El Alcalde de Zalamea RESUMEN COMPLETO DE LA OBRA 1ª Jornada: V.1−137 Unos soldados se encuentran de camino a Zalamea, donde esperan quedarse algún tiempo. En el camino Rebolledo, un soldado, y su amada, la Chispa, hacen más amena la travesía hasta su destino. V.137−160 Don Álvaro, un capitán, anuncia a los soldados que se alojarán en Zalamea, hasta la llegada de don Lope, un general. V.161−224 Dialogan el capitán y un sargento y éste le comunica que ha elegido el alojamiento del capitán no sólo en la mejor casa, sino también donde vive la dama más bella del pueblo. No obstante, el capitán considera una deshonra cualquier relación con una villana. V.224−353 Mendo, un hidalgo, y su criado Nuño se compadecen de aquellos que deberán alojar a los soldados, aunque Nuño le recuerda a su señor que él no puede alojar a nadie por estar arruinado. Además Mendo manifiesta su amor hacia Isabel, hija de Pedro Crespo. Nuño le promete un casamiento con Isabel, ya que de esta forma ella tendría un título nobiliario y él dinero. V.353−403 Isabel y su prima Inés ven desde su ventana a don Mendo con su criado. Isabel rechaza a don Mendo nada más verle y le quiere cerrar la ventana. Inés sin embargo, muestra compasión por el hidalgo. V.403−410 Aparece Pedro Crespo, quien muestra su rechazo hacia don Mendo, que trata de evitarle. V.410−419 Llega Juan, hijo de Pedro Crespo, quien afirma encontrar siempre a don Mendo al llegar a su casa. Nuño comunica a su amo que no le ha servido de nada intentar evitar a Pedro Crespo, pues ahora se topa con su hijo. V.420−464 Pedro Crespo se muestra inicialmente preocupado por la cosecha de aquel año. Juan afirma haber jugado a la pelota aquella tarde y haber perdido los partidos jugados. Por ello le pide dinero a su padre, quien le aconseja no ofrecer lo que no se tiene. V.464−482 1 Llega el sargento a la casa de Pedro Crespo y le informa a éste de que en su casa se alojará don Álvaro. El villano le comunica que cuando quiera puede venir su huésped. V.482−522 Juan le propone a su padre comprar un título nobiliario para no tener que alojar a los militares. Pedro Crespo sin embargo, considera que la honra no se puede comprar ya que los demás seguirán viéndote como un villano. Al final de la escena Pedro Crespo llama a su hija. V.522−557 Pedro Crespo y su hija Isabel acuerdan que ésta se esconderá durante la estancia del capitán en su casa. Acto seguido parte Crespo en busca de algún regalo para el capitán, mientras Juan queda esperando. V.557−575 Llegan a la casa de Pedro Crespo don Álvaro y el sargento que quiere antes de nada ver a Isabel. En la casa les recibe Juan. V.575−604 Dialogan don Álvaro y el sargento sobre Isabel. El sargento ha averiguado que ésta se esconde de ellos y aprueban un plan para acercarse a ella. V.604−671 Llegan Rebolledo y la Chispa y el capitán le pide a Rebolledo que le ayude a fingir que le ataca para subir al lugar en que se esconde Isabel. A cambio Rebolledo pide dinero para jugar al juego del boliche y llegan a un acuerdo. V.671−680 Juan y Pedro Crespo salen con las espadas tras el capitán que sigue a Rebolledo a las habitaciones de arriba. Entonces Juan se apercibe de la vanidad de esconder a su hermana. V.680−720 Se produce el encuentro entre don Álvaro y las dos mujeres. Don Álvaro explica que perseguía a Rebolledo y que su belleza le había salvado. V.720−777 Llegan don Juan y Pedro Crespo a la habitación de Isabel. Juan intuye que la persecución de Rebolledo por parte del capitán había sido premeditada con el fin de ver a Isabel. El padre sin embargo, no sospecha nada tras oír las explicaciones de don Álvaro. V.777−final 1ª jornada Llega don Lope a la casa de Pedro Crespo y quiere castigar a Rebolledo por haber desafiado al capitán. No obstante, Rebolledo cuenta que el tumulto ha sido provocado y finalmente el cabo decide alojarse él mismo en la casa de Pedro Crespo y que don Álvaro se busque otro alojamiento para así evitar mayores enfrentamientos. Posteriormente don Lope y Pedro Crespo mantienen una conversación sobre la honra en la que el labrador 2 afirma que hubiera matado al capitán si éste hubiera ofendido su honra. 