Resolución de la CES Negociaciones sobre el cambio climático: resolución de la CES sobre la posición de la UE en la COP 17 en Durban Adoptada por el Comité Ejecutivo el 19-20 de octubre 2011 En diciembre de 2011, los negociadores de todos los países se darán cita en Durban, Sudáfrica, para discutir del clima en la 17ª Conferencia de las Partes (COP) de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC). El Protocolo de Kyoto expira en 2012, y comienzan las negociaciones cruciales para asegurar el futuro marco de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. Reivindicaciones a nivel internacional: evitar vacíos normativos en cuanto a emisiones e implementar una transición justa hacia la economía de bajas emisiones de carbono 1. La CES sigue firmemente comprometida con la firma de un acuerdo global, equitativo, vinculante y ambicioso en el marco de la CMNUCC, de acuerdo con las recomendaciones del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), que recomienda que los países desarrollados (incluida la UE) reduzcan sus emisiones de gases de efecto invernadero al menos un 25 a 40% en comparación con los niveles de 1990 para el año 2020 y de un 80 a 95% en 2050 para evitar el aumento de las temperaturas globales de más de 2° C en el horizonte 2100, este acuerdo debe incluir también medidas para garantizar una transición justa hacia la economía baja en carbono1. 2. La CES insta a la UE a hablar con una sola voz y a adoptar una posición unificada y fuerte antes y durante la COP17 en Durban. 3. Dado el ritmo lento de las negociaciones internacionales y los intentos de algunos gobiernos para avanzar hacia un sistema de "compromisos voluntarios", es importante evitar el vacío normativo en materia de compromisos internacionales de reducción de emisiones y preservar los aspectos jurídicamente vinculantes y "topdown" que podría aportar un segundo período de compromiso. Por lo tanto, si no hubiera acuerdo global, la CES reclamaría por lo menos un segundo período de compromiso del Protocolo de Kyoto sobre la base de objetivos fuertes y ambiciosos, en cuanto a la reducción de las emisiones, una mayor transparencia y un sistema de control, informe y verificación claro. Además pediría, en este caso, que la adopción de este segundo período de compromiso del Protocolo de Kyoto se base en un ambicioso modelo con las siguientes características: Todos los países (desarrollados) del anexo I, con la excepción ahora inevitable de EE.UU., deberían adherirse a un segundo período de compromiso durante el que se aspiraría a los objetivos de reducción de las emisiones más ambiciosos ya acordados, o más, teniendo en cuenta y respetando las recomendaciones del IPCC, que señala que los países industrializados deberán reducir sus emisiones En los últimos años, la CES, junto con la CSI, ha adoptado en materia climática varias resoluciones y posiciones políticas sobre la base de los diversos estudios que ha realizado. Esta resolución se basa en todo este trabajo y en estas posiciones, en particular la más reciente resolución titulada "Hacia un Nuevo Deal Sostenible para Europa" (www.etuc.org/a/7744). 1 de gases de efecto invernadero al menos un 25 a un 40% en comparación con los niveles de 1990, antes del año 2020. Los países que no figuran en el anexo I se sumarían a este esfuerzo al comprometerse de forma voluntaria a reducir sus emisiones o a tomar otras medidas para apoyar el desarrollo de las actividades de baja emisión de carbono (más allá de lo que hacen habitualmente), ya sea como parte del Protocolo de Kyoto o del Acuerdo de compromiso a largo plazo. La CES apoya a la Unión Europea cuando ésta insiste en que los países emergentes adopten objetivos claros de reducción de sus emisiones, conforme a las recomendaciones del IPCC. 4. Siempre en el contexto de este escenario, la Conferencia de Durban también debería desembocar en una hoja de ruta diseñada para llegar lo antes posible a un acuerdo global, y también podría incluir un reexamen de la situación en el año 2015 a fin de que se puedan tomar en cuenta oportunamente los nuevos datos científicos que se habrán expuesto en el quinto informe de evaluación del IPCC. 5. Cualquiera que sea el tipo de acuerdo que se alcance en las negociaciones de Durban, la CES apoya las reivindicaciones de la CSI, incluida la propuesta de dar a la OIT un papel más significativo dentro de la CMNUCC y que se le conceda un mandato reconociéndola como la agencia de la ONU especializada en temas laborales. 