ANTROPOLOGIA E INCULTURACION Clodomiro Siller A. CENAMI 1.- ELEMENTOS DE LA CULTURA EN SENTIDO PASTORAL Casi todos los manuales de antropología dedican un capítulo a los elementos de la cultura. Pero no todos los manuales están de acuerdo en cuáles son precisamente esos elementos. Nosotros creemos que es necesario que hagamos -en medio de nuestras reflexiones sobre Santo Domingo- una escapada al campo propio de la antropología, de modo que manejemos en adelante la misma terminología y elementos, lo cual nos facilitará el manejo y comprensión pastoral de los textos que estudiamos. Aquí mencionaremos únicamente los elementos que nos parecen más indispensables, manejables e ineludibles para una pastoral específica con comunidades que tienen culturas diferentes a la del misionero. De este modo, nuestra aproximación deja de ser exclusivamente antropológica para volver nuevamente al campo de la pastoral; pero sin abandonar el necesario fundamento básico antropológico. + EL RASGO CULTURAL.. Los elementos mínimos de una cultura se llaman rasgos . Cuando alguien ve o experimenta uno de estos rasgos con muchísima probabilidad identifica inmediatamente a qué cultura pertenece ese elemento, por ejemplo, la sandalia (que en México llamamos guarache) Es un rasgo particular de determinada cultura. Así las sandalias árabes son distintas de las hindúes, y éstas diferentes de las mixtecas, y las mixtecas distintas de las chinas. El rasgo es un elemento tan propio de la cultura que es muy difícil confundir una sandalia china con un guarache mixteco. Así, en México, en donde distintos grupos indígenas usan guaraches, es relativamente sencillo distinguir el guarache rarámuri del totonaco y del zapoteco de la sierra. Sin embargo, se da el caso de que varias culturas pueden compartir un mismo rasgo. Así mixtecos, huastecos y náhuas llevan el mismo guarache, debido esto, como lo sabemos por otros análisis, que estos tres pueblos tienen una cultura precedente de otra macro-cultura que conocemos como cultura mesoamericana. En códices mayas, mixtecos, náhuas, etc. dioses y humanos aparecen llevando lo que se llamaban cácles o káites y que están al origen de todas las sandalias de los actuales pueblos de gran parte del continente americano. La dinámica de la inculturación va más allá de los rasgos. + EL CONJUNTO CULTURAL, es una serie de rasgos que están íntimamente relacionados entre sí, y frecuentemente se utilizan y operan precisamente como conjuntos. De esta suerte, la sandalia, el sombrero, la faja, la camisa y el calzón, son todos rasgos que constituyen el conjunto del traje de tigre que se usa en esa danza. La tarea de inculturación se preocupa por algo más allá que los conjuntos. + EL COMPLEJO1 CULTURAL es un elemento de la cultura que relaciona intrincadamente y de las maneras más variadas varios rasgos2, conjuntos o ramas, incluso de diversos niveles de la vida de un pueblo. Así, el maíz es un complejo de las culturas mesoamericanas; el trigo es un complejo propio de las culturas mediterráneas; el mijo es un complejo de las originales culturas africanas; el arroz lo es para las culturas asiáticas. El complejo cultural es realmente un elemento complejo; por ejemplo, en la cultura occidental un complejo es el automóvil, otro complejo es la computadora. De nuevo, para las culturas de origen mesoamericano la fiesta es uno de sus principales complejos después del maíz. No obstante la importancia que reviste el complejo como elemento de la cultura, no es todavía el último al que pretende llegar la inculturación. + LA RAMA CULTURAL se refiere a varios conjuntos que tienen una base común. Por ejemplo, la sandalia, el traje masculino, el traje de la mujer, ropa de los niños y niñas, forman la rama de la ropa o el vestido. El jarro, los platos, el comal, las ollas son todos los elementos que constituyen la rama de los utensilios de cocina. Siguiendo con lo que habíamos mencionado antes, el cascabel, la sonaja, la máscara, el penacho, el tambor, la chirimía y otras cosas forman la rama cultural que conocemos como danza. La dinámica de la inculturación es más profunda que el nivel de rama. + EL ESQUEMA CULTURAL consiste en actitudes y modos típicos de actuar que asumen los miembros de una determinada cultura ante ciertos