Maldita Prudencia Miércoles, 20 de Abril de 2011 01:00 Al terminar el primer año de gobierno de la Coalición por el Cambio observamos cómo se desinflaron, mediáticamente, estas iniciativas que estaban ligadas a las libertades y autonomías ciudadanas Por Angélica Valderrama, colectivo La Punta de la Lengua Columna escrita para el Observatorio de Género y Equidad Hace unos días el Presidente de la República recibió el premio “Protección a la vida”, otorgado por la Fundación Chile Unido . En sus palabras de agradecimiento habla de los valores trascendentales y de la no discriminación, en una serie de categorías entre las que no podía faltar la “preferencia” 1/4 Maldita Prudencia Miércoles, 20 de Abril de 2011 01:00 sexual. Considerando el discurrir de este primer año de su mandato entendemos que estas palabras significan todo lo contrario de lo que el laicismo, el paradigma de los derechos y la vida democrática de un país, entienden. Recordemos que comenzamos un año con gran fanfarria liberal: con parlamentarios de la coalición presentando proyectos de unión civil luego de una campaña que incluía a una pareja homosexual, nunca antes vista en una campaña política chilena, incluso parlamentarios concertacionistas presentaron un proyecto de matrimonio igualitario, también vimos cómo hace unos meses se anunció la presentación de un proyecto de ley que permitiría el aborto terapéutico. Al terminar el primer año de gobierno de la Coalición por el Cambio observamos cómo se desinflaron, mediáticamente, estas iniciativas que estaban ligadas a las libertades y autonomías ciudadanas, para quedarnos con otras iniciativas del poder ejecutivo como el programa “bodas de oro” que entrega dinero a aquellas parejas casadas que se han mantenido por 50 años juntas, premiando la heterosexualidad que resiste los embates que amenazan a la “familia”, por supuesto se refiere a la familia monolítica, heterocentrada: inexistente. Cuando se escucha al Presidente hablar de no discriminación por “preferencias sexuales” cuesta entender a qué se refiere, ya que en materia legislativa no existe avance alguno para quienes desean tener acceso a derechos civiles que debieran estar disponibles ; pero tampoco existen políticas públicas que denoten avances en materias como la educación sexual. Basta ver cómo el Ministerio de Educación convocó a un panel de expertos entre los cuales; los ámbitos religioso, de salud y psicológico están presentes frente a la ausencia de profesionales de la educación y estudiantes, los primeros interesados. Dicho Panel ha aprobado una serie de programas entre los cuales algunos omiten temáticas relevantes como las opciones sexuales, las opciones de género, la autonomía del cuerpo entre otros. Algunos derechamente los consideran perjudiciales. La teórica Judith Butler, pronta a dictar un par de conferencias en Chile, señala en su ensayo “Violencia, duelo, política que “…en parte, cada uno de nosotros se constituye políticamente en virtud de la vulnerabilidad social de nuestros cuerpos- como lugar de deseo y de vulnerabilidad física, como lugar público de afirmación y de exposición…” 2/4 Maldita Prudencia Miércoles, 20 de Abril de 2011 01:00 Esa vulnerabilidad social de nuestros cuerpos, como lugar público de afirmación y de exposición explica mucho de las resistencias de los gobiernos, de la clase dirigente, de la clase política. Es reconocer que nos constituimos en relación al otro, que mucho de lo que somos, de nuestra singularidad se ha constituido en un ir y venir también con aquellos que reniegan de las fisuras de género, con aquellos que imponen a través de los conductos de la sociedad democrática códigos medievales de sexualidad, aquellos que piensan que existen vidas vivibles y otras no. Si se aprueba una ley de matrimonio igualitario todos cambiamos, si conversamos en los colegios sobre diversidad sexual todos cambiamos, si propiciamos sujetos autónomos y conscientes de sus derechos toda la sociedad cambia. ¿Será que quienes detentan el poder pretenden mantener un país esquizoide, moderno y liberal económicamente, anclado en tiempos lejanos respecto de las libertades civiles, de las sexualidades diversas y de las nuevas disyuntivas éticas? ¿Será que este gobierno olvidará su compromiso con aquellos que por diversas razones deben enfrentar violencias específicas? ¿Será que la “prudencia” se ha convertido en una especia de valor por el cual se retrasa la justicia, se niegan derechos y se mantiene un orden anacrónico? Lamentablemente para algunos, esos cambios no son unilaterales, y la sociedad se transforma quiéranlo o no. Leer más PIÑERA: UN AÑO DE RETROCESOS PARA LAS MUJERES Lesbianas son las más discriminadas Homofobia, homonormatividad, y la nueva forma de gobernar Movilh lanzó nuevo manual sobre diversidad sexual para liceos y colegios 3/4 Maldita Prudencia Miércoles, 20 de Abril de 2011 01:00 Cuba: Espaldarazo al debate a favor de la diversidad Creado el 12 abril 2011 4/4