LA FAMILIA AGUA ¡Hola! Soy “Pequeña Agua”, pertenezco a la familia Agua. Seguro que nos conocéis aunque no hayamos sido presentados. El mayor de mi familia es “Gran Agua Azul “. Es un poco raro, nunca se sabe cómo va a reaccionar, parece lunático, unos días está tranquilo, apacible y encantador, capaz de abrazarte y jugar, pero en cambio otros, no permite ni que lo toques, se vuelve bravo y ruidoso. En ocasiones, no me gusta ni decirlo, se ha puesto tan fiero que ha destrozado paisajes, casas, pueblos,… y lo peor, han muerto personas. “Gran Agua Azul” no es malo, pero algo inexplicable le hace comportarse así. Hemos de tenerle respeto y no acercarnos si lo vemos agitado. Mi prima “Agua Rápida” siempre va corriendo, parece que tiene mucha prisa por encontrarse con su padre, “Gran Agua Azul”. Su hermana pequeña es “Agua Tonta “, que no se mueve para no asustar a las ranas y otros bichos que juegan en ella. Es perezosa y a veces huele mal. La más alegre de mi familia es “Agua Nueva “. Ella sabe que es importante, ¡cómo llega del cielo…! A veces es fina y delicada, entonces la adoramos, aunque no siempre sea a gusto de todos. Otras veces es enérgica y brava, capaz de provocar desastres, de enfurecer a “Gran Agua Azul” y poner loca a “Agua Rápida”. Cuando se juntan las tres para comparar sus fuerzas, aparecen desastres y mucha gente sufre, casi siempre los más pobres. ¿Os he dicho que “Agua Nueva” es caprichosa? Pues sí, lo es. Hay temporadas en las que se niega a aparecer. Entonces, “Agua Rápida” se seca, los campos no crecen, y los animales no pueden sobrevivir, mucha gente pasa hambre y sufre, como siempre los más pobres. Y ahora me presento yo, soy “Pequeña Agua”. Vivo en los hogares de muchas familias. Gracias a mí beben, se duchas, limpian, lavan, cocinan, cuidan de sus jardines, de sus huertos,… Allá donde yo estoy, la gente vive mejor. Lo que más me gusta hacer es poner nombre. Para ello me hago presente en los bautizos y disfruto dándoles un susto fresquito a muchos pequeños a los que se les pone nombre y a la vez entran a formar parte de una gran familia. Soy muy feliz, pero tengo que confesaros una cosa: vivo amenazada. Hay unos “seres transparentes” que me quieren eliminar. Ellos dejan los grifos abiertos durante mucho rato, llenan la bañero hasta arriba, tiran constantemente de la cisterna, se duermen regando azoteas con las mangueras,… Y, ¿sabéis? Cualquier día desapareceré. Y eso no será bueno para el planeta Tierra. ¡Amigos, por favor! ¡No seáis “seres transparentes”! ¡Ayudadme! Si veis un grifo abierto, cerradlo; en vez de llenar la bañera, ducharos; no tiréis de la cisterna si no es absolutamente necesario; limpiad bien, pero sin derrocharme. Pensad que soy para todos. No acapararme unos cuantos. Decidlo desde las escuelas, en la televisión y en vuestros hogares. Que todo el mundo se entere. Por el bien de todos ¡cuidadme! Soy muy necesaria para la vida ¿Puedo contar con vosotros? ¡Hasta siempre! Firmado: “Tarta de Fresa”