hechos o eventos. Así, por ejemplo, los campesinos son capaces de dejar cualquier empresa con tal de preparar adecuadamente la tierra al llegar la temporada de lluvias 3. Otro ejemplo de esquema es el de algunos pueblos latinoamericanos que para insultar a una persona insultan más bien a la madre de esa persona 4. La inculturación busca llegar más allá que a los esquemas culturales. Los valores-antivalores son realmente fuerzas motoras en las culturas, por ello, mediante la inculturación el Evangelio trata de llegar, con su propia dinámica de la que hablaremos después, hasta ellos. Pero los valores-antivalores no constituyen aún el fin propiamente dicho de la tarea de inculturación. + EL EJE DE LOS VALORES-ANTIVALORES. Son los elementos más activos de la cultura. Sobre ellos se impulsa todo el quehacer y la vivencia cultural. VALOR es todo aquello que un grupo humano espera, quiere, procura, aprecia y gratifica el comportamiento de sus miembros. Conviene tener presente que a todo valor corresponde un antivalor, por eso los valores-antivalores constituyen el eje de los que procede y se desarrolla la cultura y la vida de los grupos y pueblos. Ejemplo de valores entre los indígenas es la hospitalidad, el respeto por los visitantes, el compartir y otros. Los antivalores correspondientes serían el rechazo, la falta de respeto, el egoísmo 5. Los valores y antivalores culturales no son necesariamente los mismos para todas las culturas. Por ejemplo, el machismo, que es un valor para muchas culturas latinas, es más bien un antivalor para muchas otras culturas como las sajonas y nórdicas que valoran también lo feminista 6 . + EL ENFOQUE CULTURAL, llamado también sentido u horizonte cultural, está constituido por aquello que unifica armoniosamente todos los elementos de la cultura. Así, para las culturas indígenas, lo comunitario, la vida, la austeridad, el compartir son todos aspectos del enfoque de sus culturas. Veamos esto de manera práctica. Los rasgos, los conjuntos, los complejos, los esquemas y los valores de muchas culturas están todos articulados e impregnados de este enfoque comunitario, vital y austero. Cualquiera de los elementos que hemos mencionado están atravesados, equilibrados, dinámicamente puestos en acción precisamente dentro de estas características del enfoque que hemos mencionado. Una máscara, p,e., que es un rasgo, podrá tener un uso comunitario; se usará en una danza que radicalmente tiene sentido vital; y estará realizada con elementos más bien austeros. Lo mismo podemos decir de los conjuntos, complejos, esquemas y valores7. Como se ve, dadas las características operativas del sentido o enfoque de las culturas, es realmente hasta el horizonte donde se pretende llegar con la inculturación, ya que, si el sentido de una cultura se reconoce como evangélico o se evangeliza, la dinámica del Mensaje llegará articuladamente a todos los demás niveles de la cultura, que es precisamente lo que pretende el proceso de inculturación del Evangelio. 2.- EL PROCESO DE ENCULTURACION La enculturación es un proceso antropológico. Se realiza al interior de cada cultura. 2 Consiste en que, espontáneamente, mediante procedimientos de aprendizaje, de manera inconsciente, gradual, y con experiencias prácticas y vitales los miembros de cada cultura se van posesionando del sentido que ese grupo humano le da a la vida. Este proceso de enculturación proporciona una especie de personalidad básica que es propia y característica de todos los que pertenecen a ese grupo cultural8. Es importante no confundir la personalidad cultural con la identidad cultural. La principal dinámica de la enculturación es que los sujetos espontáneamente reproducen su cultura vitalizándolos y asegurando la permanencia histórica de ese sentido de vida. 3.- IDENTIDAD CULTURAL La identidad cultural no es un hecho. La identidad es un proceso largo y muy dinámico. Es quizá el proceso cultural más interesante. Para tener la identidad cultural de un grupo humano se requiere: * aceptar el enfoque que los miembros del propio grupo cultural le dan a la vida; * vivir ese enfoque en la experiencia cotidiana; * sentirse efectivamente poseedor de esa cultura y miembro del grupo; * ser aceptado normalmente por los demás como perteneciente del grupo. Si falta uno sólo de estos elementos la identidad está amenazada o en proceso de perderse 9. 