Los cuatro elementos de la administración de estilo japonés (Japanese Style Management) La administración o “management” estilo japonés es el resultado de la aplicación en el Japón de la teoría general de management combinado con las peculiaridades de la cultura, historia y sociedad japonesa. Existen cuatro componentes del management estilo japonés, llamados por los académicos “los cuatro pilares”, a saber: 1. el empleo de por vida, 2. el sistema de antigüedad como base para la escala salarial y los ascensos, 3. los gremios por empresa, y 4. el proceso de toma de decisión consensuada. Estos cuatro pilares no se aplican en la totalidad de las compañías japonesas, o en todas las circunstancias. Solo se dan en las grandes empresas corporativas y de mayor tamaño. Los cuatro elementos variarán dependiendo del sector de que se trate, público o privado, y también de la situación económica del momento, por ejemplo en situaciones de crisis, recesión, crecimiento, etc. De todos modos, más allá de las situaciones mencionadas que influyen en los cuatro elementos, un cierto grado de adecuación debido a la situación de un mundo siempre cambiante es de esperar. 1. El Empleo de por vida El “empleo de por vida” es una modalidad o expectativa por parte del empleado y del empleador. Para el primero de que su puesto de trabajo esta asegurado hasta su edad de retiro, y para el segundo de que el empleado no abandonará la compañía debido a una conveniencia circunstancial dejando un puesto vacante. De lo dicho se desprende que esta práctica no debe ser considerada como una cláusula legal o formalidad contractual contemplada en el ordenamiento legal japonés. La existencia de esta práctica se debe en parte a un 1 fuerte compromiso que los japoneses poseen en relación a las instituciones manifestado a lo largo de su historia. El empleo de por vida conlleva varias implicaciones como por ejemplo: una minuciosa selección de los nuevos empleados, capacitación en el puesto de trabajo, una filosofía compartida de la empresa, el pago por parte de la empresa de una suma compensatoria al momento del retiro, etc. 2. El sistema de promoción y remuneración basado en la antigüedad Hasta un cierto punto, este sistema asegura a todos los empleados el ascenso periódico y automático acompañado del correspondiente incremento en su salario. Este sistema es la contracara ideal a la modalidad del empleo de por vida. Los japoneses mantienen una relación duradera con la compañía en la cual se va ascendiendo hasta alcanzar los propios limites. Por lo tanto, cada individuo alcanza su límite dentro de la compañía, no siendo todos promovidos y remunerados de la misma manera. De esta manera, se constituye una pirámide jerárquica. El sistema basado en la antigüedad se aplica desde el inicio en la empresa hasta algún momento durante la primera mitad de la carrera profesional del empleado. Posteriormente, ya en un cierto nivel de la carrera, el desempeño comienza a tener más relevancia que la edad o la antigüedad al momento de determinar el sueldo y los ascensos. 4. Los gremios por empresa Los sindicatos en Japón están organizados por empresa , y no por actividad. Las condiciones de trabajo, incluyendo los salarios, son determinados por la negociación colectiva entre los gremios de una empresa y la empresa misma.. Si la idea es que un empleado se desempeñe hasta su retiro en la misma empresa, no tendría sentido representar los intereses de los trabajadores de otra empresa cuya situación es distinta y en la cual no llegará a desempeñarse. Muy distinta es la situación en occidente donde los gremios se organizan por actividad, y donde los empleados pueden cambiar de empresa, y los intereses de los trabajadores son compartidos sin importar la compañía en la cual se encuentren. 2 La razón de ser de los gremios por empresa está estrechamente relacionada con la práctica del empleo de por vida que propicia el sistema de promoción y salarios basado en la antigüedad, y debido a que luego de la Segunda Guerra Mundial la política de la ocupación aliada fue la liberalización del movimiento sindical plasmada en la leyes de “Sindicatos” (Trade Union) y “Ajuste de la Relación Laboral” (Labor Relation Adjustment) de 1946. Debido a que los sindicatos y las empresas están estrechamente relacionados, el sindicato no existe como un ente separado de la empresa y no funciona como si tuvieran intereses confrontados. El destino de uno es el mismo que el de la contraparte. La negociación es flexible y tolerante porque el sindicato entiende claramente que existirá en tanto y en cuenta la compañía exista. 4. El proceso de toma de decisión por consenso A pesar de que algunos académicos japoneses no consideran al proceso de toma de decisión por consenso como un elemento de los pilares del sistema de administración estilo japonés, creemos que este 4to elemento comparte las mismas particularidades de los anteriores tres ( ser exclusivo del Japón, incluido en sus tradiciones, y de práctica generalizada). En su forma más común la decisión consensuada se produce cuando una idea inicial o una propuesta de un alto ejecutivo es derivada a un nivel medio para ser tratada por todos aquellos que se verán afectados como consecuencia de la aplicación de la nueva propuesta. La propuesta con todas las observaciones hechas, es luego devuelta a su órgano de origen para su aprobación o eventual veto. El alto ejecutivo toma su decisión de ejecutar o desechar la propuesta en base a los comentarios que los empleados han volcado en un documento (“ringi shoo”). Este proceso es llamado “ringi seido” y el aporte realizado por los empleados se lo denomina “nemawashi” (cabe aclarar que este término se aplica a muchas circunstancias en la vida personal y no solamente al ámbito empresarial). De esta manera el tiempo requerido para la implementación de la nueva propuesta es mucho menor que aquél requerido por las empresas de occidente ya que fue previamente tratado y consensuado. 3 Consideraciones finales Las circunstancias de la economía japonesa han variado desde las décadas de sostenido crecimiento y en los últimos diez años la situación ha sido de estancamiento y hasta recesiva, por lo tanto el empleo de por vida y el sistema de antigüedad han debido ser adaptados a la nueva situación. De todos modos, esto no significa el fin de los cuatro elementos del “management” japonés (en particular los dos primeros ). El gremio por empresa y el proceso de toma de decisión consensuado se mantienen ajenos a la situación económica del momento. En cuanto a si estos cuatro elementos pueden ser aplicados en otros países, creemos que los dos primeros no son aplicables a otras culturas, sin embargo los dos últimos han sido aplicados con éxito en algunos casos. 4