Capítulo 7: “La disgregación del Islam andalusí y el avance cristiano” (1031-1212) (Polvo, sudor y hierro) Secuencia 1. Almanzor y el final del Califato de Córdoba IMÁGENES: Plano aéreo e interiores de la mezquita de Córdoba TEXTO: A partir de la muerte de Almanzor, la pujanza de los musulmanes se debilitará. El Califato se fragmentará en pequeños reinos de taifas y los reinos cristianos del norte peninsular reorganizarán sus posiciones. La rápida desintegración del Califato de Córdoba culminará el año 1031, cuando los cordobeses proclaman una república islámica asentada en su propia ciudad-estado. A partir de ese momento, ya no habrá un bloque andalusí compacto y otro bloque cristiano dividido, sino que se puede hablar de diversas Españas medievales, con diferentes destinos y en continua transformación. Partida de ajedrez entre musulmán y cristiano Sin embargo, el desenlace de esta larga partida aún tardará en llegar... musulmanes y cristianos continuarán enfrentados de manera intermitente por el poder y el territorio... Fortaleza de Calatañazor Dramatización-infografía del entierro de Almanzor Almanzor, el último gran estadista y guerrero árabe, fue enterrado en los alrededores de Calatañazor. Su gobierno dictatorial puede considerarse como una de las causas que motivaron la guerra civil entre los musulmanes durante los años 1009 y 1031. 1 En aquella época, se produjeron conflictos étnicos y sociales, provocados por el ascenso social, militar y económico de los mercenarios beréberes y de las tropas eslavas. Además, la usurpación del poder califal por parte del hijo primogénito de Almanzor originó graves problemas de legitimidad dinástica. Las constantes disputas entre jefes beréberes, eslavos o árabes, van a favorecer de manera indirecta, el afianzamiento de los reinos y condados cristianos. La crisis y posterior desmembración del Califato se sitúa al final del gobierno de Hisam III, comenzando un período histórico denominado “reinos de taifas”. En menos de dos años, los mulsumanes pasaron de ser árbitros en las disputas con los reinos cristianos, a solicitar su apoyo para resolver sus propias luchas internas. * Secuencia 2. Reinos de Taifas IMÁGENES: Infografía: mapa de la Península con los reinos de taifas TEXTO: El Al-Andalus del siglo XI estaba gobernado por dinastías de triple procedencia: hispano-musulmana, beréber y eslava, lo que supuso que el Islam andalusí llegara a contar con casi treinta unidades autónomas diferentes. Palacio de la Aljafería El Palacio de la Aljafería en Zaragoza -sede del actual Parlamento y Cortes del Gobierno de Aragón- fue el lugar escogido desde donde la familia de los Beni Hud, gobernó la taifa de Zaragoza, una de las muchas en que se dividió Al-Andalus... Junto a la taifa de Zaragoza, la de Badajoz y Toledo conformaron aquella difusa línea fronteriza que separaba a los cristianos de los 2 musulmanes... A su vez, la decadencia política de Córdoba, contribuiría a la prosperidad de otras taifas como Sevilla, Almería, Valencia, Denia, Mallorca, Granada, Málaga o la misma Zaragoza. Rivalidades tribales, familiares o simples intereses coyunturales explican la facilidad con que los distintos reinos musulmanes se separan o se unen en este tiempo, pero continuando sus luchas o pactos con los cristianos. Albarracín Por concesión y no por conquista, la taifa de Albarracín pasó a manos de la familia cristiana de los Azagra, que harán de esta ciudad un señorío independiente de Castilla y Aragón desde 1170 hasta 1285, cuando es conquistada por Pedro III de Aragón. Se trata, sin duda, de una época de debilidad política y militar, pero, paradójicamente, de un cierto esplendor económico y cultural en el mundo musulmán. Algo parecido ocurrirá seis siglos después, en la época de la decadencia del Imperio español y el esplendor cultural del Siglo de Oro. En la “Descripción de España”, por el Anónimo de Almería (siglo XII) se habla de la fertilidad de las tierras en Zaragoza: OFF 2º: entre cosas extraordinarias que allí acontecen, no se echa a perder nada, ni las frutas ni el trigo. He visto trigo de más de cien años, y uvas colgadas desde hacía seis años. Es tal la abundancia de cereales, vinos y frutas, que no hay, en toda la tierra habitada, país más fértil... * Secuencia 3. Los reinos cristianos. IMÁGENES: Infografía: mapa de los reinos cristianos a mediados del siglo XI 3 TEXTO: La descomposición del Califato de Córdoba actuará de incentivo entre los reinos cristianos del norte, que no esperan más para lanzarse a la ofensiva. Repoblación de un pueblo de pizarra. Europa en los siglos oscuros El avance hacia el sur de los reinos cristianos, conquistando los territorios en poder del Islam es lo que se conoce con el nombre de “La Reconquista”. Los nuevos pobladores ya no sólo proceden del norte peninsular, sino que también vienen de más allá de los Pirineos, los llamados francos. A éstos se agregarían grupos de mozárabes originarios de Al-Andalus y de mudéjares musulmanes que se quedaron en las tierras en que vivían, en su mayor parte dedicados a la agricultura. El territorio ocupado durante las campañas de reconquista puso en manos cristianas extensas superficies de tierra, cuyo cultivo ya no podía realizarse de acuerdo a fórmulas jurídicas aplicadas con anterioridad. La combinación de prosperidad económica y debilidad militar sería aprovechada por los reinos y condados cristianos, lo que les permitió recomponer un sistema tributario, por el cual ciertos reinos de taifas pagaban cantidades anuales en oro, a cambio de protección y la promesa de no ser atacados. Capilla de Santa Catalina, Burgos. Entrega de tributos Este sistema, que tanto oro proporcionaría a los cristianos, se denominó régimen de parias o tributos, lo que supuso