1ª FICHA TÉCNICA DEL LIBRO: 3ª PERSONAJES: − ACEDO, DIEGO DE:

1ª FICHA TÉCNICA DEL LIBRO: − AUTOR: ELIACER CANSINO. − TÍTULA: EL MISTERIO
VÉLAZQUEZ. − EDITORIAL: BRUÑO. − Nº DE EDICIÓN: 6º. − LUGAR Y FECHA DE EDICIÓN:
MADRID EN MARZO DEL 2003. 2º TEMA: Trata de un niño dejado a su suerte pa que se busque la vida .
3ª PERSONAJES: − ACEDO, DIEGO DE: También llamado el Primo. Ingresó en palacio en 1635. Cuando
le conoció Nicolás, debía de ser ya avanzada su edad y avezado en todas las intrigas de la corte. En su
juventud contó con la protección del Conde Duque de Olivares, a quien salvó de un atentado interponiéndose
entre éste y la bala de su asesino. Dicha protección le hizo poco menos que <<intocable>>. Perteneció al
servicio de la Estampa y Escritorio de Su Majestad, Tuvo fama de enmoradizo, lo que arrojó sobre él alguna
que otra oscura leyenda. − AGUILAR, CONDE DE: Uno de los muchos cazadotes que andaban por palacio,
sin más que hacer que divertirse a costa de los demás. Casó con María Agustina Sarmiento, menina de la
Reina, quien la poco enviudó, al decir de muchos, para gran fortuna suya. − FELIPE IV: Rey de España.
Casó en 1615 con Isabel de Borbón y, tras la muerte de ésta y del príncipe Baltasar Carlos, volvió a contraer
matrimonio con su sobrina, Maríana de Austria, que a la sazón contaba tan sólo quince años. Fruto de esta
unión fue el nacimiento de la infanta Margarita. A pesar de sus buenas intenciones, la historia le colocó en un
momento cuya gravedad excedió a sus fuerzas. Manifestó siempre gran amor por el arte y una predilección sin
límites por su pintor de Cámara, a quien llegó a estimar no sólo como artista, sino también como hombre. −
GUIJUELO, FRANCISCA: Cocinera de palacio y, durante muchos años, aya de Nicolás. La presencia de
esta aya, procedente de las cocinas, es inusual en la corte. Ya de anciana, padeció una rigidez en las
articulaciones que le impedía atender a sus menestres. Nicolás, por aquel entonces hombre influyente, logró
internarla en el Hospital de las Cinco Llagas de Sevilla, evitando así verla abandonada a su suerte como otros
inútiles. Se sabe que solicitó por carta, expresamente par ella, un frasco de mechoacán, una medicina que
había de traerse de las Indias Occidentales y que no era administrada usualmente a los criados. −
MANUELILLO: De los muchos niños que servían en palacio, las noticias de este Maullido nos llegan
através de Pertusato. Su mala fortuna le condujo a morir, con apenas trece años, en tierras de Flandes, por lo
que ninguna otra voz de la historia lo menciona, excepto la del corazón del amigo. − MARIBÁRBOLA: Su
nombre verdadero es Bárbara Asquín. De origen alemán, ya llevaba algunos años sirviendo en palacio antes
de la llegada de Nicolás. Tuvo criada propia y recibió muchas y especiales mercedes de Su Majestad. Algunos
la odiaban y temían por su acerada lengua, su ascendiente sobre la Reina y por el poco aguante con que
soportaba cualquier agravio. Velázquez mantuvo siempre una afectuosa relación con ella y, tratándose de
gusto, decía dejarse aconsejar por Barbárica. Por su mayor edad y prudencia, se arrogó afectuosamente la
tutela de Nicolasillo y, en muchas ocasiones, hubo de mediar su beneficio. Volvió a Alemania en 1700, tras la
orden de Felipe v de desterrar de palacio a los enanos y bufones. Por esta fecha era la única superviviente,
junto con Nicolás, de cuantos aparecen en Las Meninas. Tras su muerte, sólo éste le sobrevivió. − MOISÉS:
Mastín que fue propiedad de Nicolás Pertusato. Llamado así, como se sabe, porque fue salvado de las aguas.
