CIUDAD. Proyecto de remodelación en el puerto

CIUDAD. Proyecto de remodelación en el puerto
PLAZA SOTOMAYOR: Los cerros de Valparaíso llegarán hasta el mar
Jorge Molina
El arquitecto Cristián Undurraga se adjudicó el concurso para remodelar el principal espacio
público del puerto, rescatando la primitiva unión de la vegetación de las quebradas con el borde
del océano.
JORGE MOLINA
Valparaiso
Apelar a las raíces en una ciudad que se precia de una rica identidad propia fue la gran
apuesta del arquitecto Cristián Undurraga para ganar el concurso público para la remodelación
de la Plaza Sotomayor de Valparaíso, el principal y más tradicional espacio público del puerto.
"La Plaza Sotomayor es sin dudas el corazón de Valparaíso, conectando los cerros Alegre y
Cordillera. Allí y en sus alrededores inmediatos se sintetiza la historia del puerto, y la plaza es
el espacio público por excelencia, el lugar que congrega. El recuperar esa cualidad de lugar de
encuentro y reunir el pasado, el presente y el porvenir en un espacio ciudadano es el desafío",
señala Undurraga.
Será una intervención de 21 mil metros cuadrados y más de $2 mil millones que comenzaría a
ser ejecutada a mediados del próximo año, que incluye la Plaza de Justicia y el muelle Prat, y
que el arquitecto solucionó pensando siempre a Valparaíso como "un continuo entre los cerros,
el plan y el mar, en un vínculo que es indisoluble".
Por ello apeló a los cerros, y lo que ellos proveían desde antes de la llegada de la expedición
de Juan de Saavedra en 1536: abundante vegetación marcada por la palma chilena, que se
derramaban por las laderas como vigías de la bahía, y mucha agua proveniente de las
quebradas.
El proyecto incorpora una línea de palmas a cada lado de la plaza -34 en total-, como una
suerte de columnas que reestructuran el vacío urbano y restablecen el encuentro entre los
cerros y el mar, alejados por el espacio ganado al océano a lo largo de los siglos.
Tiene además un motivo práctico: "es la especie vegetal que destaca en el paisaje de los
cerros, pero también es la única especie con características urbanas cuyo follaje no obstruye la
vista hacia los edificios circundantes", explica Undurraga.
La idea es prolongar este reencuentro hacia los cerros construyendo un jardín junto a una
escala peatonal que conecte la Plaza de Justicia con el museo Baburrizza, en el cerro Alegre.
Sería un espacio inédito en Valparaíso, uniendo el plan con los cerros mediante un parque que
recree la vegetación original del puerto. Lo mismo propone para el sector del cerro Cordillera
que asoma bajo la antigua casona del museo Lord Cochrane, colocando hiedras que caigan
sobre la ladera.
Agua de la quebrada San Agustín
La historia de la explanada en que se encuentra la plaza está ligada a las quebradas que la
rodean y a las antiguas inundaciones estivales, por lo que el proyecto propone un pequeño
canal de agua de cauce controlado, que podría ser cerrado para eventos masivos.
"El agua que desciende por la quebrada San Agustín, entre los cerros Alegre y Cordillera,
continúa por un colector que cruza la plaza hasta el mar. Su presencia en nuestra propuesta,
además de su valor intrínseco, hace presente el cotidiano curso de las aguas", señala
Undurraga.
La luz también jugará un rol fundamental, ya que según el arquitecto permite dar dramatismo a
las fachadas y palmas que conforman la plaza. "La idea es crear un ambiente metafísico, que
además de hacer grato y seguro su uso nocturno, le otorgue una percepción más dramática,
distinta a la imagen cotidiana del día", agrega.
Proyectores dirigibles para las palmas, focos embutidos para un "baño de muro" a los edificios
y un nuevo sistema de iluminación que realce la nobleza escultórica del monumento a Prat
crearán el ambiente, así como líneas de luz sobre el piso cubiertas por cristal templado que
evocan "las huellas de la gente que está ahí en la plaza", señala Undurraga.
Líneas de piedra granítica roja marcarán en el suelo los límites históricos del mar en el sector,
los que se fueron modificando a medida que la ciudad ganaba terreno, acompañados de planos
históricos fundidos en placas de bronce, una suerte de libros abiertos para mostrar el desarrollo
del puerto.