la conversión de la España cristiana en un centro de prosperidad financiera dentro del marco europeo occidental. A partir de entonces las iniciativas militares iban a pasar a manos cristianas, en su afán de avanzar sobre las tierras ocupadas por el Islam. El Románico, iglesias, abadías, colegiatas y monasterios. Archivo de “Las claves del Románico” 4 El románico es el estilo predominante en la Europa cristiana occidental en los siglos XI, XII y parte del XIII, que llega hasta Polonia, Noruega y Suecia. Se caracteriza por el uso del arco de medio punto y la bóveda de medio cañón. Se deasrrolló al tiempo en que aparecieron las lenguas romances y el sistema feudal dominaba en dicho marco geográfico. Sus formas son cerradas y equilibradas, realizando una síntesis del substrato clásico romano, de las aportaciones bárbaro-germanas y de la espiritualidad cristiana. La estética es rudimentaria pero esencial, tosca y expresiva a la vez... Mudéjar en Sahagún y Tarazona Por otra parte, los musulmanes que se quedaron en las tierras conquistadas por los cristianos recibieron el nombre de mudéjares y a partir de finales del siglo XV, moriscos. Éstos desarrollaron un estilo característico al trabajar como albañiles, decoradores en yeserías y carpinteros en la construcción de iglesias. Este estilo se basó desde el punto de vista de los materiales, en el uso preferente del ladrillo, la cerámica, la madera y el yeso. El arte mudéjar, reflejado en decenas de iglesias, constituye todo un símbolo artístico de esa prosperidad que el oro, proveniente de las taifas, proporcionó a los reinos cristianos. Los mudéjares han dejado una huella importante en el arte, sobre todo en el llamado románico de ladrillo, que a partir del siglo XII se transformará en gótico de ladrillo. * Secuencia 4. El empuje del norte cristiano y la vinculación a Europa IMÁGENES: Paisaje de la meseta norte y Aragón TEXTO: Pero las desavenencias no sólo existían en el bando musulmán... Desde el momento de la invasión árabe, los territorios cristianos se debatieron entre una fragmentación de tipo “cantonalista”, y algunos intentos aglutinadores. 5 ¿Cuánto hubiera durado realmente la Reconquista de haber existido, por parte de los reinos cristianos, un empeño unitario y decidido? Recreación dramatizada de la coronación de Alfonso VII (1135) como emperador En los ambientes más cultos, entre los eclesiásticos y los cortesanos, flotaba aún la idea neovisigótica, entendida como el anuncio de la restauración total de la unidad peninsular. De ahí que, en repetidas ocasiones, algunos de los monarcas se autodenominaran “emperadores” o incluso “rex ibericus”. San Miguel de la Escalada Mientras tanto, las nuevas corrientes culturales penetran por el Camino de Santiago, a través de los monjes cluniacenses. Los monjes de Cluny, fueron los primeros en traspasar la frontera natural de los Pirineos, fundando un primer monasterio en los primeros años del siglo XI. No obstante, fueron los mozárabes los que promovieron el culto al Apóstol, impulsando las primeras peregrinaciones al sepulcro y convirtiendo el Camino, en la vía cristiana más importante de intercambio cultural. San Miguel de la Escalada, a pocos kilómetros de León, es una iglesia mozárabe fundada por el rey Alfonso III el Magno. Se sabe que existió allí un pequeño y arruinado edificio sagrado habitado por un grupo de monjes mozárabes. A lo largo del siglo XI el poder del clero se fortaleció, al tiempo que se volvía al concepto de estado, en su forma neovisigoda: señorial en unos casos y feudal en otros. * 6 Secuencia 5. Del reino de Pamplona al reino de Navarra IMÁGENES: Wescam del Ebro con referencia de los Pirineos y la ciudad de Zaragoza. El río Ebro TEXTO: Por su especial situación estratégica, el área del valle del Ebro fue siempre una zona de constantes enfrentamientos entre Castilla, Navarra y Aragón. Entre los años 1054 y 1076 el reino de Pamplona asistirá a una crisis del poder monárquico, que culminará con el asesinato de Sancho IV, hecho que fue aprovechado por los reyes vecinos -que eran a su vez parientes- para invadir el reino. Nájera fue la capital del reino de Pamplona durante los siglos X y XI. Santa María la Real de Nájera con las tumbas de los reyes de Navarra Los sucesivos reyes del reino de Pamplona, con posterioridad se llamarían de Navarra, no sólo tendrán que participar en las luchas con los otros reinos cristianos para mantener su independencia, sino que además tendrán que combatir por mantener la corona frente a nobles y parientes. Una vez más el interés personal y el ansia de construir de modo rápido un sólido patrimonio familiar, primará sobre la idea de reino e incluso de fidelidad vasallática. En el año 1076 Pamplona deja de existir como reino independiente al quedar unido a Aragón. No volverá a tener la consideración de reino hasta el año 1134, ya como reino de Navarra. Monasterio de la Oliva El Camino de Santiago estrechó los lazos con la Cristiandad Occidental, reportó intercambios económicos, artísticos y culturales, rompiendo el aislamiento de la Península. Sería a través de la ruta jacobea, por donde los monjes de Cluny introdujeron en Hispania el culto y la liturgia romanas que sustituirían al rito mozárabe. 