Seminario de Literatura para niños y jóvenes Núcleos problemáticos en el proceso de construcción del discurso Trabajo final Profesora: Lidia Blanco Stefano, de María Teresa Andruetto Diana Alicia Schcolnicov dianatalko@fibertel.com.ar Tel: 4582-3517 Introducción Las ficciones que leemos son construcción de mundos, instalación de “otro tiempo” y de “otro espacio” en “este tiempo y este espacio” en que vivimos. María Teresa Andruetto1 Stefano narra la historia de un adolescente que emigra de Italia a la Argentina después de la Primera Guerra, allá por los años treinta. ¿Cómo definir “adolescencia” en la actualidad? En las últimas décadas se han modificado las fronteras de edad como resultado de cambios culturales y tecnológico-mediáticos. Acerca del término “adolescente” existen controversias y desacuerdos entre psicólogos, sociólogos, endocrinólogos y neurólogos. Además, la cultura juvenil pasó a tener más y más presencia como sujeto de consumo. La moda, la música, el manejo de las nuevas tecnologías tienen principalmente al joven en la mira. El paso de un “modelo de identificación” con los padres a un “modelo de experimentación”, que prioriza el reconocimiento de los pares por sobre el de los adultos, constituye un verdadero cambio de paradigma. Por otra parte, se ha alargado el período de escolaridad, y consecuentemente la mayor permanencia del joven en el hogar paterno. Todo esto sumado a la crisis de empleo y la imposibilidad de lograr independencia económica. De modo que se puede considerar adolescencia a un período que se extiende bastante más allá de los veinte años. Ahora bien; los parámetros en que se basa el informe anterior, describe un perfil de adolescente típico de clase media urbana, pero existe más de una realidad, grupos familiares deshechos ó con lazos familiares débiles donde el hambre y el hacinamiento son realidades diarias. Allí vemos niños tratando de ganarse la vida de cualquier modo, atrapados en un círculo vicioso donde es común denominador la deserción escolar, la violencia, el delito, por citar sólo algunos rasgos. La novela que vamos a analizar está destinada a un público joven. ¿Cuál es el lector implícito de esta historia? Si es un joven con cierta competencia literaria el que probablemente va a leer este libro, sin duda reconocerá que más allá de las décadas que los separan, la realidad es que en aquel tiempo, el hambre era de la Europa de la posguerra, y América en el imaginario de entonces era la esperanza, la riqueza, la abundancia. Ha habido cambios, es claro. La Declaración de los Derechos del Niño prohíbe el trabajo infantil, pero ello no siempre se cumple, sobre todo en las tareas que realizaba Stefano, como peón de campo o en un circo itinerante. Es también objeto de reflexión en el texto que nos compete la historia de Tersa Williams, personaje muy influyente en la vida de Stefano - inmigrante ella también- víctima del abuso de sus jefes, prostituida y privada de libertad para elegir un futuro más digno. Un caso de violencia de género que vale la pena discutir con los jóvenes, y creo que el rol de los mediadores tiene mucho que ver en este aspecto. Escribir para los jóvenes en la actualidad es un verdadero desafío. Al respecto es muy valioso rescatar las palabras de Emili Texidor2: 1 Hacia una literatura sin adjetivos 2 Emili Texidor: ¿Pero qué leen los adolescentes? 12° Jornadas de Bibliotecas Infantiles, Juveniles y Escolares 27,28 y 29 de mayo de 2004. Salamanca. Fundación Germán Sánchez Ruppérez. (p.115) 1/8 “La lectura ya no es el instrumento único y quizás tampoco el ideal en estos tiempos para construir el imaginario de los jóvenes. Pero los escritores, editores..., todos los que amamos los libros y confiamos en la capacidad única de la palabra, la de elevar la civilización de las generaciones, debemos trabajar como si lo fuera y ofrecer textos espléndidos para atraer a los jóvenes al uso de esa arma de ordenación y expresión, de pensamiento y sanidad, que es la palabra, la novela, el ensayo, la poesía”. También Texidor