PSICOLOGÍA DIFERENCIAL – TEMA 10 TEMA 10 LA INFLUENCIA DE LA HERENCIA Y EL AMBIENTE EN LA DIVERSIDAD PSICOLÓGICA HUMANA LA POLÉMICA CUESTIÓN HERENCIA-AMBIENTE: UN BREVE RECORRIDO POR EL SIGLO XX. – Cabe Aludir, como punto crítico de referencia, a Galton, quien realizó los primeros estudios de familias o genealógicos y los estudios con gemelos. G. deseaba, en última instancia, la selección humana y la mejora de la raza, acuñando el término eugenesia. – La concepción de la inteligencia como una característica hereditaria alcanzó su punto álgido en las primeras décadas del siglo XX. Terman y cols. llegaron a afirmar el temible papel desempeñado por la deficiencia mental en la producción del vicio y la delincuencia. – La idea de la inteligencia, como una cualidad innata e inmutable que marcaba severas diferencias en la población, comenzó a encontrar detractores a partir de los años veinte, con el nacimiento y auge de la psicología conductista. Sin embargo, la concepción hereditaria continuó extendiéndose en el ámbito académico y aplicado durante la primera mitad del siglo. – Desde mediados, hasta la década de los 80, podemos decir que la polémica herencia-medio, sobre el CI, se decantó por los argumentos ambientalistas. Sin embargo, paralelamente a este auge conductista, una disciplina que había adquirido independencia y carácter propio en los años 60, denominada Genética de la conducta, cuyo objetivo es dilucidar la influencia hereditaria en los aspectos psicológicos o conductuales, venía generando unas investigaciones cuyos resultados proporcionaron una base empírica a partir de la cual ha podido abrirse de nuevo aquella polémica. – En los últimos años, la creencia de que la genética tiene un importante papel en la determinación de las diferencias individuales va adquiriendo cada vez más fuerza, aun sin menospreciar las argumentaciones ambientales. Los modelos interactivos priman en la explicación de la conducta humana. LÍNEAS DE INVESTIGACIÓN ACTUALES. – La PD acude a los conocimientos proporcionados por la genética cuando aborda el intento de explicación de las diferencias individuales en un nivel de causas últimas o distales. Dos líneas de investigación resultan relevantes: La Genética cuantitativa engloba los estudios dirigidos a dilucidar el peso de genética y ambiente en las distintas características en las que los humanos mostramos diferencias. El estudio de los efectos de los genes y cromosomas utilizando técnicas moleculares para conseguir la observación de la composición del material hereditario. El interés se desplaza del cuánto al cómo actúan los genes para producir las diferencias individuales. ESTRATEGIAS CUANTITATIVAS DIRIGIDAS A DILUCIDAR EL PESO DE LA HERENCIA Y EL AMBIENTE. – La Genética de la conducta ha facilitado el análisis del peso relativo de la herencia y el ambiente en la explicación de distintos comportamientos humanos. Sin embargo, no aporta información sobre las causas últimas de los comportamientos individuales, ni tampoco acerca de las causas que subyacen a las diferencias entre grupos humanos. – Los resultados de la Genética de la conducta quedan limitados a informar sobre la proporción en que la variabilidad que presenta un grupo de individuos, respecto a una característica estudiada, se puede atribuir a factores genéticos o ambientales, valiéndose para ello de una metodología estadística. – Con la finalidad de situarnos teórica y metodológicamente en el lugar correcto, hay que distinguir entre Genética de las Poblaciones, Genética cuantitativa y Genética de la conducta. 1 PSICOLOGÍA DIFERENCIAL – TEMA 10 La Genética de Poblaciones. Los primeros estudios que relacionaban los rasgos fenotípicos o manifiestos y los genéticos tenían la pretensión de determinar, para cada rasgo, la existencia de un gen. Tal era el interés de la subdisciplina denominada Genética de Poblaciones, cuyas investigaciones se encuentran dirigidas a dilucidar las reglas y los efectos que tiene, en una población de individuos, la herencia monogenética, es decir, estudiar el efecto de genes particulares sobre aspectos concretos. La Genética Cuantitativa. Surge para hacer frente al estudio de la herencia poligenética, y su objetivo es la determinación, ya no del gen, sino del peso que la herencia, en general, tiene en el aspecto estudiado. La cuantificación de los factores genéticos y ambientales se realiza a través de diferentes diseños y de una metodología estadística que permite estimar, para una variable determinada, su grado de heredabilidad y de ambientalidad en una población. La noción de heredabilidad se entiende como un parámetro expresado en el índice de variabilidad (h2), que oscila entre 0 y 1 y que hace referencia a la proporción de varianza que, en una determinada población o grupo de individuos en los