7 La expansión cluniacense, y lo que tras ella vino, comenzó a modificar el aspecto mozárabe-islámico de la Península en su zona cristiana. Cambió el tipo de escritura y el estilo arquitectónico, la literatura acudió a fuentes y formas francesas (teatro religioso, cuaderna vía...). Para Cluny, España se convirtió en una segunda Tierra Santa en donde podía crearse un reino, como el de Jerusalén. También, a través de Navarra la nueva reforma del Císter inició su expansión por Hispania, siendo los monasterios de la Oliva y Fitero, dos de los primeros centros de espriritualidad. Las comunidades cistercienses fueron en España, como en el resto de Europa, importantes células de explotación agraria. Sancho VI el Sabio, se tituló por primera vez rey de Navarra en el año 1162. Antes, entre los años 1076 y 1134, el todavía reino de Pamplona se había anexionado al reino de Aragón. En este período de unidad navarro-aragonesa no sólo progresaron los nobles, sino que también el campesinado mejoró sus condiciones, iniciándose una racionalización del sistema impositivo, con la unificación de las pechas o tributos campesinos. De ahí, que la palabra “pechar” haya pasado a nuestros días en el sentido de pago de un tributo o asunción de una obligación. Crucero y capilla en Roncesvalles. Peregrinos en el Camino de Santiago El Camino de Santiago atrajo nuevos pobladores, conocidos como francos. Éstos lograron un nuevo estatuto legal para sus actividades, y para garantizar su seguridad los monarcas otorgaron fueros en donde se fijaban sus principales derechos, lo que permitió el desarrollo de los núcleos urbanos. El primer texto de este tipo fue el fuero de Jaca, luego se copiaron los fueros de Estella y Pamplona. Por otra parte, el desarrollo urbano trajo la aparición de comunidades judías, que se instalaron como apéndices de los burgos francos. Merece destacarse la figura de Benjamín de Tudela, el judío más conocido durante el siglo XII hispánico. Viajero, escritor, mercader y autor del “Libro de los viajes”. 8 Secuencia 6. El concepto de Reconquista. La pérdida de la Hispania visigótica. El Camino de Santiago IMÁGENES: Reyes asturianos en Tumbo A Pórtico de la Gloria TEXTO: A finales del siglo VIII, el Beato de Liébana menciona por primera vez la teoría de la evangelización de Hispania por el Apóstol Santiago. A principios del siglo IX, se habían identificado unos restos que yacían en un sarcófago como los del Apóstol, cuyo cuerpo -según la tradición- habría sido transportado en un barco desde Jaffa hasta Iria Flavia, actual término de Padrón, en la costa gallega. La construcción de una iglesia para guardar los restos del Apóstol será el origen de Santiago de Compostela. En aquel período histórico, la figura del Apóstol pudo representar para los cristianos una contestación al profeta Mahoma. El Papa Calixto III, en el siglo XII, concedería a Santiago de Compostela los mismos privilegios que se habían otorgado a ciudades como Roma o Jerusalén. * Secuencia 7. La sociedad civil de principios del siglo XI a finales del XIII IMÁGENES: Biblia de San Luis Sociedad civil y guerra OFF: La sociedad medieval occidental se distribuye en torno a una división tripartita piramidal: los que rezan (los oratores), los que la defienden (los guerreros o los bellatores) y los que la sostienen con su trabajo (los laboratores). Entre comienzos del siglo XI y finales del XIII, han de tenerse en cuenta dos etapas. La primera, sería la adquisición de un espacio físico sobre el que se estructura esta nueva sociedad (la Reconquista); y la segunda, correspondería al asentamiento de unos hombres que han de aprovechar este 9 nuevo espacio (la Repoblación). Como consecuencia, aparecerán nuevas normas de convivencia política, basadas en la costumbre y en los principios del Derecho Romano. Pobladores y ciudades Los pobladores de los distintos reinos peninsulares procederán a la explotación de este nuevo territorio en esencia rural, que de forma progresiva se irá señorializando. Sus habitantes, enmarcados en las dos células elementales de la parroquia y el señorío, comenzarán a experimentar la influencia de las nacientes ciudades. Desde estas nuevas ciudades, no sólo llegarán las novedades materiales del comercio y la artesanía, sino también nuevas influencias intelectuales, que a través de sus realizaciones literarias logrará la individualidad de los idiomas peninsulares, lo que producirá una vinculación cada vez más estrecha entre la cultura hispánica y el resto de Europa. Entretanto, los diversos núcleos de resistencia del Islam se conformaban con la mera superviviencia. Nobles, reyes e iglesia Al mismo tiempo, se empezaba a perpetuar el dominio de la minoría nobiliar. El libre y amplio ejercicio de la autoridad por parte de la nobleza, amparada en inmunidades y exenciones, y la fidelidad de sus miembros ligados por lazos de vasallaje al monarca o al conde, oscurecieron en más de una ocasión la noción de reino. La Iglesia verá fortalecida su posición doctrinal, consolidándose su jerarquía a través de la creación de obispados y parroquias. Sería la Iglesia, debido a las circunstancias socio-económicas de la época, quien monopolizó la cultura por ser la única institución capaz de ello. * 10 Secuencia 8. El Cid IMÁGENES: Paisaje castellano y dramatizaciones del Cid Monumento al Cid en Burgos San Pedro de Cardeña Estatua del Cid en Valencia Hornacina en el Alcázar de Segovia TEXTO: Por esta época, la figura del Cid interviene tanto en Castilla como en León, en los condados catalanes y en los reinos de taifas de Zaragoza, Lérida y Valencia, convirtiéndose en un personaje clave para entender la situación política del Levante peninsular y las relaciones fluctuantes entre el mundo islámico y el mundo cristiano. La ayuda que prestó el Cid al rey musulmán de la taifa de Zaragoza, supuso la derrota de los aragoneses en Tamarite. Poco después, este legendario y misterioso personaje, venció e hizo prisionero a Berenguer Ramón II de Barcelona, que había acudido en defensa de su aliado el rey musulmán de Lérida. Los continuos bandazos del Cid, aliado tanto a los reinos de taifas como a los reyes cristianos, no empañaron sus hazañas militares. Nos preguntamos, ¿cómo habría que considerarle? ¿un héroe épico?, ¿un mercenario?, ¿un