se plantea el grado de complejidad que debería esperarse de un texto orientado a los jóvenes: (…) el lector joven se sitúa entre las dos etapas que consideran al lector como pensador, con textos todavía transparentes y con un gusto acentuado por la tragedia, y al lector como intérprete, en el que se tropieza con los primeros textos problemáticos…3. Este trabajo está centrado en el análisis del discurso de la novela de Andruetto, con la mirada puesta también en los personajes femeninos. “La literatura juvenil resulta un buen estímulo para orientar la búsqueda de realidades diferentes a las que suceden en la vida de todos los días.” En este sentido, Stefano ilustra el espíritu de la cita, tomada en uno de los encuentros del Seminario. El relato confronta al joven lector con otro adolescente que debe atravesar zozobras y aventuras en otra época y circunstancias, pero la amistad, la sexualidad, el primer amor, el miedo y la culpa son temas universales con los que un adolescente puede identificarse más allá de la época y circunstancias, Datos biográficos de la autora Leamos primero lo transcripto de la página www.teresaandruetto.com.ar María Teresa Andruetto nació el 26 de enero de 1954 en Arroyo Cabral, hija de un piamontés que había adherido al movimiento partisano y llegó a Argentina en 1948, y de una descendiente de piamonteses afincados en la llanura. Se crió en Oliva, en el corazón de la Córdoba cerealera, un pueblo marcado por la existencia de un asilo de enfermos mentales que, en tiempos de su infancia, era considerado el más grande de Sudamérica. En los años setenta estudió Letras en la Universidad Nacional de Córdoba. Después de una breve estancia en la Patagonia y de años de exilio interno, al finalizar la dictadura contribuye a formar un centro especializado en lectura y literatura destinada a niños y jóvenes, ejerce la docencia, y coordina talleres de escritura, todo ello en la ciudad de Córdoba. En 1992 su novela Tama obtiene el Premio Municipal Luis de Tejeda y a partir de esa circunstancia comienza a publicar la escritura que tiene acumulada. Así, se suceden las ediciones de Tama, Palabras al Rescoldo, El Anillo Encantado y Misterio en la Patagonia, todas ellas en 1993, principio de una serie de publicaciones que no ha cesado y que incluye, entre otros libros, las novelas La mujer en cuestión, Stefano, Veladuras y Lengua Madre , el libro de cuentos Todo movimiento es cacería , los poemarios Kodak, Pavese y otros poemas y Beatriz , y los libros para jóvenes lectores, Huellas en la arena, El árbol de lilas, Benjamino, Dale Campeón, La mujer Vampiro, El país de Juan, El caballo de Chuang Tzu, Trenes, Agua Cero, La Durmiente y El Incendio. Su obra ha sido reconocida con numerosos premios y distinciones, entre otros: Premio Novela del Fondo Nacional de las Artes, Premio Novela Luis de Tejeda, Premio Internacional de Cuento Tierra Ignota, Lista de Honor de IBBY, Finalista del Premio Sent Sovi/Ediciones Destino, Finalista Premio Clarín de Novela y, en varias ocasiones, White Ravens de la Internationale Jugendbibliothek, Mejores Libros del Banco del Libro de Caracas y Destacados de la Asociación de Literatura Infantil y Juvenil Argentina. Tiene dos hijas y vive con su marido en un paraje de las sierras cordobesas. ◊ Tengo en mis manos un recorte reciente del diario Clarín, que reproduzco: Distinción literaria La escritora María Teresa Andruetto obtuvo el Premio Iberoamericano SM de Literatura infantil y juvenil. El jurado destacó “la búsqueda de equilibrio entre el lenguaje narrativo y poético”, del total de la obra de la escritora argentina. (Clarín, 23/10/09) 3 Idem (p. 112) 2/8 ◊ María Teresa Andruetto nos visitó en uno de los encuentros durante el Seminario, y me impresionó como una mujer muy cálida, de sonrisa abierta tanto como su mente y su disposición al diálogo. Intercambié algunas palabras con ella donde le planteé ideas e interpretaciones surgidas de la lectura de Veladuras, y me despedí de ella con la dulce sensación de haber sido escuchada. ◊◊◊ Breve reseña del libro Stefano es una novela realista que narra la historia de un chico de doce años que se despide de su madre viuda y de su pueblo natal en Italia y parte con un grupo de amigos a “fare l’America”.En este verdadero viaje de iniciación se ve confrontado con la muerte, el trabajo, la sexualidad, y un mundo desconocido. Hay muchas despedidas a lo largo del relato, pero también un volver recurrentemente a la memoria de su madre lejana, quien finalmente lo guiará más allá de la muerte a su destino final, donde lo encontramos ya adulto y esperando un hijo. Esta es una novela de crecimiento y aprendizaje que aborda el fin de una etapa y el comienzo de otra. El análisis de la obra está organizado siguiendo los parámetros dados por Gemma LLuch 4 Los paratextos María Teresa Andruetto: Stefano. La pluma del gato/ juvenil. 3°ed. Buenos Aires. Primera Sudamericana. Tercera edición. Julio 2008. Existen dos ediciones anteriores: en la misma editorial en 2004 y en la Colección Sudamericana joven. en1997. El logo de la colección figura en la tapa (abajo a la izquierda) al igual que el dibujo del gato con la pluma (arriba a la izquierda). El título cumple la función de identificar al protagonista por su nombre y origen. El diseño de tapa es de Helena Homs y está realizado en colores, fundamentalmente marrones y verde- azulado. Muestra en primer plano y en medio perfil la cara de un joven de ojos almendrados, cejas muy negras al igual que sus cabellos bajo un sombrero ridículamente pequeño. Igual de pequeño en proporción a la cabeza es su torso, vestido con una chaqueta marrón, y un pañuelo blanco anudado al cuello a la manera de un guapo del novecientos. La mirada del joven se dirige, desde el muelle en que se encuentra, al océano por donde se acerca un vapor La contratapa muestra al vapor incendiándose, y al humo negro saliendo por las dos chimeneas. De modo que esta ilustración narra el texto desde la tapa. La mirada del joven parcialmente vuelta hacia atrás nos habla del recuerdo, que de eso trata el relato. La contratapa reproduce un breve resumen de la historia, dos líneas de un crítico, un párrafo de la autora acerca del libro, y una reseña biográfica de la misma. Son en total tres párrafos. También incluye la edad sugerida: a partir de 14 años. Las ilustraciones, realizadas por Daniel Roldán, están dispuestas del mismo modo que en los otros textos de la misma colección(al menos de los que he leído): uno pequeño y recuadrado al inicio de cada capítulo sobre la margen derecha, y cuatro a página entera, son en blanco y negro y narran desde lo visual las secuencias claves o núcleos de acción del relato en cada capítulo La novela está dedicada a su padre. En la página siguiente y precediendo al relato, dos textos en italiano de Cesare Pavese, tomados del meciere di vivere (Giulio Einaudi editori, Turín, 1952). Leemos la traducción al pie de página y comprendemos que ambas citas refieren al tiempo, la memoria y la resignificación de los recuerdos. En el epílogo (p.91) la autora explica la génesis del relato, inspirado en la vida de su padre, y reflexiona sobre el poder de la escritura para recuperar sensaciones y conocer más sobre uno mismo. El libro, que consta de noventa y un páginas, está dividido en capítulos numerados del uno al cuatro, y el índice se encuentra al final. Estructura narrativa La trama está construida con el relato de dos narradores: 1) Relato focalizado externamente por un narrador en tercera persona Las secuencias son narradas desde el punto de partida hasta el final. 2) El narrador en primera persona, desde el punto de llegada, recuerda. 4 Lluch, Gemma:Cómo analizamos relatos infantiles y juveniles.Grupo Norma. 