6. Los sindicatos han reivindicado desde hace mucho tiempo la incorporación de un pilar "social y empleo" fuerte en las políticas climáticas y energéticas. En el acuerdo de Cancún resultante de las negociaciones en la COP16, las Partes (incluida la UE), "son conscientes de que la lucha contra el cambio climático requiere un cambio de paradigma para la creación de una sociedad baja en carbono que ofrezca importantes posibilidades y garantice un alto crecimiento y un desarrollo sostenible, basado en tecnologías innovadoras y una producción, consumo y estilos de vida más sostenibles, garantizando al mismo tiempo una transición justa para los trabajadores que cree un trabajo decente y empleos de calidad "(Acuerdo de Cancún, I. Visión común para una cooperación a largo plazo, diciembre de 20102). 7. Para la CES, la transición justa hacia una Europa de bajo carbono se basa en cinco pilares: El diálogo entre las autoridades públicas y los principales interesados, incluidos los representantes de empresarios, sindicatos, autoridades locales y regionales y asociaciones. Empleos verdes y decentes a través de inversiones internas en las (nuevas) tecnologías bajas en carbono, la I+D y la innovación y la transferencia de tecnologías. Para la CES, son verdes todos los empleos que contribuyen al desarrollo sostenible en términos medioambientales. Esto se aplica al conjunto de sectores e industrias y, por tanto, a todos los trabajadores, no sólo a los puestos de trabajo en nuevos sectores emergentes como las energías renovables, gestión de residuos o servicios de protección el medio ambiente, sino también la transformación y la creación de empleo en las áreas existentes a medida que se hacen más "verdes". Para la CES, la calidad del empleo es tan importante como 2 http://unfccc.int/resource/docs/2010/cop16/spa/07a01s.pdf la cantidad. Los puestos de trabajo deben al menos cumplir con las normas de la OIT sobre trabajo decente. Competencias "verdes": estrategias activas de educación, de formación, de desarrollo de competencias al servicio de una economía baja en carbono y el uso eficiente de los recursos, a iniciativa de las autoridades públicas. El respeto a los derechos humanos y laborales: la toma de decisiones democrática y el respeto a los derechos humanos y laborales son esenciales para garantizar una representación justa de los intereses de los trabajadores y de las comunidades a nivel nacional. Sistemas de protección social fuertes y efectivos. Le corresponde ahora a la COP 17 de Durban poner en práctica estos principios, en particular mediante iniciativas sectoriales internacionales emergentes. 8. Es preocupante observar la clara ausencia de compromisos financieros para el período 2013-2020 en el marco de la iniciativa “Fast Start Finance”, “Financiación Inmediata", lanzada en 2012, así como la falta de procedimientos que permitan lograr los 100 mil millones de dólares por año a partir de 2020. En Durban, Europa tiene que comprometer fondos para ese período, un tercio de la cantidad total requerida. Estos importes deben ser adicionales, no reemplazar, el 0,7% del PIB que los Estados miembros de la UE tienen la responsabilidad de dedicar a la ayuda al desarrollo. 9. En cuanto a REDD+ (reducción de emisiones de deforestación y degradación de bosques) y otras iniciativas innovadoras para abordar el problema de la deforestación en países del tercer mundo, se debe tener en cuenta la pérdida de empleo en el sector forestal y la industria forestal: parte del presupuesto REDD+ debería dedicarse, por ejemplo, a facilitar la transición de la silvicultura no sostenible (ilegal) hacia una actividad más sostenible. Para contrarrestar la deforestación, antes que nada tenemos que promover la gestión sostenible de los bosques para que la silvicultura y la industria forestal y los bosques puedan seguir generando empleo, que sean tomados en cuenta los derechos de las comunidades que viven en las zonas forestales, y que se preserve el medio ambiente. En Europa: ir más allá del statu quo y crear un nuevo "deal" sostenible 10. La creciente preocupación sobre el futuro económico de Europa domina en la actualidad el proceso de decisión política nacional y europeo. La CES teme seriamente que las medidas de austeridad arrastren a Europa a una recesión de doble caída, que se traduciría en aun más desempleo, más pobreza, más exclusión y desigualdades sociales, más reducción de los salarios y las pensiones, así como un mayor deterioro de las condiciones de trabajo para los jóvenes y los demás trabajadores y por un debilitamiento de las medidas para luchar contra el cambio climático. 11. También es preocupante constatar que la reducción de las emisiones de gases con efecto invernadero en el continente europeo es en gran parte el resultado de la prolongada crisis económica y el colapso de la industria de Europa Central y Oriental en los años 1990, y no de la política climática. Si, en la actualidad, la UE va por buen camino para cumplir su objetivo de -20% en 2020, es principalmente debido a estos factores, no por sus logros en materia de ahorro energético y de eficiencia energética, que se han mostrado muy decepcionantes debido a la ausencia de objetivos vinculantes. 