2ª Jornada: V.895−932 Dialogan don Mendo y Nuño sobre lo ocurrido en la casa de Isabel entre ella y el capitán. Nuño le informa a su amo que el militar se ha enamorado de la villana, pese a que la respuesta de ella haya sido igual de negativa que la que hubiera dado a don Mendo. V.932−1050 Se desarrolla una conversación paralela entre Rebolledo, el sargento y don Álvaro, quien está locamente enamorado de Isabel. Don Álvaro lamenta la resistencia de la villana y el sargento le recrimina no haber querido conocer inicialmente a Isabel y ahora estar enamorado de ella. Finalmente deciden reunirse por la noche. También don Mendo ha decidido entretanto hacer una visita a la casa de Isabel tras haberse armado. V.1050−1076 Chispa viene de jugar al boliche y le comunica a Rebolledo que ha herido a un mirón durante el juego por haberse cansado de él. Se dirigen los dos al cuerpo de guardia y Rebolledo le cuenta que esa noche ha planeado algo. V.1076−1200 Pedro Crespo acomoda a don Lope en la terraza de su casa a la hora de la cena. Conversan los dos y finalmente, ante la petición de don Lope, hace venir a su hija. V.1076−1200 Se encuentran don Lope, Isabel, Juan y Pedro Crespo en la terraza de su casa cuando llegan unos soldados a la puerta de la casa cantando. Don Lope le pregunta a Juan si le gustaría convertirse en soldado ante la admiración que éste muestra por los soldados y la respuesta es afirmativa. No obstante, los soldados tiran una piedra tiran una piedra a la ventana de Isabel y le dedican una canción, lo cual provoca el enfado de los presentes, pese a no reconocerlo abiertamente. Finalmente se retiran a dormir, aunque previamente Pedro se asegura de haber encerrado a sus hijos para protegerles. V.1201.1296 Don Álvaro, el sargento, Chispa y Rebolledo llegan a la casa de Isabel donde esperan ver a la villana. No obstante, don Álvaro tiene que renunciar a verla pues todas las ventanas están cerradas. Entretanto ven llegar a un jinete. V.1297.1319 Nuño y don Mendo, armado con un escudo, llegan a la casa de Crespo para ver a Isabel, cuando escuchan a unas personas ante ellos. Don Mendo expresa su deseo de enfrentarse a ellos pero afirma querer averiguar primero si Isabel tiene culpa de ello. Se sientan y Rebolledo, que les había visto llegar previamente, interpreta que se trata de alguien que anda en pena de las cañas que ha judado. V.1320−1366 3 Están cantando Chispa y Rebolledo, cuando salen Pedro Crespo y don Lope armados a por ellos y les acuchillan. Huyen y como ni Crespo ni el cabo saben que el otro ha abandonado la casa, se enfrentan convencidos de que se trata de otro soldado. Sólo cuando sale Juan se aperciben del malentendido. Capítulos 9−15: V.1367−1567 Don Lope decide, para evitar males mayores, la partida de la compañía de don Álvaro de Zalamea, lo cual provoca la alegría de don Mendo y Nuño, herido. Don Álvaro acepta. Sin embargo, sabedor de la partida de don Lope al día siguiente, planea una visita nocturna a Isabel acompañado de una serie de soldados que el sargento elegirá. Entretanto Rebolledo le informa del alistamiento de Juan Crespo, lo cual será un obstáculo menos para intentar ver a Isabel. Pedro Crespo por su parte se muestra halagado por el alistamiento de su hijo y se lo agradece al general. Al final, Isabel se despide de don Lope, que le regala una joya, y muestra su alegría por haberse convertido en criado del cabo. V.1563−1687 Pedro Crespo se despide de don Lope y de su hijo, al que da una serie de consejos. También le despiden su prima y su hermana. Una vez partido, todos muestran su pesar por ello. V.1688−1765 Don Álvaro, el sargento, Rebolledo y otros soldados se reúnen ante la puerta de la casa de Isabel. El capitán ha planeado llevar a Isabel mientras los demás detienen a Pedro Crespo. Después se reunirán en un punto acordado. Penetran en la casa y don Álvaro se lleva a Isabel. Pedro Crespo no puede hacer nada porque inicialmente está desarmado y además son demasiados los contrarios. Finalmente le retiran a él y a su hija. V.1766−1787 Juan escucha los gemidos de su padre y su hermana en el monte y, sin saber que son ellos, se dirige hacia ellos por seguir el consejo de su padre de honrar a las mujeres y reñir sólo lo necesario. 