USANDO EL MARCO PARA LA BUENA ENSEÑANZA PARA LA SUPERVISIÓN El Marco para la Buena Enseñanza; si es beneficioso para los educadores dependerá de cómo se use, porque como cualquier herramienta puede ser mal usado. Esta colección de separatas reproducen las partes pertinentes del capítulo 5 del libro de Charlotte Danielson “Mejorando la Práctica Profesional: Un Marco para la Enseñanza”, que entrega orientaciones de cómo familiarizarse con el marco y su uso. Uso del marco para supervisión La teoría de supervisión en uso, establece que para ser efectiva, las prácticas de supervisión deben estar reguladas en gran medida por el profesor. El profesor decide qué pasa en una sala, y la práctica instruccional no se puede mejorar si estas decisiones no son las mejores posibles. El marco puede transformar la evaluación de supervisión, generalmente un ritual sin significado, en un poderoso proceso para la reflexión acerca de la excelencia pedagógica. Procedimientos Por lo general, cada escuela o comuna tiene procedimientos de supervisión y evaluación. Algunas veces, los procedimientos son dictados por la norma legal o por un acuerdo negociado. Generalmente incluyen disposiciones acerca del tipo de información a ser usada y plazos para las diferentes partes del proceso. Habitualmente se requiere un cierto número de observaciones en aula apoyadas por charlas. Debido a que hablando en general, cualquier grupo de criterios puede ser usado como marco para el proceso de supervisión, el marco para la enseñanza puede cumplir ese rol. Determinación de objetivos El proceso de supervisión generalmente comienza con la determinación de objetivos, en ausencia de un marco de enseñanza previamente acordado estos objetivos pueden o no reflejar la principal necesidad de un profesor. Un profesor que se ha involucrado en la autoevaluación y en la reflexión, basándose en el marco de enseñanza, probablemente ha identificado áreas que se pueden beneficiar de una atención concentrada. El supervisor también, ya sea a través de la observación de clases o interacciones con la escuela, puede haber identificado criterios específicos que se beneficiarían de un análisis más profundo. El profesor y el supervisor entonces como un resultado del pensamiento y la reflexión preliminar, determinan conjuntamente las áreas que serán el centro para el esfuerzo del año. Estos objetivos pueden originarse de cualquier parte del marco y, de hecho, pueden incluir una cantidad de distintos criterios. Para profesores menos experimentados, los objetivos pueden ser concentrados en el dominio B (creación de un ambiente propicio para el aprendizaje de los estudiantes). Concentrarse en los criterios identificados, asegura tanto al profesor como al supervisor que de los esfuerzos de supervisión se desprenderán excelentes beneficios para la enseñanza. Recolección de información Inicialmente los objetivos seleccionados por el profesor pueden ser sólo preliminares, necesitando una reevaluación después de una documentación más cuidadosa. Supongamos que un profesor y un supervisor determinan que desean trabajar en el criterio C.2: las estrategias de enseñanza son desafiantes, estructuradas y significativas para los estudiantes. El profesor puede usar varias técnicas para documentar cómo estructura las situaciones de aprendizaje, cómo desarrolla los contenidos, y cómo implementa variadas actividades que involucran cognitivamente a los estudiantes, reuniendo evidencia de apoyo en un portafolio. El profesor también puede usar un plan de instrucción para analizar las actividades respecto a su potencial para involucrar a los alumnos en trabajos significativos. A continuación, el profesor puede examinar un elemento instruccional (tal vez una tarea) y algunos ejemplares del trabajo de los alumnos resultante de ese elemento. Finalmente una clase grabada en video puede ser analizada para ver el grado de compromiso de los alumnos en una actividad instruccional. El supervisor hace una o dos observaciones de clase y documenta ejemplos del compromiso de los alumnos. A continuación, con toda la información a mano –contenidos del portafolio del profesor y apuntes de las observaciones del supervisor- ambos pueden tener una conversación significativa. Juntos, pueden determinar el grado de compromiso de los alumnos por el aprendizaje, con ejemplos del archivo, si es posible incluyendo una grabación en video, y con los apuntes del supervisor. Si corresponde, este es un buen momento para discutir cursos de acción alternativos: qué es lo que el profesor podría haber hecho en un momento preciso para mejorar el compromiso del alumno o cómo podría haber sido estructurada la tarea para acrecentar ese compromiso. Creación de un plan de desarrollo profesional La etapa siguiente en el proceso de supervisión es, habitualmente, la creación de un plan de desarrollo profesional o de un plan de mejoramiento profesional. Este plan se fundamenta en los objetivos conjuntamente determinados y analizados, junto con pasos acordados para fortalecer las habilidades identificadas. Por ejemplo, el plan puede contener una serie de visitas a las salas de otros profesores para observar sus técnicas para 2 involucrar a los alumnos en el aprendizaje; un taller en una organización local y libros o videos en la biblioteca profesional de la escuela. Este plan debería ser manejable –no debe intentar cubrir demasiados criterios de una vez e incluir áreas para las cuales haya recursos disponibles. Tanto el profesor como el supervisor necesitan ponerse de acuerdo en que las áreas seleccionadas para la atención sean, de hecho, las más conflictivas y que los pasos recomendados tengan alta probabilidad de dar como resultado el mejoramiento deseado. Durante este proceso, el profesor debería continuar agregando ítemes a su portafolio para demostrar creciente habilidad en la identificación de criterios. Una relación profesional con un tutor o par capacitador posibilita al profesor el fortalecimiento posterior de estas habilidades. La evaluación del desarrollo profesional La evaluación del desarrollo profesional resultante en una escuela que usa el marco, se lleva a cabo de acuerdo a los procedimientos establecidos. Documenta el progreso que ha hecho el profesor para acrecentar habilidades en diferentes criterios. La evaluación proviene de la documentación que el profesor ha recolectado en un portafolio, así como también de los comentarios que ha escrito el supervisor. La evaluación se refiere al progreso hecho al implementar el plan de mejoramiento profesional y los resultados obtenidos de ese plan. La evaluación conlleva una amplia visión del profesor como de un profesional comprometido en un proceso de mejoramiento continuo. 3