Movilidad, Intermodalidad y Demanda de Transporte LA A-9 COMO FACTOR DE LOCALIZACIÓN EMPRESARIAL SÍNTESIS DE LAS CONCLUSIONES Universidad de Santiago de Compostela. IDEGA Grupo ENA INDICE 1. 2. Introducción Capital y crecimiento económico en Galicia: los efectos de la A-9 3. La movilidad en el corredor atlántico 4. Demanda de transporte y análisis intermodal 5. Cambios demográficos 1991-1996 6. La A-9 como factor de localización empresarial 7. Conclusiones finales 2 1. 1.1 INTRODUCCIÓN LA AUTOPISTA DEL ATLÁNTICO Es una autopista de peaje de carácter público cuya concesión alcanza desde Fene –en las inmediaciones de Ferrol- hasta Tuy – en la frontera portuguesa- con una longitud aproximada de 206 km., de los que 190,4 se encuentran actualmente en servicio y 15,6 km. en fase de construcción. El Real Decreto 173/2000 de 4 de febrero ha modificado los términos de la concesión, incorporando a la original la construcción y explotación del tramo de autopista de acceso norte a Ferrol por Fene, Neda y Narón, y ampliando el período concesional hasta el año 2048. La A-9 constituye la principal vía de gran capacidad de Galicia y es el eje fundamental de la movilidad intra-regional e Intermetropolitana al unir cinco de los siete núcleos urbanos más importantes de Galicia. Su ámbito de influencia directa alcanza a una población en torno al millón y medio de habitantes, vertebrando el eje de mayor dinamismo y potencial de actividad económica de la Comunidad Autónoma de Galicia. En este corredor se concentra más del 60% de la población, más del 70% del empleo no agrario y en torno al 80% de la renta regional. La inversión total durante el período 1974-1999 se sitúa en torno a los 205.000 millones de pesetas. Esta autopista se prolongará hasta Oporto mediante la Autopista A-3 portuguesa, que enlaza la frontera española con Oporto y Lisboa, y constituye también el eje en el que nacen y finalizan las dos autovías de conexión con la Meseta y con Europa. 3 1.2 EL ESTUDIO Los trabajos del Observatorio Económico de la Autopista A-9 tienen por objeto presentar, por una parte, los efectos económicos directos derivados de su construcción y explotación y, por otra, identificar, analizar y cuantificar los efectos económicos y territoriales más relevantes generados por la autopista en Galicia. La primera fase “Efectos económicos de la Autopista del Atlántico” se concluyó a mediados de 1997. La segunda bajo el título “Movilidad, Intermodalidad y demanda de Transporte. La A-9 como factor de localización empresarial” es la que se presenta en este documento, en el que se sintetizan sus principales conclusiones. El contenido de esta segunda fase se estructura en tres ejes argumentales: a) Enn lalugar movilidad regional y sus efectos económicos. Ena)primer se estudia el impacto generado por la A-9 en la movilidad regional y sus efectos económicos. b) En segundo lugar se describen las características de la oferta y la demanda de transporte existente en el corredor atlántico, así como los cambios demográficos acaecidos en el mismo desde 1991 a 1996. c) Por último se presenta la influencia de la A-9 en la localización de empresas en dicho corredor atlántico. 4 2. CAPITAL Y CRECIMIENTO ECONÓMICO EN GALICIA: LOS EFECTOS DE LA A-9 Una de las características del modelo de crecimiento gallego ha sido su concentración en la Galicia Occidental, integrada por las provincias de A Coruña y Pontevedra. En la actualidad algo más de las tres cuartas partes de la producción regional de bienes y servicios tiene lugar en estas dos provincias. La economía gallega se ha beneficiado en las últimas décadas de una importante expansión de las infraestructuras públicas. La construcción de una moderna red de transporte de alta capacidad por parte de las Administraciones Públicas y las empresas concesionarias representa una sustancial mejora de las comunicaciones, especialmente en el sector litoral, generando efectos muy positivos sobre la productividad y los costes de funcionamiento de las empresas y fomentando la atracción de flujos de inversión privados. Galicia ha visto multiplicarse por siete su stock de capital público desde 1964 a la fecha, representando actualmente las autopistas el 17% del valor de ese stock de capital público. Ello significa por tanto, que la expansión en cantidad y calidad de la dotación de infraestructuras ha sido muy relevante, correspondiendo una parte muy significativa la A-9, cuyos efectos económicos sobre la economía gallega se ponían de manifiesto en la primera parte