3ª Jornada: V.1788 Isabel va caminando por el monte con la duda de si lavar la honra de su familia con su muerte o por el contrario dejar que su padre mate al capitán. Encuentra finalmente a su padre, atado, que también se lamenta por la perdida de su hija. V. −2095 Isabel encuentra a su padre, quien le pide que le desate las manos. Isabel, sin embargo, quiere contarle previamente lo ocurrido y cómo su hermano la ha salvado y ha herido al capitán. A continuación pide a su padre que la mate con el fin de lavar su honra. No obstante, Pedro Crespo se niega y quiere volver a su casa con el fin de hacer las diligencias pertinentes para proteger a su hijo. V.2096−2135 Un escribano le informa a Pedro Crespo de que ha sido elegido nuevo alcalde de Zalamea y que como tal tiene dos asuntos pendientes: la llegada del rey y la herida de don Álvaro, asunto que puede resultar importante si se averigua quién le ha herido. Acto seguido el escribano le da la vara de la justicia a Pedro Crespo, quien se muestra complacido por la noticia, ya que desde este momento no tendrá que recurrir a la violencia para lavar 4 su honra; podrá emplear la vía judicial. V.2135−2177 Conversan don Álvaro y el sargento sobre la necesidad de volver a Zalamea y el capitán muestra su temor a que se sepa de su llegada a Zalamea, pues entonces tendría que enfrentarse a los villanos con la violencia. No obstante, ha llegado el escribano a donde se encuentra el capitán y ordena que ninguno de los soldados escape de la habitación en que se encuentran. Pese a todo el capitán no muestra ningún temor al estar convencido de que la justicia ordinaria no tiene jurisdicción sobre él. V.2177−2192 Pedro Crespo le comunica a don Álvaro que ha venido a resolver una diligencia y que quiere hablar con él a solas. Por tanto ordenan que salgan todos los presentes de la habitación. V.2192−2338 Pedro Crespo se humilla ante el capitán y le promete entregarle toda su hacienda y sus pertenencias si se casa con su hija. No obstante, don Álvaro rechaza la propuesta de casamiento, lo cual provoca la cólera de Pedro Crespo decidido a defenderse del capitán. Sin embargo, éste se muestra tranquilo pues está convencido de que la jurisdicción sobre él reside en el consejo de guerra por lo que Crespo no significa una amenaza para él. V.2339−2378 Crespo se muestra enfurecido y tras llamar al escribano ordena la detención y el ahorcamiento de don Álvaro. Éste se muestra al principio muy seguro de sí mismo, sin temor hacia Pedro Crespo, que no tiene jurisdicción sobre él. Sin embargo la decisión de Pedro Crespo provoca su miedo de los villanos y le amenaza al alcalde con quejarse al rey. V.2339−2378 El escribano le muestra al alcalde los dos soldados apresados, Rebolledo y la Chispa, y Crespo decide amenazarles hasta que le cuenten su versión sobre lo ocurrido a su hija. Además averigua para su sorpresa que Chispa está preñada. Capítulos 9−11: V.2379−2605 Llega Juan a la casa paterna con el propósito de contarle a su padre lo sucedido. Sin embargo, al ver a su hermana Isabel, desconsolada, se sorprende inicialmente y acto seguido está dispuesto a matarla con el fin de lavar la honra familiar. No obstante Pedro Crespo evita un enfrentamiento entre ambos hermanos y apresa a Juan ante la incomprensión de sus dos hijos, hasta que se resuelva la diligencia contra el capitán. A continuación llega don Lope en busca de Juan, al que quiere castigar por haber herido al capitán. Además quiere salvar a éste y cuando que Pedro Crespo ha sido proclamado alcalde, le pide que se le entregue. Crespo se niega pese a que don Lope se muestre dispuesto a liberar a don Álvaro por la fuerza. V.2605−2638 Don Lope ordena a sus soldados, que ha vuelto a Zalamea, incendiar la cárcel donde se encuentra el capitán. En caso de defenderse los villanos les manda quemar el pueblo entero. Pese a todo ni el escribano ni Pedro Crespo se muestran dispuestos a ceder. V.2639−2697 5 Ha llegado el rey Zalamea y tanto don Lope como Crespo le exponen sus versiones de lo sucedido. Don Lope acusa a Pedro Crespo de no querer liberar al capitán. Crespo se defiende argumentando que el delito era merecedor de la muerte y afirma que al haber sólo una audiencia en el lugar la sentencia ya ha sido ejecutada. Esto provoca la sorpresa del rey que además le comunica al alcalde que él no tiene autoridad sobre el