2005 3/8 En un segundo nivel de lectura, descubro que la estructura narrativa está construida partiendo desde el presente del narrador que repasa su pasado, junto a Ema, su mujer. Si suponemos que corre el año 1930 cuando Stefano, a los doce años se va, el Tiempo cero lo ubicaremos en 1938, cuando el que narra tiene veinte años. La trama entonces recorre el período entre esas dos fechas imprecisas, y las analepsis que se suceden a lo largo del relato, resultan saltos que van a iluminar un instante, o breves lapsos del pasado, donde la figura de la madre y su vínculo con el hijo y con la tierra donde yace su marido muerto, adquieren una dimensión cada vez más clara. En el siguiente diagrama trataré de representarlo. T0 significa tiempo cero, La flecha del tiempo (horizontal) tiene doble dirección porque retrocede al T1 y desde allí avanza. Las flechas verticales son las analepsis. El tiempo en el relato La historia abarca un período de ocho años, y arranca con Stefano a los doce años y nos cuenta su vida hasta los veinte. No hay marcadores temporales que indiquen claramente el paso del tiempo, sino que se usan para describir aspectos puntuales de una situación o secuencia determinada y en forma vaga: Aquella vez, bajo la lluvia, Lina le dijo..(p.40) Al terminar el día, Stefano busca a Lina (p.40) Recuerdo que era otoño, una siesta de otoño (p.46) Esta mañana de sábado, este abril (p.42) Tres, cuatro semanas, es lo que demoran en cada pueblo (p. 72) Un gran desafío para el lector consiste en inferir cuanto tiempo pasa entre una secuencia y otra. El primer capítulo recorre quizás un par de meses, ya que relata la despedida y el azaroso viaje donde sobrevive al naufragio. En los tres capítulos que siguen el narrador acelera los tiempos de la trama. ¿Cuánto tiempo estuvo como peón en Montenievas? Aparentemente seis años, porque tiene dieciocho cuando comienza su relación con Tersa - diez años mayor que él - dato que el lector descubre en un diálogo. 4/8 El escenario: De los Apeninos a los Andes Stefano es una historia de inmigrantes, que está marcada por el viaje de Europa a América. En la Argentina Stefano también migra de una provincia o pueblo a otro. Su periplo podría resumirse de esta manera: Airasca→ Genova→ Buenos Aires→ Chacharramendi(Patagonia) →Rosario Montenievas (La Pampa)→ varias provincias→ Marcas lingüísticas El narrador en tercera persona usa fundamentalmente el tiempo presente indicativo . Los sucesos así narrados semejan el informe producto de alguien que observa y toma notas.” Se limita a informar lo que él puede captar a través de los sentidos”. (LLuch p.74) Duermen en literas… (p.17) Vuelve a soñar con Gina… (p.17) Cuando el sol baja, Pino y Stefano salen a caminar por la ribera. (p.32) El narrador en primera persona usa el pretérito imperfecto, que describe una acción que se quedó fijada en el pasado y en el recuerdo. Debajo de la casa estaba el establo. (p.16) Yo le pedía que viniéramos a América (p. 26) Ambos narradores alternan el discurso directo y el indirecto. Él dijo: ¿Doña Chiara? En la esquina. La casa de la puerta verde. Yo le pedí un vaso de agua y me senté en la vereda. Él preguntó: ¿Viene de lejos? (p. 86) Stefano pregunta si conoce a una tal Chiara Martino (…). En la otra esquina, dice, en la casa que tiene la puerta verde. Después pregunta: ¿Es del Norte?(p.88) La voz de la madre está impresa en negrita siempre. Esa voz que resalta atraviesa todo el relato. El narrador nunca identifica a su madre por su nombre sino como “ella”, hasta que la describe, en su eterno luto desde que enviudó: Se llamaba Agnese, pero casi nadie la llamaba por su nombre. Vestía de negro, de negro hasta las enaguas. Desde que mi padre murió, no hizo otra cosa que arrastrar ese carro. (p.18) El idioma italiano adquiere una dimensión especial en el relato. Como lengua materna, el sonido de las palabras está mixturado con olores, sabores y ritmos que apelan a la emoción más primaria. En la última página la autora revela que muchas canciones, comidas y frases usadas fueron parte de su propia historia familiar. Marcas estilísticas El lenguaje del relato es simple en cuanto a sintaxis y léxico; con oraciones cortas y escasos conectores y subordinadas, lo cual crea el efecto de oralidad. También los adjetivos son pocos, y la tensión dramática se manifiesta fundamentalmente en el comportamiento