En este escenario el espacio para los peatones tendrá un rol fundamental, por lo que la idea es
modificar los accesos existentes para estacionamientos y el museo in situ, así como las vallas y
el jardín del monumento a Prat para integrarlo definitivamente a la plaza. Lo mismo ocurrirá con
el tráfico vehicular, eliminando la circulación perpendicular al mar.
"La idea del proyecto es recuperar un equilibrio en la Plaza Sotomayor entre peatones y
vehículos, que hoy son dueños del lugar. Hay una gran entrada a los estacionamientos, que
hemos readecuado para despejar el área y evitar el conflicto con quienes recorren la plaza
hacia el mar. Reorganizando el tránsito permitimos que las fachadas de los edificios queden
hoy disponibles para poner allí cafés y zonas de estancia, recuperando la posibilidad de estar
en la plaza", explica el arquitecto.
El estacionamiento de buses de turismo se realizará en un lugar aledaño, y algo similar ocurrirá
en la Plaza de Justicia, donde se propone un estacionamiento subterráneo en un área que hoy
está saturada de vehículos estacionados.
"Hay que entender que este lugar articula el acceso hacia una zona tan rica como el paseo
Yugoslavo, y la estrategia propuesta se complementa con el paseo peatonal paralelo al
ascensor El Peral", agrega.
Ello irá acompañado de seis cámaras de seguridad para desincentivar actividades ilegales
como la venta callejera y favorecer las manifestaciones públicas y actividades culturales en la
plaza, así como bancos de hormigón y granito que definan áreas y lugares de instalación de las
mesas del comercio.
Todo el equipamiento urbano que lo requiera contará con sistema braille, e incluso el proyecto
considera cambios de textura en los pavimentos para facilitar la movilidad de los no videntes.
Plaza del Puerto
El acceso al muelle Prat se realizará por una rampa peatonal que pasa bajo la vía de los
camiones que circulan constantemente entre los distintos sitios de atraque del puerto,
descendiendo hacia el mar. Allí, una plataforma-muelle flotante y articulada para responder a
los cambios de mareas ordenará las lanchas de turismo.
"Esta segregación se hace cargo de la seguridad de los turistas y agiliza el paso de los
vehículos de carga frente a las zonas de terraza propuestas", explica Undurraga. Dichas
terrazas se ubicarán entre la calle y los edificios que enfrentan al mar, elevadas sobre la
calzada y separadas por un cerco vegetal.
Tendrán además un techo que recreará una atmósfera de estación, ya que como recuerda el
arquitecto, "el puerto es, además de zona de carga, una puerta de acceso para quienes nos
visitan". Una puerta que, a partir de este proyecto, recuperará simbólicamente la comunión con
los cerros perdida hace siglos.
Breve historia de la plaza
La Plaza Sotomayor está construida casi íntegramente sobre terrenos ganados al mar,
reflejando como ningún otro espacio la historia de la ciudad. Sobre lo que fue originalmente una
explanada por donde descendían los lodazales y aguas de la quebrada San Agustín (hoy calle
Tomás Ramos), se encontraba unida originalmente a la Plaza de Justicia. Recién en 1831 se
inició la construcción del primer muelle en regla, actualmente en el museo in situ bajo la plaza.
Hacia mediados del siglo XIX se comenzaron a instalar allí unas pobres bodegas, posadas y
hoteles, y en 1855 nació allí el primer banco de Chile. Su carácter de plaza cívica surgió con la
construcción del primer correo en 1868 y del edificio del cuerpo de Bomberos, los que fueron
sustituidos en la primera mitad del siglo XX por obras de arquitectura moderna. El ferrocarril
comenzó a cruzar frente al muelle en 1876 por calle Errázuriz hacia el barrio Puerto, y ese
mismo año se levantó el edificio que ocupa actualmente la Compañía Sudamericana de
Vapores. En 1885 se demolió la bolsa de comercio para instalar allí el monumento a los héroes
del combate naval de Iquique. En la década de 1930 el alcalde Lautaro Rosas decidió
regularizar las líneas de edificación, demoliendo algunos edificios y renovando gran parte
circundante, construyéndose el nuevo puerto y la administración de Aduanas.
Imagen digital que muestra el embarcadero según el proyecto ganador de la Plaza Sotomayor
de Cristián Undurraga. Se accede por una rampa bajo nivel, se propone en edificios contiguos
un museo del mar y en la zona de actual restorán "Bote salvavidas", la ubicación del acuerdo
de Valparaíso.