3.5. La mezquita y el palacio en el arte hispano-musulmán En general, las construcciones islámicas tienden a una gran sobriedad en el exterior que contrasta con la exhuberancia ornamental de los interiores. Los materiales suelen ser ligeros y de escasa calidad, que se recubren y ocultan con profusa decoración. Destacan los pilares y columnas rematadas con capiteles corintios, cúbicos y mocárabes, que sostienen arcos de herradura, lobulados o mixtilíneos. Aparecen bóvedas de crucería dando lugar a formas poligonales, cúpulas para cubrir los espacios interiores y elevados minaretes. Las principales edificaciones son la mezquita y el palacio. Mezquita de Córdoba: Fue edificada sobre el solar de la antigua iglesia visigótica de San Vicente, aprovechando parte de sus muros, columnas y capiteles. Al tener las columnas poca altura, se dispusieron sobre ellas unos pilares de base rectangular, apoyando sobre estos los arcos que sostienen el tejado, constituyendo un sistema de arcos dobles de herradura en la zona inferior y de medio punto en la superior. Originalmente tenía once naves perpendiculares al muro de la quibla y al mihrab, pero Abd al-Rahmán II ordenó derribar la quibla y alargar las naves ocho arcadas hacia el Sur (833-848). Durante el siglo X, con el califa Abd al-Rahmán III, se construyó el actual alminar y se amplió el patio de la mezquita. Su sucesor, Al Hakan II amplió la sala de oración, prolongó las once naves en doce arcadas y construyó la quibla orientada hacia el sur y no hacia La Meca. La última ampliación se debe a Almanzor, que aumentó en ocho el número de naves. La Alhambra: Su origen se remonta a 1060, cuando el visir Ibn Habus edificó una residencia en una colina roja, de la cual se conserva la fuente del patio de los Leones. Con Muhammad I, conquistador de Granada y fundador de la dinastía nazarí, y Muhammad II se construyeron las murallas y varias torres. El conjunto se estructura en dos zonas diferenciadas: alcazaba (zona fortificada) y dependencias palaciegas del soberano y su harén particular. la muralla circundante mide 1400 metros y tiene 5 puertas, 25 torres. Los cuartos de Machuca, Dorado y Comares, la zona del patio de los Leones y las salas de las Dos Hermanas y Abencerrajes, son lugares destacados. La decoración interior cuenta con motivos epigráficos (textos poéticos, religiosos), vegetales y geométricos (matemática y racionalidad definen el concepto islámico de la belleza). Frente a la Alhambra se encuentra el Generalife, con jardines, estanques y huertas.