4.- RELACIONES INTERCULTURALES Las culturas no son cotos cerrados, enclaves estancos, realidades impenetrables. Todo lo contrario, las culturas están siempre en movimiento, en desarrollo, en situaciones de relación con otras culturas, interactúan unas sobres otras y recíprocamente, incluso globalmente. Las culturas viven: nacen, crecen, se mantienen, maduran, se desarrollan, cambian, se relacionan. Cuando esto no sucede la cultura estancada decae y muere junto con el grupo y sistema social que le dio origen10. Las culturas son procesos vitales que se influencian mutuamente estableciendo entre sí una complicada dinámica de relaciones: a).- proporcionadas o simétricas, que son relaciones por las que los grupos culturalmente son distintos se tratan como iguales; b).- desproporcionadas o asimétricas, que son relaciones por las que los grupos culturalmente diferentes se tratan como desiguales, como de superior o de inferior, como de dominante a dominado, etc. Estas se llaman también relaciones culturales violentas 11. LAS PRINCIPALES RELACIONES QUE SE DAN ENTRE LAS CULTURAS SON: I.DESARROLLO CULTURAL, dinámica interna por la cual la misma cultura expande sus esfuerzos de humanización y los profundiza articulándolos cada vez mejor. II.- CONTACTO CULTURAL que consiste en que, por proximidad de fronteras, o por movilidad y relaciones los distintos enfoques culturales coexisten, conservando cada uno su propia identidad. Esta dinámica produce lo que conocemos como ALTERIDAD CULTURAL, que sólo es posible por el respeto mutuo. III.- INFLUENCIA CULTURAL. Se da el caso de que al estar en contacto dos o más culturas, una de ellas o más ejercen determinada influencia, debido a veces por el adelanto técnico de determinados elementos. Los miembros de las otras culturas empiezan a utilizar esos elementos, pero "dándoles el enfoque de la propia cultura" y no el que de por sí tienen esos elementos en la cultura ajena que se los comunicó. Cuando las diversas culturas que intervienen en el contacto 3 aceptan elementos unas de otras, es decir, dan y reciben, entonces tenemos lo que se conoce como INTERCAMBIO CULTURAL. IV.- DIFUSION CULTURAL. Se da cuando una cultura tiene los elementos fuertes que le dan sentido a aspiraciones latentes y no concretizadas aún en otra cultura; o también cuando una cultura contiene elementos que realizan ya lo que en otra cultura aparecía como FUTURO 12. V.- LA ACULTURACION se da cuando dos culturas se encuentran en una situación en la que una de ellas, etnocéntricamente, se considera superior, produciendo el abandono de elementos propios por la gradual aceptación de los elementos culturales de la cultura etnocentrista que interviene en el proceso. En la aculturación ordinariamente se conserva, en el fondo, el enfoque que la cultura propia le daba a muchos de sus elementos. Pero otros se pierden definitivamente. Así, muchas culturas que son resultado de la aculturación reciben a veces el nombre de culturas MESTIZAS. VI.- EL CHOQUE CULTURAL se da cuando, por diversas razones -económicas, sociales, religiosas, psicológicas e históricas- además del etnocentrismo, una cultura se enfrenta violentamente a otra u otras culturas13. VII. IMPOSICION CULTURAL es aquella relación intercultural mediante la cual una cultura, criticando abiertamente a otra, ridiculizándola, desprestigiándola pretende imponer los propios elementos, sobre todo el enfoque de la cultura propia 14 VIII.- LA DOMINACION CULTURAL consiste en que la cultura que se considera superior, ante la persistencia de las culturas asimétrica, ejerce violencia coercitiva contra las demás culturas, utilizando para ello la economía, las relaciones sociales discriminatorias, la represión y la violencia de todo tipo. IX.- LA RELACION CULTURAL es una dinámica tendiente a recuperar antiguos elementos culturales propios como acción CONSCIENTE Y VIABLE contra la opresión que causa la estructura y la cultura dominantes15. X.