capitán. V.2698−2735 Aparece don Álvaro, matado a garrote vil, y Pedro Crespo se justifica ante el rey diciendo que la sentencia ha sido igual que la que hubiera dado un tribunal de guerra. Este argumento convence al rey, que declara a Pedro Crespo alcalde perpetuo de Zalamea y ordena la partida de sus tropas hacia Portugal. V.2736−2767 Pedro Crespo le comunica a don Lope su decisión de ingresar a su hija en un convento y libera a todos los presos menos a su hijo, al que dice querer castigar. Sin embargo don Lope afirma haberle perdonado y finalmente le lleva con él Personajes Pedro Crespo: Es un labrador viejo el cual es nombrado alcalde de Zalamea, tiene un hijo Juan y una hija Isabel. Su carácter es dinámico, contradictorio, de gran complejidad, que cambia continuamente y se desarrolla según avanza la acción, posee un alto sentido del honor social y opina que por ley natural tiene que tener una posición inferior a la de los nobles. Es uno de los grandes personajes ha creado nuestro teatro del Siglo de Oro. Casi todos los demás personajes existen en función de él, lo cual no quiere decir que no posean un cierto grado de autonomía e individualidad propia. Pero su función principal es el iluminar, a veces por medio del contraste, aspectos del complicado y enigmático carácter del protagonista. Existen para hacer posible que este personaje casi monolítico al comienzo de la obra se transforme en ese personaje mítico, contradictorio, multidimensional, cuya casa, según la tradición local, todavía se conserva en Zalamea de la Serena. Isabel: El carácter de Isable no es una gran profundidad psicoloógica. Tampoco emerge como una gran figura trágica: su tragedia es tan inmerecida que solo puede producir la compasión del público, no el horror y la admiración que sirven para producir el verdadero efecto trágico. Es su sufrimiento, no contemplamos la injusticia del universo ni de la sociedad; si no la maldad de un hombre. Isabel es una víctima, no una figura trágica. Es la única hija de Pedro Crespo, aparece muy poco en la primera jornada, únicamente dos veces, y en ambas rechazando las insinuaciones amorosas de un pretendiente. En una despreciando a don Mendo, y en otra al Capitán. El caso de Isabel se toma demasiado en serio su papel de dama protectora del desvalido. En la segunda jornada aparece otra vez como la hija obediente de Crespo y tambíen como una anfitriona cortés y atenta al ofrecerse a servir la cena a don Lope. Juan: Posee tan alto sentido del honor social como su padre (Pedro Crespo), pero no parece compartir su opinión de que el campesino, por ley natural, tenga que tener una posición inferior a la de los nobles. Tan malicioso y orgulloso como Crespo, a Juan le falta, sin embargo, la prudencia y el disimulo de su padre. Con el personaje de Juan, Calderón ha creado un Pedro Crespo inmaduro. Juan puede ser considerado como una etapa en el desarrollo psicológico y moral de Pedro Crespo. Quizá en la juventud Crespo fuera así y necesitara, como Juan ser protegido de si mismo. Se le ve una clara envidia al Capitán en la primera jornada. Don Mendo: Es el único personaje noble de Zalamea es simplemente una parodia de hidalgo, con ilustres 6 antecedentes literarios. Representa un tercer grado de ese concepto del honor basado en la genealogía del individuo. Don Mendo es equiparable con don Quijote a quien se le compara por su estrafalaria figura, don Mendo trata de vivir en un pasado fantástico donde villanas como Isabel se rinden a hidalgos como él para ser luego abandonadas en un convento cuando el hidalgo se haya hartado de ellas. La fantasía de don Mendo se convierte, sin embargo, en la realidad del capitán: Isabel acabará su vida en un convento. Su uso de los tópicos trillados y las frases estereotipadas del amor cortés le presentan claramente como émulo de don Quijote. Figura grotesca y cómica, don Mendo desaparece de la obra a mediados de la segunda jornada, cuando las cosas empiezan a tomar un talante serio. Resumen breve de la obra: Un grupo de soldados, que lleva ya muchos días sin descansar y pasa por Zalamea (municipio de la provincia de Badajoz) cuando se dirigen a Portugal. Los soldados, se caracterizan por sus abusos cuando se alojan en las casas, se alojan en Zalamea. El