de los personajes. Esa economía de palabras y adjetivaciones, que podría definirse como “minimalista”, refuerza el dramatismo de las escenas, donde menos es más. Por ejemplo, un tema recurrente en las secuencias en que Stefano recuerda a su madre y su pueblo es el hambre y las carencias de todo tipo, y lo narra así: Nos calentábamos con el aliento de las vacas. Teníamos muchos animales, pero los fuimos vendiendo, hasta que sólo nos quedó esa vaca. (p. 16) ¿Alcanza?, pregunto. Para esta vez, dice. ¿Y mañana? Dios dirá. (p. 21) Otra estrategia narrativa consiste en describir una misma secuencia desde dos puntos de vista: En la vidriera abarrotada hay un instrumento para hacer música […] ¿Cómo hay que hacer para que suene? Pregunta Stefano Y el hombre contesta: Hay que soplar. (p.44) Recuerdo que era otoño, una siesta de otoño, y que en la vidriera, entre los trastos, vi una tuba… Recuerdo que le pregunté: ¿cómo tengo que hacer para que suene? Hay que soplar-me dijo el hombre de la tienda. Y yo soplé (p. 46) 5/8 Si bien se describe una misma situación, la segunda secuencia agrega información acerca del momento y de la acción que sucede a la pregunta. Se me ha quedado, Ema, el olor de los zapatos viejos y el otro, más fuerte, del tabaco que Don José masticaba.(p.86) El olor de los zapatos le llega antes incluso que la imagen del hombre… (p. 88) El primero resulta más intimista y acerca al narrador con el narratario. Los personajes Los personajes principales son tres: Stefano, su madre y Ema. ¿Quién es Ema, el narratario? Como en otros trabajos de Andruetto, a medida que avanza la narración se van descorriendo velos y la identidad del narratario se devela con pequeños destellos, casi en cuentagotas: Quién es, Ema?(…) No lo sé, un hombre.(p. 89) Quien formula la pregunta supuestamente es Chiara, la amiga que la madre de Stefano le hizo prometer que buscaría, y Ema es su hija, ahora la mujer de Stefano que espera un hijo de ambos. Stefano no conoció a su padre, que murió en la guerra del Piave. Su madre conserva una foto suya borrosa, y le cuenta a su hijo que tiene sus mismos ojos. La descripción de Stefano niño se instala en las primeras líneas, desde el punto de vista de la madre, que lo mira alejarse, destacándose el uso de adjetivos que describen aspectos físicos, de su personalidad, sus ropas y su vulnerabilidad frente a los riesgos que sin duda va a correr: Distinguió, por sobre la distancia que los separaba, los tiradores derrumbados, el pelo de niño ingobernable, la compostura todavía de un pequeño. Sabía que correría riesgos, pero no dijo una palabra, la mirada detenida allá en la curva que le tragaba al hijo. (p.11) La caracterización de los personajes se manifiesta mediante verbos que remiten a acciones: A poco de doblar, cuando supo que había quedado fuera de la vista de su madre, Stefano se secó los ojos con la manga del saco.(p11) Después,[la madre] puso el cuarto de paloma en mi plato, todo en mi plato.(p.23) Hay varios personajes secundarios, amigos y otros que va conociendo a lo largo del relato. Pero en este análisis vamos a enfocarnos en los personajes femeninos, ya que en relación con ellos el protagonista se desarrolla e inicia en este pasaje de niño a adolescente y a adulto. Aldo habla y mira hacia la cocina. Luego agrega por lo bajo: Es como las mujeres. Hay que conocer a varias para elegir. (p.50) “Qué es la Mujer? La Mujer es una ilusión. Una invención social compartida y recreada por hombres y mujeres. Una imagen producto del entrecruzamiento de diversos mitos del imaginario social, desde el cual hombres y mujeres – en cada período histórico- intentan dar sentido a sus prácticas y discursos. (…) La Mujer, una ilusión, una invención histórica y colectiva. De igual forma se construye el Hombre”.5 Hemos recurrido a esta cita porque hay estereotipos femeninos presentes en Stefano: la madre, la prostituta, la inalcanzable, el amor verdadero. Los personajes de la madre y Ema cohesionan y mantienen la tensión dramática del relato. Ambas se unen hacia el final: Ahora que tendremos un hijo y repasamos la vida para seguirla juntos, comprendo a mi madre, sus palabras. (p.88) Seguiremos la estructura quinaria propuesta por Gemma Lluch para analizar relatos. Cabe aclarar, sin embargo, que el personaje de la madre, como co-protagonista, aparece en todo el curso del relato, en el recuerdo y los sueños del protagonista, que no se resigna primero a no poder llevarla con él, la culpa de haberla abandonado, el dolor de su muerte, el comprenderla cuando él también va a ser padre, y por fin el soñarla corriendo a abrazarlo. 