PRIMER CONGRESO LATINOAMERICANO DE GESTION CULTURAL Realizado en Chile entre el 23 y 27 de abril, en la Usach. Por Equipo La Noche El año 2009, a partir del Primer Encuentro Nacional de Gestores y Animadores Culturales realizado en Chile, surge la Red Latinoamericana de Gestión Cultural, con la idea de crear espacios asociativos para los gestores culturales de la región. En este camino, luego de la firma del acta constitutiva de la Red en Maldonado (Uruguay), surge este Congreso, buscando visibilizar las prácticas y procesos de otros gestores, sobretodo de los que no tienen Roberto Guerra, director de la voz pública a nivel de medios de Corporación Cultural de Recoleta. comunicación, que trabajan a diario en sus comunidades. El mundo de la cultura es muy amplio por tanto muy segmentado, con prácticas autogestionadas y otras con financiamiento, que compiten en desigualdad de condiciones. Es por esto que se proponen crear una actoría ciudadana, para que los Estados cuenten con una contraparte que exprese las necesidades reales que el sector cultural tiene. Claudio Di Girólamo, arquitecto y artista visual. “Depende mucho qué entendemos por gestión y cultura, que es más que las bellas artes. La cultura siempre es subversiva y crea algo nuevo. Cuando la juventud sale a la calle, solo vemos a los que destruyen, no vemos a los que crean. Para hacer tortillas hay que quebrar huevos. En la gestión cultural el eventismo no sirve, hay que sembrar, no necesitamos cosechadores que quieran sobresalir, sino gente cooperativa, que sepa que las cosas son muy duras de hacer”. María Teresa Pérez Silva, E m b a j a d o r a Cultural de Chiloé www.embajadorachilota.cl “Se puede trabajar con re d e s , n o t o d o e s d i n e ro . E n S a n t i a g o hicimos el curanto más grande del mundo. Doy clases en la cárcel y a casas de acogida. En Chiloé las actividades se están muriendo, mi lucha es levantar sus pueblos y la cultura chilota. En Santiago ayudo a gente con depresión y a la que está en la droga. Llevo 14 años en El Bosque y 12 en la José María Caro, sacándolos de la droga”. 4 Albino Rubím, Secretario de Cultura de Bahía, Brasil Palacio Rio Branco Bahía “Soy fundador de la Red Latinoamericana, propiciador del intercambio de cooperación entre los países de América Latina. En el proceso de profesionalización de la gestión cultural, es preciso que las personas estén preparadas para esto. Una buena gestión mejora la cultura. En otro orden es bueno hablar de diálogos interculturales, porque la cultura siempre intercambia y comparte”. Daniel Jadue, Alcalde de Recoleta. Chile. “La gestión cultural no se queda solo en la cadena de valor de la obra de arte, sino con el valor del arte y la cultura en particular, porque cuando el arte y la cultura asume su rol de primera línea en el cambio cultural, facilita los procesos sociales y políticos. Muchos nos han querido convencer durante años, que el arte y la cultura están separados de la política, y eso dificulta la llegada de las utopías al pueblo. Cuando potencias a la red de gestores culturales, potencias a los artistas jóvenes, no a los que hacen arte y cultura rescatando la identidad del Siglo XIX y XX, sino aquellos que crean con el sueño y la identidad del Siglo XXI, ahí es donde comenzamos a dinamizar los procesos sociales. Hay que recuperar el rol de vanguardia del arte y la cultura en los procesos sociales de nuestra América”. Paulina Soto Labbé, investigadora chilena paulina.sotolabbe@gmail.com “Aquí se ha instalado la propuesta del pensamiento vivo y propio en la gestión cultural, con características periféricas independientes de los países europeos o americanos. El perfil latinoamericano es la inminencia del hacer y tiene la cualidad de no perder lo que experimenta en el saber haciendo. Lo perdemos cuando lo traemos forzadamente al ámbito de la academia y lo instalamos en lo conceptual de una disciplina. Es un campo de conocimiento que parte desde la empiria. Es mucho más que un trabajo, porque establece vínculos y lazos con el entorno y los sujetos, por tanto con su historia. Es un campo de saberes que se origina en la experiencia práctica. Vivirlo como los burócratas versus los artistas es una tontera. Es un conocimiento integrado que no separa lo empírico de lo teórico”. Rafael Morales, gestor cultural del Ayuntamiento de Sevilla, España. “La transculturalidad se aplica en territorios donde hay más de una identidad. Está en tránsito entre las personas y supone un cambio de paradigma, porque en el momento que aceptas que tu propia identidad va a evolucionar hacia una nueva, de alguna manera está afectando al otro. La interculturalidad es un intercambio entre dos identidades, pero cada una tiene su sitio. La multiculturalidad a veces no se contacta entre sí, Pero la transculturalidad implica que más de una identidad se desplaza a la identidad de otro y eso supone una evolución como ser humano y como comunidad. El trans es una preposición que significa a través de: cambiar sin olvidar el origen, supone ir desde donde vienes, a otro lugar, es una promesa de un cambio. Debemos aceptar que en el ser humano todo es cambio”. Una vez iniciado el debate surgen tensiones propias del rol del