Sargento hace el reparto de las casas, y para el capitán elige la de un villano rico, que tiene una hija muy bella, Isabel. El capitán opina que una villana siempre será una villana y que por lo tanto no le interesa, pero se hospeda en casa del villano Pedro Crespo. Cuando el capitán se va a alojar en casa de Pedro, ve que el villano ha escondido a su hija Isabel. El capitán, atraído porque Isabel se ha escondido, finge una pelea con Rebolledo (un soldado gracioso) y con este engaño entra en la habitación donde estaba escondida Isabel. El capitán rápidamente se enamora de Isabel. Pedro y su hijo Juan se percatan de que el capitán ha entrado en la habitación a propósito, y empieza una discusión donde se ven muy claras las ideas de los villanos contrapuestas a las del general. Entre tanto llega Don Lope, el General, y al saber el motivo de la discusión decide que en vez de ser el capitán quien se hospede allí, será él. Por la noche, el Capitán, haciendo peripecias, consigue raptar a Isabel y se la lleva a la montaña para violarla. Pero allí se encuentra a Juan y hiere al Capitán. Después, en el pueblo, el capitán se cura de las heridas y es sometido a un juicio por el recién alcalde de Zalamea (Pedro Crespo). El capitán es ejecutado y Isabel será llevada a un convento. Al poco rato llega el rey, se interesa por el caso y dictamina que ha sido una ejecución totalmente justa y convierte a Pedro en alcalde perpetuo. Análisis de Pedro Crespo. ¿Qué valores lo caracterizan? Es un labrador de los de siempre, que al final de la obra será nombrado alcalde de Zalamea. Su carácter es muy dinámico, con alto sentido del honor social. Opina que por ley natural hay quien tiene una sangre noble y hay quien no, pero también cree que ante la ley son todos iguales, y que se ha de hacer justicia siempre que se pueda. Tampoco cree que el honor y la clase se puedan comprar, como le insinua una vez su hijo. Otros comportamientos que le caracterizan son su prudencia inicial y el tratar a las personas con el mismo respeto que le tratan a él. Pedro es en todo momento firme en sus decisiones y creencias, igual que da muestras de cariño a sus dos hijos. En las discusiones con Don Lope es donde más se marca el carácter de Pedro y se deja ver su gran capacidad de discusión. Creo que es el personaje principal de la obra, o sea el personaje que más se mitifica en esta obra, donde gracias a la actuación de personajes secundarios se va viendo el carácter de Pedro, el del villano firme. Pedro cree, y se lo dice al rey, que la justicia es un solo cuerpo que tiene muchas manos. Explica la relación que se establece entre Pedro Crespo y Don Lope de Figueroa. Se establece desde el primer momento una relación de respeto. Al principio Don Lope expone sus ideas y su creencia de que Pedro es un villano, y por tanto es inferior a él. También se deja claro que Don Lope va a defender en todo momento a sus soldados y que Crespo va a defender su honor y el de toda su familia. La relación que se establece al principio es muy clara, en los versos 891, 894, al final de la primera jornada. Don Lope dice que el villano es testarudo, y Crespo dice que Caprichudo es el don Lope. 7 Su relación y actitud irá mejorando, y culminará en los versos 676 y 677 de la segunda jornada, donde Don Lope dice que quién diría que hubieran de quedar tan amigos, y Crespo le contesta que quién hubiera dicho que él era loco de tan buen capricho. Por lo tanto la relación es siempre de respeto, con algunos momentos de tensión y confusión . Supongo que viene a ser una metáfora de la relación entre el poder civil y el militar. −Analiza la función que desempeñan los personajes cómicos. Los personajes cómicos, principalmente Rebolledo y Chispa, sirven para llevar la voz de los soldados y sobre todo para hacer las tareas comprometidas y difíciles, en las que siempre se salen con la suya y nunca son castigados. Rebolledo representa el soldado gracioso que tiene el consentimiento del Capitán, mientras que Chispa sirve principalmente para cantar y para mostrar que una mujer también se puede espavilar dentro de un grupo de soldados. El personaje cómico mas conseguido es Nuño, que es el criado del hidalgo Don Mendo. Siempre le esta recordando a su amo que ya