que se evalúa un determinado aspecto, es atribuible a la herencia. La Genética de la Conducta. Su objetivo es la investigación de la influencia hereditaria y ambiental en los aspectos psicológicos o conductuales. Se acoge a un estudio cuantitativo para estudiar la influencia de la herencia. Los estudios realizados en el seno de la Genética de la Conducta han ido evolucionando desde su nacimiento como disciplina científica. En esta evolución es posible destacar tres cambios: o El paso de los modelos monogenéticos, típicos de la Genética de Poblaciones, a los poligenéticos, estudiados bajo la perspectiva cuantitativa. o El paso de una concepción de la herencia bajo la cual se interpreta una relación directa entre genes y conducta, hacia una consideración indirecta de estas relaciones. Actualmente, se asume que la relación entre genes y conducta está modulada por una serie de factores de carácter fisiológico. o El abandono de los modelos aditivos, cuyo objetivo era averiguar la proporción de varianza debida a los factores genéticos y ambientales, a favor de los modelos interactivos. – La Genética de la Conducta propone un modelo lineal en el que es posible distinguir cinco componentes que conforman la varianza fenotípica de un rasgo en una población: La varianza genotípica, referida a la proporción de la variabilidad respecto a una característica que presenta una población explicada por factores genéticos. La varianza ambiental, alude a la proporción que es explicada por factores ambientales. En ella se distingue una varianza ambiental común o compartida por los diferentes miembros de una familia (varianza entre-familias), de otra específica o varianza intra-familiar, atribuible a las experiencias particulares y propias de cada miembro. La covariación entre genes y ambiente, referida a la exposición diferencial de diversos genotipos a diversas influencias ambientales y puede ser pasiva (los padres transmiten el genotipo y el ambiente), reactiva (el genotipo genera en el ambiente una reacción favorable al desarrollo de dicho rasgo) y activa (el sujeto busca el ambiente apropiado). La interacción entre genes y ambiente, relativa a las distintas manifestaciones fenotípicas, ante un mismo entorno, en función del genotipo de los sujetos, así como a las distintas reacciones fenotípicas que pueden producirse partiendo de un mismo genotipo en función del ambiente al que éste sea sometido. La varianza error, dando cuenta de la proporción de variabilidad que no podemos atribuir claramente a factores genéticos ni ambientales. DISEÑOS DE INVESTIGACIÓN EN GENÉTICA CUANTITATIVA. LOS ESTUDIOS DE FAMILIAS. – Iniciada por Galton, se basa en el establecimiento de correlaciones para un rasgo o comportamiento determinado entre los miembros de una misma familia que tienen diferentes grados de parentesco con el sujeto objeto de estudio. 2 PSICOLOGÍA DIFERENCIAL – TEMA 10 – CUADRO 10.3 CUADRO 10.2 A través de los estudios de familiar podemos conocer el límite superior estimado de influencia genética, es decir, tales estudios proporcionan una estimación del valor máximo de heredabilidad. Sin embargo, sus resultados no permiten dilucidar si el parecido observado está causado por el ambiente compartido o por los genes que tienen en común. LOS ESTUDIOS DE GEMELOS . – La argumentación que sigue a las comparaciones entre gemelos monocigóticos y dicigóticos es que si en un determinado rasgo de comportamiento los primeros se parecen más entre sí que los segundos, se puede concluir la intervención en dicho rasgo de factores genéticos. – A pesar de que los estudios de gemelos son más potentes que los de familias, debe quedar claro que establecer una cierta base genética para un determinado rasgo no es lo mismo que afirmar que la causa del mismo sea exclusivamente genética. – En términos generales, a partir de un diseño de gemelos, podemos calcular la heredabilidad para un rasgo utilizando la fórmula de Falconer. Tal fórmula consiste en multiplicar por dos la resta entre la correlación obtenida en la muestra en la muestra de gemelos monocigóticos y la procedente de los gemelos dicigóticos. – En cuanto a los estudios de gemelos y la personalidad, en1976, Loehlin y McNichols pusieron de manifiesto que los gemelos monocigóticos se asemejaban más que los dicigóticos en variables como la dominancia, la sociabilidad, la responsabilidad y el autocontrol. Concretamente, se estimó que la heredabilidad para estas variables, estaba situada alrededor del 50%. Dato que les llevó a concluir que, en estos aspectos, los genes y el ambiente aportan una varianza similar en la variación interindividual de los rasgos de personalidad. – Los estudios realizados durante las tres últimas décadas sobre capacidades cognitivas que han comparado las correlaciones entre resultados