el nivel promedio de desarrollo de su inteligencia emocional, por tanto estos estudiantes no habrían desarrollado las capacidades básicas de la inteligencia emocional, según Bar-On, como la autoevaluación, autoconciencia emocional, asertividad, empatía, relaciones sociales, el afrontamiento de presiones, el control de sus impulsos, el examen de realidad, la flexibilidad y la solución de problemas. Así mismo los resultados arribados en la presente investigación muestran que son pocos los estudiantes de sexto grado han alcanzado de promedio a niveles superiores en el desarrollo de su inteligencia emocional, lo cual indica que menos de la cuarta parte de los estudiantes, no sólo han desarrollado las capacidades básicas señaladas anteriormente, sino que también habrían desarrollado las capacidades facilitadoras como son el optimismo, la autorrealización, la alegría, la independencia emocional y la responsabilidad social, según Bar-On, éstos estudiantes habrían desarrollado los dos tipos de inteligencia emocional, es decir las capacidades básicas y las capacidades facilitadoras. 67 En la conducta social entre los géneros masculino y femenino, no se encontró diferencias significativas, en ambos casos se obtuvo una conducta social inadecuada según la percepción de los docentes de los estudiantes de sexto grado de la Red 10 del Callao. Así mismo la conducta de los estudiantes es marcadamente inadecuada según las edades 10, 11 y 12 años respectivamente. Respecto a la inteligencia emocional según el género masculino y femenino se encontró que la gran mayoría obtiene un nivel bajo de desarrollo de esta inteligencia con una diferencia de 5% en favor del género femenino, esta diferencia a favor del género femenino coincide con el hallado por Matalinares et al. (2008). Se considera que se hubieran obtenido mejores resultados de haberse considerado criterios de inclusión de los docentes, así como que por lo mínimo conozcan a sus estudiantes por dos años, porque no es conveniente que el docente realice la percepción sin tener un conocimiento cabal del estudiante, de esta manera asegurar el criterio de validez de la prueba. Finalmente es importante señalar que la asociación significativa hallada entre la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional de los alumnos del sexto grado de la Red 10 del Callao, demuestra que las variables del estudio están relacionadas mostrando su dependencia entre una y otra variable, es decir que la inteligencia emocional interviene en la conducta social así como la conducta social interviene en la inteligencia emocional. Conclusiones Existe asociación significativa entre la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao. Esto nos permite aseverar que cuanto mejor es la conducta social, mejor es la inteligencia emocional de los estudiantes. Se presenta una asociación significativa entre la dimensión amistad de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto 68 grado de las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao. Se confirma que el fortalecimiento de los lazos amicales permiten el desarrollo de la inteligencia emocional. Existe asociación significativa entre la dimensión participación en grupo de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional de los estudiantes de sexto grado en las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao. El trabajo eficaz y la buena dinámica de trabajo en grupo desarrolla la inteligencia emocional en los estudiantes. Se percibe una asociación significativa entre la dimensión timidez de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao. Es decir, el alto grado de timidez, perjudica e influye negativamente en el desarrollo de la inteligencia emocional. Existe asociación entre la dimensión negativismo y egoísmo de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao. Se afirma que las actitudes negativas y el egoísmo durante la práctica educativa del estudiante, perjudica el desarrollo pleno de su inteligencia emocional. Se observa y determina una asociación significativa entre la dimensión rivalidad y pleitos de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de las instituciones educativas de la Red 10 de la región Callao. Los pleitos, discusiones infundadas y las rivalidades que no son competencias sanas influyen negativamente en el desarrollo de la inteligencia emocional e integral del estudiante. Sugerencias Implementar en el Proyecto Educativo Regional del Callao un programa de educación emocional cuyo objetivo está dirigido a desarrollar conductas sociales adecuadas en nuestros estudiantes chalacos, teniendo en cuenta que hoy en día la inteligencia 69 emocional se constituye en una puerta que abre el camino al éxito en la práctica social de la persona. Ampliar la siguiente investigación a los diferentes grados de primaria y a otras redes educativas a