- CAMBIO CULTURAL. Todas las culturas cambian. El cambio es una constante cultural. Cuando hablamos de CAMBIO CULTURAL nos referimos a una dinámica cultural interna que lleva a que el enfoque y el sentido de la cultura sean otros. El cambio cultural es un proceso ligado a la historia y que mira hacia formas de humanización superior. Un verdadero cambio social exige también cambios rituales y teológicos puesto que por el cambio la vida adquiere un nuevo enfoque que ofrece nuevos elementos para buscarles trascendencia. En toda cultura hay fuerzas históricas que conducen al cambio, pero la principal es la fuerza histórica de los pobres, los únicos que en todas las circunstancias culturales anhelan definitivamente que el sentido de la vida adquiera un verdadero sentido. 5.- ETNOCENTRISMO Y ETNOCIDIO Un pueblo y las personas pertenecientes a él, para estar sanos, deben mantenerse idénticos a sí mismos, no considerarse, verse o creerse o quererse como otro pueblo. En ese sentido, proteger su identidad y hasta cierto modo "cerrarse" ante las demás identidades culturales, es algo necesario. Pero si la custodia de la propia identidad se exagera, produce el exceso del etnocentrismo, es decir, pensar que la única cultura válida es la propia, y juzgar todo a partir de la propia cultura, sin ninguna otra consideración de ningún género. El etnocentrismo pastoral, ha sido desastroso para la humanidad, y casi siempre ha llevado a la agresión y violencia culturales, cuando no a su aniquilamiento, conocido este hecho como etnocidio. 4 6.- DERECHO A CONSERVAR Y PRESERVAR LAS CULTURAS Como vimos, la fuerza de la identidad cultural y sus mecanismos, cuando no se tiene conciencia de ellos y se les da rienda suelta, pueden producir efectos desastrosos en su relación con otras culturas, especialmente como una de esas culturas posee elementos materiales o ideológicos más fuertes que las culturas con las que entra en contacto -armas, tecnologías, bienes, propaganda, escuelas, medios de comunicación 16. Subrayamos que, ordinariamente, estos efectos son resultado de una acción intercultural inconsciente. Son muy raros en la historia los casos en que el etnocidio o genocidio se realizan de manera consciente 17. Por eso el Papa Juan Pablo II, considerando que los obispos debatirían la evangelización desde el núcleo de las culturas, dirigiéndose a los indígenas que en las últimas décadas han tomado conciencia del valor de sus culturas y del sentido socio-cultural destructivo que ha tenido la presencia de otros pueblos en su continente, toma posición a favor de los pueblos y las culturas agredidas y les dice: "La Iglesia alienta a los indígenas a que conserven y promuevan con legítimo orgullo la cultura de sus pueblos: las sanas tradiciones y costumbres, el idioma y los valores propios. Al defender vuestra identidad, no sólo ejercéis un derecho, sino que cumplís también el deber de transmitir vuestra cultura a las generaciones venideras, enriqueciendo de este modo a toda la sociedad. Esta dimensión cultural, con miras a la evangelización será una de las prioridades de la IV conferencia General del Episcopado Latinoamericano, que se desarrolla en Santo Domingo y que he tenido el gozo de inaugurar como acto preeminente con ocasión del V Centenario" (Discurso a los Indígenas, 4)18. 7.- LA RELIGION Hasta ahora hemos considerado dos aspectos en la vida cotidiana de los grupos humanos, el que se refiere a la estructura social, que se realiza en la dinámica de la vida cotidiana, y el que toca directamente a la estructura social, que es sentido que cada grupo le da a su vida y existencia. Pero hay un tercer aspecto en la vida de los pueblos. Es aquel mediante el cual se busca dar trascendencia a la propia vida, descubriendo en ella el plan de Dios, su presencia y su acción. Esta dimensión de transcendencia es la que conocemos como religión, y es completamente distinta de la dimensión social y de la cultural, pero se refiere siempre a la misma vida social y cultural de los grupos humanos. Estrictamente hablando de religión, es toda una estructura, la estructura religiosa, que cuenta con lenguaje, roles personales, instituciones, simbolismo y re-presentaciones propias de esa experiencia compleja de Dios19. 8.