12. Junto con el impacto de las medidas de austeridad, el bajo precio del CO2 (actualmente 14 €/tonelada) va a retrasar y complicar las inversiones necesarias para apoyar la transformación de la industria, promover la modernización de las infraestructuras y, por tanto, promover la transición a una economía baja en carbono. En un momento en que otras partes del mundo están invirtiendo masivamente en políticas industriales activas y en la innovación tecnológica, el riesgo de fuga de carbono de Europa se incrementará si Europa sigue estancada; es una de las razones por las que la CES considera que es urgente e imprescindible una revisión del ETS3 (sistema de intercambio de cuotas de emisión de la UE, por sus siglas en inglés). En este contexto, es esencial garantizar la competitividad internacional de las industrias intensivas de energía en Europa a través de la adopción de medidas apropiadas si es necesario. Los empleos y el proceso de producción en Europa deberían ser más sostenibles en estas industrias. De esta manera deben ser evitadas pérdidas de puestos de trabajo en beneficio de países cuyas leyes y normas ambientales son mucho menos ambiciosas. 13. Debido a los ataques a los que los programas de austeridad y reformas someten en la actualidad a las prestaciones sociales, a los derechos sociales y a los sistemas de negociación colectiva, la atención de los trabajadores se centra fundamentalmente en la promoción de una agenda alternativa a las reducciones rápidas del gasto y al aumento del desempleo. En el centro de este programa se sitúa el llamamiento de la CES a un "nuevo deal sostenible para Europa", fomentando al mismo tiempo la adopción de políticas públicas activas y voluntarias y la promoción de las inversiones en eficiencia energética y en el uso eficiente de los recursos, creando y preservando empleos de calidad en Europa, de la siguiente manera: a través de una reforma de los fondos existentes para integrar mejor las condiciones sociales y ambientales a los criterios de concesión de préstamos y validación de los proyectos (presupuesto de la UE, Banco Europeo de Inversiones, Banco Europeo para la Reconstrucción y el Desarrollo), la creación de eurobonos y la adopción de un impuesto sobre las transacciones financieras con el fin de impulsar las inversiones sostenibles y atraer capitales privados en beneficio de políticas de desarrollo económico sostenible. a través de un impuesto sobre transporte marítimo y aéreo, que debería contribuir a financiar las políticas contra el cambio climático (a través del Fondo Climático Verde). Estas medidas deben ser universales con el fin de evitar la competencia desleal, e ir acompañadas de un mecanismo de compensación para hacer frente a los problemas de equidad (en particular en los países en desarrollo). examinando rápidamente los precios del CO2 en el mercado de carbono. Como se señala en la Estrategia y Plan de Acción aprobado por la CES en Atenas, "la Unión Europea debe dar señales económicas claras, en particular una señal de precio que podría adoptar la forma de un impuesto sobre el CO2, sujeta a una serie de condiciones4. Este es un punto crucial con respecto a los flujos de inversión y al apoyo a la I+D y a la innovación en las tecnologías y los procesos de bajas emisiones de carbono. creando una agencia europea del mercado del carbono, con modelo de la ECHA (Agencia Europea de Sustancias y Mezclas Químicas, por sus siglas en inglés), Ver la resolución de octubre 2009 (http://www.ccoo.es/comunes/temp/recursos/1/338805.pdf ) y la posición de junio 2010 (http://www.ccoo.es/comunes/temp/recursos/1/539093.pdf) de la CES 4 Ver el punto 5.23 del 12° Congreso de la CES (2011) http://www.ccoo.es/comunes/temp/recursos/1/1050698.pdf 3 con la tarea de (a) establecer objetivos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero a través de normas y criterios basados en las mejores tecnologías disponibles y (b) regular el mercado intraeuropeo del carbono (en el respeto de las normas de la OMC en materia de normas de protección del medio ambiente), todo ello en colaboración con los interlocutores sociales y con el fin de contribuir al Desarrollo Sostenible. la adopción de objetivos nacionales y comunitarios vinculantes de eficiencia energética y ahorro de energía de al menos -20% en 2020, con el lanzamiento de amplios programas para estimular la eficiencia energética dirigidos a la producción de energía, las industrias manufactureras, la renovación de los edificios (tanto públicos como privados), los sistemas de transporte y los lugares de trabajo (incluyendo la participación de los trabajadores en estos programas). Esta es una de las maneras menos costosas para combatir el cambio climático; se le deben asignar fuentes de financiación específicas. a través del desarrollo de las energías renovables y