hombre de frontera? Recreación dramatizada del Cid camino del destierro La obra maestra de la épica castellana de esta época -el “Poema o Cantar de Mío Cid”-, narra la leyenda del Cid Campeador. Se trata del más antiguo cantar de gesta castellano, de todos los que se conservan. El Poema versa sobre el destierro del héroe a tierra musulmana por orden del rey Alfonso VI, y cómo el protagonista consigue restaurar su honra y su relación con el rey. El Cantar termina felizmente, no sólo con la restauración de la honra del héroe, sino con su ensalzamiento definitivo. OFF 2º: El ciego sol se estrella en las duras aristas de las armas 11 llaga de luz los petos y espaldaras y flamea en las puntas de las lanzas. El ciego sol, la sed y la fatiga por la terrible estepa castellana, al destierro con doce de los suyos, -polvo, sudor y hierro- el Cid cabalga... * Secuencia 9. Alfonso VI y el inicio de la hegemonía de Castilla IMÁGENES: Un jinete musulmán (un almorávide) a todo galope OFF 2º: ¡Habitantes de Al-Andalus, espolead vuestros corceles! Detenerse ahora sería vana ilusión. Los vestidos suelen rasgarse por los bordes, pero Hispania empezó a desgarrarse por el centro. Imágenes de Toledo Entrada de Alfonso VI en Toledo Este grito desgarrador, de un poeta musulmán, ante la caída de Toledo conquistada por Alfonso VI en el año 1085-, se corresponde con la importancia histórica que para los dos bandos tuvo el hecho de que la antigua capital del reino visigodo volviera otra vez a manos cristianas. El siglo XI cristiano será también el inicio de la hegemonía castellana, que como tierra fronteriza y con estructuras más democráticas, sustituirá al reino de León, mucho más tradicional, ligado jurídicamente al pasado visigodo y en poder de una aristocracia laica y eclesiástica. Crucifijo de marfil de Fernando I en el Museo Arqueológico de Madrid Fernando I en Tumbo A. 12 Fernando I en el Poema del Mío Cid Estatua de Fernando I en Burgos San Isidoro de León Biblia mozárabe de León La fragmentación de Al-Andalus había coincidido con la nueva unión del condado de Castilla con el reino de León por Fernando I, padre de Alfonso VI, el cual aglutinó una gran fuerza militar y política suficiente para derrotar a los ya divididos reinos de taifas. Este rey -Fernando I- se había casado con una hermana de Bermudo III de León, que a la muerte de éste, hizo valer los derechos sucesorios de su mujer al trono, proclamándose también rey de León y Galicia, siendo ungido como tal en la iglesia de Santa María de León. La Basílica de San Isidoro de León, se levanta en un lugar donde antes se alzaban otras iglesias. La última de ellas fue edificada por Fernando I para albergar las reliquias de San Isidoro de Sevilla. Su interior aún respira aquel ambiente medieval... la penumbra, la solidez de los pilares y las tallas transportan al visitante a un mundo casi olvidado... El reinado de Fernando I significó el comienzo de los esfuerzos castellanos para conseguir la hegemonía peninsular, mediante una política de expansión a costa de Navarra y de las tierras del noroeste peninsular. Sin embargo, cuando la potencia militar y económica del nuevo reino de Castilla y León parecía incontestable, el testamento de Fernando I vino una vez más a fraccionar un territorio que había costado sangre y sudor unirlo. Infografía: mapa en el que se ve reflejado los reinos de Castilla y León bajo Fernando I y el resultado de su testamento con los territorios que recibió cada uno de sus hijos: el primogénito Sancho II, recibe Castilla con las parias de Zaragoza; Alfonso VI será rey de León y las parias de Toledo y Valencia; García recibirá junto con el reino de Galicia, las parias de badajoz y Sevilla; Urraca la ciudad de Zamora y Elvira la ciudad de Toro. Alfonso VI en el poema del Mío Cid Alfonso VI en Tumbo A. Juramento tomado a Alfonso VI en Santa Gadea 13 El hijo primogénito de Fernando I -Sancho II- se puso de inmediato a la reconstrucción del patrimonio paterno, para lo que hubo de enfrentarse a sus propios hermanos, expulsándolos de sus territorios. No obstante, su asesinato ante los muros de Zamora -instigado por su propia hermana, Urraca- dió un vuelco a la situación. Antes de ser coronado rey, Alfonso VI tuvo que jurar en Santa Gadea de Burgos no haber participado en el asesinato de su hermano. Cortes presididas por Alfonso VI Alfonso VI ha sido considerado como un gran rey, no sólo porque conquistara Toledo, sino porque condujo a sus reinos -como ya sucedió con Navarra y Aragón- a la plena integración de Europa, al dar todo tipo de facilidades para la penetración de la reforma de Cluny, llegando incluso a nombrar a un monje cluniacense, como arzobispo de Toledo. Dentro de esta línea está el fomento de la peregrinación a Santiago suprimiendo portazgos y facilitando los trabajos de reconstrucción de puentes del eremita Domingo de Calzada. Los reyes de taifas rindieron su homenaje a Alfonso VI, lo que aprovecharía este monarca para investirse “Señor de las gentes de dos religiones” o “Emperador de toda Hispania”, renovándose así el título imperial que se atribuían los reyes leoneses. Salamanca, Ávila y Segovia Con la toma de Toledo se inició la repoblación de antiguas ciudades como Salamanca, Ávila, Medina, Olmedo o Segovia, a la vez que se afianzó la frontera del Tajo con la conquista de varias plazas. En aquella época, de nada servía una victoria militar si no iba acompañada de una repoblación que asegurara las tierras conquistadas... * 14 Secuencia 10. Los almorávides IMÁGENES: Mauritania, el país de los Almorávides TEXTO: Los almorávides representaron en la historia del Magreb, y en especial de Marruecos, el predominio de una gran confederación de tribus beréberes. Eran pueblos ganaderos que vivían