- SOCIEDAD, CULTURA, RELIGION Y REVELACION Según lo que hemos visto hasta aquí, una es la estructura social, otra la estructura y otra la religión. Por su parte la revelación divina se alcanza tanto por la luz de la razón, como por las estructuras de los pueblos, como por el conocimiento de la Biblia; y está más allá y por encima de la religión. Las religiones estructuran, operativizan, institucionalizan y dinamizan de manera práctica la revelación de Dios. Tan es así que la crítica, la renovación y la conversión constante de las iglesias se hace teniendo como criterio último la revelación que ellas portan. 9.- LA INCULTURACION ES UNA DINAMICA DE EVANGELIZACION Y PASTORAL QUE DEBE CONVERTIRSE EN DINAMICA CULTURAL. 5 Es sumamente importante que tengamos en cuenta de manera firme el dato que la inculturación en su esencia no es un proceso meramente antropológico que consistiría en relacionar entre sí las estructuras del Evangelio, la de los agentes evangelizadores y de las iglesias con las culturas de los pueblos a los que se destina la acción misionera. A finales de los años 60, desde su primer planteamiento 20, la inculturación se ha planteado siempre como un proceso eclesiológico. Las iglesias son las que necesitan inculturizarse. Y cuando decimos que la inculturación es un proceso eclesiológico, incluimos en él todo lo que implica. Principalmente la inculturación se refiere a la evangelización -o proclamación del mensaje de salvación-. Pero la inculturación es también un proceso pastoral, referido al acompañamiento con el que se sirve la vida del pueblo. La inculturación afecta todo el ser y el operar de las iglesias, el lenguaje, los símbolos, los ritos, la teología, la espiritualidad, todo. Nuestro problema es saber cómo se realiza todo esto. Visto así, en esta globalidad, se antoja como se trata de una tarea imposible, por ello conviene que desde ahora aclaremos que la inculturación es una dinámica articulada, pausada, lenta, histórica. Quien quiere inculturar el Evangelio y la Iglesia ciertamente que tendrá que ver en determinado momento con los elementos de la cultura puesto que hay que inculturar el Evangelio "en los criterios de juicio, los valores determinantes, los puntos de interés, las líneas de pensamiento" 21. Pero, la inculturación más profunda, la que determinará de hecho el que el Evangelio y la fe queden inculturados, es aquella acción eclesial que pretende llegar a la raíz de la cultura, a "las fuentes inspiradoras y los modelos de vida de la humanidad"22, que antropológicamente hemos definido como el modelo, el sentido o el enfoque que las culturas le dan a la vida de los pueblos. Pero una acción así, por su misma naturaleza, no puede depender siempre de la dinámica eclesial. Una vez que llega al modelo de vida de los pueblos, deja de ser acción religiosa para convertirse en acción cultural propia del pueblo. Es decir, deja de ser acción religiosa para convertirse en acción cultural, puesto que la inculturación llegó a la raíz misma de la cultura, se hacen vivencia cultural, puesto que por la inculturación pasa a ser ya parte del cuerpo de sentidos que se adquieren en la enculturación y que desde allí proporciona temperamento e identidad a los individuos y a los pueblos. El destino de la inculturación es convertirse en enculturación. La inculturación se refiere tanto a la revelación divina, como a las iglesias con todos los elementos propios, institucionales y dinámicos que suponen. 1. AquíÝ complejo no tiene significado psicoló¾gico, como si las culturas se sintieran acomplejadas por algo. Complejo está en su sentido llano y primero que se deriva de "complejidad", la cual resulta de relacionarse con muchos elementos y de diversas maneras. De todos modos, también es posible que las culturas desarrollen complejos en sentido psicoló¾gico-por ejemplo el complejo de "se±ñor" de ser un "hidalgo"; o el complejo de "siervo" o de ser un "hijo de cualquiera", etc. 3. Durante el porfiriato los mayas de Yucatán tenÝían sitiada la ciudad de Mérida y sus habitantes esperaban un desenlace fatal en cualquier momento. Pidieron la intervenci¾ón del Gral. Porfirio DÝíaz para asegurar la sobrevivencia de la ciudad. Díaz respondi¾ó con un llamado a la tranquilidad, asegurándoles que en breve los campesinos romperÝían el sitio. Efectivamente, a los dos dÝías, 21 de marzo, cuando comienza la preparación de la tierra, los mayas se fueron a sus parcelas, abandonando el asedio de la ciudad. 