otras alternativas de bajas emisiones de CO2 como la cogeneración de calor y de electricidad. en el caso de una segunda contracción del crédito, la UE debe ofrecer seguridad jurídica a los inversores y desarrollar una estrategia para garantizar las inversiones necesarias (de I+D) relacionadas con las tecnologías de transición como el uso de tecnologías limpias utilizando el carbón, y las de captura y almacenamiento de carbono. A través de sus políticas regionales, la UE también debe gestionar mejor las implicaciones para las regiones que dependen del carbón. fortaleciendo las políticas relacionadas con el uso eficiente de los recursos y la fabricación en circuito cerrado con el fin de promover una bioeconomía sostenible. Los métodos para calcular las emisiones del sector UTCUTS (Uso de la tierra, cambio del uso de la tierra y silvicultura) deberían estimular el uso de productos de madera de fuentes sostenibles; además, la madera debe ser considerada fundamentalmente como un material, seguidamente como un componente de compost y, finalmente, como último recurso, como combustible. Los productos deben ser evaluados en función de su contribución medioambiental a la reducción del consumo de energía y de recursos a lo largo de su ciclo de vida. Todos estos puntos deben ser considerados a la luz de la hoja de ruta por una Europa eficaz en el uso de los recursos. (septiembre de 2011). 14. La CES y sus organizaciones miembros han demostrado en los últimos años lo importante que era abordar la dimensión social de la lucha contra el cambio climático, ya sea a través de una amplia gama de iniciativas tripartitas entre gobiernos, empresas y sindicatos a nivel europeo y nacional o a través de un gran número de estudios y resoluciones. En 2011, en colaboración con los organismos empresariales interprofesionales, la CES señaló los beneficios sustanciales que el diálogo social sobre la atenuación del cambio climático y la adaptación al cambio permitirían obtener en términos de economía, eficiencia energía, seguridad del empleo y creación de empleo. Esta experiencia a escala europea, nacional, regional, sectorial e intraempresas merece estar mejor integrada a las estrategias climáticas y energéticas de la UE. La CES también ha demostrado que había problemas de precariedad en el empleo en algunas empresas relacionadas con la economía verde y por tanto que había que hacer todo lo posible para asegurar un empleo estable y digno. 15. A pesar de la publicación en marzo de 2011, de una hoja de ruta general sobre la reducción de emisiones para el año 2050 y sobre las iniciativas sectoriales en materia de emisiones en el sector del transporte (abril 2011) y de la producción de energía (que se espera en el otoño de 2011), la dimensión social de las políticas climáticas y energéticas de la UE sigue siendo ignorada por la Comisión y los responsables políticos. 16. La CES reitera su posición de que estos elementos no se pueden dejar al mercado o al azar. Si se gestiona mal en el plano social, la transición a una economía baja en carbono generará importantes costes sociales y económicos, así como hostilidad hacia la política climática. 17. La CES pide que la Unión Europea formule, en colaboración con los sindicatos, una hoja de ruta europea sobre la transición justa para aplicar este compromiso europeo: promoción activa del diálogo social a todos los niveles, hojas de ruta sectoriales incluyendo estrategias para el empleo, la educación y la formación, instrumentos para anticiparse a los cambios y las reestructuraciones, promoción de sistemas de protección social fuertes y efectivos, respeto a los derechos humanos y los derechos sindicales fundamentales. 18. Garantizando al mismo tiempo un impacto regional equitativo, estas políticas son la base necesaria para el fortalecimiento de las ambiciones de la Unión Europea en la reducción global de las emisiones de gases de efecto invernadero para 2020. La CES considera que, sin unos objetivos ambiciosos en el clima y sin un liderazgo decisivo en términos de políticas climáticas y energéticas, la situación económica, ambiental y social del continente continuará deteriorándose. Por lo tanto, la CES está convencida de que, para estimular el crecimiento sostenible en Europa, es necesario ir más allá de la situación actual y reconsiderar nuestras ambiciones al alza. 19. La Unión Europea debe adoptar normas vinculantes en materia de eficiencia energética e invertir en energías renovables a fin de que sus objetivos internos sean coherentes con las recomendaciones del IPCC para los países desarrollados: una reducción de las emisiones de CO2 de 25 a 40% en comparación con los niveles de 1990 para el año 2020, sin perder de vista el objetivo a más largo plazo, es decir, de 80 a 95% para el año 2050, ni la necesidad de crear las condiciones para una transición justa.