en el Sahara occidental, que debido a su rigor islámico se concentraron en torno a un convento fortaleza al norte del río Senegal. Allí, comenzaron a ser llamados como “los hombres del ribat” o “al-murabit”, o sea almorávides, nombre con el que serían conocidos en lo sucesivo, convirtiéndose en una confraternidad religiosa de monjes guerreros. Estos monjes guerreros, antepasados de los actuales tuaregs, avanzaron por el Sahara y conquistaron Marruecos. Más tarde, esta confederación almorávide formaría el primer imperio marroquí-andalusí, con sede en Marrakech, ciudad fundada en el año 1070. La renovación espiritual y militar de Marruecos no pasó desapercibida al entonces fragmentado Al-Andalus. De pronto, se convirtieron en la ayuda que necesitaban los reinos de taifas para frenar el avance cristiano. En las memorias de Abd Allah, último rey de la dinastía zirí de Granada se lee: OFF 2º: era la época en que el rey cristiano, tras tomar Toledo, se lanzaba sobre toda la Península, y, después de haber dicho que se daba por contento con que le pagáramos tributo, nos trataba con poca benignidad. Lo que quería era apoderarse de nuestras capitales; pero lo mismo que había dominado Toledo por la progresiva debilidad de su soberano, así pretendía hacer con los demás territorios. La batalla de pormenorizada. Sagrajas, cerca de Badajoz. Dramatización Los almorávides y sus aliados peninsulares derrotaron, en el año 1086, a Alfonso VI en Sagrajas, tan sólo un año después de la caída de Toledo. La derrota cristiana fue pavorosa y Alfonso VI tuvo que huir, herido en un muslo por la guardia negra del caudillo árabe Yusuf Ibn Tashufin. Los almuédanos tocaron al día siguiente a oración escalando los muros sobre el montón de cabezas cristianas allí apiladas por orden del jefe almorávide... 15 A pesar de su superioridad militar en el campo de batalla, los almorávides demostraron su incapacidad para dominar las zonas hasta entonces en poder cristiano, ya que estos siguieron con la política de repoblar las tierras abandonadas con la ayuda de mozárabes emigrados de Al-Andalus. Después de la derrota de Sagrajas, hubo un intento secesionista de Galicia, donde el obispo de Compostela, Diego Peláez, era depuesto acusado de estar en tratos con Guillermo el Conquistador para entregarle Galicia. Mapa infográfico con la extensión del imperio almorávide y con el reparto territorial en la Península. En poco más de veinte años, casi todas las taifas peninsulares fueron cayendo bajo el control almorávide. Partida de ajedrez Al-Andalus había pasado a formar parte del imperio almorávide, que tenía su centro político en el noroeste de África. Sin embargo, la situación territorial en la Península no había variado sustancialmente y los reinos cristianos, si bien habían sido frenados en su avance inicial, mantenían en la práctica la totalidad de sus territorios. * Secuencia 11. Aragón de reino a Corona IMÁGENES: Infografía: mapa del reino de Aragón en sus inicios Vista del monasterio de Obarra en la Ribagorza aragonesa. TEXTO: El Alto Aragón de principios del siglo XI pasará, de golpe, de simple condado a territorio gobernado hereditariamente por los monarcas pamploneses. Poco después, se convertirá en reino a partir del año 1035, teniendo como primer soberano a Ramiro I, hijo de Sancho III el Mayor de Navarra, que no sólo reinó en Aragón, sino que anexionó un amplio territorio 16 ubicado en los Pirineos, que incluía a Sobrarbe y Ribagorza. Vista de Jaca, su catedral, sus murallas Castillo de Loarre La falta de alimentos para hacer frente a una sociedad, que crecía muy deprisa, empujó al joven reino aragonés a la conquista de las llanuras y, así, se iniciaron una serie de campañas contra los musulmanes de Huesca y Lérida. La fundación de la ciudad de Jaca, otorgó al reino de Aragón su primera capital y en el monasterio de san Juan de la Peña se estableció el panteón real de la nueva dinastía. San Juan de la Peña Fue precisamente en este lugar, en el año 1071, donde se aceptó de manera oficial el rito romano, dando paso a la europeización del reino. Sólo cinco años después, Sancho Ramírez se convirtió en rey de Pamplona, a causa del asesinato de su primo Sancho IV, el de Peñalén, uniéndose a causa de este suceso, los reinos de Pamplona y Aragón. En el Real Monasterio de San Juan de la Peña, en Jaca (Huesca), se encuentra el Monasterio Bajo o románico, que fue edificado aprovechando una gran cavidad rocosa que se convierte en techo de algunas estancias, entre las cuales está el claustro del siglo XII, en cuyos capiteles se narra la historia de Adán y la vida de Jesús. Castillo de Montearagón. Vista de Monzón y su castillo El rey más importante de este período sería Alfonso I el Batallador, enterrado en un principio en este castillo-abadía de Montearagón; sus restos luego reposaron en San Pedro el Viejo, frente a su hermano y sucesor: Ramiro II. Alfonso I fue un monarca educado para la guerra, que vivía en permanente cruzada. Su carácter misógino hizo que fracasara enseguida su matrimonio con Urraca de Castilla, hija de Alfonso VI. En su avance hacia el sur conquistaría Zaragoza en el año 1118, que se convirtió a partir de entonces en la nueva capital de Aragón, con sede en el palacio de la Aljafería, en donde fijaron los reyes su residencia. Loarre 17 La falta de herederos directos hizo que Alfonso I, en su testamento, dejase su reino a tres órdenes militares: a la orden del Temple, a la del Santo Sepulcro y a la del Hospital de san Juan de Jerusalén, lo que ocasionó el rechazo inmediato de la nobleza aragonesa. Ésta, después de pactar con las tres órdenes, situaron en el trono de Aragón a su hermano Ramiro II, el Monje, mientras que los nobles navarros consiguieron desgajarse proclamando