fin de que los resultados puedan ser globalizados a nivel de la región Callao. Continuar con futuras investigaciones en torno a la conducta social en los ámbitos educativos, familiares y sociales, considerando que ésta se constituye en un requisito indispensable para una convivencia saludable. Que la presente investigación sea el inicio de futuras investigaciones en torno a la inteligencia emocional en los ámbitos educativos, familiares y sociales, considerando que ésta se constituye en factor determinante para el éxito de una persona, ya sea en los aspectos personales, académicos, sociales y profesionales. Finalmente se recomienda que las instituciones educativas chalacas tomen las horas de libre disponibilidad, para realizar talleres de fortalecimiento de las diferentes áreas de la inteligencia emocional, como son interpersonal, intrapersonal, adaptabilidad, manejo del estrés y estado de ánimo general. 70 Referencias Alcocer, S. (2002). Inteligencia emocional. Lima: Cultura Bello, Z. (2009). Alternativa psicopedagógica para la educación de la inteligencia emocional en niños con dificultad de aprendizaje. Recuperado el 9 de abril de 2011, de http://site.ebrary.com/lib/bibliosilsp/Doc?id=10345235&ppg=5 Biehler, R. (2005). Introducción al desarrollo del niño. 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Chosica: UNE Matriz de Consistencia Conducta social percibida por los docentes e inteligencia emocional en alumnos del 6º grado de primaria en la Red 10 Callao Problema Objetivos Hipótesis Variables Dimensiones Indicadores Metodología : ¿Existe asociación entre la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional de los estudiantes de sexto grado de primaria, de las instituciones educativas de la red 10 en la región Callao? Objetivo general Establecer si existe asociación entre la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado, de las instituciones educativas de la red 10 de la región Callao. Objetivos específicos Hipótesis general Variable 1 Conducta Social Amistad -Conversar con un compañero (a) en especial - Prestar cosas a un compañero (a) en especial -Desprenderse fácilmente de objetos personales Tipo de investigación Descriptiva Establecer si existe asociación entre la dimensión amistad de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de las instituciones educativas de la red 10 de la región Callao. Establecer si existe asociación entre la dimensión participación en grupo de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de las instituciones educativas de la red 10 de la región Callao. Establecer si existe asociación entre la dimensión timidez de la conducta social percibida por los docentes y Existe asociación significativa entre la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado, de las instituciones educativas de la red 10 de la región Callao. Hipótesis específicas Participación en grupos Timidez Existe asociación significativa entre la dimensión amistad de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de las instituciones educativas de la red 10 de la región Callao. Existe asociación significativa entre la dimensión participación en grupo de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de en las instituciones educativas de la red 10 de la región Callao. Negativismo y egoísmo Rivalidad y pleitos Interpersonal Variable 2 Inteligencia emocional Intrapersonal Interpersonal Existe asociación significativa entre la dimensión timidez de la conducta social percibida -Inclusión en grupos trabajo -Juega en grupo de -Se aparta de los demás -No conversa -No brinda opiniones -Se inhibe y pone nervioso en público Diseño investigación Descriptivocorrelacional de Población 637 estudiantes de sexto grado de primaria. La muestra es de 240 estudiantes. -No cumplir con órdenes -Contesta en forma inadecuada -No comparte sus cosas -Posesivo con los objetos -No comparte alimentos Instrumentos -Responde agresivamente -Frustración al perder -Genera acciones agresivas -Busca pleitos insultando Inventario de inteligencia emocional BarOn ICE adaptado para niños y adolescentes Comprensión emocional de sí mismo Asertividad Autoconcepto Autorrealización Independencia Nivel de empatía Relaciones con los demás Relaciones interpersonales Responsabilidad social Manejo social Escala de conducta social de Meneses adaptada por Zamudio Análisis de datos Estadística descriptiva: media y desviación estándar. Estadística inferencial: Chi cuadrado la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de las instituciones educativas de la red 10 de la región Callao. Establecer si existe asociación entre la dimensión negativismo y egoísmo de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de las instituciones educativas de la red 10 de la región Callao. Establecer si existe asociación entre la dimensión rivalidad y pleitos