4. Esa parece ser más bien un esquema heredado de los espa±ñoles y portugueses quienes a su vez lo heredaron de la cultura latina de la que son hijos. Los árabes, p.e. acostumbraban insultar a alguien manifestando el deseo de que su "casa" se derrumbe. Los vietnamitas tienen el esquema de posponer todo 6 a la fiesta del TET, los estadounidenses, que conocían este esquema por informaciones de sus antrop¾ólogos, aprovecharon la fecha de unas de estas fiestas para realizar el asalto de Phnom Phen con los resultados desastrosos que nos consigna la historia. 5. Es muy importante no confundir los valores CULTURALES con los valores MORALES. Los valores morales son de otro orden distinto al de los valores. Hay antivalores morales que pueden ser valores culturales. Ejemplo de esto es el 'machismo'. Mientras que el machismo es el enorme pecado ético que contradice la ética cristiana en cuanto a la justicia y la fraternidad; culturalmente es un valor-algo que se procura y se espera- de los miembros varones de las culturas mestizas latinoamericanas y también de muchas indígenas. El machismo, según consta en cró¾nicas de los primeros siglos después del contacto con Europa, no era un valor de las culturas indíÝgenas, pero por estar ligado a la opresión se ha reproducido al interior de las culturas indíÝgenas que se han encontrado en esa situaci¾ón injusta en realci¾ón con los invasores y colonizadores. Ordinariamente, en los textos del magisterio, incluidos los de Sto. Domingo, cuando se habla de valores y antivalores, aunque los califiquen de "culturas", se están refiriendo, a los valores-antivalores morales; salvo algunas pocas excepciones en los que claramente los mencionados son claramente valores culturales. También hay antivalores culturales que pueden resultar ser valores morales. 6. Por razones que no podemos discutir aquÝí, el feminismo en esas culturas es todavÝía una actividad de "reivindicaci¾ón" y no precisamente un valor cultural. Pero el feminismo ha logrado llegar a las estructuras sociales-legislaci¾ón, convivencia, etc.- que terminarán convirtiendo la dimensió¾n participativa de la mujer en un verdadero valor con todo derecho. Conviene recordar que las culturas indíÝgenas, antes de la invasió¾n europea, no eran machistas, de allíÝ que las mujeres desempeñ±aban roles de suma importancia, como en la medicina, en la educació¾n, la literatura, la filosofíÝa y la teologíÝa. En casi todas las religiones de este continente se teníÝa una visió¾n de DIOS como Padre-Madre, como Abuela-Abuelo. Posteriormente, y desgraciadamente, el machismo se reprodujo en el coraz¾ón de las experiencias de los pueblos de acá. 7. Es necesario hacer muchos ejercicios para detectar en dónde está la articulació¾n armoniosa de todos los elementos de las culturas. Al hacerlo encontramos las caracteríÝsticas propias del horizonte y enfoque de los mismas. Muchos pastores no pasan el nivel de los valores-anativalores y aunque perciben dentro de ese mismo eje el horizonte cultural, no se acercan a El operativamente, o si lo hacen, lo hacen cayendo en confusiones en las que se encuentran a veces incluso miembros destacados en el quehacer pastoral y evangelizador. 8. AsÝí es fácil percibir el temperamento o la personalidad básica del alemán, del italiano, del españ±ol o del mexicano. Del mismo modo, es distinta la personalidad básica del tarahumar en México de la del kuna en Panamá y la del mapuche en Chile. Y, al mismo tiempo, dentro de una misma macroestructura, se perciben los elementos comunes en los temperamentos básicos de grupos culturales diferentes pertenecientes a la misma macrocultura. Por ejemplo, aunque el temperamento del tarahumar es distinto del huichol, y éste distinto del náhuatl o totonaco, en todos percibimos un temperamento y personalidad cultural que los identifica como miembros descendientes de la cultura mesoamericana. 9. Conviene tener en cuenta que la "identidad" no la da ni el territorio, ni el tipo humano-mongoloide, caucásico, cobrizo, latinoamericanoide, negroide, - ni lengua, ni las costumbres. La da fundamente el enfoque y el sentido de la vida que tiene el grupo humano al que se pertenece. 