gestor, muchas veces reñidos con los artistas, sin embargo al fragor de las posturas ambos papeles se complementan, el artista debe obrar y el gestor gestionar. Uno de sus organizadores fue Roberto Guerra, director de la Corporación Cultural de Recoleta, institución organizadora que junto a la Usach, acogió a más de 400 personas que los visitaron, dice Guerra: “Esta naciente profesión es mucho más que hacer proyectos: genera procesos de participación ciudadana y moviliza capacidades creativas en las comunidades, por lo que requiere combinar la práctica y la formación académica”. Maricela Kaufmann, Mujeres creativas Labtayula, Nicaragua www.klauna.com Maricela.kauffmann@gmail.com “La gestión ha crecido en el continente. El gestor tiene un papel asignado como activista, no solo un teórico, es un filósofo y un pensador, con un lazo en la comunidad”. Ramiro Caiza, Casa de la Cultura de Quito, Ecuador. Av 6 de diciembre vramiro1904@hotmail.com “Los procesos de integración deben pasar por la cultura. La gestión permite el ejercicio de un pensamiento crítico, reflexivo e ideológico cuando hay una gestión comprometida” 5 Carmen Valenzuela, Universidad de Guadalajara, México. Av. La Paz 2453, www.udgvirtual.udg.mx carmen.valenzuela@redudg.udg.mx “Vemos importante la participación de las universidades en el eje de formación, para tener el gestor que se requiere en la intervención de los espacios públicos”. Andrea Revilla, Dirección de Educación Continua Universidad del Claustro de Sor Juana, México. www.elclaustro.edu.mx arevilla@elclaustro.edu.mx “El gestor es un constructor de puentes, que invita a los agentes sociales a incluirse como agentes de cambio. El día que el gestor cultural no sea necesario en el sector laboral, será porque las personas son responsables de manera activa de sí y de los otros”. Rafaél Chavarría, coordinador cultural de la Usach, contraparte del Congreso. “El asunto es la profesionalización del relato de la gestión cultural y que deje de ser una técnica, no solo en los estudios de caso, sino en dar categoría, por ejemplo los gestores de los años 70, que no pasaron por la academia, fueron sus propias identidades culturales lo que los obligó a desarrollar el oficio y el contexto”. Fabiola Leiva, Docente Universidad de Valparaíso Egac. www.laboratoriocultural.cl fabiolaleiva@hotmail.com “Lo que ha hecho Brasil es relevante, con su gran política pública. El proyecto Territorios y ciudadanía, también Los puntos de cultura que desarrolló Lula. Resolviendo la cultura junto a otras necesidades y problemáticas, que va más allá de lo artístico. Como el tema indígena y migración, que no han sido abordado por la cultura”. Aquí se reúne una red ciudadana que quiere crecer. Llegaron por sus propios medios de EE.UU, México, Nicaragua, Costa Rica, Panamá, Venezuela, Ecuador, Colombia, Uruguay, Brasil, Perú, Bolivia, Argentina, Francia y España. El congreso no cuenta con financiamiento público y no tiene fines de lucro. Destacado es el esfuerzo de Recoleta, una comuna pequeña, con poco presupuesto, liderando esta iniciativa de vanguardia, nos dice Guerra: “Esto forma parte de la apuesta y compromiso que el municipio tiene con la cultura, por lo que es natural que seamos parte de este proceso”. Aquí se juntaron grandes crack de la cultura con gestores comunitarios, que debatieron en el marco de un congreso de nivel internacional. El arte no estuvo ausente con la presentación de Francesca Ancarola, el Gran Circo Teatro, la agrupación Rumbambuqueando (Colombia), Morenada “Fanáticos del folclore” (Bolivia) y el Colectivo “Mil guitarras para Víctor Jara”. Más de 60 ponencias, paneles y mesas de trabajo, dieron vida a los contenidos que resumimos con la opinión de sus participantes. Marcelo Sebrian, Ninoska Piañeri, abogado, gestor cultural, del Instituto de derechos culturales del Colegio de abogados, Sarmiento 54, Bahía Blanca, Argentina msebrian@bvconline.com.ar “Se desprenden dos líneas de este congreso: la de g e s t o re s c u l t u r a l e s f o r m a d o s académicamente y los empíricos. El gestor necesita tener los pies sobre la tierra para gestionar, es un hacedor de realidades. El artista se debe volar y el gestor no se puede permitir volar. Hay que optar entre ser gestor o ser artista”. estudiante de gestión cultural, chilena. “Como futuros gestores debemos concebirnos como agentes sociales, más que dirigentes culturales, para que la comunidad pueda participar y organizarse y cuando comience a ejercer su rol social, habremos dejado la tarea cumplida. Creamos espacios en la comunidad, más que ser intermediarios o conductores de artistas. Como el Estado no se hace cargo, somos los responsables de estas instancias”. 6 Edgar Flores, del grupo Chasqui, Asociación de cine comunitario, Malecón Grau 927, Chorrillos, Lima Perú efmego@hotmail.com “Muchas veces el gestor aparece como un héroe cultural de un barrio y no empodera a la comunidad en una práctica sostenida. La profesionalización refuerza el perfil del héroe, el gestor debe ser un facilitador de procesos para la comunidad. No se debe perder el objetivo que el proceso es para mejorar la calidad de vida de la población, empoderando horizontalmente a la comunidad”.