Entre sus dotes poseía la de hallar cualquier objeto escondido por su amo y la de husmear la presencia de un
mentiroso allí donde se hallase. Murió de viejo y fue enterrado en el Jardín de la Priora. − NERVAL: El más
controvertido de los personajes de esta historia. Poseía la extraña peculariedad de no permitir recordar su
rostro, de forma que, quienes lo veían, no lograban después describirlo. Se desconocen los motivos de su
aparición en palacio, así como la causa de su influencia. Cuantos le conocieron parecían detestarle. Por su
habla parece ser de origen italiano. − ORTIZ, ALONSO: Maestro de los criados que esperaban acceder a la
Cámara Conocedor probablemente de Platón, se esforzaba no sólo en enseñar los protocolos de palacio, sino
también en despertar en sus discípulos aquellas cualidades que, aunque ignoradas por ellos, él sabía descubrir
en sus almas. Hizo ver a Nicolasillo la virtud que hay en combinar la memoria con la poesía y le estimuló en
su aprendizaje. Tenía por suyos los logros de sus discípulos e inculó siempre en aquellos que le escucharon
una idea de la nobleza que más taenía que ver con el espíritu que con la hacienda. − PACHECO, JUANA:
Hija de Francisco Pacheco, renombrado pintor y teórico sevillano. Por su condición de hija y esposa de dos
grandes artistas, nunca se valoró suficientemente su verdadera personalidad y su influencia en la obra de
Velázquez. Conocedora del arte de la pintura, al decir a Nicolasillo, poseía tantas dotes como su marido.
Tocaba el laúd como los ángeles y muchos de los libros hallados en la biblioteca de su casa fueron más de su
uso que del pintor, quien se nutría del alimento intelectual previamente digerido por ella. En sus últimos años,
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tras los diversos viajes a Italia de su esposo, debió de perseguirle alguna sombra de amargura, pues los
desvelos de Velázquez por las eternidades del alma y del cuerpo le mantuvieron alejado de la vida familiar. Se
casó a los quince años y acompaño a su marido durante la travesía de su vida. − PAREJA, JUAN: Hijo de
esclavos procedentes de las Indias Occidentales, fue también, a su vez, esclavo de Velázquez. El afecto y la
consideración entre ambos creció tanto que en 1650 obtuvo su carta de libertad en Roma. No obstante,
permaneció siempre al lado del maestro. Estudió en secreto el arte de la pintura y llegó a ser un excelente
artista. Entre sus sueños imposibles siempre estuvo el de recuperar el retrato que Velázquez le hiciera en
Roma. − PERTUSATO, NICOLÁS: Natural de Alessandría de la Palla, en el Milanesado, ingresó en palacio
en 1650. Tuvo en la Reina a su principal veladora. Poseyó siempre una extraña clarividencia que le hacía
prever sucesos del futuro. Cuantos hombrea llegaron a conocerle le describen como <<dotado de una visión
especial>>. Al o largo de su vida se halló en el centro de muchos extraños sucesos. En 1675 fue nombrado
ayuda de Cámara, cargo inusual entre los de su condición, pasando desde entonces a ser llamado don Nicolás.