10. Hay culturas tan fuertes que son capaces de subsistir de su propia estructura social y se desarrollan vitalmente dentro de otros sistemas sociales ajenos. Ese fue durante muchos siglos el caso de la cultura hebrea. Tito destruy¾ó su sistema social, pero la cultura judía y los judíÝos subsistieron como tales dentro de otros sistemas sociales en todo el mundo. Este el caso también de las culturas de muchos grupos latinoamericanos, emigrados a EE.UU. o que permanecen allí en el territorio del que despojaron a México con la guerra de l847, los cuales conservan su propia cultura e identidad fuera de los sistemas sociales que sustentaban hist¾óricamente sus culturas. En ocasiones -como pasa también allí en los Estados Unidos, o 7 en varios paÝíses latinoamericanos- hay culturas tan fuertes, como la de los indíÝgenas nativos de este continente, que se han constituido como RESERVAS CULTURALES, ALTERNATIVAS HUMANAS, signos de un futuro de la humanidad. 11. Existe una situación de relación intercultural que consiste en que el sujeto de una cultura se traslada dentro del sistema social de otra cultura. Acá, por el momento, no entiende ni puede vivir plenamente el sentido cultural que los miembros de esa sociedad le dan a la vida; pero tampoco, en esta nueva situación, puede vivir su vida de acuerdo al sentido que le dan los miembros del grupo social y cultural al que pertenecía. Su antiguo grupo ya no lo reconoce; el nuevo grupo no lo acepta, lo utiliza. Esta situación, provocada por un grupo social cultural envolvente, en la que los individuos aislados se ven forzados a entrar por presiones de diversos tipos, se llama "anomía cultural". Quienes la viven tienen que soportar una enorme dosis de sufrimiento. Y, si no lo superan, pueden caer en lo que se llama ESQUIZOFRENIA CULTURAL, es decir, vivir un mismo evento a veces con las características de una cultura, a veces con las características de otra. Pastoralmente, los grupos que están en anomía cultural en las periferias de las ciudades o emigrados en otros países requieren de una atención y una entrada preferenciales. 12. Esto es lo que sucedió por ejemplo con las culturas Quetzalcóatlica -en México- y la Wiracóchica -en la región andina-. El cristianismo realiza muchas de sus aspiraciones escatológicas. Estos pueblos aceptaron elementos del cristianismo, pero la globalidad del cristianismo medieval peninsular y la dinámica colonial dentro de la que venían produjo resultados históricos, sociales, culturales y religiosos que siempre los indígenas han juzgado indeseables. 13. Antropológicamente no cabe la menor duda de que las culturas europeas desde el siglo XVI hasta nuestros días chocan con las indígenas de este continente, de Africa y de Asia. Lo que la antropología no tiene documentado aún es el complejo de causas -además de las económicas y de expansión del propio sistema social- que llevaron a esta hecatombe cuyos resultados finales aún no se han alcanzado. Un choque similar había ocurrido con anterioridad entre la cultura dominante del Imperio Otomano y las otras culturas que encontró cuando se expandió en gran parte de Europa, Asia, Cercano Oriente y Africa. En Europa no se tiene el menor empacho en criticar acerbamente la avanzada "turca", pero no se ha hecho lo mismo con la propia expansión europea que comenzó al final del medioevo, cuando decidió que desde una situación periférica se convertía en el centro de todo. 14. No cabe la menor duda de que las culturas peninsulares se impusieron a las indígenas mediante todo lo señalado, lo cual afectó sobre todo a las élites económicas, sociales, políticas, culturales y religiosas de los indígenas; proceso que puede englobarse en la actitud todavía más deletérea de satanizar y considerar las culturas de acá como "engaños del demonio". 15. En este contexto hay que entender la mayoría de los movimientos culturales indígenas actuales. Las reacciones culturales de por sí son POSITIVAS, nos hablan del dinamismo del sujeto histórico, pero no podemos soslayar que en todo el mundo existen algunas reacciones que se han producido con características Etnocentristas y Anacrónicas- si no es que incluso de revanchismo histórico- que violentan también a los propios grupos culturales dentro de los que se dan, y ponen en riesgo el resultado final de estos procesos. Es evidente, como lo demuestra continuamente la historia, que ninguna afectiva reconciliación social o étnica se podrá dar si no se toman medidas que restauren la justicia conculcada. Al respecto recordemos para resarcir la dominación social y cultural que se ejerció a finales de la primera mitad de este siglo contra los japoneses residentes en EE.UU. durante los años de la segunda guerra mundial. 