rey de Pamplona a García Ramírez, el Restaurador. En el sur de las estribaciones de la sierra de Loarre, se encuentra el castillo fortaleza más antiguo de España: el castillo románico de Loarre construido en el siglo XI. Ramiro II. Dramatización de la campana de Huesca. Cuadro de la campana de Huesca. A Ramiro II el Monje, de carácter distinto al de su hermano, tuvieron que convencerle para que colgara los hábitos y abandonara su retiro en el monasterio benedictino de Saint-Pons de Thomières donde se encontraba desde hacía 41 años. Sin apenas formación militar y mala salud, en un principio fue bien visto por la nobleza como un rey manejable y sin carácter. Pero, éstos se equivocaron ya que marginó a los nobles y buscó el apoyo de la burguesía de las ciudades. Con el fín de doblegar a los nobles, Ramiro II el Monje convocó a las Cortes generales en la ciudad de Huesca y les expuso la idea de fundir una campana cuyo tañir resonara en todo el reino. Atraídos los nobles a palacio, hizo que verdugos de su entera confianza les fuera cortando la cabeza de un solo tajo según iban entrando. A continuación hizo colgar las quince cabezas del techo de una bóveda como escarmiento a la nobleza. Este acto de fuerza real por la sublevación de la nobleza en contra del rey, en 1136, fue conocido popularmente como la “Campana de Huesca”. Alfonso II. Banderas en Daroca, el primer símbolo de la corona de Aragón. Ramiro II, el Monje, pronto cedió la gobernación de su reino a su yerno Ramón Berenguer IV, retirándose de nuevo a la vida conventual al monasterio de San Pedro el Viejo, donde murió y está enterrado en la capilla de San Bartolomé de este monasterio. 18 La única hija de Ramiro II el Monje, Petronila, fue desposada a los dos años de edad, en 1137, con Ramón Berenguer IV, conde de Barcelona, que a partir de entonces ejerció como Príncipe de Aragón, aunque la boda real no tuvo lugar hasta 1150 en Lérida. Los descendientes del conde de Barcelona, a partir de entonces ostentarían el título real de Aragón, compartiendo los títulos de reyes y condes; el primero les proporcionaba la soberanía plena, mientras que el segundo les situaba al frente de la pirámide feudal catalana, aún dependiente en teoría de la monarquía francesa. Durante el reinado de Alfonso II de Aragón, el Trovador, mal llamado el Casto proseguirá el avance hacia el sur... Daroca, Teruel y el señorío de Albarracín serán desde entonces los defensores de la frontera, organizándose las famosas cabalgadas en tierras islámicas a cargo de hombres de frontera de muy distinta procedencia conocidos por almogávares. La corte de este rey fue un gran centro de cultura trovadoresca, siendo la lengua literaria el provenzal, junto al catalán y el cada vez más castellanizado aragonés. * Secuencia 12. Los condados catalanes IMÁGENES: Sepulcros de Ramón Berenguer I y su esposa Almodís en la catedral de Barcelona, fundadores de la catedral románica, así como los restos románicos de la catedral de Barcelona (ventanas y puertas del claustro). Miniatura del “Liber Feudorum Maior” en la que se representa a Ramón Berenguer I y a su mujer pagando a los condes de Cerdaña la cesión que éstos le habían hecho de sus derechos sobre Carcasona. Archivo de la Corona de Aragón. Imágenes del Pirineo. San Clemente y Santa María en el valle del Boi TEXTO: Es durante el gobierno del conde de Barcelona -Ramón Berenguer I-, se inició una restauración paulatina de los poderes públicos, tan debilitados por la implantación del feudalismo. El enriquecimiento del conde de Barcelona merced a los tributos cobrados a los musulmanes, le van a 19 colocar en la cúspide de la pirámide feudal. Usatges. Biblia de Ripoll y Monasterio de Ripoll. Es durante esta época cuando se gestó un nuevo y verdadero estado feudal, fruto del cual sería la redacción de los primeros Usatges (Usos) de Barcelona, que durante el resto de la Edad Media serían la base de la nueva legislación de Cataluña, que sustituiría a las antiguas leyes visigóticas. Por otra parte, la casa condal de Barcelona llevó a la vez una hábil política matrimonial y de adquisiciones por compra y enfeudaciones (dar un territorio en feudo), que le permitió controlar varios condados, señoríos y vizcondados en el sur de Francia (Occitania), como Carcasona y Razés. El arte románico catalán, gracias a aportaciones externas (lombardas y provenzales), se renovó, transformando los elementos precedentes. El conjunto de monumentos conservados en Cataluña, manifiesta la intensa actividad constructiva durante esta época. Desde finales del siglo XI los bloques de piedra son más grandes y las paredes se levantan con piedras de talla, pulimentadas por artesanos. Así se propagó un estilo inconfundible, que se identificó durante varios siglos con la personalidad del país en que se había desarrollado. Sepulcro de Ramón Berenguer II en la catedral de Gerona. Vista de Hostalric y el macizo de Montseny, lugar del asesinato del conde Ramón Berenguer II. Pero igual que estaba sucediendo en el resto de los territorios peninsulares, los condes de Barcelona no escaparon a las luchas fraticidas entre miembros de una misma familia. Así, durante el gobierno compartido entre los hermanos Berenguer Ramón II y Ramón Berenguer II, el primero conspiró para que asesinaran a su hermano Ramón Berenguer II, conocido como “cap d´estopes”, cabeza de estopa, por su pelo rojizo. Estatua de Ramón Berenguer III en Vía Layetana Vista de Besalú y su conjunto monumental 20 Con el nuevo gobierno del conde Ramón Berenguer III, se inicia el verdadero despegue de lo que más tarde será Cataluña a lo largo de los siglos XII y XIII. El condado de Barcelona será el principal, dentro de una amplia área que tiene a los Pirineos el eje vertebrador. Poco a