Exigimos el cese del uso de la mentira, la calumnia y la difamación como herramienta política al servicio de oscuros intereses: El Consejo Nacional Federal del Partido Justicialista y los demás partidos políticos y movimientos sociales que formamos parte del Frente para la Victoria apoyamos enfáticamente a nuestra Presidenta de la Nación Dra. Cristina Fernández de Kirchner y a su gobierno, frente a los ataques reiterados de la cual son objeto mediante denuncias sin sustento y falacias reiteradas promovidas por grupos mediáticos concentrados. La persistente estrategia de articulación de mentiras sistemáticas de medios de comunicación opositores (principalmente Clarín y La Nación) trata de crear un marco propicio para pretender enlodar la figura política de nuestra Presidenta, con una finalidad claramente desestabilizadora de las instituciones y procurando desacreditar la función política. El escenario internacional abierto a partir de los hechos acaecidos en Francia (el condenable acto terrorista en perjuicio de los humoristas de Charlie Hebdo), la conjugación de intereses entre servicios de inteligencia desplazados, grupos de jueces y fiscales utilizados con finalidades golpistas, la proximidad del juicio oral por encubrimiento del atentado a la AMIA, les ha hecho creer que están ante una oportunidad para enlodar al gobierno. Lamentablemente, muchos políticos de la oposición sólo se conciben como monocorde corifeo de esas acciones cuando no instrumentos al servicio de ese desprestigio de la labor política. No cabe la menor duda que asistimos a otra muestra de las peores prácticas de servicios de inteligencia con fines extorsivos cuyos móviles es convertir a víctimas en victimarios y generar dudas y sospechas con la inconfesable finalidad de ocultar hechos trágicos que forman parte de nuestra historia reciente. Por supuesto, nada es casualidad. Todo tiene causalidad. La alta aceptación popular de la figura de Cristina, su liderazgo, pero sobre todo las acciones políticas profundamente transformadoras que continuamente ha encarado y su compromiso con los más humildes, que la convierten en adalid de la lucha por la igualdad, han provocado la feroz reacción de los que han perdido o temen perder sus privilegios que no cejan en sus múltiples operaciones en las que siempre se advierte un hilo conductor: información falsa y ataques públicos en donde siempre aparecen los mismos actores. Estos actores son siempre los mismos: a)denunciantes profesionales, cuando no anónimos, b) fiscales y jueces con clara orientación opositora que propician golpismo judicial, c) operaciones de inteligencia en contra del gobierno con información falsa, d) medios de comunicación opositores dispuestos a generar y divulgan falsedades por doquier. Las operaciones mediáticas respecto a cuestiones administrativas irrelevantes de una empresa del grupo familiar, denuncias permanentes sobre las propias declaraciones juradas presentadas por la Presidenta, que además son públicas, a diferencia de otros poderes, artículos periodísticos que aparecen denunciando existencia de cuentas en el exterior, casi siempre en destinos exóticos, que nunca aparecen ni aparecerán por una sencilla razón: no existen. Eso sí, cuando aparecen más de 4000 cuentas no declaradas en Suiza, suministradas oficialmente a través de Francia, y esas cuentas pertenecen a caracterizados personajes del empresariado, de la oposición política o de otras comunidades argentinas, el ocultamiento, la desinformación mediática y la falta de “investigaciones periodísticas” es notable. No les interesa investigar la corrupción, les interesa atacar al gobierno. De la misma manera, cuando buitres amenazan que si no les pagan lo que quieren van a dar a conocer nombres de empresas de Nevada, la Presidenta viene pidiendo la publicación de los nombre y nadie responde nada. Una denuncia carente de sustento respecto a “supuesto encubrimiento” de la causa AMIA, ataques especulativos destinados a propiciar fuga de capitales, falsas profecías respecto a “estallidos potenciales” para generar zozobra en el pueblo argentino contrastan permanentemente con récord de turismo interno, argentinos disfrutando de sus vacaciones, estabilidad cambiaria, fortalecimiento de reservas y estabilidad de precios en el marco de un clima de calma y paz social. No olvidemos la generosa producción de nefastas profecías que se vierten en cascada. Los agoreros de siempre presagiaban un dólar a 20 pesos, estallidos sociales para diciembre, caída de reservas e inflación incontrolable. Nada de esto ha ocurrido. Pero la hostilidad continúa y se redobla. Lamentamos la muerte del fiscal Nisman. Nosotros pedimos que la investigación judicial respecto a la muerte del Fiscal Nisman se esclarezca en forma inmediata a los efectos de determinar fehacientemente la causa de su deceso, porque esto implicará conocer quien presionaba, extorsionaba o ¿dirigía? al mismo. Toda muerte es dolorosa, y máxime en estas circunstancias. Todos nosotros, integrantes de este espacio político defendemos con vehemencia nuestras verdades, con lealtad y firmeza apelando a la palabra como manifestación de nuestras convicciones. Creemos en la libertad de expresión pero no en la manipulación mediática en favor de los intereses de grupos concentrados que persiguen un fin en sí mismo. Creemos en la justicia que dignifica su rol en la búsqueda de la verdad y no en virtud de intereses sectoriales o que actúa por imposición foránea. Hemos sido testigos del esfuerzo de nuestra Presidenta y de su verdadera y profunda preocupación –aún en soledad años atrás- por esclarecer un atentado que tuvo 85 víctimas y un reclamo no correspondido por nuestro Poder Judicial. Rescatamos la transparencia de los actos, dimos apasionadamente el debate abierto en el Congreso para promover la aprobación de un memorándum de entendimiento con Irán precisamente para que el juez de la causa pueda lograr la indagatoria de los imputados a los efectos de que los familiares de las víctimas tengan una reparación judicial. Sabemos de la fuerte la convicción de nuestra Presidenta de la Nación y del canciller para defender la plena vigencia de las alertas rojas pedidas por la justicia argentina, ratificadas por Ronald Noble ex titular de Interpol por carta formal, para desclasificar llamadas telefónicas e identificación de agentes supuestamente involucrados que resultaron ser falsos, para sostener éticamente una postura sin involucrar relaciones comerciales como lo prueban la reducción del intercambio bilateral entre ambos países. Creemos en la búsqueda de la verdad como esencia para la reparación histórica de los hechos. Y porque creemos en todo lo que creemos, pedimos al Poder Judicial que investigue todas las pistas de las verdaderas causas de la muerte de Nisman, para terminar con los “caranchos” y especuladores de la política que pretenden enlodar precisamente la memoria, la verdad y la justicia. No tenemos duda que la mugre que rodea esta causa exige limpieza de métodos y procedimientos, y precisamente exige las actitudes que ha tomado nuestra Presidenta para que definitivamente el pueblo argentino sepa la verdad y no dependamos de agentes de inteligencia que representaron en muchas épocas de nuestra historia lo peor de la política y que hoy son arietes de grupos de poder nacionales e internacionales que en una clara actitud golpista pretenden enlodar un proyecto político al servicio de la mayoría del pueblo argentino.