de este estudio, hecho público el pasado 1997. El resultado de las estimaciones realizadas indicaba que el PIB real medio anual de Galicia, durante el período 1976-1992 fue superior en un 1,5% al que se habría obtenido si la A-9 no hubiera existido, representando ya en 1992 esta vía de transporte el 10% de las infraestructuras básicas públicas en Galicia y un 1,2% del stock de capital total, tanto público como privado, de la economía gallega. Una parte importante de los efectos económicos derivados de la red viaria de una región se producen a través de su influencia en las decisiones de localización de los inversores privados, tanto industriales como de servicios, lo que convierte a la A-9 en un soporte necesario y fundamental para el desarrollo regional. 5 3. LA MOVILIDAD EN EL CORREDOR ATLÁNTICO El análisis de la movilidad en este corredor se sustenta en una encuesta a usuarios realizada en 1996 en la malla formada por la A-9 más las carreteras CN-561, CN-550 y CG-531, que conforman el corredor Fene-A Coruña-Vigo-Tui. Los objetivos de la encuesta fueron: Conocer y cuantificar las características de movilidad de viajeros y mercancías. Diferenciar el comportamiento de la movilidad interurbana, metropolitana e intra-regional. Obtener información sobre la aceptación del peaje y la consideración de los usuarios en relación con las ventajas diferenciales que aporta la autopista. Las principales conclusiones que arroja el análisis de esa encuesta, son: Las relaciones propiamente interurbanas representan casi el 50% de los viajes que se realizan por autopista: los viajes con origen o destino en las ciudades representan el 39,6% del total de viajes por la A-9. El perfil funcional de la A-9, en cuanto a vehículos ligeros, es el de una infraestructura muy especializada en el servicio a la movilidad interciudades y sus relaciones con el espacio regional de influencia de la autopista: esos movimientos representan el 78,3% de los viajes. Destaca el papel en la articulación urbana que está jugando la A-9 en relación con las dos grandes ciudades gallegas, confirmándose su contribución al destaponamiento de obstáculos a las relaciones con las periferias de las ciudades. El 13,5% de los viajes de vehículos ligeros a través de la A-9 son movimientos que relacionan al municipio de A Coruña con su entorno urbano y metropolitano. 6 El 85% de los viajes comerciales que se producen en su ámbito regional de influencia, se realizan por la autopista. Por tanto, también en la movilidad de mercancías se presenta la A-9 como una infraestructura al servicio del espacio regional de influencia y, en particular, canalizando sus relaciones con las cinco ciudades del corredor (35% de los viajes) y de las ciudades entre sí y con sus entornos urbanos (49% de los viajes). Principales ciudades generadoras de movilidad de vehículos ligeros a través de la Autopista del Atlántico: A Coruña genera el 49,5% del total de viajes. Vigo, el 45,8% Santiago y Vigo, en torno al 20% Por lo que respecta a vehículos pesados también es absolutamente mayoritario el peso de las cinco áreas urbanas en cuanto a origen o destino de los viajes, pero con matizaciones propias de la estructura productiva de cada una de ellas. A Coruña genera el 47,3% del total de viajes. Vigo, el 43,6% Santiago, el 17,6% Pontevedra, el 16,7% 7 4. DEMANDA DE TRANSPORTE Y ANÁLISIS INTERMODAL La construcción de una infraestructura de transporte como es la A9, pretende dar respuesta a una necesidad social contribuyendo a mejorar la movilidad al reducir el coste total del transporte. En esta disminución del coste total se integran las que se derivan del menor tiempo de viaje, de menores consumos y desgastes de vehículos y neumáticos, del descenso de riesgos de accidentalidad, de los incrementos de fiabilidad o comodidad y del propio coste del transporte. La demanda de transporte tiene en cuenta los efectos económicos directos e indirectos derivados de la construcción y puesta en marcha de una infraestructura como es la A-9, cuyos efectos económicos fueron determinados en la primera parte del estudio realizado por el OBECAUDE (1997). En síntesis, sus conclusiones eran: a) Efectos de la construcción sobre el valor añadido: entre 1974-1995 (pesetas constantes del último año), se generó un valor añadido de 130.195 millones de pesetas. De cada 100 pesetas invertidas se generaron entre 75 y 83 pesetas de valor añadido. b) Efectos de la inversión sobre la productividad y la renta: La aportación al PIB de Galicia de la construcción y explotación de la A-9 en el período citado fue de 1,2 billones de pesetas. c) Efectos que inciden en el Erario público: Retornos fiscales directos, en torno a los 300.000 millones de pesetas; retornos fiscales inducidos, en torno a los 200.000 millones de pesetas; ahorro presupuestario derivado del hecho de que la autopista no se construyera con cargo a los presupuestos públicos, entre 65.000 y 175.000 millones de pesetas. 