no es rico y que nunca comen, con palabras o frases de doble sentido. Nuño es muy hábil y creo que su función principal es la de hacer reír de vez en cuando, sobretodo en situaciones tensas o aburridas, a la vez que mostrar la ridiculez de su amo y de los hidalgos en general. −Explica cuál es el concepto de honor y honra de Pedro Crespo. Pedro Crespo es un villano y tiene un concepto del honor altísimo, hasta el punto de llegar a decir que si no tiene honor, no quiere vivir. Su concepto del honor también es muy claro en los versos 871, 876 al final de la primera jornada. Pedro dice que al Rey la hacienda y la vida se ha de dar, pero el honor es patrimonio del alma y el alma sólo es de Dios. Siempre actúa de tal manera que conserve su honor, és decir, actua según sus creencias morales, y creyendo que su condición de villano no supone ninguna inferioridad. Crespo no piensa que el honor y la nobleza se puedan vender, sino que solo se puede heredar, y el se siente orgulloso de ser un villano y tener las posesiones que tiene. El honor de sus seres queridos también es muy importante para él, así también valora algunas personas por su honor. El concepto de honor de Pedro Crespo se ha de entender dentro de la estructura del siglo XVII, la estructura de clases ya no existe, pero se conservan los privilegios y los prejuicios entre clases. Analiza el conflicto entre el poder civil y el poder militar. ¿Qué diferencias hay en el concepto de justicia? El principal conflicto es que siempre se parte de la superioridad de los soldados, ya que los soldados no pueden ser juzgados por la justicia ordinaria, sino que han de ser juzgados por la jurisdicción militar. Por lo tanto, los soldados siempre tenían comportamientos muy abusivos cuando se hospedaban en los pueblos, ya que no podían ser juzgados por los tribunales de allí. El concepto de la justicia de los villanos es el que resuelve las cosas justamente, mientras que para los soldados la justicia era lo que les permitía hacer lo que querían , sin importar si estaba mal o bien hecho. El poder militar y el civil no son opuestos, pero a veces tienen algunas contradicciones y diferencias insalvables, algo similar a lo que sucedía con Pedro Crespo y Don Lope de Figueroa. Señala cuál es el papel de la protagonista femenina El papel de Isabel, la protagonista femenina, es el de objeto bonito, porque raramente expresa su opinión, sólamente lo hace cuando narra los hechos que le han sucedido y lo desgraciada que es. Su papel, quizá, es el de mostrar que una villana muy bella, por muy villana que sea, puede tener a capitanes, 8 hidalgos, etc. enamorados. Por lo tanto, demuestra que según en que casos los prejuicios clasistas de la época se eliminaban. Creo que a pesar de estar en el centro de la obra, su papel como persona no tiene ningún interés más que el de víctima. Lo importante de su papel es el interés que provoca en todos los sectores. Analiza el papel del rey en la obra. En la obra el rey tiene un papel muy próximo al de Dios ya que aparece en el momento oportuno para que se haga justicia. La figura del rey es muy autoritaria y perfecta, pues reconoce los méritos de Crespo y lo nombra alcalde perpetuo. Creo que la figura del rey en esta obra, y su decisión, hacen la historia un poco más inverosímil. Opinión personal razonada. Creo que este libro es un clásico y por lo tanto es importante haberlo leído, pero quizás sería mejor leerlo en la universidad o en otra etapa, pues creo que por la edad y por nuestros conocimientos históricos no es muy adecuado, ya que nos es bastante difícil situarnos. Por otro lado, pienso que hay personajes, como Nuño, que están muy logrados. Pero otros, com por ejemplo Isabel, no tienen ningún interés. Este libro sería mejor leerlo todo en clase, porque al leerlo en casa te da la sensación de estarte perdiendo detalles. Creo que el tatro es mucho mejor visto que no leído. También pienso que la función de las lecturas en bachillerato y ESO debería ser la de estimular a la gente para que leyera. Por ejemplo, este libro, por el hecho de ser tan antiguo, puede llevar a pensar que la lectura es cosa de siglos pasados, cosa que no es cierta. Por lo tanto, creo que deberíamos leer libros más actuales y de más calidad. 9