Vio desaparecer a todos los que aparecieron con él en el cuadro de Las Meninas, y en más de una ocasión se
le oyó decir que tenía prometida vida mientras viviese alguno de los que figuraban en el lienzo. Y, a la postre,
así fue. Al final de sus días, llegó a poseer una importante fortuna que llegó en testamento cerrado, para
sorpresa de muchos, a una joven llamada Paula de Esquivias. Murió en 1710. Dejó ordenado que, tras su
muerte, colocasen en su sepultura este epitafio: Spero in Te. − VELÁZQUEZ, DIEGO: De niño parecía ya
encontrar en los pinceles su mejor juguete. En 1623 fue nombrado pintor del Rey. Sus logros en la pintura no
necesitan ser recordados. En los años en que transcurre esta historia se hallaba inmerso en esa confrontación
con la eternidad que es el cuadro de Las Meninas. En 1656 dio fin a la obra; sin embargo, hasta tres años más
tarde y tras una ardua batalla no logró ver cumplido su sueño de ser nombrado Caballero. Esta diferencia de
tres años entre la creación del cuadro y la obtención del título que le permitía usar el hábito con la Cruz de
Santiago dan crédito a la confesión de Pertusato. Solía comentar que la pintura era sólo un tránsito hacia la
luz. 4º LUGAR O LUGARES DONDE TRANSCURRE LA ACCIÓN: Ocurre en Madrid y Barcelona. 5º
ÉPOCA EN LA QUE SUCEDE Y TIEMPO QUE TRANSCURRE DESDE EL PRINCIPIO AL
FINAL: Entre el siglo XYI y XVII. Dura como 10 años. 6º ARGUMENTO: RESUMEN DEL LIBRO:
Esta historia comienza de que un niño llamado Nicolasillo, le obligan ponerse unos zuecos, par ser más
esbelto. Un caballero rubio, le dijo a su padre que se los quitase, que no pretendían que creciera. Nicolasillo
tuvo que irse a Génova, para embarcarse en un barco inmenso. El hombre rubio le indico su camarote, y le
dejo dos horas dentro de el camarote, hasta que vino un hombre bajito, mayor que yo, que se llamaba Acedo.
Le estuvo contando a Nicolasillo, de que iba a servir a los nobles, duques, reyes o dejados a la suerte en la
calle. El señor Acedo se echo a dormir en la cutre, y luego más tarde se levanto. Pasaron unos cuantos días,
hasta que un día almediodía, en la cubierta del barco se oyeron uno gritos. Acedo y Nicolasillo subieron para
haber que pasaba. Marconí, vendedor de cristales, estaba pegando con la fusta a Jerónimo, su esclavo, por
haber dejado caer su baúl con una bajilla dentro. Acedo pago la bajilla y compro a Jerónimo. Cuando llegaron
a España, fueron a Madrid, le dejaron con Francisca Guijuel, una mujer bondadosa a la que se le había muerto
su único hijo que había tenido, el médico vino haber a Nicolasillo para haber como andaba de salud, le mando
un jarabe, pero Francisca Guijuel se marcho con el médico y trajo a un señor llamado Tommaso, par que le
hablase un poco para que no estuviese triste, pero le llevaron a la cocina. Un día, entró en la cocina el furrier y
con el seis cachorros de mastín. Hizo que le llenaran una hoya con agua, la puso en el fuego y metió en ella a
los seis mastines, puso una tapadera para que no pudiesen escapar, pero uno de ellos consiguió salir.
Nicolasillo lo cogió y se lo pudo quedar, le puso como nombre Moisés, por que Moisés fue salvado se las
aguas al igual que el perro. Don Alonso Ortiz era el maestro de los criados, con el que Su Majestad pretendía
enseñarle a leer y escribir. Conoció a Anita y Manuelillo, con el que pudo jugar. Anita era una niña que estaba
casi todos los días enferma. Manuelilloera un niño rebelde. Se alisto a la orden de su capitán para marchar a
Flandes donde al poco tiempo murió. Al cabo del tiempo Nicolasillo se convirtió en el criado de los Reyes.
Conoció a una mujer llamarada Barbara pero la Llamaban Maribárbola, vivía en España ya hacía un tiempo.
Una noche Nicolasillo se dirigía a su habitación, y sin darse cuenta golpeó con un candelabro a Aguilar.
Maribárbola lo sabía, y le dijo que fuera haber a Diego Velázquez, el aposentador para que le diera consejo.
Nicolasillo fue haber a Velázquez. Junto a el estaba Nerval, consejero del Papa, que estaba haciendo
Velázquez un cuadro a Nerval. Nerval le dijo a Nicolasillo que recitara unos cuantos versos del Infierno .