5 (Ana María Fernández: La mujer de la ilusión. Pactos y contratos entre hombres y mujeres. Paidós. pag.22). 6/8 Títulos de los capítulos Hechos que ocurren Personaje femenino Situación inicial Uno La despedida. Partida a Génova. El viaje en barco a América Gina. Nunca se acerca a ella ni le habla, pero sueña con ella y tiene su primera polución nocturna. Conflicto Dos Sobrevive al accidente. Es salvado. Llega a Buenos Aires. Hotel de Inmigrantes Mujer sin nombre, de cara huesuda y boca grande, que se deja tocar. Iniciación sexual Conflicto Dos Montenievas. Resentimiento con Pino. Encuentra el saxo Lina. Su primer amor.. Se va en busca de otro destino. Ella intuye que no regresará. Cambio de rumbo Tres Se va con el circo, donde toca el saxo Tersa Williams. amante Situación final Cuatro Va en busca de la amiga de su madre en Rosario Ema. Encuentra el amor verdadero y espera un hijo con ella Su Ideología En la introducción señalamos como era la representación de América para el europeo pobre. Sin embargo, y quizás en sintonía con la autora, la madre de Stefano es escéptica respecto de esto: Yo le pedía que viniéramos a America (…) Allá se puede hacer dinero, dije yo. ¡Cosas que inventan! Pero nadie regresa para contar… También destaca el valor de esfuerzo para progresar; Stefano trabaja de día y estudia de noche. Intertextualidad Alguien dijo que “el hombre desciende del mono y los argentinos de los barcos”.La frase ilustra perfectamente el modo como nuestro país se pobló masivamente desde fines del siglo XIX y la primera mitad del siglo XX. En este sentido, la novela dialoga principalmente con los miles de relatos orales de padres ó abuelos. Se han escrito también novelas y ensayos de autores argentinos sobre inmigración, como La Gran Inmigración, de Ema Wolf y Cristina Patriarca, también enfocada en la inmigración europea. La serie Vientos de Agua, de Juan José Campanela, nos muestra desde el cine el impacto social de la inmigración española en nuestro país cuando España estuvo tan castigada por las guerras, y la opresión del franquismo. Al respecto creo que este libro puede ser un disparador desde lo pedagógico para un gran proyecto interdisciplinario en las escuelas, ya que abarca lo histórico y geográfico, lo literario y la expresión oral y escrita de experiencias personales. También estimula la reflexión acerca de la emigración de los argentinos hacia los países centrales en las últimas décadas y el perfil del nuevo inmigrante, que proviene principalmente de países limítrofes. Buenos Aires, diciembre 2009 Diana Schcolnicov 7/8 Bibliografía Andruetto, María Teresa: Stefano. Primera Sudamericana. La pluma del gato/ juvenil.2008 Lluch, Gemma: Cómo analizamos relatos infantiles y juveniles. Grupo Norma.2003 Andruetto, María Teresa: Hacia una literatura sin adjetivos (ficha de la cátedra) Carli, Sandra. Notas para pensar la infancia en la argentina (1983-2001) (ficha de la cátedra) Texidor, Emili: ¿Pero qué leen los adolescentes.?12° Jornadas de Bibliotecas Infantiles, Juveniles y Escolares. 27,28 y 29 de mayo de 2004 (ficha de la cátedra) Devetach, Laura: La construcción del camino lector. Comunicarte. 2008 Dolto, Francoise: La Causa de los adolescentes. Paidos. Guías para padres.2008 Soriano, Marc: La Literatura para Niños y Jóvenes. Guía de exploración de sus grandes temas. Ediciones Colihue. Buenos Aires. Argentina. 1995 Eco, Umberto: Seis paseos por los bosques narrativos. Editorial Lumen.1996 8/8