poco dicho conde irá incorporando a su patrimonio los condados de Besalú, Cerdaña, al tiempo que se restaurará la sede metropolitana de Tarragona. Pinturas de la Sala del Consejo del Comune de Pisa en donde aparecen pintadas las escenas de la expedición a Mallorca y la conquista de la ciudad por pisanos y catalanes obra de Giacomo Fardelli. Miniatura de Ramón Berenguer III y Alfons Jodrá de Tolosa, que aparecen en el “Liber Feudorum Maior”. Archivo de la Corona de Aragón. Barcelona Ramón Berenguer III, aliado con los pisanos, se lanzó a la conquista de Mallorca, que luego no pudo mantenerse. Serían precisamente los pisanos los que llamaron a Ramón Berenguer III: “Princeps y dux catalaunicus”, apareciendo así por primera vez el nombre de Cataluña. Monasterio de Fitero La tupida red de intereses familiares, irá conformando las diferentes casas reinantes. Una hija de Ramón Berenguer III y por tanto hermana de Ramón Berenguer IV, Berenguela, se había casado con Alfonso VII de Castilla y León. Esta relación de hermanos políticos hizo posible el acuerdo sobre el reparto de los territorios conquistados a los musulmanes de AlAndalus, que se plasmó en el Tratado de Tudillén, que incluía la repartición del reino de Navarra entre Aragón y Castilla. Este tratado se firmó en la localidad navarra de Fitero en 1151, entre Alfonso VII, rey de Castilla y León y Ramón Berenguer IV, Príncipe de Aragón y conde de Barcelona. * 21 Secuencia 13. El imperio de Alfonso VII y la creación del reino de Portugal IMÁGENES: Alfonso VII. Mapa con la extensión del territorio gobernado por TEXTO: El ocaso de los almorávides a mediados del siglo XII, permitió a Alfonso VII, nieto de Alfonso VI , rey de Castilla y León, tomar de nuevo la iniciativa militar contra los musulmanes, quien en colaboración con su cuñado Ramón Berenguer IV, conquistará la ciudad de Almería, que durante diez años estaría en poder cristiano. Alfonso VII recuperó la vieja idea imperial de la tradición visgótica. Dentro de este período, hay que encuadrar la coronación de este rey castellano Alfonso VII, como emperador de España, un “rey de reyes”, ya que entre sus vasallos se encontraban los reyes de Navarra, Aragón, Portugal y el conde de Barcelona, además de varios monarcas musulmanes. Pero todas estas ideas imperialistas, chocarán contra los poderes periféricos y, sobre todo, con ese sentido patrimonial endogámico de los propios monarcas o condes, de repartir sus territorios entre sus hijos. * Secuencia 14. La creación del reino de Portugal Imágenes del casco viejo de Oporto. Alfonso I Enríquez. Castillo de Guimaraes. Grabados de la toma de Lisboa por Alfonso I Enríquez Una consecuencia inesperada en esta época es la consolidación de Portugal, como reino independiente. Los matrimonios de las hijas de Alfonso VI, con nobles borgoñones, emparentados a su vez con el abad Hugo de Cluny, permitió que la infanta Teresa casada con Enrique de Borgoña recibiera un territorio situado al sur del río Miño, el condado de Portugal, que tenía como centro vertebrador el Porto Calem, hoy Oporto. 22 Desde el primer momento, surgieron las aspiraciones independentistas que no se lograron consolidar hasta que el hijo de Teresa y Enrique de Borgoña, Alfonso I Enríquez, se proclamó rey de Portugal en 1139, gracias al apoyo de un papado con clara influencia cluniacense, prosiguiendo el avance sobre los territorios musulmanes hasta configurar lo que acabaría siendo Portugal. Castilla no tuvo más remedio que aceptar el hecho consumado de la separación del reino portugés, reconociendo a Alfonso I Enríquez, como soberano de Portugal en 1143, aunque con las obligaciones propias de vasallaje hacia su primo hermano, Alfonso VII. * Secuencia 15. La Iglesia. Las Cruzadas. Las Órdenes Militares IMÁGENES: El Papa Johaness Cruzada por el desierto. Jerusalén TEXTO: Las reformas del papa Gregorio VII intentaron unificar y ordenar a la iglesia, situando al obispo de Roma en la cúspide de la jerarquía políticoreligiosa del mundo cristiano occidental. Desde esta nueva perspectiva, el pontífice emerge como un poder fáctico, a partir del llamamiento a una cruzada en el año 1095, para liberar los Santos Lugares de Palestina. Castillo templario de Ponferrada Iglesia del temple en Segovia Calatrava la vieja En la segunda mitad del siglo XII, a imitación de las órdenes militares del Temple y del Hospital de san Juan de Jerusalén, se fundaron en la Península Ibérica diversas órdenes militares en los territorios cristianos. El occidente cristiano emuló, en cierta manera, el ímpetu religioso, la organización y la mentalidad, que desde sus fortalezas-convento habían propagado los almorávides, desde la segunda mitad del siglo XI. 23 El castillo de Ponferrada de León y la iglesia de la Vera Cruz, pertenecieron a las orden religiosa militar del Temple. Se ha hallado una semejanza entre esta iglesia segoviana y la mezquita de Omar en Jerusalén, confundida por los cruzados como el templo de Salomón. El curso medio del Tajo fue el espacio más vulnerable a los ataques musulmanes, lo que explicará el nacimiento en dicha área de las órdenes militares hispanas a imitación de las del Temple y del Hospital. Así en 1164, se funda la de Calatrava, unos años más tarde la de Alcántara, si bien la más famosa sería la “Congregación de frates de Cáceres” fundada en 1170, que años más tarde se colocaría bajo la advocación de Santiago y recibiría de él su nombre. Las primeras órdenes militares hispánicas estaban formadas por monjes, clérigos y seglares, los cuales hacían vida en común, tenían voto de obediencia y de lucha contra los infieles. * Secuencia 16. La invasión de los almohades. Arte y cultura almohade IMÁGENES: Montañas del Atlas Mezquita almohade de Karauin TEXTO: En el