de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de las instituciones educativas de la red 10 de la región Callao. por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de las instituciones educativas de la red 10 de la región Callao. Adaptabilidad Existe asociación significativa entre la dimensión negativismo y egoísmo de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de las instituciones educativas de la red 10 de la región Callao. Existe asociación significativa entre la dimensión rivalidad y pleitos de la conducta social percibida por los docentes y la inteligencia emocional en los estudiantes de sexto grado de las instituciones educativas de la red 10 de la región Callao. Manejo del estrés Estado de ánimo general Variables intervinientes Género: Masculino o Femenino Edad: 10,11 y 12 años Turno de estudio: Mañana y Tarde Nivel socioeconómico: CyD Solución de problemas Plantea solución ante situaciones adversas Experimentación de la realidad Contrasta sus soluciones Nivel de flexibilidad Tolerancia al estrés Manejo del estrés Soportar actitudes de beligerancia Control de los impulsos Autocontrol excesivo Felicidad Optimismo Nombre: ______________________________________ Edad: ______________ Sexo: _______________ Colegio: ______________________________________ Grado: _______ fecha: ___/____/_____ INVENTARIO Emocional BarOn ICE: NA – ABREVIADA INSTRUCCIONES Lee cada oración y elige la respuesta que mejor te describa, hay cuatro posibles respuestas: 1. Muy rara vez 2. Rara vez. 3. A menudo Muy rara vez 1. Me importa lo que le sucede a las personas. 2. Es fácil decirle a ¡a gente como me siento. 3. Me gusta todas las personas que conozco. 4. Soy capaz de respetar a los demás. 5. Me molesto demasiado de cualquier cosa. 6. Puedo hablar fácilmente sobre mis sentimientos. 7. Pienso bien de todas las personas. 8. Peleo con la gente. 9. Tengo mal genio. 10. Puedo comprender preguntas difíciles. 11. Nada me molesta. 12. Es difícil hablar sobre mis sentimientos más íntimos. 13. Puedo dar buenas respuestas a preguntas difíciles. 14. Puedo fácilmente describir mis sentimientos. 15. Debo decir siempre la verdad. 16. Puedo tener muchas maneras de responder una pregunta difícil, cuando yo quiero. 17. Me molesto fácilmente. 18. Me agrada hacer cosas para los demás. 19. Puedo usar fácilmente diferentes modos de resolver los problemas, 20. Pienso que soy el (la) mejor en todo lo que hago. 21. Para mi es fácil decirle a las personas como me siento. 22. Cuando respondo preguntas difíciles trato de pensar en muchas soluciones. 23. Me siento mal cuando las personas son heridas en sus sentimientos. 24. Soy bueno (a) resolviendo problemas. 25. No tengo días malos. 26, Me es difícil decirle a los demás mis sentimientos. 27. Me disgusto fácilmente. 28. Puedo darme cuenta cuando mi amigo se siente triste. 29. Cuando me molesto actúo sin pensar. 30. Se cuando la gente está molesta aun cuando no dicen nada. 4. Muy a menudo A Rara Muy a menud Vez menudo o Nombre: ______________________________________ Edad: ______________ Sexo: _______________ Colegio: ______________________________________ Grado: _______ fecha: ___/____/_____ ESCALA DE CONDUCTA SOCIAL Instrucciones Estimado docente la presente escala pretendemos tipificar las conductas sociales de los alumnos en diferentes contextos. Antes de contestar, lea y medite cada una de las frases escritas a continuación. Sea honesto(a) y verás en sus respuesta. Marque con una (X) su respuesta en las columnas teniendo en cuenta lo siguiente: 5. Siempre 4. Bastantes Veces. 3. Regular 2. Poco 1. Nada Bastante Amistad Nada Poco Regular Siempre s veces 1. No emplea mayor tiempo en conversar, jugar o trabaja en grupo escogiendo siempre a un compañero(a) en especial. 2. Presta sus cosas a un compañero (a) o grupos de compañeros en especial. 3. No se desprende fácilmente de sus pertenencias por darlas a otro u otros compañeros en especial. Participa en grupos 4. Pertenece o se incluye en un grupo para realizar trabajos en aula. 5. No le gusta jugar integrándose a un grupo de compañeros. Timidez 6. Se aparta siempre de los demás. 7. No entabla conversación por si solo con los compañeros o docentes. 8. No brinda sus opiniones fácilmente, ante los demás. 9. No habla en público o ante e! grupo de compañeros en clase. Negativismo y Egoísmo 10. No hace lo que se le ordena (desobediente) 11. Contesta de manera inadecuada siempre que se le dice algo o se le reclama algo que ha hecho en forma inadecuada. 12. No le gusta compartir sus cosas y objetos, con los demás. 13. Cuando tiene algo, dice que es para él o ella solo o sola. 14. No comparte sus alimentos con los demás. Rivalidad y Pleitos 15. Responde agresivamente, frente a un compañero en especial. 16. Siempre le gusta ganar. 17. Busca peleas con facilidad. 18. Busca pleito insultaron a sus compañeros o compañeras.