de gemelos monocigóticos y dicigóticos, concuerdan en señalar que los primeros muestran unas correlaciones que superan con creces a las resultantes de los gemelos no idénticos en lo que se refiere a competencia verbal (60%) y espacial (50%), ya sean niños, adolescentes o adultos. – Asimismo, la evidencia de un importante genético (50%) en la habilidad cognitiva general (g) es más clara que en ninguna otra área de psicología. – Un dato de interés, surgido a partir de la comparación entre los dos tipos de gemelos, es la influencia que ejerce el factor edad en la variabilidad que presenta el índice de heredabilidad, de forma que los gemelos monocigóticos se asemejan más en cuanto a su inteligencia conforme va transcurriendo su infancia y adolescencia, mientras que los dicigóticos se van haciendo cada vez más diferentes. LOS ESTUDIOS DE ADOPCIONES. – El método de las adopciones está reconocido como el más potente de los que se pueden utilizar en Genética de la conducta, debido a que incluye en su diseño, no sólo individuos que comparten tanto los efectos ambientales como los genéticos, sino también individuos relacionados exclusivamente por los efectos ambientales compartidos (adoptados). – En otros casos, la comparación se realiza entre las características que los sujetos adoptados comparten con sus familias adoptivas y las que comparten con sus familiares biológicos de los que fueron separados al nacer. – Las comparaciones entre los miembros de estas familias nos permiten aislar los efectos ambientales de los genéticos de forma más precisa. Cuando los gemelos han sido criados por separado, a las correlaciones en sus rasgos intelectuales y de personalidad puede atribuirse a un origen genético. Así, los datos recogidos indican que diversas características que van desde el tiempo de reacción hasta la religiosidad, tienen algo que ver con la herencia. – De acuerdo con Plomin, los estudios reflejan la importancia de la herencia en los aspectos de personalidad, aunque, en ningún momento, se desprecia la influencia ambiental. Respecto a la varianza ambiental en las características de la personalidad, apuntan la relevancia que tiene el ambiente específico del individuo, es decir, el no compartido familiarmente, en comparación con la influencia del ambiente familiar. – Desglosando los componentes de la varianza fenotípica, cabría atribuir a la varianza genética un 40%, un 35% a la varianza específica y un 5% a la varianza compartida familiarmente, dejando el 20% restante como varianza error. 3 PSICOLOGÍA DIFERENCIAL – TEMA 10 – Estudiando el método de las adopciones se ha estudiado el efecto de la edad en la determinación del peso herencia-medio respecto a la personalidad. Pedersen señala que con la edad, se iba produciendo un aumento de la influencia del ambiente común en detrimento del peso del ambiente específico, es decir, cuanto mayores son los sujetos más crece la influencia del ambiente compartido familiarmente. – Al igual que ocurre en el caso de la personalidad, el desarrollo de la inteligencia también se encuentra guiado por un plan genético que no actúa de igual forma en todas las edades. – Los estudios combinados de gemelos y adopciones no explican cómo los genes influyen en la personalidad, la inteligencia o el comportamiento social. Son pocos los genetistas que atribuyen a los genes un peso determinante en la explicación del comportamiento, aunque si existe un consenso acerca de la cooperación entre los factores genéticos y ambientales, siendo evidente el papel direccional que, en muchas ocasiones, juega la herencia respecto a los efectos ambientales. – (Ver tabla 10.3 –pgs. 533/4–). – LIMITACIONES DE LA GENÉTICA CUANTITATIVA. La validez del índice de heredabilidad, en cuanto que es una estimación estadística, se ve afectada, fundamentalmente, por dos sesgos: El grado de representatividad que presente la muestra. Muchos de los estudios realizados podrían presentar deficiencias debido a que las muestras elegidas estén sesgadas en algún parámetro. Los posibles errores de medida y los que se derivan de la definición operativa de los fenotipos. – Otro escollo que limita el rigor de los resultados procedentes de la Genética Cuantitativa hace referencia a la falta de medidas ambientales adecuadas para captar la fuente de varianza que constituye las diferencias experienciales entre individuos. – La única distinción que se plantea en este contexto respecto al ambiente, es la segmentación entre el efecto de la varianza común, asociada al ambiente familiar compartido y el efecto de la varianza específica, procedente de las experiencias particulares del individuo. Pero, como es fácil suponer, muchos de los aspectos ubicados en una u otra categoría ambiental se encuentran solapados, cuando no mantienen una estrecha relación. 4