Sevilla, 02/01/08 'Por el Derecho al Descanso' pide la supresión de la venta de artefactos pirotécnicos por su peligrosidad y ruido En Jerez una joven ha perdido un ojo al estallarle un petardo en la cara durante la Nochevieja EUROPA PRESS La plataforma cívica 'Por el Derecho al Descanso' solicitó hoy la supresión de venta y la prohibición de petardos y todo tipo de artefactos pirotécnicos, dado que la pasada Nochevieja numerosos vecinos de la ciudad han denunciado la «peligrosidad» y el «ruido» intrínsecos a este tipo de objetos. La portavoz de la plataforma, Dolores Dávila, dijo a Europa Press que, aunque la explosión de petardos y otro tipo de artilugios «no es una novedad de este año», en la pasada Nochevieja «la cosa ha ido a más, si cabe, y no era extraño asomarse a la ventana y ver un gran resplandor a partir de las 0.00 horas», lo que impidió el descanso normal a numerosos residentes de Sevilla. Dávila, que aseguró que este año las zonas afectadas no han sido sólo las barriadas, «donde se notan más», sino también en vías céntricas como Arjona, Adriano o Marqués de Paradas, introdujo como novedad el componente «vandálico» que han adoptado los jóvenes a la hora de hacer estallar estos artefactos pirotécnicos. «La moda de este año ha sido llamar a los porteros y tirar los petardos a los portales, o echarlos en las papeleras para reventarlas», se lamentó la portavoz de 'Por el Derecho al Descanso', que agregó que «muchas veces lo peor es que no somos conscientes de lo que ponemos en las manos a nuestros hijos». A juicio de la plataforma, restringir el uso de los petardos o limitar su venta «no sirve para nada, porque se siguen comprando igual y muchas veces se diluye la barrera entre los explosivos prohibidos y los que no lo están», razón por la que el colectivo que representa aboga por la prohibición total. Dávila llegó incluso a asegurar la existencia de informes médicos de personas «afectadas seriamente en su audición» por estas explosiones y recordó que 'Por el Derecho al Descanso' ya ha solicitado que en la festividad de la romería del Rocío los cohetes «se tiren al salir de la ciudad, no en casco urbano». En este principio de año 2008 se han registrado varios incidentes relacionados con explosiones pirotécnicas. Así, en Jerez de la Frontera una joven ha perdido un ojo al estallarle un petardo en la cara y en Lepe (Huelva) un niño de cinco años ha perdido dos dedos por la explosión de un petardo. En Sevilla, el incidente más grave en el que se vieron envueltos estos explosivos fue el del presunto parricidio de un joven de 27 años, que apuñaló a su padre al enzarzarse en una trifulca con éste porque, irritado por las explosiones de petardos, el segundo había salido con una escopeta. En la Navidad de 2006, una mujer fue hospitalizada al impactarle un cohete en el brazo en la barriada sevillana de Nervión.