Cuando lo recitó, le dijo a Velázquez que incluyera en el cuadro a Nicolasillo. Nicolasillo estaba vistiéndose,
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cuando vino Maribárbola con Jerónimo, y le dijo que fueran con ellos. Le llevaron junto Acedo, que no le veía
desde hacía unos años. Acedo le dijo a Nicolasillo que sé hiva a Sevilla junto al Rey, también le dijo que
había recibido noticias de Nicolasillo de que le iba muy bien. A los dos días, el Rey Felipe le hizo llamar. Le
dijo que fuera a vivir con Velázquez a la Casa del Tesoro hasta que terminara el cuadro. Cuando se marcho,
José Nieto, que no era de su simpatía, le hablo de que podía ayudar a los demás criados con las palabras del
Rey. Nicolasillo se quedo callado pero, José Nieto le contó que sabía lo del golpe que le había dado al conde
de Aguilar, entonces Nicolasillo le dijo lo que le había dicho el Rey, y se marcho. Me fui a vivir a la casa de
Velázquez. Allí estaba Juana Pacheco, la mujer de Velázquez, con la que al principio ni hizo muchas migas,
hasta que un día le regaló un retrato que le hizo y un cuadernillo, para tomar apuntes. En la casa de Velázquez,
conoció a Juan Parreja, que era el ex_criado de Velázquez, pero que hacía como si fuera siéndolo, Juan Pareja
era muy gracioso. Nerval le eligió como mensajero. Velázquez le dio un mensaje para Nerval. Fue a la casa de
Nerval y, le enseñó el cuadro que estaba pintando Velázquez, cuando terminó de ver el cuadro le dio el
mensaje, y se dirigió a la casa de Velázquez. Cuando llegó a casa de Velázquez estaban doña Juana
acompañada de Francisca, su ama. Estaban muy nerviosas, porque Velázquez no había salido del Obrador.
Nicolasillo entró, y vio el mismo cuadro que él acababa de ver, pero le faltaban personajes. Al decirle que lo
había visto se puso muy nervioso, le dijo a Nicolasillo que le indicara los personajes que faltaban. Cuando se
lo dijo salieron del Obrador. Al cabo de los años, Su Majestad nombró a Velázquez Caballero de Santiago,
que se marcho a la frontera, para preparar una fiesta. Cuando regreso, Velázquez había cogido muchas
enfermedades, y la gente decía que traía la muerte encima. Hicieron llamar a Nicolasillo por Don Diego. En
una sala estaba don Pedro Chávarri, otro médico, doña Juana, Juan Pareja con Bautista del Mazo, el yerno de
Velázquez. Velázquez quería hablar con Nicolasillo a solas. Le dijo que tenía que pintar la Cruz de Santiago
en el cuadro que estaba pintando para, poder liberar su alma. Juan Pareja vino a que le contara lo que le había
dicho Velázquez. Nicolasillo se lo contó todo lo que le había dicho Velázquez, y le dijo que si le queria
ayudar, él le dijo que sí. Cuando tuvieron oportunidad, fueron al Obrador, cogieron las pinturas, los pinceles y
un pergamino, que contenía la cruz de Santiago y debajo unas letras. Cuando salieron se encontraron con
Maribárbola. Fueron donde estaba el cuadro, hicieron la cruz y se marcharon. Al día siguiente Velázquez
murió. Al mediodía fueron al velatorio, para dar el último a dios a Velázquez. Al cabo de ocho días doña
Juana murió por la misma enfermedad que Velázquez. Don Juan Bautista del Mazo le entrego un papel. En él
estaba dibujado un sol de rostro humano y debajo unas palabras escritas. FIN 7ª OPINIÓN PERSONAL: Me
ha gustado porque me gusta la pintura y la historia. 8ª MENSAJE QUE EN TU OPINIÓN NOS QUIERE
TREANSMITIR: De que no podemos vender nuestra alma por ser el mejor.
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