16. Esto es lo que sucedió cuando los europeos vinieron por primera vez a este continente. Como estaban convencidos de la centralidad de su cultura, creían poseer la única verdad, apoyados con el poder de las armas, y controlando la difusión y circulación de las ideas y creencias y con un insaciable apetito por el oro y las riquezas, terminaron por destruir muchas culturas y, consecuentemente, llevar a la extinción a muchos grupos humanos. Recordemos que sólo en México, durante la colonización española, desaparecieron setenta grupos indígenas, conservándose hasta el presente sólo 56, de los cuales, menos de diez sobrepasan el millón de habitantes. 8 17. En la antigüedad son notorios los casos de Nabucudonosor, quien para debilitar la cultura y la religión de los judíos, así como su estructura social, se llevó al exilio de Babilonia a las élites económicas, políticas, culturales y religiosas de los judíos. Otro caso fue el que llevó a cabo en América, en el siglo XVI: se desprestigió a los médicos indígenas calificados de "brujos"; a sus políticos se los etiquetó como personas que vivían en la molicie o como opresores; a sus sacerdotes se les convenció de estar engañados por el demonio; dando todo esto pie a la guerra y a la expoliación de bienes y tierras. La documentación de esto proporcionada por los cronistas de la época es evidente, y el caso consignado en el llamado "Diálogo de los doce" es realmente patético. Otro caso más reciente es el que cometió Adolfo Hitler contra los judíos llevándolos a campos de concentración y exterminio. Esta acción de agresión etnocéntrica contra la cultura germana la continuaron de manera sutil los Estados Unidos y Rusia quienes, para neutralizar el resurgimiento inmediato de los alemanes, llevaron a sus respectivos territorios a los intelectuales e investigadores que habían preparado el status tecnológico y político de Alemania. Lo que actualmente sucede entre serbios, croatas y bosnios es un reflejo de lo que hicieron los turco-otomanos hace siglos y que estaba latente en la conciencia histórica de estos pueblos balcánicos. 18. Estos principios, desde el punto de vista jurídico, anteriormente habían sido sancionados por la Carta Internacional de los Derechos Humanos, firmada precisamente después de la segunda guerra mundial, en la que se afirma que todo pueblo tiene derecho a su religión, a su cultura, a sus instituciones, sus costumbres e idioma propios. 19. De lo que constituye la estructura religiosa y que apenas hemos mencionado, no vamos a hablar en detalle como lo hemos hecho de la estructura cultural. De la cultura era necesario hacer todas las aclaraciones que preceden, dado que ordinariamente la antropología no ha sido incorporada aún como entendimiento de la realidad pastoral, y dado que también que pretendemos entrar en el campo de la inculturación, íntimamente relacionada con la cultura. Pero, como lo religioso ordinariamente está discretamente abordado en las casas de formación o en las dinámicas pastorales que se ofrecen a todos los que participan en procesos de Iglesia, sólo mencionamos el nivel en que se encuentra, para determinar desde qué nivel se realizan las dinámicas de inculturación. 20. En los años 60 se hablaba más bien de adaptación a las culturas, o, como el Concilio, de hacer una evangelización apta. Los que más en contacto estaban con los pueblos de culturas diferentes manejaban mejor el término encarnación. Fue hasta el principio de los 70 cuando el p. Pedro Arrupe, S.J., escribió sus famosas notas sobre "inculturación" que no fueron muy difundidas y que la Compañía de Jesús no puso mucho en práctica debido a que los análisis que se usaban en la pastoral no le daban a la cultura la importancia que le veía el Superior General de la Compañía, quien había tenido una extraordinaria experiencia en Jap¾n de los años 30 y principios de los 40. 21. Cf. Paulo VI, Exhortación apostólica Evangelii nuntiandi, 19. 22. Ibidem. 9