OSTEOPOROSIS La osteoporosis es una disminución de la masa ósea y de su resistencia mecánica, que predispone para las fracturas. Frecuentemente se desarrolla a través de los años sin dar síntomas o provocar malestar. Alrededor de los 35-40 años la masa ósea comienza a decrecer de forma natural. Entre las principales causas de la enfermedad encontramos: -La menopausia, por su acción en la disminución de estrógenos. -Periodos de amenorrea (falta de la regla). -El consumo de cafeína y nicotina que hacen que se pierda mayor cantidad de calcio por la orina. -El consumo de azúcar refinada que elimina el contenido mineral del hueso. -El consumo de alcohol produce también descalcificación. -El abuso de la sal que inhibe la absorción de vitamina D. -El exceso de proteína animal que contribuye a la descalcificación y desequilibra el nivel de estrógenos. -Uso prolongado de algunos medicamentos (corticoides, esteroides, etc.). -Enfermedad tiroidea, artritis reumatoide, problemas intestinales en la absorción. -Una dieta pobre en calcio. -La vida sedentaria. Una buena ingestión de alimentos ricos en calcio nos protegerá y ayudará a retardar o a evitar la aparición de la enfermedad. Los lácteos son los productos que más calcio aportan, pero también lo obtenemos de las legumbres, los cereales, hortalizas verdes, ajos, cebollas (fundamentales y mejor crudas), soja, algas marinas, plátanos, manzanas, cítricos, pescado (sardina, anchoa, etc.) y frutos secos. Junto con el calcio, es importante un aporte de vitamina D, ya que fija el calcio de los alimentos en los huesos y ayuda a que se deposite en músculos y nervios, evitando que se disuelva en la sangre. Es muy conveniente tomar el sol y estar al aire libre tanto como se pueda, así como añadir a los alimentos de la lista anterior otros como los huevos, champiñones, bonito, margarina, etc. Un mineral muy importante es el magnesio, que resulta esencial para mantener las células en buen estado y ayuda en la flexibilidad ósea, el funcionamiento nervioso y la circulación sanguínea. Debería tomarse en proporción de un 50% respecto al calcio. Alimentos ricos en magnesio son los espárragos, la calabaza, las patatas, los guisantes, la lechuga, el melón, las ciruelas, las lentejas, el trigo, la avena, las avellanas y las nueces. También los ácidos grasos omega 3 ayudan en la prevención, ya que aumentan la absorción del calcio e impiden su eliminación a través de la orina. Pescados azules, huevos, mantequilla, aceite de colza, nueces, gambas y mejillones son productos en los que están muy presentes estos ácidos. El ejercicio físico moderado practicado de forma habitual es un gran aliado en la lucha contra este mal ya que los huesos responden ante el ejercicio fortaleciéndose. Salir a caminar a paso rápido (correr es todavía mejor) al aire libre nos aportará múltiples beneficios, no obstante deberemos tener cuidado con los suelos en mal estado por la posibilidad de caídas y malos apoyos que pueden dar lugar a roturas. También sería bueno ejercitarse con pesas ya que se frena la pérdida ósea y aumenta la densidad del hueso. No obstante hay que tener cuidado y hacer siempre este tipo de ejercicio bajo supervisión de un especialista. Por último, la natación es un deporte completísimo y muy recomendable ya que el trabajo en el agua no genera impactos y es un medio relajante. Asimismo se trabaja en simetría todo el cuerpo. Tendremos que intentar tener una técnica adecuada para que no se vuelva contraproducente. Finalmente, existen en el mercado suplementos que podrían ayudarnos, pero siempre bajo supervisión y consejo médico. Los más indicados serían los que nos aportan calcio, vitamina D, magnesio, así como vitamina C, boro y cinc. Con una dieta sana y equilibrada normalmente deberíamos tener aporte suficiente de cualquiera de estas vitaminas y minerales. Cuanto antes empecemos a cuidarnos y a tener en cuenta estos consejos, más posibilidades tenemos de llegar a una edad avanzada en mejores condiciones físicas y teniendo una mejor calidad de vida. El mejor tratamiento contra la osteoporosis es la prevención, así que dejemos los malos hábitos cambiándolos por aquellos que sabemos nos van a ayudar. Recordad que, es nuestra propia voluntad la que nos ayuda a salir adelante y a superar todo lo que nos propongamos. Salud y alegría. Manolo Labiano.