8 d) Rentabilidad económica para el usuario, referidos al año 1995: Contempla una cuantificación del tiempo ahorrado respecto al uso alternativo de carreteras tradicionales, diferencias de costes de combustible y conservación del vehículo y ahorros asociados a la seguridad y confort. Los ahorros van desde 555 pesetas por viaje en el trayecto Pontevedra-Vigo, a las 8.675 pesetas en el tramo A Coruña-Vigo. e) Rentabilidad social de la A-9: Bajo el supuesto de comparar la existencia de la A-9 frente a lo que ocurriría en caso de no existir, contempla la rentabilidad generada por la reducción de accidentes, ahorros en tiempo, en costes operativos y los beneficios por el tráfico generado, menos la suma de inversiones los costes de explotación y mantenimiento. En el período se cuantificaron en 658.690 millones de pesetas el beneficio social neto. Las características específicas del sector transporte en relación con la movilidad del corredor atlántico son las siguientes: a) En total del sector representa el 5,12% de la actividad económica total. Dentro de él el subsector carretera representa el 70% frente al 7% del transporte marítimo y aéreo o el 3% del ferrocarril. b) El 59% del transporte de materias primas se realiza por carretera, del cual el 27% se hace por la A-9. c) Del total movimiento de turismos entre las principales ciudades del corredor atlántico, el 35% se efectúa por la A-9 y el 18% por carretera. d) Del conjunto de personas que viajan por el corredor, un 56% lo hace por la A-9, un 26% por carretera, un 9% por ferrocarril y un 9% en autobús. e) Los valores críticos a partir de los cuales es indiferente utilizar la A-9 o la carretera convencional, son, según recorridos, 2.100 pesetas (A CoruñaSantiago), 2.045 pesetas (Santiago-Pontevedra) o 1.360 pesetas (Pontevedra.-Vigo). Si se valora la hora de trabajo en una cantidad superior, compensa el uso de la autopista frente a la carretera. 9 5.4. DEMANDA DEDEMOGRÁFICOS TRANSPORTE Y ANÁLISIS LOS CAMBIOS 1991-1996 En el ámbito de influencia por donde discurre la A-9, el crecimiento demográfico en el período considerado fue mayor, términos porcentuales, que en la totalidad de Galicia y que el conjunto del Estado y consolida al corredor atlántico como la parte demográfica mas dinámica de la comunidad. Territorios: Áreas urbanas: * * * * * * * * Estado : 2,05% Galicia : 0,40% A Coruña : 2,93% Pontevedra : 3,39% A Coruña : Santiago : Pontevedra : Vigo : 3,51% 9,46% 3,80% 3,88% Una contribución fundamental al crecimiento los desempeñan los municipios menores de 30.000 habitantes que forman parte de las cuatro áreas urbanas mencionadas, como Ames, Culleredo, Oleiros o Cambre. Los municipios del entorno de la A-9 son los que seguirán creciendo en un futuro próximo (se estima que 25 de los 28 municipios del corredor crecerán hasta el 2010). 10 6. LA AUTOPISTA COMO FACTOR DE LOCALIZACIÓN EMPRESARIAL Uno de los factores que determina la localización empresarial es la dotación de infraestructuras de transporte. En este capítulo del estudio se analiza el impacto que la A-9 ha tenido en las decisiones de localización de los empresarios que en la última década se han instalado en el área de influencia de la misma, ya que la construcción de sus diversos tramos ha supuesto para la zona la aparición de una externalidad significativa. Para ello se realizó una encuesta entre empresas ubicadas a lo largo de todo el corredor atlántico. De sus resultados se ha constatado: La existencia de buenas comunicaciones por carretera se sitúa en primer lugar en las preferencias y prácticamente todos los sectores encuestados, con especial relevancia en el sector servicios. El uso de la A-9 es relativamente alto por las empresas encuestadas: El 60% de las mismas transporta un porcentaje superior o igual al 25% de sus productos o materias primas por la autopista. Conforme transcurre el tiempo, los empresarios se han percatado de la importancia que tiene esta infraestructura como factor de localización, especialmente la industria y el sector hotelero. La A-9 es valorada especialmente por aquellos empresarios que reciben a través de ella sus materias primas y bienes intermedios. Se observa en la actualidad una mayor correlación positiva entre uso y valoración de la A-9, que en el momento de la creación de las empresas. Utilizan más la A-9 aquellas empresas que tienen a su cargo el transporte de materias primas y son, a su vez, las que más valoran la autopista. 