año 1122, un grupo beréber del Atlas había comenzado la rebelión contra los almorávides, extendiéndose en poco tiempo hacia el norte del Magreb. Este grupo rebelde llamado al-mohade, “el monoteista”, que basaba su reforma del dogma islámico en la unicidad de Dios, aprovechó las primeras derrotas sufridas por los almorávides en Al-Andalus, para consolidar sus posiciones, llegando a conquistar Marrakesh y poniendo así fín al Imperio almorávide. Su capital la instalaron los almohades en la ciudad de Tinmallal. Alarcos El ocaso de los almorávides no se produjo de manera exclusiva por 24 factores externos, sino que su implantación en Al-Andalus tuvo un carácter militar y el fanatismo religioso del que hicieron gala contribuyó a desintegrar aún más esta sociedad tan heterogénea. La intransigencia de los almorávides contribuyó a la emigración de numerosos mozárabes y judíos hacia tierras cristianas, provocando el descontento de la población, lo que repercutió de manera negativa en el desarrollo de las letras, las ciencias y la cultura en general. Al-Andalus revivió a mediados del siglo XII, una situación de anarquía, similar a la que disolvió el Califato de Córdoba. En ese momento, estaban surgiendo las segundas taifas, una nueva división del poder con los diferentes reyerzuelos musulmanes luchando entre sí, al tiempo que buscaban de manera alternativa el apoyo de los almorávides, de los cristianos o de los almohades. El gran triunfo almohade sobre los cristianos fue la batalla de Alarcos en el año 1195, en la que fue derrotado Alfonso VIII de Castilla, justo en estas ruinas que hoy constituyen un conjunto arqueológico de indudable valor. Antes, Sevilla se había convertido en la capital de este nuevo imperio, como Granada lo había sido durante el apogeo almorávide; aunque hubo fuertes resistencias a su expansión, como lo demuestra el llamado rey Lobo de Murcia, el cual apoyado por los cristianos logró mantenerse al frente de sus dominios en el Levante hasta su muerte. Sevilla, capital almohade de Al-Andalus: Patio de los Naranjos, Giralda, Torre del Oro, Reales Alcázares El arte almohade tiene su mejor expresión en la ciudad de Sevilla, ciudad que embellecieron con edificios como la Torre del Oro, la Giralda o el Alcázar , hoy Reales Alcázares. La Giralda no es otra cosa que el alminar de la antigua mezquita mayor de Sevilla, edificada en su día en el mismo lugar en donde en se encuentra hoy la catedral. La parte superior de la Giralda y sus balcones adornados de columnas fueron añadidos siglos más tarde, durante el Renacimiento. Desde un punto de vista cultural, el dominio de los almohades supuso el reencuentro con la filosofía y ciencias orientales, al reconocerse la supremacía de Bagdad. La época de dominación almohade puede 25 considerarse en Al-Andalus un período de progreso cultural. Si durante la etapa almorávide merece destacarse la figura de Avempace, filósofo nacido en Zaragoza, que luego viviría en Sevilla y Granada, durante la época almohade serían Averroes y Maimónides las figuras más significativas. Estatuas de Maimónides y Averroes Averroes fue uno de los grandes pensadores que dió Al-Andalus. Médico, filósofo y jurista cordobés, profundizó en la filosofía griega y en el pensamiento de Aristóteles. Sería a través de Averroes por donde llegó la filosofía aristotélica hasta las universidades de Europa. Al final de su vida, algunas de sus teorías filosóficas le llevaron a sufrir las consecuencias del integrismo almohade, por lo que tuvo que abandonar Córdoba, para refugiarse en la localidad de Lucena. Por su parte, Maimónides está considerado como la figura capital del judaísmo en la Edad Media, por su capacidad sintética y su claridad de exposición. Huyó de la persecución almohade y vivió en Fez, Egipto y Palestina. Lo mejor de su obra es la “Guía de descarriados”, escrita en árabe, traducida al hebreo y a diversas lenguas europeas. * Secuencia 17. El paso decisivo IMÁGENES: Recreación dramatizada de caballeros cristianos recorriendo un campo lleno de cadáveres musulmanes. Campo de batalla de las Navas de Tolosa en La Carolina (Jaén). Monumento a la batalla. Reconstrucción pormenorizada de la batalla. La tienda del jefe árabe junto al cuartel de la Guardia Civil. El mito del pastor. Cuadro en Las Huelgas de Burgos Sepulcro de Sancho el Fuerte 26 Pendón de Miramamolín en Burgos TEXTO: Para los cristianos, el avance almohade, como antes la invasión almorávide, supuso una nueva “guerra santa”, a la que respondieron uniéndose frente al enemigo común, Alfonso VIII, Pedro el Católico y Sancho VII el Fuerte. Escarmentados por la derrota de Alarcos y gracias a la labor del arzobispo de Toledo, Rodrigo Jiménez de Rada, se organizó una gran cruzada, bendecida por el Papa, que sirvió para reunificar los ejércitos de Castilla, Aragón y Navarra. En el marco de Sierra Morena, y en un paraje destinado a protagonizar grandes acontecimientos de la Historia, tuvo lugar en el año 1212 la batalla de las Navas de Tolosa. Después de esta derrota, el ejército musulmán quedó prácticamente aniquilado y el poder almohade de la Península entró en su decadencia final. Esta victoria dejaría al reino de Castilla las puertas abiertas del valle de Guadalquivir y la hegemonía militar volvería otra vez al bando cristiano. En la batalla de las Navas hubo un momento de serio riesgo en el que el rey Alfonso VIII temió por la victoria y por su vida; el arzobispo don Rodrigo, que luchaba junto a él, narró luego sus hazañas: OFF 2º: “ señor, si a morir fuere, todos iran con vusco a paraíso... señor, si a Dios plaze esso, corona nos viene de victoria...” Pero al final, el ejército almohade al mando de Yaqub al-Nasir, el Miramamolín de las crónicas cristianas, cayó derrotado. *** 27