11 La A-9 era inicialmente más valorada en el Norte, luego en el Centro y finalmente en el Sur. Sin embargo en la actualidad su valoración es justamente la contraria, primero en el Sur, luego el Centro y finalmente el Norte, aunque siempre con promedios más elevados. Los sectores que consideran que la autopista les proporciona más beneficios en la actualidad son, por este orden, los grandes grupos empresariales y los hoteles, luego los servicios y, más restringidos, la industria. Es en el Sur donde se está percibiendo de manera más palpable lo beneficioso de la autopista para cualquier tipo de estrategia empresarial no estrictamente local y donde la finalización del trazado de la misma puede tener mayores repercusiones económicas en el tejido empresarial de la zona. 12 7. CONCLUSIONES FINALES En las últimas décadas la economía de Galicia ha registrado una expansión relevante de sus infraestructuras públicas. El stock de capital público se ha visto multiplicado por siete, en pesetas constantes, desde 1994, representando las autopistas a mediados de los noventa el 17% del stock de capital público en infraestructuras de transporte por carretera. La movilidad general de la A-9 era en 1996 de 67.274 viajes diarios (78% de vehículos ligeros), siendo las ciudades en origen o destino del 96% de los mismos. Las relaciones de las ciudades con sus áreas de influencia representan el 48% de los viajes, lo que pone de manifiesto que la autopista está operando como un elemento muy activo de integración territorial y también de relación entre el propio sistema urbano polinuclear del corredor atlántico. Los vehículos que transitan diariamente por la A-9 representan el 38% de total, porcentaje que se eleva al 72% cuando la frecuencia del viaje es, al menos, un día por semana. El 13% de los ocupantes de los vehículos que utilizan la autopista son empresarios o directivos, el 18% profesionales liberales y universitarios empleados por cuenta ajena. El total de los empleados por cuenta ajena alcanza el 30%. La A-9 captaba en 1996 una cuota del 63% de la demanda potencial de usuarios de vehículos ligeros y el 61% de los vehículos comerciales. El uso de los distintos medios de transporte en el corredor atlántico por parte de los usuarios, se reparte así: el 56% de ellos van por autopista, el 26% por carretera, el 9% en tren y el 9% en autobús. 13 El tiempo es la variable más relevante para decidir el modo de transporte. Los valores críticos estimados que hacen indiferente la utilización de la A-9 de la carretera alternativa son: para el tramo A Coruña-Santiago, 2.100 pesetas; para Santiago-Pontevedra, 2.045 pesetas y para Pontevedra-Vigo, 1.350 pesetas. Es decir, si una persona que debe desplazarse por cada uno de esos trayectos valora su hora de trabajo en una cantidad superior a la expresada, le compensa la utilización de la autopista. Esta estimación no considera los valores derivados de la comodidad, la mayor seguridad, menores costes del vehículo, etc. El 27% del transporte de mercancías que utiliza la carretera, lo hace por la A-9. En cuanto a movimientos de vehículos privados por el corredor, las relaciones entre ciudades se realizan en un 35% por la A-9. Proyecciones demográficas recientes corroboran que 25 de los 28 municipios del ámbito de influencia de la A-9 crecerán hasta el año 2010. Las buenas comunicaciones por carretera constituyen el factor de localización empresarial más apreciado, sobre todo por empresas del sector servicios e industriales del Sur de Galicia. En la actualidad los empresarios de todos los sectores económicos han aumentado su valoración de la autopista, especialmente en la industria y hoteles. Los grandes grupos empresariales dan una valoración a la A-9 superior a cualquier otro factor que condicione o afecte a la localización, señalando que la autopista proporciona una amplia gama de ventajas con respecto a otras alternativas de transporte. Las industrias que valoran más positivamente la A-9 como factor de localización son aquellas que realizan por si mismas el transporte de productos finales y las que tienen responsabilidad en el transporte de sus materias primas. 14